2015, año de i nflexión

Fecha: 14/01/2015
Opinión
Página: 32
Columnas
Area cm2: 251
Columnista invitado
Costo:
27,108
1 / 1
Rafael Martínez Duclaud
COLUMNA INVITADA
I • • • • ^
Rafael Martínez Duclaud [email protected]
2015, año de i nflexión
La esperanza para México no está en el
mejoramiento de la economía por las
reformas que se están implementando
En el 2012 se publicó un libro bajo el tíralo ¿Por qué fra­
casan las países?, escrito por dos profesores de Har ­
vard: Daron Acemogluy James Robinson. Los autores
analizan porqué existen países que a lo largo de su historia se
han enriquecido y actualmente son prósperos, mientras que
otros se empobrecen cada vez más, junto con la mayoría de sus
habitantes.
Después de un recuento histórico, y con hechos concretos
y pese a lo que se pudiera pensar, se eliminan teorías y se de ­
rribanparadigmas: la riquezay pobreza de las naciones NO se
explica por razones de educación, recursos naturales, tecno­
logía, raza o religión de sus habitantes.
rentes, en donde los niveles de responsabilidad de las institu ­
ciones propicien bienes y servicios adecuados, entonces nos
podemos explican las diferencias económicas y sociales entre
ambas ciudades.
Soy de la opinión de que la esperanza para México en el 2015
no está en el mejoramiento de la economía por las reformas
que se están implementando. La factibilidad de un cambio real
se encuentra, como comentan los académicos de Harvard, en
la creación y renovación de nuestras instituciones para buscar
el bienestar de la población.
Los hechos recientes en México, — es decir, lo sucedido en
Ayotzinapa, Tlatlaya, en el Politécnico; los movimientos que
De acuerdo con los académicos, son las instituciones de ca­ se están dando en redes sociales con el "#YaMeCanse, por eso
propongo" — cuestionan al mismo presidente, a su esposa, a
da país las que marcan las diferencias; es decir, mientras que
secretarios de Estado, amilitares, a la policía y a la iglesia. Ins­
en algunas sociedades o países se crean instituciones inclu­
yentes que reparten la riqueza existente y dan una amplia po­ tituciones y personas que antes eran intocables. Situaciones
sibilidad de participación a sus habitantes, otras instituciones inéditas, o al menos nadie cuestionó a tantos en tan breve es­
son extractivas, ya que sólo extraen recursos de sus habitantes pacio de tiempo. Difícilmente tendremos un México igual des­
negándoles una participación activa en el desarrollo económi ­ pués de lo que ocurrió en este 2014.
co de una comunidad.
Estas manifestaciones sociales, que seguramente crecerán
en el 2015, nos anuncian un punto de inflexión en la relación
Los autores dan algunos ejemplos: Corea del Sur vs Corea
del Norte; Alemania Occidental vs Alemania Oriental. Al estu­ entre la sociedad y las instituciones, hasta afectar las relacio­
diar el caso mexicano se hace referencia en la diferencia de la
nes de poder actual. Cambios que se tienen que dar sin violen­
calidad de vida entre Nogales Arizona (Estados Unidos) y No­ cia como debe ocurrir en cualquier sociedad civilizada.
La clave está en colocar a la persona adecuada en el pues ­
gales Sonora (México). Las diferencias entre las 2 son abisma­
les. Estas diferencias no tienen nada que ver con la geografía o to adecuado en cada institución. Aunado a esto, una cultura de
la cultura, ya que en Nogales de Estados Unidos la población es rendición de cuentas y transparencia de los responsables y un
básicamente latina: son los mismos mexicanos con su cultu­
sistema de justicia que se encargue de castigar la corrupción,
la impunidad, el tráfico de influencias y otros lastres de nues­
ra de siempre.
Pero si se pone, agrega el profesor Robinson, a la misma
tras instituciones. El proceso está en marcha. Aunque lento, es
gente con la misma cultura en ambientes institucionales dife ­ irreversible.