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de Ntra. Venerable Orden Tercera de Ferrol
Dirección y Administración: Colegio de PP. blertedarios.
Organo
AÑO
Abril DE 1919
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SUMARIO
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En la grandiosa Basílica compostelana, capital de nuestra
Archidiócesis, tan suntuosa por su magnífica fábrica de arqu i
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durante varias centurias fueron enriqueciéndola con todas las
manifestaciones del arte escultórico, y lujosa orfebrería; que la
colocaron entre los más suntuosos templos del Orbe católico; en
medio de tantos esplendores y grandezas, en una de las parro'
quias—no de las más ricas en ornamentación, de la Catedral
la de santa María de la Corticela—se ve una hornacina, rnä5
bien un nicho en piedra, sobrio y sencillo en detalles y sin duda
por eso, el más adecuado para hacer sentir y llevar el alma a la
meditación del misterio que representa.
Es la efigie del Salvador, tallada en cantería, orando en el
Huerto de las Olivas; en la gruta del huerto, que es la que segn"
ramente quiso representar el artífice, autor de la obra; porque
nada más que una gruta se ve; ni jardín, ni olivos, ni claros de
luna, como suele representárnoslo el Elvangelio. La efigie del
Hijo de Dios, en actitud de orar a su Eterno Padre... un angel...r0
y un cáliz; es lo que se presenta a nuestra consideración... pe
ya está todo allí... la oración... la resignación y nuestra salva"
ción... allí está...
GETI—ISEMANi
¡Ah! Gethsemaní, pretorio, calvario!.. , no es cruento el
mero de estos dolores, como la flagelación en el pretorio,
corona de espinas y la crucificación; pero por lo mismo qu e eS0
el más humano; el que algunas veces podemos presentir ¡eó
comprendemos los desgarradores estremecimientos que produ"
ce en el alma! ¡Con qué terror nos apartamos nosotros de ese c113"
lor de previsión que nuestro Divino Redentor bebió a grandes I ragos durante sus tres horas de oración... ¡de agonía!... haciéndole
derramar toda la sangre que ya no cabía en su adorable corazón'
Allí está Dios, cuya grandeza infinita somos incapace s de
de
comprender, sintiendo pavor, tristeza.., agobiado bajo el peso
todo lo que le iba a ser preciso sufrir para abrirnos las pueltas
del Cielo. Santísimo, impecable, se encuentra entre el cielo Y la
tierra, cargado con todos los oprobios de nuestros pecad05'
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Nuestras impurezas, nuestras soberbias, nuestras ingratitud If
nosotros las cometimos; pero ante su Padre celestial quiso
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E- presentarse cargado con ellas.. ¡Se hizo reo de nuestras culpas, E:
para que pudiese perdonársenos el haberlas cometido!... Un E
E angel... un cáliz... un cáliz... lleno, rebosando de hieles formadas
E
por nuestros pecados... y un angel confortando para beberlo, a E
El que es Señor de todos los ángeles, y autor de todos los E
bienes y de todas las gracias; y que, en el terror de una agonía 2'
producida por el horror de nuestros pecados, iba a empapar la z.
tierra con millones de gotas de sangre Divina, de la que una E
sola hubiera sido bastante para redimir mil mundos... ¡Ah! qué E
surtidor de sangre adorable regando a la tierra, para purificarla E
del surtidor de aguas cenagosas del pecado, que, desde el primero cometido en el Paraíso, estaban inundándola! No el temor E
de la flagelación, de las espinas, ni de la cruz, produjo aquel .1
tedio que dió en tierra con nuestro Redentor; el horror era al E
pecado, la agonía la producía el comprender que tantos dolores, E
habían de ser estériles por nuestras culpas. Todo nos falta para 2,
ir al Cielo; pero nuestras son todas las amarguras, todas las E
d esolaciones del huerto, y todos los dolores de la Sagrada
pasión. Cómo no sentir inquebrantable esperanza?
En el correr de esta vida de destierro, cuesta que entre gui- Ejarros y riscos vamos subiendo para llegar a nuestra Patria 5
e terna, todos tenemos dolorosas horas de Gethsemaní; recuerdos de seres amados que nos dejaron y desgarran el alma; previ siones de futuras amarguras, desfallecimientos, desconsuelos y
E
de salientos, algunas veces inexplicables... son los cálices que
E
Dios nos manda, siempre dulcificados con su amor, para que
E
Podamos cooperar con nuestra resignación, al qué en completo E
ab andono bebió hasta las heces para salvarnos. Aquél de quien
E
ha bía dicho en la transfiguración en el Tabor—uno de los Evangelios de estos días nos lo recuerda—éste es mi Hijo muy
a mado, en quien tengo mis complacencias. ['Todo esto ha sido E
E
Preciso para salvarnos!!
¡Virgen de los Dolores! Tú bien lo sabes.., bien conoces lo E
qne costamos a tu Divino Hijo, porque compartiste todas sus .1.
des olaciones, y fuiste en su Sagrada pasión nuestra corredent ora... y a tí ¡esperanza nuestra! quiero dirigir las últimas líneas
E
d e esta meditación para que, después de ayudarnos con tú interE
c
esión en la peregrinación de esta vida; en aquel último Gethsern aní, que todos, como castigo del pecado tenemos que sufrir;
E
s eas tú el angel, que ofreciéndonos el cáliz, venga a confortarnos
Y fortalecernos, dándonos tu bendita mano para llevarnos E
h asta.., las puertas del Cielo...
ELVIRA CALVO, Cofrade de la Merced.
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El día 17 de este mes celebra la Iglesia la festividad de la
Beata Mariana de Jesús, esclarecida virgen Mercedaria, gloria de
su Orden y de la ciudad de Madrid, que cuenta con tantas otras
de bien distinta naturaleza
Nació para Dios. El mundo, demonio y carne no pudieron
manchar la pureza de su alma, que subió a los cielos con la estola de la inocencia bautismal.
De niña, ya ofreció su virginidad a Jesús; de joven, se abrazó
con la vida religiosa y en la edad madura, después de una vida
de maceraciones y oración, vivió en una continua comunicación
con Dios.
Con su muerte, acaecida el ario 1624, no desapareció la fragancia de sus virtudes, y su alma cándida como el hábito que
había vestido durante muchos arios, no entró sola en las man
siones de la felicidad sin fin, pues muchas otras constituyéronle
celestial séquito, ya que, edificadas por su vida santa, emularon
sus virtudes e imitaron su ejemplo, mereciendo acompañarla en
los premios del celestial Esposo.
II
El día 20 celebramos la Resurrección del Señor. Día sublime
sobre toda ponderación, pues en él recibió la doctrina asombrosa de Cristo, el sello de su absoluta veracidad.
Si Jesús no resucitó, dice San Pablo, es vana nuestra fe. Pero
como resucitó efectivamente, triunfando victor ioso de sus ene
migos y de la misma muerte, con ello concebimos la absoluta
esperanza de que también nosotros resucitaremos algún día.
Acompañemos a Cristo por el camino de la cruz, y algún
día seremos compañeros suyos en el grandioso triunfo de 511
Resurrección Gloriosa.
El día 27 es la festividad de San Pedro Armengol, Mártir
Me rcedario.
Un patíbulo lo hizo santo.
Su vida tiene episodios sumamente simpáticos e interesantes.
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Ig lIm is iumm i lis ym omom m omm immumm oom umm o m mium mim mia m mi gim mum m i.
Nos agradan los santos de vida novelesca.
Ala Magdalena, llorando postrada a los pies del Salvador,
¡de qué buena gana le perdonamos su vida pasada de pecadoral...
San Pablo, herido por la gracia y clamando a Jesús: «Señor,
¿qué queréis que haga?», ya no es a nuestros ojos el cruel perseguidor de los discípulos de Cristo; y hasta recordamos sus
tristes hazañas por odio al nombre de Cristo, ron no sé qué de
simpatía y deleite.
La vida crapulosa de Augustino, contada por él mismo en
sus admirables «Confesiones», no consigue que miremos con repulsión la figura egregia del mayor de los Padres de la Iglesia;
hasta parece que sus pasados crímenes añaden algo de interesante a sus arios de esclarecido santo.
Pues la figura de San Pedro Armengol no es menos bella a
nuestros ojos, por haber sido bandolero y asesino.
Lo vemos con la librea mercedaria, cándida como la pureza,
y no nos repugna, pues sus virtudes de hoy nos hacen olvidar
facilmente sus maldades de ayer. Y cuando lo vemos colgado de
un árbol por amor de Cristo y sostenido en el espacio por la
misma Reina de los Angeles, el capitán de ladrones de los Pirineos, nos parece un angel de candor, y sus pasados crímenes
solo sirven para hacer más interesante su figura icle esclarecido
santo. Quién se acuerda de los crímenes del ;Buen Ladrón,
cuando le oímos decir a Jesús desde lo alto de la cruz «acuérdate de mí cuando estuvieres en tú Reino?»
Sólo tú, Jesús, eres capaz de justifica,' al impío; sólo tú puedes convertir en ángel a un malvado; sólo tú capaz de hacer un
cielo de un antro de dolor.
Fr. Serapio González Gallego.
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DISCURSO PRONUNCIADO
POR
D. Antonio N. Ca8tro
Cura Párroco de Cedeira
en la lestiuidad de 1Yue6tro Santo Padre
Antes de empezar, deseo hacer una pequeña advertencia. Al
verme aquí dando fin a la novena de 5an Pedro Nolasco, tan
elocuentemente predicada por el dignísimo Rector de este Colegio, y por el celosísimo y erudito P. Moderador de la Tercera
Ordent.', de la Merced, sentiría la misma impresión que a mí me
D. Antonio María Castro
Cura Párroco de
Cedeira
causa ver los primorosos mosáicos, elegantes calados y artísticos
E artesonados de la Alhambra, rematados por la antiestética teja
de barro. Cómo, comprendiéndolo así, me direis vosotros, os
E vengo a causar esta molestia? Los fueros de la amistad me compelieron a servir de sombra en tan luminoso cuadro; y, además,
E bueno es que respiréis alguna vez los ácres efluvios del campo,
E para que mejor apreciéis el suave aroma de los vergeles que el
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Señor pone tan al alcance de vuestra mano; la sencilla oratoria
de un cura de aldea avalorará la doctrina, que diariamente se os
sirve, ataviada con las régias galas de una elocuencia nada
Común.
Yunto a los nos de Babilonia nos sentamos para llorar, y en
Caldea vertimos un mar de lagrimas, acordándonoss de ti, ¡oh
Sión amable!
•
Y allí nos demandaron los que nos llevaron cautivos, palabras E
de canciones; y los que nos aprisionaron decían: cantádnos ¿os
h imnos de Sión.
Cómo cantaremos cánticos del Señor en tierra extraña? Col- E
earemos de los sauces nuestras armas.
Sí me olvidare de ti, oh Sión, al olvido sea dada mi‘diestra; E
Pegada sea a las fauces mi lengua si no me acordare de tí.
Concisa, pero expresiva descripción es ésta de los horrores
de la esclavitud.
eQué es el desterrado? Nosotros los que hemos tenido la E
dicha de nacer en este bello rincón del mundo, en esta hermosís ima Galicia, lo sabemos muy bien, pues, seguramente, nadie
C omo el gallego siente la ausencia de la patria amada. De mí sé
d ecir que cuantas veces me sorprendió el atardecer en tierra
rel ativamente extraña, y fueron pocas por mi dicha, al ver po- E
n erse el sol en aquellas extensas llanuras de Castilla, sentí una E
tan honda pena que, desbordando del corazón subió hasta los E
'Dios. Será a mí sólo a quien tal suceda? Rosalía Castro, el sentir E
h umano personificado, dice lo mismo en sentida estrofa.
«Danlle extrañeza os cantares,
E
Danlle de chorar deseyos,
C' os ollos de bágoas cheyos
E
Pensa nos nativos lares.
Que n' hay mais tristes pesares,
E
Mais negra melanconía
Qu' a qu' entre extraños se cría.»
Y el desterrado no hizo aún más que pisar los dinteles de la
esc lavitud. En el rincón que haya escogido para llorar la ausen
ei a de la patria amada, puede levantar sus manos a su Dios, E
Puede estrechar contra su seno a la esposa querida, a los bien E
ido latrados hijos; los dos más grandes amores del corazón
hu mano, altar y hogar, siguen dándole calor y vida, tiene expedi ta la comunicación con el Dios báculo y con la familia paño
de l ágrimas, no está solo.
Aquellos infelices que se sentaron al pie de los sáuces, para
au mentar con sus lágrimas el caudal del Eufrates, gozaban de
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una relativa libertad. Es verdad que no podían ir anualmente a
rendir el homenaje de su adoración en la amable Sión a la ma
E gestad de Dios, encerrada, por decirlo así, en el suntuoso temE plo salomónico, pero conservaban su altar, su culto y sus sace rE dotes; es verdad que no asentaban sus moradas en las poéticas e
E riberas del diamantino Genezaret, o cabo el sacro Jordán, pero e
: los hermosos nos de la Caldea regaban sus amenos huertos; e s
!
E
: verdad que perdieran una tierra que manaba leche y miel, qu e e.
E no recreaban su vista mirando a las viñas de Engadhí y a los !
cedros del Líbano, que la suave brisa, que tomaba su frescura 5
E jugueteando con los naranjos, los olivos y con los narcisos de .1
E Sarón, ,sio daba descanso a sus fatigados miembros, pero laMe- 5
E
sopotamia, con su claro y hermoso cielo y con su suelo fértil, r o 5
E
: les negaba avara sus frutos; y, lo que más valía, cuando después
E- del cotidiano trabajo se retiraban al interior del hogar, templo y
E patria, podían, aunque solo fuera por breves horas, reconstituir e;
E la felicidad perdida. Siempre, pues, que repaso este salmo la:
: mentación, no va mi pensamiento a la Caldea; más cerca se
E queda; mi pensamiento compasivo acompaña a los cristianos
: cautivos en las mazmorras de Córdoba, Granada y Jaén y en las
E cárceles de Marruecos; cuando medito este salmo en el Oficio ;
E
: divino, viene siempre a mi memoria un pasaje de nuestra histo- ee
E na patria, que os recordaré, pues no resisto la tentación de ha- e
E blaros por medio de ejemplos, cual suelo hacerlo a mis bueno s ."
