44 LA VANGUARDIA CULTURA C R Í T I CA D E M Ú S I CA DOMINGO, 3 ENERO 2016 HHHHH obra maestra / HHHH sobresaliente / HHH muy bien / HH bueno / H en fin... / l olvidable Esteban Linés Ojalá toda la quincalla fuera así D esde hace años, cada vez más, la persona y la música de Pascal Comelade han pasado de ser una rareza a un verbo libre de sólidas raíces y argumentos estéticos. La rebeldía argumen tada del músico de Montpellier se ha ido convirtiendo con el pa so del tiempo en una referencia cultural para su entorno cultural y geográfico, una rebeldía que además ha demostrado sus otras virtudes: el atractivo intrínseco de sus elementos constitutivos y la radical modernidad que habi tualmente le ha impregnado. Malos tiempos para la lírica decía la canción de los gloriosos gallegos, lo que se podría traducir al día de hoy como malos tiempos para los discos. Comelade, ejer ciendo de empecinado contraco rrientista, publica tres para re Pascal Comelade CONCEPTE GENERAL DE LA QUINCALLA CATALANA POPVANGUARDIA/HHHH DISCMEDI frescar memorias, ponerse al día o, eso siempre, sorprender agra dablemente. Practicante de una música instrumental que rezu ma, ahora y antes, una luminosi dad actual perenne, Comelade muestra sus últimos derroteros compositivos en el titulado Con cepte general de la quincalla cata lana, que incluye algún material ya conocido e incluido en El pia nista del antifaz de hace tres años. En las composiciones de sa via y pentagrama nuevos, firma dos en estos últimos tres años, el protagonismo de las guitarras eléctricas engrandece la sonori dad inconfundible, cinemática, de su modus habitual desde co mienzos de los noventa. Xarim Arestè brilla en The nothing twist, pero es Cabo San Roque el que redondea hacia la excelencia su encuentro con el maestro. Beat Happening Penny Necklace Trau LOOK AROUND POP INDIE/HHHH DOMINO PENNY NECKLACE SYNTHPOP/HHH AUTOEDITADO DÉU VOS GUARD POP/HH DISCMEDI ]Cuando se cumplen ]Con el título expli ]Aunque se les ads tres decenios de la aparición de su glo rioso álbum homóni mo de debut, el trío (con el gran Calvin Johnson) da forma a un magnífico y rei vindicativo recopila torio de su arte musi cal, siempre lumino so y fresco, nunca sombrío ni asfixiante. cativo de Este es el discofanzine de Pen ny Necklace, el trío femenino y madrileño exhibe conocimiento, oficio y dominio de la escala estilística, desde la canción onírica íntima a la rítmica de groove electrónico con el que bañan su pop. cribe como hacedo res de un rockfolk psicodélico, la banda de Sant Boi destila por todas sus costu ras un entusiasta pop sesentero, de incon fundible sabor Beatle. Un abuso de armo nías vocales y esque mas instrumentales puede llegar a cansar. El sociólogo orientalista publica en Francia el ensayo ‘Terror en el Hexágono’ Iglesias vacías, mezquitas llenas ÓSCAR CABALLERO París. Servicio especial E n un ataque bendeci do por Alá un grupo de creyentes y solda dos del Califato esco gió como blanco laca pital de las abominaciones y de la perversión: París”. Con el original en árabe y la traducción del flash difundido el 2 safar 1437 (15 de no viembre del 2015) y, en la página siguiente, un capítulo titulado Pa ris, SaintDenis, vendredi 13 no vembre 2015, comienza Terreur dans l’Hexagone (Terror en Fran cia; Gallimard), de Gilles Kepel. El subtítulo, génesis de la yihad francesa, es exacto. Y amplio. Por que lo que abrió y cerró el 2015 sangriento en Francia tiene raíces no sólo en su historia colonial o en el hecho de que el árabe sea la se gunda lengua del país y la musul mana su segunda religión al mis mo tiempo que la población de confesión judía es la más numero sa de un país europeo, sino tam bién en una cronología mundial. Kepel la sintetiza: 19791997: Afganistán; 19972005: Al Qaeda Bin Laden; 2005: Abu Musab al Suri con su llamada a la revolu ción islámica mundial. Aquel 2005 es también el año de la violencia que puso los focos del mundo en las banlieues –alrede dores de grandes ciudades de Francia. En aquel noviembre de vehículos incendiados, el Consejo francés del Culto Musulmán lan zó una fatua basada en el versículo coránico “Alá no ama a quienes siembran el desorden”. O sea, la prohibición “a todo musulmán que aspire a la gloria divina, de participar en cualquier acción que dañe, de manera ciega, bienes privados o públicos o atente a la vida de seres humanos”. Ni caso le hicieron los agitadores. Kepel subraya que un 80 % de musulmanes votó en el 2012 a Ho Gilles Kepel, politólogo especialista en el islam