El H-S Pro-Serie 2000 SPL es un rifle grande y estilizado, sin nada superfluo en su diseño. Hace gala de una terminación impecable en la que se ha mirado hasta el detalle más pequeño. Su pragmatismo puede observarlo en el perfil de su culata, sin montecarlo, sin carrillera, sin schnabel. Por el contrario tiene todo lo necesario para conseguir las más altas prestaciones. Otra mirada H-S Precision La perfección de la sencillez (I) Existe un instante, vinculado generalmente a la experiencia, a partir del cual el asombro se vuelve excepción. En nuestro particular mundo, la anterior reflexión es especialmente cierta y aunque se tarda en llegar a ella, una vez superada la línea, parece como si nos hubieran cubierto con una coraza. La afición va trayendo a nuestras manos tanto hierro, que, poco a poco, ese saco de la sorpresa se va llenando, quedando al final muy poco hueco donde meter algo más. Por Miguel Coya. [email protected] E stas ideas, que tan raramente aparecen, seguro que despertarán entusiasmo entre nosotros, aunque por su sutileza, podrán llegar a pasar desapercibidas para los no avezados, incapaces de diferenciar esos pequeños detalles que las hacen tan especiales. Precisamente este es el caso que hoy visita nuestras páginas. Aparentemente un H-S Precisión ‘solo’ es un rifle más. En las manos, en cambio, muestra su potencial. Con una terminación impecable, fruto de un esmerado trato en el diseño y acabado de todos sus componentes, abre las puertas al deseo de probarlo, seguros de conseguir con él un comportamiento realmente sobresaliente. Rifle y cartucho H-S Precision se funda en el año 1978 en Dakota del Sur. En sus comienzos trabaja fundamentalmente en la fabricación de cañones. En la actualidad, además de éstos, manu42 factura armas completas –rifles deportivos, desmontables, tácticos y pistolas– y ofrece también culatas sintéticas y cañones probetas para pruebas balísticas. Evidentemente esto último ya da constancia de su grado de precisión y meticulosidad, pues quien es capaz de ofrecer los aparatos más precisos que existen, sin duda los aparatos de control, rubrica su capacidad para reducir al límite las tolerancias de sus manufacturas. Esta característica que le da nombre y de la que hace gala y se vanagloria –siluetas metálicas en el logotipo–, es pregonada una y otra vez en su publicidad, siendo el ejemplo más nítido de ello la garantía que ofrece del nivel de agrupación de sus rifles y pistolas: ½ MOA entre centros para grupos de tres disparos a 100 yardas utilizando cartuchos calibre .30 y menores –cartuchos de mayor diámetro 1 MOA–. Aunque muchos de ustedes saben bien de que va todo esto, permítanme refrescar la memoria a quienes tengan aun alguna duda. Estas siglas corresponden a Minute Of Angle, minuto de ángulo, por supuesto, en sistema sexagesimal. Lo primero que debemos tener en cuenta es que estamos hablando de una medida angular. Si el círculo completo se divide en 360 grados y cada uno de esos grados en 60 minutos, nuestros MOA serán cada uno de esos últimos 60 quesitos. Dependiendo entonces de la longitud de los lados, la separación de los extremos irá variando, siendo menor a menor longitud, y mayor a medida que alarguemos los lados que conforman el minuto de ángulo. A 100 yardas –91,44 metros–, distancia precisamente que toman como patrón los americanos, la separación entre los lados es de 2,54 cm ¿No les suena? Justamente esa medida corresponde a una pulgada. Llevándolo a nuestro sistema métrico y a lo que solemos tomar cuando medimos agrupaciones, a 100 metros la separación entre los lados del ángulo que representa un MOA es de casi 2,8 cm. Por tanto, en este caso particular de la garantía que presume H-S Precision, a 100 metros los grupos de tres impactos no pueden separarse entre centros mas de 1,4 cm. ¡Casi nada! De su reputación habla que firmas como Remington monten sus culatas en alguno de los M-700 más precisos o los francotiradores de la marina de los Estados Unidos sus cañones inoxidables clase match. El Pro-Serie 2000 SPL –Sporter Lightweight– de H-S Precision está fabricado, como todo lo que ofrece la marca, íntegramente por ella en EE UU y, a poco que nos fijemos, uno se da cuenta de que estamos ante un auténtico semi-custom. Es un rifle grande y estilizado, con un peso de 3,2 k y una longitud total de 117,5 cm. El cañón acanalado –fluted– de contorno sport, en este caso mide 26”, perfecto para sacar el jugo a una recámara en .300 Weatherby Magnum. Está fabricado en acero inoxidable, exactamente igual que todo el metal del rifle, disimulándolo