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Octubre 2015
Vol. 23, No. 2
Escuela Secundaria
Connecticut Technical High Schools
TM
¡aún hacen la diferencia!
Recomiéndele
libros específicos
a su joven
Muéstrele a su estudiante cómo
tomar decisiones responsables
S
u hijo tendrá que tomar todo tipo
de decisiones en los años de la
secundaria, desde qué clases cursar
hasta cómo encarar la presión de
los compañeros. Enséñele a tomar
decisiones que le permitan tener
éxito tanto en el campo académico
como en el social.
Si su hijo le habla a usted de un
problema, guíelo por estos pasos:
1. Pídale que describa la situación
que está enfrentando. Haga
preguntas amplias, que no
pueda contestar con un sí o no.
2. Comente con él las posibles
opciones. Ayude a su adolescente
a ver diferentes alternativas. Haga
una lista enumerando los pro y
contra, y evalúe las ventajas y
desventajas de cada opción.
Hable de cómo las consecuencias
de cada una podrían afectar las
metas que se ha trazado.
Copyright © 2015, The Parent Institute®
3. Deje que su hijo tome una decisión y que la ponga en práctica.
Luego, pregúntele qué aprendió
al tomar esa decisión. Averigüe
si tomaría el mismo camino u
otro diferente si enfrentara
nuevamente el mismo dilema.
Recuerde: si bien muchas veces
a usted podría parecerle que su
adolescente está desafiando sus
valores y creencias, todavía necesita
su apoyo y orientación para tomar
decisiones importantes sobre el
futuro. Con frecuencia, los jóvenes
se rebelan como manera de afirmar
su independencia. Pero con su apoyo
y amor incondicional, adquirirá el
sentido común que lo guiará para
tomar decisiones sensatas.
Fuente: American Medical Association, “Helping Your Teen
Make Responsible Choices,” Palo Alto Medical Foundation,
niswc.com/responsible_choice.
www.parent-institute.com
Es más probable
que los adolescentes hagan algo si
reciben sugerencias
específicas en lugar
de generales. “Saca la basura
y guarda la ropa limpia” suele
producir mejores resultados
que “Termina de hacer tus
tareas domésticas”.
La misma idea también
funciona cuando se trata de
animar a los jóvenes a leer.
Sugerirle a u hijo un libro
en particular podría ser más
eficaz que decirle, simplemente, “Deberías leer más”.
Pero, con todos los libros que
hay disponibles en el mercado,
¿cómo puede saber cuál
recomendarle?
Y es aquí que resulta útil
Goodreads: el sitio web más
grande para recomendaciones
a los lectores. Puede navegar
títulos por categorías o ver
una lista, que se actualiza
mensualmente, de los libros
más populares para jóvenes. El
sitio Goodreads tiene incluso
una aplicación que usted
podría bajar en su teléfono
inteligente.
Pues entonces, antes de salir
a la biblioteca con su joven,
visite www.goodreads.com y
haga una lista de libros que le
sugerirá.
Ideas prácticas para que los padres ayuden a sus hijos
Copyright © 2015, The Parent Institute®
www.parent-institute.com
Promueva una actitud positiva
en su estudiante de secundaria
Para lograr el éxito en la
escuela y en la vida, es
importante tener una
actitud positiva. Para
promover el positivismo,
anime a su joven a:
• Tener esperanza. Por lo general,
en un día normal hay cosas que
salen bien y otras que salen mal.
No se concentre en lo que salió
mal. Haga hincapié en lo que tuvo
un resultado positivo.
• Reír. Recuerde: nada es mejor que
el buen humor para eliminar una
actitud negativa.
• Seguir adelante. No seleccionaron
a su hijo para el equipo que quería, y la próxima oportunidad de
presentarse a las pruebas será el
próximo año. Es natural sentirse
decepcionado. Pero luego, anímelo
a dejarlo pasar y a participar en
otra actividad por el momento.
• Buscar oportunidades. Si su
adolescente quiere trabajar con
animales, debería buscar una
oportunidad de hacerlo. ¿Acaso
hay un veterinario en su comunidad que precise ayuda? ¡Sugiérale
a su joven a llamar a un par de
veterinarios para averiguarlo!
Fuente: B.A. Lewis, What Do You Stand For? For Teens:
A Guide to Building Character, Free Spirit Publishing.
“Para tener éxito, es
necesario encontrar algo
de que aferrarse, algo que
motive, y algo que inspire”.
—Tony Dorsett
Estrategias útiles para rendir bien
en los exámenes de matemáticas
Puede resultar difícil
prepararse para los exámenes de matemáticas.
