CAPÍTULO 14 AMBLIOPÍA: FUERA CON LO VIEJO, BIENVENIDO LO NUEVO En este capítulo compararemos los tratamientos antiguos o anticuados con los más actualizados. TR ATAM IENT OS ANTICUAD OS EN LA AM BLIO PÍA 1. OCLUSIÓN TOTAL El tratamiento por excelencia para tratar la ambliopía (y a veces para estrabismos con y sin ambliopía) y el más anticuado es la oclusión total. Empezó a usarse en el siglo XVIII para forzar el ojo bueno y no se ha cambiado desde entonces. Durante más de 300 años, el parche se ha puesto para usarlo todo el día en el ojo bueno con el fin de forzar el uso del ojo malo. Los oftalmólogos son los especialistas que emplean más habitualmente este anticuado tratamiento, aunque también lo hacen los optometristas clásicos, que lo utilizan como principal -y muchas veces como único- tratamiento. Hay varios tipos de parche disponibles, pero tanto sea un parche pegado a la cara directamente como un parche pirata o de otro tipo, el efecto es el mismo: elimina completamente la visión del ojo “bueno” esperando que de esta forma el “malo” trabaje. 35 y 36. Bebés con oclusión total. 68 En principio, la idea puede parecer que tiene sentido, pues pretende reforzar las conexiones entre el ojo con ambliopía y el cerebro. Sin embargo, un niño es mucho más que un globo ocular y llevar el parche todo el día es una tarea difícil de conseguir, a parte de que puede dañar al pequeño tanto en su desarrollo motor como emocional. Durante muchos años, el parche ha sido la única herramienta de trabajo disponible para tratar este tipo de problemas. Afortunadamente, ahora ya no lo es, ni tampoco es la mejor opción para muchos niños. DESVENTAJAS DE LA OCLUSIÓN TOTAL Vamos a entrar en detalle en las muchas desventajas que ofrece la oclusión total. DESVENTAJA 1: La oclusión total reduce el rendimiento en la vida y la habilidad de aprendizaje. La oclusión se utiliza tradicionalmente en niños desde que nacen hasta que tienen siete años porque todavía prevalece el concepto erróneo de “periodo crítico” que discutimos en el capítulo 12. Piensen en las cosas tan importantes y cruciales que hace el niño durante ese periodo de su vida ¿Y qué ocurre a esa edad? Pues que está en pleno desarrollo tanto motor como cognitivo, empieza el colegio y la lectoescritura y comienza a relacionarse con otros niños. Hasta que le ponen el parche, todas esas cosas el niño las puede hacer. Pero, ¿qué ocurre cuando de repente le tapan el ojo bueno y le dejan en el colegio, en el patio y en la calle con esa visión? ¿Y todavía algunos adultos se sorprenden cuando ven la inseguridad con la que se mueven y las dificultades que tienen muchos de ellos en el colegio mientras llevan el parche? ¿Les extraña de verdad que el niño se resista a llevar el parche? Para ilustrar este punto, les voy a contar un caso de oclusión total que tuve en mi consulta. 69 Hace unos años, vino a mi gabinete un niño de seis años que llevaba oclusión total todo el día. Su agudeza visual en el ojo ambliope era de 0,1, es decir, del 10% (legalmente, ciego para la ONCE). Remarco que llevaba el parche todo-el-día. A ese niño lo trajeron a mi consulta por problemas de lectura. ¿Hay alguien que pueda pensar que ese niño no tuviera problemas para aprender a leer con esa visión? Para mí, eso es un verdadero abuso contra ese niño. Fue ese día cuando decidí que escribiría este libro para educar a los padres, darles información y no volver a ver nunca más una criatura sometida a ese tipo de tratamiento tan bárbaro. Cuando se necesitan realizar tareas tan críticas como leer, escribir, montar en bicicleta y relacionarse socialmente, cuando en esos momentos se lleva un parche -aunque sea por unas horas- en el colegio, el parche puede interferir de una forma muy importante en la habilidad del niño para procesar la información visual y, por tanto, puede disminuir su calidad de vida. ¿Por qué en pleno siglo XXI todavía siguen imponiendo la oclusión total a los niños cuando hay disponibles tratamientos mejores y más efectivos para tratar la ambliopía? 37. La oclusión total reduce el rendimiento en la vida y en la habilidad de aprender. DESVENTAJA 2: La oclusión total elimina la posibilidad de desarrollar binocularidad. 