un acabado negro consecuencia del baño en teflón negro mate y careciendo de elementos de puntería. Está flotado en toda su longitud sin tocar por ello en ningún punto del guardamanos. El brocal, muy cazador y clásico, es rebatido en semicircunferencia, apreciándose, en el ligero escariado de la boca, el brillo del acero inoxidable. La acción es la Pro-Serie 2000, una variante más de la Mauser 98 y está acabada exactamente igual que el tubo. Cuenta con seguro de tres posiciones, algo ruidoso, sin duda una de las pocas tachas que puedo ponerle a este rifle. Volviendo de nuevo a la descripción, la cabeza recoge totalmente la base del cartucho. El cargador, extraíble, es tipo petaca monohilera, tiene capacidad para tres cartuchos y está fabricado también en acero inoxidable con el mismo tratamiento de teflón. El disparador es directo y permite corrección en tensión y recorrido. La culata es sintética y está fabricada de un compuesto de fibras de vidrio y Kevlar. Embuchado aparece el armazón-chasis de aluminio que tanta fama le ha dado al fabricante, utilizado para dar rigidez, a modo de cama de la acción. De color gris azulado jaspeado, mantiene un perfil extremadamente sencillo y clásico. Utiliza un guardamanos de sección circular y buena dimensión, terminando en un puntal redondeado. El lomo es recto, carece de carrillera y cuenta con cantonera de caucho negro de buen grosor y enganches para las anillas portafusil. El corazón perfecto para este rifle ha de ser un cartucho potente y rasante, con miras a la caza internacional, a las grandes cordilleras y planicies en busca de los trofeos soñados. El .300 Weatherby Magnum está a la altura, es uno de los pocos candidatos ideales. Potente, veloz y rasante, con diámetro y peso suficiente para enfrentarse con ventaja a esas piezas que ansia el cazador aventurero, cierra el círculo de las aspiraciones del 2000 SPL. Recibo dos tipos de cargas. La primera me la envía Excopesa y es de la francesa Sologne, la GPA de 180 grains. Según reza el fabrican43 El brocal evidencia el fin cinegético del rifle. Al contrario de lo que sucede El Zeiss Victory Diavari 2.5-10X50 T* cuenta con los modelos tácticos o deportivos en este caso con torreta compensadora de tra- H-S Precision yectoria H-S Precision, acabados en brocal 11 grados, este es terminado en semicircunferencia. El escariado de ASV. Aparece situada sobre la torreta de elevación. Con ella el fabricante suministra cinco láminas correspon- rebatido de final de la boca enseña por fin el acero inoxidable desnudo. dientes a cinco tipos de trayectorias o grupos de cartuchos. En primer término aparece la torreta de ilumi- do al cañón las dos cargas probadas en nación de la retícula. En este caso es una 60 en segundo plano focal, .300 Weatherby Magnum: a la derecha Sologne GPA de 180 grains, a la izquierda Remington Express PSP Core-Lokt. con punto central rojo cuando está encendida. Créanme, es el único Flanquean- lugar donde lo podemos ver. La óptica está tratada T* y Lotutec. Las con multicapas monturas utilizadas en esta ocasión son fijas y de tipo Buheler. Observe junto a la nuez del cerrojo el retén de éste. El desmontaje del H-S Precision Pro-Serie 2000 SPL descubre un interior tan sencillo como el exterior. Su acabado es impecable encajando cada pieza como un guante. Está enteramente fabricado en acero inoxidable con un baño de teflón negro mate. Observe junto a la recámara el freno de retroceso, que reposa posteriormente contra la cama de aluminio. El cargador monohilera, en este caso tiene capacidad para tres cartuchos, ampliable, finalmente, a cuatro si contamos con el que podemos alimentar directamente en la recámara. reten del almacén se encuentra en el frontal del guardamontes. El El segu- ro, es de tres posiciones, con buen acceso y silencioso. La culata, realizada en un compuesto de fibras de vidrio y Kevlar, embucha su famoso armazón-chasis de aluminio. Está mecanizado a modo de negativo y, sin duda, es una de las razones por la que estos rifles son tan precisos. Montando y desmontando, muestra un nivel de rigidez impresionante, es decir: el material manda exactamente como tiene que quedar el conjunto una vez atornillado. te, la velocidad en boca es de 932 m/seg con una DRO de 177 metros. Se trata del proyectil ya comentado en otras ocasiones, diseñado expresamente para la caza en batida. Engarzado esta vez en un cartucho como el .300 Weatherby Magnum, acaba por completar una receta que rebaja el carácter del súper magnum americano. Su velocidad menor trae aparejada una trayectoria