Claves de Políticas Públicas Serie: Claves Binominal Octubre 2014 Reforma al sistema binominal: fortalezas, debilidades e indicaciones Por Mauricio Morales y Patricio Navia Introducción La propuesta de reforma al sistema electoral del gobierno de Bachelet tiene tres elementos positivos y dos debilidades: una subsanable y una que es inevitable en cualquier reforma electoral. Su primera fortaleza es que promueve una mayor competencia dentro de los pactos y entre los pactos políticos. La segunda es que mejora la relación entre población y escaños a repartir, acercándose más al principio de “una persona, un voto”. La tercera fortaleza es que goza de un significativo respaldo entre congresistas de la Nueva Mayoría (NM), lo que aumenta su viabilidad política, un ingrediente central para cualquier reforma. Entre las debilidades, la subsanable es que la reforma tiende a la proliferación de candidatos, pudiendo contribuir de paso a la fragmentación de los partidos. La debilidad inevitable es que mantiene la sobrerrepresentación de algunos distritos dado que el nuevo mapa electoral se construyó a partir de los dibujos ya existentes. En esta Clave de Políticas Públicas discutimos la reducción del malapportionment (la diferencia que existe entre el porcentaje de escaños y el porcentaje de población de cada unidad electoral). Luego, sugerimos indicaciones para evitar el exceso de fragmentación y proliferación de candidatos. Reformas electorales en Chile Chile ha experimentado con distintos sistemas electorales en su historia. Desde 1833 hasta 1874, los congresistas se escogían mediante el voto en bloque. Con la reforma de 1874, se aplicó el sistema de voto acumulativo1. Desde 1925 hasta 1973 se estableció un 1. En el sistema de voto en bloque por partido o sistema de lista completa los ganadores se definen por mayoría relativa. El partido o lista más votada gana todos los escaños a repartir en cada distrito. En el sistema de voto acumulativo el elector cuenta con tantos votos como escaños a repartir. Puede concentrar o dispersar esos votos entre candidaturas individuales. Son electos los candidatos con mayor votación en cada distrito hasta completar el número de cupos a distribuir. 1 sistema proporcional, de magnitud variable (entre 1 y 18 escaños en la Cámara de Diputados) y de 5 escaños en cada circunscripción senatorial. La dictadura militar instituyó el sistema electoral binominal que, siendo de la familia de los sistemas proporcionales, es el menos proporcional de todos al tener solo dos escaños por distrito y por circunscripción senatorial (Navia, 2005). En promedio, los sistemas electorales en Chile han sobrevivido 41 años. Este cálculo lo hacemos pensando en que 2013 fue la última elección con el sistema binominal. Generalmente, se piensa que el avance hacia la proporcionalidad se explica por el temor de los partidos tradicionales a perder el poder a manos de partidos emergentes, o porque se produjo una explosión de la participación electoral que generó incertidumbre entre los políticos. Como muestran varios autores, esto aplicaría tanto en Europa como en América Latina. Un reciente trabajo de Ricardo Gamboa y Mauricio Morales muestra que ninguna de estas condiciones explicó la adopción de la proporcionalidad en Chile en 1925. Ella se debió a los problemas de coordinación que enfrentaban los partidos grandes al nominar un número reducido de candidatos y controlar la personalización en las campañas. Con la proporcionalidad, todos los candidatos sumaban sus votos a la lista. Además, la ampliación de los distritos permitió que los partidos presentaran más candidatos. El impulso de la reforma electoral actual tiene algunas características en común con la de 1925. No han emergido partidos alternativos que amenacen el predominio