Recomendaciones para el empleo de BactoCROP‐TH en plantaciones de Caña de Azúcar (Saccharum officinarum L.) La caña de azúcar (Saccharum officinarum L) es una gramínea tropical emparentada con el sorgo y el maíz en cuyo tallo se forma y acumula un jugo rico en sacarosa, compuesto que al ser extraído y cristalizado forma el azúcar. Es un cultivo plurianual. Se corta cada 12 meses, y la plantación dura aproximadamente 5 años. Tiene un tallo macizo de 2 a 5 metros de altura con 5 o 6 cm de diámetro. El sistema radicular lo compone un robusto rizoma subterráneo; puede propagarse por estos rizomas y por trozos de tallo (canutos). La caña tiene una riqueza de sacarosa del 14% aproximadamente, aunque varía a lo largo de toda su ciclo. CARACTERISTICAS DESCRIPTIVAS Familia: Poaceae (Gramineae) Nombres Comunes: Caña, caña de azúcar. Origen: Nueva Guinea para caña de tallo grueso (Brandes, 1956) e India para caña de tallo delgado (Chaturvedi, 1951) Distribución: 37°LN a 32° LS (Biswas, 1986). Adaptación: Trópico y subtrópico; zonas húmedas, subhúmedas y semiáridas (Biswas, 1986). Ciclo vegetativo: 10‐24 meses (Biswas, 1986). Tipo Fotosintético: C4 REQUERIMIENTOS CLIMATICOS Y EDAFICOS Fotoperiodo: Es una especie de día corto, pero hay cultivares de día neutro (Benacchio 1982). La mayoría de los cultivares no florecen a fotoperiodos mayores a 13 horas y menores a 12 horas. Las condiciones que inducen la iniciación floral son 12.4 horas de fotoperiodo y 20‐25°C de temperatura nocturna (Barandas, 1994). Altitud: 0‐1600 m (Benacchio, 1982). Precipitación: 1000‐2200 mm bien distribuidos en el año, disponiendo de agua para riego complementario cuando el déficit hídrico anual sea superior a 150 mm. Para la zafra se requiere una época seca (Benacchio, 1982). Dependiendo del clima, las necesidades de agua de la caña de azúcar son de 1500 a 2500 mm, distribuidos de manera uniforme durante la temporada de desarrollo. Con una evapotranspiración durante la estación vegetativa de 5 a 6 mm/día, el nivel de agotamiento puede ser del 65% del agua total disponible, sin tener efectos graves sobre los rendimientos (Doorembos y Kassam, 1979). Humedad ambiental: Prefiere humedades relativas alrededor de 50% (Kakade, 1985b). Temperatura: El amacollamiento se reduce a menos de 21°C (Biswas, 1986) y se incrementa a temperaturas alrededor de 26°C (Raheja, 1959; Singh y Singh, 1966). Temperaturas ligeramente por arriba de 20°C son las más favorables para el crecimiento (BIswas, 1986). El crecimiento activo se reduce mucho cuando la temperatura cae por debajo de los 10°C, y si ésta es menor de 5°C las hojas presentan una coloración rosada que viene a ser un síntoma similar al causado por la inundación (Biswas, 1986). Las temperaturas cercanas a los 38°C reducen la fotosíntesis y por lo tanto el crecimiento en general (Kortschack, 1972). Temperaturas altas del suelo reducen el crecimiento del sistema radicular (Blackburn, 1984). Bajas temperaturas y alta humedad son más favorables para una floración temprana que tiempo seco y soleado (Stevenson, 1963), pero las temperaturas nocturnas por debajo de 18°C pueden prevenir la floración (Coleman, 1968). Una reducción gradual de temperaturas y humedad durante 4‐6 semanas antes de la cosecha ayudan significativamente a la maduración (Kakade, 1985a). El crecimiento de la caña cesa entre 10‐12°C y está considerada como la temperatura mínima para el comienzo de la maduración. La maduración se acelera también retirando el agua de riego de cultivos irrigados (Gowing y Baniaboassi, 1978). Luz: La caña tiene una alta habilidad para utilizar eficientemente la energía solar. En plantaciones de campo, la tasa fotosintética se incrementa hasta una completa intensidad natural de la luz. Por eso entre mayor sea la incidencia de la radiación, es mayor la producción que se puede esperar (Blackburn, 1984). Textura de suelo: Tolera muy bien condiciones diversas del suelo. De manera general, se