Arquidiócesis de Santo Domingo Arquidiócesis de Santiago Diócesis de Barahona Diócesis de Baní Diócesis de Puerto Plata Diócesis de San Pedro de Macorís Diócesis de San Francisco de Macorís Diócesis de Mao-Monte Cristi Valor del Mes: Caridad Lema del Mes: “Tuve hambre y me diste de comer” (Mt 25,35) Plan de Pastoral Junio 2015 Créditos: Colaboradores: Luis José Camilo, Johnny Guzmán, Juan Tomás Vargas Decamps, Ignacio Miranda Cubilette, José Burgos Cedeño, Emanuel Hernández, Mary Carmen Camacho de Vargas, Sonia Molina de Simó, Raquel Moratín de Montero, Sagrario Tejeda de Olivier, Willy Cruz, Kelvin Mañán, Tobías González, Alejandro Granados, Mary Jatna Mena de Granados y Franchy Soto, (Comunidad Cuerpo de Cristo), P. Valerio Baines Sanz, OAR, y Pbro. Daniel Lorenzo Vargas Salazar (Santo Domingo). Coordinación: Eugenia López Diagramación y Arte Final: Jesús Pérez Portadas: Werner Olmos Impresión: Editora Amigo del Hogar Manuel María Valencia No. 4 Santo Domingo, D. N. Tel.: 809.548.7594 Para contacto Vicaría de Pastoral, Teléfono 809-682-0815, 809-221-3126, 849-622-1221 ext. 261 y 262 Correo electrónico: [email protected] Plan de Pastoral - Junio 2015 Acción Significativa del Sector: Identificar personas desnutridas, concientizarlos y acompañarlos; Triduo Eucarístico Acción Significativa Familiar: Que cada familia lleve alimentos a la Parroquia el último domingo de junio para compartir con familias más pobres. Índice Primera Parte: Triduo Eucarístico. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 4 Encuentros de Evangelización . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 18 Acción Significativa del Sector . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 25 Segunda Parte: Celebraciones Dominicales, Lecturas de la Palabra de cada día y Meditación diaria del Evangelio. . . . 27 Celebración Corpus Christi. . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . . 33 3 Tuve hambre y me diste de comer Triduo Eucarístico En preparación de la Solemnidad del Cuerpo y Sangre de Cristo 1-3 de Junio del 2015 Eucaristía, sacramento de caridad En este Año 2015 dedicado en nuestro Plan Nacional de Pastoral a promover la solidaridad haciendo nuestras las necesidades de los demás y a valorar la Vida Consagrada en la Iglesia este Triduo Eucarístico lleva como título: “Eucaristía, sacramento de la caridad”. De este modo nos prepararnos espiritualmente al Encuentro Eucarístico Zonal, Arquidiocesano o Diocesano. Es importante que este Triduo sea celebrado en cada Sector además del Centro Parroquial. Para esto, los ministros de la Comunión llevarán al Santísimo Sacramento a cada sector. De esa manera, haremos una vez más visible esta presencia de Cristo en medio de nuestro pueblo a través de la Eucaristía que se convierte en fuente de caridad. Se trata de que hagamos de toda nuestra Parroquia un gran santuario de adoración. En el lugar donde se hará esta Celebración es importante que se decore con belleza y sencillez. Se coloca una mesa con su mantel donde se colocará a Jesús-Eucaristía, adornada con flores y con uno o dos velones.Se coloca el lema del año: “Amor y solidaridad, camino de santidad”. También, el lema del Triduo: “Eucaristía, sacramento de caridad” y el título de cada día del Triduo. Nos inspiramos en la Exhortación Apostólica “Sacramentum Caritatis” de Benedicto XVI para el esquema de cada día del Triduo. Primer día: Eucaristía: pan partido para la vida del mundo 1. Motivación general: Hermanos y hermanas: Hoy iniciamos el Triduo de Preparación de la Solemnidad del Corpus Christi, del Cuerpo y la Sangre de Jesucristo, en la que celebraremos nuestro Encuentro Eucarístico Arquidiocesano o Diocesano o Zonal con el lema: Eucaristía, sacramento de la caridad siguiendo nuestro itinerario de evangelización del Tercer Plan de Pastoral, dedicado a la solidaridad con los más pobres y a la valoración de la vida consagrada en nuestra Iglesia. La palabra caridad significa en el Evangelio el amor incondicional y sin límites que se tiene a los demás. Es amar sin esperar recompensa ni agradecimiento de la persona a quien amamos. Es amar por encima de si me caes bien o mal, si me agradas o no me agradas. Es amar sin límites. Amar así sólo ama Dios, tal como nos lo ha manifestado de manera completa al darnos a su propio Hijo para que tengamos vida y vida abundancia, aunque no lo merecemos ni se lo agradezcamos. Y, precisamente, la 4 Plan de Pastoral - Junio 2015 Eucaristía es el memorial de esa caridad, que es amor hasta el extremo que se sigue haciendo actual a favor nuestro. En esta Adoración Eucarística de hoy contemplamos al Señor en la Eucaristía como pan partido para la vida del mundo. Dejemos que el Señor nos llene de su caridad manifestada hasta el extremo al entregar su vida para darnos su salvación. Pidamos para que cada uno de nosotros y nuestras comunidades nos convirtamos en pan partido para saciar el hambre de Dios y de los bienes materiales de nuestros hermanos necesitados. Pidamos, también, para que todos los consagrados alimentados con la Eucaristía sean ese pan partido que se entrega a los más pobres de nuestro pueblo. Iniciemos nuestra Adoración Eucarística cantando al Señor que llega a nuestra asamblea reunida en su nombre reconociendo su gran caridad hacia nosotros al hacerse pan partido para la vida del mundo. 2.Canto: El Señor está presente en medio de su pueblo, vamos adorarle… u otro conocido. (Si hay exposición de la Eucaristía, el presbítero, el diácono o el ministro trae el Pan Eucarística del Sagrario, acompañado de algunos con velas encendidas que van delante. Si hay Custodia, se coloca sobre el altar y al llegar el ministro le coloca la Hostia. Si sólo hay copón se coloca sobre el altar, que estará adornado con flores y velas. Al llegar el Santísimo todos se ponen de rodillas. Si hay incienso, se hará la incensación. Si no hay exposición de la Eucaristía todos pueden colocarse alrededor del Altar, que representa a Cristo). 3. Oremos: Señor Jesús, te adoramos, te bendecimos y te damos gracias porque has querido quedarte con nosotros en la Eucaristía como pan partido y sangre derramada para que tengamos vida en Ti. En ella Tú sigues regalándote a Ti mismo y revelándonos el amor infinito de tu Padre por nosotros, especialmente por los más pobres. En ella, como Sacramento de Caridad, Tú manifiestas el amor « más grande », que es aquel que impulsa a « dar la vida por los propios amigos » (cf. Jn 15,13). Como a los discípulos de ayer en el sacramento eucarístico Tú nos sigues amando « hasta el extremo », hasta el don de Tu cuerpo y de Tu sangre como comida y bebida y salvación. ¡Qué inmensa ternura y caridad tienes con nosotros! ¡Qué grande es tu Misterio eucarístico, sacramento de tu caridad! Hoy venimos a dejarnos llenarnos de tu caridad para poder amar como Tú a nuestros hermanos, haciendo nuestras las necesidades de los demás como Tú hiciste tuyas las nuestras. Como portador y maestro de la caridad perfecta, guíanos, enséñanos a ser testigos de tu compasión por cada hermano y hermano que se convierta en servicio y compromiso en favor de la justicia, de la igualdad y de la paz. Amén. Canto: Tan cerca de mí. Hay alguien que te ama, Eucaristía, presencia del Señor u otro canto adecuado 4. Disfrutemos en silencio de la presencia del Señor, dejándonos empapar de su caridad hasta el extremo (10 minutos). 5 Tuve hambre y me diste de comer 5. Lectura Bíblica: Juan 6, 48-58 En este momento, los que tengan Biblia pueden leer en silencio el texto. Y, luego, el que quiera lee una frase del Evangelio que le haya impactado más, sin hacer ningún comentario. 6. Oración con la Palabra: Lector 1: Señor Jesús, al decirnos: « El pan que yo daré es mi carne para la vida del mundo » (Jn 6,51), nos das a conocer el verdadero sentido del don de tu propia vida por todos los hombres y mujeres y así nos muestras también la íntima compasión que Tú tienes por cada persona. Lector 2: Muchas veces manifestaste tus profundos sentimientos por toda la gente, de modo especial por los que sufren y los pecadores (cf. Mt 20 ,34; Mc 6,54; Lc 9,41). De ese modo, Tú expresaste la intención salvadora del Padre para todos los hombres y mujeres, a fin de que lleguen a la vida verdadera. Lector 3: En cada celebración eucarística Tú haces presente y actualizas sacramentalmente el don de Tu propia vida que hiciste en la Cruz por nosotros y por el mundo entero. Al mismo tiempo, en la Eucaristía Tú nos haces testigos de la compasión del Padre por cada hermano y hermana. Lector 4: Nace así, en torno a tu Misterio eucarístico, el servicio de la caridad para con el prójimo, que « consiste precisamente en que, en Ti y contigo, amo también a la persona que no me agrada o ni siquiera conozco. Lector 5: Sabemos, Señor, que esta caridad sólo puede llevarse a cabo a partir del encuentro íntimo contigo, que se ha convertido en comunión de voluntad, llegando a implicar el sentimiento. Entonces aprendo a mirar a esta otra persona no ya sólo con mis ojos y sentimientos, sino desde tu mirada. De ese modo, en las personas que encontramos reconocemos a hermanos y hermanas por los que Tú ha dado su vida amándolos «hasta el extremo» (Jn 13,1). Lector 6: Haznos cada vez más conscientes que cuando celebramos tu Eucaristía, tu sacrificio es para todos y que, por eso, en la Eucaristía Tú nos impulsas a todos y a todas a convertirnos en « pan partido » para los demás y, por tanto, a trabajar por un mundo más justo y fraterno. Lector 7: Pensando en la multiplicación de los panes y los peces, hemos de reconocer que Tú nos sigues exhortando hoy como discípulos tuyos a comprometernos en primera persona: « dénles ustedes de comer » (Mt 14,16). En verdad, nuestra vocación consiste en ser, junto contigo, pan partido para la vida del mundo. Y, así, Tú puedas decirnos con gozo: “tuve hambre y me diste de comer” (Mt 25, 35). 7. Silencio: Contemplemos a Cristo presente en la Eucaristía. Mira hacia el Altar donde El está presente y déjate mirar por El. Abre tu mente y tu corazón para que El te regale un corazón semejante al suyo capaz de volverte con El pan partido para la vida del mundo(10 minutos). 8. Canto: Siempre nos ama el Señor… 6 Plan de Pastoral - Junio 2015 9. Presentemos al Señor todo lo que nos impide ser como Jesús pan partido para la vida del mundo. Nos ponemos de rodillas y a cada petición respondemos: “Puríficanos Señor y lléna nuestro corazón de tu caridad” • De nuestro egoísmo • De buscar siempre lo mío sin importarme lo de los demás • De la indiferencia ante las necesidades de los más pobres • De rehuir el compromiso de darme a los demás • De cuidar tanto mi yo, que no soy capaz de servir a los demás. • De mi poca cooperación para que en mi casa y en mi sector avancen y crezcan • Del miedo a entregarme con generosidad • De buscar siempre mi conveniencia aunque perjudique a otros • De esconder mis talentos por miedo y no ponerlos al servicio de todos y de todas. • De vivir una religiosidad sin tener en cuenta el sufrimiento de los demás • De la comodidad y de la haraganería • Del miedo a buscarme problemas por enfrentar situaciones (Se pueden presentar otras situaciones personales y comunitarias de las que necesitamos purificarnos para amar como Jesús) 10. Canto penitencial: Por las veces… Hoy perdóname… 11. En silencio contemplemos al Señor que nos dice: “El pan que yo daré es mi carne, y lo daré para la vida del mundo.” Pidamos al Señor que nos convierta en pan partido para la vida del mundo como lo es El. 12. Oremos para que el Señor nos haga amar como El hasta dar la vida por los demás, especialmente por los más pobres. Hermanos y hermanas: El Catecismo de la Iglesia Católica nos enseña que: “la eucaristía entraña un compromiso en favor de los pobres. Para recibir en la verdad el cuerpo y la sangre de Cristo entregado por nosotros, debemos reconocer a Cristo en los más pobres sus hermanos” (n. 1397). Entonces, si la conformación a Cristo es fruto de la eucaristía, la atención a los más desdichados, a los pobres, a los enfermos, a los que están solos, debería ser uno de los signos más transparentes de su eficacia. Para amar así es necesario estar llenos de este amor de Cristo que nos empuja y nos mueve a amar con El y como El. Este amor del Señor se manifiesta plenamente en la Eucaristía. En este momento dejémonos llenar de ese Amor que nos capacita para amar sin límites y sin esperar recompensa. Les invito a que abran sus brazos y dejen que el Señor penetre sus corazones. No digamos nada, sino dejémonos invadir por su amor. (5 minutos de silencio). Ahora acerquemonos al hermano o la hermana que está a nuestro lado y pongamos nuestras manos en sus hombros y hagamos una oración por él 7 Tuve hambre y me diste de comer o ella pidiéndole al Señor que le dé un corazón como el suyo para así amar como El. 13. Canto sobre el amor de Cristo 14. Silencio: 10 minutos. 15. Oremos por los consagrados y consagradas en este Año de la Vida Consagrada. En este momento damos gracias al Señor por su amor manifestado en la Eucaristía y en la vida y misión de los consagrados y consagradas entre nosotros. Y hacemos algunas peticiones diciendo: “Que sean pan partido para la vida del mundo” • Señor, te pedimos que en la Eucaristía tus consagrados y consagradas se llenen de tu caridad para darla a los demás. • Para que viviendo la comunión fraterna entre ellos y ellas la testimonien haciendo de los pobres sus primeros hermanos y hermanas. • Purifica sus corazones de todo egoísmo y comodidad y enciende en ellos el fuego de tu amor que lleva a dar la vida por los demás. • Señor, te pedimos que hagas germinar y crecer nuevas vocaciones entre nuestros jóvenes al servicio de tu Reino. Se pueden decir otras peticiones. 16. Canto eucarístico. 17. Silencio (10 minutos). 18. Bendición Eucarística. Si hay bendición: Al final de la adoración, el sacerdote o diácono se acerca al altar; hace la genuflexión, se arrodilla y se entona un canto eucarístico o el Tantum ergo. Mientras tanto, arrodillado el ministro, inciensa al Santísimo Sacramento. Luego se pone de pie y dice: Oremos: (Se hace una pausa de silencio; luego prosigue) Señor, que en tu Hijo Jesucristo nos diste el verdadero Pan que descendió del Cielo, fortalécenos con este alimento de vida eterna, para que nunca nos apartemos de ti y podamos resucitar para la gloria en el último día.Por Jesucristo, nuestro Señor. Amén. El sacerdote o diácono recibe el velo humeral, hace genuflexión, toma la custodia y bendice al pueblo con el Santísimo Sacramento. Después de dar la bendición, deja la custodia sobre el altar y, arrodillado, dice las alabanzas: Bendito sea Dios. Bendito sea su santo nombre. Bendito sea Jesucristo, verdadero Dios y verdadero hombre. 8 Plan de Pastoral - Junio 2015 Bendito sea el nombre de Jesús. Bendito sea su sacratísimo Corazón. Bendita sea su preciosísima Sangre. Bendito sea Jesús en el Santísimo Sacramento del altar. Bendito sea el Espíritu Santo Paráclito. Bendita sea la gran Madre de Dios, María Santísima. Bendita sea su santa e inmaculada Concepción. Bendita sea su gloriosa Asunción. Bendito sea el nombre de María, Virgen y Madre. Bendito sea San José, su castísimo esposo. Bendito sea Dios en sus ángeles y en sus santos. (Mientras se reserva el Sacramento en el sagrario, el pueblo puede decir alguna aclamación, o entonar otro cántico de alabanza). Si no hay bendición se termina así: Se acercan todos alrededor del altar. Con nuestras manos unidas levantadas le decimos al Padre: Padre Nuestro. Luego besan el Altar, símbolo de Cristo, sacerdote, víctima y altar. 19. Canto final eucarístico. 20. Aviso: El próximo 4 DE JUNIO celebraremos la Solemnidad de Corpus Christi. Participemos en gran número en esta convocatoria de fe. En la Arquidiócesis de Santo Domingo se realizará en cada Zona Pastoral a las 4pm En la Arquidiócesis de Santiago a las 7am saliendo la procesion de la Catedral y a las 8 am la Eucaristía en el Estadio Cibao. La Zona Pastoral de Moca la celebrará en el Estadio Braganita. La Zona Pastoral de La Sierra la celebrará en cada parroquia. Hora 7am la procesión y a las 8 am la Eucaristía. En la Diócesis de Puerto Plata a las 7am la procesión y a las 8 am la Eucaristía en el Polideportivo y en cada Zona Pastoral. En las otras Diócesis a nivel parroquial y zonal. Segundo día: Eucaristía, comunión con Cristo y con los hermanos, especialmente con los más pobres 1. Motivación general: Hermanos y hermanas: En este segundo día de nuestro Triduo Eucarístico en preparación de la Solemnidad del Corpus Christi, del Cuerpo y la Sangre de Jesucristo, que celebraremos con el lema: Eucaristía, sacramento de caridad nos detendremos a contemplar la Eucaristía como sacramento de la comunión con Cristo y con nuestros hermanos, especialmente, con los más pobres. Pidamos al Espíritu Santo que nos guíe durante esta Adoración para que cada vez que celebramos la Eucaristía crezca nuestra fe en Jesucristo que nos lleva a la caridad, que es amor total a El y a nuestros hermanos más necesitados. Iniciemos nuestra Adoración Eucarística cantando al Señor. 9 Tuve hambre y me diste de comer 2. Canto: Eucaristía, milagro de amor o Este es mi Cuerpo u otro canto eucarístico. (Si hay exposición de la Eucaristía, el presbítero, el diácono o el ministro trae el Sacramento del Sagrario, como se hizo el primer día. Si no hay exposición de la Eucaristía todos pueden colocarse alrededor del Altar, que representa a Cristo). 3. Oremos: Señor Jesús venimos a contemplarte presente en la Eucaristía, sacramento de comunión contigo y con nuestros hermanos, especialmente, con los más necesitados por los que Tú te entregaste. Esta comunión contigo nos capacita para todas nuestras relaciones sociales. Haz que seamos cada vez más conscientes que tu Eucaristía tiene un carácter social; que no podemos tenerte a Ti sólo para mí y que únicamente podemos pertenecerte en unión con todos los que son tuyos o lo serán. Gracias, Señor, porque tu Eucaristía es sacramento de comunión entre hermanos y hermanas que aceptan reconciliarse en Ti, que has hecho de judíos y paganos un pueblo solo, derribando el muro de enemistad que los separaba (cf. Ef 2,14). Haz que contemplándote a Ti nuestro Único Señor, presente en la Eucaristía, vivamos más en comunión con los demás, especialmente con los más pobres. Te lo pedimos a Ti que vives y reinas por los siglos de los siglos. Amén. Canto: Es como el amor tu pan, Te conocimos, Señor al partir el pan u otro canto eucarístico. 4. Lectura Bíblica: 1 Corintios 11, 17-34. En este momento, los que tengan Biblia pueden leer en silencio el texto. Y, luego, el que quiera lee una frase de la Carta que le haya impactado más, sin hacer ningún comentario. 5. Oración con la Palabra: Lector 1: Señor Jesús, tu Eucaristía, el memorial de tu sacrificio, refuerza la comunión entre los hermanos y, de modo particular, apremia a los que están enfrentados para que aceleren su reconciliación abriéndose al diálogo y al compromiso por la justicia. Lector 2: En tu Eucaristía, Señor, no caben las divisiones y mucho menos el desprecio o marginación de los más pobres como hemos escuchado. Tu Eucaristía es para unir y no para separar. Lector 3: Vivir en comunión contigo en la Eucaristía nos lleva a crear un ambiente de paz verdadera basada en la justicia, la reconciliación y el perdón. Lector 4: Conocer esto, Señor, hace nacer la voluntad de transformar también las estructuras injustas de nuestra sociedad para restablecer el respeto de la dignidad del hombre, creado a imagen y semejanza tuya. En tu Eucaristía, en la que manifestaste tu caridad hacia nosotros hasta el extremo, despierta las fuerzas espirituales necesarias para trabajar por la justicia. 10 Plan de Pastoral - Junio 2015 Lector 5: Quien participa en tu Eucaristía ha de comprometerse en construir la paz en nuestro mundo marcado por tantas violencias y guerras, y de modo particular hoy, por el terrorismo, la corrupción económica y la explotación sexual. Danos tu caridad que nos fortalece para que seamos capaces de denunciarlas circunstancias que van contra la dignidad del hombre, por el cual Tú has derramado tu sangre. Lector 6: Señor Jesús, Pan de vida eterna, Tú nos apremia y nos hace estar atentos a las situaciones de pobreza en que se halla todavía gran parte de la humanidad, cuya causa implica a menudo un clara e inquietante responsabilidad por parte de los hombres y mujeres. 6. En silencio, dejemos que esta Palabra del Señor resuene en nuestro interior de modo que provoque en nosotros el compromiso con los más pobres de nuestro pueblo. (10 minutos de silencio). 7. Canto eucarístico: El pan y vino de tu amor 8. Contemplemos a Jesús presente en la Eucaristía y con El miremos la situación de nuestro pueblo y nuestro mundo. Respondemos cantando: Oye Cristo ven y sálvanos. • Ante ciertos procesos de globalización que con frecuencia hacen crecer desmesuradamente en todo el mundo la diferencia entre ricos y pobres. • Ante el derroche de las riquezas de la tierra de unos pocos, provocando desigualdades que claman al cielo (cf. St 5,4). • Ante «las imágenes sobrecogedoras de los grandes campos de prófugos o de refugiados —en muchas partes del mundo— concentrados en precarias condiciones para librarse de una suerte peor, pero necesitados de todo. Estos seres humanos, ¿no son nuestros hermanos y hermanas? ¿Acaso sus hijos no vienen al mundo con las mismas esperanzas legítimas de felicidad que los demás?». • Ante el gasto de incalculables sumas de dinero para comprar armas que con menos de la mitad sería más que suficiente para sacar de manera estable de la indigencia al inmenso ejército de los pobres. • Ante poblaciones enteras que viven bajo el umbral de la pobreza, mucho más a causa de situaciones que dependen de las relaciones internacionales políticas, comerciales y culturales, que a causa de circunstancias incontroladas. • Ante las situaciones indignas del hombre, en las que a causa de la injusticia y la explotación se muere por falta de comida, (El que quiera puede presentar otras peticiones presentando las situaciones de nuestro país y de su sector). 9. En silencio intercedamos ante el Señor para que estas situaciones nos duelan y preocupen y movidos por la caridad que brota de la Eucaristía nos decidamos a trabajar para solucionarlas. (10 minutos de silencio). 11 Tuve hambre y me diste de comer 10. Momento de compromiso con el Señor y con nuestros hermanos: Moderador: El misterio de la Eucaristía nos capacita e impulsa a un trabajo audaz en las estructuras de este mundo para llevarles aquel tipo de relaciones nuevas, que tiene su fuente inagotable en el don de Dios, en su caridad. Por eso, en este momento renovemos nuestro compromiso con el Reino de Dios para trabajar,y se realice la voluntad de Dios que quiere que todos sus hijos e hijas vivan una vida plena en todas sus dimensiones. A cada compromiso respondemos: Nos comprometemos Señor. • Para ser fieles a la oración del Padre Nuestro en la que decimos al Padre «Danos hoy nuestro pan de cada día», nos comprometemos a hacer todo lo posible, en colaboración con las instituciones internacionales, estatales o privadas, para que cese o al menos disminuya en el mundo el escándalo del hambre y de la desnutrición que sufren tantos millones de personas. • Los cristianos laicos formados en la Escuela de la Eucaristía nos comprometemos a asumir directamente nuestra propia responsabilidad política y social en nuestro Sector, municipio, provincia y nación. • Nos comprometemos a prepararnos mediante una educación concreta para la caridad y la justicia. • Nos comprometemos a conocer y a promover la doctrina social de la Iglesia y darla a conocer en las diócesis, parroquias, sectores y en las comunidades cristianas. • Nos comprometemos a trabajar en las Juntas de Vecinos para que lleguen a nuestro Sector los beneficios que nos corresponden como ciudadanos dominicanos. • Nos comprometemos a cuidar y proteger el medio ambiente como don de Dios y compromiso nuestro. 11. Silencio de meditación ofreciendo al Señor toda nuestra vida y trabajar para que su Reino sea una realidad entre nosotros de tal modo que todos junto con El tengamos al Padre como nuestro Padre y que el pan se vuelva nuestro cada día. (10 minutos). 12. Canto Eucarístico. 13. Oremos en este Año de la Vida Consagrada por nuestros consagradas para que alimentados por la Eucaristía se compriometan más y más con los más pobres de nuestro pueblo y contribuyan a la superación de todo lo que lo atrasa y dificulta su desarrollo integral. • Para que cada vez más vivan con sencillez y sean cercanos a los más pobres • Para que nunca tenga ansias de poseer bienes sino a ponerlos al servicio de los más pobres • Para que con un corazón puro como el de Jesús estén en comunión con los más pobres y se entreguen a ellos con caridad grande y eficaz (Se presentan otras peticiones y se concluye con esta oración dicha por todos). 12 Plan de Pastoral - Junio 2015 Mira bondadoso, Señor, a estos hijos tuyos y a estas hijas tuyas: firmes en la fe y alegres en la esperanza, sean, por tu gracia, un reflejo de tu luz, instrumentos del Espíritu de paz, prolongación entre los hombres de la presencia de Cristo. El, que vive y reina por los siglos de los siglos. 14. Canto eucarístico. 15. Silencio: 10 minutos. 16. Bendición Eucarística. Si hay bendición se sigue como el primer día. Si no hay bendición se termina así: Se acercan todos alrededor del altar. Con nuestras manos unidas levantadas le decimos al Padre: Padre Nuestro. Luego besan el Altar, símbolo de Cristo, sacerdote, víctima y altar. 17. Canto final eucarístico. 18. Aviso: El próximo 4 DE JUNIO celebraremos la Solemnidad de Corpus Christi. Participemos en gran número en esta convocatoria de fe. En la Arquidiócesis de Santo Domingo se realizará en cada Zona Pastoral a las 4pm En la Arquidiócesis de Santiago a las 7am saliendo la procesion de la Catedral y a las 8 am la Eucaristía en el Estadio Cibao. La Zona Pastoral de Moca la celebrará en el Estadio Braganita. La Zona Pastoral de La Sierra la celebrará en cada parroquia. Hora 7am la procesión y a las 8 am la Eucaristía. En la Diócesis de Puerto Plata a las 7am la procesión y a las 8 am la Eucaristía en el Polideportivo y en cada Zona Pastoral. En las otras Diócesis a nivel parroquial y zonal. Tercer día: Jesucristo, presente en la Eucaristía y en los pobres Adoración y Procesión Eucarística por las calles de nuestro pueblo contemplando a Jesús, presente en la Eucaristía y presente en los pobres. 0. Orientaciones para la Celebración: En este día realizaremos la Adoración Eucarística en el lugar de encuentro de los otros días del Triduo ya sea la Parroquia, Capilla o Casa Misión de cada Sector. Ahí se tendrá el primer momento de oración. Luego, se hará la Procesión Eucarística, llevando al Señor delante con varias velas y flores. Detrás irán los que cantan y todo el pueblo. Se eligen tres casas donde se hará una parada y se tendrá un momento de adoración. Las casas elegidas tendrán preparada al frente de la casa, una mesa con flores y velas donde se colocará la Eucaristía mientras se hace el momento de adoración. Se concluye con el Templo Parroquial. 13 Tuve hambre y me diste de comer Es necesario preparar los cantos eucarísticos para la procesión. Crear un ambiente de oración. Es importante que este acto eucarístico sea de por sí una acción misionera. 1. Motivación general: En este día de nuestro Triduo Eucarístico nuestra mirada se dirige hacia Jesucristo descubriéndolo presente en la Eucaristía y en el rostro de los pobres. Esta Adoración la haremos en diferentes lugares de nuestro Sector llevando en procesión al Señor presente en la Eucaristía, de modo que el Señor llene de su caridad a todos los que viven en ese Sector y así sepamos descubrirlo presente en los que sufren por cualquier necesidad física, corporal, económica, espiritual, sicológica. Con esta presencia del Señor tendremos fuerza para organizarnos como hermanos y hermanas para trabajar juntos para hacer de nuestro vecindario un lugar donde vivamos como hermanos sin sobresaltos ni temores. Iniciemos nuestra Adoración Eucarística cantando al Señor presente en la Eucaristía y presente en los pobres que sale a nuestro encuentro y nos inflama de su caridad que nos hace vivir comunión con El, entre nosotros y especialmente, con los más pobres, haciendo nuestras sus necesidades. 2. Canto: Señor te adoramos…. o El Señor está presente en medio de su pueblo, vamos adorarle… (Si hay exposición de la Eucaristía, el presbítero, el diácono o el ministro trae el Sacramento del Sagrario, lo hace como el primer día. Si no hay exposición de la Eucaristía todos pueden colocarse alrededor del Altar, que representa a Cristo). 3. Oremos: Señor Jesús, te damos gracias porque Tú has querido permanecer presente entre nosotros en en la Eucaristía y en la vida de los más pobres que nosotros. Hoy postrados a tus pies nos presentamos para dejarnos llenar de tu misma caridad que nos lleve a entregarnos como Tú compartiendo nuestras vidas, para que los más pobres de nuestro pueblo te encuentren a Ti en nuestra solidaridad con ellos y experimenten que Tú estás presente en medio de ellos y que eres su fuerza y su esperanza. Amén 4. Canto eucarístico: Quédate junto a nosotros u otro de Emaús. 5. Oración en silencio (10 minutos) 6. Escuchemos la Palabra del Señor: Mateo 25, 31-40 En este momento, los que tengan Biblia pueden leer en silencio el texto. Y, luego, el que quiera lee una frase de la Carta que le haya impactado más, sin hacer ningún comentario. 8. Hagamos oración a partir de esta Palabra. Lector 1: ¡Qué claras son tus palabras, Señor! Tú que estás presente en la Eucaristía, haciendo de la Eucaristía tu sacramento y de los pobres 14 Plan de Pastoral - Junio 2015 también tu sacramento,dándole a tu Eucaristía una dimensión social y a la solidaridad humana una dimensión eucarística” . Lector 2: Así nos enseñas que al acercarnos a la Eucaristía no podemos desentendernos del hermano, y que no podemos rechazar al pobre sin rechazarte a Ti y separarnos de la unidad. Tú nos unes unos a otros en el momento en que nos une a todos a Tí mismo en la fracción del pan. Lector 3: En la Última Cena, en el “lavatorio de los pies”, Tú dejaste muy grabado en los apóstoles el significado de tu vida y lo que exigía de ellos que acababan de participar en tu mesa eucarística. Toda tu vida Jesús, desde el principio hasta el final, fue un lavatorio de pies, es decir, un servir a los hombres por amor. Siempre resuenan con la misma fuerza de ayer estas palabras referidas a Ti: “habiendo amado a los suyos que estaban en el mundo, los amó hasta el extremo”. Lector 4: Llénanos hoy y siempre de tu misma caridad, porque de ella brota la caridad, del ágape, y es la expresión más grande de tu mandamiento nuevo. Así podremos asumir esta frase que nos dejaste: “lo que hagan a uno de estos, mis hermanos, a mi me lo hacen” Lector 5: Así podremos comprender que tu Eucaristía no es sólo un misterio para consagrar, recibir, contemplar y adorar, sino que es, además, un misterio que hay que imitar. Tu pregunta: “¿Comprenden lo que he hecho con ustedes? sigue resonando en nosotros. Y tu mandato es norma de vida para nosotros: “También ustedes deben lavarse los pies unos a otros, porque les he dado ejemplo para que hagan ustedes lo mismo que yo he hecho; ... y dichosos ustedes si lo cumplen” (Jn 13,13-17). 