70 Cuando un ojo se tapa todo el día, se elimina por completo toda posibilidad de que el niño aprenda a utilizar los dos ojos juntos y desarrolle algún tipo de binocularidad y estereopsis, incluso a distancias muy cortas. Sea cual fuere la binocularidad que el niño tuviera antes del parche -aunque fuera muy frágil-, con el parche se elimina totalmente. DESVENTAJA 3: La oclusión total reduce el campo visual del niño. Cuando se tapa un ojo, se pierden 30º de campo visual del lado del ojo que ha sido cubierto. De esta forma, se eliminan la visión periférica, la detección del movimiento y toda la información espacial proveniente de ese ojo. Esto puede poner en peligro al niño porque si viene por ese lado de visión una pelota o un coche, no los podrá ver. En el libro de Oliver Sacks Los ojos de la mente, encontramos este otro párrafo que escribió uno de sus corresponsales, Stephen Fox, que resulta muy ilustrativo acerca del efecto que causa un parche, aunque en este caso fuera real la pérdida de visión, pero el efecto es el mismo: «Mucho peor que la pérdida de profundidad, fue la nueva limitación de mi campo visual. Mi brazo derecho estaba lleno de magulladuras de tanto chocar con los marcos de las puertas, pues mi cerebro seguía reaccionando como si le llegara la panorámica completa de los dos ojos. También derribo a menudo objetos de mi mesa con el brazo derecho». DESVENTAJA 4: La oclusión puede empeorar la apariencia estética de los ojos. La oclusión puede aumentar el ángulo de estrabismo. Cuando tapamos el ojo “bueno” y tenemos en el otro ojo un estrabismo hacia dentro, hacia afuera o hacia arriba, al quitar el parche el ángulo del estrabismo puede aumentar y quedar peor de lo que estaba antes de la oclusión. Según el famoso oftalmólogo Gunter von Noorden: «Una breve oclusión de un ojo es capaz de precipitar una gran desviación que está ordinariamente contenida por un mecanismo de fusión de muy buen funcionamiento». 71 DESVENTAJA 5: La oclusión total puede dar lugar a visión doble. La visión doble (diplopia) puede aparecer después de quitar un parche que se ha llevado durante un periodo prolongado de tiempo. Esto puede ocurrir en un niño que antes del parche no padecía visión doble. 38. La oclusion total puede dar lugar a visión doble DESVENTAJA 6: La oclusión total puede dañar la autoestima y la seguridad del niño. Este es un tema que siempre me ha preocupado profundamente, ya que conozco innumerables historias de niños y de adultos que llevaron parche y que recuerdan aquella experiencia como una etapa muy traumática en su vida. Como el lector podrá encontrar en las referencias al final del libro, en los trabajos de Webber, Wood, Gole y Brown hay evidencias científicas del daño psicológico que puede causar un parche. 39. La oclusión total puede dañar la autoestima del niño. 72 Me gustaría aportar un testimonio con el que, a buen seguro, muchos de ustedes se habrán sentido identificados, bien por haberlo vivido en primera persona o porque les recordará sentimientos que sus hijos hayan podido expresar en un momento dado o, lo que es peor, que no hayan expresado y se hayan quedado ahí dentro. MARTA Marta es una niña de diez años que nació prematura. Tiene un ojo vago, con una diferencia de graduación de casi 6 dioptrías de uno a otro. Ha llevado parche durante dos años y sigue viendo menos con ese ojo. La pequeña Marta recuerda así aquella experiencia: «Fueron dos años horribles. Todos los niños de mi cole se reían de mí porque llevaba parche. Si me lo quitaba, mis papás me reñían, y si lo llevaba, los niños se reían; y además, veía muy mal. Yo no entendía por qué tenía que llevar ese parche, nunca lo he entendido, sufría mucho todos los días». Después de tres meses de Terapia Visual, Marta había mejorado su agudeza visual un 25%, y había ganado algún grado de binocularidad y estereopsis. Lo consiguió sin tener que llevar parche, excepto en algunos ejercicios específicos que mandamos para casa o que realizamos en la consulta. Después de ocho meses de terapia, Marta ha recuperado toda la visión, su agudeza visual es del 100% en el ojo ambliope y tiene una excelente estereopsis. Lo exprese el paciente o no, el trauma psicológico secundario de la oclusión puede acompañarle toda la vida. 73 Me gustaría que hicieran un experimento para ponerse de la manera más real