Momentos de la Fiesta 4.3 Desfile de la Familia Castaneda C onstituye el acto simbólico de retorno de los hijos de Sonsón a su tierra; es el primer desfile desarrollado durante la festividad. En la actualidad está conformado por personajes y elementos representativos de una familia que, recién llegada del campo, ingresa al pueblo con el fin de celebrar la Fiesta del Maíz, proveída de todos los enseres necesarios para pasar los tres días: 1. Los padres de la gran familia. 2. Las hijas casaderas. 3. Los menorcitos. 4. El silletero. 5. La recua con los corotos. 6. El peón con las mulas, el buey y los productos de la finca. 7. Uno de los muchachos con el perro guardián. 8. El muchacho con el cerdo. 9. El bobo y la boba. 10. Los hijos mayores. 11. Los animalitos de la finca. 12. Los peones. 13. La banda típica. 70 70 López Bonilla, Luis Guillermo. “Declaratoria de las Fiestas del Maíz del municipio de Sonsón como bien integrante del patrimonio inmaterial de carácter nacional”. Documento inédito. Sonsón, 2007. 114 Este desfile ingresó a la Fiesta del Maíz en 1940, cuando una Junta de compadres conformada por la “clase trabajadora” de Sonsón propuso un programa alternativo de celebración, debido al sentimiento de exclusión que les producía el programa oficial, que con bailes privados y desfiles muy formales se dirigía especialmente a la élite de Sonsón del momento. Su propuesta fue bien recibida por la Junta organizadora de la Fiesta dependiente de la Sociedad de Mejoras Públicas, y por ello desfiles como este y otras actividades diseñadas por la Junta de compadres (por ejemplo, los bailes típicos populares en la Plaza Ruiz) fueron incorporados de manera oficial en la programación de la Fiesta del Maíz; con ello se abrió el panorama de eventos y la posibilidad de mayor participación de las clases populares. El indicador más diciente del buen recibimiento que tuvo la “Entrada de la Familia Castañeda” desde su primera versión fue que la bienvenida durante su ingreso al pueblo estuvo acompañada por un discurso improvisado por Fernando Uribe Uribe, fundador de la Fiesta. 71 Este hecho tiene connotaciones históricas y culturales importantes: la Familia Castañeda era la representación de una familia campesina “acomodada” que ingresó al pueblo por primera vez para no perderse la Fiesta del Maíz. Alegoría de la 71 [s. a.]. “La Fiesta del Maíz. El programa obrero”. La Acción, 633. Sonsón, 3 de agosto de 1940; Gonzalo Cadavid Uribe. “Fiesta del Maíz”. La Acción, 635. Sonsón, 17 de agosto de 1940. forma como ingresó a la programación oficial de la Fiesta, que da cuenta del reclamo de una clase social media de Sonsón que demandó la apertura de espacios y momentos en una celebración con la que se sentía plenamente identificada, pues el maíz, como alimento fundamental de su dieta, pero sobre todo como símbolo de la historia colonizadora antioqueña, también hacía parte de su identidad y de su pasado compartido. A pesar de los nuevos significados que surgieron en la historia de la Fiesta del Maíz y que le dan connotaciones particulares a su presencia en Sonsón, se debe señalar que la Familia Castañeda es un símbolo prestado de otras celebraciones. La “Entrada de la Familia Castañeda” ha estado vinculada desde el siglo XIX a una romería periódica de manumisos, herederos de las propiedades del matrimonio sin descendientes de don José Ignacio de Castañeda y Atehortúa y doña Javiera Londoño Zapata. Entre esta pareja había un acuerdo de otorgar la libertad a sus cerca de 140 esclavos por vía testamentaria y de legarles las propiedades mineras para su aprovechamiento, con la única condición de que celebraran una misa a Nuestra Señora de los Dolores cada año. 72 Esta se debía realizar en la capilla de San José, la cual había construido la pareja cuando se estableció en las minas de El Guarzo (hoy El Retiro) en el siglo XVIII. 