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Primera de Corintios
Corintio, cómo toda gran ciudad que tiene sus problemas
sociales por resolver, pues estaba infectada de corrupción,
y todo pecado contaminable, pero los cristianos de corintio
no querían adaptarse ha ese ambiente de pecado, porque
sabían que a través de Cristo serian libres de está
contaminación.
Pero lo que no sabían, ¿Era qué significaba esa libertad?
¿Cómo debían vivir frente a los ídolos y la sexualidad?
¿Ni qué debían hacer con respecto al matrimonio, las
mujeres en la iglesia y con los dones del Espíritu Santo?
Se hacían estas preguntas teológicas porque la iglesia
estaba siendo socavada con la inmoralidad y la inmadurez
espiritual. Pues esperaban que “Dios corrige a su
Iglesia”.
Por todas estas razones, el apóstol se propuso a identificar
los problemas de la iglesia de Corintio, para ofrecerles
soluciones y enseñar a los creyentes cómo vivir con Cristo
en una ciudad corrupta. Aunque pocos esperaban algo de
la extraviada Corinto, porque estaba dispuesta a todo y
creían que era el peor lugar para establecer una iglesia.
Pero el apóstol los reunió y les dijo: mirad, hermanos,
vuestra vocación, porque no sois muchos sabios según la
carne, ni muchos poderosos, ni muchos nobles, sino que lo
necio del mundo escogió Dios, para avergonzar a los
sabios, y lo débil del mundo escogió Dios, para
avergonzar a los fuertes.
La iglesia corintia
Cabe resaltar que la iglesia de corintio era pequeña, donde
la mayor parte de la comunidad vivía en un ambiente
cristiano, personas sencillas, de origen gentil (1:26; 12:2)
y desde su reciente conversión, se veía sometida a fuertes
tensiones espirituales y morales.
Pero el anuncio del evangelio fue bien acogido desde el
principio, cuando Pablo, llegó a Corinto procedente de
Atenas. (Hechos 18:11) , pues permaneció en la ciudad un
año y seis meses, entregado totalmente a la proclamación
de la fe en Jesucristo (Hechos 18:1-18).
En cuanto a las primeras actuaciones del apóstol, fueron
encaminadas para relacionarse con los judíos residentes,
según sus costumbres, (Hechos 18:2, 4, 6, 8); pero la
oposición de ellos, llevó al apóstol a dedicar los mayores
esfuerzos a la población gentil (Hechos 18:6).
Así que fue un tiempo relativamente largo, que Pablo pasó
en la capital de Acaya, y su labor consistió en poner los
cimientos para que otros, como Apolos (1:12), pudieran
seguir anunciando el evangelio en la región del
Peloponeso (3:6-15).
¿Porque la carta a los Corintios?
Todo indica que Pablo fue impulsado a escribir la carta
por tres razones.
1). Porque el apóstol había recibido noticias de la familia
de Cloe, que en la congregación habían discordias (1:1112).
2). Porque le había llegado una misiva de la congregación,
y le planteaba unas cuantas preguntas (7:1); y estas
comenzaban con las frases “Ahora paso a…”, “En cuanto
a…” (7:1; 8:1; 12:1; 16:1). También los temas de los
capítulos 11 y 15 pueden considerarse réplicas de las
preguntas incluidas en la carta que la congregación mandó
a Pablo.
3). Cuando Pablo se hallaba en Éfeso, vino a verlo una
delegación de tres miembros de la iglesia de Corintio y le
trajo un informe acerca de la situación que reinaba allí
(16:17).
Estas tres fuentes de información, fueron el informe,
la carta, y la delegación, convencieron a Pablo sobre la
imperiosa necesidad de escribir una carta a la iglesia en
Corintio, lo mas pronto posible. Ya que los problemas
eran tan serios, que resultaba extraño considerar a los
corintios como “cristianos”.
Porque algunas personas de la congregación,
arrastran a otros ante el tribunal, se emborrachaban en la
Cena del Señor, y otros negaban la resurrección de
Cristo. Pues se habían infiltrado personas con malas
intensiones a la iglesia de Corinto, que había ido
fundada por Pablo sólo unos años atrás.
Es muy interesante pensar que el apóstol, decide
proceder enseñando el evangélico, aunque ellos tenían
serios problemas, pero después de unas breves palabras
de introducción (1:1-3), Pablo asegura que “siempre da
gracias a Dios por los corintios, por la gracia que Dios
ha derramado sobre ellos por medio de Cristo Jesús.