9. Canto eucarístico: Con nosotros está y no lo conocemos. 10. Inicio de la Procesión: Moderador: Hermanos y hermanas: En este momento llevaremos en procesión al Señor presente en la Eucaristía, por todo nuestro Sector como expresión de nuestra fe en El y nos detendremos en algunas casas de personas más pobres que nosotros para adorarlo también presente en su vida y en sus rostros. (Se inicia la procesión: delante la Cruz y velones encendidos. Detrás el Señor, los que cantan y todos los participantes. Se canta hasta la primera parada en la que se detendrá la procesión, se coloca el Santísimo Sacramento sobre el Altar que han preparado y se hace la oración que sigue). 11. Primera Parada: Señor, ayúdanos a descubrirte vivo y presente en la vida de los más pobres. Lectura Bíblica: Mateo 25, 41-46 Oremos con la Palabra: Lector 1: Señor Jesús, Tú quieres que si honramos tu Cuerpo en la Eucaristía no consintamos que esté desnudo el cuerpo del necesitado. Tú no quieres que te honremos aquí con vestidos de seda y fuera te dejemos 15 Tuve hambre y me diste de comer padecer de frío y desnudez en el cuerpo de los pobres. Tú nos adviertes que de nada te sirve que tu mesa esté llena toda de vasos de oro, si Tú te consumes de hambre en el pobre. Lector 2: En el sacramento de tu Eucaristía nos ofreces tu escondida presencia, viva y real; a la vez que has hecho de los pobres también un sacramento, es decir, una imagen sagrada tuya en el mundo, un reflejo que representa y no esconde tu rostro humano y divino. Así lo manifetaste al proclamar que cada hombre doliente, hambriento, enfermo, desafortunado, necesitado de compasión y ayuda eres Tú. Moderador: Hagamos en este momento un éxamen de conciencia y pidamos perdón por las veces que separamos la Eucaristía y nuestra solidaridad con los más pobres (5 minutos). Ahora todos ponemos nuestras manos en el pecho y pedimos perdón por las veces que no le servimos al Señor en nuestros hermanos más pobres. 12. Canto Eucarístico mientras se camina hacia la próxima parada. 13. Segunda Parada: Señor, danos tu caridad para ser buenos samaritanos de nuestros hermanos Lectura Bíblica: Lucas 10, 25-37 14. Oración con la Palabra: Lector 1: Señor Jesús, Tú nos enseñaste que para entrar en contacto contigo es necesario entrar en contacto con las penas y las justas aspiraciones de nuestros hermanos, especialmente los más necesitados, los más oprimidos, los más vulnerables como hizo este buen samaritano que se hizo prójimo de aquel mal herido. Lector 2: Tu eucaristía, Señor, es una comunión que implica la comunión de bienes con los más necesitados. El pan no es sólo para ser comido, sino también para ser compartido. Tú quisiste desde los primeros tiempos de la Iglesia, que el domingo, día en que la comunidad se encuentra para celebrar tu Eucaristía, fuese considerado el día de la caridad. De modo que en este día que nos fueron concedidos innumerables bienes se honre con ayudas a los hermanos más pobres. Lector 3: Haz que nuestra configuración contigo fruto de la eucaristía se manifieste en nuestra atención a los más desdichados, a los pobres, a los enfermos, a los que están solos. 15. Silencio de adoración: 5 minutos. Cada uno y cada una repasa en su corazón sus acciones a favor de los más pobres. Concluimos con peticiones al Señor por nosotros, para que tengamos esa sensibilidad del Buen Samaritano para amar a los más pobres. (Se camina cantando hasta la tercera parada en la que se detendrá la procesión, se coloca el Santísimo Sacramento sobre el Altar y se hace la oración correspondiente). 16 Plan de Pastoral - Junio 2015 16. Tercera Parada: Te presentamos Señor nuestros pobres y necesitados en los que te descubrimos presente a Ti. Lectura bíblica: Santiago 2, 1-12 A partir de esta Palabra escuchada hacemos peticiones al Señor para que nos ayude a distinguirlo a El dando importancia al más pobre. Luego se hace un momento de adoración en silencio (5 minutos). Concluimos así: El ministro levanta la Eucaristía y todos de rodillas adoramos al Señor. (Se camina cantando hasta la Iglesia, Capilla o lugar desde donde se salió. Al llegar se coloca el Santísimo Sacramento sobre el Altar y se sigue así:). 17. Llegada a la Iglesia Todos se arrodillan ante el Señor y lo adoran en silencio. Luego se hace un momento de alabanza y adoración. El que preside pasea al Señor por la Asamblea. 18. Bendición Eucarística. Si hay bendición se sigue como el primer día. Si no hay bendición se termina así: Se acercan todos alrededor del altar. Con nuestras manos unidas levantadas le decimos al Padre: Padre Nuestro. Luego besan el Altar, símbolo de Cristo, sacerdote, víctima y altar. 19. Canto final eucarístico. Aviso: Mañana 4 de Junio celebraremos la Solemnidad de Corpus Christi. Participemos en gran número en esta convocatoria de fe. En la Arquidiócesis de Santo Domingo se realizará en cada Zona Pastoral a las 4pm En la Arquidiócesis de Santiago a las 7am saliendo la procesion de la Catedraly a las 8 am la Eucaristía en el Estadio Cibao. La Zona Pastoral de Moca la celebrará en el Estadio Braganita. La Zona Pastoral de La Sierra la celebrará en cada parroquia. Hora 7am la procesión y a las 8 am la Eucaristía. En la Diócesis de Puerto Plata a las 7am la procesión y a las 8 am la Eucaristía en el Polideportivo y en cada Zona Pastoral. En las otras Diócesis a nivel parroquial y zonal. 17 Tuve hambre y me diste de comer Primer encuentro de Evangelización Semana 7 al 13 Junio La Caridad Cristiana “Amarás a Dios sobre todas las cosas y al prójimo como a ti mismo” (Mt 22, 37-40) 0. Orientaciones para este Encuentro: Como ya es costumbre entre nosotros, se coloca el lema del mes en un lugar visible de todas las personas participantes. Se pueden poner dibujos de corazones o globos con forma de corazón. También se dibuja o se baja de internet, y se imprime, algún dibujo con manos entrelazadas…. Si hay Consagrados o Consagradas en nuestra comunidad o parroquia se les puede invitar al encuentro. 1. Cantos de ambientación que sean sobre el amor y la caridad 2. Oración: Se invoca al Espíritu Santo y se hace la oraciön. 3. Introducción Este mes de Junio es el mes de la Eucaristía y del Corazón de Jesús. En otras palabras es el mes de la caridad que se expresa en nuestro servicio a los más pobres. Con el lema “Tuve hambre y me diste de comer” (Mt 25,35) nos corresponde reflexionar, orar y comprometernos en la virtud de la Caridad. Antes que nada es bueno que aclaremos lo que entendemos por caridad. • ¿Qué quiere decir caridad? • ¿Cuándo y cómo se vive la caridad? Como sabemos sobre la caridad se habla tanto que se dicen demasiadas cosas distintas. La Caridad es un tema muy tratado, y en ocasiones muy mal tratado. Pero también, la caridad es muy bien vivida y muy mal vivida; y decimos mal vivida no porque lleve al odio o desprecio de la otra persona, sino porque como se entiende mal, se vive mal y se considera caridad a lo que no es más que una parte de ella o lo que es una deformación de ella. El diccionario de la Real Academia Española la define así: En la religión cristiana, una de las tres virtudes teologales, que consiste en amar a Dios sobre todas las cosas, y al prójimo como a nosotros mismos. Canto: Caridad y comprensión, o Donde hay caridad y amor… 4. Escuchemos la Palabra: Mateo 22,37-40 o Lucas 10,25-37 Partiendo de la definición dada antes y de estos textos de la Palabra de Dios nos preguntamos: ¿Qué es caridad según estos textos bíblicos? ¿Es lo mismo la caridad cristiana a la caridad humana? ¿En qué se diferencian? Diferencias existentes entre la caridad y la limosna. ¿Conocemos a alguna persona caritativa, que se parezca al Buen Samaritano? ¿Amor y caridad es o pueden ser lo mismo? ¿Qué nos exigen estos textos bíblicos? 18 Plan de Pastoral - Junio 2015 5. Para profundizar en el tema de hoy La caridad es la virtud reina, el mandamiento nuevo que nos dio Cristo, por tanto es la base de toda espiritualidad cristiana. Es el distintivo de los auténticos cristianos. Y no solo no nos vamos a avergonzar, sino que estamos muy orgullosos de tener la caridad como el centro, porque la caridad es positiva, es el amor, la entrega personal. No se trata de algo negativo, de quitarnos lo que nos sobra. La caridad cristiana la podemos hacer coincidir con el amor, más que con la limosna, ya que la limosna sería una parte de la caridad y del amor. Cuando le preguntaron a Jesús: ¿Cuál es el mandamiento más importante de la ley de Dios? Jesús respondió: Amarás al Señor tu Dios con todo tu corazón, con toda tu alma y con toda tu mente. Este es el mayor y primer mandamiento. El segundo es parecido a éste: “Amarás a tu prójimo como a ti mismo”.(Mt. 22, 37-40). Su objetivo es el mismo Dios y su objetivo es la misma persona humana. Y los dos sin restricciones. La caridad y amor cristiano es lo mismo, y así la caridad le da vida a todas las demás virtudes. Por ejemplo: Yo puedo ser amable, sólo con el fin de obtener una recompensa, sin embargo, con la caridad, la amabilidad, se convierte en virtud que se practica desinteresadamente por amor a los demás. Sin la caridad, las demás virtudes están como muertas. Hablamos de caridad y amor como una misma virtud. El amor “no es un sentimiento bonito” o la carga romántica de la vida. El amor es buscar el bien del otro. De esta manera decimos que la caridad cristiana va más lejos que el amor humano, ya que el amor es natural y a ese amor natural, el cristiano le añade lo sobrenatural, lo divino, es decir nos amamos a nosotros y nosotras mismas porque el amor de Dios está en nosotros y nosotras y nos lleva a esparcirlo a compartirlo. Y como el amor de Dios es entrega total, hasta entregarnos a su Hijo, y este Hijo entrega hasta la última gota de su sangre, la caridad, o el amor humano es la entrega total a los demás, sin buscar ninguna recompensa, ni siquiera por conseguir el cielo, sino porque las otras personas son también hijas de Dios y hermanas de Cristo, y por tanto son nuestros hermanos y hermanas. Por ello, la caridad no es dar de lo que nos sobra, sentirnos bien con la limosna que damos, sino tratar a los demás como a nosotros mismos, preocuparnos de los demás como nos preocupamos de nosotros y como queremos que el Estado, las instituciones y las demás personas se preocupen de nosotros mismos. La caridad es un compromiso personal, espiritual, social, comunitario y político. Es decir la caridad abarca a toda la persona y a todas las personas. La caridad cristiana no ama sólo al amigo, al pariente, al vecino, a quien no me molesta; la caridad del cristiano abarca a la persona completa, materia y espíritu, personal y social, individual y familiar, etc., y abarca a todas las personas. La caridad cristiana no ama sólo a la otra persona cuando está necesitada, sino que la ama en todos los momentos de su vida, por ello se preocupa de ella en lo bueno, en lo regular y en lo malo. Y se preocupa del otro o de la otra como persona individual y de su situación social, por eso la 19 Tuve hambre y me diste de comer caridad cristiana ayuda a la persona en concreto y al ambiente que rodea a la persona y trata de cambiar la situación personal y la social. Después, la caridad cristiana tendrá sus preferencias, y serán las mismas de Cristo, es decir lo pobres y necesitados, los enfermos y los solitarios, los despreciados y abandonados de la sociedad. Y los enemigos, porque la caridad, como el amor, se vive en todos los momentos, como decimos, pero sobre todo en los momentos extremos. ¿Qué es, pues, la caridad cristiana? La caridad cristiana es más que el amor humano. El amor humano es natural. La caridad es natural y sobrenatural, parte de lo humano pero pasa al mundo divino. La caridad es poseer en nosotros el amor de Dios. Es amar como Dios ama, con su intensidad y con sus características.Por eso la caridad es un don de Dios que nos permite amar hasta por encima de nuestras posibilidades humanas. Pero es siempre amor práctico, amor llevado a la práctica de cada día. No es amor de sentimiento, de corazón y que se queda allí, sino que lo vivimos en las distintas circunstancias de cada día. Si el amor no es práctico no es caridad. Canto: Amaos (Kairoi): Como el Padre me amó, yo los he amado… 6. Dialogamos sobre el tema de hoy Según el texto bíblico leído y los comentarios, ¿es lo mismo amor y caridad cristiana? Pongamos algún ejemplo en el que confundimos la caridad con la limosna. ¿Qué hemos aprendido en este encuentro? ¿A qué me voy a comprometer después de este encuentro? 7. Oración final Nos colocamos delante de la Imagen del Corazón de Jesús. Lo contemplamos en silencio y le pedimos que nos dé un corazón semejante al suyo para amar como El a los más pobres, Luego, cada uno va pasando frente al cuadro y hace su propia petición. Concluimos haciendo oración con el himno de 1 Corintios 13.(Si lo sabemos lo podemos cantar, el canto se titula Si yo no tengo amor). Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor (2) El amor es comprensivo, el amor es servicial, el amor no tiene envidia, el amor no busca el mal. Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor (2) El amor disculpa todo, el amor es caridad, no se alegra de lo injusto, solo goza en la verdad. Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor (2) El amor soporta todo. El amor todo lo cree. El amor todo lo espera. El amor es siempre fiel. Terminamos con el Padre nuestro y Ave María. Nos damos un abrazo de paz y nos despedimos cariñosamente. Cantos finales: Todos sobre caridad y amor 20 Plan de Pastoral - Junio 2015 Segundo encuentro Semana 14 al 20 junio Caridad y solidaridad “Tuve hambre y me diste de comer” Mt 25,35 0. Orientaciones para este Encuentro: La ambientación puede ser muy similar a la del primer encuentro: globos, corazones, manos entrelazadas, algún consagrado o consagrada. Añadamos lo que la imaginación nos dé a entender para significar la caridad y la solidaridad. No puede faltar algún cuadro, una cruz como señal de entrega total, un cuadro de María, sobre todo si tenemos el de la Visitación… 1. Cantos de ambientación que sean sobre el amor y la caridad 2. Oración: Alguien de la casa donde se realiza el encuentro, o quien lo coordina, hace la oración de inicio invocando el Espíritu Santo. Se puede hacer como oración el cántico: Instrumento de tu paz, (que lo recitamos o lo cantamos si lo sabemos) Quiero ser, oh Señor, instrumento de tu paz. (2) Que donde haya odio, Señor, ponga yo el amor, donde hay ofensa, ponga perdón. Quiero ser, oh Señor, instrumento de tu paz. (2) Que donde hay discordia, Señor, ponga yo la unión, donde hay error, ponga verdad. Quiero ser, oh Señor, instrumento de tu paz. (2) Que donde haya duda, Señor, ponga yo la fe, donde hay angustia, ponga esperanza. Quiero ser, oh Señor, instrumento de tu paz. (2) Que donde hay tinieblas, Señor, ponga yo tu luz, donde hay tristeza, ponga alegría.. 3. Introducción El Plan de Pastoral de la Iglesia Dominicana tiene por lema para este año 2015: AMOR Y SOLIDARIDAD CAMINO DE SANTIDAD. De la Solidaridad hablábamos el mes de marzo, del amor ¿cuándo hablamos? Si partimos de las definiciones de Caridad dadas en el primer Encuentro de este mes de junio, en este mes estamos hablando de Amor porque al decir Caridad cristiana estamos hablando del verdadero amor cristiano. Canto: El amor es nuestro canto; o Con nosotros está…. 21 Tuve hambre y me diste de comer 4. Escuchemos la Palabra: Mateo 25, 31-40. Apliquemos el texto al mundo de hoy y a nosotros mismos: • ¿Vemos a Cristo en los demás, sobre todo en los necesitados? • ¿Cuántos millones de personas mueren al año por hambre en el mundo? • ¿Cuántas personas están desnutridas y sin alimento en República Dominicana? • ¿En esas personas también está Jesús? • ¿El mundo de hoy es solidario? ¿Nosotros y nosotras somos solidarios o solidarias? • ¿Somos caritativos? ¿Amor y Solidaridad es lo mismo? • Pongamos algunos ejemplos de caridad. 5. Para profundizar en el tema de hoy Vivimos en un mundo donde el amor se ha desvirtuado, y pierde su valor en todos los sentidos ya que la sociedad manipula el tema del amor y lo está vaciando de su verdadero contenido. Lo mismo pasa con la caridad, está habiendo una manipulación del lenguaje y de la cultura con relación a la caridad. Y hasta se utiliza para hacer una crítica de la Iglesia y de la fe. En el mes de abril de este año 2015 fallecía un gran pensador Latinoamericano, un pensador muy leído y respetado, también por los creyentes católicos, porque ha hecho pensar y repensar muchas situaciones humanas, políticas, sociales de nuestro continente. Nos referimos a Eduardo Galeano. Este pensador decía una frase muy dura sobre el tema que estamos tratando, sobre la relación entre Caridad y Solidaridad: La caridad es humillante porque se ejerce verticalmente y desde arriba; la solidaridad es horizontal e implica respeto mutuo. Eduardo Galeano, cuando decía eso, lo decía con mucha intención y lo hacía en su línea de pensamiento. Y es muy posible que se apoyase en algunas prácticas de caridad realizadas por creyentes (también por no creyentes), en las cuales se confunde caridad con limosna, y la limosna se entiende como dar lo que nos sobra, dar las migajas; esta limosna se hace para satisfacción del donante, y eso no es caridad, y mucho menos es caridad cristiana. Si la caridad es humillante, no sé qué caridad será, pero seguro que no es caridad cristiana, no es amor cristiano. Un ejemplo, también a finales del mes de abril de este año 2015, hubo un gran terremoto en Nepal, con más de siete mil muertos (a la fecha de hoy aún no se sabe exactamente cuántos han sido). El mundo salió en su ayuda. En nuestro país, una empresa, una gran empresa, envió ayuda, pero lo hizo con los medios de comunicación sacando fotos y pasándolo por las noticias de la televisión… eso es limosna de la mala, eso no es caridad, porque lo hace para quedar bien quien realiza la donación, y para hacer propaganda. No podemos quedarnos con la definición de caridad que nos convenga para defender nuestras ideas; debemos saber y vivir lo que es realmente la caridad cristiana y de cómo la están viviendo miles y millones de creyentes en todo el mundo y lo han vivido a lo largo de los dos mil años de Historia de la Iglesia. 22 Plan de Pastoral - Junio 2015 No se trata de un sentimiento superficial por los males que tienen muchas personas, ni de una simple compasión, puramente exterior. Para todo aquel que aspira a vivir hasta las últimas consecuencias su ser cristiano, la caridad es un proyecto de vida, una virtud que aparece en toda su existencia, será el compromiso cristiano con el hermano y hermana en toda la vida. La solidaridad, por su parte, es una parte de la caridad, es una manera concreta de vivir el amor y la caridad al que apunta la fe. Ser solidarios no es otra cosa que abrirse al hermano, a aquel que tengo a mi lado, pero sobre todo abrirme a él en los momentos de necesidad, y hacer mías sus necesidades, sin esperar nada a cambio, sino por el hecho de que es persona humana, y es hermano o hermana. El (Jesucristo) entregó su vida por nosotros; y en esto hemos conocido el amor; ahora también nosotros debemos dar la vida por los hermanos. (1Juan 3,16). También soy solidario en lo bueno y positivo, pero estoy más cercano o cercana cuando la vida no va bien. (Gál 6, 2).La vivencia de la caridad y la solidaridad no debe convertirse en una exigencia que se realiza en circunstancias extraordinarias. La caridad comienza allí, en la vida diaria, en las acciones ordinarias y comunes de la propia vida; en la casa, el colegio, la universidad, el trabajo, en el campo, en la preocupación por la junta de vecinos o campesina, en fin, estando atentos y atentas con aquellos que me rodean. Ese mandamiento primero que nos ha dejado Cristo está en nosotros por el Espíritu Santo, que ha infundido el amor de Dios en nuestros corazones (Rom 5, 5). Y este Espíritu nos propone, a través de San Pablo, todo un programa para hacer vida la solidaridad en nuestras existencias: viviendo la caridad sin fingimientos, amándonos cordialmente unos a otros, con preocupación y sin desanimarse, con espíritu fervoroso, con la alegría de la esperanza (Rom 12, 9-12); alegrándonos con los alegres, llorando con los que lloran, teniendo un mismo sentir los unos con los otros (Rom 12, 15-16); no teniendo otra deuda que la del mutuo amor (Rom 15, 1-2); acogiéndonos mutuamente en Cristo para la gloria de Dios (Rom 15, 7). Porque nosotros, además de mirar al hermano o hermana como persona, lo vemos como imagen y semejanza de Dios; de allí la necesidad de la caridad cristiana y de la solidaridad con todas las personas, sobre todo con las preferidas de Jesús, las más necesitadas. En este sentido tenemos el ejemplo de la Virgen María, quien teniendo a Dios dentro de sí misma, estando embarazada de Dios, se pone al servicio de quien la necesita, su prima, y aunque vive lejos, muy lejos, allá va rápidamente. Tener a Dios en la vida, en la oración, en el interior, se demuestra con la caridad y el amor. También el ejemplo de caridad y solidaridad lo tenemos en tantos y tantas Consagrados y Consagradas, que de manera callada están dando y dejando su vida en el servicio a las personas más necesitadas de nuestro país. En los lugares más complicados, en los compromisos más urgentes y radicales, en las presencias más cercanas y solucionadoras de las necesidades personales, grupales y sociales, en cualquier necesidad humana encontraremos a algunos y algunas Consagrados y Consagradas, 23 Tuve hambre y me diste de comer la mayoría de las veces sin publicidad, sin hacer ruidos, sin llamar la atención… allí están presentando su caridad, su solidaridad y la solidaridad y caridad cristianas y de la Iglesia. Y es que la Iglesia y los cristianos, siguiendo a Cristo, ponemos a la persona humana por encima de todo, de las leyes, de los estados, de la Iglesia y de la religión. La caridad no solamente no es humillante, sino que la caridad cristiana levanta de la humillación al que la practica y al que la recibe. Canto: Magnificat: Yo canto al Señor porque es grande; o Mi alma glorifica al Señor mi Dios Dialogamos sobre el tema de hoy En este año del amor y la solidaridad, ¿qué diferencia hay entre estas dos virtudes? ¿Qué es más grande el amor o la solidaridad? El texto de la Palabra de Dios que hemos leído ¿nos compromete a algo concreto? ¿A qué? ¿Cómo puedo llevar a la práctica el amor que nos presenta la Palabra y lo que hemos explicado? Canto: Si yo no tengo amor Oración final: Como en el Encuentro Anterior: Hacemos como oración el Himno de 1 Corintios 13.(Si lo sabemos lo podemos cantar, el canto se titula Si yo no tengo amor) Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor (2) El amor es comprensivo, el amor es servicial, el amor no tiene envidia, el amor no busca el mal. Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor (2) El amor disculpa todo, el amor es caridad, no se alegra de lo injusto, solo goza en la verdad. Si yo no tengo amor, yo nada soy, Señor (2) El amor soporta todo. El amor todo lo cree. El amor todo lo espera. El amor es siempre fiel. Terminamos con el Padre nuestro y Ave María. Nos damos un abrazo de paz y nos despedimos cariñosamente. Cantos finales: Todos sobre caridad y amor 24 Plan de Pastoral - Junio 2015 Acción Significativa 22-27 de Junio del 2015 Tuve hambre y me diste de comer (Mt 25,35) El alimento que te sobra lo necesitan otros En este mes de Junio ded¡cado a practicar la caridad dando de comer a quien no tiene alimento, o tiene una nutrición deficiente, se nos propone como acción significativa a ser realizada por cada Sector: 1.Hacer un censo de las personas con mayor necesidad en la alimentación en nuestro Sector. También, se puede aprovechar para anotar a los enfermos más pobres y aquellos que están en necesidad. 2. Hacer una reunión con todo el Sector, su Junta de Vecinos, comunidades cristianas católicas y de otras confesiones para organizar la Campaña de Recogida de Alimentos para los más pobres del Sector. En esa Reunión se puede seguir esta Agenda: 1.Oración 2. Presentación de los presentes indicando a quien representan 3. Lectura de Mateo 25, 31-46 4. Comentario de esta Lectura 5.Presentación de la realidad de la cantidad de alimentos que se desperdician en República Dominicana que podrían recuperarse para apoyar a la nutrición de los más pobres. Moderador: En nuestro país se calcula que un millón seiscientos mil dominicanos y dominicanos sufren hambre, desnutrición o deficiente alimentación. Pero, según el informe “Pérdidas y desperdicios de alimentos en América Latina y el Caribe” de la oficina regional de la Organización de las Naciones Unidas para la Alimentación y la agricultura (FAO) revela que en República Dominicana se pierden 965 millones de calorías con la venta al detalle (es decir, en supermercados, ferias libres, almacenes, colmados y demás puestos de venta de comida) bastarían para satisfacer las necesidades nutricionales de más de 524.000 personas, permitiendo reducir el hambre del 15,6 % al 10,5 %. Si completamos este dato con lo que se desperdicia en las casas llegaríamos a cubrir las necesidades de los que sufren por esta situación. En nuestro Sector hay personas que están en esa situación de baja alimentación. O si no hay en nuestro Sector en los otros sectores necesitan nuestro apoyo. Por eso, deseamos hacer una Campaña de Recogida de Alimentos para los más pobres. Trabajemos para que el pan sea nuestro y cada día todos los dominicanos y dominicanas puedan comer en una mesa común extendida de un lado al otro del país. 25 Tuve hambre y me diste de comer Para esto proponemos lo siguiente: En el hogar: Dona aquellos alimentos que no vayas a consumir. - Guarda los restos de alimentos del día anterior y busca maneras creativas de cocinarlos al día siguiente. - Sírvete menos comida al principio, es mejor añadir que desperdiciar. No te sirvas más de lo que puedas servir. - Organiza tus comidas semanales y evitarás muchos desperdicios. - No hagas diferentes comidas según los gustos de cada uno de los que viven en tu casa. - Haz una sola comida igual para todos y todas. - Organiza una cena de vegetales un día a la semana. - Cultiva hortalizas en tu propio patio si lo tienes. - Cada familia puede ayudar a otra familia más pobre enviándole un plato de comida. En el supermercado, o en el colmado donde compres: lleva una funda de tela, así reduces el impacto ambiental de las bolsas plásticas. Elige productos naturales y locales. No deseches las frutas por su apariencia. En restaurantes o lugares de comida: No pidas más de lo que puedes consumir. Pide los restos de tu comida para llevar. Si eres dueño de un colmado o de un lugar donde se venden alimentos: dona lo que te sobra a la hora de detallar. No lo botes. Si los productos tienen una fecha de vencimiento ya cercano, véndelos más baratos o dónalos a personas necesitados. Puedes entregarlo a la Parroquia para que Pastoral Social lo distribuya. En la escuela y en el hogar: crear conciencia sobre la necesidad de no desperdiciar en los recreos y meriendas, la comida que otros necesitan. Recoger alimentos con los alumnos para formar un Banco de Alimentos. Si alguno quiere aportar otras ideas puede hacerlo ahora para recoger alimentos en el Sector para los más pobres. 6. Organicémonos para la recolección de alimentos en nuestro Sector Se puede formar una Comisión de Recolección que concientiza y compromete a los dueños de colmados, lugares de venta de comidas con una cuota semanal o mensual. Recoger los alimentos, organizarlos y entregarlos a la Parroquia para hacer fundas más completas. Entregarlos a los más pobres del Sector. 7. Oremos por el éxito de esta iniciativa. Se tiene una oración espontánea y se culmina con el Padre Nuestro y Avemaría. Se dan la Paz del Señor. 8. Elegir 2 delegados para la Comisión Parroquial de Recolección y Distribución de Alimentos. 26 Plan de Pastoral - Junio 2015 Lecturas Dominicales y Diarias Junio 2015 Las lecturas están tomadas del Calendario Litúrgico de la Conferencia del Episcopado Dominicano 2015. 1 Lunes Memoria Obligatoria San Justino, Mártir Rojo Lectura del Libro de Tobías 1,3;2,1b-8 Yo, Tobías, procedí toda mi vida con sinceridad y honradez, e hice muchas limosnas a mis parientes y compatriotas deportados conmigo a Nínive de Asiria. En nuestra fiesta de Pentecostés, la fiesta de las Semanas, me prepararon una buena comida. Cuando me puse a la mesa, llena de platos variados, dije a mi hijo Tobías: «Hijo, anda a ver si encuentras a algún pobre de nuestros compatriotas deportados a Nínive, uno que se acuerde de Dios con toda el alma, y tráelo para que coma con nosotros. Te espero, hijo, hasta que vuelvas.» Tobías marchó a buscar a algún israelita pobre y, cuando volvió, me dijo: «Padre.» Respondí: «¿Qué hay, hijo?» Repuso: «Padre, han asesinado a un israelita. Lo han estrangulado hace un momento, y lo han dejado tirado ahí, en la plaza.» Yo pegué un salto, dejé la comida sin haberla probado, recogí el cadáver de la plaza y lo metí en una habitación para enterrarlo cuando se pusiera el sol. Cuando volví, me lavé y comí entristecido, recordando la frase del profeta Amós contra Betel: «Se cambiarán sus fiestas en luto, sus cantos en elegías.» Y lloré. Cuando se puso el sol, fui a cavar una fosa y lo enterré. Los vecinos se me reían: «¡Ya no tiene miedo! Lo anduvieron buscando para matarlo por eso mismo, y entonces se escapó; pero ahora ahí lo tienen, enterrando muertos.»Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 111 R/ “Dichoso quien teme al Señor” Dichoso quien teme al Señor y ama de corazón sus mandatos. Su linaje será poderoso en la tierra, la descendencia del justo será bendita. R/. En su casa habrá riquezas y abundancia, su caridad es constante, sin falta. En las tinieblas brilla como una luz el que es justo, clemente y compasivo. R/. Dichoso el que se apiada y presta, y administra rectamente sus asuntos. El justo jamás vacilará, su recuerdo será perpetuo. R/. Lectura del Santo Evanagelio según San Marcos 12,1-12: En aquel tiempo, Jesús se puso a hablar en parábolas a los sumos sacerdotes, a los escribas y a los ancianos: «Un hombre plantó una viña, la rodeó con una cerca, cavó un lagar, construyó la casa del guarda, la arrendó a unos labradores y se marchó de viaje. A su tiempo, envió un criado a los labradores, para percibir su tanto del fruto de la viña. Ellos lo agarraron, lo apalearon y lo despidieron con las manos vacías. Les envió otro criado; a este lo insultaron y lo descalabraron. Envió a otro y lo mataron; y a otros muchos 27 Tuve hambre y me diste de comer los apalearon o los mataron. Le quedaba uno, su hijo querido. Y lo envió el último, pensando que a su hijo lo respetarían. Pero los labradores se dijeron: “Este es el heredero. Venga, lo matamos, y será nuestra la herencia.” Y, agarrándolo, lo mataron y lo arrojaron fuera de la viña. ¿Qué hará el dueño de la viña? Acabará con los labradores y arrendará la viña a otros. ¿No han leído aquel texto: “La piedra que desecharon los arquitectos es ahora la piedra angular. Es el Señor quien lo ha hecho, ha sido un milagro patente”?» Intentaron echarle mano, porque veían que la parábola iba por ellos; pero temieron a la gente, y, dejándolo allí, se marcharon. Palabra del Señor. Meditación Las lecturas de hoy reflejan actitudes muy distintas. En la primera, encontramos en Tobit (padre de Tobías) al hombre bueno que no solo cumple la ley de Dios, sino que lo hace de corazón y con clara conciencia. Este hombre nos enseña la caridad (daba limosnas, manda a buscar un indigente para compartir un buen banquete), el anteponer a los demás a nuestro propio bienestar (él mismo buscó al muerto antes de comer), la compasión, y el cumplir con el deber (esperar el atardecer, cavar la fosa, enterrar al muerto y entristecerse). Una cosa que llama poderosamente la atención: Tobit involucra a su hijo en sus obras de caridad. Él mandó a Tobías a buscar la persona para compartir la mesa. Así, enseñaba a su hijo, no solo la teoría, sino la práctica de la caridad.Recordemos que la caridad es la virtud de este mes de junio. Ahora cabe preguntarme: ¿soy como Tobit? Estoy cerca de Dios? ¿Persevero en la fé y en la bondad a pesar de las pruebas de la vida? ¿Pongo el bienestar a los demás primero que el mío propio? ¿Involucro a mi familia en la vida de fé y en la práctica de la caridad? ¡Mientras más me acerco al corazón de Dios, más fácilmente podré ser como Tobit! Ciertamente toda la ley y los profetas se resume en amar al Señor con todo nuestro ser y al prójimo como a nosotros mismos. En la segunda lectura encontramos una actitud muy distinta en los líderes religiosos del pueblo de Israel. Jesús está viviendo su última semana en esta tierra. Todo lo que hace y dice es muy importante. Estos líderes (sumos sacerdotes, escribas y ancianos) han cuestionado la autoridad de Jesús. Lo han rechazado e intentan descalificarlo. Luego de Jesús dejarles sin respuesta les habló en parábolas. En esta, el dueño de la viña es Dios, la viña es el pueblo de Israel, los viñadores malvados son las autoridades judías y la parte el pueblo que se ha dejado seducir por ellos, los siervos enviados (mensajeros) a buscar los frutos, son los profetas. El hijo del dueño es Jesús. El castigo que se anuncia es terrible: ya Israel no será el pueblo de Dios, sino que este privilegio le será pasado al nuevo “Israel de Dios” que somos nosotros, la iglesia universal. A pesar del mensaje, los sacerdotes y ancianos, lejos de arrepentirse de su conducta, continuaron con su intención de “sacar a Jesús del medio”. Siguieron “desechando la piedra angular”. 28 Plan de Pastoral - Junio 2015 Para Jesús debió ser muy triste ver como esta gente le despreciaba. El venía a traer salvación y vida abundante y ellos le rechazaban. Hoy, Jesús, la piedra angular, se ofrece para traerte vida y bendición. ¿Qué harás? ¿Rechazarás al Señor o aceptarás su invitación con todas sus consecuencias? La piedra angular es una piedra que afecta toda la construcción (toda nuestra vida): nuestros planes, proyectos, amores, posesiones...todo! Con cada acción que hacemos dejamos ver si realmente Él es el rey de nuestra vida. ¿Es Jesús tu rey? 2 Martes Feria o Memoria Libre: Santos Pedro y Marcelino, Mártires Verde o Rojo Lectura del libro de Tobías 2,9-14 Yo, Tobías, la noche de Pentecostés, cuando hube enterrado el cadáver, después del baño fui al patio y me tumbé junto a la tapia, con la cara destapada porque hacía calor; yo no sabía que en la tapia, encima de mí, había un nido de gorriones; su excremento caliente me cayó en los ojos, y se me formaron nubes. Fui a los médicos a que me curaran; pero cuanto más ungüentos me daban, más vista perdía, hasta que me quedé completamente ciego. Estuve sin vista cuatro años. Todos mis parientes se apenaron por mi desgracia, y Ajicar me cuidó dos años, hasta que marchó a Elimaida. En aquella situación, mi mujer Ana se puso hacer labores para ganar dinero. Los clientes le daban el importe cuando les llevaba la labor terminada. El siete de marzo, al acabar una pieza y mandársela a los clientes, éstos le dieron el importe íntegro y le regalaron un cabrito para que lo trajese a casa. Cuando llegó, el cabrito empezó a balar. Yo llamé a mi mujer y le dije: «¿De dónde viene ese cabrito? ¿No será robado? Devuélveselo al dueño, que no podemos comer nada robado.» Ana me respondió: «Me lo han dado de propina, además de la paga.» Pero yo no la creía y, abochornado por su acción, insistí en que se lo devolviera al dueño. Entonces me replicó: «¿Y dónde están tus limosnas? ¿Dónde están tus obras de caridad? ¡Ya ves lo que te pasa!» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 111 R/. “El corazón del justo está firme en el Señor“ Dichoso el que teme al Señor y ama de corazón sus mandatos. Su linaje será poderoso en la tierra, la descendencia del justo será bendita. R/. No temerá la malas noticias, su corazón está firme en el Señor. Su corazón está seguro, sin temor, hasta que vea derrotados a sus enemigos. R/. Lectura del santo evangelio según san Marcos 12,13-17 En aquel tiempo, enviaron a Jesús unos fariseos y partidarios de Herodes, para cazarlo con una pregunta. Se acercaron y le dijeron: «Maestro, sabemos que eres sincero y que no te importa de nadie; porque no te fijas en lo que la gente sea, sino que 29 Tuve hambre y me diste de comer enseñas el camino de Dios sinceramente. ¿Es lícito pagar impuesto al César o no? ¿Pagamos o no pagamos?» Jesús, viendo su hipocresía, les replicó: «¿Por qué intentan cogerme? Tráinganme un denario, que lo vea.» Se lo trajeron. Y él les preguntó: «¿De quién es esta cara y esta inscripción?» Le contestaron: «Del César.» Les replicó: «Lo que es del César páguenselo al César, y lo que es de Dios a Dios.» Se quedaron admirados.Palabra del Señor. Meditación Leyendo la continuación de Tobías nos damos cuenta que tenía mucha caridad con los de fuera, y menos con los de casa, ya que duda repetidamente de las palabras de su esposa. La caridad comienza por los de más cerca, aunque no se puede quedar allí, sino que debe llegar a todos y todas. En el Evangelio de hoy leemos que los fariseos no tuvieron el valor de volverlo a enfrentar, por eso “envían hacia él algunos fariseos y herodianos”. Son hipócritas y cobardes. Estos últimos, alaban maliciosamente a Jesús, diciéndole la verdad pero con el plan de atraparlo. Ellos reconocen que Jesús es un Maestro veraz y que enseña con franqueza (sin importar si eres rico o pobre, pecador o santo, de un partido político o de otro). Después de “ensalzarlo”, le hacen la pregunta-trampa. Si Jesús contesta que se debe pagar el impuesto se echará en contra las masas del pueblo (además de reconocer la autoridad del imperio romano sobre la autoridad de Dios). Por otro lado, si contesta que no se debe pagar, entonces los romanos lo acusaran de sedicioso y de incentivar a no cumplir la ley. Jesús está por encima de esto. Contesta con una pregunta que denuncia la hipocresía y la tentación, y luego, remata con una sentencia que deja maravillados hasta a los que le tendieron la trampa. Cuando leo estos pasajes siempre me pregunto: ¿cómo aplica esto a mi vida? Primero, diciendo siempre la verdad (como Jesús) sin importar ir contra-corriente. Segundo, evitando ser hipócrita, ya que obviamente esto molesta a Dios. Tercero, dando al César lo que le pertenece: siendo un buen modelo de cristiano en mi trabajo, universidad y como ciudadano de este país. Pero, lo más importante, dando a Dios lo que es de Dios. El Señor me ha dado todo lo que tengo, entonces le devolveré un poco de lo mucho que he recibido. Le daré el trono de mi corazón y de mis planes. Le permitiré gobernar mi vida siendo un discípulo obediente. Si por esto me llaman “radical” y piensan que me ofenden, en realidad me halagan.Significa que estoy rompiendo con el mundo para acercarme más a Dios. El mundo trata de que caigamos en su trampa. Con tanto amor al dinero trata de que cada vez le demos más al César lo que es de Dios. Con todos los lujos y las comodidades del dinero nos vemos tentados a trabajar más, a producir dinero extra sin importar si es limpio. Pasamos nuestras vidas completas detrás de unas monedas y de lo que estas pueden comprar. ¿Y dónde ha quedado Dios? ¿Dónde está el tiempo para él? ¿Dónde quedó el 30 Plan de Pastoral - Junio 2015 momento diario de orar y acercarme a su presencia? ¿Dónde el escuchar su palabra? ¿Dónde el buscar su salvación? El gran problema de hoy es que cada vez más queremos dar al César lo que es de Dios, y le queremos dar a Dios… lo que sobra... 3 Memoria Obligatoria: San Carlos Luanga y Compañeros Mártires Miércoles Rojo Lectura del libro de Tobías 3,1-1a.16-17a En aquellos días, profundamente afligido, sollocé, me eché a llorar y empecé a rezar entre sollozos: «Señor, tú eres justo, todas tus obras son justas; tú actúas con misericordia y lealtad, tú eres el juez del mundo. Tú, Señor, acuérdate de mí y mírame; no me castigues por mis pecados, mis errores y los de mis padres, cometidos en tu presencia, desobedeciendo tus mandatos. Nos has entregado al saqueo, al destierro y a la muerte, nos has hecho refrán, comentario y burla de todas las naciones donde nos has dispersado. Sí, todas tus sentencias son justas cuando me tratas así por mis pecados, porque no hemos cumplido tus mandatos ni hemos procedido lealmente en tu presencia. Haz ahora de mí lo que te guste. Manda que me quiten la vida, y desapareceré de la faz de la tierra y en tierra me convertiré. Porque más vale morir que vivir, después de oír ultrajes que no merezco y verme invadido de tristeza. Manda, Señor, que yo me libre de esta prueba; déjame marchar a la eterna morada y no me apartes tu rostro, Señor, porque más me vale morir que vivir pasando esta prueba y escuchando tales ultrajes.» Aquel mismo día, Sara, la hija de Ragüel, el de Ecbatana de Media, tuvo que soportar también los insultos de una criada de su padre; porque Sara se había casado siete veces, pero el maldito demonio Asmodeo fue matando a todos los maridos, cuando iban a unirse a ella según costumbre. La criada le dijo: «Eres tú la que matas a tus maridos. Te han casado ya con siete, y no llevas el apellido ni siquiera de uno. Porque ellos hayan muerto, ¿a qué nos castigas por su culpa? ¡Vete con ellos! ¡Que no veamos nunca ni un hijo ni una hija tuya!» Entonces Sara, profundamente afligida, se echó a llorar y subió al piso de arriba de la casa, con intención de ahorcarse. Pero lo pensó otra vez, y se dijo: «¡Van a echárselo en cara a mi padre! Le dirán que la única hija que tenía, tan querida, se ahorcó al verse hecha una desgraciada. Y mandaré a la tumba a mi anciano padre, de puro dolor. Será mejor no ahorcarme, sino pedir al Señor la muerte, y así ya no tendré que oír más insultos.» Extendió las manos hacia la ventana y rezó. En el mismo momento, el Dios de la gloria escuchó la oración de los dos, y envió a Rafael para curarlos. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 24 R/. A ti, Señor, levanto mi alma Dios mío, en ti confío, no quede yo defraudado, que no triunfen de mí mis enemigos; pues los que esperan en ti no quedan defraudados,mientras que el fracaso malogra a los traidores. R/. 31 Tuve hambre y me diste de comer Señor, enséñame tus caminos, instrúyeme en tus sendas: haz que camine con lealtad; enséñame, porque tú eres mi Dios y Salvador. R/. Recuerda, Señor, que tu ternura y tu misericordia son eternas; acuérdate de mí con misericordia, por tu bondad, Señor. R/. El Señor es bueno y es recto, y enseña el camino a los pecadores; hace caminar a los humildes con rectitud, enseña su camino a los humildes. R/. Lectura del santo evangelio según san Marcos 12,18-27 En aquel tiempo, se acercaron a Jesús unos saduceos, de los que dicen que no hay resurrección, y le preguntaron: «Maestro, Moisés nos dejó escrito: “Si a uno se le muere su hermano, dejando mujer, pero no hijos, cásese con la viuda y dé descendencia a su hermano.” Pues bien, había siete hermanos: el primero se casó y murió sin hijos; el segundo se casó con la viuda y murió también sin hijos; lo mismo el tercero; y ninguno de los siete dejó hijos. Por último murió la mujer. Cuando llegue la resurrección y vuelvan a la vida, ¿de cuál de ellos será mujer? Porque los siete han estado casados con ella.» Jesús les respondió: «Están equivocados, porque no entienden la Escritura ni el poder de Dios. Cuando resuciten, ni los hombres ni las mujeres se casarán; serán como ángeles del cielo. Y a propósito de que los muertos resucitan, ¿no han leído en el libro de Moisés, en el episodio de la zarza, lo que le dijo Dios: “Yo soy el Dios de Abrahán, el Dios de Isaac, el Dios de Jacob”? No es Dios de muertos, sino de vivos. Están muy equivocados.»Palabra del Señor. Meditación Continuamos leyendo el libro de Tobías. Hoy nos presenta dos oraciones. Y las dos son muy parecidas, son oraciones en momentos de desesperación, en situaciones muy negativas. Los dos personas que oran al Señor son muy creyentes, se encuentran muy lejos la una de la otra, pero coinciden en acudir a Dios en esos momentos tan negativos. Esta situación puede ser la de muchos de nosotros y nosotras. En nuestras vidas hay situaciones dramáticas, de dolor físico, moral, espiritual, personal y familiar, también dolor por el pueblo, por el país, como es el dolor del anciano Tobí o Tobías. ¿Qué hacer en esa situación? ¿Desesperarnos, gritar y protestar, desear la muerte….? ¿Por qué no nos ponemos a orar? Y en esta situación no va a ser una oración suave, de alabanza, de acción de gracias, de adoración… es más fácil que nos salga una oración de protesta, de queja, de no entender los designios de Dios. Y esto no es malo, cuando lo hacemos así, estamos imitando a Cristo en Getsemaní, con una oración desgarrada, con muchas lágrimas. Creemos que lo que nos sucede a nosotros, a la familia, comunidad o el país es dramático y no tiene solución. Pero Dios saca bien del mal. El relato de Tobías y Sara nos asegura que Dios escucha, está cerca, no se olvida ni aleja de nuestra historia. Necesitamos orar y ponernos en manos de Dios, dejarle actuar y poner cuanto esté de nuestra parte. Dejemos a 32 Plan de Pastoral - Junio 2015 Dios lo que le toca, mientras realizamos cuanto nos corresponde hacer a nosotros y nosotras. El evangelio de hoy es una trampa que le ponen a Jesús; es un caso de la ley del Deuteronomio. Jesús ve la trampa y aprovecha para darnos una serie de enseñanzas que nos van a servir para siempre. La primera y fundamental enseñanza es que nuestro Dios es un “Dios de vivos, no de muertos”. Dios nos tiene destinados a la vida. Esto lo entendemos de dos maneras, primero se trata de un Dios que quiere una vida digna para todos nosotros y nosotras, una vida digna aquí en la tierra. Vida, y vida digna para todos y todas, nos viene muy bien la reflexión en este mes en que el valor es la Caridad, para que nos preocupemos no sólo por la dignidad de nuestra vida, sino por la de todas las personas de la República Dominicana y del mundo. Segundo: también quiere una vida eterna, una vida que no se termina. Es una vida distinta a la de aquí, lo dice claro hoy Jesús, no será necesario casarse ni tener hijos. No quiere decir que no reconoceremos a la familia, sino que es un estado distinto de vida, una vida que no tiene fin y será la vida definitiva. A esta vida eterna, definitiva vamos porque Cristo nos la ha ganado, y vamos con nuestra vivencia del amor fraterno, de la caridad. 4 Solemnidad: Santísimo Cuerpo y Sangre de Cristo Jueves Blanco Eucaristía, sacramento de la caridad Orientaciones para la Celebración Es la primera fiesta de este mes, por tanto debemos poner el lema del mes, La Caridad, en lugar visible para todos los participantes. En la procesión de entrada van los Ministros Extraordinarios de la Comunión llevando, de forma visible, el portaviático. En la procesión de entrada se puede llevar la custodia, pero se lleva vacía. Este día debe consagrase la forma grande que después se pone en la Custodia. Sería conveniente que la celebración se haga con una hostia muy grande y se tenga la comunión bajo las dos especies. El lugar de la celebración debe estar muy adornado, con muchas flores y luces, y los alimentos de la comunión: pan y vino, o también un racimo de uvas Monición ambiental Hermanas y hermanos: Hoy el Señor nos ha reunido para celebrar esta fiesta del Cuerpo y la Sangre de Cristo, es decir, de la Eucaristía, sacramento de la Caridad. Cada Jueves Santo celebramos la institución de la Eucaristía y hoy en esta Solemnidad destacamos y celebramos la presencia real de Jesús en la Eucaristía, y su presencia sacramental en el Sagrario, a su estar con nosotros también fuera de la Celebración de la Misa que nos permite llevarlo a los enfermos de la comunidad. 33 Tuve hambre y me diste de comer Experimentemos hoy de manera especial esa presencia de Cristo que se prolonga en nuestras vidas y en las vidas de los demás. Llenos de su caridad, de su amor incondicional y sin límites, podemos vivir la caridad con los demás, especialmente con los más necesitados. Por eso, repitamos el lema de este día: Eucaristía, sacramento de la caridad. Nos ponemos de pie para iniciar esta celebración de fe y alegría en la que Cristo se hace presente y nos compromete a lavar los pies a los más pobres en servicio llenos de caridad. Primera lectura: Éxodo 24,3-8 La primera alianza de Dios con su pueblo y del pueblo con su Dios es una expresión de la caridad de Dios hacia su pueblo y del pueblo hacia su Dios y entre ellos como pueblo. Este compromiso de amor es sellado con la sangre de los animales sacrificados indicando que implicaba un compromiso hasta dar la sangre si fuese necesario. Es anuncio de la nueva y definitiva Alianza sellada con la sangre del Crucificado que nos lleva a vivir en esta comunión, fruto de la caridad. Escuchemos. Lectura del libro del Éxodo En aquellos días, Moisés bajó y contó al pueblo todo lo que había dicho el Señor y todos sus mandatos; y el pueblo contestó a una: “Haremos todo lo que dice el Señor.” Moisés puso por escrito todas las palabras del Señor. Se levantó temprano y edificó un altar en la falda del monte, y doce estelas, por las doce tribus de Israel. Y mandó a algunos jóvenes israelitas ofrecer al Señor holocaustos, y vacas como sacrificio de comunión. Tomó la mitad de la sangre, y la puso en vasijas, y la otra mitad la derramó sobre el altar. Después, tomó el documento de la alianza y se lo leyó en alta voz al pueblo, el cual respondió: “Haremos todo lo que manda el Señor y lo obedeceremos.” Tomó Moisés la sangre y roció al pueblo, diciendo: “Esta es la sangre de la alianza que hace el Señor con ustedes, sobre todos estos mandatos”.Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 115. R/ “Alzaré la copa de la salvación, invocando el nombre del Señor.” ¿Cómo pagaré al Señor todo el bien que me ha hecho? Alzaré la copa de la salvación, invocando su nombre. R. Mucho le cuesta al Señor / la muerte de sus fieles. Señor, yo soy tu siervo, hijo de tu esclava; rompiste mis cadenas. R. Te ofreceré un sacrificio de alabanza, invocando tu nombre, Señor. Cumpliré al Señor mis votos en presencia de todo el pueblo. R. Segunda lectura, Hebreos 9,11-15 La carta a los Hebreos nos recuerda que la Sangre de Cristo es perdón y salvación para toda la tierra. Cristo se ofreció de una vez por todas, es su sangre la que salva y en la que se realizó la nueva y definitiva Alianza de Caridad, que nos lleva a seguir su ejemplo de entrega generosa hasta dar 34 Plan de Pastoral - Junio 2015 la propia sangre por los demás, especialmente, por los más necesitados. Escuchemos. Lectura de la carta a los Hebreos Hermanos: Cristo ha venido como sumo sacerdote de los bienes definitivos. Su tabernáculo es más grande y más perfecto: no hecho por manos de hombre, es decir, no de este mundo creado. No usa sangre de machos cabríos ni de becerros, sino la suya propia; y así ha entrado en el santuario una vez para siempre, consiguiendo la liberación eterna. Si la sangre de machos cabríos y de toros y el rociar con las cenizas de una becerra tienen poder de consagrar a los profanos, devolviéndoles la pureza externa, cuánto más la sangre de Cristo, que, en virtud del Espíritu eterno, se ha ofrecido a Dios como sacrificio sin mancha, podrá purificar nuestra conciencia de las obras muertas, llevándonos al culto del Dios vivo. Por esa razón, es mediador de una alianza nueva: en ella ha habido una muerte que ha redimido de los pecados cometidos durante la primera alianza; y así los llamados pueden recibir la promesa de la herencia eterna. Palabra de Dios Aleluya Jn. 6,51-52 Yo soy el pan vivo bajado del cielo, Dice el Señor, quien coma de este pan vivirà para siempre Evangelio, Marcos 14,12-16.22-26 Al instituir la Eucaristía, Jesucristo, iniciador de la Nueva Alianza, manifiesta su caridad hasta el extremo. De ahí que participar de la Eucaristía nos mueve a vivir esa misma caridad con todos y todas, especialmente con los más necesitados. Escuchémoslo. Lectura del Santo Evangelio según san Marcos El primer día de los Ázimos, cuando se sacrificaba el cordero pascual, le dijeron a Jesús sus discípulos: “¿Dónde quieres que vayamos a prepararte la cena de Pascua?” Él envió a dos discípulos, diciéndoles: “Vayan a la ciudad, encontrarán un hombre que lleva un cántaro de agua; síganlo y, en la casa en que entre, díganle al dueño: “El Maestro pregunta: ¿Dónde está la habitación en que voy a comer la Pascua con mis discípulos?” Les enseñará una sala grande en el piso de arriba, arreglada con divanes. Prepárennos allí la cena.” Los discípulos se marcharon, llegaron a la ciudad, encontraron lo que les había dicho y prepararon la cena de Pascua. Mientras comían. Jesús tomó un pan, pronunció la bendición, lo partió y se lo dio, diciendo: “Tomen, esto es mi cuerpo.” Cogiendo una copa, pronunció la acción de gracias, se la dio, y todos bebieron. Y les dijo: “Esta es mi sangre, sangre de la alianza, derramada por todos. Les aseguro que no volveré a beber del fruto de la vid hasta el día que beba el vino nuevo en el reino de Dios.” Después de cantar el salmo, salieron para el monte de los Olivos.Palabra del Señor. 35 Tuve hambre y me diste de comer Meditación La fiesta del Cuerpo y Sangre de Cristo es muy importante en el pueblo católico, también en República Dominicana. Hoy no nos fijamos tanto en la celebración de la Eucaristía, sino en su prolongación, la presencia real de Cristo en medio de nosotros, como alimento para los enfermos y como adoración y veneración. La Palabra se centra hoy en el tema de los sacrificios que se realizan para conmemorar la Alianza de Dios con el pueblo. La nueva y definitiva Alianza se realiza, de una ver por todas, con la Sangre de Cristo, porque Él no ofreció sangre de animales, sino la suya propia. No nos salvamos a nosotros mismos, por hacer muchos “sacrificios de animales”. Cristo Jesús nos ha salvado; Él es el verdadero Sacerdote que toma nuestra debilidad y nos reconcilia con su Padre. El sacrificio de Jesús no se repite. Cada vez que celebramos este sacramento, se actualiza el acontecimiento salvador de su muerte y resurrección. El pan de la Eucaristía, es su Cuerpo entregado por nosotros. El vino de la Eucaristía,es la Sangre salvadora con la que selló la Nueva Alianza. Es el alimento que nos da fuerzas y nos transmite vida. La Eucaristía tiene dos dimensiones: Primera: su celebración, la Misa,alrededor del altar; segunda: su prolongación, cuando guardamos el Pan eucarístico en el sagrario para la veneración y para los enfermos. Lo central es su celebración y que comulguemos con el Cuerpo y Sangre de Cristo. Pero desde que, la comunidad cristiana empezó a guardar el Pan eucarístico para los enfermos, para los cristianos presos y para los moribundos, se comenzó a adornar el lugar y se inició la adoración al Señor. La fiesta de hoy nos invita a hacer un esfuerzo por mejorar nuestra Eucaristía en sus dos dimensiones: mejorar la vivencia de la celebración de la Misa, como signo de nuestro amor al sacramento que nos dejó el Señor. Este compromiso de ir mejorando nuestras celebraciones lo debemos recordar a lo largo de todo el año. Debemos mejorar mucho la adoración al Señor en la Eucaristía, en su modo y en el tiempo. ¿Cuánto tiempo dedica nuestra comunidad a la adoración eucarística? Yo, que me digo devoto o devota de la Eucaristía ¿cuánto tiempo y esfuerzo dedico a adorar al Señor que realmente está en el sagrario o en la custodia? Hoy es un día muy apropiado para llevar de un modo especial la comunión a los enfermos de nuestra comunidad. Y hoy es un día muy apropiado para no faltar a la procesión del Cuerpo y la Sangre de Cristo. Demostremos nuestra devoción y nuestro amor a la Eucaristía con la participación en esa procesión, aunque me cueste, aunque tenga que desplazarme, aunque tenga que “perder” la tarde o la mañana. Llevar a Cristo por nuestras calles nos compromete a ver la realidad que nos rodea y a hacer presente a Cristo en ella con el trabajo por cambiarla, por hacer práctica la caridad cristiana en esa realidad. 36 Plan de Pastoral - Junio 2015 Oración de los fieles Quien preside: Por medio de Cristo, presente en la Eucaristía, ponemos ante el Padre Dios nuestras necesidades y las del mundo que nos rodea. A cada oración respondemos diciendo:Padre, por la Eucaristía reaviva en nosotros la caridad. 1.-Por la Iglesia de la Eucaristía, nuestra Iglesia Católica, para que lleve a todo el mundo la presencia de Cristo con su palabra, con la celebración eucarística y la vivencia de la caridad. Oremos. 2.-Para que nuestras autoridades movidas por la caridad se preocupen de construir un país en paz, en justicia y en respeto a todas las personas. Oremos. 3.- Para que el participar en la Eucaristía y en la adoración crezca en nosotros la caridad con los más pobres, participando en las luchas por las causas justas de todos los hermanos y hermanas. Oremos. 4.-Por todos nosotros y todos los católicos que hoy saldrán a las calles en procesión con Cristo Eucaristía, para que lleven a Cristo en toda su vida, manifestando la caridad con los necesitados. Oremos. 5.-Por los Consagrados y Consagradas, para que en la celebración de la Eucaristía se fortalezca su caridad en los lugares de mayor riesgo y compromiso por la vida digna. Oremos. Quien preside: Padre, fuente de la caridad, reavívala en nosotros, fortalécela y haz que se manifieste en nosotros los que participamos en esta Eucaristía a través de acciones concretas a favor de los más pobres. Por Jesucristo nuestro Señor. 5 Viernes Memoria Obligatoria: San Bonifacio, Obispo y Mártir Rojo Lectura del libro de Tobías 11,5-17 En aquellos días, Ana estaba sentada, oteando el camino por donde tenía que llegar su hijo. Tuvo el presentimiento de que llegaba, y dijo al padre: «Mira, viene tu hijo con su compañero.»Rafael dijo a Tobías, antes de llegar a casa: «Estoy seguro de que tu padre recuperará la vista. Úntale los ojos con la hiel del pez; el remedio hará que las nubes de los ojos se contraigan y se le desprendan. Tu padre recobrará la vista y verá la luz.» Ana fue corriendo a arrojarse al cuello de su hijo, diciéndole: «Te veo, hijo, ya puedo morirme.» Y se echó a llorar. Tobit se puso en pie y, tropezando, salió por la puerta del patio. Tobías fue hacia él con la hiel del pez en la mano; le sopló en los ojos, le agarró la mano y le dijo: «Ánimo, padre.» Le echó el remedio, se lo aplicó y luego con las dos manos le quitó como una piel de los lagrimales. Tobit se le arrojó al cuello, llorando, mientras decía: «Te veo, hijo, luz de mis ojos.» Luego añadió: «Bendito sea Dios, bendito su gran nombre, benditos todos sus santos ángeles. Que su nombre glorioso nos proteja, porque si antes me castigó, ahora veo a mi hijo Tobías.» 37 Tuve hambre y me diste de comer Tobías entró en casa contento y bendiciendo a Dios a voz en cuello. Luego le contó a su padre lo bien que les había salido el viaje: traía el dinero y se había casado con Sara, la hija de Ragüel: «Está ya cerca, a las puertas de Nínive.» Tobit salió al encuentro de su nuera, hacia las puertas de Nínive. Iba contento y bendiciendo a Dios, y los ninivitas, al verlo caminar con paso firme y sin ningún lazarillo, se sorprendían. Tobit les confesaba abiertamente que Dios había tenido misericordia y le había devuelto la vista. Cuando llegó cerca de Sara, mujer de su hijo Tobías, le echó esta bendición: «¡Bien venida, hija! Bendito sea tu Dios, que te ha traído aquí. Bendito sea tu padre, bendito mi hijo Tobías, y bendita tú, hija. ¡Bien venida a esta tu casa! Que goces de alegría y bienestar. Entra, hija.» Todos los judíos de Nínive celebraron aquel día una gran fiesta.Palabra de Dios Salmo Responsorial: 145 R/. “Alaba, alma mía, al Señor“ Alaba, alma mía, al Señor: alabaré al Señor mientras viva, tañeré para mi Dios mientras exista. R/. Que mantiene su fidelidad perpetuamente, que hace justicia a los oprimidos, que da pan a los hambrientos. El Señor liberta a los cautivos. R/. El Señor abre los ojos al ciego, el Señor endereza a los que ya se doblan, el Señor ama a los justos. El Señor guarda a los peregrinos. R/. Sustenta al huérfano y a la viuda y trastorna el camino de los malvados. El Señor reina eternamente, tu Dios, Sión, de edad en edad. R/. Lectura del santo evangelio según san Marcos 12,35-37 En aquel tiempo, mientras enseñaba en el templo, Jesús preguntó: «¿Cómo dicen los escribas que el Mesías es hijo de David? El mismo David, inspirado por el Espíritu Santo, dice: “Dijo el Señor a mi Señor: Siéntate a mi derecha, y haré de tus enemigos estrado de tus pies.” Si el mismo David lo llama Señor, ¿cómo puede ser hijo suyo?» La gente, que era mucha, disfrutaba escuchándolo. Palabra del Señor. Meditación “Haré de tus enemigos estrado de tus pies.” El poder de Dios se muestra en su misericordia y su fidelidad a los suyos, como nos dice el salmo: el Señor liberta a los cautivos, abre los ojos a los ciegos, endereza a los que ya se doblan, ama a los justos, sustenta a los débiles, de edad en edad. Es una clara invitación a cumplir el lema de este mes: la Caridad. La victoria de Cristo sobre todos sus enemigos es también la victoria del cristiano. La teología tradicional enseña que los enemigos del cristiano son: sus deseos y pasiones (la carne), la mentalidad, la cultura de los antivalores anticristianos que gobiernan la sociedad (el mundo) y las realidades espirituales malignas (Satanás). Tobit fue fiel al Señor. El Señor fue fiel con él y lo recompensó haciendo de sus enemigos estrado de sus pies. Tobit pudo vencer la invitación 38 Plan de Pastoral - Junio 2015 constante que el ambiente pagano le hacía de abandonar la fe en el Señor Yahvé, y la miseria, y la burla de los habitantes de la ciudad a la ceguera, porque en la prosperidad, agradeció a Dios y fue solidario con el prójimo y porque en la prueba acudió a Dios y confió en su auxilio. La escena que nos narra hoy el libro de Tobías nos muestra también el amor que se tienen los miembros de la familia: la madre presiente la llegada del hijo y sale corriendo a su encuentro; el hijo trata con cariño al padre, después de haber hecho un viaje por tierras desconocidas para cumplir la encomienda del padre, y hace todo lo que está a su alcance por procurar la salud de su padre; el padre, a pesar de sus limitaciones, hace su esfuerzo por salir al encuentro del hijo. Cuando el padre recobra la visión da gracias a Dios, sale al encuentro de su nuera y celebra, junto con la comunidad, la bondad de Dios. Este encuentro de Tobías con sus padres es una invitación a vivir el ideal de familia cristiana retratado por san Pablo en Colosenses 3,18-21: “Mujeres, sean dóciles a su marido, como corresponde a los discípulos del Señor. Maridos, amen a su mujer, y no le amarguen la vida. Hijos, obedezcan siempre a sus padres, porque esto es agradable al Señor. Padres, no exasperen a sus hijos, para que ellos no se desanimen.” Vivir el ideal de familia cristiana que nos enseña la Escritura es señal de permanecer firmes en la fe, que es lo que nos permite vencer a los enemigos de la vida cristiana. Si creemos en la palabra de Dios y permanecemos firmes en la fe y el amor a Dios, a nuestros familiares, a los hermanos en la fe y a los que más necesitan de nosotros, y así esperamos que se cumpla en nosotros lo que Dios ha anunciado, hoy también el Señor nos promete a nosotros: “haré de tus enemigos estrado de tus pies.” 6 Sábado Feria o Memoria Libre: San Norberto, Obispo Verde o Blanco Lectura del libro de Tobías 12,1.5-15.20 Así es que lo llamó y le dijo: «Como paga, toma la mitad de todo lo que has traído, y vete en paz.» Entonces Rafael llamó aparte a los dos y les dijo: «Bendigan a Dios y proclamen ante todos los vivientes los beneficios que les ha hecho, para que todos canten himnos en su honor. Manifiesten a todos las obras del Señor como él se merece, y no sean negligentes en darle gracias. Si el secreto del rey hay que guardarlo, las obras de Dios hay que publicarlas y proclamarlas como se merecen. Obren bien, y no les vendrá ninguna desgracia. Más vale la oración sincera y la limosna generosa que la riqueza adquirida injustamente. Más vale hacer limosnas que atesorar dinero. La limosna libra de la muerte y espía el pecado. Los que hacen limosna se saciarán de vida. Los pecadores y los malhechores son enemigos de sí mismos. Les descubriré toda la verdad sin ocultarles nada. Ya les dije que si el secreto del rey hay que guardarlo, las obras de Dios hay que publicarlas como se 39 Tuve hambre y me diste de comer merecen. Pues bien, cuando Sara y tú estaban rezando, yo presentaba al Señor de la gloria el memorial de tu oración. Lo mismo cuando enterrabas a los muertos. Y cuando te levantaste de la mesa sin dudar y dejaste la comida por ir a enterrar a aquel muerto, Dios me envió para probarte; pero me ha enviado de nuevo para curarte a ti y a tu nuera Sara. Yo soy Rafael, uno de los siete ángeles que están al servicio de Dios y tienen acceso ante el Señor de la gloria. Así, pues, bendigan al Señor en la tierra, den gracias a Dios. Yo subo ahora al que me envió. ustedes escriban todo lo que les ha ocurrido.