Acciones de las prostaglandinas en el aparato

Acciones de las prostaglandinas en el aparato reproductor femenino
Autor: Fernando Quevedo Candela
Estos compuestos que provienen del ácido araquidónico fueron descubiertos por
primera vez en 1936 que las prostaglandinas fueron aisladas por Von Euler de extractos
de vesículas seminales y semen humano, luego se descubre que el semen humano
contiene la mayor concentración y el mayor número de prostaglandinas (PGs), de las
cuales se han aislado más de 31.
Estos compuestos tienen múltiples usos, y acciones a varios niveles del organismo, pues
al estar sistémicamente tienen efectos generales que suceden in situ, siendo las PGs
mediadores que causan cambios celulares múltiples, provocando estimulación o
inhibición de diversos procesos orgánicos, por lo tanto sus efectos tienen lugar en
diversos sistemas: el cardiovascular, el gastrointestinal, el renal, el pulmonar, el
reproductor y el hematopoyético.
Nos interesa el sistema reproductor femenino, puesto que estos compuestos tienen
efectos importantes, de los cuales destacaremos dos: su uso en el aborto y en la
inducción del parto. En gineco-obstetricia las PGs más usadas son, dinoprost (PGF2a),
dinoprostona (PGE2) y misosprostol (PGEI2).
El aborto es un proceso que se debe manejar con sumo cuidado pues, es una situación
que al realizarse puede poner en riesgo la vida materna y fetal en simultáneo, en mi
posición el aborto medicamentoso debe realizarse en casos que lo ameriten, es decir en
aquellos casos que sea necesario, más no en aquellos embarazos no deseados.
Por ello, el misosprostol debe manipularse con extremo cuidado para evitar que se
produzcan “abortos indiscriminados”. El efecto sobre el cuello uterino de esta PG es el
ablandamiento, y es uno de los medicamentos que más se utiliza para inducir el parto,
incluso superando a la oxitocina; se dice que el uso de misosprostol tiene ventajas sobre
otras PGs, por ejemplo: no tiene efectos sobre los vasos sanguíneos ni los bronquios, se
puede almacenar a temperatura ambiente por muchos años, se puede administrar por
vía oral, rectal, vaginal y sublingual, y es un medicamento barato.
Este último pseudobeneficio (el ser barato) en mi opinión trae riesgos, pues algunas
personas que se presenten en la situación de un embarazo no deseado, y que no tengan
conocimiento alguno de la práctica médica, pueden ser engañados por algunos malos
médicos, para inducir un aborto no terapéutico, lo cual a mí me parece sumamente
incorrecto, primero por la parte ética y segundo por los riesgos que pueda traer su
aplicación porque recordemos que un aborto de este tipo, no se realiza en un
nosocomio, ni en una clínica especializada, por lo tanto algunos factores como la
antisepsia, la experticia del personal que realiza el proceso, y dosis erróneas que puedan
inducir a una contracción uterina severa que lleve a una ruptura uterina, pueden jugar
en muy en contra en la vida de la madre que se somete a este tipo de aborto.
En mi opinión, y como tiene que hacerse, el uso del misosprostol y otras PGs que se
utilicen en la inducción del parto y de aborto medicamentoso tiene que ser supervisada,
pues sólo se usa en situaciones que pongan en riesgo la vida de la madre y del feto, por
ejemplo: cuadros hipertensivos en el embarazo, gestación prolongada, diabetes
mellitus, sífilis, corioamnionitis, desnutrición materna, síndrome de anticuerpos
antifosfolípidos, factores uterinos, malformaciones congénitas fetales, insuficiencia
placentaria, etc.
La parte positiva del uso de estas PGs es que son más efectivas que la oxitocina y que la
amniotomía para superar las dificultades de un cuello inmaduro y lograr el parto vaginal.
Y por su parte el uso del misoprostol facilita el inicio de la labor y reduce la tasa de
cesáreas. Este medicamento está indicado en todos los casos de óbito fetal con feto
muerto y retenido en cualquier edad del embarazo, resulta tan efectivo como el uso de
la dinoprostona y a un menor costo, como ya se ha mencionado.
BIBLIOGRAFÍA
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