Estrategias para la prevención de la violencia en las redes sociales. Eje temático: Cultura de paz y promoción de valores en la sociedad contemporánea RESUMEN El hacer una descripción y división que representen las diferentes manifestaciones de la violencia que se comete dentro de las redes sociales nos abrirán la puerta a la información y conocimiento de lo que podemos hacer para que la gente de hoy en día no sufra de este cáncer social que recorre cada vez más rápido la vida de los niños, adolescentes y adultos. La mención del cyberbullying, el grooming, el sexting, la suplantación de identidad, el flaming, la denigración, constituirán un sentido de conciencia, de deseo de informarse y de alerta para identificar estos complejos y dañinos procesos, contribuyendo a una cultura de prevención y paz, con la finalidad de decir no a la violencia poniendo un alto, lo que conlleva evitar secuelas psicologías importantes y perdurables en el tiempo mermando la calidad de vida de quien lo padece y de todos aquellos que lo rodena, ya que las repercusiones no se aíslan a la víctima simplemente, sino a la sociedad entera. Cabe mencionar que a pesar de que este tipo de agresiones no se dan cara a cara o de forma física, sino que a través de un teléfono móvil o una computadora, no todos los que la sufren sobreviven ya que algunos en casos extremos creen que la única salida o alivio al sufrimiento es la muerte y esta inducida por el suicidio. Palabras clave: Nuevas tecnologías, Prevención, Internet, Violencia INTRODUCCIÓN “Cuando me preguntaron sobre algún arma capaz de contrarrestar el poder de la bomba atómica yo sugerí la mejor de todas: La paz.” Albert Einstein Las formas actuales de comunicación como el internet han acaparado gran parte de la vida de las personas en la actualidad y tienen un rol clave dentro de nuestra sociedad. Se les da gran importancia dentro del proceso de socialización, de ahí que se desata un gran debate entre los pros y los contras con respecto a la utilización de estas herramientas. Los precursores de las redes sociales, a finales del siglo XIX incluyen a Émile Durkheim y a Ferdinand Tönnies. Tönnies argumentó que los grupos sociales pueden existir bien como lazos sociales personales y directos que vinculan a los individuos con aquellos con quienes comparte valores y creencias, o bien como vínculos sociales formales e instrumentales. Durkheim aportó una explicación no individualista al hecho social, argumentando que los fenómenos sociales surgen cuando los individuos que interactúan constituyen una realidad que ya no puede explicarse en términos de los atributos de los actores individuales. (Linton, 2006). Aunque en la actualidad de ha desvirtuado el sentido de estos lazos de interacción convirtiéndose en un círculo de violencia muy frecuentemente. Las redes sociales como Facebook, Twitter, Instagram, etc. se han visto involucrados en situaciones de secuestro, intimidación, acoso, hasta la propiciación del suicidio. A partir de las aportaciones de Hellawell (2001), se reconoce que el utilizar esta tecnología de comunicación puede ayudar a desarrollar nuevas capacidades y mejorar la empleabilidad y la confianza en uno mismo. Aprender a utilizar Internet puede suponer, para los jóvenes, una oportunidad de relación y desarrollo de lazos de amistad. No cabe duda que el Internet ofrece grandes oportunidades para poder acceder a la información audiovisual, a una gran cantidad de fuentes de conocimiento como libros, artículos, revistas, reseñas, etc., al aprendizaje colaborativo, a comunicarse con amigos próximos pero también con personas de otras culturas. El teléfono móvil, permite tener mayor autonomía así como organizar sus relaciones y actividades de manera más ágil, de igual manera hay una gran facilidad para acceder a las redes sociales que son la forma más común de comunicación entre la mayoría de la personas actualmente. Así como también por otro lado hay riesgos por un mal ejercicio de estas como por ejemplo el uso abusivo que practican los niños, adolescentes y adultos, puede ocasionar dependencia a este tipo de comunicación y socialización, lo que conlleva dos tipos de posibles consecuencias como, Trastornos físicos: en esta clasificación se incluye la obesidad, la falta de desarrollo de funciones psicomotrices, trastornos musculoesqueléticos, problemas visuales. En la cuestión de los Trastornos psicológicos, encontramos que el aislamiento, la deficiencia de habilidades sociales, dependencia, son afecciones provocadas por el abuso de este medio. Otro riesgo es el uso delictivo el cual hace referencia a las ocasiones en las que se realiza una actuación penada por la ley. Puede ser algo tan sencillo como