APRENDIZAJE COOPERATIVO Autor: Laura Melendo Adell Temática: Innovación y desarrollo curriculares Etapa: Educación Primaria y Educación Secundaria Obligatoria E l trabajo cooperativo se desarrolla en pequeños grupos heterogéneos combinando objetivos individuales, ajustados a las necesidades del alumnado, y objetivos grupales, que pretenden reforzar la interdependencia positiva y la responsabilidad individual, primando el esfuerzo personal para conseguir objetivos comunes. Los docentes debemos tener presente en todo momento una visión multidisciplinar del conocimiento y de su aplicación a la vida cotidiana. No debemos ceñirnos a la adquisición de saberes básicos, sino atender a un desarrollo integral del alumno y fomentar su capacidad para incorporarse a la vida adulta. Tenemos la obligación de enseñar a nuestros alumnos a relacionarse positivamente con los demás y a mantener relaciones sociales fluidas para facilitarles la incorporación al mundo laboral donde se les va a exigir trabajar y colaborar en equipo con otros profesionales. Actualmente las relaciones interpersonales y la capacidad de compartir experiencias y esfuerzos son requisitos deseados y muy valorados en los procesos de selección de personal. Al igual que ocurre con la diversidad en el mundo social que nos rodea, en las aulas nos enfrentamos Página 9 a un alumnado que accede al sistema educativo con distintas necesidades. Cada vez con mayor frecuencia nos encontramos con distintos ritmos de aprendizaje, estilos y capacidades a los que debemos dar respuesta. La llegada de alumnos de otros países, con otras culturas y costumbres, nos lleva a una multiculturalidad en la que muchas veces se limita a una coexistencia de las culturas o incluso nos lleva en cierto modo a la marginación. Los docentes debemos apostar y trabajar en la interculturalidad integrando a los alumnos, escogiendo y asimilando lo positivo de estas culturas para enriquecernos con el intercambio y trabajo en común. La inclusión es el principal valor en la actual Ley Orgánica de Educación (LOE). El reto de la diversidad en el aula debemos abordarlo desde un modelo comprensivo, adaptando la escuela al alumno y considerando a cada uno como un proyecto diferente al que debemos dar respuesta con opciones plurales y diversas. Página 10 Debemos preguntarnos cuál es la naturaleza de las diferencias individuales para conocer de este modo los diferentes apoyos y ayudas que cada uno necesita para alcanzar su meta. Es un error habitual dar el mismo refuerzo a todos por igual o personalizar las medidas con el objetivo de que todos alcancen los mismos objetivos, ya que cada individuo deberá alcanzar sus propias metas, distintas a las de su compañero. Es imposible dar respuesta individualizada con un solo enfoque o un único método. El Aprendizaje Cooperativo permite enseñar a nuestros alumnos interactuando cara a cara, desarrollando una interdependencia positiva, colaborando y creando hábitos de trabajo en grupo. El trabajo cooperativo da respuesta a la necesidad de fomentar las relaciones interpersonales, compartir esfuerzos, realizar tareas en grupo y a su vez atiende a la diversidad social, cultural y de ritmos de aprendizaje presentes en el aula. EN QUÉ CONSISTE EL APRENDIZAJE COOPERATIVO Y CUÁLES SON SUS VENTAJAS El Aprendizaje Cooperativo es un término genérico usado para referirse a un grupo de procedimientos de enseñanza - aprendizaje, que parten de la creación de pequeños grupos mixtos y heterogéneos en el aula, en los que los alumnos trabajan en equipo implicándose y cooperando para resolver tareas y profundizar en su propio aprendizaje. David W. Johnson, profesor de Psicología en la Universidad de Minesota, actualmente CoDirector del “Cooperative Learning Center” y autor de más de 350 artículos y capítulos, muchos de ellos relacionados con el Aprendizaje Cooperativo, lo define como: “El empleo de grupos reducidos en los que los alumnos trabajan juntos