E.- y sencillos feligreses.
Así" como al mágico grito de «Dios lo quiere» congregóse E n
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Europa
legión inmensa, que cruzando su pecho con la enseña
E
santa,
marchó
al Oriente a rescatar con el valor de su brazo y a
1..
: purificar con su cristiana sangre la patria del Redentor, así tarn E bién, al ver la religión ultrajada, y la patria hollada, reuniéroru e
E cabo el Auseba los maltrechos restos del ejército dcrrotado o , 1
:
E mejor, traicionado en las orillas del Guadalete, para emprend er .
: la rcconquista de la patria, que para suya escogió a orillas del
E- Ebro la Virgen María; esa gloriosa epopeya compuesta de innu:: merables páginas escritas una a una, y con fatigoso paso, duran:: te ocho siglos con generosa sangre española; fueron aquellos
: cruzados hispanos, más fuertes que las rocas que les sirvieron
E de refugio y trincheras, haciendo retroceder hacia el Africa
:
: aquel devastador océano. Ya nuestros reyes se llamaban de
E León, ya nuestras cortes balbucían, ya dictábamos oracione s a 1
E la cristiandad toda, cuando un nuevo re flujo de aquel mar redt
:
: jo a León a sus primitivos límites, haciendo que la inmun da e
.1 planta del muslín hollara regiones hasta entonces inmaculadab. e
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— 329 —
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E
¡Ahl el terrible Almanzar no tenía entrañas, el feroz caudillo
moro no conoce la compasión, y por eso los que sucumbieron
víctimas de la cimitarra, fueron a pagar en la esclavitud su religioso y patriótico empeño, y columnas de infelices, en las que E
se veían mezclados el joven y el anciano, el varón y la mujer, el
noble y el plebeyo, el sacerdote y el seglar, bajo el látigo del
E musulmán, emprendieron el camino de la esclavitud. Yo veo en
espíritu las lágrimas de aquellos infelices, yo oigo sus gemidos,
y aquí sí que puede decirse uhtlatus, cuando el padre es arrebatado al amor de sus hijos, cuando el hijo pierde su libertad, que
E le hacía dueño de su sudor, único alimento de sus achacosos
padres; yo siento el grito desgarrador de aquel pueblo, al ver
: derruidos sus templos, arrasadas sus mieses, humeantes sus
E hogares, y mi corazón se llena de angustia, como de angustia se
llena cuando se pone en contacto con las más dolorosas llagas
E de la humanidad; pero esta angustia crece, crece, hasta convertirse en dogal, cuando veo cargar sobre los fatigados hombros
E de aquellos valerosos guerreros de la cruz las campanas, heralgdos hasta hoy de sus alegrías y victorias, y broncínea lengua del
E culto tan caro al católico corazón y, desde ahora, testigos de su
E derrota y humillación y trofeo de la enemiga aljama. ¡Dichosos
E los que tendidos quedaron en el campo de la batalla! ¡Felices
E- los que en la penosa senda, que al cautiverio los conducía, paE garon el necesario tributo a la muerte! ¡Bienaventurados los que
E a su llegada compraron con su cristiana sangre la gloriosa coroE na de triunfadores mártires! A la vista de los que con vida
: quedaron, como a la de los desgraciados que en sus continuas
E correrías cautivaban los moros, solo dos fatídicas perspectivas
se presentaban, o una muerte lenta, consumidos por trabajos,
: que diríamos mitológicos sinó los testificara la historia con sus
1: verídicas páginas, o la muerte del alma, al convertirse en apósE tatas de su Cristo; es decir, o cadenas del tiempo o cadenas por
E eternidades. Qué exagero?
Monseñor Gaume trae la historia de un cautivo, rescatado
E después de treinta arios de cautividad en las mazmorras de
E. Marruecos: Quitáronnos (es el mismo esclavo el que habla) qui E táronnos los vestidos que llevábamos, cambiándolos por una e s E pecie de zannarrinos y atáronnos de dos en dos a una pesada
: cadena, cargados así de hierro condujéronnos al presidio, un
prolongadísimo establo capaz para dos mil esclavos. Por toda
E luz teníamos la escasa que por unas rejas entraba, a través de
las que veíamos asomar por las noches fieras hambrientas de
E carne humana, que mezclaban su ronco rugido con la destern:
E
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..7.,sisivemomi 111 1111111111111111111111111111111111111111111111111111111111111111111iloggligli
— 330 —
Piada voz de los centinelas, que no cesaban de clamar: «cuidado E
CO n los perros cristianos».
En este lugar horrendo nos sujetaron a una gruesa cadena, Eque de la pared pendía. Diéronnos una poca paja por lecho y E
una piedra por cabezal, con amplia facultad de dormirnos, si los
n egros pensamientos que nos afligían, y la multitud de bichos
que nos rodeaban, nos lo permitieran. A la mañana, cuando nos
lev antábamos, encontrábamos nuestro cuerpo cubierto de negras
pú stulas, y rodeados de otros dos mil, que como nosotros llorab an su desventura. No mirando nuestro dolor y quebranto, condu ciánnos al trabajo, arrastrando nuestra pesada cadena, y
arr ojándonos al paso tres mazorcas de maiz, único mísero alim ento cotidiano. Después de tirar como bueyes de un arado en
co mpañía de otros doce compañeros, magullados a palos y rencli dos de cansancio, llevábannos nuevamente al presidio, y allí esP er ábamos que el sol alumbrase para nosotros otro día de dura
cau tividad. Si la sed, producida por la intensa fiebre propia de
nu estra miseria, nos obligaba a beber de la fétida agua, que
c orría por el centro de nuestro presidio, ¡horror causa recordar10 1 nuestros únicos vasos eran los cráneos de otros compañeros
más afortunados, pues la muerte los redimiera antes que a nosOtro s.» Bien podía decir el esclavo con el poeta:
,
«Todo llora a la par, lloran los nos,
las selvas, los peñascos, las fontanas;
solo veo a mis pies tajos sombríos,
soledades, tinieblas y vacíos,
y sepulcros por todas las ventanas.»
Esta era la misma suerte, perdonad, dije mal, camino llevaba E
5 e e quivocarme, esta e a la común desgracia que afligía a los E
mnu merables cautivos cristianos. Comprendéis ahora porqué m
Compasión no acompaña a los cautivos de Babilonia y sí a los- ":
eCl avos de la feroz y sensual media luna? Una excepción tenía E
est a regla: si el cautivo titubeaba en su fe, sí, nuevo Judas, ven- E
día- su religión por los treinta miserables dineros de los bienes ;F:
c, ad ucos y perecederos, entonces caían sus cadenas, descorríanse
'Os c errojos y abriá.nseles las puertas del poder y el favor, para
u par el puesto de Giafar renegado. ¡Pobres esclavos éstos! más
' Ign os son de lástima que los primeros, pues cambian su primo- E
gen itura divina por un miserable plato de lentejas.
Pr edicaba r uestro adorable Salvador consoladoras y redenoras doctrinas en los frondosos valles de la Galilea y las mul° til des, ávidas de saciar su sed con aquellas aguas de vida E
etern a que fluían a raudales de los lábios del Señor, fuente de =
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aguas vivas, le seguían, sin darse cuenta ni del lugar ni del
E tiempo; y tan en tanto tenían aquellos sencillos el descanso ya lieiE alimento del alma, y tan en poco tenían el descanso y el
E mento del cuerpo, que, sin apercibirse le siguieron del valle a la
montaña, y tres días solo se alimentaron con la palabra de Dios,
E que es vida de las almas. Entonces fué cuando la misericordia de
Cristo subió del corazón y salió por los divinos lábios en esta
- compasiva exclamación: «misereer super turbam», y cinco mil
E
E bocas encontraron milagroso alimento, justo premio a su afán en
▪ buscar el alimento del alma, sin preocuparse de lo que es solo
añadidura.
10h Señorl Turba inmensa forma el ejército de tus cruzados
en el siglo trece: todo te lo ofrer daron, hasta su propia vida; de
ellos pudo afirmar con justicia el poetw
«Eran pobres y sufridos, austeros y cabales,
los señores prudentes, los vasallos leales,
sencillas las costumbres, las leyes liberales,
que el común trabajo a todos hizo iguales.
Nunca se abandonaron a la contraria suerte,
que antes bien la enmendaron con pulso diestro y fuerl e,
ni conocieron nunca nuestra pereza inerte,
ni el ansia de los goces, ui el miedo a la muerte.»
Para esta medioeval sociedad, glorioso campamento donde
ondeaba victoriosa la Cruz, tendrás una chispa de tu miser i
lettal u m e l
d escalzo o de rodillas hasta el Santuario de la Virgen de
Chamorro.
Este está consagrado a la Virgen de su nombre, bajo la
ad vocación de la Encarnación.
El santuario se compone, de un recinto amurallado, que enc ierra la Ermita y Sacristía, y el extenso atrio, en el que se
e leva un crucero, con la Imagen del Divino Salvador, que parec e bendecir y dominar tod o lo que la vista alcanza.
Fuera del recinto amurallado, existe en ruinas un caserón
que tal vez haya sido hospedería de peregrinos, y a pocos pasos
e n estrecha vereda, cncontrAréis la fuente milagrosa, que según
r ezan viejas tradiciones, ha curado a varios enfermos del cuerpo
Y del alma.
Para entrar en la Ermita, teneis que pasar por cubiertp pórtico, enclavado en las rocas, con ámplio mirador, desde el cual
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-co,dia?
(Se continuará).
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Saliendo por la Puerta de Canido, os encontráis con ancha
carretera, que a pocos metros de la citada Puerta, se divide en
dos. La del frente os lleva a Cedeira y la de la izquierda a Sera n
la de Serantellos, pasaréis primero por Xoane,-telos.Tnad
donde la carretera desciende hasta el Puente de Aneiros, donde
vuelve a dejar a la izquierda un ramal que lleva a la Caban a Y
otro al frente que va a Cobas.
e.
-eguid la de Cobas y veréis al frente, elevarse un monl
na
Cerca de su cumbre, como blanca gaviota, posada sobre
roca, se asienta la Ermita de Chamorro.
El camino que tomais al llegar al cruce de las carreteras de
Cobas y Viladóniga, avanza monte arriba; formado de pedru5cos y rocas, que la Providencia acumuló en aquella Corredoil
para fatiga y penitencia del peregrino, que hizo voto de subir
: • mimo
limmuummummiummilmliiIIIIImmiummiliiiimiimmiammussuog
Ea Beata
Mariana de Jesús
Conte mpláis el más hermoso panorama, que los nacidos vieron.
La Ermita es rectangular, construida también sobre peñascos; en ella se venera a la Virgcn de Chamorro, la Virgencita
de los ferrolanos, que sostiene sobre el pecho a Su Divino
bi N umerosos exvotos adornan el Camarino de la Madre de
Os, velas de cera, figuritas, cordones de Guardia Marina, etc.
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Del techo pende un buque de vela, promesa de algunos navegantes, que en momentos de peligro acudieron a la Virgen de
Chamorro, en súplica que fué atendida.
En las paredes, entre varios cuadros y retratos, hay uno del
destroyer «Audaz», ofrenda de sus tripulantes, cuando en su
primer viaje, recién salido de los astilleros de Glasgow, un fuerte golpe de mar torció su proa, cual si fuese de papel, poniendo
en grave peligro la vida de sus tripulantes.
Por la parte de atrás del altar mayor, está la Sacristía, y
antes, estrecha escalerilla os lleva hasta la Virgen y podeis besar su manto.
Antes de la puerta de entrada al Santuario y según venís del
atrio, existe un recinto que encierra una peña rajada, por la que
los peregrinos se esfuerzan en ver la imagen de la Virgen.
Cuenta la tradición, que en aquella Peña fué donde una Po'
torcita, que estaba en el monte apacentando su ganado, se refugió un día de tormenta, para librarse del agua que a torrentes
vomitaban los cielos.
Un rayó desgajó la roca, sin causar daño alguno a la pastora, que al mirar asombrada el efecto del rayo en la piedra, vió
en la abertura que la chispa había hecho, la imagen de la Virgen,
que con ojos de amor y sonrisa celestial, parecía indicar a la
Pastora su divina protección.
La Pastora voló a avisar al cura, la nueva corrió como reguero de pólvora por todo el Valle, y los habitantes de la coma rca decidieron la construcción del Santuario, para el cual, ignor ado artífice, talló la imagen que hoy allí se venera, bajo las ind i
dió la Pastorcita de su celestial visión. Tomaron-caionesqu
bajo su patronato al Santuario, los Señores de Valerio, familia
antigua y noble de la localidad y cuyo solar está al pie del
monte.
Y desde entonces la veneración de los ferrolanos a la Virgen
de Chamorro, es tan grande, que en sus momentos de angustia
y peligro acude a sus labios, una súplica para la Virgen
querida.
¡Virgen de Chamorro, amparadmel
Desde el pórtico, que como antes dije, está enclavado sobre
las rocas con amplio mirador, que mira al medio día, domináis
toda la comarca ferrolana.