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial: Tb 13,2.6.7.8 R/. Bendito sea Dios, que vive eternamente Él azota y se compadece, hunde hasta el abismo y saca de él, y no hay quien escape de su mano. R/. Verán lo que hará con ustedes, le darán gracias a boca llena,bendecirán al Señor de la justicia y Ensalzarán al rey de los siglos. R/. Yo le doy gracias en mi cautiverio, anuncio su grandeza y su poder a un pueblo pecador. R/. Conviértanse, pecadores, obren rectamente en su presencia: quizá les mostrará benevolencia y tendrá compasión. R/. Lectura del santo evangelio según san Marcos 12,38-44 En aquel tiempo, entre lo que enseñaba Jesús a la gente, dijo: «¡Cuidado con los escribas! Les encanta pasearse con amplio ropaje y que les hagan reverencias en la plaza, buscan los asientos de honor en las sinagogas y los primeros puestos en los banquetes; y devoran los bienes de las viudas, con pretexto de largos rezos. Éstos recibirán una sentencia más rigurosa.» Estando Jesús sentado enfrente del arca de las ofrendas, observaba a la gente que iba echando dinero: muchos ricos echaban en cantidad; se acercó una viuda pobre y echó dos reales. Llamando a sus discípulos, les dijo: « Les aseguro que esa pobre viuda ha echado en el arca de las ofrendas más que nadie. Porque los demás han echado de lo que les sobra, pero esta, que pasa necesidad, ha echado todo lo que tenía para vivir.» Palabra del Señor. Meditación Terminamos hoy la historia de Tobit. En ella, hemos podido ver cómo la misericordia de Dios alcanza a los que lo aman, le son fieles y confían en Él. Los cristianos de hoy tenemos mucho que aprender de los personajes de esta historia: Tobit, Tobías, el arcángel Rafael. El arcángel Rafael es presentado como intercesor, guía, médico, ministro del culto, maestro, mentor, catequista y exorcista. Enseña a los pastores, y a todos los que queremos servir a Dios, a practicar la caridad, a ser sensibles a las necesidades de los hermanos e interceder por ellas, a transmitir la palabra de Dios, a acompañar a los creyentes en su camino por la vida. 40 Plan de Pastoral - Junio 2015 Tobías (a pesar de que es visto por autores críticos como un personaje falto de personalidad), al seguir las instrucciones de Tobit y del ángel, nos enseña a escuchar la voz de Dios, que habla a los hijos a través de los padres y habla a los fieles a través de los ministros sagrados. Tobit es ejemplo de hombre fiel al único Dios verdadero, que lo ama sobre todas las cosas, que solo en Él pone su confianza. Tobit es un hombre de fe práctica y sus obras de amor testimonian su fe: hace vida la enseñanza de la palabra de Dios, da gracias a Dios por los favores recibidos, no se rinde ante las costumbres paganas ni da culto a ídolos, destaca por su caridad, socorre a los más necesitados, comparte sus bienes con los más necesitados, protege la dignidad de sus hermanos israelitas. Tobit nunca abandona el ideal de vivir conforme al plan de Dios, sin importar las circunstancias, aun sabiendo que con ello ponía en peligro sus bienes materiales. En la prosperidad, agradece a Dios y es solidario con el prójimo. En la adversidad, soporta con valentía, acude a Dios y confía en su auxilio. Nunca reniega de su fe: acepta en paz la burla de los demás. Al final de la prueba, da gracias a Dios por el bien que le ha hecho. Tobit también es ejemplo de padre responsable conforme al plan de Dios: deja una herencia espiritual a su hijo, al que le enseña con su ejemplo y con sus palabras a ser un hombre de Dios. Tobit dice que las obras de Dios hay que publicarlas y proclamarlas como se merecen. Ver la vida de Tobit nos recuerda que en Gálatas 5,22 san Pablo nos dice que: “El fruto del Espíritu (es decir, lo que el Espíritu produce dentro de nosotros) es: Amor, alegría, paz, paciencia, amabilidad, bondad, fidelidad, humildad y dominio de nosotros mismos.” Ese es el modo de ser de Cristo, que el Espíritu de Dios supone producir en nosotros. No lo hacemos nosotros. Es el Espíritu el que lo produce. 7 X Domingo del Tiempo Ordinario II Semana Liturgia de las Horas Verde 24ª Aniversario de la Ordenaciòn Presbiteral de Mons. Víctor Emilio Masalles Pere, Obispo Auxiliar de Santo Domingo Jesucristo vence todo mal y nos hace capaces de vivir la caridad Orientaciones para la Celebración Es el primer domingo del mes de junio, por tanto debemos llevar en procesión el tema y el lema del mes, después se ponen en lugar visible. Se pueden llevar dos letreros uno que diga BELCEBU y otro que diga JESUS y al llegar frente al altar se tira al suelo el que diga BELZEBIU y se coloca en alto el que dice JESUS. Se puede pedir un gesto de caridad con las personas más necesitadas de la parroquia o comunidad. Se puede hacer una escenificación de la lucha del bien y el mal. 41 Tuve hambre y me diste de comer Monición ambiental Hermanos y hermanas: El Señor nos reúne a celebrar la Eucaristía en la que hacemos memoria de la muerte y resurrección con la cual Jesucristo ha vencido el pecado, la muerte y el poderío del Maligno sobre nosotros. Damos gracias al Padre por esta caridad que ha tenido con nosotros al enviar a su Hijo que es más fuerte que el mal y nos libera de su influencia en nosotros y nos lleva a vivir la voluntad del Padre que consiste en el amor hacia El y en la caridad hacia todos los que nos rodean, especialmente los más necesitados. Esta caridad se manifiesta en acciones concretas como hizo Jesús. Por eso, en este mes de junio se nos invita a fortalecer el valor de la Caridad, el Señor nos desafía al decirnos:”tuve hambre y me diste de comer” (Mt, 25,35). En esta Eucaristía, dejémonos llenar de esa caridad de Dios mismo que vence el mal y nos hace capaces de vivir la caridad con los más pobres donde El se hace presente de modo especial. Con este santo deseo nos ponemos de pie para aclamar a Jesucristo que llega a presidir esta Celebración a través de su ministro. Primera Lectura: Génesis 3, 9-15 Adán y Eva han desobedecido a Dios, se sienten mal y se esconden. A partir de allí, la historia humana vive entre la lejanía de Dios y la inclinación al pecado. Pero Dios, en su gran caridad en ese mismo momento, promete la Salvación, que nos libera del poder del Maligno y que nos llega a través de Aquel que nacido de la nueva Eva. Escuchemos. Lectura del libro del Génesis Oyeron al Señor Dios que se paseaba por el jardín tomando el fresco. El hombre y su mujer se escondieron entre los árboles del jardín, para que el Señor Dios no los viera. Pero el Señor Dios llamó al hombre: —¿Dónde estás? Él contestó: —Te oí en el jardín, me entró miedo porque estaba desnudo, y me escondí. El Señor Dios le replicó: —Y, ¿quién te ha dicho que estabas desnudo? ¿A que has comido del árbol prohibido? El hombre respondió: —La mujer que me diste por compañera me convidó el fruto y comí. El Señor Dios dijo a la mujer: —¿Qué has hecho? Ella respondió: —La serpiente me engañó y comí. El Señor Dios dijo a la serpiente: —Por haber hecho eso, maldita seas entre todos los animales domésticos y salvajes; te arrastrarás sobre el vientre y comerás polvo toda tu vida; pongo enemistad entre ti y la mujer, entre tu descendencia y la suya: ella te herirá la cabeza cuando tú hieras su talón. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 129 R/. “Del Señor viene la misericordia, la redención copiosa“ Desde lo hondo a ti grito, Señor; /Señor, escucha mi voz; /estén tus oídos atentos /a la voz de mi súplica. R. 42 Plan de Pastoral - Junio 2015 Si llevas cuenta de los delitos, Señor, /¿quién podrá resistir? /Pero de ti procede el perdón, /y así infundes respeto. R. Mi alma espera en el Señor, /espera en su palabra; /mi alma aguarda al Señor, /más que el centinela la aurora. R. Aguarde Israel al Señor, como el centinela la aurora; /porque del Señor viene la misericordia, la redención copiosa; /y él redimirá a Israel /de todos sus delitos. R. Segunda Lectura: 2 Corintios: 4, 13-5 Aceptar que Jesús ha resucitado y que El nos resucitará a nosotros nos lleva a no tener miedo seguros que la angustia presente es pasajera y que lo importa es caminar hacia la plenitud de su caridad. Escuchemos. Lectura de la Segunda Carta a los Corintios Hermanos: Pero como poseemos el mismo espíritu de fe conforme a lo que está escrito: Creí y por eso hablé, también nosotros creemos y por eso hablamos, convencidos de que quien resucitó al Señor Jesús, nos resucitará a nosotros con Jesús y nos llevará con ustedes a su presencia. Todo esto es por ustedes, para que, al multiplicarse la gracia entre muchos, sean también numerosos los que den gracias para gloria de Dios. Por tanto no nos acobardamos: si nuestro exterior se va deshaciendo, nuestro interior se va renovando día a día. A nosotros la angustia presente, que es liviana y pasajera, nos prepara una gloria perpetua que supera toda medida, ya que tenemos la mirada puesta en lo invisible, no en lo visible, porque lo visible es pasajero, pero lo que no se ve es para siempre. Sabemos que, si esta tienda de campaña, nuestra morada terrenal, es destruida, tenemos una vivienda eterna en el cielo, no construida por manos humanas, sino por Dios. Palabra del Señor. Aleluya Jn12, 31b-32 Ahora el príncipe de este mundo va a ser echado fuera -dice el Señory yo cuando sea levantado de la tierra, atraeré a todos hacia mi. Evangelio: Marcos: 3, 20-35 Jesús al manifestar su caridad liberando a los endemoniados asegura que el Maligno está sometido por El que es más fuerte que su aparente poderío sobre las personas y pueblos. Sólo basta abrirse a Jesús y reconocer que en El actúa el Padre, cuya voluntad realizan todos los que forman parte de esta nueva familia iniciada con su presencia y acción liberadora de todo mal. Escuchemos. Lectura del Santo Evangelio según San Marcos Entró en la casa, y se reunió tal gentío, que no podían ni comer. Sus familiares, que lo oyeron, salieron a calmarlo, porque decían que estaba fuera de sí. Los letrados que habían bajado de Jerusalén decían: — Lleva dentro a Belcebú y expulsa los demonios con el poder del jefe de los demonios. 43 Tuve hambre y me diste de comer Él los llamó y por medio de comparaciones les explicó: — ¿Cómo puede Satanás expulsar a Satanás? Un reino dividido internamente no puede subsistir. Una casa dividida internamente no puede mantenerse. Si Satanás se levanta contra sí mismo y se divide, no puede subsistir, más bien va camino de su fin. Nadie puede entrar en la casa de un hombre fuerte y llevarse sus cosas si primero no lo ata. Después podrá saquear la casa. Les aseguro que a los hombres se les pueden perdonar todos los pecados y las blasfemias que pronuncien. Pero el que blasfeme contra el Espíritu jamás tendrá perdón; será culpable para siempre. Jesús dijo esto porque ellos decían que tenía dentro un espíritu inmundo. Fueron su madre y sus hermanos, se detuvieron fuera y lo mandaron a llamar. La gente estaba sentada en torno a él y le dijeron: — Mira, tu madre y tus hermanos están fuera y te buscan. Él les respondió: — ¿Quién es mi madre y mis hermanos? Y mirando a los que estaban sentados en círculo alrededor de él, dice: — Miren, éstos son mi madre y mis hermanos. Porque el que cumpla la voluntad de mi Padre del cielo, ese es mi hermano, mi hermana y mi madre. Palabra del Señor. Meditación Cuántas veces, somos abrumados por la desesperación, por la angustia, por la tristeza, por el sentimiento de estar lejos de Dios, causados siempre por ese pecado original que parece siempre empujarnos a pecar una y otra vez. Desde el tiempo en que Adán pecó, el hombre se ha visto sumergido en acciones que lo distancian de Dios, acciones que llenan de pena y pesar sus días, pero a la vez, siempre en su corazón persiste la certeza de que de Dios brota toda la misericordia, que es capaz de borrar sus culpas, tiene siempre la esperanza de que Dios perdonará sus faltas y redimirá su perdición. Es la esperanza puesta en Dios la que le hace mirar con seguridad su porvenir y la que le hace sentirse sostenido por la divina providencia. Toda esta esperanza, toda esta actitud expectante, se ve satisfecha con la resurrección de Cristo, por ella, Cristo nos redime de nuestros pecados y se nos abre la puerta de la vida eterna en su presencia. Ahora, ya vivimos sabiendo, que toda prueba, angustia o sufrimiento que llevemos en nuestro día a día (una enfermedad, vicios en un familiar, depresión, problemas económicos, mal clima para nuestras cosechas, situaciones laborales difíciles, etc.), si lo vivimos con Cristo, solo servirán para ir preparando nuestra morada final en el cielo, para ir creciendo en la convicción de que por Cristo, podremos resucitar sin manchas, ni malas inclinaciones, sin pecado, sin preocupaciones, en una vida sin ocaso llena de gozo, alegría y paz. Para poder alcanzar todo esto, solo debemos creer que el Espíritu Santo tiene el poder de transformarnos, de cambiar nuestras tristezas, de hacernos felices. Aun cuando todo parezca ir de mal en peor, Él puede y quiere limpiar nuestras suciedades y hacernos resplandecer con la luz de 44 Plan de Pastoral - Junio 2015 Jesús. Sin este reconocimiento, todos nuestros esfuerzos serán en vano, no rendirán frutos, no podremos ser perdonados y redimidos, pues ¿Cómo podremos alcanzar lo prometido sin creer en el que hace la promesa? Solo así, creyendo que el Espíritu de Dios puede perdonarnos y cambiar el rumbo triste de nuestras vidas, nos encontraremos juntos como hermanos, todos los que hemos dicho que sí a la voluntad de Dios y al plan de amor que Él tiene para nuestras vidas, felices y gozosos, ante su presencia santa en el cielo. Oración de los fieles Quien preside: Presentamos nuestras necesidades al Padre quien envió a su Hijo para vencer el Maligno y a encender en nosotros su caridad diciéndole: Con Jesucristo vence en nosotros el Mal para que vivamos la caridad. 1.-Por la Iglesia, para que haga presente el amor y la salvación de Dios manifestada en Jesucristo viviendo la caridad en toda la tierra, especialmente con los más débiles. Oremos. 2.-Para que quienes gobiernan la República Dominicana trabajen por expulsar al Maligno que se manifiesta en tanta violencia, corrupción e impunidad y promuevan así el desarrollo integral de todo el pueblo. Oremos. 3.-Por los más pobres de nuestro pueblo para que venciendo las tentaciones del Maligno, vivan la caridad entre ellos y se esfuercen por vivir la voluntad del Padre. Oremos. 4.-Por esta Asamblea para que tengamos la fuerza suficiente para luchar contra el mal personal y social, venzamos las tentaciones y seamos personas de caridad para con quienes nos rodean y para las necesidades del país. Oremos. 5.- Por los Consagrados y Consagradas de nuestras comunidades y de toda República Dominicana, para que tenga muchas y santas vocaciones y trabajen con los más marginados y excluidos. Oremos. Quien preside: Padre, acoge nuestras súplicas, haz que cada vez más creamos en Ti y reconozcamos que Jesucristo es nuestro Salvador que nos lleva a Ti y con El venzamos todo mal y vivamos la caridad que proviene de Ti. Por Jesucristo nuestro Señor. 8 Lunes Feria Verde Comienzo de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 1,1-7 Pablo, apóstol de Cristo Jesús por designio de Dios, y el hermano Timoteo, a la Iglesia de Dios que está en Corinto y a todos los santos que residen en toda Acaya: les deseamos la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo. ¡Bendito sea Dios, Padre de nuestro Señor Jesucristo, 45 Tuve hambre y me diste de comer Padre de misericordia y Dios del consuelo! Él nos alienta en nuestras luchas hasta el punto de poder nosotros alentar a los demás en cualquier lucha, repartiendo con ellos el ánimo que nosotros recibimos de Dios. Si los sufrimientos de Cristo rebosan sobre nosotros, gracias a Cristo rebosa en proporción nuestro ánimo. Si nos toca luchar, es para nuestro aliento y salvación; si recibimos aliento, es para comunicales un aliento con el que pueden aguantar los mismos sufrimientos que padecemos nosotros. Nos dan firmes motivos de esperanza, pues sabemos que si son compañeros en el sufrir, también lo son en el buen ánimo.Palabra de Dios. Salmo Responsorial:33 R/:“Gusten y vean qué bueno es el Señor“ Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca; mi alma se gloria en el Señor: que los humildes lo escuchen y se alegren. R/. Proclamen conmigo la grandeza del Señor,ensalcemos juntos su nombre. Yo consulté al Señor, y me respondió, me libró de todas mis ansias. R/. Contemplenlo, y quedaran radiantes, su rostro no se avergonzará. Si el afligido invoca al Señor, él lo escucha y lo salva de sus angustias. R/. El ángel del Señor acampa en torno a sus fieles y los protege. Gusten y vean qué bueno es el Señor. R/. Lectura del santo Evangelio según san Mateo 5,1-12 Viendo la muchedumbre, subió al monte, se sentó, y sus discípulos se le acercaron. Y tomando la palabra, les enseñaba diciendo: «Bienaventurados los pobres de espíritu, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados los mansos , porque ellos poseerán en herencia la tierra. Bienaventurados los que lloran, porque ellos serán consolados. Bienaventurados los que tienen hambre y sed de la justicia, porque ellos serán saciados. Bienaventurados los misericordiosos, porque ellos alcanzarán misericordia. Bienaventurados los limpios de corazón, porque ellos verán a Dios. Bienaventurados los que trabajan por la paz, porque ellos serán llamados hijos de Dios. Bienaventurados los perseguidos por causa de la justicia, porque de ellos es el Reino de los Cielos. Bienaventurados serán cuando los injurien, y los persigan y digan con mentira toda clase de mal contra ustedes por mi causa. Alégrense y regocijense, porque su recompensa será grande en los cielos; pues de la misma manera persiguieron a los profetas anteriores a ustedes». Palabra de Dios. Meditacion Hoy más que nunca, nuestras vidas estan pasando por un sin numero de situaciones difíciles, verdaderas pruebas cotidianas. Cada día se nos presentan a la puerta problemas que van tocando cada área de nuestra existencia y que van cargando nuestros seres de ansiedad, angustias, tristezas, desánimo y penas. En nuestra sociedad, cada vez se hace más difícil mantener a flote el matrimonio, llevar a los hijos por el buen camino,tener familias 46 Plan de Pastoral - Junio 2015 estables,llevar una soltería santa,no sacar beneficios personales de manera ilícita, mantener un ambiente laboral cordial y sano, conseguir el pan para los nuestros de manera justa y honrada. Cada vez son más las personas que sufren de tristezas profundas, de deseperación por problemas de salud, familiares y económicos. Cada día más y más personas son afectadas por acciones injustas que violentan sus derechos sin recibir ningun reparo a los males sufridos. Cuántos hermanos hoy por hoy son víctimas de persecución y martirio por su fe en Cristo, cuántos de nosotros somos sometidos a burlas, discriminación y odio por creer en Jesús y por hacer la voluntad de Dios. Ante todas estas calamidades y situaciones, nos viene la esperzanza de la bondad y misericordia de Dios. Una bondad que nos asegura que nuestros llantos y sufrimientos no serán desoidos, sino que serán atendidos y resarcidos en la vida eterna, serán abrazados por Dios para ser cambiados en paz y alegría. Dios hará justicia a todo el afectado por las injusticias y desigualdades sociales, saciará a todo el que padece hambre, a todo el pobre de espíritu, lo llenará de su riqueza y nunca más tendrá precariedades. Que nuestra alegría hoy sea sabernos desvalidos, perseguidos, injuriados, empobrecidos, por causa de Dios. Sabemos que Él no se hará el ciego y que todo esto pasará en nuestras vidas a algo mejor preparado por Él. Dios nos dará cada día las fuerzas necesarias para combartir todas nuestras batallas, nos levantará y sostendrá con su diestra poderosa. Cuando sintamos que no podremos más, que todo se oscurece, que nada marcha bien, su aliento nos impulzara a seguir adelante, nos llenará de brío y valor para así vencer todos nuestros abismos y superar hasta las más duras circunstancias. Entonces así, viendo el triunfo de Dios en nosotros, podremos también, ser testimonio y luz para los demás, podremos mostrarles a todos que Dios no abandona a los suyos y que confiando en Él llegaremos victoriosos a la meta. Así, todos juntos, podremos proclamar que somos bienaventurados pues confiamos en Dios y hemos visto que no nos abandona, hemos sido limpios y mansos de corazón y Él no se ha dejado ganar en misericordia y amor por nosotros. 9 Feria o Memoria Libre: San Efrén Diácono y Doctor de la Iglesia Martes Verde o Blanco Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 1,18-22 ¡Dios me es testigo! La palabra que les dirigimos no fue primero «sí» y luego «no». Cristo Jesús, el Hijo de Dios, el que Silvano, Timoteo y yo les hemos anunciado, no fue primero «sí» y luego «no»; en él todo se ha convertido en un «sí»; en él todas las promesas han recibido un «sí». Y por él podemos responder: «Amén» a Dios, para gloria suya. Dios es quien nos confirma en Cristo a nosotros junto con ustedes. Él nos ha ungido, él nos ha 47 Tuve hambre y me diste de comer sellado, y ha puesto en nuestros corazones, como prenda suya, el Espíritu. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 118 R/.“ Haz brillar, Señor, tu rostro sobre tu siervo“ Tus preceptos son admirables, por eso los guarda mi alma. R/. La explicación de tus palabras ilumina, da inteligencia a los ignorantes. R/. Abro la boca y respiro, ansiando tus mandamientos. R/. Vuélvete a mí y ten misericordia, como es tu norma con los que aman tu nombre. R/. Asegura mis pasos con tu promesa, que ninguna maldad me domine. R/. Haz brillar tu rostro sobre tu siervo, enséñame tus leyes. R/. Lectura del santo evangelio según san Mateo 5,13-18 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Ustedes son la sal de la tierra. Pero si la sal se vuelve sosa, ¿con qué la salarán? No sirve más que para tirarla fuera y que la pise la gente. Ustedes son la luz del mundo. No se puede ocultar una ciudad puesta en lo alto de un monte. Tampoco se enciende una lámpara para meterla debajo del celemín, sino para ponerla en el candelero y que alumbre a todos los de casa. Alumbre así su luz a los hombres, para que vean sus buenas obras y den gloria a su Padre que está en el cielo.»Palabra del Señor. Meditación Jesús usa dos elementos sencillos pero muy importantes: la sal y la luz, para hablarnos de nuestra vocación cristiana en la lectura de hoy. Por eso nunca es difícil de entender su mensaje, aún para nosotros hoy en día. Su aparente sencillez esconde una gran profundidad y nos invita a una intensa meditación. ¿A que me invita Jesús cuando me dice que “soy la sal de tierra”? Si buscamos algunas de las características de la sal encontraremos que no solo da sabor, sino que también sirve para “salar” los alimentos y preservarlos. Pero hay algo más interesante todavía: la sal no es rica en sí misma, sirve para dejar las otras cosas ricas. Tampoco nadie come la sal pura. Su razón de existir es estar al servicio de los otros alimentos. Estas palabras nos llevan entonces a meditar qué tanto estoy yo siendo sal para otros. Si mi vida no sirve para alegrar, dar sabor, alegría a los que me rodean soy como la sal que ha perdido el sabor, que ha perdido su sentido de ser. Pero Jesús no solamente usó el símbolo de la sal. Nos dijo también que hay otro elemento de la naturaleza que puede darnos testimonio de lo que significa ser cristiano. Ustedes son la luz del mundo. ¿Qué es la luz? Es lo que nos permite ver todas las cosas. Nos hace posible percibir los colores y los detalles. Nos da seguridad para caminar evitando los obstáculos. Al igual que la sal, la luz no vive para sí misma. Si la luz no se reflejara en las cosas, no serviría de nada; sería como si no existiese. Sabemos que 48 Plan de Pastoral - Junio 2015 la luz existe porque vemos las otras cosas. Su misión no es mostrarse a sí misma; al contrario, es dejar visible aquello que ilumina. ¡Qué sabio es Dios que pone estos ejemplos para saber cual es nuestra misión! Cuentan que un día, san Francisco de Asís le pidió a uno de los frailes cofundadores que se preparara para salir a predicar con él. Salieron y estuvieron caminando y dando vueltas por todo Asís, durante una hora y media. En un cierto momento, el fraile que lo acompañaba le preguntó a san Francisco: “Padre Francisco, usted me dijo que saldríamos a predicar. Hasta ahora, solo hemos caminado y recorrido todo el pueblo”. San Francisco le respondió: “Hermano, llevamos una hora y media de predicación. No hay mejor predicación que la sonrisa y el testimonio de una vida auténticamente cristiana”. Ojalá que también nosotros nos convirtamos en mensajeros de la sonrisa, felicidad, del amor de Dios. Pidamos a nuestra madre María que interceda por nosotros. Pidamos para que seamos como ella, portadora de la luz y de la riqueza de Cristo. 10 Miércoles Feria Verde Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 3,4-11 Esta confianza con Dios la tenemos por Cristo. No es que por nosotros mismos estemos capacitados para apuntarnos algo, como realización nuestra; nuestra capacidad nos viene de Dios, que nos ha capacitado para ser ministros de una alianza nueva: no de código escrito, sino de espíritu; porque la ley escrita mata, el Espíritu da vida. Aquel ministerio de muerte –letras grabadas en piedra– se inauguró con gloria; tanto que los israelitas no podían fijar la vista en el rostro de Moisés, por el resplandor de su rostro, caduco y todo como era. Pues con cuánta mayor razón el ministerio del Espíritu resplandecerá de gloria. Si el ministerio de la condena se hizo con resplandor, cuánto más resplandecerá el ministerio del perdón. El resplandor aquel ya no es resplandor, eclipsado por esta gloria incomparable. Si lo caduco tuvo su resplandor, figúrense cuál será el de lo permanente. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 98 R/ “Santo es el Señor nuestro Dios” Ensalzen al Señor, Dios nuestro, postrense ante el estrado de sus pies: Él es santo. R/. Moisés y Aarón con sus sacerdotes, Samuel con los que invocan su nombre, invocaban al Señor, y él respondía. R/. Dios les hablaba desde la columna de nube; oyeron sus mandatos y la ley que les dio. R/. Señor, Dios nuestro, tú les respondías, tú eras para ellos un Dios de perdón, y un Dios vengador de sus maldades. R/. Ensalzen al Señor, Dios nuestro; postrense ante su monte santo: Santo es el Señor, nuestro Dios. R/. 49 Tuve hambre y me diste de comer Lectura del santo evangelio según san Mateo 5,17-19 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No crean que he venido a abolir la Ley y los profetas: no he venido a abolir, sino a dar plenitud. Les aseguro que antes pasarán el cielo y la tierra que deje de cumplirse hasta la última letra o tilde de la Ley. El que se salte uno solo de los preceptos menos importantes, y se lo enseñe así a los hombres será el menos importante en el reino de los cielos. Pero quien los cumpla y enseñe será grande en el reino de los cielos.»Palabra del Señor. Meditación Jesús vino al mundo con el objetivo de que todos los hombres se salven.Seguirle implica un cambio de actitud, un cambio en nuestros corazones. La ley de Moisés representa el sentir de Dios para su pueblo. Implicaba un camino de obediencia que traía como consecuencia salud y bienestar. Sin embargo, desde el principio hubo dos grandes desviaciones de esta obediencia: • El concepto de Dios: esa obediencia se debía, para los judíos, a un Dios - terror, constantemente amenazante, extremadamente justiciero. • El culto a las normas, que llevó a los judíos a cumplir externamente los preceptos legales, sin un encuentro interior con Dios. Así vemos que en la época de Jesús la religión de los judíos estaba caracterizada por el terror y el culto al formalismo legal. El pueblo se sentía decepcionado por una religión que le ataba y le pesaba, más que acercarle a su Dios y por eso muchas veces era infiel a estas leyes. Jesús declara que no viene a abolir la ley. Viene a darle plenitud, a darle su verdadero sentido. Jesús le quita todo lo inhumano y todo lo que no es de Dios en ella. Rescata todo lo positivo y puro y le da un nuevo espíritu. Y por eso Jesús es un revolucionario, porque no viene a QUITAR la ley, porque: ¿Qué sería del mundo sin los mandamientos? Él quiere cambiar el ESPÍRITU con que se vive la ley. Es verdad que Jesús vino a enseñarnos una nueva ley, un nuevo mandamiento: EL AMOR, LA CARIDAD, pero esta, no viene a sustituir a los anteriores, sino que viene a permear todos los demás, para cambiar nuestra idea de un Dios castigador a la de un Dios-Amor que se entrega y hace posible que nosotros vivamos una vida en plenitud: no cumpliendo con gestos y con ritos para “comprar” el favor de Dios, sino viviendo esos preceptos a través de la fe y de la caridad.Es decir amando a Dios y demostrando ese amor con la caridad y el amor a los hermanos y hermanas. La ley nos indica hasta donde no se puede pasar y el evangelio hasta donde hay que llegar: hasta la locura de la cruz, hasta la entrega total. En las Bienaventuranzas Jesús nos propone: llega hasta donde no puedas. Pero al mismo tiempo también te dice: ¡Aquí estoy para ti! Mi gracia te dará fuerzas para que juntos hagamos lo que el mundo considera imposible de lograr. 