Reglas de evolución fonética del latín al castellano

Apéndice
A
La lengua latina
1.1 Los orígenes del latín. El indoeuropeo
El castellano deriva del latín; también el catalán y el gallego. El euskera o vasco
no deriva del latín y, sin embargo, utiliza el mismo alfabeto. Por otra parte, el
euskera es una lengua flexiva como el latín. El castellano, el catalán y el gallego
no son lenguas flexivas, aunque derivan del latín.
Sirvan estas reflexiones para dar a entender que la lengua que cada uno de nosotros
hablamos tiene una historia y unas características realmente apasionantes. Aprendemos a leer y a escribir, pero con frecuencia no sabemos de dónde procede la lengua
que hablamos ni el alfabeto del que nos servimos para escribir.
La mayoría de las lenguas que se hablan en España derivan del latín. A su vez, el latín deriva del indoeuropeo, al igual que la mayoría de las lenguas habladas en Europa y el oeste de Asia, ya en la Edad de Bronce. No hay ningún documento escrito en
esa lengua, que se ha podido reconstruir parcialmente a partir del parentesco entre
las diversas lenguas que derivan de él.
En torno al año 2000 a.C., el pueblo indoeuropeo se fragmentó en pueblos diferentes, que en un principio comenzaron a moverse hacia el sur y este de Asia y, que varios siglos después, en torno al año 1000 a.C., lo hicieron hacia el oeste.
Así, siguiendo la historia de los pueblos indoeuropeos, ya fragmentados, el indoeuropeo se escindió en dos ramas: una oriental (rama de lenguas con palatalización de
oclusivas, llamada satem) y otra occidental (rama de lenguas llamadas centum, sin
palatalización de oclusivas).
El latín es, pues, una lengua indoeuropea de la rama occidental y del tronco greco-itálico. El latín y el griego, por razón de sus orígenes, tienen muchos puntos en
común. Si te inicias simultáneamente en el estudio de ambas lenguas, te será de gran
utilidad no perder de vista este hecho innegable.
Las lenguas indoeuropeas
Rama oriental
Grupo
Indo-iranio
Armenio
Lenguas antiguas
India: védico, sánscrito
Irán: persa antiguo, avéstico
Lenguas modernas
Neo-indio, nepalí, bengalí y
dialectos de Paquistán, Irán
y Afganistán
Armenio antiguo
Armenio moderno
Eslavo
Antiguo eslavo
Ruso, bielorruso, polaco, checo,
ucraniano, búlgaro, serbocroata,
esloveno, eslovaco
Báltico
Antiguo báltico
Lituano, letón
1
Rama occidental
Grupo
Lenguas antiguas
Lenguas modernas
Griego antiguo
Griego moderno
Latín, osco-umbro
Lenguas romances: castellano,
catalán, gallego, francés,
italiano, portugués,
provenzal, retorromano,
rumano y sardo
Germánico
Gótico
Alemán, holandés, inglés,
sueco, danés, noruego,
islandés
Celta
Celta
Irlandés, escocés, galés, bretón
Anatolio
Hitita
———
Tocario
Tocario
———
Griego
Itálico
Sin embargo, mientras que la lengua griega quedó circunscrita al territorio griego, la lengua latina evolucionó notablemente con el paso de los siglos y se expandió fuera de la zona geográfica que la vio nacer y crecer: el Lacio, en el corazón de Italia.
1.2 El latín culto
En el siglo VI a.C., en la península itálica se hablaban varias lenguas, muchas de ellas
de procedencia no indoeuropea: mesapio, véneto, griego, osco-umbro (indoeuropeas); etrusco, ligur y púnico (no indoeuropeas). A medida que Roma fue extendiendo
su dominio fuera del Lacio, el latín se afianzó como lengua de la península itálica.
Prácticamente a fines del siglo III a.C., en toda Italia se hablaba latín. La victoria de
Roma sobre Cartago abrió las puertas a una expansión de Roma hacia el sur –norte
de África– y hacia el oeste –Hispania y el sur de la Galia.
Entre los siglos III y I a.C., los romanos extendieron su poderío por el este de Europa;
las Baleares, Grecia, el Asia Menor e, incluso, Siria y Egipto. Sucedió lo mismo años
más tarde en el norte de la Galia, en las islas Británicas, en la parte occidental de Germania y en las tierras aledañas al Danubio. Casi toda Europa hablaba latín a fines del
siglo III d.C. Las lenguas autóctonas en muchos casos siguieron hablándose, pero no
pudieron sustraerse a los efectos de la romanización; uno de ellos fue, precisamente,
la implantación de la lengua latina entre la población. Cuando el Imperio se fragmentó en dos ramas, occidental y oriental, las provincias pertenecientes a esta última se
desprendieron de las influencias latinas y, en ellas, el griego fue la lengua culta por excelencia.
No obstante, la semilla del latín germinó en toda Europa.
Ahora bien, el latín que se hablaba y se escribía en el Lacio en el siglo III a.C. no era,
obviamente, el mismo que se hablaba en cualquier punto del Imperio en el siglo IV
d.C. A lo largo de los siglos, el latín culto evolucionó y pasó por siete fases:
2
Apéndice
A
Latín arcaico (siglos VI al III a.C.). Era un latín preliterario. Solo disponemos de
textos epigráficos; no tenemos ningún texto literario.