Pues por medio de él Dios les ha dado gran riqueza
espiritual, de modo que no les falta ningún don de Dios;
al contrario, Dios los mantendrá firmes hasta el fin, para
que nadie pueda reprocharles nada cuando nuestro
Señor Jesucristo regrese”, (1:4-9). ¡Que palabras más
evangélicas frente a tan serios problemas! Pablo
demuestra una firme confianza en el poder del mensaje
divino aun hallándose frente a los más graves errores.
Pero los males que afectaban a la iglesia de Corinto,
tuvieron su raíz, en el trasfondo racionalista de la
cultura griega y nativa, pues su tendencia a sobrevalorar
la sabiduría humana. Entonces Pablo, encara estos
problemas con firmeza, pero también con la convicción
de tratarlos en el espíritu evangélico, ya que éste es el
mejor camino para llegar a una solución.
Autor y fecha
Según el primer versículo, la epístola fue escrita por el
apóstol Pablo, en su segundo viaje misionero. Porque esta
se había contaminado con los males que rodeaban a está
ciudad silenciosa, cuyo papel no puede ser cuestionado,
pues la realidad es que la carta de Pablo ha sido
universalmente aceptada por la iglesia del primer siglo.
Pues el apóstol afirma haber escrito la epístola (1:1,13;
3:4-6; 4:15; 16:21). Y ha sido reconocida como genuina
desde el 95 d.C. por Clemente de Roma, y los líderes
cristianos de la iglesia certificaron a Pablo como el autor,
pero tambien incluyen a Ignacio (110 d.C.), Policarpo
(135 d.C.), y Tertuliano (200 d.C.).
Es muy probable que esta pequeña epístola que contiene
16 capítulos 437 versículos. Haya sido escrita en la mitad
del año 55 d.C. desde Éfeso (16:8, 9, 19) mientras Pablo
estaba en su tercer viaje misionero. Ya que el apóstol tenía
la meta de permanecer en Éfeso, para completar su
estancia de tres años (Hechos 20:31) hasta Pentecostés
(mayo o junio) del 55 d.C. (16:8). Después esperaba estar
en Corinto (55-56 d.C.) para el invierno (16:6; Hechos
20:2). Su partida a Corinto era esperada aún mientras
escribía (4:19; 11:34; 16:8).
Marco Histórico
Los griegos estaban orgullosos de sus conocimientos y
filosofía, pero al mismo tiempo eran muy inmorales y
amantes a la idolatría.
Es evidente que Apolos, un judío cristiano elocuente que
había venido a Corinto, se ganara la admiración de los
cristianos griegos. Este hecho llevó a los creyentes hacer
comparaciones entre él, y otros líderes religiosos.
Especialmente en el descrédito de Pablo, cuya apariencia
física parece no haber sido impresionante (2 Corintios
10:10). Esto probablemente fue la clave de las divisiones
en la iglesia, 1 Corintios 1:11-13. Pero el deseo de Pablo
era purificar la iglesia de facciones espirituales e
inmoralidad, lo cual fue la causa primordial de la carta.
La península del Peloponeso, en el sur de Grecia, es un
territorio montañoso unido al resto del país por un istmo
corto y angosto. En la época del NT estaba sometida a la
administración romana, como parte de la provincia de
Acaya, cuya capital, era Corinto, situada a pocos
kilómetros al sudoeste del istmo.
Pero Corintio, no había conocido el esplendor y la miseria
a lo largo de su historia, sin embargo, en el año 146 a.C.
estuvo a punto de desaparecer, arrasada por los romanos;
pero un siglo después, en el año 44 a.C. la propia Roma
dispuso que la ciudad fuera reconstruida y habilitada por
el gobernador de la provincia.
De este último dato quedó constancia en Hechos 18:12-18,
donde se dice que el procónsul Lucio Junio Galión,
gobernaba Acaya, cuando Pablo llegó allí, en su segundo
viaje misionero.
No obstante, Corinto tenía una doble salida al mar: al
Adriático por el puerto de Lequeo, y al Egeo por el de
Cencrea (Hechos 18:18; romanos 16:1). Esa privilegiada
situación geográfica, reportaba no pocos beneficios a la
ciudad, pues ambos puertos eran muy frecuentados por los
barcos que hacían las rutas comerciales.
En ese entonces, la población corintia, se estimaba en unas
600.000 personas, incluía mercaderes, marineros, soldados
romanos retirados y una elevadísima proporción de
esclavos (alrededor de 400.000). Además, Corinto era, un
centro de incesante afluencia de peregrinos, que desde
lejanos lugares acudían a rendir adoración a las diversas
divinidades que tenían su santuario allí.