cultiva con éxito tanto en terrenos arcillosos muy pesados, como en terrenos extremadamente arenosos (Fauconnier y Bassereau, citados por Rojas y Eldin, 1983). Profundidad del suelo: 50 cm (óptimo) y 10‐50 cm (marginal) (FAO, citado por Rojas y Eldin, 1983). Normalmente, con un suministro normal de agua, el 100% del agua se extrae de los primeros 1.2 a 2.0 m del suelo (Doorenbos y Kassam, 1979). Salinidad: La caña de azúcar es moderadamente sensible a la salinidad y la disminución en el rendimiento del cultivo por este factor es la siguiente: 0% para una conductividad eléctrica de 1.7 mmhos/cm; 10% para 3.3 mmhos/cm; 25% para 6.0 mmhos/cm; 50% para 10.4 mmhos/cm y 100% para 18.6 mmhos/cm (Doorembos y Kassam, 1979). pH: Rango 4.5‐8.5 (óptimo 5.5‐8.2) (FAO; citado por Rojas y Eldin, 1983). El óptimo va de 6.0 a 8.0 (Ignatieff; citado por Moreno, 1992). La caña se desarrolla bajo un pH de 5.0 a 8.5, siendo el óptimo alrededor de 6.5 (Doorembos y Kassam, 1979). Drenaje: Requiere de suelos moderadamente drenados a bien drenados (lo óptimo) (FAO, citado por Rojas y Eldin, 1983). Necesidades nutricionales: La fertilización constituye una práctica cultural de máxima importancia para que los cañaverales alcancen altos rendimientos. Sin embargo, su elevado costo exige realizar un uso oportuno y efectivo de los nutrientes para asegurar su máximo aprovechamiento. El logro de mejoras en la eficacia de la fertilización, práctica que debe ser integrada al manejo general del cultivo y asociada a la incorporación de los avances tecnológicos disponibles, permitirá el establecimiento temprano de una población inicial óptima, con una distribución uniforme de los tallos y con mínimas fallas, asegurando la conformación de cañaverales con una elevada población de tallos molibles, componente de máxima importancia en la definición del rendimiento. Las necesidades nutricionales de cualquier cañaveral están determinadas por la cantidad total de nutrientes que necesita extraer del suelo durante su crecimiento y desarrollo para lograr una elevada producción. La caña de azúcar posee altos requerimientos nutricionales debido a su elevada capacidad de producción de material vegetal (tallos molibles, follaje, cepa y raíces) y la prolongada duración de su ciclo, razón por la cual efectúa una elevada extracción de nutrientes del suelo que puede alcanzar niveles de 800‐1500 kg/ha/año de nutrientes, destacándose por su cantidad algunos macronutrientes. En México, generalmente se emplea la dosis de fertilización 120‐60‐60, sin considerar la variedad, el ciclo de cultivo y el tipo de suelo; por lo que es recomendable realizar estudios para determinar las demandas nutricionales del cultivo a fin de satisfacer los requerimientos de este y no agotar las reservas de los suelos. MANEJO AGRONÓMICO Y SANITARIO a) PREPARACIÓN DEL TERRENO: Consiste esencialmente en dejar el suelo mullido, para lo cual, se aplica al terreno un barbecho y una cruza con arado de discos; enseguida se emplea una rastra pesada atravesado a la cruza; si el suelo es delgado y calichoso, se evitará mezclar el caliche con el suelo superficial. Posteriormente, con arado de doble reja, se trazarán surcos a 1.20 m de separación con pendiente muy ligera; si los surcos son muy largos, se dividen en "tajos" de 40 a 50 m para que los riegos sean uniformes. b) SIEMBRA La caña para siembra deberá cortarse de un semillero sano usando plantas de entre nueve a 11 meses de edad. Los tallos se trocean en tramos de 50 cm, los que pueden tener de tres a seis yemas, según el tamaño del canuto. La mejor época para sembrar comprende de julio a noviembre, para aprovechar las lluvias y altas temperaturas; por presentar condiciones menos propicias las siembras de diciembre en adelante, afectan los rendimientos. Se recomienda sembrar a "medio petatillo", en el primer período y, en siembras posteriores a "cordón doble", para lo que se necesitan de nueve a 14 toneladas de semilla por