A la izquierda, se extiende el hermoso valle de Mandiá, que
se prolonga hacia el N. E., hasta el valle del Val. Mandiá, Molía°
de Viento, Baltar, residencia de los Reverendos Hijos de María'
antiguo palacio de los Señores de Baltar y Bebte, hoy Duques
lIlllllIlIl musuummumimmortammimmummilmummumummiumflummummiglogiggli
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334 —
Dommummuniummuummmummiummummemmummuummumummemelestimimmilm..
de la Conquista, Valdetires, y al fondo el amplio arenal de la
Frouxeira, y cerrando el contorno, los montes de Anca y Marrascón.
Al frente veréis Ferrol, con sus arsenales y astilleros, y
detrás su hermosa bahía, el «Portus magnus Artabromu», de los
romanos, cuyas aguas se extienden hasta Jubia pasando por
Neda, la antigua colonia griega y que debe su nombre al Rio
Neda, que separa los territorios de Messenia y Arcadín en el
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Peloponeso, y cuyo nombre se hizo célebre en las guerras de
Edad heroica.
En la orilla Sur de la ría, veréis extendidos, cual bando de
blancas palomas, los caseríos de Sillobre, Fene, Perlío, Barallobre, Manirios y el Seijo. orno sirviendo de telón de fondo a este
panorama, el Monte Breamo, en cuya cumbre se encuentra una
Ermita que perteneció a un castillo de Caballeros de la Orden
del Templo, destruido por los habitantes de la Villa de Puentedeume, capitaneados por Bernardo Pérez de Traba, Freue de
Andrade, hidalgo, que molesto por los tributos que imponían
los Templarios, sublevó a la plebe y atacó al Castillo venciendo
a Sus defensores y reduciendo a cenizas la fortaleza.
Ala izquierda, la Torre de Andrade, que edificó Hernán Pérez de Andrade, privado de Enrique de rastamara, que al vencer en Montiel a su hermano D. Pedro, cedió a su privado el
feudo y Señorío de Puentedeume y de todas las villas y lugares
que la vista alcanzase desde la famosa torre.
Si mira is a la derecha y al pie del monte de Chamorro, se
encuentra el fértil Valle de Viladóniga, y en su centro su famoso
astro, que con los de Santa María de Castro, Anca, D'ene, Maniños, Iranza y Ares, constituían la defensa romana de esta na.
En ellos residía la guarnición romana, que en los ratos de descanso dei servicio militar, enseriaban a los naturales del país a
cultivar Ja tierra.
Estos Castros servían para detener un desembarco de los
P iratas del Norte e impedir que atracasen los convoyes, que los
r omanos transportaban por las carreteras o calzadas que en
Portus Brigantium (Betanzos) se cruzaban y que unían Lugo con
Braga y La Coruña, y también para defenderse de los ataques
de los feroces Artabros que poblaban el país, desde Finisterre
hasta Ortegal.
Siguiendo hacia la .entrada de la na, vereis la Villa de la
Graña extendida por e/ Monte Brión en forma de Y griega.
Cuna de los Astilleros Ferrolanos; pues cuando Felipe V encargó a D. Jorge Juan, el buscar en los puertos gallegos un lugar
'11.111111111111111111111101111111111103111111111101111111118111111111111111RIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIIMAIIIIIIIIIIIii:
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adecuado para la instalación f 'e una factoría naval, habiéndole
parecido bueno el Lugar de Esteiro, comprendido entre la Villa
del Ferrol y la aldea de Reicimíl, así se lo comunicó al monarca;
• pero los de Pontevedra trabajaban sin cesar, en la Corte, para
llevarse la factoría a la Ria de Marín, y tal vez lo hubiesen con: seguido, si un antepasado del que estas líneas escribe, no hubieE se cedido sus posesiones de la Utraria, para que en ellas se co:
menzase sin pérdida de tiempo, la construcción de buques, sa: liendo los primeros navíos de la Graria el ario 1753.
▪
Enfrente de la Graria está Mugardos, la villa de pescadores.
colonia catalana, que vino a establecer en élla, la industria de la
salazón.
▪
Sobre la Villa de Mugardos se eleva el Monte Faro, guarne•- cido de baterías ara la defensa de la na, y en su medianía, el
; Convento, hoy cuartel que perteneció a la Orden Franciscana.
Vuestra vista se emboba de ver tanta belleza, pero como
• nada es eterno en esta vida, y algo más que la contemplación
• de la Naturaleza, os llama y obliga, con harto sentimiento teneis
• que abandonar el mirador y descender la pedregosa senda, no
• sin antes dirigir la vista al Santuario y exclamar lleno de fe.
▪
¡Virgen de Chamorro, amparadmel
Angel Suances.
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Terciario de la Merced
Febrero 1919.
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La capillita del Colegio de los PP. Mercedarios, que a nues
• tras miradas humanas aparece tan pequeña, tan pobre y tan
humilde: y lo es en verdad para morada de lo más grande que
: existe en la tierra, contemplada con los ojos de la fe en la mañana del martes 25 de Febrero se nos presenta tan grande, tan
E suntuosa y tan conmovedoramente bella, como las más grandioE sas catedrales y magníficas basílicas que el arte y la fe cristiana
• levantan, para ofrendarla ä Aquél a quien no pueden contener
: los más grandes monumentos y palacios de la tierra.
Pos palabras para describirla, que pocas bastan, porque en
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lo que parecía elegante oratorio, no había mármoles, bronces ni
E lujosa escalinata para acercarse y subir a su única joya; pero ésta
E que es su lindo altar, estaba esplendorosa de luces y flores, co-
El X. R. P. Miguel López
Provincial de la Merced de Castilla
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locadas con el gusto artístico que distingue a las camareras, de
la que tenía en sus brazos, a El que llevó en su seno virginal; e
iba a ofrecerlo a dos lirios de pureza, como el tabernáculo más
digno de recibirlo.
Cubría la capillita una hermosa alfombra, y a lo largo dos
hileras de bancos, que estaban destinados a 16 copitos de inmaculada nieve; ángeles de la tierra que ,harían sonreir a los del
Cielo, que iban a ser el cortejo, la corte de honor de honor de
las dos desposadas del Niño Jesús.
El doble objeto de la conmovedora ceremonia, era celebrar
el día más grande de la vida de una familia cristiana: la primera
comunión de dos ángeles, y a la vez rendir un tributo de cariño
y recuerdo a la fé de un abuelo de las dos, que, por circunstancias que no puedo precisar, la tenía fervorosísima en el Niño
Jesús de Praga.
Sobre esto, y tomando por tema el hermoso pasaje del
Ev*angelio, «la Samaritana», dirigió una c( nmovedora plática el
P. Gaite, el ilustrado Rector del colegio; edificando, como siempre, al auditorio con su palabra, vibrante de amor eucarístico, y
procurando conmover aquellos inocentes corazones, para los
que, momentos después, abriría el Sagrado Tabernáculo. Mientras.., allí estaba el Divino Jesús... el hijo de la Virgen... a la
derecha de su bendita Madre esperando... Qué esperaba?... Medicémoslo... Divino prisionero de aquel Sagrario.., esperaba impaciente que se abriera su puerta para salir, latiendo de gozo su
corazón de... Niño Divino, a tomar posesión de dos purísimas
flores, que iban a abrir sus corolas para recibirlo... Dos irisadas perlas, que abriendo sus conchas para encerrarlo, se acercaban al altar palpitando de emoción y de fervoroso recogimiento,
llevado a sus almas por las enseñanzas que en aquellos días les
habría dado su celoso director, y habrían recibido también de
sus cristianas madres; que, a la vez que sus padres fervorosos
creyentes, iban a recibir a Dios al lado de sus hijas... porque las
E- niñitas eran dos... pero el prodigio era uno... y de una plurali:: dad tan extensa.., tan divinamente misericordiosa.., que de él
E participamos a la v z, aquellas dos inocentes almas que jamás
E habían ofendido a Dios, y los qué, ofendiéndole tanto, perdona
E dos por El, íbamos a recibirle también en nuestros pechos,
E uniéndonos todos... en aquella.., augusta primera comunión.
¡Ahl qué sublime misión la de las esposas y madres! ¡Qué
: labor tan profundamente cristiana! A ellas se deben tantas maE nifestaciones de amor y fe como la que acabamos de presenciar.
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: La inocencia ofreciendo sus primicias, sus delicadas flores de pu— 3 38 —
4111111181111111IIIIII81118811101111111111118111128151141111118111111111111111111INUIMIIIMIIIIIIIIIRO
reza y candor, y la inteligencia ilustrada y consciente de su fe,
rindiéndola posternada para acercarse a recibir a su Dios. A
esposas y madres dije, porque los hombres, aún creyentes y
cristianos como de abolengo lo tienen casi todos los que nos
rodean, en el tráfago de la vida, y dedicados a estudios necesarios para la posición que han de ocupar en el mundo, no pudindo ocuparse de los que conducen al c
onocimiento profundo
de la Religión, serían más tibios y más vacilantes sin la i.lfluencia de la mujer, que con exquisita prudencia, sin exigencias ni
int emperancias, van labrando con el delicado buril del cariño los
corazones de los que aman, y atrayéndolos con dulzura y paciencia, producen la felicidad de los hogares cristianos, esa paz,
esa dicha de las familias, que será eterna, porque fundada acá
abajo, perdurará en el Cielo.
C ontribuyeron a dar más solemnidad a tan fervoroso acto
las distinguidas artistas, que durante la misa cantaron con exquisito gusto plegarias y Ave María, dirigidas por la misma disc retísima batuta que ensayó el precioso coro de querubines, que
tan bien concertado y con tan afinadas vocecitas de ángeles,
cantó el hermoso himno del Niño Jesús de Praga
AT. qué decir de ta fiesta infantil; de aquella desbordante
alegría de pájaros que cantan y gorjean, disfrutando de los ino
c eintes goces, reservados sólo a esa dichosa edad de la vida? Los
lecto r es de estas páginas, en el fotograbado verán el cuadro
c ompleto; porque e,e grupo albo y lindo, lo componen las cort esanas de las dos reinas de la fiesta, que las obsequiaron con
e spléndido desayuno, cuyas bien dispuestas mesas semejaban
m acizos de un hermoso jardín, rodeados de blancos jazmines...
la humanidad en capullo, en aquella., antesala del cielo.
Elvira Calvo.
Cofrade de la Merced
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Ya, señores, los límites rebasa, (')
sobre manera"grande es el contento,
que, inundando la casa solariega
del noble Don Arnaldo a todo el pueblo
de La Guardia del& Prats se difundía
al saber la noticia del suceso.
Es que sin duda del recién nacido
ya se presienten los gloriosos hechos
que darán nuevo brillo a los blasones
de su ilustre familia de abolengo.
Más en medio de aquellos regocijos
vino a menguar un' poco su contento
el santo Fray Bernardo de Corvera,
quien, al mirar del gozo el tierno objeto
«A e'ste niño un patíbulo hará santo'»
dijo, puestos sus ojos en el cielo.
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Trece lustros, señores, ya pasaron,
después de aquel profético suceso,
ni siquiera memoria de ello había
y él estaba en la mente del Eterno
¿queréis vosotros ver, cómo se cumple?
Pues bien, seguidme sin perder momento,
cruzad r.conmigo:elZmar Mediterráneo.
arriba-I pronto de Bujía al puerto
y, atravesando calles y plazuelas,
la colina subid sin cieteneros.
Más.. ¡ay! Alto: parad, ni un solo paso...
¡Imponente y sombrío es el aspecto
del cuadro que se ofrece a nuestra vista...
de noche.., a tal hora... desde lejos...!
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el P. Gaite rodeado de las niñas que hicieron la p rimera
comunión
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(i) Poesía lekla en una velada literario, en la que obtuvo mención
honorífica,
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Entre negros crespones que permiten
por sus rugas salir tenues destellos
se divisa en confuso una figura
humana al parecer, que por el cuello
de la rama de un árbol suspendida
hace mover con soplo fuerte el viento.
Horroroso, es el cuadro; mas, sigamos,
quizá serán fantasmas lo que vemos:
cual sucede al nocturno caminante
a quien mil monstruos hace ver el miedo.
Pero nó, no es fantasma, es realidad,
más triste aún que vista desde lejos.
San Pedro Artnengol
Es ¡ay! un religioso mercedario
con su blanca librea en que está envuelto,
maniatado. y en el dogal, de un árbol
yace pendiente su cadáver yerto y carnívoras aves le rodean
y no se atreven a tocar su cuerpo.
Más... miradlo; su rostro se esclarece
y en torno de él vivísimos destellos
hacen lucir la densa noche obscura
iluminando nuestros ojos ciegos.
Una mujer vestida de otro sol,
que resplandece más que el igneo Febo,
es el foco de aquellos resplandores
y sostiene ¡oh, rasgo más que bellol
con sus manos al santo Religioso
que nosotros creíamos ya muerto.
Es la siempre solícita María,
que ha volado en auxilio de su siervo,
y legiones de angélicos espíritus
que con sus arpas y áureos instrumentos
acompañan gozosos a su Reina,
entonando melódicos concentos.
Pero, escuchad, también a nuestro heroe
que se desata en coloquios tiernos
con su libertadora. «Por qué?» (dice)
o cuándo merecí yo tal consuelo
de vuestra larga y bondadosa mano?
I\To fuí yo criminal y bandolero?
Pues bien, tal debe ser mi recompensa:
una horca en que expiar al cielo
pueda, Señora, mis inmensos crímenes;
dejadme, pues, morir porque me muero
por no haber muerto ya: por Dios soltadme,
abandonando en el dogal mi cuerpo.
¡Qué! ¿no bastan, Señora, las mercedes,
que, cuando fui bandido me habéis hecho,
y después en tu santa Religión,
sin añadir ahora este consuelo?
¡Vos si que sois, Señora, mi patíbulo
pues me hacéis padecer porque no muero...!
¡Ahora que lograra el mejor modo
para pagar mis crímenes sin cuento!...
Sin embargo de Dios a los juicios
con todo rendimiento me someto»
Así se le pasaron ocho días
más que muerto vividos en el cielo.