Por esto, fue llamada la ciudad famosa, por su riqueza y
cultura, también por la relajación moral de sus habitantes y
el libertinaje que dominaba las costumbres de la sociedad.
Es posible que muchas de las críticas que se le hacían
fueran exageradas, pero ciertamente la mala reputación de
Corinto, eran la prostitución sagrada en el templo de
Afrodita, era proverbial en toda la cuenca del
Mediterráneo.
Lugar de redacción
La Primera epístola a los Corintios fue escrita en Éfeso,
donde, Hechos 20:31, Pablo vivió tres años, entre el año
54 y el 57. Mientras estaba allí, los creyentes de la
congregación le hicieron llegar, con Estéfanas, Fortunato y
Acaico (16:17), unas consultas, y las respondió con la
presente carta (1 corintios 7:1, 25; 8:1, y también 10:23;
11:2; 12:1; 15.1).
Propósito
Más o menos por la misma fecha, “los de Cloé”
informaron al apóstol (1:11) de la difícil situación que
estaban atravesando los creyentes de corintio. Pues eran
arrastrados por la fanática adhesión personal, unos decían
que eran de Pablo, otros de Pedro y otros de Apolos (1:12;
3:4), y esto ponía en grave peligro la unidad de la iglesia.
Porque la mayoría de los hermanos seguían pesando en la
conducta general y la corrupción que caracterizaba a la
ciudad y se dejaba sentir su influencia en la congregación,
incluso, se daban casos de inmoralidad que exigían ser
inmediatamente corregidos.
Contenido y estructura
Por está razón, Pablo comienzo esta carta para abordar el
problema de las divisiones internas, porque la amenaza
crecía sobre la comunidad cristiana, como un signo de
incomprensión y el olvido de las afirmaciones básicas de
la fe: pues la iglesia fue convocada a unidad de
pensamiento y de parecer (1:10-17; Juan 17:21-23;
Efesiso4:1-5; Filipenses 2:1-11); por que la única
sabiduría verdadera es la que “Dios predestinó... para
nuestra gloria” (1:18-3:4), y que solo Cristo es el
fundamento de nuestra salvación (3:5-4:5;1 Timoteo 2:56).
Es por ello, que el apóstol trata de orientar a sus lectores,
respecto a los otros males que ya estaban presentes en la
iglesia, y debía impedir su progreso sin pérdida de tiempo:
pues era una situación transgresora y consentida por la
congregación (5:1-13).
No obstante, Junto a estas instrucciones, el apóstol,
responde con una carta que contiene las respuestas a las
preguntas de los corintios, que estaban relacionadas con el
matrimonio cristiano y el celibato (7:1-40), con el
consumo de alimentos consagrados a los ídolos, pues los
ponían a la venta pública (8:1-13; 10:25-31) tambien por
la diversidad de dones otorgados por el Espíritu Santo
(12:1-14:40).
Aunque otros textos, eran relacionados con la doctrina y el
testimonio cristiano, incluyendo las amonestaciones en
contra de la idolatría (10:1-11:1). Pero el cuerpo central
de 1 Corintios, prologado por un saludo y una
presentación temática de carácter general (1:1-9), pues
concluye con un epílogo que contiene breves indicaciones
acerca de la ofrenda para la iglesia de Jerusalén, más las
acostumbradas salutaciones y notas personales del apóstol
(16:1-24).
Su método general: La idea principal es que tenían
buenas cosas, pero les faltaba el amor. Por esto se
metieron en tantos problemas, pues les faltaba el
conocimiento de la palabra de Dios.
Su mensaje clave: Fue Dios, Jesús (Cristo, Señor),
Espíritu. Divisiones (dividido), espíritu (note de qué o de
quién), poder, mente, sabio (sabiduría), perito, predicar,
cuerpo e iglesia.
Su argumento: Fue la unidad cristiana, la moralidad, el
rol de las mujeres, los dones espirituales y la resurrección
de Cristo.
Sus vasos: La iglesia en Corinto, compuesta mayormente
por gentiles (12:2; 8:7).
Su ocasión: Fue cuando Pablo responde a una carta de la
iglesia (7:1) y les informa que la ha recibido (1:11; 5:1).