Después de todo, no hay
fechas que memorizar
o composiciones que escribir. Pero
usted puede ayudar a su adolescente
a hacerlo lo mejor que pueda si le da
un par de estrategias para abordar los
exámenes.
Antes del examen, su joven debería:
• Practicar. Puede volver a resolver
los problemas de la tarea o de los
exámenes anteriores. Sugiérale
que haga hincapié en los problemas que no comprendió, o que no
resolvió correctamente y que los
vuelva a hacer hasta que se sienta
seguro que los puede responder.
• Elaborar una “hoja de fórmulas”.
En una hoja de papel, pídale que
anote todas las fórmulas que tiene
que memorizar.
Durante el examen, su joven debería:
• Anotar esas fórmulas tan pronto
como reciba su examen. De esa
manera, será menos probable que
olvide lo que ha memorizado.
• Leer las instrucciones cuidadosamente. ¡Recuérdele que puede
perder puntos si se olvida de
mostrar su trabajo o de encerrar
la respuesta en un círculo!
• Calcular aproximadamente.
Si un paso en el problema le pide
que reste 32 de 109, lo más probable es que sepa que la respuesta
debería ser alrededor de 80. Si
el resultado que obtiene es 17,
¡debería volver a intentarlo!
• No apresurarse. El examen de
matemáticas no es una carrera.
Después del examen, su joven
debería:
• Revisar su trabajo. Sugiérale
que vuelva a resolver cualquier
problema si no se siente seguro
de la respuesta.
• Buscar errores que haya cometido
por descuido. Los puntos decimales,
¿están en el lugar correcto? ¿Puso
el signo negativo?
¿Ha limitado el
tiempo que su hijo
mira una pantalla?
Los jóvenes pasan cada
vez más tiempo en línea
y frente a una pantalla.
¿Está encontrando formas
de limitar el tiempo que
su joven pasa sentado frente a la pantalla? Responda sí o no a las siguientes
preguntas para determinarlo:
___1. ¿Ha fijado horas en las que no se
puede enviar mensajes de texto, como
en las comidas o la hora de la tarea?
___2. ¿Ha verificado que no haya un
televisor en el dormitorio de su hijo?
___3. ¿Ha puesto la computadora en
un lugar central de su hogar para que
sea fácil controlar qué sitios visita su
hijo y con quién se comunica?
___4. ¿Comprueba que su hijo no esté
en línea en horas de estudio (a no ser
que necesite Internet para una tarea)?
___5. ¿Tiene una hora fija para apagar los electrónicos por la noche? ¿Un
horario en que su hijo debe dejar el
teléfono móvil en un lugar central de
la casa? Este no debería estar en el
dormitorio de su hijo por las noches.
¿Cómo le está yendo?
Si la mayoría de sus respuestas fueron
sí, está tomando las medidas necesarias para limitar el tiempo que su hijo
pasa en línea. Para las respuestas no,
pruebe esas ideas.
Escuela Secundaria
TM
¡aún hacen la diferencia!
Ideas prácticas para que los padres ayuden
a sus hijos. ISSN: 1523-133x
1523-2417
Para obtener información llame o escriba a:
The Parent Institute®, 1-800-756-5525,
P.O. Box 7474, Fairfax Station, VA 22039-7474.
Fax: 1-800-216-3667.
O visite: www.parent-institute.com.
Publicada mensualmente de septiembre a mayo
por The Parent Institute®, una división de NIS,
Inc., una agencia independiente y privada.
Empleador con igualdad de oportunidad.
Copyright © 2015 NIS, Inc.
Editor Responsable: John Wherry, Ed.D.
Editora: Rebecca Miyares.
Editora de Traducciones: Victoria Gaviola.
Ilustraciones: Joe Mignella.
Traductoras: Kelly Maldonado y
Dolores Quintela.
2 • Escuela Secundaria • Los Padres ¡aún hacen la diferencia! • Octubre 2015
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Copyright © 2015, The Parent Institute®
Tomar apuntes se hace más fácil
con este método de seis pasos
Una de las mejores
maneras de recordar
lo que se estudia es
tomando apuntes al
momento de leer. El
método de las seis preguntas es
una manera muy eficaz de tomar
apuntes. Este método ayuda a los
estudiantes a identificar y recordar
los personajes, hechos y fechas más
importantes cuando estudian historia
o literatura.
Pídale a su joven que ponga seis
encabezamientos en un pedazo
de papel: ¿Quién? ¿Qué? ¿Dónde?