calumniar a alguien o atentar contra su privacidad mediante la publicación de un mensaje, una fotografía o un vídeo en una página web, hasta algo más significativo o grave como el ejercicio de la violencia sobre una persona o grupo de personas. Uno de cada seis niños sufre cyberbullying o acoso a través de Internet entre iguales y es una manifestación de violencia dentro de las redes sociales. Según los expertos, falta prevención, el concientizar a los más jóvenes de los problemas derivados de un uso irresponsable de la red es la mejor manera de evitarlos. La violencia que se genera dentro de este medio, nos pone en alerta y nos da un panorama más claro de las situaciones que debemos de prevenir, como ya se mencionaba antes el ciberbullying, es un fenómeno que ha estado aquejando aun número elevados de niños, adolescentes y adultos, así como también el grooming, sexting, flaming, ciberstalking, denigración, y se debe actuar para prevenir. CONTENIDO Las tecnologías hoy en día son muy atractivas para todas las edades, sobre todo con los adolescentes, se ha observado que el 75.6 % de los cibernautas mexicanos son menores de 35 años, lo que significa que los jóvenes son quienes están usando más la tecnología. Se encontrado que la proporción de los adolescentes entre 12 y 17 años lo usan en un 24%, de niños y niñas entre 6-11 años que navegan en la red es de 11.5%, mostrando cada vez mayor presencia en el total de usuarios de internet (INEGI, 2013). Para poder proponer estrategias para la prevención de la violencia dentro de las redes sociales, es necesario conocer de qué manera se hace presente en estos medios de comunicación, la gravedad que pueden llegar a tener en cuanto a las consecuencias que deja a su paso y a partir ahí proponer soluciones. La violencia dentro de las redes sociales es un problema real de actualidad y con un serio potencial para generar secuelas en la calidad de vida de los involucrados, sea cual sea el papel personificado. Se considera necesario explorar los diversos factores involucrados en este fenómeno que pone en riesgo la integridad física y emocional de los actores, sobre todo, identificar aquéllos que son más críticos en el origen de la problemática. Es fundamental que los educadores, los padres de familia, las autoridades escolares y los propios adolescentes, en conjunto, aprendan a prevenir este problema, lo cual será posible solo a través de la información. Estudios recientes han encontrado diferencias en la prevalencias, marcadas por el género, los niños varones victimizan más que las niñas y utilizan más agresión física y verbal, mientras que las niñas usan agresión indirecta relacional, esparciendo rumores o realizando exclusión social (Olweus, 1993). Dentro de la violencia en las redes sociales nos encontramos que hay diferentes manifestaciones de esta como: el cyberbullying, el flaming o flam war, el sexting, el grooming, el ciberstalking, la denigración, la suplantación de identidad, es necesario conocer e informarse acerca de esta división de la violencia, ya que es indispensable para prevenirla. El cyberbullying es ese proceso de desprestigio que últimamente se ha agregado, se realiza bajo anonimato por internet, usando blogs, correo electrónico, chat y teléfonos celulares, enviando mensajes intimidatorios o insultantes (Trautmann, 2008). La popularidad de internet y otras tecnologías, sobre todo las de comunicación, dentro de las aulas han provocado que una nueva forma de agresión y amenaza haya surgido entre los niños, adolescentes y adultos: el cyberbullying (Mason, 2008). El uso de los aparatos electrónicos para amenazar a otros estudiantes ha llegado a ser cada día más un serio problema en las escuelas y existe un significativo número de jóvenes que ya han sufrido este nuevo tipo de acoso (Li, 2006). El acoso digital surge por el rápido avance de las nuevas tecnologías de la comunicación como internet, telefonía móvil, videojuegos, PDA, etc. Según Willard (2004: 1), el cyberbullying puede ser definido, en pocas palabras, como “el envío y acción de publicar “sending” y “posting”– de textos o imágenes dañinas o crueles en internet u otros medios digitales de comunicación”. Manson (2008) añade que la violencia la puede realizar un individuo o un grupo de modo deliberado y repetitivo. Según esta autora, en el fondo el cyberbullying es un modo disimulado de acoso verbal y escrito. Los acosadores hostigan a sus víctimas a través de dos medios a través de la computadora y el teléfono móvil–. A través de la computadora, el afectado recibe mensajes acosadores en el e-mail, en el instant messaging. Le publican post obscenos, insultos en chats. Incluso el acosador/es pueden crear blogs o websites