INDIAS BLANCAS Written by Diego Pernía. Based on the book Indias blancas by Florencia Bonelli. ALL RIGHTS RESERVED. COPYRIGHT ©2014. NO PORTION OF THIS SCRIPT MAY BE PERFORMED, PUBLISHED, REPRODUCED, SOLD, OR DISTRIBUTED BY ANY MEANS, OR QUOTED OR PUBLISHED IN ANY MEDIUM, INCLUDING ANY WEB SITE, WITHOUT THE PRIOR WRITTEN CONSENT OF DIEGO PERNIA AND STORM PRODUCTIONS. [email protected] 1 EXT. DESIERTO RANQUEL, ARGENTINA. DÍA. AÑO 1832. 1 Incipiente oscuridad. Junto a la frecuencia grave del sonido de un tambor, una voz sobrenatural atraviesa el silencio del desierto. Una Pucalcú,(hechicera Indígena Ranquel)se yergue en colosal concentración. Poseída, canta notas sostenidas, hipnóticas. Eleva un instrumento compuesto de pezuñas de cabras. El sonido agudo sacude el aire, lo expande. Un indio de gran tamaño físico y cuernos de venado en su cabeza la mira con sus ojos de fuego. CUT TO: BLANCA MONTES, joven, bella, blanca, pelo negro (21), camina por el desierto, desfalleciendo, el cabello enmarañado, las uñas sucias, la boca seca con restos de sangre por el rostro, la mirada angustiada. Su falda blanca está empapada con sangre. Se detiene. En el cielo, las nubes cubren el último resquicio celeste. CUT TO: Las llamas del fuego se elevan desprendiéndose del núcleo ardiente como si fueran movimientos de serpientes. Otras seis hechiceras sostienen instrumentos percusivos formados con huesos de animales del desierto. Cantan en segundo plano formando una base sonora constante. Una de ellas exhala aire a través de la nariz de la calavera de un Tigre del desierto. La nota, como un trueno, atraviesa tiempo y espacio. La hechicera toma las cenizas que son restos del fuego. Las sopla al aire. CUT TO: Blanca camina con sus últimas fuerzas, a su alrededor progresivamente desaparecen las formas. Gira. En torno suyo todo es niebla. En el aire, toma forma sonora el rugido de un tigre al acecho. Impregnado de peligro, el sonido llega hasta ella. Blanca solloza. CUT TO: La india mira la niebla en el horizonte, habla en su lengua, el Mapudungún. 2. INDIA Nadie escapa a los dos que se parecen, el tiempo y el destino. CUT TO: Detrás de la niebla, cercano, Blanca Montes escucha otra vez el sonido del tigre, ahora es ensordecedor. DISSOLVE TO: 2 INT. HISTORIA BLANCA MONTES. CASA DE TÍO TITO. MADRUGADA. 2 BUENOS AIRES, 12 AÑOS ANTES. AÑO 1820.(FUNDIDO DE SONIDO CON LA ESCENA ANTERIOR) Gritos desgarradores en el interior de una casa. En otra habitación, BLANCA MONTES, (9 años), abre los ojos, despierta. Su corazón late con fuerza. Con calma, se incorpora en la cama. Camina descalza, entreabre la puerta de madera pesada y asoma la cabeza. Del otro lado del pasillo se escuchan gritos, pasos y alguna ocasional palabra grave. LEOPOLDO MONTES Carmina!!! El agua!. Lámparas de aceite a medio encender laten en la habitación. Entra Blanca. Arruga la nariz y bloquea el aire que entra por ella. Su padre, Leopoldo Montes (34) toma un frasco de Alcanfor. Carmina, (60), su ama de llaves, y la comadrona, (45), están trabajando afanosamente sobre su madre, Lara Pardo, (30). Sobre el lecho, rodeada de sangre, Lara respira agonizante. Los ojos abiertos. Los labios azules. El semblante color marfil. La respiración se detiene. Abre la mano y suelta un guardapelos de oro. Leopoldo toma el guardapelos, se lo lleva a la boca, da un paso atrás. LEOPOLDO MONTES (CONT’D) No....no... Blanca se abalanza sobre su madre, quiere reanimarla con respiración boca a boca. Hunde sus manos en las sabanas empapadas de sudor y sangre. A su alrededor, los trabajos agitados cesan. Blanca busca con la mirada a su padre, que se hunde en el rincón de la habitación, desgarrado. 