¿Cuándo? ¿Por qué? ¿Cómo? A medida
que vaya leyendo el texto asignado,
debería buscar las respuestas a cada
una de estas preguntas y anotar los
datos y la información pertinentes:
1. ¿Quién? ¿Quién participó de
los hechos? ¿Quiénes fueron los
personajes más importantes?
2. ¿Qué? ¿Cuáles fueron los acontecimientos más importantes?
3. ¿Dónde? ¿Dónde ocurrió esto?
¿Por qué es importante este lugar?
Si esto hubiera ocurrido en otro
lugar, ¿hubiera sido diferente el
resultado?
4. ¿Cuándo? ¿Cuándo ocurrió? ¿Hay
alguna razón importante por la cual
esto ocurrió exactamente cuando
lo hizo y no antes o después?
5. ¿Por qué? ¿Cuáles fueron las
causas de este hecho? ¿Por qué es
importante estudiarlo y analizarlo?
6. ¿Cómo? ¿Cómo ocurrió? ¿Cuál fue
el resultado?
Si su hijo tiene dificultad para encontrar las respuestas a estas preguntas
cuando esté leyendo, sugiérale que
practique con un artículo del periódico local. Las noticias tratan de
responder estas seis preguntas en
los primeros párrafos.
Una agenda sobrecargada puede
afectar las calificaciones y la salud
Su hijo está tomando
clases difíciles, tiene un
trabajo a tiempo parcial y
acaba de ser seleccionado
para el equipo titular de
la escuela. Además, está preocupado
por conseguir un cupo en la universidad, así que trata de ofrecerse como
voluntario con regularidad.
Ponga todos estos compromisos
juntos y puede terminar con un
adolescente abrumado. Hoy en día,
muchos jóvenes corren de una
actividad a otra. Y los expertos
sostienen que este paso frenético
puede resultar en problemas de
salud.
La Academia Americana de
Pediatría advierte sobre la presión
que sienten los jóvenes cuyas
agendas están sobrecargadas.
Puede causar dolores de cabeza,
irritabilidad y agotamiento, que a
su vez pueden afectar el rendimiento
en la escuela.
Usted quiere que su joven se sienta
libre de tomar sus propias decisiones.
Pero es necesario que usted lo
supervise. Ayúdelo a determinar
qué actividades son más importantes.
Debería concentrarse en ellas, aunque
esto implique que deba abandonar
otras. Puede ayudarlo a decidir qué
cambios tendría que hacer.
Tal vez se percate de que su joven
está perdiendo el tiempo. Si pasa
horas de horas enviando mensajes de
texto y haciendo videos para Vine, tal
vez sea conveniente que limite hasta
qué hora por la noche permitirá que
use sus aparatos electrónicos. Ese
simple paso podría darle a él más
horas para descansar, estudiar y dedicarse a las actividades que le gustan.
Fuente: S.G. Boodman, “Too-Busy Teens Feel Health Toll,”
The Washington Post, niswc.com/too_busy.
P: A mi hijo no le han caído bien
algunos de sus maestros en años
anteriores. Pero ahora tiene
uno con quien tiene una relación
particularmente difícil. Todo lo
que dice de él es negativo. ¿Qué
debo hacer?
Preguntas y respuestas
R: Cuando los estudiantes son
niños pequeños, por lo general
adoran a sus maestros. Pero a
medida que van creciendo, hallan
que hay un maestro que no les
gusta. Y esto se aplica particularmente en la intermedia y la
secundaria, donde los estudiantes
tienen un maestro diferente para
cada materia.
Como padre, es posible que se
sienta tentado a salir en defensa
de su joven. Pero los expertos
sostienen que lo mejor que puede
hacer es ayudarlo a lidiar con la
situación él mismo. Hágalo así:
1. Reconozca sus sentimientos.
Dígale a su hijo que no hay
problema en que no le guste
un maestro. Pero es importante
que aprenda a trabajar con
personas que no le simpatizan.
Dígale que sabe que es capaz
de encarar este problema.
2. Escuche. Ayúdelo a descubrir
qué es lo que está causando el
problema. ¿Acaso la tarea es
difícil? ¿Tiene dificultades para
entender el contenido de la
clase? Sin embargo, tenga presente que solo está escuchando
un punto de vista. Los jóvenes,
por lo general, no son los
testigos más objetivos.
3. Anímelo a tomar medidas.
Una vez su joven tenga en claro
cuál es el problema, debería
hablar con el maestro.