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Con razón decía, pues, a sus Hermanos
al regresar de vuelta a su convento;
«Yo no creo jamás haber vivido ni un día de mi vida en todo el tiempo,
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excepto aquellos pocos dichosísimos
en que feliz colgado de un madero,
por muerto me tenía todo el mundo
cuando yo me contaba ya en el Cielo.»
Fr. Jesús Otero Pombar.
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II. La iglesia de Santa Eulalia, en la ciudad de Córdoba,
con casas, tierras, viñas y todas sus pertenencias.
III y IV. Las casas, tierras, viñas y posesiones que tenéis en las villas llamadas vulgarmente Mula, Almazán,
E Arriona y Beter. (1)
V. Las casas, tierras y ¡irias que tenéis en la ciudad de
Cuenca.
Tenemos, pues, en los dieciocho arios que van de 12.45 a
1263 cinco funciones ciertas en Castilla ; las de Sevilla y Cór:
doba, con iglesia y casa propias, y las tres restantes con casas,
tierras, etc. El origen regio de la fundación de Sevilla está
fuera
de duda. Córdoba había sido conquistada en 1236 y di!
vididas sus casas y tierras a los pobladores cristianos. "Et
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tan grant es el abondo de la cipdat de Córdova et el solaz
della et la plantia, que luego 'las yentes, oido el pregon desta
cipdat vinieron de todas las partes de Espanna pobladores
a morar et a poblar, et corrieron allí, assi como dice la esto: na,
corno a bordas de rey, et tantos eran los que venien, que
fallecieron casas a los pobladores et non pobladores a las
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casas; ca mas eran los moradores que non las casas." (2)
Siendo esto así, no parece probable que al llegar los merce- darios a Córdoba, unos doce arios más tarde, recibieran naE
da directamente del Reparto, aunque el Rey tendría sin duda
algo que darles todavía. El o alguno de los conquistadores
enriquecidos nuevamente con el botín de Sevilla, debieron
suministrar la base de la fundación mercedaria.
:".
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(1) Así en el Bulario, donde los nombres de las dos primeras poblaciones no ofrecen
duda; no así los de las dos postreras, que se repiten en otras bulas posteriores. No he visto los
originales (que tampoco serían decisivos), pero sospecho que se trata de «Arjona» y ( \Tejer»,
poblaciones importantes entonces y ahora en las provincias de Jaén y Cddiz, respectivamente,
que en documentos de la Edad Media aparecen escritas «Ariona» y «Beier». Como estas fundaciones, caso de haber existido, no se mencionan ya a principios del siglo xiv (lo mismo que la
de Mula), prescindiré de ellas en esta reseña. No todas las casas legadas a la Orden se destinaban a la fundacin de conventos.
(2) Historia de España que manclú componer Alfonso el Sabio. Edic. Menéndez Pidal,
en la Nueva Biblioteca de AA. Españoles, pag. 734.
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Grupo de 'Terciarias del Coro de la Beata Mariana de Jesús
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En la Biblioteca Nacional de Madrid hay varios tomos
( t) de noticias recogidas en los siglos XVI y XVIII sobre E
E el origen de los diversos conventos, pero en orden a estas E
: primitivas fundaciones estaban entonces tan a obscuras como
nosotros. El nombre de Santa Eulalia con que aparecen del. signadas las dos primeras iglesias mercedarias en Castilla,
o, sean las de Sevilla y Córdoba, no prueba, a mi entender,
la santa Mártir barcelonesa fuera su titular, sino que el
E vulgo las designaba con ese nombre por ser de los fraiE les de Santa Olalla, Como sucedía en la misma Barcelona,
donde, sin embargo, al construir iglesia; nueva, San Pedro
E Nolasco le dió ya por titular a la Santísima Virgen. Por lo
E menos es cierto que en 1356, o sea un siglo más tarde, el Le::: gado en Castilla Cardenal Guillermo, en documento incluido
E por el Rmo. Linás en nuestro Bulario, llama ya a las igle: sias . de la Merced, de Córdoba y Sevilla, "ecclesiam sanctae
Mariae". Los .cronistas mercedarios y los de las ciudades
respectivas suponen que hubo cambio de edificio y de lugar
que motivó el de advocaciórP, pero no creo necesario supoE nerlo, cuando históricamente no
aparece demostrado.
Principio muy semejante a las anteriores debió tener la
E:
fundación de Mula, población del 'Reino de Murcia, que aun
E
hoy tiene 13.000 habitantes y fué tomada por el Infante Don
Alfonso (después Alfonso el Sabio), poco después de rendida Murcia en 1241. Era, según la Estoria General : villa
de grant fortaleza et bien cercada, et el castiello della es como alcacar alto et fuerte et bien torado, et es abondada de
todos abondamientos... (2) 1 a fundación merceclaria, que
debió consistir en una casa sin iglesia, existía aun en 1299,
según una bula de ese año, pero no aparece representante
de ella en el capítulo general de 1317, lo cual indica que no
existía comunidad allí en esta fecha, si es que alguna vez la
tuvo, que no es del todo seguro.
Muy diferente de los anteriores hubo de ser el origen del
convento de Almazán, plaza fuerte de la frontera de Aragón, en la actual provincia de Soria, población importante
entonc'es por sus vías de comunicación, como hoy lo es por
el cruce de ferrocarriles. Tampoco sabemos a ciencia cierta,
quién hizo la donación primitiva, ni lo sabían los merceda-
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ULTOS
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Mañana. —Las misas a las seis, seis y media, si,te,
siete y g
E media, ocho y ocho y media.
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Tarde.—Al anochecer, Vía Crucis y Preces a Nuestra
Santí- E
sima Madre.
•
Se exhorta a todos los Terciarios de Nuestra Santísima Madre •
honren a su Santo Patrón de coro con la Comunión en el día y
hora que les tocare.
E
Todos los días se impondrá el Santo E scapnlario
de Nuestra
E
E S antísima Madre a los que lo soliciten.
•
Los cirios y agua de San Ramón, así como el aceite milagroE
so de San Serapio, se facilitan en la Sacristía.
•
Alejandro VII en un Breve que empieza «I ncrustabilis sa.
p ientle arcano» (26 julio
1690) concedió y Benedicto XII
con- E
firmó en su Breve «rIternus eterni Patri filius»
(9 Julio 1725), E
que no sólo los Religiosos y Religiosas de la Orden de la Mertcoedda, sa
silnso todos los que visitan sus Iglesias, puedan conseguir
gracias e indulgencias concedidas a todas las
Religiones,
Institutos, Congregaciones, Sociedades, Casas, Lugares o
asilos piadosos, y esto para siempre y por com
unicación, sino E
• ex presamente motu
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Día 17.—Jueves Santos. Indulgencia Plenaria
General cada vez que se administre la 7` agrada y Absolucton
Comunión.
•
Día 19.—Ejercicios Sabatinos a las siete y media.
Día 2C.— Resurrección. Indulgencia Plenaria.
Día 25.—Empieza el Tríduo a San Pedro
Armengolá,
, m tir
E de la Orden.
Día 2 6.—Indukencia Plenaria, asistiendo a a misa
Sabatina. E
Día 27.—San Pedro Armengol.
Indulgencia
Plenaria.
Día 30.—Ejercios de preparación al mes de
Mayo.
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TODOS LOS [DÍAS
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propio.
(i) Ntims. 2.418, 2.718 y 2.441.
(a) Edición cit. pág. 744.
•
nos del siglo XVIII que consignaron sus noticias en el E
2438
de la B. Nacional de Madrid, pero es lo más probable que fuera algún rico mercader de los que entonces E
E
abundaban en la villa. El convento s ubsistió hasta la
expulSión de los regulares, en 1836,
y su modesto edificio se conserva aún; convertido en almacén,
al Este de la población, E
fuera de las murallas,
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.des, sumamente mortificado y laborioso, que en el convento del Cuzco, a
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-: los ciento veinte arios de edad, pasó de esta vida mortal a la eterna.
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Venerable Melchor Rubert.—Vicbrio del convento del Puig y cape- _: llán del castillo de Almarza, en Orän.
Varón apostólico e infatigable E
:: para la salvación de las almas, que poseído
de la fe y amor divino, lle: vando una cruz en la mano, se defendió h eroicamente
con unos pocos :
:. . soldados en la lucha contra los moros, que aprisi ‘
nändole, le cortaron :
..: cruelmente la cabeza por odio a nuestra santa religión el ario de 1708.
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Día 4.—Beato Tomás de Na'poles, mártir,—Sabio teólogo, ver
..-sadísimo :: en las Sagradas Escrituras, devotísimo
de la Virgen María a la que salu- -:
.. daba con particulares alabanzas, mereciendo que le visitasen muchas ve- : ces los ängrles, cantando con inefable dulzura las excelencias de esta ce- :-
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Día i.°--San Alejandro de Sicilia, mártir.—
Nació en la isla de Mi-
lazzo, y- ya desde sus
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tiernos arios deseó padecer el martirio por
el nombre de Jesucristo, consagrando su pureza a la Reina de los
Cielos. Vistió nuestro
hábito en el convento
de I3onaria y como era
un sacerdote tan humilde y santo, agregáronle, a los redentores que
debían pasar a Túnez. Allí devolvió la salud a un
cautivo moribundo, con sólo invocar el nombre de
Jesús, por lo que indignado el rey Muley-Mahomet
mandó que fuese quemado vivo delante de su palacio. Dábanse prisa los verdugos en atizar la hoguera
mientr as que el Santo se disponía para morir, porque fué
mayor el interior incendio que abrasó su alma enamorada,
que las llamas que consumieron su sagrado cuerpo. Resplandec iente su rostro de fervor e iluminado de hermosísimu belle za , fijos los ojos en el cielo, entregó su inmaculado
espíritu al Señor diciendo: Muera vo por Vos, para que ellos
os conozca n y amen. En aquel instante estalló tal tempestad
de trueno s y rayos sobre la ciudad, que los infieles temblaban y tem ían la ira de Dios. Algunos . cautivos valiéndose
de la obscuridad y de la tormenta, recogieron sus huesos y
los guardaron con venerac ió.. Fué su martirio en Abril del ario 1317.
Venerable Magdalena de la Asunción.—Floreció en el convento de Sevilla, señalándose en la devoción a la Reina de los Angeles, a la cual con
mucha ternura llamaba su madre, y era indecible la suavidad que con este
nombre sentía. A la hdra de su muerte tuvo con Nnestra Señora un largo
y dulce razonamiento lleno de tan afec t uosos amores que parece habérselos prestado algún serafính expirando poco después en el beso del Señor.
Día 2. — Venerable Pedro de Valeneia, V Provincial de Castilla,—Infatigable propagador de la devoción a Nuestra Santísima Madre, que visitando los monasterios de Castilla y Portugal pedía con grande ansia en
los Capítulos que le ayudasen a celebrar las alabanzas de esta gran Rei•na, diciendo mucho y bueno de sus grandezas. Llegado el fin de sus días
y arrobado en dulzuras y regalos celestiales, aquella dichosa alma desamparando . el cuerpo se subió a la mansiones de la Gloria en el ario
de 1402.
Día 3.—Venerable Miguel del Ocaso.—Admirable en todas las virtuRMORIIIIIIIIIIIIII1188111118111118111m1,1581111141181181811111111111118111111MRIMIIIIIIIIIIIIIII
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: lestial Señora.
Lleno de fe y celo por el catolicismo, disputó con los herejes hugoflotes con tanto fervor y sólidos argumentos que los dejó sin réplica, y E no pudiendo sufrir esta humillación, a puñaladas le dieron muerte cerca
: del Convento de Mompelier, el ario de 154o.
Venerable Francisca del Socorro.—Virgen que después de una vida
E penitente y mortificada, dejó por la patria celestial este destierro en el
Convento de la Asunción de Sevilla, enriquecido con el recuerdo de sus
1. muchas y heróicas virwäes.
Día 5.—Venerable Ramón de Moniolivo.--Uno de los primeros que
vistieron nuestro hábito; incansable en la rigurosa observancia y áspero
t ratamiento de su persona, siempre devotísimo
de la esclarecida Reina
de los Angeles, adornado con la estola de la inocencia, y ennoblecido
con la gloria de la santidad.
Venerable Juana de la Conce.pcio'n.—Laboriosa humilde, penitentísima, asidua a la oración, devotísima de la Santa Eucaristía
y una del número de las virgenes prudentes, que, eh el Convento de la
Asunción,
moreció entrar en el gozo del Señor.
E
Venerable Rosa de la Encarnación —Comendadora del Convento de
S antiago, la cual suspiraba por verse libre de las ataduras de su cuerpo
spara unirse a Cristo, sin que nada pudiera turbar la posesión feliz del o ien que tanto había gustado ya sobre la tierra. Murió el día 5 de .,
„I Abril de 1805.
Venerable Felipa de Nuestra Señora de la
sta.—Colmada de mé' rito, y rica de bendiciones celestiales, murió Inie
en el Señor ei) el Convento de la Asunción de Sevilla.
Día 6 .—Venerable Guillermo de San Rom án.—Noble y virtuoso Cab allero de la Orden, que en 1225
acompañó a nuestro Santo Padre a
Argel en donde dieron libertad a 219 cristianos, y que s quedó en
r ehenes por que no llegaba el rescate para
redimirlos a todos. Devotísimo de la Madre de Dios, y norma de las más esclarecidas virtudes.
E • Venerables Domingo dc Alvarado y Miguel de
Heredia.—Religiosos
gr aves, doctos y de entera satisfacción, que en 1532
pasaron al A frica
l lenos de celo y caridad para la gloria de Dios y bien del
prójimo,
( atando en las ciudades de Fez, Marruecos y Tetuán a
13 ) cautivos cristi anos, con grandes riesgos de sus personas y de sus vidas.