para optimizar su propio aprendizaje y el de los demás” (D. W. Johnson). Johnson pone de manifiesto la gran vinculación de los objetivos de los alumnos dentro de un mismo equipo, de modo que cada uno de ellos “sólo puede alcanzar sus objetivos si y sólo si los demás consiguen alcanzar los suyos” (D. W. Johnson). No todos los trabajos que se realizan en equipo tienen las características del trabajo cooperativo. Para ello es necesario que el trabajo se organice en pequeños grupos y la consecución de los objetivos individuales esté directamente relacionada con la consecución de los objetivos Página 11 del grupo. La evaluación no sólo tendrá en cuenta el trabajo individual, sino también los resultados del trabajo grupal. Tenemos que tener siempre presente que los alumnos trabajan juntos para aprender como equipo y son tan responsables de su aprendizaje como del de sus compañeros de grupo. El Aprendizaje Cooperativo no es un aprendizaje competitivo ni individualista como lo son en muchas ocasiones los métodos usados en las aulas. Es un mecanismo colaborador que busca el desarrollo de hábitos de trabajo en equipo, solidaridad entre compañeros, empatía y la intervención autónoma en los procesos de aprendizaje. El profesor es un mero mediador y el alumno, consciente de su progreso, es el protagonista. Las actitudes de implicación y de iniciativa, junto a la relación social que conlleva el Aprendizaje Cooperativo, aumentan la motivación del alumno por la tarea a desempeñar, mejorando así el grado de comprensión y la calidad de su aprendizaje. El abandono educativo disminuye ya que los estudiantes incrementan el compromiso con sus compañeros debido a la interdependencia positiva existente y son más persistentes en las tareas al estar más motivados y satisfechos. El razonamiento crítico, muchas veces olvidado por los estudiantes, se desarrolla gracias a que la seguridad, soporte y apoyo que ofrece el grupo, anima al alumno a experimentar por su cuenta. Por otra parte, también trabajan la perspectiva crítica al evaluar la calidad de la interacción entre los miembros del grupo. Página 12 QUÉ SE PRETENDE CONSEGUIR CON EL APRENDIZAJE COOPERATIVO Se pretende implementar y rediseñar el currículo multinivel, secuenciándolo por niveles, ajustándolo o expandiéndolo según las necesidades del alumno. De este modo se busca el mejor resultado en el aprendizaje de todos los miembros de los grupos cooperativos. Así se trata de dar respuesta a la diversidad de situaciones, intereses y ritmos de aprendizaje existentes en el aula ordinaria. Se presentan las diferencias de cada integrante del equipo como una gran oportunidad para mejorar el aprendizaje. Se fomenta la interdependencia positiva, valorando la necesidad del esfuerzo personal y el trabajo individual para conseguir un aprendizaje significativo y para alcanzar los objetivos colectivos. Se pretende que tras un trabajo previo individual, se aprenda a compartir trabajo y responsabilidad asumiendo tareas concretas. Se pretende potenciar los sistemas de apoyo entre el alumnado. Mientras aprenden conjuntamente, se ayudan entre sí, adquieren habilidades sociales y de comunicación que favorecen el respeto mutuo, la convivencia y el clima de trabajo. Aprenden a escuchar a los demás, a empatizar y a comprender los puntos de vista de sus compañeros. Página 13 TRABAJO DE CIERTAS COMPETENCIAS BÁSICAS A TRAVÉS DEL APRENDIZAJE COOPERATIVO 1. Competencia en comunicación lingüística: el Aprendizaje Cooperativo permite desarrollar las relaciones constructivas con los demás y la capacidad para convivir y resolver conflictos pacíficamente. Se establecen vínculos, expresan pensamientos y opiniones e interpretan diferentes tipos de discurso en diferentes contextos. 2. Competencia en el conocimiento y la interacción con el mundo físico: la construcción del conocimiento no puede realizarse desde una concepción individualista, sino desde una práctica social y colectiva, asumiendo actitudes de respeto hacia los demás y hacia uno mismo. 