72 Patiño Millán, Beatriz. Riqueza, pobreza y diferenciación social en Antioquia del siglo XVIII. Medellín, Universidad de Antioquia, 2011, p. 99. 115 Momentos de la Fiesta Según historiadores locales, los esclavos manumisos —de apellido Castañeda, de acuerdo con la costumbre de adoptar obligatoriamente el apellido de su amo— cumplieron la condición impuesta. A partir de entonces, la misa anual que se hacía en la capilla se convirtió en un evento en el que los pobladores urbanos esperaban la entrada al pueblo de la Familia Castañeda que provenía del sector rural. Pero dicha entrada tenía características particulares, pues la Familia Castañeda llegaba ataviada de enseres y semovientes que les permitieran pernoctar y sobrevivir durante su estadía, que tenía como fin la misa comprometida, pero al mismo tiempo, danzas y músicas en la plaza del pueblo con las que animaban su estancia. Es así como esta “romería festiva” se convirtió en tradición y luego en celebración local, que sirvió como referente de la identidad guarceña; pasó de ser una conmemoración exclusivamente religiosa y festiva de la Familia Castañeda para convertirse, con el tiempo, en la Fiesta de los Negritos. 73 Durante la celebración actual, la gente del pueblo desfila con el cuerpo pintado de negro representando de esta forma a los esclavos; en algunas ocasiones van detrás de alguien que personifica a Javiera Londoño o a la Familia Castañeda original, acompañados de músicos y de grupos de danzas locales que animan el desfile. [s. a.]. “Génesis de El Retiro”. En Distritos, núm. 45, diciembre de 1989. República de Colombia, pp. 29-30; [s. a]. “La fiesta de los negritos”. En Distritos, núm. 17, diciembre 1969. 73 116 Antes de que en Sonsón se adoptara este desfile, también había sido incorporado como un acto central de las festividades pastusas. Algunas versiones de la historia indican que se trataba de una familia campesina que iba de romería hacia Las Lajas; otras versiones señalan que Manuel Ernesto Ferrer, un coronel antioqueño acantonado en esa ciudad, lo había incluido en 1929 como parte de los eventos festivos de Pasto bajo el nombre “Desfile de la Familia Machuca” para no confundirlo con la Castañeda, pero como un acto conmemorativo de la primera manumisión de esclavos en territorio colombiano llevada a cabo por los Castañeda en El Retiro. Para este desfile habrían colaborado, posteriormente, oficiales y suboficiales del Batallón Boyacá (algunos disfrazados de arrieros), el Club Unión, periodistas y organizaciones artesanales y populares. 74 Con el tiempo se volvió parte estructural del Carnaval de Negros y Blancos, retornó al nombre original y adquirió sus propios significados en ese contexto, manteniendo como esencia la entrada de una familia que llega de lejos para celebrar el carnaval. En la Fiesta del Maíz de Sonsón, la “Entrada de la Familia Castañeda” no apela a los elementos afrodescendientes que le dieron su origen en El Retiro, ni a los carnavalescos que han sido 74 Fundación Estanislao Merchancano. “La Familia Castañeda, una bellísima historia” [en línea], disponible en http://pagina10.com/index.php/opinion/item/296-creacion-del-departamento-de-narino#.VZMH8np_Oko, consultado el 30 de junio de 2015. incorporados en Pasto. Lo más importante aquí es recoger la idiosincrasia paisa, que encuentra elementos identitarios en la vida campesina rural asociada con el proceso histórico conocido como colonización antioqueña. Sin embargo, la forma como se los ha destacado ha variado en el tiempo, pues al parecer al desfile se lo ha tenido como un momento jocoso, propicio para satirizar o para exagerar rasgos culturales, pero al mismo tiempo uno en el que se conserva la solemnidad, con el fin de dar a conocer valores dignificantes de la cultura paisa a través de una representación realista. Aspectos tan