Día 7.—Venerabl eCrisio'bal Amerio.—Carck nal
Presbítero del Título
de Santa Cruz de Jerusalem, caya vida llena de devoción
a la Virgen
: María admira a la posteridad. Rezábale
alabanzas al rayar el =
al ba, mereciendo quedar alumbrado conparticulares
muy altas noti, ias y secretos di - E,
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vi an icl, ihllaasst. a el día de su dichoso tránsito, en el que
sucedieron algunaE
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Venerable Magdalena La Menor.—Virgen de elevadísima conten que meditando las excelencias de la gloriosa A sunción de la
• Virgen quedaba arrobada en éxtasis de inefable júbilo. Estuvo adorna: da de espíritu profético y murió en el Señor, en el Convento de Sevilla,
• en donde reposan sus reliquias.
Venerable María de Yesús.—En este día se conmemora en el Convento de la Asunción, de Sevilla, el recuerdo de esta Virgen esclarecida
de la Orden que con ayunos, oraciones y buenas obras, conquistó la corona de la bienaventuranza en el Cielo.
Venerable Maria de la Asuncio'n.—Virgen adornada de singular
hermosura y belleza, dotada de bondadosa dulzura con la que atraía para
el Señor innumerables almas, enriquecida con los dones del Espíritu
Santo. Floreció en el mismo Monasterio, en donde murió en la paz del
Señor.
Venerable Teresa María Angela.—Marquesa de Avila-Fuente, que
despreciando las pompas y vanidades del mundo, fundó el observante
Monasterio de San Fernando, de Madrid. Allí entregada totalmente a la
contemplación, mereció penetrar los divinos arcanos con inefable claridad. Austera consigo, amable con todos, hallaban en su conversación
consejo los magnates y alivio y consuelo los pobres. Adornada con la
plenitud de la gracia, entregó al Señor su alma inocentísima el 7 de
E. Abril de 1079.
Día 8.--San Gonzalo 11,fercador, Obispo y Mártir. Vistió nuestro
: hábito el ario 1426 recibiendo muy pronto las órdenes sagradas. «Trató
E con fervoroso espíritu de aprovechar bien el tiempo en , santos ejercicios
E y religiosa observancia, empleando bien el caudal de sus letras en bene• ficio de las almas Aplicóse a la predicación en que nunca pareció prin: diplome, por las muchas conversiones debidas a la eficaz unción de sus
E palabras, apoyadas en el ejt mplo de su santa vida. Llegó la fama de sus
: virtudes al Rey Juan II de Castilla, que deseando el consuelo de lt s cau
tivos cristianos de Granada le nombró por Obispo de aquella ciudad,
alcanzando confirmación de la Sede Apostólica. Consagrado Obispo,
• to tó parte en el Concilio de Florencia, y volviendo a los .suyos, con
admirable gozo y dulzura alentaba a los miserables cautivos a sufrir con
paciencia los trabajos de la esclavitud, sustentando en medio de grandes
calamidades y tribulaciones aquella cautiva grey en la firmeza de la fe,
con excesivo trabajo y malos tratamientos de los moros. Para ésto se valió de la intercesión de la Reina de los Angeles de quien fué toda su
vida devotísitno Reedificó la Iglesia de San Cecilio. En este y otros piadosos empleos perseveró en Granada hasta el ario 145. No pudieron los
moros y su bárbaro Rey Aben-Hozmín sufrir la predicación del Santo, y
mandó quitar la vida, a quien tan caritativo les solicitaba la eterna, y estandu el Santo celebrando misa, asistido de sus ministros, entraron los
moros en tropel y en el mismo altar le cortaron la cabeza, dejando el
ara bañada en su inocente sangre que en defensa de la fe y como buen
pastor derramó por sus ovejas.
Venerable María del Espíritu ,S. ant o .--Virlien de admirables e inocentísimas costumbres,- la cual padecía maravillosos éxtasis en la oración. Pasó mejor vida el ario de 1630 en el observantísimo Convento de
•
E plación
Alarcón.
Venerable Andrea de la Concepción . —Floreció con variedad de virtudes y seriales de santidad en el mismo convento, en donde dejó, por la
celestial, esta vida transitoria el año de 1728.
Día 9.—San Pedro Camino, Mártir.—Natural de Landas pequeña al-
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dea francesa, llamado a nuestra Orden por la Virgen María; vistió el E
santo häbito en Perpirián descubriendo luego el gran deseo que tenía de :
: padecer por Jesucristo. Estremaba su cuerpo con ayunos, disciplinas y
E otras austeridades, y cuando la obediencia le mandaba las moderase, :
: con lágrimas pedía le dejaran continuar por temor de la cuenta que E
había de dar a Dios.
El año 1 284 dirigiéndose a Africa, cayó en manos de corsarios mor' s
que en odio a la fe de Cristo le sacaron a la plaza y haciendo un grande :
: hoyo en la arena, le metieron dentro hasta medio cuerpo, y rodeándole, :
E se entretuvieron toda la tarde en tirarle saetas y agudas cañas, sufrien: do el santo con heroica -paciencia, inundados los ojos de inefable alegría. No pudiendo aquellos bárbaros vencer al soldado de Cristo, mandáronle salir del hoyo y apostatar de su fe, y como lo rehusase, sacáronle los ojos y metiéronle agudas cañas entre las uñas; pero el invicto :
atleta invocando el nombre santísimo de Jesús, entregó su cabeza al ver- :
dugo, y su alma victoriosa y triunfante voló a descansar en la rica y :
: aventajada silla que le esperaba en el Cielo.
Día I o.—Santos Antonio Valesio y Matías Marcos.—Mártires. Natural E
: de Génova el primero y de Tolosa el segunda, enviados por San Pedro :
Ameno a Túriez el ario de 1293, en donde por el nombre de Cristo fue- :
: ron hormlemente escarnecidos por orden de Alícuz-Mahomad, que
ó que aquel fuese apedreado; y al bienaventurado Matías, viéndole -mandó
.:: tan joven y tan hermoso, mandó encerrarlo en las ruinas de un castillo,
E proponiéndole dejara su fé y que se casase con una princesa, ofreciéndole altas dignidades y muchos esclavos. Y como perseverase firmemenE te en la confesión de Nuestro Señor Jesucristo y no pudiendo vencerle, :
E ni con halagos ni con amenazas, después de azotarle cruelmente, precipitäronle por un derrumbad, ro desde lo más alto de la torre, entregando E
al Señor su hermosa alma en aquel tormento.
Día i t.—Venerables Pablo y Yaime de Afriea.—Habiendo presencia: do el martirio del beato Tomás Vives, en Túnez, vinieron a España, se
- bautizaron y vistieron el hábito de nuestra Orden; vivieron en ella con E
: mucha humildad y observancia y murieron santamente. Venerable Macias de Monterrey.—IX Provincial de Castilla. Por su : mucha discreción y prudencia alcanzó grandes privilegios para la f'rden.
: El Rey Juan II y su hijo Enrique IV le tuvieron en gran veneración y E
estima, otorgándole muchas mercedes y concediéndole diversas dádivas
E y regalías. Singularmente devoto de Nuestra Señora, cuyos elogios en- E.
comendaba con notable ternura. Fué su dichoso fallecimiento en el ario E
de 1456, lleno de días y de merecimientos.
Venerable Pedro de San Cecitio.—Varón extático, devotísimo de la E
E
: Virgen María, amante de la Orden, versadísimo en antigüedades, Teología, Filosofía y Literatura, que lleno de heroicas virtudes murió en el :
: Señor en el Convento de Rota el 25 de Enero de 1668.
:
Venerable Gaspar de Vilehes.—Gobern6 santamente la provincia dila- :
tadísima del Cuzco. Escribió libros llenos de sabia erudición. Mejoró
mu, hos Monasterios de la Orden, espiritual y temporalmente. Pasó de
: esta vida temporal a la eterna lleno de méritos y días. Venerable Madama del Niño Jesús.--En sus palabras, acciones y es- E
critos refléjase su gran espíritri. stuvo adornada de gracias y luces ex- E
traordinarias, como el don de curaciones, el conocimiento de las cosas
: venideras y ocultas. Pedíanle consejo muchas personas de dignidad, y : era el sostén de los menesterosos. Predijo el día y la hora de su muerte, E
•
:
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...milimumiumluomminimmumummummummumummummummummummummimumm:
-
:
que fué precio-a en el divino acatamiento. Falleció el 29 de Septiembre -:
de 1686 en el Convento de la Encarnación, de Santiago de Galicia.
:
Venerable María de las Llagas.—Viagen t uya memoria es bendecida, -:
por los muchos ejemplos de sus heroicas virtudes. Jamás dejó el oficio
divino y tenía todos sus recreos ante una imagen de Jesús crucificado. :Murió en olor de santidad el ario de to3t en el Convento de la Asunción. :
Venerable Francisca de la Cruz.—Que con ejercicios de humildad,
: penitencia y silencio ganó el lauro de la santidad, Virgen prudente y :
: sabia, a quien el Señor encontró vigilando, llevándola a la mansióii celes- E
:
:
: tial el ti de Abril de 1695 en el Convento de San Fernando.
1 2. — Santos Fernando de Portalegre y Eleuterio Palati.— Mártires. Día
::
:- Era el Nimero portugués, devotísimo del nombre de Jesús y de la Virgen :.
: María, a la que invocaba en todas sus tribulaciones, y el segundo, fl ancés,
: muy humilde, obediente, silencioso y devoto, y ocupaba largos ratos en :=.. la contemplación de los divinos m i sterios, de donde sacaba incendios de :
: amor y caridad para los pobres cautivos enviados a Argel en t 257, fué
::•
: abordada la nave por piratas moros, que pretendieron hacerlos renegar
:
-: del nombre de Cristo. Pero, como perseverasen constantes en su confe- :
sión, Fernando fué asaetado, y Eleuterio murió degollado. Con este mar:
E tirio brillan como piedras preciosas e inestimables margaritas en el reino :
: de los cielos.
-:
:
Día i3.—Venerable Antonio de Marigd.—Insigne en oración, celo, : castidad, humildad y penitencia. Es el décimoséptimo de los provinciales :
- de Valencia, en cuya ciudad obró muchas maravillas. Murió santamente, :: como había vivido, el 25 de Diciembre de 1682, sucediendo en su muerte ::
-:
: algunos maravillosos sucesos.
Venerable Francisca de 7esiís.—Santific6se en el ReealConvento de
:: Alarcón, en donde, despLés de una vida llena de virtudes y buenas obras, .
:- falleció en el Señor el 13 de Abril de 1658, sucediendo en su muerte ma- :- ravillosos sucesos.
:
Día 14.—San Alfonso de Sevzlla.--«Tal era la sencillez y bondad de este E
:
verdadero
imitador de Cristo, el cual dese 6 con todas vera ser tan um:
:- pio de corazón, que jamás cupo en su pecho, ni entrañas, osa que no :
:- fuese de verdadero y humilde religioso. Dilatóse por doquir la fama de li
E su virtud y concurrían diversas gentes a conocerle y tratan, cosa que le .:
E era muy penosa. Obró Dios Nu.-stro Señor muchos milagros por las hu- mildes oraci nes del Santo, como fué el multiplicar los panes para s.oco- *.
:
rer e los pobres y en curar sus llagas, así del alma como del, cuerpo, Z
: Redujo a penitencia a muchos pecadores. Llegada la hora de su glorioso E
:
: tránsito, envióle Nuestro Señor un mensaje celeste, avisándole del día .:
: en que debía recibir el pretwo de sus virtudes, y como era muerte de .z
:
justo, fué tan preciosa a los divinos ojos, que se oyeron cánticos de An. .:
:! geles
cuando expiró, Salía del huerto el enamoradísimo Alfonso absorto .
: en sublimes meditaciones, y acertando a pasar por delante de una cruz ::
: de piedra, rodeada de altos cipreses, quedóse en dulce éxtasis arrodilla: do cabe ella, estrechándola con sin igual ternura y devoción, y así murió,
abrazado a la cruz, mártir de amor el que lo había sido de deseo todo el
:Z:
- curso de su vida. Al tiempo de expirar oyéronse concentos celestiales :.
: en Lérida, singularmente en la Cateoral, donde los canónigos estaban :
maitines y admirados de tanta novedad salieron del coro, din- E
:-- cantando
giéndose al lugar donde había muerto el santo, y viéndo l e tan hermoso r.,-..
: y resplandeciente, lo trasladaron en solemne procesión a la Catedral y 2
:
: allí en sepulcro especial depositaron sus sagrados despojos, recibiendo ;..•
E los honores de Santo por parte de los fieles. Murió el ario 14o2, y en su
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epitafio se lee: «Alfonso goza de las divinas eternidades en la región de E
los vivos en el reino perpetuo de la gloria.»
Venerable Mariana del Santísimo Sacramento.—De inocentes e ininaculadas costumbres, afable y dulce con todos, muy dada a la oración y a
E la penitencia. Extasiada ante la Sagrada Eucaristía dejaba transcurrir las :
E horas del día y de la noche en inefablea coloquios, y agradaban tanto al E
: Señor, que obró muchas veces por la intercesión de sn sierva algunas
: maravillas. Voló al Paraíso en el Convento de la Asunción el 14 de :
E Abril de 174 0 .
Día t5.—Venerable Berengario de Icarte.—Doctor en ambos Derechos, E
: eminente letrado, sapientísimo en la facultad de Teología, Catedrático
E en la Universidad de París; de tan recibida opinión, que raras eran las E
= cuestiones que no viniesen a parar a su museo o estudio en cuanto vivió =: en aquella Universidad. Buscando el olvido de los hombres, retiróse a
E Burdeos, y de allí a Mompeller, en donde, por obediencia, hubo de enseriar Cánones, hasta que pasado algún tiempo se vino a Barcelona, y allí,
: tomando un género de vida pacientísima, acabó loablemente sus días con
: opinión de varón santo.