hectárea respectivamente, según la variedad. c) FERTIRRIEGO: Aplicación de fertilizantes a través del agua de riego (fertirrigación) con el sistema de goteo en caña de azúcar, que incrementa la producción de 60 t ha–1 de caña que se obtienen en promedio en el sistema tradicional de riego por gravedad, a 180 t ha‐1 con la tecnología de fertirrigación y riego por goteo en suelos arcillosos. Con esta tecnología se ayuda a mejorar la baja rentabilidad del cultivo, causada principalmente por el bajo potencial de producción (60 t ha‐1 promedio) y la baja eficiencia de uso del agua de riego (45% global). d) PLAGAS Y ENFERMEDADES: PLAGAS: En México se considera que las plagas carecen de importancia económica, no obstante, mencionaremos algunas que pudieran llegar a tener relevancia: Barrenador del tallo (Diatraea spp. y Chilo loftini): Las recomendaciones para disminuir los daños del barrenador incluyen una buena preparación del terreno, sembrar semilla sana, destruir los residuos de la cosecha anterior antes de preparar el suelo, hacer una buena fertilización y regar lo suficiente en periodos de sequía. Cuando se presentan altas infestaciones de barrenador se puede recurrir al uso de insecticidas. Mosca pinta o salivazo (Aenolamia postica, Prosapia simulans). Pulgón amarillo (Sipha flava). Rata de campo (Sigmodon hispidus). ENFERMEDADES: Las enfermedades en la caña no constituyen un problema grave, sin embargo, se han detectado en la zona algunas variedades susceptibles al carbón, causado por Ustilago scitanimea Sydow y la roya Puccinia malanosephala. e) COSECHA: Se realiza cuando la caña alcanza el máximo peso y el óptimo contenido de azúcar. El cañaveral se quema antes y los tallos se cortan al ras del suelo, eliminando el cogollo. La cosecha se realiza de dos formas: manual y mecánica. En la primera se utiliza mucha mano de obra, ya que la caña se tumba con machete, formándose montones para que posteriormente la alzadora vaya cargando los remolques o camiones. La segunda se hace mediante una máquina que casi simultáneamente va despuntando (eliminando el cogollo), cortando a ras de suelo, picando los tallos y cargando a los camiones. IMPORTANCIA ECONOMICA DEL CULTIVO Y EPOCAS DE PRODUCCION La industria azucarera es una actividad relevante para el país, el cual cuenta con 62 ingenios y genera aproximadamente 300 mil empleos. Los ingenios mexicanos procesan la producción generada en aproximadamente 500 mil hectáreas cultivadas, que generan un promedio anual de 34 millones de toneladas de caña de azúcar, con rendimiento de 68 a 69 toneladas por hectárea. Actualmente México se encuentra entre los 10 principales productores y consumidores de azúcar a nivel mundial. Su producción aproximada es de 4.1 millones de toneladas y su consumo de 3.8 millones de toneladas (1997). PRINCIPALES PAISES PRODUCTORES DE CAÑA DE AZÚCAR (Hectáreas) PAISES 2004 2005 2006 2007 2008 Brasil 415,205,835 422,956,646 477,410,656 549,707,328 648,921,280 India 233,861,800 237,088,400 281,171,800 355,519,700 348,187,900 China 91,044,422 87,578,212 100,498,257 113,731,917 124,917,502 Tailandia 64,995,741 49,586,360 47,658,097 64,365,482 73,501,610 México 48,662,244 51,645,544 50,675,820 52,089,356 51,106,900 Pakistán 53,820,000 47,244,100 44,665,500 54,741,600 63,920,000 Australia 36,993,454 37,822,192 37,128,000 36,397,000 33,973,000 Colombia 40,100,000 39,849,240 31,000,000 32,000,000 38,500,000 Estados Unidos 26,320,160 24,136,570 27,033,200 27,750,600 27,603,000 Guatemala 23,454,030 18,721,415 25,436,764 25,436,764 18,283,000 PRINCIPALES ESTADOS EN MÉXICO POR PRODUCCIÓN DE CAÑA DE AZÚCAR INDUSTRIAL (Toneladas) ESTADOS 2004 2005 2006 2007 2008 Veracruz 18,299,845.8 19,852,453.4 18,941,266.9 18,865,516.5 18,160,401.0 Jalisco 5,862,253.3 6,013,712.1 5,488,871.7 6,139,325.6 5,974,607.9 Oaxaca 3,536,011.9 3,830,625.0 3,459,762.0 3,645,211.2 3,540,276.5 San Luís Potosí 3,105,015.0 3,381,793.2 3,235,173.0 3,418,273.6 3,819,687.7 