de las dos grandes coaliciones. Tampoco ha aumentado la participación electoral. De hecho, ha caído. Es evidente que existen problemas de legitimidad con el sistema binominal. Pero los partidos aspiran a modificar el sistema más bien por los problemas de coordinación que enfrentan las coaliciones al seleccionar y nominar candidatos. De hecho, la propuesta de crear distritos que eligen de 3 a 8 escaños, el aumento en el número total de cupos a elegir y la posibilidad de presentar el doble de candidatos por lista hará menos tortuosos los procesos de negociación entre los partidos. Además, al abrir más espacios, permite incluir a más partidos en la coalición. Los atributos de la reforma La reforma propone mejorar los niveles de proporcionalidad cambiando los dibujos de los distritos y aumentando el número de escaños a elegir. Actualmente, la NM y la Alianza tienen más escaños de los que proporcionalmente les corresponden de acuerdo a su porcentaje de votación. La NM obtuvo 47,6% de los votos en 2013, alcanzando 67 escaños, lo que equivale a 55,8% de la Cámara de Diputados. La Alianza, en tanto, con 36,2% de los votos recibió 49 escaños, lo que representa 40,8% de la cámara baja. Por partido, la UDI presenta mayores niveles de desproporcionalidad. Con 18,9% de los votos, recibió 29 escaños (24,2%). Por eso no extraña que la UDI sea el partido que más se opone a la reforma. Con la ampliación de la magnitud de distrito (MD, que se refiere al número de escaños que se elige en cada unidad electoral) mejorará la proporcionalidad entre votos y escaños. Aumentar la MD promedio siempre tiene efectos positivos sobre la proporcionalidad, aunque el nivel de proporcionalidad que se presente seguirá dependiendo en parte también de las negociaciones que realicen las coaliciones. Ahora bien, ¿qué efecto tendrá el nuevo sistema sobre los niveles de competencia? Suele argumentarse que hay más competencia en distritos que reparten un número impar de escaños que en distritos pares. Pero esa es una consideración que tienen en mente los partidos y candidatos, no necesariamente los votantes. La encuesta UDP del primer semestre de 2013 mostró que sólo uno de cada cuatro chilenos sabía cómo funcionaba el sistema binominal. Los electores difícilmente pueden evaluar la competitividad de un distrito si ni siquiera tienen claro el mecanismo de elección. Para los 2 votantes, la percepción de competencia es más clara en distritos uninominales. Es posible, eso sí, que en distritos pares prime una percepción de “empate” y que en los impares los ciudadanos estimen que “habrá un ganador”, potenciando la participación electoral. De cualquier forma, el nuevo sistema electoral será más competitivo que el binominal. Y esto abre espacio para especular sobre su eventual efecto en los niveles de participación. Varios estudios muestran que la competencia electoral es uno de los predictores más robustos de la participación. La tabla 1 muestra los resultados de las elecciones de diputados 2013 por partido, señalando el porcentaje de votos, el número de escaños y el porcentaje de escaños. La última columna es la resta del porcentaje de escaños y de votos. Un valor positivo indica que el partido o coalición obtuvo un porcentaje de escaños superior a su porcentaje de votos. Un valor negativo, en tanto, indica que un partido o coalición obtuvo un porcentaje de escaños inferior a su porcentaje de votos. Sumamos al Partido Progresista (PRO) y al Partido Liberal (PL) dado que compitieron en una sola lista, obteniendo un representante. Tabla 1. Resultados de las elecciones de diputados 2013 % Votos Nueva Mayoría PDC PPD PS PRSD PC Independientes NM Alianza RN UDI Independiente Alianza PRO y PL Independientes fue pacto Otros Total 47,6 15,5 11,0 11,1 3,6 4,11 2,2 