3. BLANCA MONTES Leopoldo! Papa!! Todos están sumidos en su dolor. Absortos. Carmina la toma del brazo, trata de separarla de su madre, la levanta en el aire. Blanca patalea. Se zafa. Leopoldo hace un gesto. LEOPOLDO MONTES Déjala Carmina. Blanca se inclina sobre su madre, los ojos se le llenan de lágrimas. Esta vez no le intenta hacer respiración en la boca. Esta vez, la besa. Blanca separa sus manos. Se las mira. Están llenas de sangre. Mira a un lado. Mas sangre, y un bebé, lívido, amoratado, junto a su madre. Muerto. Títulos. 3 EXT. FACHADA DE LA CASA DE LEOPOLDO MONTES. DÍA. (MESES MÁS 3 TARDE) Un carruaje se detiene en la calle de tierra. Uno de los caballos relincha. La calle sucia. Una mujer mayor llega a la entrada de la casa de Leopoldo donde hay una gran cantidad de personas en fila. Están en silencio. 4 INT. SALA DE LA CASA DE LEOPOLDO MONTES. DIA. 4 Leopoldo Montes lleva una cinta negra en el brazo. Atiende uno a uno a los pacientes. El noventa por ciento de ellos son gente sin recursos a los cuales Leopoldo no les cobra un centavo. Blanca, casi invisible, lo ayuda en silencio. Atienden al último de los pacientes de un día agotador. Leopoldo se lava las manos. Blanca palpa la caja torácica de un señor mayor de enorme contextura, le toma la temperatura. El agua dentro del recipiente donde Leopoldo se está lavando las manos deja de moverse. Blanca, atendiendo aún al paciente, observa que su padre se queda inmóvil, con la mirada perdida. BLANCA MONTES Ojalá a las mujeres nos autorizaran a ejercer la medicina. Leopoldo escurre sus manos. 4. Blanca apoya la oreja en la espalda del paciente. Escucha su respiración, luego, su corazón. 5 EXT. JARDÍN DE LA CASA DE LOS MONTES. DIA. (4 AÑOS MAS ADELANTE, 1824) 5 Sentada en la banca del pequeño jardín de la casa, Blanca lee fascinada junto a su padre, un libro que contiene las similitudes entre la alquimia ancestral y los conceptos actuales de la transformación. En el suelo yace un papel de regalo. Leopoldo le acaricia la cabeza. LEOPOLDO MONTES Felices 13 años. Blanca le sonríe. Levanta la mirada y observa el pequeño vitraux del techo del jardín de invierno, está abandonado y con escarcha. 6 EXT. JARDÍN DE INVIERNO DE LA CASA DE LOS MONTES. ATARDECER.6 MESES MAS ADELANTE. El sol se filtra por los vidrios del vitraux, llenando de colores el ambiente. Blanca anota fórmulas en el mamotreto de farmacopea. Aprende a identificar las plantas. LEOPOLDO MONTES Cual es esa flor colega? BLANCA MONTES Es una Agrimonia Eupatoria. LEOPOLDO MONTES Explíqueme para que es. Blanca toma una delicada planta con una pequeña flor amarilla en su extremo. BLANCA MONTES Ayuda a ser mas sincero con uno mismo y con los demás, sobre todo a quien oculta sus sentimientos detrás de un rostro alegre. Leopoldo la mira con ternura, luego se pone serio y solemne. LEOPOLDO MONTES Perfecto colega. 5. 7 INT. HISTORIA LAURA ESCALANTE. CASA DE LAURA ESCALANTE Y FAMILIA. BUENOS AIRES, AÑO 1873. ATARDECER. 7 Los faroles y las ventanas de las casas enmarcan reflejos amarillos en el piso recién mojado por la lluvia. Los carruajes desfilan por la calle de adoquines ejecutando un rumor de agua con sus ruedas de madera. En el interior de la sala de un palacete victoriano, Laura Escalante (20), joven, hermosa, rubia, vivaz y elegante, es abordada discretamente mientras se dirige a su habitación recibiendo de manos de María Pancha (56), la fornida criada africana de la casa, un telegrama de parte del padre Donatti. Su madre, Magdalena (50), Rubia y esbelta, sus tías, Soledad (53) mas avejentada, cabello larguísimo, Dolores (48), de brazos regordetes y cuello corto, y su abuela, Ignacia (75), esbelta, estirada, arrogante en el gesto, distante, se encuentran bordando en la inmensa sala. Al escuchar que la criada le entrega un mensaje a Laura, todas las mujeres levantan la cabeza a la vez. La criada, con la cabeza gacha, levanta los ojos percibiendo el silencio y la incomodidad. Laura le hace un gesto amable para que se retire. Un reloj de madera de pie marca las 19:00hs. Su abuela Ignacia la mira y le exige. IGNACIA Léelo en voz alta. Laura abre el telegrama. Inmediatamente se acongoja. IGNACIA (CONT’D) Que dice, a ver?! Laura sigue absorta. Dolores le quita el telegrama de la mano con autoridad. DOLORES Agustín...grave. Carbunco. Avisa general Escalante. Padre Donatti. El reloj marca un segundo más. Laura levanta la vista, descubre el semblante poco amigable de su madre. MAGDALENA (mira fijo a Laura) El carbunco es muy contagioso. No irás a verlo. 6. La abuela Ignacia observa la reacción de Laura. IGNACIA Ya escuchaste a tu madre. El telegrama es claro: Avisar a José Vicente. LAURA ESCALANTE Agustín es mi hermano!. SOLEDAD Medio hermano. DOLORES Hijo de una cualquiera. MAGDALENA (Suelta su bordado de mala gana) No irás. (retoma su bordado de encaje) LAURA ESCALANTE Hay que ayudarlo!. Mama!!. El desánimo por la noticia de Agustín la guía al interior de la casa. La boca trémula, los ojos brillosos. Menos su madre, el resto de las mujeres la contemplan partir. Luego, retoman sus bordados. SOLEDAD Quien le avisará a José Vicente? Todas las miradas se posan sobre Magdalena. Esta sigue afanada en su labor de encaje a bolillo. MAGDALENA (sin levantar la mirada) Hace años que José Vicente no habla con su hijo. IGNACIA Que hombre tan Impío! Se escucha el portazo de la habitación de Laura. 8 INT. HABITACIÓN DE LAURA. NOCHE. Laura se sienta en el tocador. Toma una hoja. Escribe con celeridad. 8 7. María Pancha entra en la habitación con sigilo. Tiene los ojos hinchados, la expresión de haber llorado hace instantes. Laura levanta la vista de su escritura, se acomoda junto a ella, le pasa el brazo por los hombros. LAURA ESCALANTE A las dos nos duele. La abraza. La negra se seca las lágrimas con el Mandil. Laura coloca la carta dentro de un sobre, coloca su mano sobre la de María Pancha. LAURA ESCALANTE (CONT’D) Llévasela a Julián Riglos. María Pancha mira a los ojos a Laura. Mira el sobre. LAURA ESCALANTE (CONT’D) Acaso no quieres estar con Agustín? María Pancha asiente con dudas. LAURA ESCALANTE (CONT’D) Entonces ayúdame. Ninguna bruja en esta casa va a hacer nada, ayudame tu. María Pancha parte con la carta. 9 INT. CASA DE LEOPOLDO MONTES. PEQUEÑO CONSULTORIO. DÍA (3 AÑOS MÁS ADELANTE. 1827. BLANCA TIENE 16 AÑOS) 9 El espíritu ya quebrado de Leopoldo Montes se resiente con el paso del tiempo. Se mueve con lentitud. Come frugalmente. Duerme pocas horas. Blanca entra al humilde consultorio. Ve la mano temblorosa de su padre. Le sonríe al paciente y toma con delicadeza el instrumento de las manos de Leopoldo. Este se sienta en una silla. Se mira sus manos, que siguen temblando. Blanca le besa las manos, se da vuelta y atiende al paciente. CUT TO: 10 INT. CASA. SALA PRINCIPAL. DÍA. (DÍAS MAS ADELANTE) 10 Blanca lee su libro. Lo deja abierto en el piso. Camina por la sala principal. Toma hacia la derecha. Observa una mecedora. Quieta. Fría. Llega al consultorio. Revisa los escalpelos. Intactos. Afuera, un fuerte viento agita los árboles. Varios pájaros se quedan en sus ramas, inmóviles. 