posible en la piel de estos niños. ¿Se atreven? Hagan la prueba: pónganse en un ojo un parche de la farmacia durante un día entero, pero no se lo quiten. ¿Con qué seguridad se mueven? ¿Cómo pueden leer y comprender lo que leen? ¿Se sienten cómodos en sociedad? ¿Pueden mirar a los ojos a las personas? Son capaces de sentir todo eso, ¿verdad? Solo llevando un ojo tapado y sin tener problemas en el ojo destapado. Pero si quieren de verdad experimentar lo que sienten sus hijos que tienen ambliopía cuando les tapan un ojo, tienen que reducir la agudeza visual del ojo destapado. Cojan celo mágico -lo pueden encontrar en la papelería-, pónganselo encima del cristal del ojo destapado ¡y no se lo quiten ni un segundo en todo el día! ¿Qué tal se sienten visualmente y emocionalmente? Experimenten la dificultad de ir de esta forma durante toda la jornada. Ahora piensen en sus hijos y entiendan lo que el parche les está produciendo. Yo hago el experimento a los papás de los niños que vienen con parche a mi consulta y normalmente se ponen a llorar al medio minuto de llevarlo. Se lo quitan inmediatamente pero yo insisto, les pongo un libro delante y les pido que lean. Ellos aman a sus hijos y no sabían el daño que les estaban produciendo. ¡¡¡Muchos no tienen consuelo!!! No me extraña. Como pueden ver, no soy precisamente una fan del parche. ¿Por qué? Porque desde mi experiencia clínica, y apoyándome en los nuevos estudios de la neurociencia, se pueden obtener resultados muy buenos -e incluso mejores y más rápidos- sin apenas recurrir a él o con un uso mucho menor -mientras hace los ejercicios en casa o en la consulta- y sin tener que poner al niño el parche en las horas de colegio. Si fuera necesario, con un máximo de dos horas de parche es suficiente para la estimulación. Considero que la oclusión total es un tratamiento excesivamente duro para muchos niños y me duele el corazón cada vez que veo a uno así por la calle. 74 El Dr. Daniel Fortenbacher ha elaborado un listado con los factores de riesgo asociados a la oclusión total: • Emocionales-Con el resultado de frustración, enfado e infelicidad. • Interferencia en la adquisición de la consciencia espacial. • Interferencia en el desarrollo motor grueso y en la integración bilateral. • Interferencia en el desarrollo de la visión binocular. • Interferencia en el desarrollo psicosocial. • Consecuencias de acoso y burlas. • Aumenta el peligro al hacer deporte, cruzar las calles y montar en bicicleta. • Dificultad para funcionar en la clase o durante las actividades de la vida cotidiana. Además, el optometrista Gopal Bandhari hizo un estudio en el año 2010, en el cual preguntó a los padres porqué es tan difícil que los niños cumplan el programa de oclusión. Le dieron varias razones: 1. Los padres se sienten confusos sobre la necesidad de que sus hijos lleven el parche. 2. Los padres se sienten confusos sobre las horas que el niño tiene que llevar el parche. 3. Los niños se niegan a llevar el parche. 4. El parche interfiere con la calidad de vida del niño. 5. El parche es visto como un estigma social (tanto por el niño como por los padres). Si el parche fuera el único método de tratamiento para el ojo vago, no tendríamos más remedio que utilizarlo. Pero hoy en día hay otras opciones de tratamiento mucho mejores. En el año 2014, el Dr. Robert Hess y sus colegas publicaron un artículo titulado “Binocular Vision in Amblyopia: Structure Suppression and Plasticity” en la revista Ophthalmic & Physiological Optics. En él afirmaban que se obtiene más éxito al utilizar métodos binoculares antes que el parche para restablecer la función binocular en ambliopes, sean niños o adultos. 