36,2 14,9 18,9 2,4 5,4 de 3,3 7,4 100 Escaños %Escaños %Escaños-%Votos 67 21 15 15 6 6 4 49 19 29 1 1 3 55,8 17,5 12,5 12,5 5,0 5,0 3,3 40,8 15,8 24,2 0,8 0,8 2,5 8,4 2,0 1,5 1,4 1,4 0,9 1,2 4,6 0,9 5,2 -1,5 -4,6 -0,8 0 120 0,0 100 -7,4 Fuente: Elaboración propia con datos oficiales del Servel. Otro aspecto positivo de la reforma es la reducción del malapportionment (a veces traducida como “malaporcionamiento” o “sobre-representación distrital”). Los nuevos dibujos distritales disminuyen las actuales distorsiones al principio de “una persona, un voto” (ver Tabla 2). El nuevo escenario no elimina el malapportionment. El mapa actual fue diseñado en 1989 —después del plebiscito— para favorecer zonas agrícolas del centrosur y las regiones extremas. El malapportionment fue empeorando a medida que los cambios en la población de los distritos no ha sido uniforme. Además de la 3 sobrerrepresentación inicial desfavorable a Santiago, el crecimiento de la propia Región Metropolitana llevó a que ciertas comunas tengan sobrerrepresentación. Por ejemplo, el distrito 19, compuesto por Independencia y Recoleta, tiene 223.000 habitantes. Esto es casi cuatro veces menos población que el distrito 29, que incluye La Pintana, Puente Alto, Pirque y San José de Maipo. Sin embargo ambos tienen dos diputados. Ya que el redibujo de los mapas es discrecional, cualquier re-distritaje puede generar sospechas. De ahí que parezca razonable catalogarlo de “antojadizo”, como sostienen algunos expertos internacionales. Por ejemplo, ¿por qué se fusiona el distrito 23 (Las Condes, Vitacura, Lo Barnechea) con el distrito 24 (La Reina, Peñalolén)? El 23 también limita con el 19 y con el distrito 17 (Conchalí, Huechuraba, Renca), pero el Cerro San Cristóbal está de por medio. Parece más adecuado fusionar distritos cuyas fronteras son fáciles de identificar visualmente, que distritos físicamente contiguos pero que sólo están unidos por una mínima intersección. De cualquier manera, el mapa está dibujado para minimizar la resistencia al cambio por parte de los actuales diputados y de los partidos con representación en el Congreso. Esa es una limitante imposible de subsanar, ya que para cambiar un sistema electoral deben concurrir con su voto aquellos legisladores que se verán directamente afectados por el nuevo mapa. La Tabla 2 muestra los distritos nuevos, el número de electores, el porcentaje de población que representa cada distrito y el porcentaje de escaños asignados. Sobre la base de esa información (suministrada en el mismo proyecto), calculamos el malapportionment (MAL) para cada distrito. Hay correcciones significativas salvo en los distritos extremos, donde se aumenta a 3 el número de diputados a elegir. Estos distritos ya estaban sobre-representados con el modelo binominal, por lo que al aumentar los escaños, también lo hace su sobre-representación. El Gráfico 1 compara el malapportionment del binominal con el de la propuesta del gobierno. En el eje vertical está el cálculo de malapportionment por distrito y en el eje horizontal el número de cada distrito. Tabla 2. Sobre y sub-representación distrital Distrito Distritos de Electores origen % Escaños población actuales 1 2 3 4 5 6 7 8 9 10 11 12 13 1 2 3y4 5y6 7, 8 y 9 10, 11 y 12 13, 14 y 15 16 y 20 17, 18 y 19 21, 22 y 25 23 y 24 26 y 29 27 y 28 1,27 1,62 3,09 1,66 3,98 5,27 5,68 6,78 6,09 6,35 4,52 5,81 4,47 168729 215864 412322 221707 530337 702701 756928 903675 811989 846823 601907 774712 595575 2 2 4 4 6 6 6 4 6 6 4 4 4 % Escaños actuales 1,67 1,67 3,33 3,33 5,00 5,00 5,00 3,33 5,00 5,00 3,33 3,33 3,33 Escaños propuesta 3 3 5 5 7 8 8 8 7 8 6 7 5 % Escaños propuesta 1,94 1,94 3,23 3,23 4,52 5,16 5,16 5,16 4,52 5,16 3,87 4,52 3,23 MAL con 120 MAL con 155 0,40 0,05 0,24 1,67 1,02 -0,27 -0,68 -3,45 -1,09 -1,35 -1,18 -2,48 -1,14 0,67 0,32 0,13 1,56 0,54 -0,11 -0,52 -1,62 -1,58 -1,19 -0,65 -1,30 -1,24 4 Tabla 2. Sobre y sub-representación distrital (Continuación) 14 15 16 17 18 19 20 21 22 23 24 25 26 27 28 30 y 31 32 y 33 34 y 35 36, 37 y 38 39 y 40 41 y 42 43, 44 y 45 46 y 47 48 y 49 50, 51 y 52 53 y 54 55 y 56 57 y 58 59 60 653357 396938 298643 526083 282398 436880 748782 460489 270554 489603 306595 294474 376025 91321 151855 13327266 4,90 2,98 2,24 3,95 2,12 3,28 5,62 3,46 2,03 3,67 2,30 2,21 2,82 0,69 1,14 4 4 4 6 4 4 6 4 4 6 4 4 4 2 2 120 3,33 3,33 3,33 5,00 3,33 3,33 5,00 3,33 3,33 5,00 3,33 3,33 3,33 1,67 1,67 6 5 4 7 4 5 8 5 4 7 5 4 5 3 3 155 3,87 3,23 2,58 4,52 2,58 3,23 5,16 3,23 2,58 4,52 3,23 2,58 3,23 1,94 1,94 -1,57 0,35 1,09 1,05 1,21 0,06 -0,62 -0,12 1,30 1,33 1,03 1,12 0,51 0,98 0,53 -1,03 0,25 0,34 0,57 0,46 -0,05 -0,46 -0,23 0,55 0,84 0,93 0,37 0,40 1,25 0,80 Fuente: Elaboración propia con datos oficiales del Servel. Gráfico 1. Malapportionment Distritos Gobierno Bachelet Fuente: Elaboración propia con base en el Mensaje presidencial 976-362. los atributos de la reforma Desde el punto de vista a la magnitud de distrito, es posible corregir la sobre y sub-representación. El caso más llamativo es el Distrito 4, que agrupa todas las comunas de la Región de Atacama, que recibiría 5 escaños. Considerando su población, a ese distrito le corresponderían 3 escaños. Este distrito tiene un número de electores similar al de Iquique, donde se eligen 3 diputados. ¿Por qué la distorsión? Hoy, la Región de Atacama está compuesta por los distritos 5 y 6 y, por lo tanto, elige 4 diputados. El proyecto incluye como principio base no disminuir el número 5 actual de diputados por región. Eso explicaría la sobrerepresentación, aunque no justifica la asignación de 5 escaños. Eso es resultado de una negociación con el Partido Comunista, que considera tener fortalezas en ese distrito. Al mismo tiempo, se podría estudiar una disminución en el número de escaños en las regiones del Maule y la Araucanía. Al igual que con binominal, estos distritos siguen sobre-representados. Un segundo problema, que ya fue subsanado, era la posible proliferación de candidatos que se produciría con el nuevo sistema. Originalmente, el proyecto contemplaba la posibilidad de que las listas presentaran el doble de candidatos que puestos a elegir en cada distrito. En un distrito que repartiera 8 escaños, las listas podrían competir con 16 candidatos. Hubiese bastado la participación de 5 listas para tener 80 candidatos en competencia. Si sumamos a eso los candidatos a Consejeros Regionales (Cores), presidente y, eventualmente, senadores, hubiésemos terminado con una “súper-oferta” partidaria, aumentando los costos de información para los votantes. Con los cambios introducidos en la Cámara, el proyecto pasó del M*2 (duplicar el número de candidatos), al M+1. Es decir, que las listas pueden presentar tantos candidatos como escaños a elegir más uno. Si el sistema binominal reducía la oferta de candidatos y generaba elecciones escasamente competitivas, la propuesta original del gobierno se iba al otro extremo. Con la regla M+1, en cambio, se evita la proliferación excesiva de candidatos. Al aumentar la MD, también se elevan los incentivos para que compitan más partidos. No es inevitable que esos partidos se sumen a las coaliciones existentes. Es probable que algunos partidos decidan formar sus propias listas, lo que contribuirá a incrementar la fragmentación. Una forma de reducir esta fragmentación es manteniendo la concurrencia de las elecciones legislativas con la presidencial. La elección presidencial con segunda vuelta tiene un efecto reductor sobre el número de partidos que compiten. mejora la proporcionalidad, un exceso de candidatos