Semblanza de una adolescente

ENTRE LA TIERRA Y EL MAR...
SEMBLANZA DE UNA ADOLESCENTE
Yo quisiera ofrecerte en mis palabras, las palabras de una adolescente, mi
reconocimiento, mi canto ilusionado de juventud. San Vicente, su gente, nuestra familia,
ha sido la forja entrañable en la que me he ido formando. Ello ha dejado la huella
indeleble, de los hombres de bien. La huella que marcará nuestra pauta en la vida.
En ocasiones como ésta me gustaría poder acercarme a la poesía, para ofrecerte, en su
canto, la emoción de mi corazón , para recordar aquellas otras palabras, sencillas como
las mías, con las que el abuelo me narraba viejas gestas, heroicos comportamientos, o
simples sucedidos emotivos.
Bañada por el mar Cantábrico, brava como sus aguas que besan la tierra oscura, que
mecen sus sueños, que alientan su discurrir...
Paseo por San Vicente de la Barquera:
-Iglesia de Santa María de los Ángeles: De modelo mixto. Túmulo lapidario con la figura
de el inquisidor Antonio del Corro considerada una de las mas bellas esculturas
funerarias.
-Castillo y muralla: Antiguas fortificaciones de San Vicente. Su privilegiada situación la
ha hecho insuperable ante diversas batidas de los vikingos y normandos. Del castillo sólo
quedan los restos de la fachada norte y oeste, así como las puertas que debían atravesar
los peregrinos que utilizaban la ruta costera.
-Palacio de la familia Corro: Edificio del siglo XVI de gusto renacentista que cuenta con
una sobria decoración plateresca en su bella fachada, en la que también se pueden
contemplar los escudos blasonados que contribuyen a su simetría y equilibrio.
-Torre del preboste: Torreón que flanquea y defiende la puerta de la Barrera. También fue
la antigua cárcel.
-Convento de San Luis: Construido en el siglo XV, en la finca donde se encuentra todavía
hallan las ruinas de aquel viejo convento. De los arranques de la bóveda del templo se
desprende la importancia de este convento que habitó una comunidad de Franciscanos.
-Los puentes: El puente de la maza comenzó a construirse en piedra en el siglo XV,
sobre otro antiguo de madera. Tiene 32 arcos, popularmente conocidos como ojos,
considerado uno de los mas grandes del reino. El puente nuevo data de la época de Carlos
III
-Capilla de la Barquera: Esta situada en la entrada del puerto, lugar en el que cuenta la
leyenda la Virgen apareció en una arca sin remos ni tripulación.
-El Faro: Lugar final de nuestro pequeño paseo por esta pequeña villa.
Un pueblo no puede vivir olvidado de su historia. Pero no quiero referirme a ella
exhaustivamente. Para eso están los historiadores. En este tributo, símbolo de una
juventud que camina unida a su pueblo, a San Vicente, quiero, más bien, hacer honor a
una tierra, a unas gestas se han abierto camino, en un surco de esperanza e ilusión. Y
aquello que parecían quimeras hoy son realidades. Su evolución en el tiempo es buena
prueba de ello.
Los primeros habitantes que ocuparon San Vicente eran de la época prehistórica.
También pasaron por nuestra villa los romanos, que la bautizaron con el nombre de
Evencia, el puerto de Veseiasueca se halla en estas costas.
Alfonso I fue el que animo a la repoblación en esta zona.
En el siglo XIII se inicia la época de mayor esplendor para esta viílla participando por
medio de sus naves y hombres en los primeros viajes que Cristóbal Colon realizo.
Expediciones a Terranova para la pesca del bacalao, pesca en Irlanda y norte de África,
fuertes equipos balleneros dieron a San Vicente un gran esplendor industrial y
comercial.
En el siglo XVI el Rey Carlos I pasa por san Vicente, para las gentes este
acontecimiento fue muy importante.
En los siglos posteriores, incendios, guerras y la peste negra acabo con parte de la
población que no se recupero hasta el siglo XIX.
Se fundo como ayuntamiento legal en 1822, primero formo parte del partido judicial de
Comillas. A partir de 1835 tuvo partido judicial propio.
El día 3 de abril de 1248 el Rey y la Reina de Castilla y Toledo le otorgaron a San
Vicente un “Fuero”.
A parte de dicho Fuero les otorgaron varios territorios de alrededor de la villa, como, La
barquera con todo su termino y todas sus pertenencias, La Arena, que era la Granja de
San Pedro de Cárdena y les entrego también los de Valle y de Serras, que el Rey
compro con todas sus pertenencias. Santa Maria del Tejo los Collados que están frente a
San Vicente. Les dono la iglesia a Miguel, el secretario mas querido por el Rey, Miguel
debía hacerla iglesia y proveerla de clérigos, lámparas, campanas...
Si alguien rompía estas reglas tendría que pagar mil florines de oro.
Los Reyes de Castilla y Toledo escribieron dicha carta en Segovia el tres de abril de la
era de mil doscientos cuarenta y ocho.
Sus costumbres, de hondas raíces, se perciben en fiestas tan peculiares como La Folía,
declarada de interés turístico y en la que la Virgen de la Barquera, patrona de San
Vicente, es sacada al mar, en un recorrido desde el muelle hasta la altura de Comillas,
entre el fervor popular. A este respecto, cuenta la leyenda que fue hallada, en un martes
de pascua florida en una pequeña embarcación sin tripulación , construyéndose, en su
honor y donde yace habitualmente, la capilla de Nuestra Señora de la Barquera en el
siglo XV.
Los habitantes, muy peculiares mi abuelo me narraba historias de distintos personajes
que vivieron en esta villa como la Pisagüitis, que iba vendiendo pescado o cambiándolo
por legumres, patatas etc. Iba con la triguera en la cabeza.
Muchas personas han vivido en esta villa, todas y cada una de ellas han dejado huella en
este pueblo.
Brotes de esperanza y anhelos en la brega diaria...
Añoranza y tradiciones transmitidas de generación en generación, de abuelos a
padres, de padres a hijos...
El azadón y el pico, la frente hecha sudor, la tierruca en el diario despertar...
Y sus gentes sencillas, abiertas, con el enconado espíritu del luchador
infatigable...
Y en este despertar la voz del marinero, que llama a partida las redes, la barca...
Los picos de Europa, al fondo en la lejanía, coronando un paisaje tan hermoso
como sorprendente.
Así es San Vicente de la Barquera.
-BILIC-