75 40. Un niño de dos años intentando quitarse el parche. Citando al Dr. Leonard Press: «Es hora que los profesionales que persisten con métodos de tratamiento tradicionales y minimalistas delante de la creciente evidencia de que estas propuestas son ineficientes, o quienes fallan al no reconocer a los pacientes que hay mejores opciones, sostengan un espejo de responsabilidad en sus manos». Con todas las otras opciones de tratamiento que tenemos en el siglo XXI a nuestra disposición, el concepto de ocluir a tiempo completo y prescribir toda la corrección óptica como único método de tratamiento es por lo menos anticuado si no abiertamente perjudicial para el niño 2. GOTAS DE ATROPINA La atropina es un tratamiento farmacológico utilizado por los oftalmólogos y los optometristas en algunos países donde les está permitido el uso de fármacos. La pupila del “ojo bueno” se dilata con las gotas y se paraliza el mecanismo de enfoque hasta causar una imagen borrosa en ese ojo. El efecto de la atropina es similar al de una lente opaca o un parche. La ventaja sobre el parche es que el niño no se la puede quitar y estéticamente no se nota. Sin embargo, mientras algunos estudios indican que la atropina funciona como la oclusión total, para mí es mucho peor que el parche. La 76 razón es porque la atropina es un tratamiento de oclusión total que no se puede quitar, precisamente. Además, los padres deberían de saber que el niño tendrá que ponerse esta droga en el ojo durante periodos largos de tiempo, a veces durante un año o incluso más tiempo, y los efectos negativos del enfoque pueden permanecer incluso cuando se haya interrumpido o finalizado el tratamiento. Por otro lado, como cualquier fármaco que afecte al sistema nervioso central, la atropina conlleva riesgos potenciales de efectos secundarios como enrojecimiento o inflamación ocular, sequedad bucal, estreñimiento y dificultad con la orina. Al igual que pasa con la oclusión total con parche, si no tuviéramos otro tratamiento disponible no habría más remedio que utilizar la atropina. De acuerdo con el Dr. Press, hay que tener en mente que si funciona la atropina es porque se aplica en el inicio de la Terapia Visual de Fijación Monocular en campo binocular. Dicho de otra forma, el cerebro se ve forzado a utilizar el ojo ambliope como mejor ojo, mientras que el ojo bueno está funcionando de forma artificial como lo haría el ojo ambliope. Pero como discutiremos en profundidad en el capítulo 18, hay muchos tratamientos menos invasivos y más efectivos a nuestra disposición. Todos sin los riesgos potenciales y los efectos secundarios que pueden tener la oclusión total y la atropina. Por tanto, el uso de la atropina no debería ser la primera opción de tratamiento o la única opción. 3. CIRUGÍA REFRACTIVA Algunos de los pacientes que vienen a mi consulta me comentan que el oftalmólogo les ha dicho que la cirugía refractiva puede normalizar la visión del ojo ambliope. Aunque la cirugía refractiva puede reducir la anisometropia, una completa recuperación de la binocularidad y de la estereopsis requiere Terapia Visual Optométrica Comportamental. ¿Por qué? Porque una vez más el lector debe de recordar que la ambliopía no está en el ojo. La ambliopía está causada por la competencia binocular en el cerebro. 77 HISTORIA DE SANDRA R., 11 AÑOS. MADRID. R E LA TO D E LOS P A DR ES D E S A N DR A Vivíamos en Inglaterra y hace dos años nos trasladamos a Madrid. Tengo un ojo vago y el padre de Sandra tiene una hipermetropía alta con astigmatismo, así que siempre hemos estado preocupados por la visión de nuestra hija. Cuando tenía dos años empezó a llevar gafas y el oftalmólogo nos dijo que tenía una graduación diferente en un ojo con respecto al otro y que tenía que usar un parche. Fuimos a por una segunda opinión y fue la misma. Así que procedimos a parchear su ojo: para tratar de evitar que desarrollara un ojo vago como el mío. Después de que Sandra comenzara a usar el parche empezó a girar el ojo hacia dentro, por lo que estábamos muy tristes y decepcionados. El oftalmólogo nos dijo que probablemente ya tenía el estrabismo antes de comenzar la oclusión y esta solo lo hizo más evidente. Sandra empezó a usar el parche sobre su ojo derecho cuando tenía tres años. Al principio nos dijeron que necesitaría llevar oclusión total a tiempo completo durante mucho tiempo. Después de un largo período de llevar el parche todo el día, el tiempo de aplicación del parche se redujo. A continuación se retiró porque nos dijeron que su agudeza visual había mejorado. Pero cuando Sandra tenía cinco años, la agudeza visual había disminuido de nuevo, así que tuvo que empezar a usarlo otra vez. Después de llevarlo durante muchos años, Sandra ya no quería usar más el parche. Incluso no quería llevar más las gafas porque era emocionalmente muy difícil para ella. Hace un año, cuando Sara tenía diez, fuimos al hospital para un examen visual. La agudeza visual en su ojo era muy baja, 0,1. Así que tuvo que volver a usar el parche, aunque el oftalmólogo dijo que sería muy difícil mejorar su agudeza visual en este punto porque ahora era demasiado mayor. Por lo que nos sugirieron que probáramos la terapia visual con un optometrista. 