3. Tratamiento de la información y competencia digital: el trabajar en un entorno social cada vez más amplio y contar con las aportaciones de los compañeros del equipo, amplía las fuentes de información e implica el uso de una actitud crítica y reflexiva para tratar y utilizar esa información. 4. Competencia social y ciudadana: el Aprendizaje Cooperativo potencia la comprensión de la realidad social, el conocimiento y confianza con los compañeros, la comunicación con precisión y sin ambigüedades, la resolución de forma constructiva de los conflictos y la negociación para llegar a acuerdos y toma de decisiones valorando conjuntamente los intereses individuales y los del grupo. 5. Competencia para aprender a aprender: conlleva el compromiso personal, hace necesario el esfuerzo compartido y se trabaja la capacidad de cooperar y el manejo de un conjunto de recursos desarrollados a través de experiencias de aprendizaje gratificantes, tanto individuales como colectivas. 6. Autonomía e iniciativa personal: el Aprendizaje Cooperativo desarrolla la iniciativa personal, el espíritu de superación, la creatividad, la confianza en uno mismo, la responsabilidad y el sentido crítico. Página 14 ELEMENTOS ESENCIALES DE LA COOPERACIÓN FORMACIÓN DE LOS GRUPOS DE TRABAJO COOPERATIVO Las claves del aprendizaje cooperativo están en el trabajo previo y responsabilidad individual de cada miembro del grupo, con el fin de alcanzar sus objetivos. Por otra parte, la cooperación con los compañeros es trascendental para el logro de los objetivos grupales. Durante las primeras semanas de curso se van haciendo diversas dinámicas de cooperación y actividades de grupos reducidos y de gran grupo. De este modo se observan las diferentes conductas, habilidades sociales y relaciones ya existentes de amistad, enemistad o incluso de exclusión de algún alumno. Antes de la evaluación predictiva se obtiene información académica que nos permite conocer el nivel curricular de cada alumno. El modo de conseguir todo esto es la interacción cara a cara. Los miembros del grupo deben realizar juntos una tarea donde compartan objetivos y recursos, se ayuden y cada uno cumpla con su rol establecido. También es imprescindible la interdependencia positiva, ya que todos deben entender que el trabajo y esfuerzo de cada miembro beneficia a todo el equipo. Cada equipo debe de ser consciente de la labor que realizan y de si están o no alcanzando sus metas. Para ello debe establecerse un mecanismo de autoevaluación grupal, que les permita determinar si se están superando los objetivos, qué acciones o actitudes les benefician o perjudican y decidir el modo de actuar, conservando o modificando las conductas necesarias. La formación de los equipos es vital, los grupos deben ser heterogéneos en cuanto a sexo, nacionalidad, desarrollo curricular etc… ya que no solo se pretende el avance en los contenidos curriculares, sino también la adquisición de valores y habilidades sociales. Los alumnos realizan un test sociométrico donde se les pregunta sus preferencias a la hora de trabajar en grupo. El sociograma sirve de guía al profesor a la hora de formar los equipos e intentar tener en cuenta sus preferencias o por ejemplo ubicar alumnos a los que nadie ha escogido en grupos que estén dispuestos a ayudarles. Se distribuye a los alumnos en equipos base de 4 ó 5 miembros: un alumno de nivel curricular alto, dos medios y uno de necesidades educativas especiales, procurando que haya de diferentes sexos y nacionalidades. Estos grupos son permanentes durante todo el curso, aunque es posible e incluso recomendable hacer pequeños cambios para mejorar su funcionamiento. Es muy interesante y enriquecedor trabajar el Aprendizaje Cooperativo desde distintas áreas y respetando los grupos de trabajo. Un Página 15 alumno puede tener niveles curriculares muy distintos dependiendo del área y