▪
Venerable Adrián Blanco.—De vida inculpable e inocentísima, me- : nospreciador del mundo, devotísimo de la Emperatriz de los Cielos, a
: quien acudía en todas sus necesidades y aprietos, espejo de todas las
virtudes y vivo reflejo de verdadera santidad, cuya memoria es baideci▪ ea, y su muerte la de los santos.
Día 16 —Venerable Hugo de Matatlana.—Caballero nobilísimo, flor
de la nobleza catalana y uno de aquellos a quienes San Pedro Nolasco E
dió el blanco hábii o de la Orden el mismo día de la fundación, excelente :
: en santidad y muy favorecido de la augusta Madre de Dios, especialmenE te en las guerras que libró contra los moros enemigos del nombre de 'E
E Cristo y admirable en la contemplación de los divinos misterios. Atesorando riquezas celestiales, durmió plácidamente el sueño de los justos, :
- recibiendo en el cielo la diadema de sus ilustres merecimientos.
Día 17.—Beata Mariano de 7esú s.—De noble familia, nació en Madrid -: el año de 1565. Por su singular devoción al Santísimo Sacramento, le fué
: concedido el acercarse a la Sagrada Eucaristía antes del tiempo en que
E suele permitirse a los demás niños. De extraordinaria hermosura, con-: sagróse a Dios en sus tiernos arios con voto de virginidad, vistiendo más
: tarde el hábito de la Orden, que recibió de manos del venerable Felipe
E de Guimerans el día de Jueves Santo de 1169, hasta cuya fecha había
: sido Terciaria de nuestra Orden, En toda su vida fué un ejemplar de
: oración y mortificación. A media noche, después de maitines, solía reco:
. rrer los claustros y el jardín con una pesada cruz al hombro, contemplan: do la Pasión del Señor, que la colmaba de celestiales conselos. Estaba E
: dotada de espíritu de profecía y conocía el interior de los corazones. Su E
E vida fué un deliquio de amor ante Jesús Sacramentado, y su meditació
1-• continua los misterios de la Pasión. Estimada de los Reyes y Pontífices E
halló en esto un motivo más para ser humilde. Confortada con los Santos
: Sacramentos, entregó plácidamente su espíritu al Señor el 17 de Abi il
162 4 . Su rostro quedó hermosísimo: los ojos entreabiertos, la boca risueña, rosadas las mejillas y toda ella manifestando la gloria de que ya goza: ba. Su cuerpo incorrupto se venera en la iglesia del Convento de Alarcein.
Día t8.—Venerable 7uan Dordis.— Primer Comendador de Valencia.
Fué muy amado de nuestro Santo Padre por su mucha humi dad y exi- mias virtudes. Murió en la paz del Señor y fué sepultado honorificamen: te en la iglesia de su Encomienda.
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— 35 2 —
- 353 --
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Venerable Yo.s-é Buval.—Celosísimo predicador evangélico que redujo a grandes pecadores al sendero del cielo, varón penitentísimo contemplativo, humilde, asiduo a las divinas alabanzas, amante de la pobreza y
custodio fiel de los rigores de la vida monástica.
Venerable María de la Corona.—Virgen extática, devotísima de la
Pasión del Señor, adornada del espíritu de profecía y don de lágrimas, y
enriquecida de bienes del cielo, subió a las mansiones de la gloria. Fué
su dichosa muerte el 29 de Noviembre de 1594 en Sevilla.
Venerable Francisca del Espíritu Santo.—Virgen que, entre otras devociones con que obsequiaba a Nuestra Señora, rezaba las Horas y Letanías, sintiendo en esto particular regalo y consuelo. Floreció en el mismo
onvento de la Asunción, de Sevilla, en donde entregó su espíritu al
Señor.
Día 19.—Venerable Isabel 7uana Catald.—Terciaria. Deseosa de servir a Dios, vistiendo algún hábito religioso y dudando cual escogería, lo
consultó con Su Divina Majestad en la oración, en la cual vió a una señora con bellísimo y majestuoso semblante que con voz agradable le dijo:
*Hija, escoge la Orden en cuyo color de hábito vieses que resplandece
más mi pureza», y manifestándosele con interior luz que este hábito era
el de la Merced, lo vistió en 1599 en el Convento de Valencia, en donde
poco después pasó a mejor vida colmada de dones celestiales.
Día 20.—Venerable Alfonso de Cuenca,—Varón apostólico y celestial,
•
amante del retiro y de la soledad, que inspirado por el Señor fundó el
▪ Convento de Nuestra Señora de Belén, plantel de santidad y jardín en
todos tiempos de flores de todas las virtudes. Lleno de méritos falleció
▪ en el mismo Monasterio y allí reposan sus venerandas reliquias.
•
Día 21.—Beato .7uan de Riaño.—Estudió en París las ciencias ecle•- siásticas y salió un sapientísimo letrado, pero admiraba más por sus an• gelicales costumbres, En 1275 fué enviado a Argel, en donde consoló a
▪ los pobres cautivos; iba a las huertas y jardines de los moros y hacía el
trabajo de los pobres cristianos; cavaba, sacaba agua, regaba, plantaba,
•
exhortando a los esclavos a confesar entretanto sus pecados y a rezar
sus oraciones. Rescató en esta redención a 15 0 cautivos.
•
En 1278 pasó a Argel y allí empleóse en trabajar por los pobres prisioneros. Dijeron al Rey moro que aquel santo trabajaba mucho y que
▪ valía por doce hombres y quiso verlo por sus propios ojos, y advirtió
que a su lado estaban doce jóvenes gallardos y hermosos. Al llegar a
▪ Barcelona le mandó el Prior en virtud de santa obediencia explicar lo
sucedido, y el Santo, con la mayor humildad, dijo que él invocaba todos
•
los días a lbs apóstoles del Señor con particular devoción y que por eso
eran sus abogados. Muchos son los milagros que obró Dios por su inter•
• cesión. Estando en Baza convirtió a muchos moros a la fe de Cristo, par• ticularmente uno muy noble que estaba casado y tenía dos hijos. Llena
▪ de rabia su mujer d.6 muerte a los niños y huyó de casa. Publicóse la noticia por la ciudad, y el Rey mandó quemar vivos a marido y mujer, a
aquel por haberse hecho cristiano, y a ella por su crimen. Intercedió con
- el Rey el santo hablando con noble libertad en favor de aquellos desgraciados esposos, y el moro ofreció el perdón y libertad si volvía los niños
a la vida. Resucitólos en efecto y les administró el santo bautismo, y
cumpliendo el Rey su palabra otorgó el perdón.
•
Estas 37 otras maravillas obró este siervo fiel. Al fin, cargado de arios
le llamó el Señor para sí y murió en tan grande opinión de santo, que
:
Barcelona y Sevilla se precian y glorian de tan calificado hijo, la una de
: hábito y la otra de nacimiento, y aunque se ignora cual es el lugar que
.-
:
Z o amsommir1111111111111~11111111111511111111111111111111111111151111111111111111111111111111111111111:
—
354 —
posee sus santas reliquias, podrá hacer oficio de ellas en nuestra devoción esa misma memoria suya para imitar su vida y envidiar su preciosa
muerte.
Venerable Miguel Pareja Comendador de Orán.—Varón prodigioso,
amantisimo de la Virgen de la Merced, cuyo nombre traía en el corazón
y en los labios. que pasó varias veces a Africa, experimentando en todas
las circunstancias de su vida anxilios celestiales. Lleno de consuelos divinos tuvo un fin pacífico y dichoso.
Día 2 2. — Venerable Pedro de Huele, XIX Maestro General. —Rigió con
admirable prudencia la Orden por espacio de Veinte arios. Tuvo singular
devoción a la Reina de los Angeles. Durmió el sueño de los justos el ario
de 1461.
Venerable Angélica, Terciaria.—Guiada en todas las cosas por el Divino Fspíritu, resplandeció siempre en pureza, paciencia y devoción. Entreteníase en dulcísimos coloquios con la Virgen de las vírgenes que dió
á. conocer la hora de su muerte acaecida en Francia el año 1591.
Venerable María de la Purificación.—Adorno de la Orden, ideal de
candor, modelo de la mortificación, ejemplar de humildad, a quien el Señor encontró velando. Murió coa la paz de los bienaventurados en el
convento de la Asunción.
' Venerable Gertrua'is de Santa Ana.—Alma enamorada de la Santa
Eucaristía ante la cual pasaba mncho tiempo absorta en sublimes con
templaciones. Jamás se desprendió de sus labios la más leve palabra
ociosa. Después de recibir con mucha ternura los santos sacramentos falleció en el Señor en el convento de la Encarnación.
Día 23.—Los Santos Mártires de Franeia.—En defensa de la fe cristiana sufrieron diversos generos de muertes y tormentos por el ario de
1563 muchos e ilustres doctores, gloria de Francia, prez de la Orden e
invictos coniesores de Cristo que resistían a los asaltos de la herejía con
la luz de su doctrina y la constancia heroica de su fe; purpurando con
su sangre la pureza del santo hábito muchos religiosos de los conventos
de Altarripa, Carcasona, Maleville, Riscle, Beziers y Cahors,
que se enriquecieron con la memoria de sus ilustres y santos moradores, que obtuvieron las eternas promesas por la obediencia de la ley de Dios, cuyo
- espíritu y fé les daba alegría en medio de sus amargos padecimientos. .\
:..
Venerable María Teresa de San Yosé.—En el ejercicio de la vida ordi: naria, no interrumpida jamás, voló a tan encumbrada perfección, que
:. bien se echaba de ver la acción de la gracia del Espíritu Santo. Está en:: i errada en el Convento de San Fernando, en donde falleció.
:
Día 24. — Venerable Me/e/ion—Obispo. Gobernó santamente las Enco.. miendas de Soria, Huete y Burgos. Nombrado obispo de La Rosse, res- :: tauró en Irlanda los antiguos conventos. Escribió hermosos tratados de
1.". a scética y mística; fue muy amante de las glorias de la Orden y
devotísi- --2 T
:
u mo de la Virgen María. El año 1642 entregó al Señor su espíritu.
:Venerable Blas del Espíritu Santo.—Piísimo
lego, lleno del espíritu
.:: del Señor, asiduo contemplador de las cosas celestiales, laborioso y pe1. ni tente, que en Madrid en el ario de 1661 dejó este destierro por la Pa: tria bienaventurada.
Venerables María de la Anunciacio'u, Bernardino de 7esús y Yerdnima
•::. de la Asunción.—Vírgenes que con su vida ejemplar y mortificada
embe... llecieron
l lecieron el Convento de la Asui ción, de Sevilla, en donde yacen
sepul; t ados sus restos mortales.
':.Día 25.—Venerable
Natai Gaver.--XX Maestro General. Gobernó san- "
:. ta
mente la Orden por espacio de treinta y tres arios. Escribió entre otras .
-.....
'1,Ilmnmwmmomimmaeimmmmmmmmmmmmmucomvmmtmmmmmammmommmumummmmsmmiuuaumaua:
--
-edad
355 —
emmummumimmismummummommommummummommilimmummummummummili:
-
: preciosas obras e l Speculum Fratrum. Fué Embajador de Alfonso IV de
:
:
- Aragón ante el Romano Pontífice. Hizo una redención en Argel en cuya
: ciudad rescató a 146 cautivos. Entregó su espíritu al Señor el 25 de Abril
:
máxima de Barcelona.
- de 1474 y está sepultado en la ara
-:Venerable Francisco de San 9ero'nimo.—Modelo de penitencia, decha: do de contemplativos, sumamente piadoso y caritativo, devotísimo de
nuestra Santísima Madre y dr la Sagrada Eucaristía. Murió en Ciudad
-:.
:- Real, en santa y loable opinión.
Día 26.—Venerable Yuan de Aparieio.—Doctor en Sagrada Teología,
E
: intérprete profundo de las Santas Escrituras, admirable en la práctica de
"
:,1
5
5
1.:
5
.
5
las virtudes, singularmente de la modestia ejemplar de la observancia "
:-:
religiosa, que el ario de 1696 pasó a mejor vida a tomar posesión de la .
felicidad perdurable.
:
Venerable Francisco Vera de Villavicencio.—Maestro en Sagrada Teo- r,
logia que en 1588, siendo Comendador de Málaga, pasó al Africa, y en :
: las ciudades de Fez, Manuecos y Tetuán rescató a 134 cautivos cristia- nos. Fué Vicario General de Nueva España y en 1596 presidió el Capí:
.
de Guatamala. Nombrado ( bispo de Elna vivió con gran .,
:-- tulo provincial
.
: pobreza y austeridad.
En 1616 pasó a mejor vida en Madrid, y su cadä.- .1*
: ver fué trasladado al Convento de Jerez de la Frontera.
:-Venerable Angela de Yesús. — Llena de virtudes adquiridas en la .
oración y penitencia, dejando santa memoria para la posteridad, falleció 5
E
: en el Señor en el Convento de San Fernando el año de 1728. .
:
Venerable Ana de lesús María —Virgen sabia, que con el óleo de la :.
-:- caridad
mantuvo siempre encendida la lámpara de la verdadera devo- .
-: ción. Llena de prodigiosas señales, entró con el Señor a las eternas bo- :
: das en el Convento de la Asunción.
•.
:
admirable
Virgen,
Encarnación.—Esta
biés
María
de
la
Venerable
:
-.. apacible en su trato, llena de admirable dulzura y mansedumbre, murió •,
: santamente en el mismo Convento de la Asunción de Sevilla, el 9 de :,
:- Agosto del ario de1
753.
."*.
:
San Pedro Armengol, Mártir—Nació en La Guardia de los Prados, de ..