78 ¡No nos podemos creer los resultados del programa de terapia visual optométrica de Sandra! Pero estamos tristes porque mi hija sufrió mucho durante todos esos años que llevó un parche. Después de solo un mes de terapia visual y sin tener que usar ningún parche mi hija duplicó su agudeza visual. Ahora, después de diez meses de tratamiento, ¡ya no tiene estrabismo ni ojo vago! L A E X P ER IE N CIA DE S AN D RA ¡No quiero usar un parche nunca más! Lo he llevado toda mi vida y he sufrido mucho, los niños se reían de mí y tampoco veía bien para hacer mis deberes ni jugar. Me sentía realmente muy mal y todavía tengo un trauma emocional debido al parche. D A T OS Y AN Á LI S I S D EL O PT OM E T RI S T A Sara presentaba una endotropía y una hiperdesviación (es decir, desviaba el ojo hacia dentro y hacia arriba). Suprimía el ojo izquierdo para mirar de lejos y tenía una estereopsis muy pobre. Su ojo derecho tenía 4 dioptrías de hipermetropía y 2 de astigmatismo con una agudeza visual del 0,6;l ojo izquierdo tenía 6 dioptrías de hipermetropía e incluso con su prescripción la mejor agudeza visual corregida era solo del 0,2. T R A TA MIE NTO O PT OM É T RI C O • Retirar el parche. • Fototerapia Syntonics. • Terapia visual optométrica. • Lentes de contacto (en la última fase del tratamiento). Comenzamos la terapia de Sandra con fototerapia Syntonics y obtuvimos unos resultados muy buenos en un corto período de tiempo. En solo un mes, el resultado de la agudeza visual lograda en el ojo derecho fue de 1,0 y de 0,50 en el ojo izquierdo. Y, lo más importante, con una disminución de la supresión y una mejoría de la estereopsis. Después del tratamiento con Syntonics, Sandra vino quincenalmente a nuestra consulta para realizar 79 terapia visual optométrica y trabajó en casa unos 15-20 minutos cada día. Trabajamos todas sus habilidades motoras y visuales: el enfoque, la localización espacial monocular y binocular, la conciencia periférica, el control de movimiento de los ojos y la binocularidad. Sandra terminó su programa de Terapia Visual a los diez meses. Al final del tratamiento, la agudeza visual en el ojo derecho era 1,0 y en el ojo izquierdo, de 0,80. También demostró tener una buena visión binocular y una excelente estereopsis. Ahora estoy haciendo el seguimiento del progreso de Sandra cada ocho meses y aún mantiene todas sus mejoras en las habilidades visuales (agudeza visual, visión binocular y estereopsis). Es muy común ver a los niños que han llevado parche cómo aumentan la agudeza visual mientras lo están usando y cómo les disminuye cuando lo dejan de usar. Les explico a los padres que la clave está en tratar la ambliopía de forma binocular para mejorar la agudeza visual y poder mantener los resultados en el tiempo. Así que digo: ¡No más parches! Los optometristas comportamentales con conocimiento y formación actual ya no los recomiendan porque están en contradicción con nuestra filosofía y con nuestra terapia. Tenemos que adoptar un enfoque neurofuncional y enseñar a las personas con estrabismo y ambliopía cómo usar su corteza visual. Cuando el cerebro lo aprende a hacer, se mantienen los resultados. Otra de las claves en este caso en particular fue la fototerapia Syntonics, pero cada caso es diferente y nunca sé qué terapia o procedimiento será la clave. Así que es muy importante tener tantas herramientas como sea posible, tales como la oclusión con translúcidos, Syntonics, terapia visual y las lentes de contacto, y usarlas todas ellas bien. Asimismo, es igualmente muy importante trabajar con todo el paciente y no únicamente con sus ojos. M ar t a Ca br a nes A zc ona , D . O. O . Visual Clinic, Madrid. - España 80 HISTORIA DE MANUEL P., 11 AÑOS. ALBACETE. R E LA TO D E LOS P A DR ES D E M A N UE L : Manuel tenía unos cinco años de edad cuando nos dimos cuenta que tenía ambliopía. El oftalmólogo nos dijo que el único tratamiento era la oclusión y