8. Blanca acelera el paso y la respiración, llega al dormitorio de su padre. Observa la cama: vacía, recién deshecha. BLANCA MONTES Papá!... Leopoldo! El viento mueve las pequeñas campanas del exterior de la casa. Los pájaros levantan vuelo. Blanca mira el piso, observa los pies desnudos de su padre. Afuera de la casa, una señora grita: MUJER Don Leopoldo!, Don Leopoldo! Me puede atender? Blanca se tira al piso donde se encuentra con su padre. Lo toma de la cabeza, le golpea las mejillas. BLANCA MONTES Papá!!, Leopoldo! Leopoldo no reacciona. En su cara hay una leve sonrisa. En su mano, el guardapelos de su mujer, Lara. Afuera, la señora grita otra vez: Leopoldo! MUJER Con el sonido de los gritos de la señora, el viento, rítmicamente, produce un tempo entre los árboles. Los pétalos de las flores danzan aleatoriamente en el aire. Blanca abraza a su padre y lo acerca a su pecho. Toma el guardapelos. El viento pasa las páginas del libro que dejó abierto en la sala. 11 EXT. HISTORIA LAURA ESCALANTE. CERCA DE LA CASA DE LAURA. 11 NOCHE. A metros de la ochava donde se encuentra la parte trasera de la casa de la familia Escalante, Julián Riglos (45) espera pacientemente. Entre la niebla, vislumbra la figura de dos mujeres. Al ver a Julián Riglos, Laura se quita la capucha y sonríe. LAURA ESCALANTE (Toma de las manos a Julián). Sabía que podía contar contigo. 9. JULIÁN Creo que lo que estás por hacer es una locura. No voy a ayudarte. Laura le suelta las manos. Con aires de ofendida, da media vuelta, dispuesta a regresar a su casa. Julián le sujeta el brazo. Cuando Laura voltea a verlo, ya sabe que la batalla está ganada. JULIÁN (CONT’D) Que dirá Lahitte? Tu prometido, Laura, puedes perderlo todo. Laura le sostiene la mirada. Julián se lleva la mano a la frente. JULIÁN (CONT’D) Mañana a las seis estaré esperándolas en la esquina de Cangallo y Reconquista con mi volanta. Laura sonríe con dulzura. MARÍA PANCHA Ah no! No iré a ninguna parte sin oír la misa del buen viaje. Ya lo hice una vez hace muchos años y me fue muy mal. Suena una campana a la distancia. 12 EXT. HISTORIA BLANCA MONTES. CEMENTERIO. DIA. Blanca deposita una flor, una Agrimonia Eupatoria, en el cajón de su padre el cual lentamente desciende hacia la tierra. Unas pocas personas la rodean. Se le acerca un hombre, Miguel Gorman, apoderado de las pocas cosas de su padre. Es un hombre delgado, alto y de piel blanca. Le extiende la mano y sonríe tímidamente. GORMAN Lamento mucho lo de tu padre. Blanca inclina la cabeza con cortesía. GORMAN (CONT’D) (Incómodo, hace girar el sombrero en la punta de los dedos) Nadie de tu familia puede hacerse cargo de ti. (MORE) 12 10. GORMAN (CONT’D) Vivirás en el convento de Santa Catalina de Siena, no como novicia (vacila), sino como pupila. Blanca lo mira completamente confundida. GORMAN (CONT’D) Será por un tiempo, hasta que pueda encontrarte una posición mas definitiva. Gorman mira fugazmente el cajón donde yace Leopoldo Montes. BLANCA MONTES Si algún familiar llegara a aparecer, usted podría avisarme?. GORMAN. Por supuesto Blanca. Gorman luce culpable e incómodo. Aprieta su pulgar contra su puño. La tierra cae sobre el cajón y cubre la flor amarilla. 13 EXT. HISTORIA LAURA ESCALANTE- EXTERIOR VOLANTA. RUTA. DÍA.13 Laura mira en silencio por la ventana de la volanta. Sol. Diferentes colores de sol. Diferentes alturas del sol. El sol entre los árboles. El calor de la tierra. La volanta se detiene. El cochero acerca los caballos al costado del camino donde hay un poco de agua para abrevar. María Pancha, inquieta, atisba el horizonte. Mira hacia atrás. MARIA PANCHA Apúrese por favor. Al cochero no le gusta nada que una criada le de órdenes. MARIA PANCHA (CONT’D) (Dirigiéndose a Julián) Y si nos atacan los indios? LAURA ESCALANTE Odio a los indios. JULIÁN Mansilla firmó un acuerdo no hace tanto con esos salvajes. Los tenemos bien a raya.
© Copyright 2025