-E la noble familia de los Condes de Urgel, en el primer tercio del siglo r,
,
XIII. Hallóse a su nacimiento San Bernardo de Corbera, quien profetizó
zE: del recien nacido diciendo: «A este niño, un patíbulo le hará Santo.» Y .:
- así sucedió más tarde. Andando el tiempo, una aventura de caza le pre- :
.. cipitó al abismo de su perdición y se hizo capitán de ladrones. Arre- :
E pentido de sus culpas, pidió muchas veces el hábito de la Merced. .
: Rehusaban admitirle por la mala fama que le seguía por doquiera, igno- .•:
:.. rando que la misma Reina de los Cielos le había inspirado tan santa re- :
: solución. Como no desistía de su admirable vocación, el Beato Guillén :
-:
Bas le admitió en la Orden, imponiéndole de sus manos el blanco hábito :
de la Virgen. Cundió por Barcelona la nueva del suceso, moviéndose ..,
muchos a penitencia, viendo a un bandolero, convertido al Señor. Muchos 5
caballeros abandonaron el siglo y dejando esperanzas mundahts, yolaron al claustro para asegin ar las del Cielo. Satisfecha la Orden de stle 5,
vida ejemplar, elevóle al sacerdocio y le confió el honroso y heroico
encargo de renimir cautivos. Las redenciones que llevó a cabo fueron ..
las siguientes: la primera en Murcia como compañero del Beato Guillik .:•
Bas, el año 1261 y rescataron doscientos trece cautivos. La segunda eff
Granada en compañía del Beato Bernardo de San Román, dando liberta d . 1
a doscientos doce cautivos; t a tercera en Africa a donde pasó acompañ a- r,
do de catorce mercedatios, conocidos en nuestra historia con el nombr e 5
de los Santos Confesores de Asgel; fué esta redención el ario 1264 y res- 5
E
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•
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—356 —
iniummummusummimmig1511111111~~111111111111111111881mumillimmumuilice:
cató a quinientos veinte y seis cautivos. Con estas gloriosas hazañas con E
virtióse a la fe cristiana el rey de Argel, Al mohacen-Moharnad, que :
movido de las palabras y santidad de Armengol, se hizo cristiano retigloso de la Merced, donde se le recuerda con el nombre de Venerable
Pedro de Santa María de Africa. La última redención fué el año 1 266 en
la ciudad de Bugía, acompañándole San Guillermo de Florencia, mártir
de nuestra Orden e ilustre descendiente de los Condes de Gueda en
Italia. Después de haber rescatado a ciento veinte cautivos, Armengol se
quedó en rehenes por dieciocho niños que se hallaban expuestos a renegar de la fe, ofreciendo por ellos la suma de mil escudos que su compañero traería en un tiempo determinado. Cumplido el plazo señalad
E
para el pago del rescate y viendo los moros que el dinero no venía, sin
atender a razones le encerraron en un obscuro calabozo. Allí bajaron los :
ángeles a consolarle, y darle el alimento que le negaban los hombres. E
Cansados de esperar los musulmanes, condenäronle a la horca, y ejecutada la terrible sentencia, estuvo el Santo pendiente del árbol por espacío de ocho días, pasados los cuales llegó San Guillermo de Florencia
con la cantidad estipulada, quedando atónito al tener noticia del lasti- E
moso suceso; pero al acercarse a la horca notó que el mártir movía los
labios y decía estas palabras: «Hermano carísimo, no lloréis; vedme
aquí vivo porque la Virgen María me ha sustentado con sus manos para
que no pereciese, y estos días me ha asistido con el rostro muy apacible. Acercose San Guillermo lleno de respeto y bajó al heroico soldado
de Cristo, de la horca. Abrazáronse los dos derramando lágrimas de EE
gozo y dando gracias a Dios. Al llegar a Barcelona fueron recibidos con :
reverentes manifestaciones de júbilo por tan grande maravilla. Dios
quiso dejar en su siervo una huella permanente del martirio, y desde en- E
tonces andaba el Santo con el cuello torcido, marchito el rostro y el :
color pálido y enfermo. Deseando apartarse más del mundo y entregar- E
se a la contemplación, se retiró al Convento de Santa María de los Prados. Atravesando el rio Llobregat oyó la campana del pueblo vecino que E
tocaba a o , aciones; arrodillose en medio del rio y las aguas se dividieron
dejando enjuto el suelo donde el santo hincó sus rodillas. Las palabras E
que traía siempre en sus labios eran: « Creedme hermanos míos, no :
juzgo haber vivido verdaderamente otro tiempo, sino aquellos felicísimos
ochos días en qué colgado de un madéro aparecía muerto a los ojos del E
mundo y vivo a los de Dios Nuestro Señor.» Después de profetizar su :
muerte, espiró placidamente en el Señor el ario de 1304, confirmando su E
santidad con innumerables milagros. Venerable Buenaventura Guisado.—Varón admirable por su humildad :y penitencia; gran letrado en ciencias divinas y humanas, que murió santamente en el Convento de Lima el 25 de Septiembrs de 1707. •
Día 28.—San Pedro de Bearne, Mártir—Enviado en 136 4 a Túnez
consolo a los infelices cristianos que estaban en el cautiverio. Anhela,,a
SU corazón morir por Cristo; más el temor de malograr la redención
le hacía abstener de predicar en público a Jesús. Le afligía en gran manera al oir las horribles blasfemias y ver los desordenes de los infieles;
oraba s e . mortificaba, pedía a Dios misericordia y la conversión de
a quello-, infelices que carecían de la luz de la fe. Pasando un día por la :
calle vió a un mahometano cometer un escándalo público, y no pudiendo
el Santo sufrir tan execrable maldad, reprendiole con aspereza y celo
divino; se reunió allí la gente, y con noble libertad y eruditísima unción
e v angélica les demostró la falsedad de la ley de Mahoma, que permitía
t ales abominaciones, y al mismo tiempo ensalzó la virtud de la pureza
`11288 111.8mu immamusimmetemimmommi
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Ilumalmounim Imummommumumulnumicommelcumummummummummiscollimmicomemmume
con tanta eficacia que se convirtieron muchos infieles, por lo que indig- :
:..
- nado, al saberlo el Res de Túnez.
dispuso entregarlo a la crueldad de :
:: los muchachos. Reuniéronse éstos en gran número, ataron al Santo, de
: manos, y con una soga al cuello lo sacaron a la calle, y con furia infernal E
E lo maltrataron, apaleándole y tirándole piedras; pero el invicto confesor
_: de Cristo no cesaba de predicar por más que la sangre bañaba su cuer- :.
- po bendito. Fuera de la ciudad encendieron una hoguera y echäronlo en
-.
: ella, siendo sus últimas palabras de perdón para sus atormentadores. De :
E esta manera se asoció al C.cro de los Mártires este glorioso Santo, que :
por su devoción a la Reina de los Angeles, se apellidaba de Santa E
-: .
-.
: María.
:_
Venerable Mateo de •Urbina.—Misionero infatigable que recorrió las E
:- más apartadas regiones de América evangelizando a los indios y atra- .
: yéndolos a la :uz de la fe. A los ciento diecisiete anos de edad, cambió :
E
E esta vida por la inmortal, en el Convento del Cuzco. Venerable Diego de Alcalá.—«Movido del celo de la gloria de Dios y
:: de la salvación de las almas, consagrose a convertir a los pecadores. -E'
- Breve tué su vida, pero en élla, atesoró grandes riquezas de mérito con- :_
E sagrado al cumplimiento del ministerio sacerdotal, Su espíritu contem:- plativo y la dulzura de carácter le aclamaron Santo en vida, y que le :.
- llamaron después de muerto fidelísimo siervo del Señor. Murió en el :
: Convento de Málaga el 28 de Abril del año 1732.
:
Día 29.- Venerables luan Varcldn, Francisco de Cuevas, Sebastián
r.
de Rzcáfont, Esteban de Castañeda y Martín Robledos.—Que animados de .:
E
- espíritu de abnegación y heroica caridad se dedicaron a la conversión :.
: de los Peruanos, atrayéndolos con la eficacia de su doctrina y con admi:
-:
l• rables milagros y gloriosas virtudes, a la fe de Cristo y a la verdadera .:
E:E
' civilización.
Venerable Felipe del Sautísimo Sacramento.-- Así llamado por su .
amor al augusto Misterio del Altar, que, en la flor de la edad dejó este -•5
destierro por la patria celestial, colmado de bienes y riquezas espiri- .
": iiiales.
Venerable Alfonso de Anzbia. —Sacerdote ejemplarisimo, ministro :..
::
:_ celobo del Evangelio, varón de vida inculpable, que siendo Comendador .5
: Quito y como un volcán arrojase lavas encendidas, amenazando arruinar .
los edificios y dejar sepultados a los ciudadanos, aplacó aquel terrible
azote invocando a Nuestra Santísima Madre, cuyas mercede . experimen- .
tó siempre desde entonces aquella república. Al Im entregó su alma al .:
:
-: Señor y fué sepultado en un suntuoso sepulcro y aclamado Santo.
Día 30.— Beato Luis Puell y Sesenta y nueve Compañeros '""ártires,— 5
:Que en el Convento de Santa Eulalia de Mompeller sufrieron heroca- :
: mente el martirio en defensa de la fe católica, detestando la herejía lu- :
:_
:
- terana, por lo que fueron cruelmente
pasados a cuchillo, recibiendo con ,
:- le palma del martirio la corona do la gloria y escribiendo para siempre :..
sus
sus ignorados nombres en el Libro de la Vida.
:
E
E
:„
-:
Fr. Ameno S. Blanco. ,
1.,
E
E.
:
-:..
-
000
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MmismOR4118181111118111~1811111111181111118811118111111111518.18~11111811111111.1180'
358 —
SECCIÓN DE NOTICIAS
1=`. errol
SANTA VISITA PROVINCIAL.—Después ,
de haberla practicada eni esta casa salió el día con dirección a P ontevedra, para
visitar el Convento de San Juan de Poyo, e R.
P. P e
terminado el cometido que allí le
E
E
E
rovin quien,
lleva, partirá para Verín. Llenos
de amor filial, pedimos al Señor le coniceda sus luces para
desempeñar la paternal misión que le trajo entre nosotros.
C UMPLIMENTANDO AL P.
PROVINCIAL —Acudieron
saludarle 'durante su corta estancia entre nosotros, los PP. Misio-a E
neros del Corazón die María, Párroco de San Julián Sr. Montes
e e Estado Mayor Sr. Montero, el Ingeniero naval Sr. Rubi, Hermano Mayo rde la V. O. T. Sr. Castrillón, Médico Sr. Meiräs y
F.
Comisiones de la V. O. T. de la Merced, Jueve§, Eucarísticos, Ro- E
perillo, Escuelas Obreras, Doctrinas Sociales ys Escuela Dominicales.
P. GAITE.—Ha regresado de Castro Caldelas, después de
haber predicado en aquella villa la Novena al Glorioso Patriarca San
José. Han sido copiosísimos los frutos obtenidos en aquella Novena
M isión.
E
EN NUESTRA IGLESIA.—Con grande y selecta concurrencia celebróse la Novena dedicada al Patriarca de la Cristiandad San
José. En ella predicó con gran fervor el R. P. Ameno.
EN LA V. O. T. DE SAN FRANCISCO.—Muy
solemne ha resulta , do la función que en honor de San, José de la Montaña
celebraron las piadosas y distinguidas señoras que componen esta Asoel ación. Un afinado coro de señoritas dir 2 irlas 1 ) r 1, ( . ntn
,:iasti (. int
eligente cultivadora del bello arte de la música señorita
--
Lola Morí-
tero, interpretó con la maestría a que nos tic -en
acostumbrados, una
difícil partitura. El Sermón . , bellísima homilia inspirada en las pági-
n'as de las Santas Escrituras y demostrada con piadosa erudición, estuvo u cargo de nuetro querido amigo el Sr. C.ura Párrodo de Cecl eira D. Anto-do María Castro Prieto. E • 1 ,el ornato del altar probar on, una vez más su exquisito gusto las camareras del Santo.
EN SAN JULIAN.—Cantó las excelencias de Sin José el Reveriendo Padre Serapio, de este Colegio.
famG
iliRa.EGORIANOS.—Pidiendo al Señor el eterno descanso de
O. Marcelino Galán, Rivera, que murió el día
2 de febrero, celebrärionst en nuestra Iglesia las Misas Gregorianas, 3
las que asistieron
las numerosas y distinguidas amistades con' que cuenta esta virtuosa
:E
SIMPATICA FIESTA.—Dando realce a la solemrisima y acos- turnbra,da función religiosa con que mensualmente conmemoramos
D escensión de Nuestra Misericordiosa Madre, tomaron el blanco
h 4bit0 quince angelicales
niñas de la más ran(la
lana. Amolas
m
a la p erseverancia en el amor a las virtudes de
Maria E
37
tomando como base las palabras de David, en, las que nos describe'
una larga procesión die Vírgenes, que llevando a la Reina de , los Cie- :los por guía, caminan hacia el trono del cordero sin mancilla,
pre- E
cl icóles el R. P. Ameno sentidísima plática. Con el fi de dar la mayor solemnidad a los cultos de la V. O. T., quedó instituido un
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Cor o de niñas presidido por la fervorosa y 'entusiasta niña Carmela
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E.: cantó el Coro de Religiosas una Misa de marcado sabor religioso. EE
Ofició el P. Capellán de la Comunidad. Las ceremonias de la imposición del velo las hizo el R. P. Reinaldo, el cual hizo ura fervoro- E
sísima Plática alusiva al acto.
En este Convento se celebró también un solemne Triduo en los
días de Carnaval.
Los tres días se expuso S. D. M., se hizo media hora de oración,
tocando escogidas elevaciones en, el órgano; después se rezó la Es- E
tación Rosario y se hicieron las preces del Triduo, terminando los E
tres días con el canto de el Santo Dios por el Coro de religiosas y
-niñas del Colegio.