4. Controle. Continúe observando y escuchando a su hijo.
¿La situación está mejorando?
De lo contrario, tal vez haya
llegado la hora de solicitar una
reunión con el maestro a la que
deberían asistir usted y su hijo.
Octubre 2015 • Escuela Secundaria • Los Padres ¡aún hacen la diferencia! • 3
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Enfoque: trabajando juntos
¡Siga participando
durante los años
de la secundaria!
Cuando su hijo llegue
a la secundaria, es muy
probable que cambie
un poco la naturaleza
de su participación en
su educación. Ahora usted es más
como un entrenador: a los márgenes
del campo de juego, pero todavía
muy comprometido con el partido.
Estas son algunas de las maneras de
seguir participando:
• Hable con su hijo regularmente
sobre sus clases. Comenten qué
está aprendiendo.
• Conozca a los maestros, los
consejeros y a los miembros del
personal de la escuela.
• Ayude a su hijo a administrar
sus proyectos escolares. Hacerlo
puede ser difícil para el cerebro
en desarrollo de los jóvenes.
Trabaje con él para elaborar un
plan realista para completarlos.
• Use todas las herramientas a
su disposición para controlar la
asistencia y el rendimiento de
su hijo. Si hay manera de ver las
calificaciones en línea, hágalo
con regularidad. Cuando su joven
reciba la libreta de calificaciones,
coméntela con él.
• Esté al tanto de los requisitos
para la graduación. No espere
hasta la última semana de clases
para descubrir que su joven no se
graduará con sus compañeros.
• Ayude a su joven a elaborar un
plan para el futuro. Trabaje con
la escuela para verificar que esté
tomando las clases que necesita
para la universidad o un trabajo
después de la secundaria.
• Forme parte de un comité en la
escuela, u ofrézcase como voluntario para las funciones escolares,
si fuera posible. Así, conocerá a
los amigos de su hijo y se enterará
de lo que ocurre en la escuela.
Los consejeros pueden ayudar a
solicitar ingreso a la universidad
T
al vez su hijo anhele asistir a
una cierta universidad. O quizá
no tenga idea a qué institución le
gustaría asistir, o siquiera si podría
lograr ingresar.
Los consejeros escolares se
convertirán en aliados clave de
su estudiante cuando empiecen el
proceso de solicitud de admisión.
El consejero de su joven está a
su disposición para ayudarlo a:
• Seleccionar una universidad.
Aunque su joven quiera asistir a
una en particular, es una buena
idea que solicite ingreso a más
de una institución. El consejero
puede ayudarlo a seleccionar
instituciones educativas que se
ajusten a sus intereses y deseos.
• Escribir cartas de recomendación. Muchas universidades les
piden a los consejeros que escriban una descripción detallada
del estudiante. Su hijo puede
facilitar esta tarea elaborando
un currículum vitae corto que
incluya sus logros tanto dentro
como fuera de la escuela.
• Llevar cuenta de todo el papeleo
necesario. Desde la solicitud
de ingreso hasta la solicitud de
becas, hay muchos aspectos del
proceso que hay que considerar.
¡La mayoría de los jóvenes necesitan que sus padres y consejeros
los ayuden con esta tarea!
Exíjale a su estudiante que trate
con respeto a todos los maestros
Pregúnteles a los
maestros cuál es su
mayor frustración en la
escuela, y la respuesta
podría sorprenderlo.
No son las largas horas, ni el sueldo.
Con frecuencia, es la sensación de
que nadie los trata con respeto.
Y muchos estudiantes dicen
que ellos quieren ser tratados con
respeto. Pero cuando se trata de
los maestros, admiten que no siempre se dirigen a ellos con el mismo
respeto que exigen de los demás.
Y es aquí que usted puede marcar
la diferencia. Dígale a su joven que
espera que respete a sus maestros.
Recuérdele que no debería
olvidar los buenos modales al
salir de casa. En la escuela, debería
exhibir el mismo comportamiento
que usted espera de él en casa. Si
no permite que se dirija a usted
de forma grosera, pues tampoco
debería hablarles a sus maestros
de ese modo.
Explíquele a su joven qué es el
comportamiento respetuoso. Su hijo
puede demostrar respeto de muchas
maneras: esperando su turno para
hablar en clase, y llegando a la
escuela preparado y puntualmente.
Fuente: G.D. McKay, Ph.D. y otros, Raising Respectful
Kids in a Rude World, Prima Publishing.
4 • Escuela Secundaria • Los Padres ¡aún hacen la diferencia! • Octubre 2015