pudo atentar contra la participación electoral. Cuando los costos de información aumentan, las opciones se hacen más confusas para los votantes. Idealmente, un sistema electoral en esquemas multipartidistas no sólo debe garantizar la proporcionalidad, sino también la simpleza del proceso. Aunque hay presidencialismos que funcionan de manera razonable en distritos grandes, eso no significa que vaya a ocurrir lo mismo en Chile. Si bien Costa Rica y Uruguay utilizan sistemas electorales proporcionales y distritos grandes, lo hacen con “listas cerradas y bloqueadas”. El partido ordena la lista de candidatos. Los electores votan por lista, no por candidato. Esto produce un freno a la fragmentación de candidatos, quienes hacen campaña al alero del partido o del lema correspondiente. Esto genera un efecto secundario saludable para toda democracia: disciplina partidaria. Conclusiones Aunque la reforma va en la dirección correcta, creemos importante incluir ajustes que reduzcan la fragmentación partidista y que limiten la proliferación de candidatos. También recordamos que para ser exitosas, las propuestas de reformas electorales precisan los votos de legisladores que naturalmente optimizan sus propios beneficios y aspiran a potenciar sus propias opciones de ser re-electos. Lo que se pierde de perfección y pureza se gana en factibilidad de lograr materializar una reforma a un sistema electoral que ha demostrado ser especialmente difícil de cambiar. El legislador tuvo en cuenta que una sobreoferta podía generar el efecto contrario al buscado. Si bien la reforma 6 Referencias Altman, David (2014), Mensaje Presidencial 076362 sobre la Reforma Electoral: Algunas anotaciones breves sobre externalidades poco discutidas. 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Es coeditor de Democracia municipal en Chile (1992-2012), El sismo electoral de 2009 y El genoma electoral chileno. Acerca del Instituto Información de contacto El Instituto de Políticas Públicas de la Facultad de Economía y Empresa de la Universidad Diego Portales se orienta a generar propuestas concretas para la solución de problemas de política pública que enfrenta Chile actualmente y a la formación de policymakers de alto nivel. Nuestro equipo de profesores e investigadores combina excelencia académica con participación activa en el debate público y el proceso de formación de políticas públicas en Chile. Instituto de Póliticas Públicas Facultad de Economía y Empresa Universidad Diego Portales. Avenida Santa Clara 797, Ciudad Empresarial, Huechuraba, Santiago, Chile Email: [email protected] Fono: (56-2) 2213 0177 www.politicaspublicas.udp.cl Todos los derechos reservados. 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Alianza Instituto de Políticas Públicas UDP Columbia University El Instituto de Políticas Públicas tiene una alianza con la Universidad de Columbia a través del Institute of Latin American Studies (ILAS) y el Columbia Global Centers Latin America de Santiago. Esta alianza busca promover la discusión de políticas públicas entre académicos, policymakers y líderes de opinión en Chile y Estados Unidos, y se traduce en actividades conjuntas como coloquios, seminarios e intercambio de profesores. Postulaciones abiertas. Cupos Limitados • Inicio del programa: Abril 2015. • Nivelación: Abril-mayo 2015 • Duración: 2 años (6 trimestres). • Modalidad: Vespertino (18:00 a 20:45 hrs.). • Cierre de postulaciones: Marzo 2015. “El Magíster en Políticas Públicas tiene como objetivo formar a futuros líderes capaces de generar ideas y proponer soluciones para los principales desafíos de políticas públicas en Chile y América Latina.” Contacto (56 - 2) 2213 0157 · 2213 0159 · 2213 0177 [email protected] 9
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