Su énfasis: Fue el mensaje de un Mesías crucificado en la
cruz, y un evangelio centrado en la sabiduría y el poder de
Dios; el comportamiento cristiano que se conforma al
evangelio; la verdadera naturaleza de la vida en
el Espíritu; la futura resurrección corporal de los cristianos
muertos.
Versículos claves
“os ruego, pues hermanos, por el nombre del señor
Jesucristo, que habléis todos una misma cosa, y que no
haya entre vosotros divisiones, sino que estéis
perfectamente unidos en una misma mente y un mismo
parecer”. (1:10).
“pues mirad hermanos, vuestra vocación, que no seáis
muchos sabios según la carne, ni muchos poderosos, ni
muchos nobles, sino que lo necio del mundo escogió Dios,
para avergonzar a los sabios; y lo débil del mundo escogió
Dios, para avergonzar a los fuertes”. (1:26-27).
Su comercio: Se situaba al borde del istmo de Corinto,
pues la ciudad era una encrucijada para los viajeros y
comerciantes. Porque tenía dos puertos:
1). Era Cencrea, a unos 10 km al este, sobre el golfo
Sárónico.
2). Quedaba Lequeo, a 2.5 km, sobre el golfo de Corinto y
las mercancías circulaban en el istmo por un camino que
conectaba a los dos golfos. Pues los barcos pequeños
transportaban su carga por este camino, mientras que los
buques se llevaban sus cargas en vagones. De este modo,
la ciudad de Corinto se vinculaba con las regiones del
occidente (Italia, España) y el oriente (Asia Menor,
Fenicia, Egipto).
Su cultura: Aunque Corintio no era una ciudad
universitaria como Atenas, su cultura era típicamente
griega. Pero sus habitantes estaban interesados en
la filosofía, pues le daban mucho valor a la sabiduría
humana.
Su religión: En Corinto había al menos 12 templos, pero
el más infame era el templo dedicado a Afrodita, “la diosa
del amor”, cuyos adoradores practicaban la prostitución
religiosa. Y el templo de Asclepios, “el dios de la
sanidad”, que se hallaba cerca del teatro y en medio de la
ciudad, se encontraba “el templo de Apolo”, que data del
siglo sexto a.C. Además, los judíos habían establecido allí
una sinagoga, cuyo dintel (tiene una inscripción) y ahora
se encuentra en un museo dedicado a las antigüedades de
la ciudad.
Su inmoralidad: Al igual que cualquier otra gran ciudad
comercial, Corinto era un centro de inmoralidad abierta
con una desenfrenada adoración a “Afrodita” que
promovió la prostitución en nombre de la religión.
Durante un período, 1.000, pues las prostitutas sagradas
eran quienes servían en el templo.
Por está razón, la inmoralidad de Corinto llegó a ser
ampliamente conocida, que hasta el nombre de la ciudad
se convirtió en verbo (algo así como “corintionizar”) esto
indicaba la práctica de la inmoralidad sexual. Aunque no
era de extrañarse que la iglesia de los corintios estuviera
plagada de numerosos problemas.
Ahora le animamos a que examine el contenido:
1). El Prólogo (1:1-9).
2). Las divisiones en la iglesia de Corintio (1:10-4:21).
3). Pablo corrige a la iglesia de Corintio (5:1-6:20).
4). Regalas sobre el matrimonio (7:1-40).
5). La libertad cristiana en Corintio (8:1-11:1).
6). La vida de la iglesia de Corintio (11:2-34).
7). Los dones del Espíritu Santo (12:1-14:40).
8). La resurrección de los muertos (15:1-58).
9). El epílogo del libro (16:1-24).
Así que esta epístola a los corintios, tiene un lugar
importante en la historia bíblica, porque constantemente
recuerda dos cosas muy importantes para la vida del
creyente:
1). Que Dios llama a las personas hacia él para
conformarlas a su imagen, para que sean reflejadas en la
(aparente) debilidad y la locura de la cruz.
2). Porque Él es quien vencerá a nuestro final enemigo,
con su muerte, por su resurrección y transformación.
Plan para leer a 1ª corintios
Cómo está epístola tiene un tono emocional, se presta
para una estimulante lectura de cualquier parte de la
carta, pero hay dos capítulos en especial que no puedes
dejar de leer.
Día uno, descubra el punto mas alto de la capacidad
literaria de Pablo, en el capitulo 13.
Día dos, entérese del crucial pasaje, acerca de la vida y
después de la muerte y de la resurrección de los muertos
en el capitulo 15.
Luego si, lea un capitulo por día comenzando desde el
capitulo uno. Y que Dios te bendiga y te de sabiduría.