50 Plan de Pastoral - Junio 2015 Pidamos a María, nuestra Virgen de La Altagracia que inteceda por nosotros a Jesús, para que nuestra imagen de Dios se siga transformando en su verdadero rostro: el rostro de su hijo Jesús, que nos muestra el camino del amor perfecto y de la Ley del Amor y la Caridad. 11 Jueves Memoria Obligatoria: San Bernabé, Apóstol Rojo Lectura del libro de los Hechos de los apóstoles 11,21b-26;13,1-3 En aquellos días, gran número creyó y se convirtió al Señor. Llegó noticia a la Iglesia de Jerusalén, y enviaron a Bernabé a Antioquía; al llegar y ver la acción de la gracia de Dios, se alegró mucho, y exhortó a todos a seguir unidos al Señor con todo empeño; como era hombre de bien, lleno de Espíritu Santo y de fe, una multitud considerable se adhirió al Señor. Más tarde, salió para Tarso, en busca de Saulo; lo encontró y se lo llevó a Antioquía. Durante un año fueron huéspedes de aquella Iglesia e instruyeron a muchos. Fue en Antioquía donde por primera vez llamaron a los discípulos cristianos. En la Iglesia de Antioquia había profetas y maestros: Bernabé, Simeón, apodado el Moreno, Lucio el Cireneo, Manahén, hermano de leche del virrey Herodes, y Saulo. Un día que ayunaban y daban culto al Señor, dijo el Espíritu Santo: «Apartenme a Bernabé y a Saulo para la misión a que los he llamado.» Volvieron a ayunar y a orar, les impusieron las manos y los despidieron.Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 97 R/“El Señor revela a las naciones su justicia” Canten al Señor un cántico nuevo, porque ha hecho maravillas; su diestra le ha dado la victoria, su santo brazo. R/. El Señor da a conocer su victoria, revela a las naciones su justicia; se acordó de su misericordia y su fidelidad en favor de la casa de Israel. R/. Los confines de la tierra han contemplado la victoria de nuestro Dios. Aclama al Señor, tierra entera; griteen, vitoreen, toquen. R/. Toquen la citara para el Señor, suenen los instrumentos; con clarines y al son de trompetas, aclamen al Rey y Señor. R/. Lectura del santo evangelio según san Mateo 10,7-13 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus apóstoles: «Vayan y proclamen que el reino de los cielos está cerca. Curen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos, echen demonios. Lo que han recibido gratis, denlo gratis. No lleven en la faja oro, plata ni calderilla; ni tampoco alforja para el camino, ni túnica de repuesto, ni sandalias, ni bastón; bien merece el obrero su sustento. Cuando entren en un pueblo o aldea, averiguen quién hay allí de confianza y quedense en su casa hasta que se vayan. Al entrar en una casa, saluden; si la casa se lo merece, la paz que le deseen vendrá a ella. Si no se lo merece, la paz volverá a ustedes.»Palabra del Señor 51 Tuve hambre y me diste de comer Meditación Cada día lo cotidiano de nuestra realidad nos lleva a llenar nuestros pensamientos de malas noticias, que van cargando nuestro espíritu y nuestra humanidad de pesimismo, de desaliento y desesperanza. Es por eso que este tiempo nos debe mover espiritualmente a profundizar en esa noticia de salvación que llegó un día a nuestros sentidos y nos movió a encontrarnos con el amor maravilloso de un Dios lleno de misericordia, porque solo manteniéndonos unidos a esa gracia salvadora podemos enfrentar las amenazas que atentan en contra de nuestra herencia de salvación. Este tiempo nos debe llevar a tomar mayor conciencia del poder y la gracia que recibimos cuando tenemos una vida de comunión espiritual con el Señor, solo así nuestros sentidos espirituales pueden llevar a nuestros sentidos humanos a creer, a tener fe, a tener la certeza de que Dios es capaz de hacer grandes cosas en nosotros, por nosotros y con nosotros, solo así tomamos conciencia de las grandes maravillas que Dios ha hecho y más que todo las que quiere seguir haciendo en nosotros, es tener la certeza, la seguridad, la garantía absoluta de su accionar poderoso en nuestras vidas, por esto el tomar la decisión de profundizar cada vez más en ese encuentro con el Señor es lo que potencializa en nosotros el anhelo, el deseo, la necesidad de buscar y alcanzar estar más cerca de Dios y este anhelo nos lleva a no quedarnos con lo que recibimos, porque mientras más cerca de Dios estamos, mientras más profunda es nuestra relación con Él, más llenos de su amor está nuestra vida y nos hace querer alcanzar grandes cosas, sobrepasar lo que para nosotros muchas veces ha sido imposible, porque tomamos conciencia de que cuando se acaban nuestras fuerzas tomamos las suyas, al llegar a este punto esta gracia nos impulsa a llevar a los demás, comenzando por los que están más cerca, nuestra familia, amigos, compañeros de trabajo, los que viven con nosotros el día a día, esta maravillosa noticia. Este tiempo nos reta a ser mejores cristianos, a llevar con honor este nombre, a no disminuir el sentido que le da a nuestras vidas el ser discípulos del Señor, hoy más que nunca el mundo necesita que los verdaderos cristianos salgan de la comodidad que ataca muchas veces nuestra vida, el no querer salir de la zona de comodidad, nos exige ir un paso más, para ello es preciso, es necesario, montarnos en la barca e ir más adentro, hoy más que nunca es necesario que las malas noticias sean apagadas por las noticias de esperanza, de gracia y de redención, pide ahora al Señor que aparte de ti los miedos y te llene de la gracia santificante de su poder, para llevar con gallardía la buena nueva de salvación, que es nueva cada día. Y Buena Nueva, como nos dice el evangelio de hoy, que es práctica, se convierte en gestos concretos de amor y de caridad: Curen enfermos, resuciten muertos, limpien leprosos, echen demonios. 52 Plan de Pastoral - Junio 2015 12 Solemnidad: El Sagrado Corazón de Jesús Viernes Blanco Día mundial de oración por la santificación de los Sacerdotes. Lectura del profeta Oseas 11, 1b. 3-4. 8c-9 Así dice el Señor: “Cuando Israel era joven, lo amé, desde Egipto llamé a mi hijo. Yo enseñé a andar a Efraín, lo alzaba en brazos; y él no comprendía que yo lo curaba. Con cuerdas humanas, con correas de amor lo atraía; era para ellos como el que levanta el yugo de la cerviz, me inclinaba y le daba de comer. Se me revuelve el corazón, se me conmueven las entrañas. No cederé al ardor de mi cólera, no volveré a destruir a Efraín; que soy Dios, y no hombre; santo en medio de ti, y no enemigo a la puerta”. Palabra del Señor. Interleccional: Isaías, 12, 2-6. R/ “Sacarán aguas con gozo de las fuentes de la salvación”. El Señor es mi Dios y Salvador: confiaré y no temeré, porque mi fuerza y mi poder es el Señor, él fue mi salvación. Y sacarán aguas con gozo de las fuentes de la salvación. R. Den gracias al Señor, /invoquen su nombre, / cuenten a los pueblos sus hazañas, /proclamen que su nombre es excelso. R. Tañen para el Señor, que hizo proezas, /anúncienles a toda la tierra; / griten jubilosos, habitantes de Sión: /”Qué grande es en medio de ti /el santo de Israel.” R. Lectura de la carta del apóstol san Pablo a los Efesios 3,8-12.14-19 A mí, el más insignificante de todos los santos, se me ha dado esta gracia: anunciar a los gentiles la riqueza insondable que es Cristo, y aclarar a todos la realización del misterio, escondido desde el principio de los siglos en Dios, creador de todo. Así, mediante la Iglesia, los Principados y Potestades en los cielos conocen ahora la multiforme sabiduría de Dios, según el designio eterno, realizado en Cristo Jesús, Señor nuestro, por quien tenemos libre y confiado acceso a Dios, por la fe en él. Por esta razón, doblo las rodillas ante el Padre, de quien toma nombre toda familia en el cielo y en la tierra, pidiéndole que, de los tesoros de su gloria, les conceda por medio de su Espíritu robustecerlos en lo profundo de su ser, que Cristo habite por la fe en sus corazones, que el amor sea su raíz y su cimiento; y así, con todos los santos, lograrán abarcar lo ancho, lo largo, lo alto y lo profundo, comprendiendo lo que trasciende toda filosofía: el amor cristiano. Así llegarán a su plenitud, según la plenitud total de Dios. Palabra de Dios. 53 Tuve hambre y me diste de comer Lectura del santo evangelio según san Juan 19, 31-37 En aquel tiempo, los judíos, como era el día de la Preparación, para que no se quedaran los cuerpos en la cruz el sábado, porque aquel sábado era un día solemne, pidieron a Pilato que les quebraran las piernas y que los quitaran. Fueron los soldados, le quebraron las piernas al primero y luego al otro que habían crucificado con él; pero al llegar a Jesús, viendo que ya había muerto, no le quebraron las piernas, sino que uno de los soldados, con la lanza, le traspasó el costado, y al punto salió sangre y agua. El que lo vio da testimonio, y su testimonio es verdadero, y él sabe que dice verdad, para que también ustedes crean. Esto ocurrió para que se cumpliera la Escritura: “No le quebrarán un hueso”; y en otro lugar la Escritura dice: “Mirarán al que atravesaron”. Palabra del Señor. Meditación Dios construye en nuestras vidas una historia de amor y fidelidad, que inicia el día en que nos encontramos con Él, que siempre ha estado a la espera y que ese día, en el que abrimos la puerta de nuestros corazones a esa gracia, se hace efectiva en nosotros. Dios en ese momento nos ve y se regocija al ver que, con nuestros miedos y temores, nos dejamos sobrellenar de su gracia. En esa etapa Dios nos acompaña y a través de la gracia de su Espíritu Santo, va mostrándonos cómo alcanzar ese propósito que tiene para nosotros; muy a pesar que nuestros pasos y el resultado de su esperanza muchas veces no son acorde con lo que Él espera, nunca se aparta de nuestro lado, muy por el contrario, su inmensa misericordia sigue a la espera de que volvamos con pasión nuestras vidas a Él y podamos alcanzar ese anhelo de Dios. Para poder alcanzar ese propósito debemos confiar, estar totalmente seguros que Él es nuestra fuerza, nuestro poder, que no vamos solos por ese caminar tras sus huellas, que Él nos acompaña y en la mayor parte del camino nos sostiene. Solo con esa gracia podemos ser proclamadores de su fuerza, su justicia, su majestad y su honor, solamente abandonados a esa gracia, buscando tener esa comunión espiritual que alimenta nuestra alma, es como nos unimos al ejército de Dios. El Corazón de Jesús es el símbolo de todo esto que estamos diciendo: del amor total, radical de Dios para con nosotros y nosotras, y de la caridad que debemos demostrar para con los demás. Hay un precio que fue pagado, una sangre que fue derramada y sacrificio que culminó en victoria y es la base fundamental de nuestra fe, levantemos nuestro espíritu y asumamos el llamado a confiar en ese amor, en esa gracia, en esa victoria; tómate el tiempo para ver tu vida y con sinceridad déjate escudriñar por el Espíritu Santo, para que te revele si realmente estás dejándote empapar de esta gracia, o solo estás recogiendo las migajas de la mesa de los que celebran la victoria de Cristo Resucitado. Hoy ese Cristo de la gloria está a la puerta una vez más y, como aquel 54 Plan de Pastoral - Junio 2015 día del primer amor, está delante de ti, solamente esperando que te dejes amar y que le ames, toma la oportunidad de que el Sagrado Corazón de Jesús te lleve a cumplir el sueño de Dios, asumir el llamado radical de su amor y ser solo de Él. 13 Sábado Inmaculado Corazón de Maria y Memoria Obligatoria: San Antonio de Padua, Présbitero y Doctor de la Iglesia Blanco Lecturas tomadas de la memoria de: Inmaculado Corazón de María Lectura del profeta Isaías 61,9-11 La estirpe de mi pueblo será célebre entre las naciones, y sus vástagos entre los pueblos. Los que los vean reconocerán que son la estirpe que bendijo el Señor. Desbordo de gozo con el Señor, y me alegro con mi Dios: porque me ha vestido con un traje de gala y me ha envuelto en un manto de triunfo, como novio que se pone la corona, o novia que se adorna con sus joyas. Como el suelo echa sus brotes, como un jardín hace brotar sus semillas, así el Señor hará brotar la justicia y los himnos ante todos los pueblos. Palabra del Señor. Salmo Responsorial: 1Sam. R/ “ Mi corazón se regocija por el Señor, mi salvador” Mi corazón se regocija por el señor, mi poder se exalta por Dios; mi boca se ríe de mis enemigos, porque gozo con tu salvación. R/. Se rompen los arcos de tus valientes, mientras los cobardes se ciñen de valor; los hartos se contratan por el pan, mientras los hambrientos engordan; la mujer estéril da a luz siete hijos,mientras la madre de muchos queda baldía. R/. El Señor da la muerte y la vida, hunde en el abismo y levanta; da la pobreza y la riqueza, humilla y enaltece. R/. Él levanta del polvo al desvalido, alza de la basura al pobre, para hacer que se siente entre príncipes y que herede un trono de gloria. R/. Lectura del santo evangelio según san Lucas 2,41-51 Cuando Jesús cumplió doce años, subieron a la fiesta según la costumbre y, cuando terminó, se volvieron; pero el niño Jesús se quedó en Jerusalén, sin que lo supieran sus padres. Éstos, creyendo que estaba en la caravana, hicieron una jornada y se pusieron a buscarlo entre los parientes y conocidos; al no encontrarlo, se volvieron a Jerusalén en su busca. A los tres días, lo encontraron en el templo, sentado en medio de los maestros, escuchándolos y haciéndoles preguntas; todos los que le oían quedaban asombrados de su talento y de las respuestas que daba. Al verlo, se quedaron atónitos, y le dijo su madre: «Hijo, ¿por qué nos has tratado así? Mira que tu padre y yo te buscábamos angustiados.» Él les contestó: «¿Por qué me buscaban? ¿No sabían que yo debía estar en la casa de mi Padre?» 55 Tuve hambre y me diste de comer Pero ellos no comprendieron lo que quería decir. Él bajó con ellos a Nazaret y siguió bajo su autoridad. Su madre conservaba todo esto en su corazón. Palabra del Señor. Meditación Hablar del Inmaculado Corazón de María es también hablar del Sagrado Corazón de Jesús. Estos corazones permanecen eternamente unidos y es por eso que buscar a María, mirarla desde su interior, es indefectiblemente llegar a los pies de nuestro amado Jesús. Hoy el evangelio nos narra el pasaje en la niñez de Jesús, donde cumpliendo con la costumbre de ese tiempo fueron a Jerusalén. Cuando ya están de regreso, sus padres notan la ausencia de Jesús y se devuelven para encontrarlo en el templo, llenando de asombro a los que escuchaban esas palabras de sabiduría. Imaginemos por un instante a María durante este tiempo de búsqueda, los que somos padres y aún aquellos que no lo son, sabemos que en esos instantes los segundos parecieran siglos y la angustia se apodera de nosotros; eso mismo vivió María, quien al llegar a su hijo le habla con ternura y firmeza: ¿Por qué nos has tratado así? Jesús le explica que está ocupándose de las cosas de su Padre, por lo que es evidente que también para María, su madre, había aspectos de su hijo que le eran desconocidos. De alguna manera, ella y José también deben recorrer el camino de la fe, donde hay que mantener la certeza en nuestro Dios, en medio de la incertidumbre y desconcierto. En nuestra vida espiritual podemos sentir por momentos la ausencia del Señor, podemos tener la duda de si lo volveremos a encontrar y el dolor de la falta de su presencia en momentos en que entendemos que se ha marchado. La realidad es que los que nos alejamos somos nosotros, Jesús ha estado y estará siempre ahí, a la distancia de una oración, siempre dispuesto a dejarse encontrar y a salir muchas veces a nuestro encuentro. Recordar este día a nuestra madre María es acercarnos a la “llena de gracia”, a la que con su sí nos abrió las puertas a la salvación, a ese ser humano cuyas virtudes debemos imitar, a la que con su silencio nos dejó tantas enseñanzas. Buscar la intercesión de María en todo tiempo es una bendición que siempre nos llevará a descubrir a Jesús en nuestras vidas y a amarlo, porque fue lo que ella supo hacer de una forma perfecta. ¿Cómo te sientes en este tiempo en tu relación con Jesús? ¿Hace cuánto no le hablas con confianza y amor? ¿Sientes que definitivamente te abandonó? ¿Hay dudas e incertidumbres en tu vida que te llevan a cuestionarlo? Dirígete a Él cada día, busca la intercesión de María, pero sobre todo, escucha en lo profundo de tu corazón, las palabras de tu amado Jesús que cobran vida cada día. Déjate amar por Jesús y por María y a la vez maravíllate en lo que el Señor ha hecho y seguirá haciendo por ti. Levanta tu mirada y di junto al salmista: “Mi corazón se regocija por el Señor, mi salvador”. 56 Plan de Pastoral - Junio 2015 14 XI Domingo del Tiempo Ordinario III Semana Liturgia de las Horas Verde El Reino de Dios se manifiesta en los frutos de la caridad Orientaciones para la celebración En la procesión de entrada, y también en la de las ofrendas, se pueden llevar una variedad de semillas, todas ellas separadas y a la vista de las personas: arroz, habichuelas, guandules. Se pueden llevar algunas matitas.No nos olvidemos de tener en lugar claro el lema del mes: La caridad y el lema del Domingo. Monición ambiental Hermanas y hermanos: Hoy nos reune el Señor para celebrar con gozo la alegría de ser parte de su Reino que El ha iniciado en nosotros como una semilla pequeña que va creciendo con su cuidado y nuestra colaboración hasta dar muchos frutos de caridad. El Señor espera que nosotros acojamos su Reino que es tenerlo a El como Rey haciendo en todo su voluntad, que consiste en que vivamos como sus hijos que le aman y como hermanos que saben compartir el pan haciéndolo nuestro y de cada día, que saben perdonarse y vivir alejados del mal. Este Reino se manifiesta en obras concretas en las que se manifiesta la caridad, especialmente hacia los más pobres, haciendo realidad lo que El dice: ”tuve hambre y me diste de comer ”(Mt 25,35). En esta Celebración pidamos al Señor que nos llene de fuerzas para poner en práctica la caridad y el amor que Dios nos da y que espera verlos fructificar. De pie y cantando recibimos a Cristo, quien se hace presente para presidirnos a través de su ministro. Primera Lectura, Ezequiel 17,22-24 El profeta Ezequiel compara al pueblo de Israel con una rama de árbol que es transplantado y se hace grande, da sombra y da frutos. En nuestra vida está el Señor haciendo su obra para que demos frutos de caridad, y cobijemos a las demás personas, sobre todo a las necesitadas. Escuchemos Lectura del Profeta Ezequiel Esto dice el Señor Dios: «Arrancaré una rama del alto cedro y la plantaré. De sus ramas más altas arrancaré una tierna y la plantaré en la cima de un monte elevado; la plantaré en la montaña más alta de Israel; para que eche brotes y dé fruto y se haga un cedro noble. Anidarán en él aves de toda pluma, anidarán al abrigo de sus ramas. Y todos los árboles silvestres sabrán que yo soy el Señor, que humilla los árboles altos y ensalza los árboles humildes, que seca los árboles lozanos y hace florecer los árboles secos. Yo, el Señor, lo he dicho y lo haré.» Palabra de Dios 57 Tuve hambre y me diste de comer Salmo Responsorial: 91 R/. Es bueno dar gracias al Señor Es bueno dar gracias al Señor y tocar para tu nombre, oh Altísimo, proclamar por la mañana tu misericordia y de noche tu fidelidad. R/. El justo crecerá como una palmera,se alzará como un cedro del Líbano; plantado en la casa del Señor,crecerá en los atrios de nuestro Dios. R/. En la vejez seguirá dando fruto y estará lozano y frondoso, para proclamar que el Señor es justo,que en mi Roca no existe la maldad. R/. Segunda lectura Segunda a los Corintios 5,6-10 Pablo insiste hoy en el tema de la confianza. Confiamos en que cuando llegue el día de nuestro juicio seremos premiados, porque nuestras acciones son de amor y caridad ya que Cristo está en nuestras vidas y es quien anima esas acciones. Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios Siempre tenemos confianza, aunque sabemos que, mientras vivimos en el cuerpo, estamos desterrados, lejos del Señor. Caminamos guiados por la fe, sin ver todavía. Estamos, pues, llenos de confianza y preferimos salir de este cuerpo para vivir con el Señor. Por eso procuramos agradarle, en el destierro o en la patria. Porque todos tendremos que comparecer ante el tribunal de Cristo, para recibir el premio o el castigo por lo que hayamos hecho en esta vida. Palabra de Dios. Aleluya La semilla es la Palabra de Dios, el sembrador es Cristo, quien lo encuentra, vive para siempre. Evangelio, 4,26-34 El Reino de Dios, caridad de Dios derramada en nuestros corazones que nos mueve a vivir la comunión con El y entre nosotros y hacer en todo su voluntad, crece en nosotros desde la sencillez y se va desarrollando hasta dar frutos en abundancia. Sólo se necesita dejar que Dios lo realice en nosotros y a través de nosotros en cada momento y situación de nuestras vidas. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Marcos En aquel tiempo, Jesús dijo a la multitud: «El Reino de Dios se parece a lo que sucede cuando un hombre siembra la semilla en la tierra: que pasan las noches y los días, y sin que él sepa cómo, la semilla germina y crece; y la tierra, por sí sola, va produciendo el fruto: primero los tallos, luego las espigas y después los granos en las espigas. Y cuando ya están maduros los granos, el hombre echa mano de la hoz, pues ha llegado el tiempo de la cosecha.» Les dijo también: «¿Con qué compararemos el Reino de Dios? ¿Con qué parábola lo podremos representar? Es como una semilla de mostaza que, cuando se siembra, es la más pequeña de las semillas; pero una vez 58 Plan de Pastoral - Junio 2015 sembrada, crece y se convierte en el mayor de los arbustos y echa ramas tan grandes, que los pájaros pueden anidar a su sombra.» Y con otras muchas parábolas semejantes les estuvo exponiendo su mensaje, de acuerdo con lo que ellos podían entender. Y no les hablaba sino en parábolas; pero a sus discípulos les explicaba todo en privado. Palabra del Señor. Meditación La palabra confianza que se nos señala en la segunda lectura tiene muchas implicaciones, veamos dos definiciones que nos plantea el diccionario: “Esperanza firme que una persona tiene en que algo suceda, sea o funcione de una forma determinada”, “Seguridad, especialmente al emprender una acción difícil o comprometida”. Esperanza y seguridad son dos términos que acompañan a la confianza y que son imprescindibles en la vida del cristiano. Nuestro camino hacia la casa de Dios es un camino de subidas y bajadas, donde muchas veces no vemos nada, ni siquiera lo que habrá de venir al día siguiente, pero donde la certeza, de que nuestro Dios, el que dio su vida por nosotros y se entregó en una cruz y resucitó de entre los muertos, estará siempre a nuestro lado. Por eso buscamos agradarle, por eso somos capaces de venderlo todo y seguir su camino, sabiendo que todo lo de este mundo es poca cosa, comparado con Su Reino. Emprender una acción comprometida y firme es un reto en una sociedad donde todo es relativo, donde se promueve el tener por encima del ser humano, donde se valora al que tiene éxito profesional, más que al que es capaz de vivir según el evangelio, aún entre aquellos que dicen conocer al Señor. Muchas veces los cristianos somos criticados, nos consideran fanáticos, exagerados si nos ponemos a practicar la caridad hasta el extremo, como nos lo pide y enseña Jesús. Cuando eso sucede, debemos tener la seguridad de que estamos iniciando a dar frutos, que estamos agradando a Dios con nuestras actuaciones y por lo tanto seremos escándalo para el mundo. Es imposible mirar los planteamientos de Jesús desde la razón y comprenderlos si no hemos sido tocados en nuestros corazones por su amor infinito que lo cambia todo. ¿Cómo puede entenderse que algo tan pequeñito como una semilla de mostaza, sea luego el arbusto que de guarida a los pajaritos? ¿Cómo alguien que ha tenido una vida sin sentido y que ha hecho daño a otras personas, puede luego ser capaz de entregarse por sus hermanos en la caridad y la justicia? ¿De qué forma explicamos que nuestro tiempo delante de Dios es más valioso que el que empleamos haciendo las cosas consideradas más espectaculares? Todo esto solo es posible cuando Dios toca nuestras vidas y vuelve nuestras miradas hacia Su Reino de amor y caridad. Sin importar de qué tamaño es nuestra entrega, cómo estamos en nuestro camino a la santidad o qué tantas veces hemos caído, lo más importante es que hoy una vez más vendamos todo lo que tenemos por esa perla preciosa que es el Señor. Que nueva vez y con fuerzas renovadas, demos 59 Tuve hambre y me diste de comer ese sí a nuestro Dios, que nos promete un reino de justicia y verdad, donde no habrá más llanto ni pena, donde veremos su rostro y nos gozaremos con Él para siempre. Esa seguridad nos mantendrá el gozo profundo, nos ayudará a dar gracias cada día y nos hará pelear la buena batalla. Oración de los fieles Quien preside: Presentamos al Padre, nuestras necesidades, las de nuestras familias, comunidades y de todo el país. A cada petición respondemos: Padre, ayúdanos a dar frutos de caridad. 1.-Por el Papa Francisco, los Obispos, los sacerdotes, consagrados y consagradas y todos los laicos que formamos la Iglesia, para que demos los frutos de la caridad y manifestemos así el Reino de Dios. Oremos 2.-Por quienes gobiernan República Dominicana, para que den los frutos del Reino de caridad, de paz, de justicia, de desarrollo y de transparencia en todo lo que hacemos. Oremos. 3.-Por los más pobres que nosotros para que se abran al Reino de Dios y den sus frutos de amor y que encuentren en nosotros el amor de Dios hacia ellos. Oremos. 4.-Por nuestra comunidad, para que colaboremos con la obra de Dios en nosotros, demos los frutos de su Reino y sembremos amor, esperanza y caridad entre todas las personas con quienes nos relacionamos. Oremos. 5.-Por los muchachos y muchachas de nuestro país, para que respondan con generosidad a la llamada sembrada por Dios a la vida Consagrada y sacerdotal. Oremos. Quien preside: Padre de amor, tu has sembrado tu Reino en nosotros, haz que fieles y unidos a Ti demos sus frutos de caridad en favor de los más necesitados de nuestro pueblo. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. 15 Lunes Feria o Memoria Libre: Santa María Micaela del Santísimo Sacramento, Virgen Verde o Blanco Lectura de la segunda carta de san Pablo a los -Corintios 6, 1-10 Hermanos: Ya que somos colaboradores de Dios, los exhortamos a que no reciban en vano la gracia divina. Porque él mismo dice: En el tiempo favorable te escuché; en el día de la salvación te ayudé. Pues sepan que, este es el tiempo favorable, este es el día de la salvación. Por nuestra parte, a nadie damos motivo alguno para que pueda desprestigiar el ministerio; al contrario, en toda ocasión nos comportamos como ministros de Dios, con mucha constancia, sufriendo, pasando gran necesidad y angustias; soportando golpes, prisiones, revueltas, duros trabajos, noches sin dormir y días sin comer. Actuamos con corazón limpio, con conocimiento de las cosas de Dios, con paciencia, con bondad, consolados por el Espíritu Santo, con un amor sincero, apoyados en la 60 Plan de Pastoral - Junio 2015 palabra de verdad y en la fuerza de Dios; y en todo momento atacamos y nos defendemos con las armas que nos proporciona su fuerza salvadora. Unos nos alaban y otros nos deshonran; unos nos calumnian y otros nos elogian. Se nos considera impostores, aunque decimos la verdad; quieren ignorarnos, pero somos bien conocidos; estamos al borde de la muerte, pero seguimos con vida; nos castigan, pero sin llegar a matarnos; nos tienen por tristes, pero estamos siempre alegres; nos consideran pobres, pero enriquecemos a muchos; piensan que no tenemos nada, pero lo poseemos todo. Palabra de Dios Salmo Responsorial: 97 R/ “El Señor da a conocer su victoria” Canten al Señor un canto nuevo, porque ha hecho maravillas; su mano le ha dado la victoria, su santo brazo. R. El Señor hace pública su victoria, a la vista de las naciones muestra su salvación, ha recordado su amor y su fidelidad en favor de Israel. R. Toda la tierra ha visto la victoria de nuestro Dios. Aclamen al Señor, habitantes de toda la tierra, estallen de gozo, griten de alegría, canten. R. Lectura del santo evangelio según san Mateo 5, 38-42 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Han oído que se dijo: Ojo por ojo y diente por diente. Pero yo les digo que no enfrenten al que les hace mal; al contrario, a quien te abofetea en la mejilla derecha, preséntale también la otra; al que te demande para quitarte la túnica, dale también el manto; y al que te pida que lo acompañes mil pasos, ve con él dos mil. Da a quien te pida, y no des la espalda al que te pide prestado». Palabra del Señor. Meditación Dios nos ama infinitamente, su amor es eternamente misericordioso, y en Él lo tenemos todo. En su palabra Dios nos muestra cómo debe vivir el hombre que ama a Dios. Y es precisamente ese amor de Dios el que hace posible que podamos sonreír, ser felices, cuando el mundo te dice que no podemos. Es el amor de Dios actuando en nuestros corazones que hace posible transformar toda situación de dolor en alegría plena que hace que nos desprendamos de todo que entreguemos todo. ¿Y cómo es esto? ¿Es realmente posible? La respuesta es sí. Porque todo el que ha nacido de Dios vence al mundo. Sí, podemos sonreír y darle sentido a nuestra vida, si nuestro amor se concreta en hacer sonreír a los demás, en hacer que tenga sentido la vida de los demás, en ayudar a que no haya tantos motivos de tristeza en los demás. “da al que te pida”, nos dice Jesús en el Evangelio de hoy. La realidad Dominicana, la cantidad de personas necesitadas de lo más elemental, nos están pidiendo mucho, y podemos darles, no solo una limosna, sino nuestro apoyo, nuestra lucha, nuestra exigencia por cambiar esta realidad de miseria, violencia, corrupción e injusticia en que estamos metidos. En este mes de la CARIDAD, debemos 61 Tuve hambre y me diste de comer estar claros en qué nos pide la realidad Dominicana para ser caritativos y caritativas. Si optamos por escuchar a nuestro Señor, nos decidimos obedecerle, a perdonar como Él nos perdonó primero, si decidimos amar como Él nos amó primero, entonces estaremos honrando a Dios y declarando su victoria en nuestras vidas. Hoy, nuestro Amado Jesús quiere recordarnos el poder y la victoria del amor en toda circunstancia. Amar no es opcional, amar es un mandamiento de Dios, la caridad es EL MANDAMIENTO DE DIOS. Un mandamiento que nos libera, que nos reconcilia, que nos llena de alegría. El amor nos llena de esperanza y nos da su victoria sobre el mundo, aun cuando en el momento que estemos pasando no estemos viendo lo que quisiéramos ver. Si creemos que hemos nacido de Dios, si creemos que Dios nos hace nuevos, podremos abrir nuestro corazón a la alegría plena, a la confianza que sobrepasa todo entendimiento, a la fe sin límites, a la libertad de perdonar que nos sana. Dios nos ha hecho libres para decidir cómo responder. Hoy Dios te invita a que decidas amar por decisión, y convicción. Pero el amor práctico se llama caridad, y la caridad supone amar a Dios poniendo en práctica el amor desinteresado y radical por los hermanos y hermanas. No confundamos el amor y la caridad con el sentimentalismo. El Evangelio de hoy no puede estar más claro: respuestas concretas ante situaciones concretas de los más necesitados. Hermanos queridos amar es un mandamiento de Dios y es también una decisión en la que si optamos viviremos libres, alegres, fortalecidos y glorificaremos a Dios. 16 Martes Feria Verde Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 8, 1-9 Hermanos: Queremos hacerles saber la gracia que Dios ha concedido a las iglesias de Macedonia. Porque han sido muchos los sufrimientos con que han sido probadas, y sin embargo su alegría es tal que, a pesar de su extrema pobreza, han derrochado generosidad. Porque doy testimonio de que han contribuido según sus posibilidades y aún por encima de ellas; por propia iniciativa nos pedían con gran insistencia que les permitiéramos participar en esta ayuda a los creyentes. Superando incluso nuestras esperanzas, se entregaron ellos mismos primero al Señor y luego a nosotros, pues tal era la voluntad de Dios. Por eso hemos rogado a Tito que, ya que él la comenzó, sea también el quien lleve a feliz término esta obra de caridad entre ustedes. Ya que sobresalen en todo: en fe, en expresarse bien, en ciencia, en toda clase de preocupación por los demás y hasta en el cariño que les profesamos, sean también los primeros en esta obra de caridad. No digo esto como una orden, sino para que, viendo la preocupación de los demás, pueda yo comprobar la autenticidad de su amor. Pues ya conocen la generosidad 62 Plan de Pastoral - Junio 2015 de nuestro Señor Jesucristo, el cual, siendo rico, se hizo pobre por ustedes, para enriquecerlos con su pobreza.Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 145 R/.”Alaba, alma mía, al Señor” Alabaré al Señor mientras viva, cantaré para mi Dios mientras exista. R. Dichoso el que se apoya en el Dios de Jacob y pone su esperanza en el Señor, su Dios, que hizo los cielos y la tierra, el mar y cuanto contiene, el Dios que mantiene por siempre su fidelidad. R. El hace justicia a los oprimidos y da pan a los hambrientos. El Señor da la libertad a los cautivos. R. El Señor abre los ojos a los ciegos, el Señor levanta a los humillados, el Señor ama a los justos, el Señor protege a los extranjeros. R. Lectura del santo evangelio según san Mateo 5, 43-48 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Han oído que se dijo: Ama a tu prójimo y odia a tu enemigo. Pero yo les digo: Amen a sus enemigos y recen por quienes los persiguen. Así serán dignos hijos de su Padre del cielo, que hace salir el sol sobre buenos y malos, y manda la lluvia sobre justos e injustos. Porque, si aman a quienes los aman, ¿qué recompensa merecen? ¿No hacen también eso los que recaudan impuestos para Roma? Y si saludan solo a sus hermanos, ¿qué hacen de más? ¿No hacen lo mismo los paganos? Ustedes, sean perfectos, como su Padre celestial es perfecto». Palabra del Señor. Meditación Dios nos indicaba en las lecturas de ayer que amar es el mandamiento más importante y nos invitaba a decidirnos por el camino del amor práctico que es la caridad, para experimentar la felicidad verdadera. El pueblo de Dios está enfrentando muchas situaciones. Parecería que son más los desafíos que debemos enfrentar hoy, sin embargo son los mismos de ayer, de hoy y serán los mismos de siempre. Lo que hace diferente al hombre Cristiano frente al resto del mundo, que no ha experimentado el amor de Dios, es su reacción frente a quienes le persiguen, frente a sus enemigos. Amar a quienes nos aman siempre será fácil, y surgirá de manera espontánea; el gran reto es amar con mirada de misericordia a quienes nos hacen daño. Responder el mal con el bien es la invitación divina. Ver el rostro de Dios y poder cantar sus maravillas es la máxima aspiración del cristiano. El examen del amor es un cuestionamiento diario, continuo que nos lleve a vivir la libertad de espíritu y, con ello, nos auxilie para permanecer en estado de gracia. Las dos lecturas de hoy están centradas en el lema del Plan Pastoral para el mes de Julio: La caridad. Los hermanos y hermanas de Corinto piden poder participar activamente en la colecta y en la ayuda que necesitan los creyentes de Jerusalén; no solo entregan bienes, sino que 63 Tuve hambre y me diste de comer se entregan ellos mismos. Y esa es la caridad cristiana, ir más allá de la limosna, estar con la persona en las buenas y en las malas. Y ese es el tema del Evangelio de hoy, no se trata de querer al cercano y a quien te quiere, sino de estar atento a toda persona. El amor cristiano no se reduce a dar algo, sino a darse la propia persona, a estar preocupados por la situación de los demás y sobre todo de la situación de quienes están peor. ¿Cómo es posible que en República Dominicana haya tantas personas pasando hambre? Hambre, sí hambre. Y ponemos lo de hambre porque es lo más extremo, pero es que si tienen carencia de los alimentos, es que les falta todo lo demás para poder llevar una vida digna. ¿Qué hacemos los católicos y católicas por esos hermanos y hermanas dominicanos que están en esta situación? Lo que hacemos es seguir con más interés la campaña política de los partidos que la situación social del país; o lo que es peor, tal vez estemos siguiendo con más interés la novela de la televisión, que las noticias de la realidad nacional… Caridad, caridad práctica es preocuparse por buscar una solución a esta realidad del país. El Señor, el Dios amor, nos conceda la virtud de la caridad para tratar de imitarle un poco más en su amor ilimitado para con nosotros. 17 Miércoles Feria Verde Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 9, 6-11 Hermanos: Tengan esto presente: el que siembra con miseria, miseria cosecha; el que siembra generosamente, generosamente cosecha. Que cada uno dé según su conciencia, no de mala gana ni como obligado, porque Dios ama al que da con alegría. Dios, por su parte, tiene poder para colmarlos de dones, de modo que teniendo siempre y en todas las cosas lo suficiente, les sobre incluso para hacer toda clase de obras buenas. Así lo dice la Escritura: Distribuyó con abundancia sus bienes a los pobres, su generosidad permanece para siempre. El que proporciona semilla al que siembra y pan para que se alimente, les proporcionará y les multiplicará la semilla y hará crecer los frutos de su generosidad. Enriquecidos así, podrán ser generosos en todo, generosidad que por nuestra mediación, se convertirá en acción de gracias a Dios. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 111 R/. “Dichoso quien teme al Señor.” Dichoso el que respeta al Señor y se complace en sus mandamientos. Su descendencia será poderosa en la tierra, la raza de los hombres buenos será bendecida. R. Abundarán las riquezas en su casa, su rectitud permanece para siempre. Como luz para los buenos brilla en la oscuridad el que es compasivo, misericordioso y recto. R. 64 Plan de Pastoral - Junio 2015 Da sin medida al necesitado, su rectitud permanece para siempre, y mantiene con dignidad su frente en alto. R. Lectura del santo evangelio según san Mateo 6, 1-6.16-18 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Cuidado con practicar las buenas obras para ser vistos por la gente, porque su Padre del cielo no los recompensará. Por eso, cuando des limosna, no vayas pregonándolo, como hacen los hipócritas en las sinagogas y en las calles, para que los alaben los hombres. Les aseguro que ya han recibido su recompensa.Tú, cuando des limosna, que no sepa tu mano izquierda lo que hace tu derecha. Así tu limosna quedará en secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Cuando recen, no sean como los hipócritas, a quienes les gusta rezar de pie en la sinagogas y en las esquinas de las plazas para que los vea la gente. Les aseguro que ya han recibido su recompensa. Tú, cuando reces, entra en tu cuarto, cierra la puerta y reza a tu Padre, que está en lo secreto; y tu Padre, que ve en lo secreto, te recompensará. Cuando ayunen, no anden tristes como los hipócritas, que desfiguran su rostro para que la gente vea que ayunan. Les aseguro que ya han recibido su recompensa.Tú, cuando ayunes, perfúmate la cabeza y lávate la cara, de modo que nadie note tu ayuno, sino tu Padre, que está en lo escondido. Y tu Padre, que ve hasta lo más escondido, te recompensará».Palabra del Señor. Meditación Jesús, al inicio del Evangelio de Mateo (6,1-6) nos habla de lo que es justo para Dios, nos da una forma de agradar al Padre por medio de la humildad, sacrificio y amor a Él en lo profundo de nuestro corazón. Cuántas veces nosotros caemos en hacer cierto tipo de cosas que nos cuestan, como: la limosna, el ayuno, la caridad, etc… Y de mala manera lo hacemos para ser vistos o exaltados por nuestros amigos, familiares o gente cercana a nosotros de manera hipócrita. Pablo en la primera lectura nos da una sentencia muy importante sobre estos actos que aprovechamos para nuestra vanagloria: “Que cada uno dé conforme a lo que ha resuelto en su corazón, no de mala gana o por la fuerza, porque Dios ama al que da con alegría”. También Jesús en el evangelio extiende este llamado a la justicia y el agradar a Dios con nuestra caridad. Esto nos lleva a reflexionar si: ¿estamos dando nuestra caridad con el corazón para agradar a Dios o solo para quedar bien?, con nuestra oración, ¿estamos orando de corazón a Dios, o solo para ser vistos en la iglesia?, en nuestro ayuno, ¿estamos ayunando como sacrificio agradable a Dios, o para que los demás vean que estamos sufriendo por causa de ayunar? Las lecturas son continuación a las leídas ayer, y el tema es también complementario. Recordemos que los fieles de Corinto han pedido ser incluídos en el aporte para la colecta en favor de los creyentes de Jerusalén 65 Tuve hambre y me diste de comer que lo están pasando muy mal. Pablo les dice que: “el que siembra con miseria, miseria cosecha; el que siembra generosamente, generosamente cosecha”. Y esto va para nosotros y nosotras. ¿Qué estamos sembrando, miseria o generosidad? Muchos y muchas podemos decir que tenemos poco y por tanto no podemos dar mucho dinero o alimentos para ayudar a los más necesitados; en ese aspecto nos acordamos de la donación de la pobre viuda, “dio generosamente porque dio cuanto tenía”; pero tenemos mucho más que dar, tenemos tiempo, compromiso, acompañamiento, exigencias ante las autoridades, participación en campañas y asociaciones, debemos tomar conciencia, tenemos los votos para saber a quién elegir… debemos darnos. La Caridad nos lleva a hacerlo sin esperar recompensa, como decíamos más arriba, y como nos lo dice el Evangelio de hoy. 18 Jueves Feria Verde Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 11, 1-11 Ojalá me tolerasen unos cuantos desvaríos; bueno, ya sé que me los toleran. Tengo celos de ustedes, los celos de Dios; quise desposarlos con un solo marido, presentándolos a Cristo como una virgen intacta. Pero me temo que, igual que la serpiente sedujo a Eva con su astucia, se pervierta su modo de pensar y abandone la entrega y fidelidad a Cristo. Se presenta cualquiera predicando un Jesús diferente del que yo predico, les propone un espíritu diferente del que recibieron, y un Evangelio diferente del que aceptaron, y lo toleran tan tranquilos. ¿En qué soy yo menos que esos superapóstoles? En el hablar soy inculto, de acuerdo; pero en el saber no, como se lo he demostrado siempre y en todo. ¿Hice mal en abajarme para elevarlos a ustedes? Lo digo porque les anuncié de balde el Evangelio de Dios. Para estar a su servicio, tuve que saquear a otras Iglesias, aceptando un subsidio; mientras estuve con ustedes, aunque pasara necesidad, no me aproveché de nadie; los hermanos que llegaron de Macedonia proveyeron a mis necesidades. Mi norma fue y seguirá siendo no serles gravoso en nada. Lo digo con la verdad de Cristo que poseo; nadie en toda Acaya me quitará esta honra. ¿Por qué?, ¿porque no los quiero? Bien lo sabe Dios. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 110. R/. Justicia y verdad son las obras de tus manos, Señor Doy gracias al Señor de todo corazón, en compañía de los rectos, en la asamblea. Grandes son las obras del Señor, dignas de estudio para los que las aman. R/. Esplendor y belleza son su obra, su generosidad dura por siempre; ha hecho maravillas memorables, el Señor es piadoso y clemente. R/. Justicia y verdad son las obras de sus manos, todos sus preceptos merecen confianza: son estables para siempre jamás, se han de cumplir con verdad y rectitud. R/ 66 Plan de Pastoral - Junio 2015 Lectura del santo evangelio según san Mateo 6,7-15 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «Cuando recen, no usen muchas palabras, como los gentiles, que se imaginan que por hablar mucho les harán caso. No sean como ellos, pues su Padre sabe lo que les hace falta antes que lo pidan. Ustedes recen así: “Padre nuestro del cielo, santificado sea tu nombre, venga tu reino, hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo, danos hoy el pan nuestro de cada día, perdónanos nuestras ofensas, pues nosotros hemos perdonado a los que nos han ofendido, no nos dejes caer en la tentación, sino líbranos del Maligno.”Porque si perdonan a los demás sus culpas, también su Padre del cielo les perdonará a ustedes. Pero si no perdonan a los demás, tampoco su Padre perdonará sus culpas.»Palabra del Señor. Meditación El día de hoy, San Mateo nos da una buena explicación previa al Padre Nuestro de cómo debe ser nuestra forma de rezar, la oración no ha de ser una exhibición ante los hombres, sino una verdadera relación de amor con Dios. Una forma equivocada de rezar es la palabrería o la cita de fórmulas programadas que mientras se recitan, nuestro espíritu esta en todo, menos en lo que se está diciendo. No estamos en contra de las formas repetitivas, sino en el hacerlo sin darnos cuenta. ¿Cuántos millones de creyentes se han santificado con esa oración, con ese rezo de repetir y repetir? Muchos, muchísimos millones de personas se han santificado así, pero cuando repetía la oración, se daban cuenta qué decían, y además sentían la presencia de Dios con ellos en ese rezo. Pero para nosotros y nosotras, la oración por excelencia es el Padre nuestro, y esta es una de las oraciones que debemos repetir y repetir hasta cansarnos y hasta “cansar a Dios” El Padre Nuestro resume cómo debe ser nuestra oración ante el Padre, lo detallamos de forma sencilla de la siguiente manera: 1-Padre Nuestro que estás en el cielo: en esta parte es donde invocamos a Dios. A Dios le podemos llamar Padre. Padre, pero no padre mío, sino padre nuestro, y esto nos hace hermanos y hermanas. 2-Santificado sea tu Nombre: Exaltamos el nombre de Dios, así le damos el valor de pronunciar su nombre, así le alabamos. 3-Venga a nosotros tu reino: Una petición primordial, reconocemos que solo donde Dios está la vida tiene sentido, nuestra prioridad es vivir en su reino. 4-Hágase tu voluntad en la tierra como en el cielo: Queremos que se cumpla la voluntad de Dios siempre, ya sea aquí en la tierra o en el cielo. 5-Danos hoy nuestro pan de cada día: él sabe de nuestras necesidades esenciales, Dios las tiene en cuenta y se preocupa por nosotros. Ese danos es para todos, el Señor nos da el alimento para compartirlo, para que llegue a todos y todas. 6-Perdona nuestras ofensas, como nosotros también perdonamos a 67 Tuve hambre y me diste de comer los que nos ofenden: somos pecadores, Dios nos dice que las ofensas solo se superan con el perdón. Recordemos que Jesús insiste en este tema al acabar el Padre Nuestro, como para que lo tengamos en cuenta: la medida del perdón de Dios es el perdón que demos a los demás. 7-No nos dejes caer en tentación: pedimos fortaleza a Dios ante nuestras pruebas y dificultades de las tentaciones del maligno. 8-Y líbranos del mal: le pedimos a Dios que queremos ser salvados, llevados por el camino del bien. 19 Viernes Feria o Memoria Libre: San Romualdo, Abad Verde o Blanco Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 11, 18. 21b-30 Hermanos: Ya que otros presumen de cosas humanas, yo también voy a presumir de ellas. Porque de cualquier cosa que alguien presume, aunque sea una insensatez lo que digo, también yo puedo presumir. ¿Ellos presumen que son hebreos? Yo también lo soy. ¿De que son israelitas? Yo también lo soy. ¿De que son descendientes de Abrahán? Yo también lo soy. ¿De que sirven a Cristo? Es una locura decirlo, pero yo lo sirvo más: yo les gano en fatigas y cárceles; y les gano por mucho en azotes y en peligro de muerte. Cinco veces me han dado los judíos los treinta y nueve azotes. Otras tres veces me han azotado con varas y una vez me han apedreado. He naufragado tres veces y me he pasado un día y una noche perdido en el mar. He viajado sin descanso y me he visto en peligro en los ríos y entre ladrones; peligros por parte de los de mi raza y por parte de los paganos; peligros en las ciudades y en despoblado, en el mar y entre falsos hermanos. He andado muerto de cansancio; he pasado muchas noches sin dormir, con hambre y sed; muchos días sin comer, con frío y sin ropa. Además de éstas y otras cosas, pesa sobre mí diariamente la preocupación por todas las comunidades cristianas. ¿Quién se enferma en ellas sin que yo no me enferme? ¿Quién cae en pecado sin que yo no me consuma de dolor? Si se trata de presumir, presumiré de mis debilidades. Palabra de Dios Salmo Responsorial: 33 R/ “El Señor libra a los justos de todas sus angustias.” Bendigo al Señor a todas horas, no cesará mi boca de alabarlo. Me siento orgulloso del Señor, que se alegre su pueblo al escucharlo. R. Proclamemos la grandeza del Señor y alabemos todos juntos su poder. Cuando acudí al Señor, me hizo caso y me libró de todos mis temores. R. Confía en el Señor y saltarás de gusto, jamás te sentirás decepcionado, porque el Señor escucha el clamor de los pobres y los libra de todas sus angustias. R. Lectura del santo evangelio según san Mateo 6, 19-23 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «No acumulen ustedes tesoros en la tierra, donde la polilla y el moho los destruyen, donde los 68 Plan de Pastoral - Junio 2015 ladrones perforan las paredes y se los roban. Más bien acumulen tesoros en el cielo, donde ni la polilla ni el moho los destruyen, ni hay ladrones que perforen las paredes y se los roben; porque donde está tu tesoro, allí también está tu corazón. Tus ojos son la luz de tu cuerpo; de manera que, si tus ojos están sanos, todo tu cuerpo tendrá luz. Pero si tus ojos están enfermos, todo tu cuerpo tendrá oscuridad. Y si lo que en ti debería ser luz, no es más que oscuridad, ¡qué negra será tu propia oscuridad!»Palabra del Señor Meditación Para nadie es un secreto que vivimos en uno de los tiempos de mayor consumismo que ha existido. Hace unos años salió al aire un programa de televisión titulado: “Acumuladores”. Recuerdo la pena con que lo vi. No podía creer cuan lejos puede llegar el hombre por el deseo de tener, tener, tener. El síndrome de acaparador compulsivo es un trastorno psicológico caracterizado por la tendencia a la acumulación de artículos u objetos en forma excesiva, incluso si los objetos no tienen valor, son peligrosos o insalubres. Este deseo de acumular es una consecuencia de lo que vemos en todos lados, un constante bombardeo publicitario, ya no solo en las calles, televisión, la prensa, sino en internet y todas las redes sociales a las que tenemos acceso. Nos llenamos los ojos de querer tener todo lo que el mundo nos ofrece: zapatos, ropa de calidad, accesorios, carteras, maquillaje, la última tecnología, los mejores artículos que nadie tiene o peor aún, queremos esas cosas que ya todos tienen y aún yo no tengo. Esta es una realidad latente en nuestra sociedad moderna. Sin embargo, Jesús pareciera adelantarse a nuestra época y habla muy llanamente a sus discípulos sobre este deseo de adquirir y guardar riquezas materiales: “No acumulen ustedes tesoros en la tierra” les decía, y de una forma más profunda les explica que no tiene sentido acumular en esta tierra donde no tenemos nada seguro; donde el moho destruye las cosas nuevas; donde los ladrones se llevan a su paso todo lo que encuentran y se roban lo que tardamos años en construir. Jesús nos hace un llamado a la conciencia y nos pregunta: ¿en qué estoy poniendo todo mi esfuerzo de trabajo diario?, ¿me estoy dejando llevar por el mundo y la moda, adquiriendo cosas materiales que pienso son necesarias para mi vida? O, de lo mucho o poco que tengo, ¿lo estoy compartiendo con los demás, con aquellos que tienen menos posibilidades económicas que yo?¿Estoy siendo caritativo compartiendo con los demás? Esta lectura me lleva a reflexionar sobre mis estándares de vida y preguntarme: ¿cuál es mi tesoro y dónde lo tengo? ¿Está aquí en la tierra, en mi casa, en mis bienes, mi negocio? O ¿está acumulándose en el cielo cada vez que comparto con los que tienen hambre,atiendo a los huérfanos, a los viudos, a los que están sin trabajo? ¿me preocupo por combatir los males del país? 69 Tuve hambre y me diste de comer Que Dios nos ayude a no ser “acumuladores” de tesoros en la tierra. Que no me pase desapercibida la necesidad de mi hermano que vive a mi lado, de quien me hace el café en el trabajo, de quien limpia mi hogar, del niño que tiene hambre en la calle, de quien vive en el conuco vecino… y así mi corazón estará junto con el de Dios, llevando luz y esperanza a donde no la hay. 20 Sábado Feria Verde Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios 12, 1-10 Hermanos: Si hace falta presumir, aunque nada se saca con ello, hablaré de las visiones y revelaciones del Señor. Sé de un cristiano que hace catorce años fue arrebatado hasta el tercer cielo; si fue con el cuerpo o sin el cuerpo, no lo sé, Dios lo sabe. Lo cierto es que ese hombre fue arrebatado al paraíso; si fue con el cuerpo o sin el cuerpo, no lo sé, Dios lo sabe, y oyó palabras misteriosas que el hombre no puede pronunciar. De ese hombre sí podría gloriarme; pero en cuanto a mí, solo me gloriaré de mis debilidades. Si pretendiera, pues, gloriarme, no sería insensato, diría la pura verdad. Pero me abstengo de ello, no sea que alguien se forme de mí una idea superior a lo que en mí ve o de mí escucha. Y por eso, para que yo no me llene de soberbia por la sublimidad de las revelaciones que he tenido, llevo una espina clavada en mi carne, un enviado de Satanás, que me abofetea para humillarme. Tres veces le he pedido al Señor que me libre de esto, pero él me ha respondido: «Te basta mi gracia, porque mi poder se manifiesta en la debilidad». Así pues, de buena gana prefiero gloriarme de mis debilidades, para que se manifieste en mí el poder de Cristo. Por eso me alegro de las debilidades, los insultos, las necesidades, las persecuciones y las dificultades que sufro por Cristo, porque cuando soy más débil, soy más fuerte. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 33 “Gusten y vean qué bueno es el Señor.” Junto a aquellos que temen al Señor el ángel del Señor acampa y los protege. Haz la prueba y verás qué bueno es el Señor; dichoso el que se refugia en él. R. Que amen al Señor todos sus fieles, pues nada faltará a los que lo aman. El rico empobrece y pasa hambre; a quien busca al Señor, nada le falta. R. Escúchame, hijo mío: voy a enseñarte cómo amar al Señor, para que puedas vivir y disfrutar la vida. R. Lectura del santo evangelio según san Mateo 6, 24-34 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «Nadie puede servir a dos amos, porque odiará a uno y amará al otro, o bien obedecerá al primero y no hará caso al segundo. En resumen, no pueden ustedes servir a Dios y al dinero. Por eso les digo que no se preocupen por su vida, pensando qué 70 Plan de Pastoral - Junio 2015 comerán o con qué se vestirán. ¿Acaso no vale más la vida que el alimento, y el cuerpo más que el vestido? Miren las aves del cielo, que ni siembran, ni cosechan, ni guardan en graneros y, sin embargo, el Padre celestial las alimenta. ¿Acaso no valen ustedes más que ellas? ¿Quién de ustedes, a fuerza de preocuparse, puede prolongar su vida siquiera un momento? ¿Y por qué se preocupan del vestido? Miren cómo crecen los lirios del campo, que no trabajan ni hilan. Pues bien, yo les aseguro que ni Salomón, en el esplendor de su gloria, se vestía como uno de ellos. Y si Dios viste así a la hierba del campo, que hoy florece y mañana es echada al horno, ¿no hará mucho más por ustedes, hombres de poca fe? No se inquieten, pues, pensando: ¿Qué comeremos o qué beberemos o con qué nos vestiremos? Los que no conocen a Dios se desviven por todas estas cosas; pero el Padre celestial ya sabe que ustedes tienen necesidad de ellas. Por consiguiente, busquen primero el Reino de Dios y su justicia, y todas estas cosas se les darán por añadidura. No se preocupen por el día de mañana, porque el día de mañana traerá ya sus propias preocupaciones. A cada día le bastan sus propios problemas».Palabra del Señor. Meditación En el evangelio de hoy Jesús nos regala una de las promesas más hermosas y esperanzadoras que tiene el Nuevo Testamento. Va muy acorde a la realidad de un mundo que nos llena de inseguridad por el futuro, de si me despedirán del trabajo, si tendré qué comer o con qué ropa me vestiré, etc. Jesús nos recuerda y nos calma diciéndonos que no nos preocupemos por estas cosas, pues para el Padre Dios nosotros tenemos un valor mayor que el de las aves del cielo, a quienes Él es quien le da de comer. Muchos de nosotros tendemos a preocuparnos de más, y si eres como yo, muchas veces vives preocupado por el futuro y lo que esté traerá, el temor y la incertidumbre te paralizan e impiden vivir con alegría el día a día. Jesús hoy no solo te habla con amor, sino que nos interpela por la falta de fe que mostramos al inquietarnos por ese: “qué pasará si…”, “qué vamos a hacer si…”. Dios Nos llama a una conversión más profunda, a confiar en el Padre celestial que ya conoce tú necesidad mucho antes de que hayamos incluso elevado una oración pidiéndole estas cosas. Hoy es un día en el que Dios te llama a abandonarte completamente en Él y a buscarle a Él antes que buscar o poner tu confianza en cualquier cosa. No seamos de los que van a misa y rezan el rosario muchas veces, de los que hacen sus oraciones diarias… y cuando llega la preocupación de “qué será de mí el día de mañana”, mi fe se tambalea y se derrumba. Cuando le permita a Dios reinar en mi vida, en mi familia o en mi matrimonio, cuando lo busque primero a Él y a su justicia y vaya a sus pies; cuando me preocupe de la caridad con los demás, de ayudar a solucionar sus preocupaciones y necesidades,entonces, y solo entonces, toda mi ansiedad se irá, toda mi inseguridad por el futuro y si mis necesidades básicas o las de mis hijos estarán cubiertas, Dios las tomará en sus manos y les dará otro sentido, otra orientación; y pase lo que pase, se realice como 71 Tuve hambre y me diste de comer yo quiera o como no quiero, no me hará perden la fe ni la confianza, sino que tendrá sentido en la decisión de seguirle en las buenas y en las malas. Él salmo de hoy también nos invita a abandonarnos y hacer la prueba, retarnos a nosotros mismos y comprobar lo bueno que es Dios. Nos regala la promesa de que sus ángeles nos protegerán y que nada nos faltará a aquellos que le amamos. 21 XII Domingo del Tiempo Ordinario IV Semana Liturgia de las Horas Verde 29ª Aniversario de la Ordenación Presbiteral de Mons. Julio César Corniel Amaro, Obispo de Puerto Plata La caridad de Cristo nos apremia y nos fortalece en el mar de este mundo Orientaciones para la Celebración Se puede poner una barca en un lugar visible, bien sea hecha de papel, o dibujada. Llevar una imagen de Cristo. Poner signos del mar y signos del miedo. Llevar el la procesión de entrada unos signos de interogación muy grandes y que vayan pasando entre los participantes en la celebración. Monición ambiental Hermanos y hermanas: Cada Domingo nos reune el Señor para que escuchemos su Palabra y junto con El demos gracias al Padre por su gran caridad con nosotros al enviarlo a El, para que nos quitara el miedo a la muerte que nos encadena y no deja que desarrollemos el Reino de Dios. En la Palabra de este Domingo aparece el mar como un lugar con grandes tormentas; como las que tiene nuestra vida. Ante esas tormentas podemos tener miedo, morirnos de miedo y no hacer nada; o podemos confiar en que Dios es más fuerte que las tormentas y los miedos, agarrarnos de Él y enfrentar la situación con su ayuda. Venimos a la Celebración a llenarnos de la fuerza suficiente como para enfrentar la vida y, desde la caridad, ayudar a dar respusta a los problemas de los demás. Iniciemos la Celebración poniéndonos de pie para recibir a Cristo que viene a presidirla a través de su ministro. Primera Lectura, Job 38,1.8-11 Como a Job que se queja por sus grandes problemas y sufrimientos Dios le responde con gran caridad presentándole su grandeza y que confíe más y solo en su poder amoroso. Escuchemos. Lectura del libro de Job El Señor habló a Job desde la tormenta: «¿Quién cerró el mar con una puerta, cuando salía impetuoso del seno materno, cuando le puse nubes 72 Plan de Pastoral - Junio 2015 por mantillas y nieblas por pañales, cuando le impuse un límite con puertas y cerrojos, y le dije: “Hasta aquí llegarás y no pasarás; aquí se romperá la arrogancia de tus olas”?» Palabra de Dios. Salmo responsorial: 106 R/. “Den gracias al Señor, porque es eterna su misericordia” Entraron en naves por el mar, comerciando por las aguas inmensas. Contemplaron las obras de Dios, sus maravillas en el océano. R/. Él habló y levantó un viento tormentoso, que alzaba las olas a lo alto; subían al cielo, bajaban al abismo, el estómago revuelto por el marco. R/. Pero gritaron al Señor en su angustia, y los arrancó de la tribulación. Apaciguó la tormenta en suave brisa, y enmudecieron las olas del mar. R/. Se alegraron de aquella bonanza, y él los condujo al ansiado puerto. en gracias al Señor por su misericordia, por las maravillas que hace con los hombres. R/. Segunda lectura, Segunda a los Corintios 5,14-17 A Pablo le apremia, es decir, le apura y le activa, el amor, la caridad de Cristo. Y eso debe movernos a nosotros y nosotras. Si queremos ser novedad en el mundo que vivirmos, llevemos a la práctica el amor de Cristo convirtiéndolo en caridad para con los demás. Lectura de la segunda carta de san Pablo a los Corintios Nos apremia el amor de Cristo, al considerar que, si uno murió por todos, todos murieron. Cristo murió por todos, para que los que viven ya no vivan para sí, sino para el que murió y resucitó por ellos. Por tanto, no valoramos a nadie según la carne. Si alguna vez juzgamos a Cristo según la carne, ahora ya no. El que es de Cristo es una criatura nueva. Lo antiguo ha pasado, lo nuevo ha comenzado.Palabra de Dios Aleluya Lc.7-16 Un gran profeta ha surgido entre nosotros. Dios ha visitado a su Pueblo Evangelio, San Marcos 4,35-40 Como hizo con los discípulos de ayer también Jesús nos dice a nosotros y nosotras ¿por qué son tan cobardes?. La fe en El nos libera del miedo a la muerte que nos impide vivir la caridad, ya que nos centramos en nuestras propias dificultades y necesidades personales y nos olvidamos de las de los demás, de las comunitarias y de las del país. Escuchemos. Lectura del santo evangelio según san Marcos Un día, al atardecer, dijo Jesús a sus discípulos: «Vamos a la otra orilla.» Dejando a la gente, se lo llevaron en barca, como estaba; otras barcas lo acompañaban. Se levantó un fuerte huracán, y las olas rompían contra la barca hasta casi llenarla de agua. Él estaba a popa, dormido sobre un almohadón. Lo despertaron, diciéndole: «Maestro, ¿no te importa que nos hundamos?» 