para promover contenidos difamatorios. El flaming o flam war, consiste en un mensaje deliberadamente hostil o insultante enviado sin ningún propósito constructivo; en consecuencia, flaming es el acto de publicar generalmente en el contexto social de un foro o una lista de correo electrónico, comentarios obscenos. A veces se publican como respuesta a un cebo, un mensaje provocativo, pensado especialmente para generar respuestas insultantes. Busca provocar intencionadamente a los usuarios o lectores, creando controversia, provocar reacciones predecibles, especialmente por parte de usuarios novatos, con fines diversos, desde el simple divertimento hasta interrumpir o desviar los temas de las discusiones, o bien provocar enfadando a sus participantes y enfrentándolos entre sí. Otra forma común de riesgo para los usuarios de internet con especial énfasis en los activos en las redes sociales es el Grooming, que es una manera sencilla que utiliza un adulto para ganar la confianza del adolescente a través de la Internet con el fin de obtener lazos de índole sexual, mediante imágenes eróticas o pornográficas, que puede llevarlos al acoso sexual en la red. Este va desde un acercamiento lleno de empatía y/o engaños el cual pasa a ser un chantaje, con imágenes comprometidas del adolescente. Se ha encontrado que en casos extremos, el acercamiento con un encuentro en persona. Los adolescentes que viven este tipo de experiencia los llevan a presentar daños psicológicos graves. El grooming es un proceso que comúnmente puede durar semanas o incluso meses, variando el tiempo según la víctima y que suele pasar por las siguientes fases, de manera más o menos rápida según diversas circunstancias: 1. El adulto procede a elaborar lazos emocionales proponiendo una falsa amistad con el menor. En algunos casos, a través de internet pueden simular ser otro niño o niñas. 2. El adulto va obteniendo datos personales y de contacto del menor. 3. Utilizando tácticas como la seducción, la provocación, el envío de imágenes de contenido pornográfico, consigue finalmente que el menor se desnude o realice actos de naturaleza sexual. 4. Entonces se inicia el acoso, chantajeando a la víctima para obtener cada vez más material pornográfico o tener un encuentro físico con el menor para abusar sexualmente de él. Con ello hay una gran posibilidad de que las victimas caigan en la prostitución o pornografía. El sexting es otro tipo de violencia de índole sexual dentro de las redes sociales. Este es una contracción entre sex y texting y es un término que se refiere al envío de contenidos eróticos o pornográficos por medio de teléfonos móviles. Este inicia al hacer referencia al envío mensajes de texto de naturaleza sexual, los cuales son difundidos entre ciertos grupos. El sexting ha sido un aspecto colateral a los avances tecnológicos en comunicación que facilitan nuevas formas de interacción social. Previsiblemente, a lo largo de la historia de los sistemas de comunicación, siempre se han intercambiado mensajes con contenido sexual. No obstante, las Nuevas Tecnologías de la Información y la Comunicación (NTIC) permiten la comunicación mediante imágenes y vídeos, los cuales son más explícitos y tienen un mayor impacto. El peligro del sexting es que ese material puede ser difundido de manera muy fácil y amplia, de manera que el remitente inicial pierde totalmente el control sobre la difusión de dichos contenidos. El cyberstalking es, básicamente, acoso online. Se ha definido como el uso de tecnología, en particular Internet, para acosar a una persona. Algunas de las características comunes son: acusaciones falsas, seguimiento, amenazas, robo de identidad y destrucción o manipulación de datos. El cyberstalking incluye la explotación de menores, ya sea sexual o de otro tipo. Retomando a Willard (2006-2007) la denigración es un tipo de agresión electrónica que consiste en la difusión de rumores y calumnias acerca de la víctima, que van desgastando la imagen de esta para con la sociedad incluyendo definitivamente a la familia. La suplantación de identidad es otra forma violenta de manejarse en la internet y consiste en hacerse pasar por la víctima y enviar o publicar archivos de texto, video o imagen que hagan quedar mal al agredido. Las consecuencias que estos actos violentos pueden traer consigo van desde el retraimiento, aislamiento social, cambios en los estados de ánimo, cambio en los hábitos alimenticios, hasta la depresión o el suicidio. Las estrategias para poder desactivar estas conductas o eliminar esta zona de violencia es necesario recurrir a la información, hacerse conocedor de los tipos de agresiones que se puedan padecer en este medio. Así que entonces la