roberto abad - Libros México

Roberto Abad
orquesta primitiva
Fondo Editorial Tierra Adentro 524
02 Orquesta primitiva finas.indd 5
15/04/15 11:34
Programa Cultural Tierra Adentro
Fondo Editorial
Primera edición, 2015
© Roberto Abad
© Santiago Solís por ilustración de portada
D. R. © 2015, de la presente edición:
Consejo Nacional para la Cultura y las Artes
Dirección General de Publicaciones
Av. Paseo de la Reforma 175, Col. Cuauhtémoc,
CP 06500, México D. F.
ISBN 978-607-8423-87-3
Todos los derechos reservados. Queda prohibida la reproducción parcial o total
de esta obra por cualquier medio o procedimiento, comprendidos la reprografía
y el tratamiento informático, la fotocopia o la grabación, sin la previa
autorización por escrito del Consejo Nacional para la Cultura y las Artes/
Dirección General de Publicaciones
Impreso y hecho en México
02 Orquesta primitiva finas.indd 6
15/04/15 11:34
Programa
13 Presentación
Obertura
17 Ritos humanos
La orquesta pide silencio
21 La orquesta pide silencio
22 Lo impresionante no está allí
23 Orquesta experimental I
24 Orquesta experimental II
25 Orquesta experimental III
26 Modificaciones estéticas
27 Errar es de músicos
28 Vidas anteriores
29 Sinfonías prohibidas
30 Notas salvajes
31 Notas perdidas
32 Las composiciones
33 Tiempos de caza
34 Pobre virtuoso
35 Espejos y ataúdes I
36 Espejos y ataúdes II
37 El secreto de las partes
38 Refugios
39 Concerto grosso
40 Sueños interrumpidos
41 La ejecución perfecta
42 Teoría del vacío
02 Orquesta primitiva finas.indd 7
15/04/15 11:34
43 Invitación
44 El vendedor de talentos
45 La adicción
46 Desafinado y machista
47 Lo que puede ser uno
48 Las melodías I
49 Las melodías II
50 Las melodías III
51 Especie en extinción
52 El oficio de los silencios
53 La desaparición de las orquestas
Intermedio
57 La inmediatez del amor
Los músicos y los instrumentos
61 Programa sujeto a cambios
62 Mago y director de orquesta
63 Muerto director de orquesta
64 El más aplaudido
65 Los solistas I
66 Los solistas II
67 Su destino fue otro
68 Los violinistas
69 El leñador y el verso
70 Castigo antiguo
71 Disfraz de gente normal
72 El despertar de las ratas
73 El tenor
74 El esposo de la soprano
75 El extraño caso del niño trompeta
76 Conjuro
77 La bestia y su casa
78 Herencia
79 Estas palabras
02 Orquesta primitiva finas.indd 8
15/04/15 11:34
80 Chelista precavido
81 Máquina de escribir
82 Pequeño error
83 Mujer de ojos antiguos
84 El escritor
85 Lo que nadie nota
86 La maldición
87 La palabra piedad
88 Sádica metamorfosis
89 Pianista ambicioso
90 Enamoramiento
91 Temporada de ballenas
92 Madre naturaleza
93 Triste allegro
94 Un compositor
95 Guerra inútil
96 El gran Thalberg
97 Cosecha musical
98 Alergia Moncayo
Movimiento final
103 Nada queda
02 Orquesta primitiva finas.indd 9
15/04/15 11:34
Aun antes de que la música empiece se ve ya esa mirada
aburrida en los rostros del público. Una forma educada de
autotortura, el concierto.
Henry Miller
No basta con oír la música; además, hay que verla.
Igor Stravinsky
02 Orquesta primitiva finas.indd 11
15/04/15 11:34
Presentación
Siéntase autónomo y sin prejuicio alguno al leer este
concierto. Tiene usted la libertad de hacer cualquier cosa:
puede lanzar un aplauso a mitad de la sinfonía o un grito
eufórico que retumbe en todas las páginas; disfrutarlo con
los pies recargados en el asiento de adelante y las manos en
la nuca; invitar a su familia y traer a su mascota, que también tiene un espacio reservado; contestar su teléfono en el
momento que lo requiera, dejarlo sonar sin preocupación e
interrumpir a los músicos. Incluso, si su júbilo es incontrolable, puede lanzarles algún artefacto que crea conveniente, con la tranquilidad de que ninguno de ellos guardará
rencor. Eso es lo que puede hacer. Pero se recomienda que
los músicos (y los instrumentos) sean bien tratados. Sin
excepción, aman lo que hacen a pesar de cómo lo hacen.
Y eso, en un verdadero músico, es lo más importante. Por
ello cabe mencionar que cada uno de los cuentos sinfónicos reunidos en esta obra es un homenaje a los grandes
músicos olvidados, los que logran en la cotidianidad que
la música suceda. Por último, y no menos importante, tenga la convicción de que en cualquier momento usted puede
ser quien dirija la orquesta. Esta orquesta de la que pocos
saben. Que viaja sin saber si viene o va, si suena o calla.
Justo ahora no existe la certeza del tipo de cosmos al que irá
a parar. Y sin embargo está aquí, frente a usted, esperando
su destino. Al tanto de que este hecho es muy especial, el
director de orquesta ha prometido no lanzar su batuta afilada al lector que se atreva a ocupar su lugar en el escenario.
Así que despreocúpese, arriesgue y disfrute. ¡Bienvenido!
13
02 Orquesta primitiva finas.indd 13
15/04/15 11:34