73 Tuve hambre y me diste de comer Se puso en pie, increpó al viento y dijo al lago: «¡Silencio, cállate!» El viento cesó y vino una gran calma. Él les dijo: «¿Por qué son tan cobardes? ¿Aún no tienen fe?» Se quedaron espantados y se decían unos a otros: «¿Pero quién es este? ¡Hasta el viento y las aguas le obedecen!» Palabra del Señor. Meditación La palabra de Dios de hoy nos habla de tormentas, de sustos, miedos y de grandes prodigios. Y nos habla también de que Dios parece dormido. En nuestras vidas tenemos momentos o situaciones que nos abruman, nos agotan y nos llenan de frustraciones que son difíciles de superar, ya sea, en nuestra familia, con nuestro/a esposo/a, con nuestros hijos, o cualquier otro familiar con el que hemos fallado o nos han fallado a nosotros; en lo económico, no tengo trabajo, no gano lo suficiente, tengo mucha presión, me pagan poco por el trabajo, mi tierra no produce suficiente para sacar adelante la familia; en la vida comunitaria y parroquial, no me llevo bien con los hermanos, me siento rechazado, no cumplo con los sacramentos;estoy competamente despreocupado por hacer algo en bien del país, de la comunidad; me cierro en mí mismo, en mí misma, a lo sumo me preocupo por la familia… entre tantas otras cosas que nos pueden quitar la paz y fijar nuestra mirada lejos del Padre. La Palabra de Dios de hoy nos dice que hay alguien más fuerte que todas esas dificultades. El libro de Job habla de Dios, de Javhé que están por encima de las tormentas marinas; y el evangelio nos presenta a Cristo superando las dificultades del mar. Hoy día muchas personas piensan que Dios no existe o que está dormido porque hay demasiados problemas en el mundo y Él no parece hacer nada para resolverlos. Ante estos interrogantes de tanta gente nos toca a los cristianos responderlos. Y algo sí podemos responder Primero, con respecto a nosotros y nosotras los creyentes, eso de que Cristo parezca dormido no será que a Dios no le preocupan tanto nuestras inquietudes y que le preocupan más otras cuestiones. ¿No será que a Dios le preocupa más nuestra “tranquilidad”, nuestro no complicarnos, que esas inquitudes que tanto nos aflijen? ¿No será que a Dios le preocupa más nuestra pereza que nuestro miedo? ¿no será que a Dios le preocupa más nuestro conformismo, resignación-paciencia que nuestros miedos? Por otra parte, no podemos olvidarnos que somos la presencia de Dios en nuestro mundo y que la mayoría de las respuestas que esperan de Dios nos toca darlas a nosotros y nosotras con la vida, las actitudes, el testimonio y el compromiso de la caridad y la justicia. San Pablo nos ha dicho en la lectura de hoy: “El que es de Cristo es una criatura nueva. Lo antiguo ha pasado, lo nuevo ha comenzado”. El mundo nuevo que esperamos, y que el mismo “mundo” espera, nos toca construirlo a nosotros y nosotras, comenzando por ser criaturas nuevas en Cristo. Es tiempo de revisarnos si estamos abiertos a la novedad o preferimos seguir con lo de siempre, con nuestras seguridades. Necesitamos despertar a Cristo que vive en nosotros, en la comunidad, en la sociedad, en la realidad actual, y despertarlo con nuestra vida nueva, 74 Plan de Pastoral - Junio 2015 nuestra vida de alegría, testimonio, compromiso. No podemos olvidarnos de los problemas personales y familiares, pero ellos no pueden alejarnos del compromiso en ayudar a solucionar los problemas de los demás y de la sociedad. Oración de los fieles Quien preside: Presentamos al padre Dios nuestras ilusiones y esperanzas y también las de la familia, la comunidad y el país. A cada oración respondemos: Padre, haznos valientes en la caridad 1.- Por la Iglesia, la barca de Pedro, para que guiada, le apremie la caridad de Cristo y llena de su poder amoroso enfrente todas las tormentas que impidan que crezca el Reino de Dios. Oremos. 2.- Por quienes gobiernan la República Dominicana, para que se enfrenten sin miedo a quienes provocan, defienden o permiten la violencia, la impunidad, la corrupción y la miseria. Oremos. 3.- Por quienes están sufriendo por divesos motivos, por quienes se sienten angustiados o angustiadas, por quienes no ven salida a su situación, para que encuentren en el Señor la valentía para solucionar sus problemas, y que nosotros y nosotras contribuyamos para ser parte de esa solución. Oremos. 4.- Por todos nosotros y nosotras, para que despertemos al Señor que está en nuestro interior, y Él nos haga despertar de nuestra comodidad e indiferencia ante las sitauciones del país y lo hagamos presente en las personas que más lo necesitan. Oremos. 5.- Por los Consagrados y Consagradas de nuestro país, para que la caridad de Cristo les fortalezca y apremie en las tormentas de la vida y sepan manifestar a los necesitados la caridad de Cristo. Oremos Quien preside: Padre todopoderoso y amoroso quítanos el miedo que nos impide amarte y amar a los hermanos y hermanas. Haz crecer en nosotros tu caridad que nos impulse en medio de las tormentas del mar de este mundo a manifestar tu Reino en nuestra sociedad. Por Jesucristo nuestro Señor. 22 Lunes Feria o Memoria Libre: San Paulino de Nola, Obispo, o San Juan Fisher, Obispo y Santo Tomás Moro, Patrono de los políticos, Mártires Verde, Blanco o Rojo 24ª Aniversario de la Ordenación Episcopal de Mons. José Dolores Grullón Estrella, Obispo de la Diócesis de San Juan de la Maguana 47ª Aniversario de la Ordenaciòn Presbiteral de Mons. Gregorio Nicanor Peña Rodríguez, Obispo de Nuestra Señora de la Altagracia Lectura del libro del Génesis 12,1-9 En aquellos días, el Señor dijo a Abrán: «Sal de tu tierra y de la casa de tu padre, hacia la tierra que te mostraré. Haré de ti un gran pueblo, te bendeciré, haré famoso tu nombre, y será una bendición. Bendeciré a los que 75 Tuve hambre y me diste de comer te bendigan, maldeciré a los que te maldigan. Con tu nombre se bendecirán todas las familias del mundo.» Abrán marchó, como le había dicho el Señor, y con él marchó Lot. Abran tenía setenta y cinco años cuando salió de Harán. Abrán llevó consigo a Saray, su mujer, a Lot, su sobrino, todo lo que había adquirido y todos los esclavos que había ganado en Harán. Salieron en dirección de Canaán y llegaron a la tierra de Canaán. Abrán atravesó el país hasta la región de Siquén, hasta la encina de Moré. En aquel tiempo habitaban allí los cananeos. El Señor se apareció a Abrán y le dijo: «A tu descendencia le daré esta tierra.» Él construyó allí un altar en honor del Señor, que se le había aparecido. Desde allí continuó hacia las montañas al este de Betel, y plantó allí su tienda, con Betel a poniente y Ay a levante; construyó allí un altar al Señor e invocó el nombre del Señor. Abrán se trasladó por etapas al Negueb. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 32, R/. “Dichoso el pueblo que el Señor se escogió como heredad” Dichosa la nación cuyo Dios es el Señor, el pueblo que él se escogió como heredad. El Señor mira desde el cielo, se fija en todos los hombres. R/. Los ojos del Señor están puestos en sus fieles, en los que esperan en su misericordia, para librar sus vidas de la muerte y reanimarlos en tiempo de hambre. R/. Nosotros aguardamos al Señor: él es nuestro auxilio y escudo. Que tu misericordia, Señor, venga sobre nosotros, como lo esperamos de ti. R/. Lectura del santo evangelio según san Mateo 7,1-5 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No juzguen y no los juzgarán; porque los van a juzgar como juzguen ustedes, y la medida que usen, la usarán con ustedes. ¿Por qué te fijas en la mota que tiene tu hermano en el ojo y no reparas en la viga que llevas en el tuyo? ¿Cómo puedes decirle a tu hermano: “Déjame que te saque la mota del ojo”, teniendo una viga en el tuyo? Hipócrita; sácate primero la viga del ojo; entonces verás claro y podrás sacar la mota del ojo de tu hermano.»Palabra del Señor. Meditación En la primera lectura retomamos el libro del Génesis. Los primeros capítulos los leímos y meditamos antes de cuaresma. Ahora y durante tres semanas leemos a partir del capítulo 12. Lo que hoy leemos “la vocación de Abraham”. Dios llama a un hombre mayor a dejar su seguridad y a lanzarse hacia adelante sin ninguna prueba, solo por confiar en Yavhe, un Dios desconocido hasta entonces para Abrán. En medio de un mundo corrompido, Dios ha decidido hacerse un pueblo según su amor, para que conserve la verdadera religión y para que atraiga las bendiciones sobre la humanidad. Para ello ha elegido a Abrán. Y este responde con genrosidad 76 Plan de Pastoral - Junio 2015 y con confianza. Es una aventura a lo que se decide, ya que deja la tranquilidad de su pueblo conocido para lanzarse a un lugar que ni sabe ni conoce. Está abierto al futuro. No se apega al pasado. Tiene mérito su fe, porque Dios le promete dos cosas difíciles de creer: que le hará padre de un gran pueblo (a él que es ya mayor y su esposa, estéril) y le dará en posesión la tierra que le mostrará (abandona algo seguro por algo que en seguida se verá que muy difícil). A Abraham le consideramos el ejemplo de todas las personas que han decidido dejar su seguridad y su tierra por seguir la voz del Señor: los misioneros, consagrados y consagradas, cristianos y cristianas compromtidos por el Reino y por un mundo mejor. También se le puede considerar ejemplo de los políticos, de los buenos políticos que deciden trabajar por un pueblo donde se construya la justicia, y se cambata la corrupción. Lo decimos en la fiesta de Santo Tomás Moro, patrono de los políticos. La política no es mala, la hacen mala los malos políticos. Pero desde la política se puede ser santo, así nos lo demuestra Santo Tomás Moro, que fue capaz de dar su vida por defender la política desde la visión de Dios y fue capaz de vivir en cristiano desde su compromiso político . En el Evangelio: ¿Cuántas veces he faltado a Dios? ¿Cuántas veces señalo al hermano? Día a día en nuestra familia, trabajo, comunidad vivimos quejándonos y señalando a los demás y las cosas malas que nos rodean, se nos olvida la piedad y la misericordia, vivimos como los fariseos declamando ante Dios nuestras buenas acciones y murmurando las malas acciones del prójimo, entonces me pregunto: ¿Quién soy yo para juzgar? ¿Yo he venido ante Dios puro, limpio, sin mancha y santo? Podríamos decir que este evangelio de hoy no nos dice nada nuevo, sino que nos pone un ejemplo para aplicar un tema central de Cristo: la caridad, Él nos ha dicho de diversas maneras lo mismo: “amarás a tu prójimo como a ti mismo”, “la medida que uses la usarán contigo” y lo del Padre nuestro: “perdónanos como nosotros perdonamos”… Nuevamente es una invitación a llevar a la práctica la caridad cristiana. 23 Martes Feria Verde Lectura del libro del Génesis 13, 2.5-18 Abrahán era muy rico en ganado, plata y oro. También Lot, que acompañaba a Abrahán, poseía ovejas, vacas y tiendas. La tierra no era suficiente para los dos y ya no podían vivir juntos, porque sus rebaños habían aumentado mucho. Por ello surgieron pleitos entre los pastores de Abrahán y los de Lot. (En aquel tiempo, cananeos y perezeos habitaban el país). Entonces Abrahán le dijo a Lot: «Que no haya pleitos entre tú y yo ni entre nuestros pastores, pues tú y yo somos hermanos. Tienes todo el país por delante, sepárate de mí. Si te vas por la izquierda yo me iré por la derecha; y si tú tomas la derecha, yo tomaré la izquierda». 77 Tuve hambre y me diste de comer Lot levantó los ojos y vio que todo el valle del Jordán, hasta Soar, era de regadío (esto sucedía antes de que el Señor destruyera a Sodoma y Gomorra); era como el paraíso o como la región fértil de Egipto. Entonces Lot escogió todo el valle del Jordán y se trasladó al oriente, y así se apartaron los dos hermanos. Abrahán se estableció en Canaán, y Lot en las ciudades del valle, donde plantó sus tiendas hasta Sodoma. Los habitantes de Sodoma eran malvados y pecaban gravemente contra el Señor. Después que Lot se separó, el Señor le dijo a Abrahán: «Alza tus ojos y, desde el lugar donde estás, mira hacia el norte y el sur, el oriente y el poniente. Pues bien, toda la tierra que ves te la voy a dar a ti y a tus descendientes para siempre. Voy a hacer tu descendencia tan numerosa como el polvo de la tierra: el que pueda contar el polvo podrá contar a tus descendientes. Anda, recorre el país a lo largo y a lo ancho, porque te lo voy a dar a ti». Y Abrahán fue a plantar sus tiendas en el encinar de Mambré, en Hebrón, y construyó allí un altar al Señor.Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 14 R/ “Señor, ¿quien puede hospedarse en tu tienda ?” El hombre que procede honradamente y obra con justicia; el que es sincero en todas sus palabras y con su lengua a nadie desprestigia. R. Quién no hace mal al prójimo ni difama al vecino; quien no ve con aprecio a los malvados, pero honra a quien temen al Altísimo. R. Quien presta sin usura y quien no acepta soborno en perjuicio de inocentes, ese será agradable a los ojos de dios eternamente. R. Lectura del santo evangelio según san Mateo 7, 6.12-14 En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: «No den a los perros las cosas santas ni echen sus perlas a los cerdos, no sea que las pisoteen y después se vuelvan contra ustedes y los despedacen. Traten a los demás como quieren que ellos los traten a ustedes. En esto se resumen la ley y los profetas. Entren por la puerta estrecha; porque ancha es la puerta y amplio el camino que conduce a la perdición, y son muchos los que entran por él. Pero ¡qué estrecha es la puerta y qué angosto el camino que conduce a la vida, y qué pocos son los que lo encuentran!»Palabra del Señor. Meditación Ayer Abraham era ejemplo de fe y confianza en Dios; hoy es ejemplo de caridad, de comprensión, de tolerancia, de generosidad y de constructor de la paz. Abraham era el “jefe”, el mayor; ante el conflicto que se presenta, podía elegir y dejar descontento a Lot y a su gente; pero prefiere la paz y la caridad. Dios no le abandona, y ante esa acción, le promete que esa tierra donde está será la tierra de sus descendientes, de su pueblo. Es ejemplo para nosotros y nosotras. Parecido a lo que decíamos ayer, en nuestra vida de cristianos y cristianas no nos falta fe, doctrina, conocimiento de Dios, lo que nos falta es caridad, comprensión, “buen 78 Plan de Pastoral - Junio 2015 corazón”. ¿Somos capaces de ceder ante las opiniones de los demás? ¿Damos prioridad a nuestros gustos? En las discusiones familiares, de la comunidad, o eclesiales ¿ponemos paz, aunque para ello sacrifiquemos nuestra opinión y gustos? ¿hablamos con suavidad o levantamos la voz para tener más razón?... Abraham pone en práctica la frase de Jesús en el Evangelio de hoy: “Traten a los demás como quieren que les traten a ustedes”. El Señor hoy nos revela que el Camino a la Vida es estrecho, mientras que el camino a la perdición es Ancho y espacioso. ¿Qué nos dice con esto? ¿Que se salvan muy pocos, y se condena la mayoría? Probablemente lo que El Señor quiere recordarnos hoy es que seguirlo y hacer su Voluntad no es fácil, agradar a Dios requiere sacrificio y muchas veces implica rechazar el dinero fácil o de fuentes dudosas, perdonar a quien nos ha herido gravemente y controlar nuestros deseos de Poder, de Sobresalir o de tener placeres sin control. Nada de esto es sencillo. La invitación de hoy es a decirle a Jesús, que estamos dispuestos a hacer Su Voluntad, a transitar por el Camino de la Vida, aunque este sea estrecho y pedregoso, porque sabemos que con Él, nada nos falta. 24 Miércoles Solemnidad: Natividad de San Juan Bautista Blanco Lectura del profeta Isaías 49, 1-6 Escuchen, habitantes de las islas; atiendan, pueblos lejanos: El Señor me llamó desde el seno materno, desde las entrañas de mi madre pronunció mi nombre. Convirtió mi boca en espada afilada, me escondió al amparo de su mano; me trasformó en flecha punzante y me guardó en su aljaba. Me dijo: «Tú eres mi siervo, Israel, y estoy orgulloso de ti». Aunque yo pensaba: «En vano me fatigué, por nada e inútilmente gasté mis fuerzas». Sin embargo, el Señor defendía mi causa, mi Dios guardaba mi recompensa. Y ahora habla el Señor, aquél que desde el vientre me formó como siervo suyo, para que le trajera a Jacob y le reuniera a Israel. ¡Tan valioso soy para el Señor y en Dios se halla mi fuerza! El dice: «No solo eres mi siervo para establecer las tribus de Jacob y traer a los sobrevivientes de Israel, sino que te convierto en la luz de las naciones para que mi salvación llegue hasta el último rincón de la tierra».Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 138, R/ “Te doy gracias, Señor, porque me has escogido portentosamente.” Señor, tú me examinas y me conoces, sabes cuando me siento o me levanto, desde lejos comprendes mis pensamientos. Tú adviertes si camino o si descanso, todas mis sendas te son conocidas. R. Tú formaste mis entrañas, me tejiste en el vientre de mi madre. Te doy gracias porque eres sublime, tus obras son prodigiosas. R. Tú conoces lo profundo de mi ser, nada mío te era desconocido cuando yo me iba formando en lo oculto y era tejido en las profundidades de la tierra. R. 79 Tuve hambre y me diste de comer Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 13, 22-26 En aquellos días, Pablo dijo a los judíos: «Al destituir Dios a Saúl de su cargo, nombró rey a David, de quien hizo está alabanza: He encontrado a David, hijo de Jesé, un hombre según mi corazón, el cual hará siempre mi voluntad. De su descendencia, Dios, según su promesa, sacó para Israel un Salvador, Jesús. Antes de su venida, Juan había predicado a todo el pueblo de Israel un bautismo de penitencia. El mismo Juan, a punto ya de terminar su ministerio, decía: “Yo no soy el que ustedes creen. Detrás de mí viene uno a quien no soy digno de desatar las sandalias”. Hermanos, descendientes de Abrahán, y a los que, sin serlo, honran a Dios, es a ustedes a quienes se dirige este mensaje de salvación».Palabra de Dios Lectura del santo evangelio según san Lucas 1, 57-66.80 Por aquellos días, cuando se cumplió el tiempo, Isabel dio a luz un hijo. Sus vecinos y parientes oyeron que el Señor le había mostrado su gran misericordia y se alegraron con ella. Al octavo día fueron a circuncidar al niño y querían llamarlo Zacarías, como su padre. Pero su madre dijo: «No, se llamará Juan». Le dijeron: «No hay nadie en tu familia que lleve ese nombre». Se dirigieron entonces al padre y le preguntaron por señas cómo quería que se llamara. El pidió una tablilla y escribió: Juan es su nombre. Entonces todos quedaron sorprendidos. De pronto recuperó el habla y comenzó a bendecir a Dios. Todos sus vecinos se llenaron de temor, y en toda la montaña de Judea se comentaba lo sucedido. Cuantos lo oían pensaban: «¿Qué llegará a ser este niño?». El niño iba creciendo y se fortalecía en su interior. Y vivió en el desierto hasta el día de su manifestación a Israel. Palabra del Señor. Meditación La Iglesia celebra hoy la Natividad de San Juan Bautista, de quien Jesús dijo que “no ha nacido ningún hombre más grande”. Pero también dijo que “sin embargo, el más pequeño en el reino de los cielos es mayor que él”. Esto nos muestra lo importante que somos para el Señor sus seguidores ¿Podemos ver el privilegio y la grandeza de ser cristianos? Jesús nos considera Grandes, Importantes, solo por el hecho de ser cristianos y critianas de verdad. Contemplar esta realidad debe llenar nuestros corazones de Esperanza y de un humilde sentimiento de gratitud. El nacimiento del Bautista fue sobrenatural. Al igual que el nacimiento de Jesús, fue anunciado por el Angel Gabriel a Zacarías su padre. Desde el principio estuvo consagrado a Dios, y su misión fue Preparar el Camino al Señor, anunciar la conversión y señalar al Mesías esperado por el pueblo de Dios. Vivió una vida austera, mayormente en el desierto, predicando y bautizando y proclamando que estaba cerca el Reino de Dios. Esto le costó la vida, cuando Herodes lo apresó y lo mandó a decapitar. Juan era definitivamente un hombre santo. Vivió y murió consagrado al Señor hasta el martirio, sin renegar de la Fe. Pero Juan también tuvo dudas de Fe. Este hombre santo, en una ocasión le mandó a preguntar a Jesús si 80 Plan de Pastoral - Junio 2015 Él era el que había de venir o debían esperar a otro. ¿Y cuál fue la respuesta de Jesús? Jesús No le recriminó su duda, ni le reprochó su momentánea falta de Fe. Recordemos que en ese momento Juan se encontraba Preso por Herodes, y era natural que en esa dificultad y sentimiento de abandono, surgiera la duda en su corazón. Jesús le respondió: “díganle a Juan lo que han visto y oído: los ciegos ven, los cojos andan, los muertos resucitan, y a los pobres se les anuncia el Evangelio”, es decir, los signos que, según el Antiguo Testamento,acompañan al Mesías enviado por Dios. A veces atravesamos situaciones difíciles en lo económico, problemas familiares, situaciones de peligro a nuestra seguridad, enfermedades o situaciones de pecado que nos ponen en contacto con nuestra fragilidad humana. En esos momentos es fácil que aflore la duda en nuestras mentes, y empecemos a olvidar las promesas de Dios, porque estamos en nuestra hora de debilidad. Es ese justo el Momento de Recordar en nuestras mentes y corazones todo lo que Dios ha hecho en nuestras vidas. Cómo nos ha librado de enfermedades en el pasado, y cómo suple a nuestras necesidades. Pidamos al Señor la Gracia de ser como Juan el Bautista, consagrados a Dios por toda nuestra vida, y fieles hasta la muerte. Al final, nos encontraremos cara a cara con Jesús, y gozaremos de las delicias de la Gloria en su Presencia eternamente. 25 Jueves Feria Verde Lectura del libro del Génesis 16,1-12.15-16 En aquellos días, Saray maltrató a Hagar, y ella se escapó. El ángel del Señor la encontró junto a la fuente del desierto, la fuente del camino de Sur, y le dijo: «Hagar, esclava de Saray, ¿de dónde vienes y adónde vas?» Ella respondió: «Vengo huyendo de mi señora.»El ángel del Señor le dijo: «Vuelve a tu señora y sométete a ella.» Y el ángel del Señor añadió: «Haré tan numerosa tu descendencia que no se podrá contar.» Y el ángel del Señor concluyó: «Mira, estás encinta y darás a luz un hijo y lo llamarás Ismael, porque el Señor te ha escuchado en la aflicción. Será un potro salvaje: él contra todos y todos contra él; vivirá separado de sus hermanos.» Hagar dio un hijo a Abrán, y Abrán llamó Ismael al hijo que le había dado Hagar. Abrán tenía ochenta y seis años cuando Hagar dio a luz a Ismael. Palabra de Dios Salmo Responsorial: 105 R/. “Den gracias al Señor, porque es bueno” Dad gracias al Señor porque es bueno, porque es eterna su misericordia. ¿Quién podrá contar las hazañas de Dios, pregonar toda su alabanza? R/. Dichosos los que respetan el derecho y practican siempre la justicia. Acuérdate de mí por amor a tu pueblo. R/. Visítame con tu salvación: para que vea la dicha de tus escogidos, y me alegre con la alegría de tu pueblo, y me gloríe con tu heredad. R/ 81 Tuve hambre y me diste de comer Lectura del santo evangelio según san Mateo 7,21-29 En aquel tiempo, dijo Jesús a sus discípulos: «No todo el que me dice “Señor, Señor” entrará en el reino de cielos, sino el que cumple la voluntad de mi Padre que está en el cielo. Aquel día muchos dirán: “Señor, Señor, ¿no hemos profetizado en tu nombre, y en tu nombre echado demonios, y no hemos hecho en tu nombre muchos milagros?” Yo entonces les declararé: “Nunca les he conocido. Aléjense de mí, malvados.” El que escucha estas palabras mías y las pone en práctica se parece a aquel hombre prudente que edificó su casa sobre roca. Cayó la lluvia, salieron los ríos, soplaron los vientos y descargaron contra la casa; pero no se hundió porque estaba cimentada sobre roca. El que escucha estas palabras mías y no las pone en práctica se parece a aquel hombre necio que edificó su casa sobre arena. Cayó la lluvia, se salieron los ríos, soplaron los vientos y rompieron contra la casa, y se hundió totalmente.» Al terminar Jesús este discurso, la gente estaba admirada de su enseñanza, porque les enseñaba con autoridad, y no como los escribas. Palabra del Señor. Meditación Ayer no leíamos del libro del Génesis porque la solemnidad tenía sus propias lecturas; por ello nos hemos perdido un poco de la historia de Abraham y sus hijos. Como la promesa de ser padre de multitudes no se ve realizada, y Abraham y Sara se van haciendo muy mayores, Sara le pide a Abraham que tenga un hijo con su esclaba Hagar. Lo que sucede después, y nos lo ha contado la lectura de hoy es algo “normal”, algo muy humano, nacen los deseos de subir y ascender de una, y los celos y rechazos por parte de la otra. Pero también vemos algo que sucedió entonces y sigue sucediendo hoy: “Dios escribe derecho en las líneas torcidas”. Dios se sigue haciendo presente por medio de las miserias humanas. Debemos tener los ojos y los oídos bien abiertos porque Dios sigue actuando por caminos que nos parecen sorprendentes, porque Él es original y escapa a nuestras medidas: “mis caminos no son sus caminos”. Por otra parte, vemos cómo Dios bendice también al hijo de la esclava, de Hagar, y también de él nacerá un gran pueblo. La bendición de Dios ha estado siempre con toda la humanidad, no solo con el pueblo judío. Como lo está hoy, no solo en la Iglesia sino en toda persona de buena voluntad. Por eso no podemos dejar fuera de la salvación a nadie, por el hecho de que no sea de los nuestros, de nustra Iglesia. ¿Cuantas veces hemos leído esta comparación que nos hace Jesús en el evangelio leído hoy? Una comparación que manifiesta de una forma sencilla cuánto nos cuesta a los Cristianos hacer lo que Él nos dice. Hemos escuchado su palabra, el Espíritu Santo nos impregnó con su amor infinito, hemos tenido encuentros íntimos con el Señor y todavía seguimos contruyendo nuestras vidas sobre arena. Por eso Jesús nos hace esta comparación pues conoce nuestra humanidad frágil y que solo nuestra forma de vivir será la que verdaderamente nos haga realizar una conversión total. 82 Plan de Pastoral - Junio 2015 Dejemos que sea el Señor que construya en nuestro corazón las ganas de vivir un evangelio de “hechos”, no de palabras. Donde nuestros actos en esta tierra sean el reflejo de un Cristo vivo. 26 Viernes Feria o Memoria libre, San Pelayo, mártir Verde o Rojo Lectura del libro del Génesis 17,1.9-10.15-22 Cuando Abrán tenía noventa y nueve años, se le apareció el Señor y le dijo: «Yo soy el Dios Saday. Camina en mi presencia con lealtad.» Dios añadió a Abrahán: «Tú guarda mi pacto, que hago contigo y tus descendientes por generaciones. Este es el pacto que hago con vosotros y con tus descendientes y que han de guardar: circunciden a todos sus varones.» Dios dijo a Abrahán: «Saray, tu mujer, ya no se llamará Saray, sino Sara. La bendeciré, y te dará un hijo, y lo bendeciré; de ella nacerán pueblos y reyes de naciones.» Abrahán cayó rostro en tierra y se dijo sonriendo: «¿Un centenario va a tener un hijo, y Sara va a dar a luz a los noventa?» Y Abrahán dijo a Dios: «Me contento con que te guardes vivo a Ismael.» Dios replicó: «No; es Sara quien te va a dar un hijo, a quien llamarás Isaac; con él estableceré mi pacto y con sus descendientes, un pacto perpetuo. En cuanto a Ismael, escucho tu petición: lo bendeciré, lo haré fecundo, lo haré multiplicarse sin medida, engendrará doce príncipes y haré de él un pueblo numeroso. Pero mi pacto lo establezco con Isaac, el hijo que te dará Sara el año que viene por estas fechas.» Cuando Dios terminó de hablar con Abrahán, se retiró. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 127 R/. “Esta es la bendición del hombre que teme al Señor” Dichoso el que teme al Señor y sigue sus caminos. Comerás del fruto de tu trabajo, serás dichoso, te irá bien. R/. Tu mujer, como parra fecunda, en medio de tu casa; tus hijos, como renuevos de olivo, alrededor de tu mesa. R/. Esta es la bendición del hombre que teme al Señor. Que el Señor te bendiga desde Sión, que veas la prosperidad de Jerusalén todos los días de tu vida. R/. Lectura del santo evangelio según san Mateo 8,1-4 En aquel tiempo, al bajar Jesús del monte, lo siguió mucha gente. En esto, se le acercó un leproso, se arrodilló y le dijo: «Señor, si quieres, puedes limpiarme.»Extendió la mano y lo tocó, diciendo: «Quiero, queda limpio.»Y en seguida quedó limpio de la lepra.Jesús le dijo: «No se lo digas a nadie, pero, para que conste, ve a presentarte al sacerdote y entrega la ofrenda que mandó Moisés.»Palabra del Señor. 