disímiles en este desfile y a su vez complementarios se pueden rastrear en los discursos con los que se le daba la bienvenida a la familia en su ingreso al pueblo, o en la presentación que se hacía de ellos en folletos de mano, adjunta a la programación de la Fiesta que se repartía a los asistentes. En los cuadros de los años cuarenta, por ejemplo, los campesinos “Castañeda” que llegaban del sector rural se distinguían por su forma de ser “montañera”: dentro de la cultura paisa, personalidad caracterizada por la conjunción de nobleza, perspicacia, audacia, laboriosidad, falta de educación escolar y poco contacto urbano, que en ocasiones lleva al comportamiento ordinario. Ello daba como resultado una familia numerosa, trabajadora, capaz de manejar producciones agrícolas y pecuarias con mucho éxito, con aspiraciones de mejorar sus condiciones socioeconómicas y educativas, pero que en medio de ese proceso era exagerada en indumentaria y forma de hablar; “mal hablada”, que equivocaba el léxico y trataba de incorporar expresiones formales de clases sociales boyantes; y errónea con las maneras modernas, que insertaba forzosamente en medio de su mundo supersticioso y arcaico. A pesar de que ser “montañero” provocaba hilaridad y burla, no tenía necesariamente connotaciones negativas, pues al provenir del mundo rural que dio vida a parte de los procesos de poblamiento antioqueño —a la colonización— es una forma de ser que fue apologizada en literatura y expresiones artísticas regionales y vista como un estado previo del desarrollo cultural paisa. Podría decirse que es un estado original o primigenio, digno de ser aplaudido por recordar a los antepasados campesinos a quienes se respeta y admira. 75 Véase, por ejemplo, Gutiérrez, Benigno A. Gente Maicera. Mosaico de Antioquia La Grande, 1.ª ed., facsimilar; 1.ª reimpresión. Medellín, Instituto Tecnológico Metropolitano, 2008. Y un análisis del uso de estos elementos en la construcción de la identidad paisa: Escobar Villegas, Juan Camilo. Progresar y civilizar: imaginarios de identidad y élites intelectuales de Antioquia en Euroamérica, 1830-1920. Medellín, Fondo Editorial Universidad EAFIT, 2009. 75 117 Momentos de la Fiesta Con este discurso, el fundador de la fiesta, Alberto Uribe Uribe, saludó a la Familia Castañeda: Compadres: A yo me mandaron pa que los saludara a vustedes pero como nosotros somos de los mesmos y nos tenemos toda confianza, porque como dice la gente, que pa confianzudos los paisas de Sonsón, yo se los voy a presentar a los mismos blancos que vinieron de Medellín y que por eso tamos tan contentos. No vayan a creer vustedes que mis compadres son cualesquiera gente porque los ven tan pobres y montados en esas yegüitas de pipiripao, ni mas que los vean tan humildes pa que los despreceen: mis compadres ai onde los ven son una notabilidá, de las primeras jamilias de Sonsón, entrando puel camino de Abejorral, gente más güena que la panocha de mais capio, más alentados que las píldoras de la vida, pes esa jamilia tan mentaa y tan jamosa que llaman la jamilia Castañeda, Candanvil y Bedoya y otros son nada menos desa gente que se levanta antes de las gallinas, hastai juicio porque ni human ni beben, tan riquísimos pues esa jinca dellos da mais, frisoles, cacao, aguacates, guayabas, tienen gallinas, marrano, perro, gato, baca de leche, y una potranca que manque gorobeta siempre les sirve pa mercar, y eso juera de dieciocho muchachitos u retoños como dice la gente en los que escriben pa decir de la guerra de puallá, los dos más grandecitos están estudiando de dotores mesmamente como Chuchito el hijo de ño Raimundo, y pa inteligente Casianito que a yo me dijo el hermano diretor que era más sabido que pa qué. Pero asina que yo les mandé una carta a la jinca y les mandaba a decir que venía pa la jiesta del maíz el gobernador y otros dotores