El Miércoles de Ceniza, por la tarde, se cantó un, devoto Miserere, y al final se dió la Absolución General. Todos los días de Cuaresma, 'después de rezado el Santo Rosario, se reza el Vía-Crucis
y los miércoles se canta el Salmo Miserere. LA R. M. MARGARITA DE LA VISITACION.—Ha fallecido E
en el Convento de Orozco, el día 13 de febrero, a la edad de setenta E
y 'ocho arios y cincuenta y seis de religión. Su vida ha sido un, con- E
tinuo sacrificio, muy observante de las Reglas y Constituciones, gran
celo de la gloria de Dios y aumento de la Orden. En estos últimos E
catorce arios se puede decir que ha sido su vida una continua oración,
can un abandono completo en las manos de Dios. r.NOVENA A SAN JOSE.—La predicó en Valencia el R. P. Armen,g o I.
PROVINCIAL DE VALENCIA.—Ha sido nombrado reciente- E
mente para tan importante cargo el Postulador ge -eral de las cansas
de Canonización y Beatificación, de la Orden, M. R. P. Ramón Se- E
rratora, doctor en Sagrada Teología. Dado el amor grande que a la E
Orden profesa el benemérita Mercedario, nos auguramos brillen de nuevo los ,prósperos días de tan gloriosa provincia.
Reciba el ínclito Hermano los cariñosos testimonios de nuestro E
afecto y concédalo, Nuestra Madre luces en, el desempeño de tan en.
cumbrado ministerio.
PROFESION Y TOMAS DE HABITO.—En el Convento de E
Ibarra hizo su profesi6n de votos simples la Rvda. Sor Robustiana
de Jesús María. Predicó en. tan solemne acto D. J. Dionisio Berro- E
jaechevarría.
También han vestido el Santo Hábito Mercedario e- , este. mismo
Covento Sor Maria de .Jesús, Sor María de las Mercedes, Sor Maria
Resurrección y Sor María de la Asunción. La ceremonia resulté, 90l emínisma, predicando el R. P. Heraclio Matute (C. M. F.) Impuso
los Santos Hábitos D. J. Dionisio Berrojaechevarría, tío de dos de E
las nuevas novicias y capellán de la Comunidad. A todas, nuestra
cordial enhorabuena.
EJERCICIOS EN ALARCON.—Bajo la dirección del R. P. Pío
t uvieron lugar en, esta Iglesia de nuestras Religiosas.
EL P. PROVINCIAL DE MEJIC0.—Este cultísimo Padre,
q ue por las anormales circunstancias por que atraviesa aquella rePública se ha refugiado oree nosotros, ha sido nombrado confesor
de las Salesas Reales Portuguesas, que residen, en Madrid.
ESTUDIOS HISTORICOS.—Con objeto de investigar documentos relativos a la vida y virtudes del Venerable Diego de Muros, Obispo de Tuy, •ha estado visitando los archivos de Tuy, Gua-
;
Plá. El titular y protector de diciho coro es el esclarecido confesor
San. Alfonso de Sevilla. Nuestra cordial enhorabuena.
EJERCICIOS EN SAN JULIAN.—Dieron la tercera tanda de
ejercicios espirituales ,en ,este espacioso templo los RR. PP. Gaite y
Serapio. La concurrencia, numerosa, y los frutos, consoladores.
SERMON DE SOLEDAD.—Le predicará en la Iglesia de la
Orden Tercera de San Fra-,cisco el R. P. Luis, de este Colegio.
EN ORTIGUEIRA Y RIBADEO.—El P. Rector de este Colegio, R. P. Gaite, salió a predicar la Novena de Dolores en la culta
villa ortegana y a hacer la preparación, par el Precepto Pascual.
Desde allí se dirigirá a Ribadeo, en dode dará Ejercicios Espirituales y predicará la Semana Santa. El Seridr bendiga sus apostólicos
trabajos.
GRATA VISITA.—El cultísimo y entusiasta Secretario general
de. las Fiestas Centenarias de la Merced, D. Luis 011er, con motivo
de visitar al P. Moderador de nuestra V. O. T., Delegado que fué
en esta ciudad de . dichas solemnidades, ha pasado en, ésta unos días,
para nosotros muy gratos.
TRIDUO AL PERPETUO SOCORRO.—Está encargada de
predicarlo en la Iglesia Castrense de esta ciudad el R. P. Gaite.
NUEVAS TERCIARIAS.—El día 31 de marzo vistieron nuestro
santo escapulario de manos del R. P. Ameno las distinguidas señoritas Gloria, María y Asunción Galán, Donata, Josefina, Carolina y
Asunción, San Román.
FL NINO DE PRAGA.—El día 25 hemos visto en torno de la veneranda imagen a un hermosísimo grupo de niños y niñas que acudieron a
honrarle. Ha habido exposición de S. D. M., ejercicio en honor del mila-
groso Niño y plática a cargo del R. P. Ameno, terminando con la bendición de los niños. No se puede borrar de nuestra mente la devoción y
piedad de aquellas inocentes y candorosas almas, ni la dulzura y suavidad
con que cantaron el hermoso himno.
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S. M. LA REINA MARIA CRISTINA ha recibido en audiencia, el día de San José, al R. P. Pío Uribe, Superior die Madrid, interesándose como siempre por la prosperidad de nuestra Orden, a la
cual distingue con marcada predilección,.
RECOMPENSA MERECIDA.—En el certamen histórico, r e
. en Barcelona, ha obtenido premio un intere--cientmlbrado
sante trabajo sobre el tema: "La Orden de la Merced, como Orden
militar. Estudio comparativo con las otras Ordenes militares".
El autor • de dicha trabajo literario es el subinspector de Sanidad
Militar retirado, D. Félix Estrada Catoira, cultísimo escritor res i
-dentlaCoruñ,qhceptimofuélgdar
parte de la Academia Gallega.
EN LA IGLESIA DE LA BUENA DICHA.—Han cebrado co n'
gran solemnidad los PP. de Madrid la Novena en han del excelso
Patriarca San José, predicando todos los días el R. . Martín, Lo'
asistió el Il mo. y Rvdmo.
a Reserva solemne del último díaA
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Sr. Obispo de Ciudad Real.
DESDE MARQUINA.—En ieste histórico Convento de NUeStra
Señora de la Merced hizo su profesi6 de votos simples Sor Maria
de Jesús Sacramentado Bajo Ullivarri. En tan solemne ceremonia
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dalajara, Ciudad Rodrigo, Valladolid y Madrid el R. P. Guillermo
Vázquez, Doctor en Filosofía y Letras..
A NUESTRA SANTISIMA MADRE.—Además de la valiosísima corona que con ocasión del Centenario regaló la Ciudad Condal
a su excelsa Patrona, ofrendó también un precioso cetro.
El cetro es de oro y pesa 723 gramos. Contiene 32 brillantes regulares, 65 pequeños y 6 perlas. Mide 48 centímetros y medio.
Es , de forma 'elegante, cincelado, con adornos, que son flores
agrupadas en relieve y que van entrelazadas. Además se destaca en
emblemas todo cuanto encierra Barcelona . de vida, movimiento y actividad en los distintos ramos, representando los medallones la
Religión, la Justicia, las Ciencias, la Industria, el Comercio, la Prensa, la Milicia, la Marina, la Agricultura, las Artes, la Banca y las
Letras.
Resulta una verdadera obra .de arte, y ha sido construida, lo mismo en su parte de oro que de pedrería, con joyas donadas a este
objeto por piadosos devotos
DE OROZCO.—Las Religiosas de aquella observante Comunidad Mercedaria, nos comunican . lo siguiente: •
El 20 de noviembre se bendijo con toda solemnidad una escultura
del Niño Jesús, donativo de una piadosa señora. Tan bella imagen
ha sido colocada en el Tabernáculo del altar mayor.
El día 31 de diciembre hicimos la entronización, de una estatua
del Sagrado Corazón' de Jesús, que regalaron, a esta Comunidad
las alumnas del Colegio y una bienhechora de este Convento.
El 3 0 de, enero, con toda solemnidad, bendijo nuestro P. Capellán una, nueva imagen de N. P. S. Pedro Nolasco, obra escultórica
de la casa Quixal, regaló esta preciosa imagen un señor Sacerdote.
EN EL CONVENTO DE SARRIA.—Han emitido la profesión
de votos simples los fervoros Novicios Fr. Daniel Vázquez, Fr. Serafín Sala, egui, Fr. José Vázquez y Fr. Fidel González. Concédales
Nuestra Santísima Madre la Santa Perseverancia.
R. P. EGIDIO.—Ha experimentado una gran mejoría en la dolencia que le aquejaba. Nos alegrarnos.
DE NUESTRO COLEGIO DE LA VERA CRUZ (13ERRIZ),—N0s
comunican de aquel acreditado e importante Colegio de Merceclarios,
que se han visto honrados con la presencia del Excmo y Rvdmo.
Obispo de la Diócesis Dr. Eijo, con motivo de las elecciones conventuales. Ha recaído el cargo de Comendadora en la M. R. M. Nieves Urizar;
Vicaria, la R. M. Presentación; Maestra de Novicias, la R. M. Inmaculada,
y Prefecta del Colegio, la R. M. Natividad.
El Señor Qbispo, entusiasmado por el admirable orden y observancia
que reina en esa fervorosa Comunidad, permaneció gustoso en B-rriz
varios días, dando en su obsequio las niñas internas, que en la actualidad
son «noventa», encintadoras y artísticas veladas. En una de ellas representaron tan primorosamente la preciosa obra «Los crktianos a los
leones», que Su Excelencia, sum› mente complac do, ›uplicó a las niñas
repitiesen el bellísimo drama. Las alumnas rayaron en ella a tan encumorada altura, que recibieron entusiastas y merecidas ovaciones. Las decoraciones, de maravilloso y sorprendente efe( tu. v la riquísima y apropiada indumentaria, contribuyeron grandemente a sostener el interés (fr
una manera delirante.
n otra velada llamó poderosamente la atención
«El poder de la gra_
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cia», drama sublime, inspirado en los trágicos sucesos del mártir de la Or:- den, S. P. Armengol.
Las autoras de estas dos composiciones dramáticas, religiosas de tan
:
: benemérita Comunidad, han recibido muchos plácemes, a los que unimos
:: el nuestro muy sincero.
En los entreactos, las niñas recitaron preciosas poesías e interpreta. ".
-- ron valiosas composiciones musicales.
: L P. COMENDADOR DE HERENCIA ha sido el encargado de
:Epredicar
los sermones de la Novena al glorioso Patriarca San José en
:
: aquella iglesia conventual.
-.MISIONES.—Los RR. PP. Martín y Armengol dieron una misión en
- San Salvador de Sayans desde el día 28 de Marzo, y a continuación otra
:. en neo Grande. Son abundantísimos los frutos que en una y otra reco:- gieron, y por donde quiera que pasan dejan grandes simpatías y vivos
:- deseo« de que vuelvan a predicar la divina palabra.
:SANTA CUARESMA.—Durante ella han predicado en Sarria los
:- RR. PP. Comendador y Anselmo; en Arcade (Pontevedra), el R. P. Euge- nio; en Cerdedo, el R. P. Martín; en la Guardia, los RR. PP. Francisco y
Ortuzar, en Monforte, el R. P. Severino, y otros que sentimos no recordar
Cróni c a.
R. P. MANUEL TARRIO.—De regreso de San Adrián, de Roma
se ¡encuentra en, nuestro Convento del Olivar este virtuoso Padre.
EN ATENAS.—En el templo del Sagrado Corazón de Jesús se
celebraron solemnes cultos en honor de la Virgen de la Merced, pred
• icandocon
este motivo, el R. P. Romanos.
Es grande la devoción, que a Nuestra Madre se profesa en la capital griega, merced a la colonia catalana residente en la antigua
▪ metrópoli.
EN IRLANDA.—Es grandísima la actividad que están desplegando nuestras Religiosas en aquella isla. Con sus Colegios y Hos:- p• itales dan gloria a Dios y difunden el buen nombre de la Orden.
CHILE.—BENEFICIO DEL PATRONATO DE SAN RAMON.—Espléndida, baj,o todos conceptos, resultó la fiesta que a
beneficio de esta institución se efectuó en el hermoso teatrito "Miraflores".
Aparte de la novedad que se presentaba al público, con motive
del estreno de esta nueva y simpática sala de espectáculos, el variado y bien desarrollado programa, dejó completamente satisfecha a la
numerosa y escogida concurrencia que llenaba todas las localidades.
Llamó muy especialmente la atención del público los números
de canto desempeñados por los simpáticos niñitos Adriana, Inés 3r
Juanito Urrutia Manríquez, quienes con una desenvoltura poco común en criaturas de tan tierra edad se expidieron co perfecta maestría en tres bonitas canciones españolas. Sobre todo Adrianita hizo
una "Maja Aristocrática" digna de Paquita Escribano.
El aplaudido barítono chileno, Sr. Emmanu , e1 Martínez, cantó admirablemente una aria , de "Un ballo in Maschera", con acompañamiento de una buena orquesta, mereciendo de la concurrencia muy
nutridos aplausos.
Los alumnos del Colegio de San Pedro Nolasco, en trajes de . ca-
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rácter, cantaron el hermoso coro de los "Pierrots", como artistas
consumados.
Los Sres. Máximo Pacheco del Campo y Gregorio Argomedo,
fueron justament d aplaudidos, el primero ien, su declamación de "Serenata de amor", y el segundo en, su monólogo cómico de "Un nau-
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fragio".
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En la parte de biógrafo se proyectó la hermosa película denominada "Diplomacia", cuyo argumento es tomado de una obra de
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Sardou.
EL M. R. P. PROCURADOR GENERAL DE LA ORDEN, a su reE • greso de España, ha sido recibido en audiencia p irticular por Su Santidad.
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