83 Tuve hambre y me diste de comer Meditación Una escena un poco rara y en ciertos aspectos repetida, pero es que como el Génesis procede de escribir distintas narraciones que se transmitían habladas, vemos que algunos acontecimientos se narran más de una vez. No es repetición y tiene enseñanzas nuevas. Se comienza a hablar de un pacto, de una alianza entre Dios y el pueblo. Alianza que va a tener un signo externo, la circuncisión. Este hecho que se realizaba en muchas culturas, se convierte en signo de pertenencia a la comunidad y a Dios. Los planes de Dios siguen adelante a pesar de que las circunstancias son adversas, la edad de los protagonistas, y hasta la risa de incredulidad del mismo Abraham: ya se anuncia el nacimiento de Isaac, que será en menos de un año; y se habla del cuidado que Dios tiene de Ismael. Hoy podíamos hablar de la pertenencia al nuevo pueblo de Dios, la Iglesia. Y también de los signos de pertenencia a ella, los sacramentos. Dios sigue adelante con sus planes, que son sorprendentes. No le podemos controlar, no le podemos presionar,no podemos adivinar su actuación. Cuando todo parece perdido, Dios presenta situaciones, actuaciones o personas y grupos que hacen avanzar sus proyectos de salvación. Cuando escuchamos que la Iglesia va mal, que antes las cosas funcionaban mucho mejor; cuando escuchamos o decimos que nuestra República Dominicana no tiene remedio, que sus dirigentes, las fuerzas económicas, sociales y los políticos están acabando con la patria, cuando… Aún queda Dios, que hará sugir nuevos profetas, nuevas actitudes y nuevos grupos que ayuden a la nueva sociedad, a la nueva humanidad y al cielo nuevo y tierra nueva. Y mientras tanto, nos toca poner nuestra parte de fe y confianza en Dios y en que él nos ha elegido, como a Abraham, para hacer el nuevo pueblo. Nuestra mente es tan pequeña que no alcanzamos a ver lo que es capaz de hacer Cristo. Un leproso se acerca con la dificultad de una gran cantidad de gente (obstáculos) y se postra frente a Él y con voz firme y confiando en su poder le dice: “Señor, si quieres puedes limpiarme”, no le dice “yo quiero que me limpies”. Pues su confianza estaba puesta en el Señor. Digamos como el leproso del Evangelio: si quieres… puedes limpiarnos, limpiar la Iglesia, limpiar nuestra República. Jesús nos responde, quiero, pero ustedes pongan su parte, vayan a integrarse a la comunidad, y colaboren. Eso le dice al leproso cuando le habla de ir a los sacerdotes y cumplir con lo mandado. Más importante que la curación física, lo que hizo fue integrarle a la comunidad Confiemos en lo que le pidamos a Dios sea confiando en que la decisión que Él tome en nostros será el mejor resultado que podamos obtener. Pues así ha sido su voluntad y no la nuestra. 84 Plan de Pastoral - Junio 2015 Feria o Memoria Libre: San Cirilo de Alejandría, Obispo y Doctor de la Iglesia Sábado Verde o Blanco 3ª Aniversario de la Muerte de Mons. Jerónimo Tomás Abreu Herrera, Obispo Emérito de Mao 27 Lectura del libro del Génesis 18,1-15 En aquellos días, el Señor se apareció a Abrahán junto a la encina de Mambré, mientras él estaba sentado a la puerta de la tienda, porque hacía calor. Alzó la vista y vio a tres hombres en pie frente a él.Al verlos, corrió a su encuentro desde la puerta de la tienda y se prosternó en tierra, diciendo: «Señor, si he alcanzado tu favor, no pases de largo junto a tu siervo. Haré que traigan agua para que se laven los pies y descansen junto al árbol. Mientras, traeré un pedazo de pan para que cobren fuerzas antes de seguir, ya que han pasado junto a su siervo.»Contestaron: «Bien, haz lo que dices.» Abrahán entró corriendo en la tienda donde estaba Sara y le dijo: «Aprisa, tres cuartillos de flor de harina, amásalos y haz una hogaza.» Él corrió a la vacada, escogió un ternero hermoso y se lo dio a un criado para que lo guisase en seguida. Tomó también cuajada, leche, el ternero guisado y se lo sirvió. Mientras él estaba en pie bajo el árbol, ellos comieron. Después le dijeron: «¿Dónde está Sara, tu mujer?»Contestó: «Aquí, en la tienda.» Añadió uno: «Cuando vuelva a ti, dentro del tiempo de costumbre, Sara habrá tenido un hijo.» Sara lo oyó, detrás de la entrada de la tienda. Abrahán y Sara eran ancianos, de edad muy avanzada, y Sara ya no tenía sus periodos.Sara se rió por lo bajo, pensando: «Cuando ya estoy seca, ¿voy a tener placer con un marido tan viejo?» Pero el Señor dijo a Abrahán: «¿Por qué se ha reído Sara, diciendo: “De verdad que voy a tener un hijo a mis años.” ¿Hay algo difícil para Dios? Cuando vuelva a visitarte por esta época, dentro del tiempo de costumbre, Sara habrá tenido un hijo.» Pero Sara, que estaba asustada, lo negó: «No me he reído.» Él replicó: «No lo niegues, te has reído.» Palabra de Dios. Salmo Responsorial:Lc. 1 R/. “El Señor se acuerda de la misericordia” Proclama mi alma la grandeza del Señor, se alegra mi espíritu en Dios, mi salvador. R/. Porque ha mirado la humillación de su esclava. Desde ahora me felicitarán todas las generaciones, porque el Poderoso ha hecho obras grandes por mí: su nombre es santo. R/. Y su misericordia llega a sus fieles de generación en generación. A los hambrientos los colma de bienes y a los ricos los despide vacíos. R/. Auxilia a Israel, su siervo, acordándose de la misericordia –como lo había prometido a nuestros padres– en favor de Abrahán y su descendencia por siempre. R/. 85 Tuve hambre y me diste de comer Lectura del santo evangelio según san Mateo 8,5-17 En aquel tiempo, al entrar Jesús en Cafarnaún, un centurión se le acercó rogándole: «Señor, tengo en casa un criado que está en cama paralítico y sufre mucho.»Jesús le contestó: «Voy yo a curarlo.» Pero el centurión le replicó: «Señor, no soy quién para que entres bajo mi techo. Basta que lo digas de palabra, y mi criado quedará sano. Porque yo también vivo bajo disciplina y tengo soldados a mis órdenes; y le digo a uno: “Ve” y va; al otro: “Ven”, y viene; a mi criado: “Haz esto”, y lo hace.» Al oírlo, Jesús quedó admirado y dijo a los que le seguían: «Les aseguro que en Israel no he encontrado en nadie tanta fe. Les digo que vendrán muchos de oriente y occidente y se sentarán con Abrahán, Isaac y Jacob en el reino de los cielos; en cambio, a los ciudadanos del reino los echarán fuera, a las tinieblas. Allí será el llanto y el rechinar de dientes.» Y al centurión le dijo: «Vuelve a casa, que se cumpla lo que has creído.»Y en aquel momento se puso bueno el criado. Al llegar Jesús a casa de Pedro, encontró a la suegra en cama con fiebre; la cogió de la mano, y se le pasó la fiebre; se levantó y se puso a servirles. Al anochecer, le llevaron muchos endemoniados; él, con su palabra, expulsó los espíritus y curó a todos los enfermos. Así se cumplió lo que dijo el profeta Isaías: «Él tomó nuestras dolencias y cargó con nuestras enfermedades.»Palabra del Señor. Meditación Esta escena del Génesis se ha presentado en ocasiones como una presencia de la Santísima Trinidad. Algunos padres de la Iglesia también han tratado así este texto bíblico. Pero también podemos entenderlo desde el mensaje de Cristo: “tuve hambre y me diste de comer, tuve sed y me diste de beber…” “cada cosa que hacen a uno de estos pequeños me lo hacen a mí.” Es decir, Abraham acoge a tres peregrinos que pasan cerca de donde está con sus rebaños. Los acoge porque están necesitados, pero en ellos ve a Dios que pasa, y los trata como su Señor. Y en esos peregrinos Dios le habla, le pone fecha a la promesa de ser padre. Sara reacciona como lo hacen y lo hacemos la mayoría de las personas, Sara podría preguntarse: ¿cuántas veces he oído ya eso de ser madre? Y me lo vienen a decir ahora que ya es imposible…Humano, muy humano, pero le falta añadir la fe, lo cristiano: ¿Hay algo difícil para Dios? Apliquemos a nuestra vida toda esta narración tan bonita de la presencia de Dios en los acontecimientos, en las personas, en la historia personal y de la patria. En este mes aplicamos el texto a la Caridad. Seamos caritativos acogiendo a las personas de nuestro lado, a quienes pasan, a quienes están. Y no les demos las sobras, las limosnas, Abraham nos enseña en esta narración de hoy a dar lo bueno de nosotros mismos. Porque en todas las personas está Dios, principalmente en las más necesitadas. 86 Plan de Pastoral - Junio 2015 Si somos capaces de atender a Dios en los demás, escucharemos sus buenas noticias, como lo hizo Abraham. Y eso que Él ha prometido se hará realidad en nostros y nosotras, en la Iglesia, en la Patria. En las tres lecturas del día de hoy hay un factor en común y es el Poder de Dios manifestado en sus hijos mediante la Fe. María, con su cántico, nos recuerda lo que somos: Siervos, para hacer la voluntad del Padre con amor, entrega y obediencia. Cuánta Fe y amor refleja nuestra madre María; que deja todo para servirle a su prima Isabel. ¿Nosotros somos capaces de dejarlo todo y servirle a los demás, a tu esposo, hijos, padres, vecinos, amigos, con ese gran amor como lo hizo María? Conocer esa Fe de un centurión, un soldado romano, por tanto no era de la religión judía, que no tiene nombre porque podemos ser tu o yo, Fe que sobrepasa las fronteras, Fe ciega, Fe que reconoce el poder sanador. 28 XIII Domingo del Tiempo Ordinario Primera Semana Liturgia de las Horas Verde La caridad de Cristo vence la enfermedad y la muerte Orientaciones para la celebración: Debe llevarse en procesión el cartel con el valor del mes: Caridad. Y el lema del mes. Se pueden presentar ofrendas de frutos, alimentos, pero también de trabajos, oficios, responsabilidades que expresan la caridad hacia los más pobres. Se puede presentar al equipo de Pastoral Social como símbolo y como trabajo de caridad de toda la comunidad. Ese Equipo, con un distintivo que los señale como miembros de la Pastoral Social pueden hacer las lecturas, moniciones, procesión de ofrendas. Y hacer una invitación a los miembros de la comunidad para ser generosos y caritativos. Monición ambiental Hermanas y hermanos: En este mes de Junio hemos reflexionado y hemos valorado la caridad hacia los más pobres, dejando resonar las palabras de Jesús: “Tuve hambre y me diste de comer”. Todo nuestro servicio lleno de caridad es para que las personas tengan vida y vida en abundancia. En esta Celebración contemplamos a Dios amante de la vida, y de la vida con dignidad, que quiere la justicia y la igualdad para todos y todas. El envió a su Hijo para que rompa con lo que quita la vida como son las enfermedades y la muerte. En la vida tenemos enfermedades, problemas, miedos, heridas; es que somos humanos, débiles, pecadores y pecadoras. En esos momentos debemos acercarnos al Señor, y hay muchas maneras de hacerlo. Acerquémonos a Él y toquémosle, agarrémosle, aunque sea la esquina del manto. 87 Tuve hambre y me diste de comer En esta Eucaristía ponemos ante el Señor nuestras enfermedades y nuestras muertes, también las de la familia y las de la patria, para que Él las sane y nos dé su fuerza para ayudar a sanar. Terminamos así el mes dedicado a la Caridad, con la convicción y las fuerzas necesarias para ser más caritativos y caritativas en toda la vida. Que se nos note y que se note en quienes nos rodean. Cantando a Jesucristo que llega a presidirnos a través de su ministro iniciamos la Celebración. Primera Lectura, Sabiduría 1,13-15;2,23-24 El libro de la Sabiduría nos recuerda que Dios nos creó desde su amor para vivir plenamente llenos de su vida inmortal. El pecado destruye esa vida, pero en su gran amor El nos envió un liberador de la muerte. Escuchemos. Lectura del libro de la Sabiduría Dios no hizo la muerte ni goza destruyendo los vivientes. Todo lo creó para que subsistiera; las criaturas del mundo son saludables: no hay en ellas veneno de muerte, ni el abismo impera en la tierra. Porque la justicia es inmortal. Dios creó al hombre para la inmortalidad y lo hizo a imagen de su propio ser; pero la muerte entró en el mundo por la envidia del diablo; y los de su partido pasarán por ella. Palabra de Dios. Salmo responsorial: 29 R/. “Te ensalzaré, Señor, porque me has librado” Te ensalzaré, Señor, porque me has librado y no has dejado que mis enemigos se rían de mí.Señor, sacaste mi vida del abismo,me hiciste revivir cuando bajaba a la fosa. R/. Tañed para el Señor, fieles suyos, dad gracias a su nombre santo; su cólera dura un instante; su bondad, de por vida; al atardecer nos visita el llanto;por la mañana, el júbilo. R/. Escucha, Señor, y ten piedad de mí; Señor, socórreme.Cambiaste mi luto en danzas.Señor, Dios mío, te daré gracias por siempre. R/. Segunda Lectura: Carta del apóstol Pablo a los Corintios 8,7.9.13-15 Hoy san Pablo nos habla de la generosidad, que es una de las cualidades de la caridad y que brota de la fe. Dios quiere la igualdad, por eso debemos repartir y compartir los dones y los bienes que tenemos, para que haya justicia y la igualdad que Dios quiere. Escuchemos. Lectura de la segunda carta del apóstol san Pablo a los Corintios Ya que sobresalen en todo: en la fe, en la palabra, en el conocimiento, en el empeño y en el cariño que nos tienen, distínganse también ahora por su generosidad. Porque ya saben lo generoso que fue nuestro Señor Jesucristo: siendo rico, se hizo pobre por ustedes para enriquecerlos con su pobreza. Pues no se trata de aliviar a otros, pasando ustedes estrecheces; se trata de igualar. En el momento actual, su abundancia remedia la falta que ellos tienen; y un día, la abundancia de ellos remediará la falta de ustedes; así habrá igualdad. Es lo que dice la Escritura: «Al 88 Plan de Pastoral - Junio 2015 que recogía mucho no le sobraba; y al que recogía poco no le faltaba.» Palabra de Dios. Aleluya 2 Timoteo 1,10b Su Salvador Jesucristo destruyo la muerte y sacò a la luz la vida, por Medio del Evangelio Evangelio, Marcos 5,21-43 Jesús manifiesta su caridad hacia esta mujer enferma y a este centurión cuya hija estaba muerta. Hoy El sigue mostrando esa misma caridad. Sólo basta tener fe, tocarlo y acudir confiados a El. Al mismo tiempo nos hace portadores de su poder y de su amor para los más necesitados.Escuchemos. Lectura del santo Evangelio según san Marcos En aquel tiempo Jesús atravesó de nuevo a la otra orilla, se le reunió mucha gente a su alrededor, y se quedó junto al lago. Se acercó un jefe de la sinagoga, que se llamaba Jairo, y al verlo se echó a sus pies, rogándole con insistencia: «Mi niña está en las últimas; ven, pon las manos sobre ella, para que se cure y viva.» Jesús se fue con él, acompañado de mucha gente que lo apretujaba. Había una mujer que padecía flujos de sangre desde hacía doce años. Muchos médicos la habían sometido a toda clase de tratamientos y se había gastado en eso toda, su fortuna; pero en vez de mejorar, se había puesto peor. Oyó hablar de Jesús y, acercándose por detrás, entre la gente, le tocó el manto, pensando que con solo tocarle el vestido, curaría. Inmediatamente se secó la fuente de sus hemorragias y notó que su cuerpo estaba curado. Jesús, notando que, había salido fuerza de él, se volvió en seguida, en medio le la gente, preguntando: «¿Quién me ha tocado el manto?»Los discípulos le contestaron: «Ves como te apretuja la gente y preguntas: “¿quién me ha tocado?”»Él seguía mirando alrededor, para ver quién había sido. La mujer se acercó asustada y temblorosa, al comprender lo que había pasado, se le echó a los pies y le confesó todo.Él le dijo: «Hija, tu fe te ha curado. Vete en paz y con salud.» Todavía estaba hablando, cuando llegaron de casa del jefe de la sinagoga para decirle: «Tu hija se ha muerto. ¿Para qué molestar más al maestro?» Jesús alcanzó a oír lo que hablaban y le dijo al jefe de la sinagoga: «No temas; basta que tengas fe.»No permitió que lo acompañara nadie, más que Pedro, Santiago y Juan, el hermano de Santiago. Llegaron a casa del jefe de la sinagoga y encontró el alboroto de los que lloraban y se lamentaban a gritos. Entró y les dijo: «¿Qué estrépito y qué lloros son éstos? La niña no está muerta, está dormida.»Se reían de él. Pero él los echó fuera a todos, y con el padre y la madre de la niña y sus acompañantes entró donde estaba la niña, la cogió de la mano y le dijo: «Talitha qumi (que significa: contigo hablo, niña, levántate).»La niña se puso en pie inmediatamente y echó a andar –tenía doce años–. Y se quedaron viendo visiones. Les insistió en que nadie se enterase; y les dijo que dieran de comer a la niña. Palabra del Señor. 89 Tuve hambre y me diste de comer Meditación Nuestro Dios es un Dios de vida, de vivos, que defiende la vida y la sana; además no quiere la vida de cualquier manera, sino una vida fuerte y digna para todos y todas. Ese amor de Dios a la vida se convierte en fuerza sanadora y salvadora. Las lecturas de hoy nos quieren situar en la realidad personas: La enfermedad, además del dolor, muchas veces nos lleva al límite porque nos hace experimentar la impotencia, el depender de los demás, perder no solo las fuerzas, sino el ánimo, la ilusión. Si a la enfermedad le añadimos el misterio de la muerte corremos el peligro de rebelarnos, desesperarnos, no aceptarla ni en nosotros ni en los seres queridos. Y ante esta situación las lecturas de hoy no nos proporcionan la “solución”; es decir, por mucha fe que tengamos en Cristo Jesús no vamos a dejar de morir; pero sí nos iluminan para que sepamos aceptarla desde la fe en Dios. Dios no ha creado la muerte, nos dice el libro de la Sabiduría, ya que Dios lo creó a su imagen para que viviera para siempre. Desde el Evangelio, Cristo ha venido a vencer la enfermedad y la muerte. Desde la perspectiva de Cristo la muerte no es definitiva, hay alguien por encima de ella y que la ha vencido resucitando a la niña, pero sobre todo con su propia resurrección. Aquel Cristo sigue hoy a nuestro lado para que le toquemos y nos dejemos tocar por Él en los momentos de sufrimiento y de dolor. A la Iglesia le corresponde continuar la misión de Cristo, dando vida, ánimo, esperanza y defendiendo la vida contra todos los ataques a que es sometida en estos momentos. Pensamos en el aborto, pero no podemos olvidarnos de la guerra, de la violencia, de la eutanasia y de la pena de muerte. Si terminamos así, nos quedamos parcializados, porque hay otra manera de matar a miles y millones de personas todos los días, todos los años, y es la injusticia, el hambre, la miseria. Cuando la segunda lectura de hoy nos habla de la igualdad, de que Dios quiere la igualdad, nos está hablando de esto, de la caridad y la generosidad con los demás, sobre todo con los más necesitados. ¿Por qué será que muchos, muchísimos católicos y católicas defendemos la vida, hasta con radicalidad, cuando se habla del aborto, de la eutanasia, de la guerra, y no nos preocupa nada o casi nada la injusticia, la miseria, el hambre? Todos los años mueren muchos más millones de personas por la falta de igualdad, por la miseria a la que son sometidas, por el mal reparto de los bienes materiales, que por las guerras, los abortos y las penas de muerte. Que el Dios de la vida nos dé la fuerza para ser defensores de la vida en todo momento y sobre todo con la caridad y preocupación por los millones y millones de personas que están muriendo de necesidad y no de muerte natural. 90 Plan de Pastoral - Junio 2015 Oración de los fieles Quien preside: Con toda confianza acudimos al Padre de la vida a presentarle nuestras necesidades y las de nuestro pueblo. A cada petición respondemos: Padre, ayúdanos a levantarnos y a levantar a los demás. 1.-Por la Iglesia, para que ayude a las personas a encontrar la fe y con ella a dar sentido y valor a sus vidas. Oremos. 2.- Por quienes gobiernan la República Dominicana, por los poderes económicos, sociales y políticos, para que trabajen por la igualdad de hombres y mujeres. Oremos. 3.- Por los enfermos de cualquier clase de enfermedad, para que sientan la presencia de Dios en quienes les curan y atienden, y para que los cuidadores se conviertan en la mano de Cristo que les toca y les cura. Oremos. 4.-Por cada uno de nosotros y nosotras, para que nos acerquemos a Cristo, le toquemos y nos dejemos tocar por Él, para darle sentido a nuestra vida y podamos vivir felices y compartir felicidad. Oremos. 5.-Por los Consagrados y Consagradas, para que estando presentes en las “periferias existenciales”, es decir con los más excluídos, se conviertan en la presencia de Dios que cuida la vida. Oremos. 6.-Por la Pastoral Social de nuestra comunidad, que se convierta en uno de los canales por los que hacemos realidad la caridad personal y comunitaria. Quien preside: Señor que amas la vida y la defiendes en todo momento, escucha estas nuestras oraciones y haz que tu caridad nos mueva a cuidar la vida de los demás y a vencer con Cristo la enfermedad y la muerte. Te lo pedimos por Jesucristo nuestro Señor. 29 Solemnidad: San Pedro y San Pablo, Apóstoles Lunes Rojo 5ª Aniversario de la Ordenaciòn Episcopal de Mons. Víctor Masalles Pére, Obispo Auxiliar de Santo Domingo Lectura del libro de los Hechos de los Apóstoles 12, 1-11 En aquellos días, el rey Herodes inició una persecución contra algunos miembros de la Iglesia. Mandó ejecutar a Santiago, hermano de Juan, y, viendo que este modo de proceder agradaba a los judíos, se propuso arrestar también a Pedro. En aquellos días se celebraba la fiesta de la pascua. Así que lo detuvo, lo metió en la cárcel y encomendó su custodia a cuatro escuadras de soldados, con intención de hacerlo comparecer ante el pueblo después de la pascua. Mientras Pedro estaba en la cárcel, la Iglesia oraba sin cesar a Dios por él. La noche anterior al día en que Herodes pensaba hacerlo comparecer, estaba Pedro durmiendo entre dos soldados, atado con dos cadenas, mientras dos guardias vigilaban la puerta de la cárcel. En esto, el ángel 91 Tuve hambre y me diste de comer del Señor se presentó y un resplandor iluminó la celda. El ángel despertó a Pedro tocándole el costado y le dijo: «¡Rápido, levántate!» Y las cadenas se le cayeron de las manos. El ángel le dijo: «Vístete y ponte las sandalias». Pedro lo hizo así, y el ángel le dijo: «Cúbrete con tu manto y sígueme». Pedro salió detrás de él, sin darse cuenta de que era realidad aquello que sucedía por intervención del ángel; pensaba más bien que se trataba de una visión. Después de pasar la primera y la segunda guardia, llegaron a la puerta de hierro que da a la calle, y se les abrió sola. Salieron y llegaron al final de la calle; de pronto, el ángel desapareció de su lado. Y Pedro, volviendo en sí, dijo: «Ahora me doy cuenta de que el Señor ha enviado a su ángel, para librarme de Herodes y de todo lo que los judíos tramaban contra mí».Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 33 R/ “El Señor me libró de todas mis ansias” Bendigo al Señor en todo momento, su alabanza está siempre en mi boca. Mi ser se gloría en el Señor, que los humildes lo oigan y se alegren. R. Engrandezcan conmigo al Señor, ensalcemos juntos su nombre. Busqué al Señor y él me respondió, me libró de todos mis temores. R. Miren hacia él, quedarán radiantes, y la vergüenza no cubrirá sus rostros. Cuando el humilde invoca al Señor, él lo escucha y lo salva de todas sus angustias. R. El ángel del Señor viene a acampar en trono a sus fieles y los protege. Gusten y vean qué bueno es el Señor, dichoso el hombre que se refugia en él. R. Lectura de la segunda carta de san Pablo a Timoteo 4, 6-8.17-18 Querido hermano: Yo estoy a punto de ofrecer mi vida, y el momento de mi partida es inminente. He combatido el buen combate, he concluido mi carrera, he conservado la fe. Solo me queda recibir la corona de la salvación, que aquel día me dará el Señor, juez justo, y no solo a mí, sino también a todos los que esperan con amor su venida gloriosa.El Señor estuvo a mi lado y me fortaleció, para que el mensaje fuera plenamente anunciado por mí, y lo escucharan todos los paganos. Fui librado de la boca del león. El Señor me librará de todo mal y me dará la salvación en su reino celestial. A él la gloria por los siglos de los siglos. Amén.Palabra de Dios Lectura del Santo evangelio según san Mateo 16, 13-19 En aquel tiempo, de camino hacia la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: «¿Quién dice la gente que es el Hijo del hombre?» Ellos le contestaron: «Unos que Juan el Bautista; otros que Elías; otros que Jeremías o uno de los profetas». Jesús les preguntó: «Y según ustedes, ¿quién soy yo?» Simón Pedro respondió: «Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo». Jesús le dijo: «Dichoso tú, Simón, hijo de Juan, porque eso no te lo ha revelado ningún mortal, sino mi Padre que está en los cielos. Yo te digo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder de la muerte no podrá contra ella. Te daré las llaves del Reino de los cielos; lo que ates 92 Plan de Pastoral - Junio 2015 en la tierra quedará atado en el cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el cielo».Palabra del Señor. Meditación En este día, nuestra Santa Iglesia Católica, celebra la Solemnidad de San Pedro y San Pablo, pilares de nuestra Iglesia, en la cual con mucho respeto y admiración, agradecemos la entrega hasta el martirio de estos santos apóstoles. Tanto Pedro, como Pablo, movidos y sostenidos por el Espíritu Santo, y en tiempos de una férrea persecución contra los amigos de Jesús, cargaron sobre sus hombros, con mucha entrega y entusiasmo, la expansión de la “buena nueva”, la expansión del Evangelio de Jesucristo por todo el mundo de entonces. Es un día para agradecer la fe apostólica, que es también la nuestra. Una fe que siguió costando sangre en el martirio, una fe que debemos cuidar y alimentar con nuestro propio testimonio de vida. Una fe que también hoy está teniendo mártires ya que en algunos lugares del mundo los cristianos molestan, porque piensan y viven diferente, y por eso son martirizados, en ocasiones en grandes grupos y dentro de los propios templos. Hoy debemos también reflexionar y cuestionarnos nosotros mismos sobre nuestro rol en la continuidad y expansión de esa obra de salvación. Nos toca ser continuadores y continuadoras de la misión iniciada por Jesús, continuada por los apóstoles y hoy encomendada a nosotros y nosotras. Esa Misma obra que se nos encomendó también a nosotros para el bien eterno de otras almas que andan por ahí sedientas, cada día más, del mensaje de salvación (Mateo 28:19-20). Una encomienda que no nos libra del «martirio», del morir por Jesús en muchas áreas de nuestras propias vidas, con tal de abrazar sus preceptos de amor diariamente e inspirar a otros con nuestro testimonio a seguir Su plan de salvación eterna. La fe de los apóstoles es la fe de la Iglesia, una, santa, católica y apostólica. Desde la confesión de Pedro en Cesarea de Filipo, «cada día, en la Iglesia, Pedro continúa diciendo: ‘¡Tú eres el Cristo, el Hijo del Dios vivo!’» (San León Magno). Sigamos abrazando con entusiasmo nuestra fe! 30 Martes Feria o Memoria Libre: Santos Protomártires de la Santa Iglesia Romana Verde o Rojo Día de los Maestros Lectura del libro del Génesis 19,15-29 En aquellos días, los ángeles urgieron a Lot: «Anda, toma a tu mujer y a esas dos hijas tuyas, para que no perezcan por culpa de Sodoma.» Y, como no se decidía, los agarraron de la mano, a él, a su mujer y a las dos hijas, a quienes el Señor perdonaba; los sacaron y los guiaron fuera de la ciudad. 93 Tuve hambre y me diste de comer Una vez fuera, le dijeron: «Ponte a salvo; no mires atrás. No te detengas en la vega; ponte a salvo en los montes, para no perecer.» Lot les respondió: «No. Vuestro siervo goza de vuestro favor, pues me han salvado la vida, tratándome con gran misericordia; yo no puedo ponerme a salvo en los montes, el desastre me alcanzará y moriré. Mira, ahí cerca hay una ciudad pequeña donde puedo refugiarme y escapar del peligro. Como la ciudad es pequeña, salvaré allí la vida.» Le contestó: «Accedo a lo que pides: no arrasaré esa ciudad que dices. Aprisa, ponte a salvo allí, pues no puedo hacer nada hasta que llegues.» Por eso la ciudad se llama La Pequeña. Cuando Lot llegó a La Pequeña, salía el sol. El Señor, desde el cielo, hizo llover azufre y fuego sobre Sodoma y Gomorra. Arrasó aquellas ciudades y toda la vega con los habitantes de las ciudades y la hierba del campo. La mujer de Lot miró atrás y se convirtió en estatua de sal. Abrahán madrugó y se dirigió al sitio donde había estado con el Señor. Miró en dirección de Sodoma y Gomorra, toda la extensión de la vega, y vio humo que subía del suelo, como el humo de un horno. Así, cuando Dios destruyó las ciudades de la vega, arrasando las ciudades donde había vivido Lot, se acordó de Abrahán y libró a Lot de la catástrofe. Palabra de Dios. Salmo Responsorial: 25 R/. “Tengo ante mis ojos, Señor, tu bondad” Escrútame, Señor, ponme a prueba, sondea mis entrañas y mi corazón, porque tengo ante los ojos tu bondad, y camino en tu verdad. R/. No arrebates mi alma con los pecadores, ni mi vida con los sanguinarios, que en su izquierda llevan infamias, y su derecha está llena de sobornos. R/. Yo, en cambio, camino en la integridad; sálvame, ten misericordia de mí. Mi pie se mantiene en el camino llano; en la asamblea bendeciré al Señor. R/ Lectura del santo evangelio según san Mateo 8,23-27 En aquel tiempo, subió Jesús a la barca, y sus discípulos lo siguieron. De pronto, se levantó un temporal tan fuerte que la barca desaparecía entre las olas; él dormía. Se acercaron los discípulos y lo despertaron, gritándole: «¡Señor, sálvanos, que nos hundimos!»Él les dijo: «¡Cobardes! ¡Qué poca fe!» Se puso en pie, increpó a los vientos y al lago, y vino una gran calma. Ellos se preguntaban admirados: «¿Quién es este? ¡Hasta el viento y el agua le obedecen!» . Palabra del Señor. Meditación Cuánto nos parecemos a los discípulos. Ellos acababan de ser testigos de diversas sanaciones que Jesús había obrado. Basta leer los versículos anteriores: Jesús había sanado a un leproso, había curado al criado enfermo del centurión, en la casa de Pedro presenciaron la sanación de su suegra y esa misma tarde Jesús había expulsado a muchos espirítus endemoniados y sanado a muchos enfermos. 94 Plan de Pastoral - Junio 2015 Subieron a la barca con seguridad, sin imaginarse que al poco tiempo gritarían por sus vidas. ¿Se habían olvidado tan rápido de lo que habían sido testigos? Jesús les llamó “cobardes”, con “poca fe”, como si les reclamara, no saber con quien estaban. Y poniéndose de pie, ordenó al viento y al lago la calma. Aunque los discípulos le habían pedido que los salvara, no tenían suficiente fe y mucho menos sabían cómo podía hacerlo, porque se quedaron admirados de cómo lo hizo. Eso nos pasa con frecuencia, vamos tras las huellas de Jesús, viéndolo obrar maravillas, siendo muchas veces testigos de sanaciones y liberaciones. Eso nos entusiasma, nos anima y nos sentimos capaces de ir donde Dios lo disponga. Es como cuando nos sentimos orgullosos y privilegiados de ser de los elegidos del Señor, de pertenecer a una comunidad parroquial, a un ministerio, a un movimiento, a un grupo de oración o hasta una congregación. Pero el Señor, que no se conforma con eso, quiere llevarte mar adentro, donde ya no dependas de tus fuerzas, de tus habilidades, de tus destrezas. El solo quiere que le acompañes a la otra orilla, pero para eso debes atravesar las aguas, donde a veces soplan vientos fuertes y se tambalea nuestra barca, que es la vida misma. Como los apóstoles, nos podemos desesperar, olvidándonos quien nos acompaña, quien nos invitó a subir. Pero Jesús, en su infinita misericordia, se levanta y viene en nuestro auxilio cuando le llamamos. Para el Señor no hay nada imposible y Él nos quiere invitar en el día de hoy a que confiemos en Él, que no importa en qué situación de dificultad nos encontremos, qué prueba tan grande estemos pasando: si enfermedad, falta de trabajo, ausencia de un ser querido, deudas, depresión o cualquier situación, que nos dé la sensacion de que nos hundimos, que no podemos más, solo clámale con la fe de quien espera en Jesús y Él traerá Paz a tu vida. ¡Confia en el Señor! Hoy es el día del Maestro en República Dominicana, no nos olvidemos de orar por ellos y ellas, y de exigir una mejor educación en todos los niveles. Que el Señor Bendiga a todos los maestros y maestras de nuestro país, y que su labor sea cumplir con una vocación muy importante. El presente y el futuro de República Dominicana depende mucho de los maestros y maestras. 95 Tuve hambre y me diste de comer 96
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