tamién muy simpáticos y inteligentes que nos quieren 118 mucho a los sonsoneños, así como dijo anoche en un discurso muy bonito el dotor Echeverri y que si quiera que no son orgullosos. Pa que mis compadritos se vinieran con el aijao y tuita la jamilia a conocelos y ai se los presento pa que mi compadre Enofre y mi comadre Micaela y la niña Reimundita y todos saluden y les den las gracias a los dotores que vinieron a jiestas y pa que vean que tan simpáticos son tuitos como yo les mandaba a decir en la carta. Ai tá el dotor Aurelio que nos va a poner colegio pal año entrante pa educacionar la pobrecía porque si no como el monecipio tá más quebrao quium tabaco en un bolsillo diatrás nos vamos a quedar todos inorantes, y que siquiera nos va a dar la plata pal cementerio que manque se pongan invidiosos los diotros departamentos vaser el mejor del país, asina desas cosas le provoca a uno ser el muerto. Y en despuesito como tenemos más hambre quel diablo, nos vamos pa los ranchos a comer natilla, que debe tar más caliente que nian ecba con leña robada, y unos guñuelos que dicen cómeme, y las ojuelas y los tamales que tan de lambese los dedos y esa miel de trapiche echa con caña de jalda y sobretodamente la chicha desa que con dos toumadas tá uno alegrón, y se siente con plata, güen mozo, de güena jamilia y más guapo quel beterano de guacas. 76 En esta misma década pueden hallarse otros discursos que ayudaron a proyectar en la Familia Castañeda a una representativa de los valores con los que entonces se caracterizaba a “los paisas de Antioquia” Alberto Uribe Uribe. “Discurso con que el señor Alberto Uribe Uribe saludó la familia Castañeda”. La Acción, 685. Sonsón, 16 de agosto de 1941. 76 o a la “raza”. Esta es la familia campesina que se figuraba como trabajadora incansable, religiosa y rezandera, sencilla, pero digna y capaz de sacar adelante cualquier empresa que implicara esfuerzos y sacrificios considerables. En esta forma de concebirla no aparecía la sátira o lo hilarante; los corotos y atavíos, entendidos como un exceso de equipaje desacorde con el sitio de llegada, se volvían ahora “arreos” que hicieron “célebres” a los paisas en el resto del país. La familia se dignifica y cada elemento (material, semoviente y humano) con el que carga está justificado, pues desde dicha perspectiva son piezas que integran un mismo paisaje, donde valles, rastrojeras, picos andinos, montañas y animales son sometidos con arrojo, o como se indicaría hasta el cansancio: “con pujanza”, pero a su vez con el amor bucólico de quien cuida un jardín. La Familia Castañeda: Sonsón se está poniendo el vestido dominguero para recibir dignamente a la familia Castañeda en su entrada triunfal. Por todas partes se agitan las brochas y los hisopos, porque en Sonsón reverbera inextinguible el amor a las tradiciones de los mayores, como una digna elegía del fruto que nos va a congregar en vasallaje. Es la familia Castañeda la soberana de nuestros valles y rastrojeras; encarna el alma de la raza antioqueña, fuerte como las águilas que viven en los picos andinos, sencilla y buena como el pan que se cuece en nuestros hogares, pródiga y cariñosa como la hospitalidad de nuestros pueblos y por sobre todo, fecunda como las tierras nativas, donde germinan y crecen los maizales ubérrimos que, mecidos por vientos regionales, van cantando las glorias del trabajo. En la fiesta del maíz van a congregarse en nuestro pueblo los paisas de Antioquia, orgullosos de vestir los arreos que les hicieron célebres en el resto del país y que muestran la pujanza de una raza grande en la humildad y en el arrojo, en la prudencia y en el coraje, en la fortaleza y el cariño. Llegar a cualquiera de nuestros hogares campesinos y estar en él siquiera una hora, significa el haber vivido. Constituye nuestro pueblo de la dura cerviz, la legión macedónica “criolla”, invencible en la lucha, por su perseverancia y por su sencillez. En todo paisaje rural los ojos se recrean con el mismo cuadro siempre próspero: el arado en florescencia, la vaca que rumia y el golpe de las manos de pilón que hace estremecer a las flores de ruda… Afuera, el macho que se entona la canción de la azada; adentro, la mujer que susurra la canción de cuna. En las barandas de las camas velan los santos protectores y se va sacando clavada en las paredes, la palma de ramo bendito, conjuro de tempestades y digno elogio de una religión tres veces santa. Vienen a mi mente las célebres palabras de un historiador regional, ya fallecido: “Buscad el hombre honrado y la mujer virtuosa en las lomas de Antioquia porque allá no han soplado todavía los vientos de nuestra civilización maldita”. Yo prefiero que luzca en mi pecho la mulera antioqueña en lugar de las cruces de Boyacá. Miguel Henao A. 77 77 Miguel Henao A. “La Familia Castañeda”. La Acción, 731. Sonsón, 18 de julio de 1942. 119 Momentos de la Fiesta La poetisa sonsoneña Josefina Henao Valencia —Lucía Javier— contribuyó a dar mayor solemnidad y seriedad a este desfile con su prosa, la cual ha circulado en programas de mano de la Fiesta desde por lo menos los años ochenta. Es posible que gracias a su participación como organizadora, ella también haya incidido en la materialización del desfile, al darle el toque realista y de jocosidad sutil con el que cuenta ahora; o que quienes se han encargado de este hayan encontrado en sus textos una guía de lo que debían poner en escena. Cualquiera que sea el caso, esta poetisa representa para el pueblo la “tradición” de la Fiesta y de Sonsón, ello es, de cierta manera, la personificación de quienes hicieron la historia y al tiempo de quienes fueron sus guardianes, donde caben también los nombres de quienes con un espíritu cívico sin límites coadyuvaron en distintas épocas a conservar la autenticidad de la Fiesta y la tradición local: Fernando Uribe Uribe, Rómulo Carvajal, Mercedes Ramos, Miryam Correa, Susana Cadavid y tantos otros que quedan en la memoria colectiva. 78 determinadas épocas—, sin que se modifique por esto su esencia. Por ejemplo, a los padres de familia se les ha llamado “los taitas”; a “los menorcitos” se les nombraba como “los hijos más tiernecitos”, y a los hijos mayores se les llamó también “los hijos de pantalón largo”. 79 El guion más completo del desfile que se pudo hallar hasta ahora es uno de 1987 que recoge nombres propios y características de los personajes dentro de la familia. Es posible que este guion haya sido concebido para esta Fiesta en particular, no obstante, nutre y le da contenido al acto representativo: La estructura del desfile de la Familia Castañeda en Sonsón no parece haber sido objeto de muchas variaciones en el tiempo. En ocasiones ha cambiado el nombre de algunos personajes —indicador de los usos léxicos más frecuentes en Como buena familia antioqueña, allá en el rancho parpadearon 14 retoños, de los cuales SIETE murieron de sarampión, virgüelas, mal de estómago, tabardillo y otros chiquitos, que no se supo de qué. Hoy viven solamente SIETE gordos, colorados y con tendencia al alza! 78 Lucía Javier ( Josefina Henao Valencia). “Programa de mano XXXIII Fiesta del Maíz de Sonsón. Agosto 12 al 15 de 1983. Visita de la Familia Castañeda”. Documento inédito. Archivo de la Corporación Fiesta del Maíz. 120 Explicación necesaria sobre los Castañedas: Esta gente, (pobre pero de buena familia) tiene diez personajes principales y cinco suplentes: la encabeza don CALIXTO, viejo que ha gastado 68 años arrancándole la vida a un pegujal de “La Liona”, criando siete hijos de acuerdo con los mandatos del Padre Astete y viviendo en santa “compaña” con RUPERTA CASTAÑEDA su legítima mujer y sufrida compañera que tiene grandes conocimientos en colchado