algo mas pobre de lo que nos tiene habituados. La ventaja, hacerlo mas domesticable, permitiendo una más mucho rápida repetición. De todas formas, pensado como es un proyectil para batida, con previsibles disparos cortos y medios, una tensión algo menos curva no debe representar ningún inconve- niente. En las cargas como ésta, es norma que la posible crítica vaya solo en la dirección del análisis de su comportamiento terminal, pues la balística externa siempre va a ser sobrada. Podremos plantearnos si fragmentará correctamente en los cuatro pétalos previstos, si el cortapelo conseguirá un rastro de sangre seguro o el núcleo posterior logrará atravesar la pieza, pero que caiga 3,3 cm a 200 metros, la verdad es que en esta modalidad suena ridículo y no debe ser un problema. Borchers me envía las Remington Express Core-Lokt PSP de 180 grains. La velocidad en el brocal según tablas es de 951m/seg. Se trata de la clásica semiblindada con base plana de Remington, la conocida apuesta todoterreno del fabricante americano. Un buen perfil con un aceptable coeficiente balístico, una considerable velocidad en boca y trayectoria tipo. Su comportamiento terminal es como el de la mayoría de las semiblindadas, regular y sin estridencias, pudiendo tornarse algo dura con especies ligeras debido a su peso. Su mejor ventaja, la relación calidad-precio. Visor, telémetro y monturas El complemento perfecto a un rifle y cartucho como estos, pasa por la elección de un visor con unas características concretas. No debe ser muy grande y pesado y por supuesto de óptica impecable. El Zeiss Victory Diavari 2.5-10X50 T* con torreta compensadora de caída ASV es una magnífica opción todo uso. Al máximo de poder –10X–, tiene suficientes aumentos para disparar muy lejos y su objetivo de 50 nos permitirá ver bien en amaneceres y ocasos. Con un peso de algo más de 460 gramos –incremento de la torreta ASV–, la longitud total queda en 31,8 cm. El tubo es de 30 mm y en este caso viene anclado al rifle con monturas fijas tipo Buheler, que permiten la corrección en deriva mediante dos tornillos enfrentados. La óptica cuenta con acabado multicapas y Lotutec, este último destinado a no permitir que se mantenga en su superficie la suciedad o las gotas de agua. En este caso el visor cuenta con retícula iluminada, en- contrándose el mando en una torreta situada en la parte opuesta de la de corrección en deriva. Sacándola y girándola se enciende y aumenta la intensidad de la luz. La retícula es del tipo 60, es decir, cuatros postes, tres de ellos con parte gruesa adelgazando en el centro y uno delgado. En el centro, en lugar de cruzarse, aparece un pequeño punto que se puede iluminar. Cuando lo hace su color es rojo. La distancia horizontal entre postes gruesos en este caso mide 1,4 metros a 100, aproximadamente el doble de la longitud de un corzo. La posición de la retícula en este modelo es en el segundo plano focal, manteniendo su finura aunque cambiemos de aumentos. La torreta ASV, compensador de caída del proyectil, aparece en la parte de arriba del tubo. Tirando de ella verticalmente se suelta el bloqueo y permite la corrección de clics. Acompañando al visor vienen cinco láminas que corresponden a cinco grupos de calibres, más una en blanco para personalizar. Su reglaje comienza por la suelta del tornillo superior, siendo esto algo de lo que les contaré cuando hablemos de la prueba práctica. Para llegar a complementar este equipo, y en este caso además totalmente imprescindible para la realización del test real en campo, me envían el telémetro novedad en mercado Zeiss Victory 8x26 T* PRF con sistema de inEl nuevo telémetro con sistema de información baformación balístico, lístico Zeiss Victory 8x26 T* PRF. Su laser permite BIS, integrado. CyS un rango de medida entre 10 y 1.200 metros. Su BIS, El cañón es acanalado –fluted-, consiguiendo de esta forma una mejor refrigeración sin aumentar el peso. Su contorno es, el de- nominado por los yanquis, sport , deportivo, de los utilizados para caza. Todos los cañoH-S son de calidad match, de altísima precisión. La firma garantiza ½ MOA en cartuchos diámetro .30 o inferiores. Está flotado en toda su longitud, no tocando en ningún momento en el guardamanos. nes de Continuará… Mi agradecimiento a las empresas Excopesa y Borchers, así como a la Armería Fuertes de Colloto, Asturias. Sin su colaboración la realización de este artículo hubiese sido imposible. nos indicará la corrección de puntería que debemos 44 hacer. Pesa 310 gramos. 45
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