desempeñar papeles muy diferentes en el trabajo de equipo. Esto exige una coordinación multidisciplinar de revisión del trabajo y evolución de los equipos desde las diferentes áreas. TRABAJO DE LAS UNIDADES DIDÁCTICAS Para cada unidad y en base a los contenidos fundamentales se elaboran los objetivos didácticos para cada alumno, atendiendo a diferentes niveles (curriculum multinivel). Estos objetivos personalizados y ajustados a cada nivel de competencia curricular, se presentan al alumno haciendo la unidad accesible para todos. Por otro lado se han debido definir los objetivos grupales que se quieran trabajar y los papeles a desempeñar por los distintos miembros del equipo. Algunos de los objetivos grupales podrían ser por ejemplo: “nos ayudamos los unos a los otros” o “todos hemos aprendido”. Los roles de los miembros del grupo podrían ser por ejemplo: responsable, portavoz, moderador y animador. Estos roles se van cambiando a lo largo de las unidades didácticas para que todos aprendan a desempeñar distintos papeles en el trabajo en equipo. Los objetivos grupales y roles que se hayan definido se entregan al equipo al inicio de la unidad para poder ir trabajando en con- Página 16 seguir los objetivos mientras se desempeña el papel asignado. En la evaluación de cada unidad, se tiene en cuenta la evaluación individual de cada alumno y la evaluación de equipo. En la evaluación del equipo, los alumnos evalúan la consecución de los objetivos grupales y plantean las mejoras o modificaciones para la siguiente unidad. Por otro lado se evalúa que todos los miembros del grupo tengan completas todas las actividades propuestas, reflejándose así la cooperación y trabajo conjunto del equipo. REFLEXIÓN SOBRE LA PUESTA EN PRÁCTICA DEL APRENDIZAJE COOPERATIVO EN EL AULA Mi experiencia personal de trabajo cooperativo en el aula es absolutamente satisfactoria y enriquecedora. Tras trabajar el aprendizaje cooperativo con varios grupos de alumnos, me gustaría destacar: La vital importancia de la elección de los componentes de los equipos para que éstos funcionen correctamente. En ocasiones haciendo pequeños cambios se ha mejorado sustancialmente el rendimiento del grupo. También es frecuente observar como los alumnos van habituándose al modo de trabajo en equipo conforme avanza el curso, van conociéndose mejor, aportan y comparten más ideas y tareas y colaboran cada vez más. Las relaciones entre los alumnos, efectivamente, van mejorando cada día y como consecuencia el ambiente de la clase. La interdependencia positiva hace que mejoren los hábitos de trabajo y la motivación y por tanto los resultados académicos. La atención a todo el alumnado, con sus peculiaridades, características y diversidad de niveles curriculares, está garantizada. Con el trabajo individual personalizado, contribuyen a los objetivos grupales fomentando así su integración. La coordinación de departamentos conlleva algo de dificultad, pero si el centro tiene en cuenta esta necesidad en la elaboración de horarios se pueden organizar reuniones para revisar el funcionamiento de los equipos cooperativos, proponer cambios de alumnos, variar objetivos grupales, rehacer documentación o definir metodologías. Página 17 Otra dificultad que presenta esta modalidad de trabajo en el aula, es el cambio de la metodología magistral que muchos docentes usan. El profesor planifica la actividad, observa e interviene sólo cuando es necesario, evitando las explicaciones individuales para que éstas se hagan dentro del equipo, ya sea por un compañero o por el docente. Página 18 BIBLIOGRAFÍA • JOHNSON, D.W., JOHNSON, R.T. y HOLUBEC, E.J. (1999): El aprendizaje cooperativo en el aula. Buenos Aires. Paidós. • SLAVIN, R.E. (1999): Aprendizaje cooperativo: teoría, investigación y práctica. Buenos Aires. Aique. • PUJOLÁS, P. (2001): Atención a la diversidad y aprendizaje cooperativo en la educación obligatoria. Archidona (Málaga). Aljibe.
© Copyright 2024