NATHALIE SAINT-AFFRE / EFE Un analista precoz ]Gilles Kepel nació en Pa rís, en 1955. Doctor en socio logía y ciencias políticas, con diplomas de filosofía y ára be, enseña en Ciencias Polí ticas de París y fue profesor en la universidad Columbia, de Nueva York y en la New York University. También profesó en la London School of Economics. Su amplia bibliografía comienza en 1984 con un estudio sobre los movimientos islamistas en el Egipto contemporáneo. En La Yihad (Península), llande, pero que dos años después, desengañados, se abstuvieron. Y que, si bien Francia es el primer proveedor de jóvenes reclutas al yihadismo, no se les puede redu cir a la población originalmente musulmana: se multiplican las conversiones que involucran a tres lustros más tarde, anali zó el desarrollo del islam político y calificó su radicali zación como “un signo de declive, más que de poten cia”. Lo ratificó tras el 11 de septiembre de Nueva York. Porque “el islamismo es una especie de guerra civil en el corazón del Islam”. Colabo rador regular de Le Monde, el New York Times o La Re pubblica, Kepel es miembro del alto consejo del Institut du Monde Arabe que presi de Jack Lang en París. franceses sin antepasados árabes. Las diez páginas del prólogo –“del desfile de los beurs (hijos de magrebís nacidos en Francia) a Charlie y al Bataclán”– revelan que la Francia post colonial (que sin embargo incluye en su territo rio islas del Caribe y Oceanía) comprende el Saint Denis que conserva las reliquias de los reyes, pero cuyo estadio escapó por los pelos a una masacre, pero tam bién Siria. La incubación (de Clichy a Sar kozy) estudia el desencuentro en tre quienes denuncian blasfemias y un país laico que no la considera delito; analiza la dialéctica del ji hadismo y el proselitismo en las cárceles franceses; el espejismo de la victoria electoral de Hollan de; la simultaneidad del comuni tarismo musulmán y una ultrade recha xenófoba, segundo partido del país; la extensión del ciberyi hadismo; los fallos de seguridad, bajo Sarkozy, del caso Merah... Segunda parte, La erupción, traza un contrapunto entre la yi had francesa y la siria; analiza el cambio del voto musulmán en Francia en sintonía con el aumen to del paro y de la desigualdad; la yihad contra los judíos franceses; la emergencia de grupos islámi cos tradicionalistas y, en frente, de un conservadurismo autorita rio; el ser o no ser Charlie; las ma tanzas del 7 y el 8 de enero y la multitudinaria, e internacional, marcha del 11. El epílogo vuelve a reunir ac tualidad e historia de Francia. La marcha del 11 de enero excluyó al Front National. JeanMarie Le Pen se descolgó con un je suis Charlie... Martel. Charles Martel, fundador de la dinastía carolingia que unificó el reino de los Fran cos, detuvo a los yihadistas en Poi tiers en 732. “Su recuerdo susten ta la retórica frentista”. Detalle: el yihadismo actual re fiere también a Martel. Pero cali fica el enfrentamiento de escara muza, en un vídeo rematado por un plano fijo del general de Gau lle. Es una entrevista radiofónica de 1959, para justificar la indepen dencia de Argelia. “Si todos los árabes y berberiscos de Argelia fueran considerados franceses ¿cómo les impediríamos instalar se en la metrópolis, con su mejor nivel de vida?”. E ironiza: “mi pue blo ya no se llamaría Colombey lesDeuxÉglises [iglesias], sino ColombeylesDeuxMosquées [mezquitas]”. Kepel recuerda que otro pue blo, LunelViel, acogió en el pres biterio, en septiembre pasado, a una familia de refugiados sirios. Mes y medio más tarde, los dos mártires de Saint Denis eran refu giados. Y puntualiza “lo que todo el mundo vio en la televisión: la mayor parte de las refugiadas luce velo”. Y el contraste entre las igle EL OBJETIVO Kepel dice que los yihadistas quieren provocar una guerra civil europea EL ANTÍDOTO Para el sociólogo, la única solución sólo puede nacer de los valores compartidos sias que cierran, faltas de feligre ses, en Francia, y las mezquitas que abren. Para Kepel, convenci do de que los atentados yihadistas sólo buscan desencadenar pogro mos y a su calor, una guerra civil europea, la solución no es única mente policial ni legislativa; “sólo puede nacer del trabajo y los valo res compartidos en el instituto, en la universidad”. El libro no es un ensayo teórico: se apoya en un trabajo de campo interpretado por Kepel y Antoine Jardin, ingeniero del CNRS, cen tro francés de investigaciones científicas, y especialista en com portamiento electoral en barrios populares.c
© Copyright 2024