de ropa y hechura de natilla y mazamorra de maíz amarillo. [s. a.] “Programa de la XXIX Fiesta del Maíz. Sonsón, Agosto 15 al17 de 1975. Dos desfiles y un homenaje día del labriego”. Documento inédito. Archivo de la Corporación Fiesta del Maíz. 79 De estos siete vivos, tenemos a TOÑO CASTAÑEDA Y CASTAÑEDA depura cepa, muy mayor de edad, cedulado una sola vez, BOBO de nacimiento, muy buena persona, ajeno a todos los vicios y tentaciones, soltero, viernero, es muy útil en la casa: para traer agua, rajar leña, y hacer mandados a las vecindades. Las muchachas le tienen mucha confianza, porque lo consideran inofensivo, pero… no hay tal! MANUEL, el segundo también soltero, hace cuatro años que está saliendo al pueblo a traer el mercado, a vender plátanos, hojas de “biao” y naranjas, si es cosecha; no tiene novia pero está buscando; usa pañuelo rabo’e gallo y carriel de nutria. NICANOR, el tercero de los Castañeda, es muy buen muchacho; por no ir al servicio militar, se casó… con JOSEFA NEIRA, una vecina que ayudaba en la casa, muy formalita y muy baquiana para la cocina, hasta sabía algo de costura que había aprendido en la escuela. Han cumplido muy bien con el precepto, pues en cinco años de casados tienen cuatro muchachitos vivos y dos muertos, que fueron mellicitos… ventajas del maíz amarillo! CIPRIANO, es el mejor pión de la finca, sabe tocar tiple, no le falta novia, escribe cartas y es muy “debuenas pa’l tute”. Ha dejado metidas a varias novias porque, como él dice: “quién se va a casar estando soltero y con lo caro que está el viver”. Siguen las muchachas, son tres: TERESA, RAMONA y MARINACIA… Tres mazorcas de cabellos rubios, avispadas, saben bailar, solteras de nacimiento, muy pretendidas en la vereda, tienen baúl con mucha postal y láminas de píldoras; se cargan un genio que hace doler las muelas a los viejos con sus pilatunas, pues las cuidan más que a la roza cuando hay loras. Desde el Alto de la Osa, al Mulato de Abajo, son las más elegantes y pinchadas; sin ellas no hay baile bueno ni “auto público” en la escuela; hay una que ha venido a “rezar” tres veces y al fin sale con que… “ella acaso está así como bien enamorada”. Acompañan a la familia en su viaje, DONATO, PEDRO y MARTÍN, tres vecinos muy de la casa, dos de ellos novios de las muchachas, muy queredores de don Calixto y de misiá Ruperta, por cuyos cuidos sienten gran debilidad. Ellos han prestado las bestias aperadas pa’l viaje de las muchachas y se han ofrecido a traer las vacas, las cargas, la marrana, el perro y los corotos. Aquí tenéis a la FAMILIA CASTAÑEDA, CASTAÑEDA Y NEIRA”. 80 80 Lucía Javier ( Josefina Henao Valencia). “Programa de mano XXXIII Fiesta del Maíz de Sonsón. Agosto 12 al 15 de 1983. Visita de la Familia Castañeda”. Documento inédito. Archivo de la Corporación Fiesta del Maíz. 121 Momentos de la Fiesta El desfile de la Familia Castañeda es por estas y más razones parte fundamental de la Fiesta del Maíz y un escenario desde el que se han construido significados de la identidad paisa. Por ello, puede decirse que va más allá de los límites locales, y que sirve como referente para quienes encuentran en el legado cultural —bien sea de carácter histórico o construido desde los discursos— de la colonización antioqueña sus razones de ser históricas y culturales. La capacidad de ingresar y adaptarse a un equipamiento arquitectónico como el de Sonsón y a los significados construidos en torno a la cultura paisa reivindicados en la Fiesta del Maíz, ha legitimado su originalidad y proyección, a pesar de haber sido un “préstamo” de otras fiestas. “Por eso, desde los lomos de los caballos finos, saludan a la multitud los arrogantes Patriarcas, que muestran una cara de triunfo como si vinieran de una conquista escrita para todos los siglos”, Estampa de la Familia Castañeda, Lucía Javier, 1983. 122
© Copyright 2024