prevención es una un punto clave para conseguir que los usuarios de la internet no corran riesgo, para ello es necesario enseñarles evitar que el obtenga armas o poder, es decir, tomar medidas que contribuyan al cuidado de los datos personales, saber navegar con precaución, aceptar solo conocidos y evitar el chantaje. Para ello es recomendable: a. No proporcionar imágenes o informaciones comprometedoras a nadie ni situar las mismas accesibles a terceros. Es necesario pensar que algo que no tiene importancia en un determinado ámbito en otro momento puede cobrarla en otro contexto. b. Evitar el robo de ese elemento de fuerza para lo cual se debe preservar la seguridad del equipo informático y la confidencialidad de las contraseñas. c. Mantener una actitud proactiva respecto a la privacidad lo que involucra prestar atención constante a este aspecto y, en especial, al manejo que las demás personas pueden hacer de las imágenes e informaciones que se suban a la red. 2. Afrontamiento: tomar conciencia de la realidad y magnitud de la situación, sobre todo cuando se comienza a recibir amenazas e intimidaciones es importante: no ceder al chantaje porque esto puede colocarlo aún más en peligro y otorgarle más poder al acosador. d. Pedir ayuda, se trata de una situación nueva y delicada que conlleva a presentar un estrés emocional, el que se cuente con el apoyo necesario y sobre todo de una persona adulta de confianza es indispensable, porque aportara serenidad y una perspectiva distinta. e. Evaluar la certeza de la posesión es importante evaluar qué es lo que verdaderamente tiene el acosador, es el pensar que contenidos se le han pasado y hasta dónde puede llegar esa información, siendo siempre realistas de las consecuencias de los contenidos que se dieron para poder resolver de la mejor manera la situación. f. Limitar la capacidad de acción del acosador es este aspecto es necesario indagar si el acosador ha conseguido el acceso al equipo o posea claves personales. En un sentido de la previsión se requiere una revisión amplia para evitar el malware del equipo y cambiar luego las claves de acceso. Reducir y revisar las listas de contratos, las configuraciones y las opciones de privacidad de las redes sociales. Y si es necesario cambiar el perfil o incluso del ámbito de relación en la red. 3. Intervención en lo que se refiere al acecho sexual rara vez terminan por sí mismas, siendo normal la reincidencia del acoso incluso en momentos muy distantes en el tiempo. CONCLUSIONES La prevención de la violencia en las redes sociales se encuentra principalmente en el conocimiento acerca de cómo se manifiestan las diferentes formas de agresión, conocer que no solo existe la violencia física sino que también hay violencia sutil o violencia que no se da directamente o sea que no acontece cara a cara, como es el ejemplo de lo que sucede con las redes sociales, no por el hecho de que no se manifieste físicamente va a dejar de ser dañina, por el contrario puede llegar a ser tan peligrosa como si alguien atacara corporalmente a otra. El suicidio o la depresión pueden tener consecuencias graves que pueden afectar a quienes son víctimas de violencia a través de las redes sociales, emergiendo de lo virtual a la vida real, irrumpiendo la poca paz que queda en nuestra sociedad enferma de enfado y violencia, ensañándose con los más vulnerables: niños y jóvenes que son quienes las manejan principalmente. Bibliografía HELLAWELL, S. (2001). Beyond Access, ICT and social inclusion. London, Fabian Society INEGI (2013) – Módulo sobre Disponibilidad y Uso de las Tecnologías de la Información en los Hogares, (pág. 1-9). Recuperado en: http://www.inegi.org.mx/inegi/contenidos/espanol/prensa/contenidos/estadisticas/2014/inte rnet0.pdf LI, Q. (2006) Cyberbullying in schools: A research of gender differences. School Psychology International. Vol. 27. LINTON, F. (2006) The Development of Social Network Analysis. Vancouver: Empirical Press, 2006. MASON, K.L. (2008) Cyberbullying: A preliminary assessment for school personnel. Psychology in the School. Vol. 45. OLWEUS D. (1993). Bullying at school: What we know and what we can do. Blackwell Publishing. SLONJE, R.; Smith, P.K. (2008) Cyberbullying: Another main type of bullying? Scandinavian Journal of Psychology. Vol. 49, p. 147-154. Trautmann, A. (2008). Maltrato entre pares o “bullying”. Una visión actual. Revista Chilena de Pediatría; 79 (1): 13-20. WILLARD, N. (2004) An Educator’s Guide to Cyberbullying and Cyberthreats. [En línea]. http://cyberbully.org/docs/cbcteducator.pdf. Consulta 25 de agosto 2015. WELLMAN, Barry, S.D. (1988). Social Structures: A Network Approach. Cambridge: Cambridge University Press.
© Copyright 2024