Tamaulipas 2,783,452.0 3,247,995.0 3,183,051.0 3,353,670.0 3,202,665.0 TOTAL 48,662,243.3 51,645,543.6 50,060,254.1 52,089,355.8 51,090,720.7 El tiempo apropiado para la cosecha se determina mediante el análisis de los grado Brix, que se realiza en tres partes de la caña: punta, medio y base. La caña llega a su período óptimo de cosecha cuando la diferencia de grado brix entre las partes es mínima. En el caso de cañas inmaduras, el contenido de grados Brix en la punta es mucho menor al del medio y la base, y ocurre al revés cuando la caña ha sobrepasado su período óptimo de cosecha. BIOFERTILIZANTES También conocidos como bioinoculantes, inoculantes microbianos o inoculantes del suelo, son productos agrobiotecnológicos que contienen microorganismos vivos o latentes (bacterias u hongos, solos o combinados) y que son formulados bajo condiciones controladas de laboratorio para utilizarlos en los cultivos agrícolas para estimular su crecimiento y productividad mediante la optimización de su estatus nutricional y el control de patógenos. Biofertilizante compuesto por un consorcio de bacterias benéficas de los géneros Bacillus y Azospirillum que contribuye al aumento de la productividad de los cultivos a través de distintos mecanismos como la producción de hormonas que favorecen el desarrollo vegetal, la solubilización de nutrimentos inactivados del suelo, incremento del volumen de raíz y la protección contra enfermedades radiculares, foliares y del fruto causadas por hongos y microorganismos fitopatógenos tales como Xanthomonas, Clavibacter, Erwinia, Fusarium, Pythium, Rhizoctonia y Phytophthora, entre otros. Beneficios del uso de BactoCROP Incrementa significativamente el desarrollo de las raíces Aumenta el establecimiento de las plántulas y disminuye la pérdida de plantas Acelera el desarrollo de plántulas, plantas adultas y frutos Mejora la floración Acorta los tiempos de cosecha Alarga los tiempos de producción de las hortalizas Promueve un crecimiento más uniforme de los cultivos Incrementa la disponibilidad de nutrientes inactivados del suelo Incrementa el rendimiento de los cultivos en hasta 25 a 30 % en el caso de hortalizas Mejora la calidad de los frutos Reduce el uso de pesticidas químicos Ayuda a prevenir y controlar enfermedades bacterianas BactoCROP puede emplearse en cualquier etapa del cultivo en el tratamiento de semillas, tubérculos, rizomas, canutos, plántulas en charola, semilleros y almácigos, y puede ser aplicado mediante los sistemas de riego, mochilas de aspersión o en la base de las plantas en ‘drench’ y el follaje durante las etapas fenológicas críticas del cultivo, preferentemente desde su establecimiento. Recomendaciones de manejo biológico con BactoCROP‐TH en plantaciones de Caña de Azúcar (Saccharum officinarum L.) Producto Aplicaciones por ciclo Al suelo Foliar 3 kg 1.5 kg Uso de BactoCROP durante la siembra 1. Se recomienda emplear de 10‐12 ton/ha de semilla (canutos) de 8 a 10 meses de edad, dependiendo de la variedad. El biofertilizante se debe aplicar a los canutos asperjándolos mediante una mochila a bien mediante inmersión en un tambo grande (500 g de BactoCROP‐TH diluidos en 40 litros de agua). De igual manera se puede realizar la siembra por medio de plántulas (dos yemas y cerca de 3.0 ton/ha), en cuyo caso la inoculación se realiza sumergiendo estas plántulas de forma total en una solución compuesta de 500 g de BactoCROP‐TH con 40 litros de agua o alternativamente se pueden asperjar con esta solución. Se recomienda hacer la primera aplicación de biofertilizantes en esta etapa ya que de esta manera se promueve un mayor enraizamiento de las plántulas, además de que éstas obtendrán una protección más temprana contra diversas enfermedades. Posteriormente se recomiendan realizar dos aplicaciones con intervalos de un mes a dos meses entre ellas. Estas aplicaciones posteriores de BactoCROP se realizan inoculando 2/3 de BactoCROP (1 kg) en el sistema