que debía usar gafas y parche ocho horas al día. Llevar puesto el parche fue una experiencia muy traumática para Manuel. No quería usarlo en la escuela porque se avergonzaba que sus compañeros de clase lo vieran. Y cuando se lo ponía, por la tarde lloraba mucho y no quería salir de casa. ¡Manuel llevó el parche durante dos años! Su agudeza visual mejoró mientras lo llevó pero cuando dejó de hacerlo perdió la mayor parte de lo que había ganado. Después, Manuel no solo se negó a llevar el parche, sino también las gafas y se convirtió en una tarea imposible conseguir que usara cualquiera de las dos cosas. Todos los oftalmólogos que consultamos nos decían lo mismo: que a su edad era casi imposible mejorar su agudeza visual. Pero, incluso después de decir esto, el último que visitamos nos dijo que Manuel debería usar el parche a tiempo completo. Y, aun así, no podía garantizar que se produjera una mejora. Pero ¡le prescribió el parche a tiempo completo de todos modos! Poco después, por casualidad, oímos hablar de algo llamado terapia visual y decidimos darle una oportunidad. ¡Los resultados han sido asombrosos! Manuel ha recuperado la agudeza visual más rápidamente de lo que había hecho antes y sin necesidad de usar parche. Ahora puede mantener las mejorías en lugar de perderlas como con el tratamiento de parche. Manuel a pesar de no haber usado gafas o lentes de contacto, no ha retrocedido ni en el verano, en que no hemos hecho ningún tipo de tratamiento. Pilar dice que su cerebro ha aprendido a ver bien y que por eso no pierde lo que ha ganado. ¡Estamos muy contentos de haber descubierto la terapia visual para nuestro hijo! 81 L A E X P ER IE N CIA DE M AN U E L Para mí llevar parche fue una muy mala experiencia. Recuerdo haber llorado mucho y me daba mucha vergüenza que mis compañeros de clase vieran que lo llevaba. No quería salir de casa o que mis amigos vinieran a casa a jugar conmigo. Para mí llevar parche era una pesadilla. D A T OS Y AN Á LI S I S D EL O PT OM E T RI S T A / A U TO R Manuel llegó a mi oficina con una diferencia de casi seis dioptrías de hipermetropía y astigmatismo entre sus dos ojos. Llevaba gafas, pero no se sentía cómodo con ellas. En un ojo tenía una graduación considerable mientras que en el otro no tenía nada en absoluto. La mejor agudeza visual del ojo ambliope con sus gafas era de 0,40, mientras que el otro ojo era de 1,2 lo cual es muy común en estos casos. En primer lugar, se debe entender que en realidad la graduación prescrita a Manuel debida a la diferencia entre los dos ojos, se lo estaba poniendo más difícil. Me parece increíble que ninguno de los oftalmólogos que Manuel había visitado nunca le hubiera mencionado la posibilidad de llevar lentes de contacto. Con una diferencia tan grande entre la prescripción de un ojo y el otro, ¿cómo podría su cerebro fusionar unas imágenes tan diferentes mientras estuviera usando sus gafas? Manuel y su familia recorrieron unos cien kilómetros cada semana para poder venir a mi consulta de Albacete, estaban muy entregados siguiendo mis recomendaciones y el programa del tratamiento. Como se ha señalado con anterioridad, la perseverancia y la motivación son la clave para el éxito del tratamiento. 82 T R A TA MIE NTO O PT OM É T RI C O • Lentes de contacto. • Gafas con filtros translúcidos para usarlas sobre sus lentes de contacto solo durante el tratamiento. • Fototerapia Syntonics. • Terapia visual optométrica. Manuel nunca más tuvo que usar el parche ni en la escuela ni para jugar con sus amigos. Las únicas veces que tuvo que llevarlo eran unos treinta minutos al día mientras hacía los ejercicios de terapia visual en casa. Manuel finalizó su programa de terapia visual optométrica en solo ocho meses. Durante la revisión más reciente, ¡era capaz de leer algunas de las letras de la línea del 1,0 con el ojo que anteriormente era ambliope! Mediante unas pruebas particulares de visión binocular con filtros polarizados, se pudo determinar que estaba utilizando los dos ojos a la vez prácticamente todo el tiempo, y desde su segundo mes de tratamiento mostró una buena estereopsis. Pilar Ve rg ar a, D.O . O , F .C .O . V. D. Centro de Terapia Visual Skeffington Albacete España 83
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