de riego y 1/3 (0.5 kg) asperjado al follaje, ajustando la cantidad de agua para diluir el producto conforme el desarrollo de la planta a fin de poder de manera abundante el producto en todo el follaje de la planta. Aplicaciones de BactoCROP en plantaciones ya establecidas 1. Se recomienda realizar tres aplicaciones del biofertilizante BactoCROP‐TH (1 bolsa/ha) durante el ciclo del cultivo, desde el inicio del ciclo de producción y posteriormente cada dos meses. Las aplicaciones de BactoCROP se realizan inoculando 2/3 de BactoCROP (1 kg) en el sistema de riego y 1/3 (0.5 kg) asperjado al follaje, ajustando la cantidad de agua para diluir el producto conforme el desarrollo de la planta a fin de poder de manera abundante el producto en todo el follaje de la planta. NO DISUELVA EL CONTENIDO TOTAL DE LA BOLSA DE BactoCROP EN UNA CANTIDAD DE AGUA MENOR A 200 LITROS. SI VA A DOSIFICAR EL PRODUCTO, MANTENGA SIEMPRE UNA PROPORCIÓN DE 100 g DE PRODUCTO POR CADA 30 A 40 LITROS DE AGUA. PARA EVITAR LA FORMACIÓN DE GRUMOS, AGREGUE POCO A POCO EL PRODUCTO, MEZCLANDO VIGOROSAMENTE CON UNA VARA O LAS BOMBAS DE LOS TANQUES DE ASPERSIÓN. 2. Una vez mezclado con agua, el producto debe ser utilizado dentro de las siguientes 24 hrs. NOTA: La cantidad de agua en la que se diluyen los productos puede variar de acuerdo al tamaño del follaje y a la densidad de plantas. “Con el uso del Biofertilizante BactoCROP, se han podido constatar incrementos en la producción que van de un 60 a un 100%, es decir se puede incrementar las cosechas al doble dependiendo del nivel tecnológico con que cuente el productor, por otro lado, también se ha encontrado un incremento en los grados Brix de hasta en un 50%, lo que hace una cosecha de mayor calidad.” Análisis de rentabilidad para el cultivo de caña de azúcar comparando los rendimientos esperados utilizando el programa de manejo convencional de los productores y el paquete biotecnológico BactoCROP‐TH. Manejo tradicional sin biofertilizantes Paquete tecnológico con BactoCROP‐TH ($1,300°°) 3 aplicaciones Año Precio medio rural ($/ton) Rendimiento (ton/ha) Valor de producción neto ($/ha) Rendimiento (ton/ha) Valor de Costo Paquete producción Tecnológico bruto ($/ha) BactoCROP Valor de Aumento neto producción del valor de la neto ($/ha) producción 2009 $387.45 79.25 $30,705.41 126.80 $49,128.66 $3,900.00 $45,228.66 $14,523.25 2010 $636.05 55.79 $35,485.23 89.83 $57,131.22 $3,900.00 $53,231.22 $17,745.99 2011 $700.00 68.67 $48,069.00 109.19 $76,429.71 $3,900.00 $72,529.71 $24,460.71 2012 $714.54 66.70 $47,659.82 108.05 $77,208.91 $3,900.00 $73,308.91 $25,649.09 2013 $520.00 77.82 $40,466.40 126.07 $65,555.57 $3,900.00 $61,655.57 $21,189.17 Promedio $591.61 69.646 $40,477.17 111.99 $65,090.81 $3,900.00 $61,190.81 $20,713.64 Nota: Los resultados no incluyen los ahorros relacionados con la disminución de la aplicación de pesticidas químicos para el control de enfermedades, ni las ganancias obtenidas por el aumento en la calidad de las cosechas (grados Brix principalmente). Los análisis tampoco contemplan los costos de producción ya que éstos varían grandemente de acuerdo al grado de tecnificación de los sistemas de producción. CONCLUSIONES Del cuadro anterior se puede concluir que es posible aumentar las ganancias netas obtenidas por hectárea de caña en al menos $20,713.64 mediante el paquete tecnológico de BactoCROP‐TH. Bibliografía Consultada Comisión Veracruzana de Comercialización Agropecuaria. 2013. Monografía de la caña de azúcar. Gobierno del estado de Veracruz. Veracruz, México. INIFAP. 2013. Tecnología para el cultivo de la caña de azúcar en temporal en el estado de San Luis Potosi. INIFAP, SAGARPA, San Luis Potosí, México. Mata‐Vázquez H. 2005. Fertirrigación para alta producción de caña de azúcar con riego por goteo. INIFAP, SAGARPA, ficha tecnológica. Tamaulipas, México, 2 p. Méndez‐Salas R., Aranda‐Fandiño E. 2000. 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