Latín preclásico (siglos III a I a.C.). Aparecieron los primeros textos literarios.
La lengua se fue desarrollando de forma muy notable.
Latín clásico (de mediados del siglo I a.C. a mediados del siglo I d.C.). En esos
años, el latín conoció la edad dorada de su literatura.
Latín posclásico (desde mediados del siglo I d.C. al siglo II d.C.). La lengua mantuvo características similares a las de la época anterior. Los escritores no tenían el
altísimo nivel del período clásico, pero mantuvieron un elevado prestigio y un estilo elegante.
Latín tardío (siglos II a VII). La decadencia y el final del Imperio vieron la desintegración paulatina del latín y la formación de las llamadas lenguas romances.
Latín medieval (siglos VII a XIV). Durante la Edad Media, el latín ya no se hablaba. Las lenguas romances fueron consolidándose, en tanto que el latín pasó a
ser una lengua escrita por los hombres cultos de la época. Se trataba, no obstante, de un latín muy distante del de la Edad Dorada.
Latín humanístico (siglo XV en adelante). Dentro del movimiento renacentista, los estudiosos que conocemos con el nombre de humanistas iniciaron un
movimiento de recuperación del mejor latín de la época clásica, que fue lengua
escrita y también hablada en los foros cultos. No se alcanzó el brillo ni el esplendor de los mejores días, pero sí hubo una revitalización importante, que,
sin embargo, no consiguió eclipsar a las lenguas romances, que se consolidaron
y alcanzaron el apogeo de su producción literaria.
Hasta bien entrado el siglo XVIII, el latín se siguió utilizando como medio de expresión científica (Newton, Spinoza, Linneo, etc.), y continuó siendo la lengua oficial
de la Iglesia católica.
1.3 El latín vulgar. Las lenguas romances
No todos los hablantes del latín se expresaban de igual modo. Al igual que sucede hoy
día con nuestros propios idiomas, las diferencias culturales y sociales de los hablantes
se reflejaban en la lengua. Frente a un latín culto, oficial, literario, existía un latín llamado vulgar, de carácter espontáneo y coloquial, hablado por los campesinos, soldados y súbditos del Imperio alejados de Roma. Precisamente de ese latín vulgar, cada
vez más apartado de las normas gramaticales clásicas, nacerían en Europa las llamadas
lenguas romances: castellano, catalán, gallego, francés, italiano, portugués, provenzal,
retorromano, rumano, sardo... El latín que vas a aprender no es el latín vulgar, sino
básicamente el latín clásico de los mejores días de la civilización romana. Según cuál
sea tu lengua materna, encontrarás más o menos parecidos y diferencias.
1.4 El alfabeto latino
Los romanos tomaron el alfabeto del griego por vía de los etruscos. En sus orígenes,
tenía 21 letras o grafemas:
A B C D E F G H
I
K L M N O P Q R S T V X
a b c d e
i
k
f
g h
l m n o p q
r
s
t
u x
3
Después, se incorporaron dos más, la Y/y y la Z/z, para poder transcribir palabras de
origen griego.
Sobre su pronunciación, tenemos que tener en cuenta:
– La c se pronuncia siempre como (k): Cicero (kíkero).
– La g se pronuncia siempre suave: genius (guénius), gaudeo (gáudeo). En la serie gu
se pronunciaba siempre la u, incluso seguida de i, e: sanguis (sángüis), unguem
(úngüem).
– La h no se pronuncia: hostis (óstis). Tampoco en los grupos ch, rh y th, transcripción de grafías griegas: cholera (kólera), rhetoricus (retórikus), theatrum (teátrum).
En cambio, el grupo ph, transcripción de la grafía griega φ, se pronuncia como
/f/: philosophus (filósofus).
– La grafía i es una semivocal. Representa el sonido vocálico -i- en contexto consonántico y un sonido consonántico -y- ante vocal: cinis (kínis), iam (yám).
– La doble l se pronunciaba como tal: puella (puél·la).
– La q iba siempre seguida de u, que sí se pronunciaba: quinque (kuínkue), quoque
(kuókue).
– También la u es una semivocal. Aunque en época clásica se pronunciaba siempre
como /u/, pronto empezó a tener una realización consonántica en contexto vocálico, cercana a la /b/. Nosotros distinguiremos ambas realizaciones con las grafías
u y v: tuus (túus), vivus (bíbus).
– La grafía x representa un sonido doble (k, g + s): dux (dúks), rex (régs).
– Las grafías y y z representaban las correspondientes grafías griegas υ y ζ, por lo
que se pronunciaban como la /ü/ francesa y como (ds): zephyrus (dséfürus),
Zacynthus (dsakǘntus).
ACTIVIDADES
1 Lee el siguiente poema de Catulo:
Iucundum, mea vita, mihi proponis amorem
hunc nostrum inter nos perpetuumque fore.
Di magni, facite ut vere promittere possit,
atque id sincere dicat et ex animo,
ut liceat nobis tota perducere vita
aeternum hoc sanctae foedus amicitiae.
Catulo CIX
2 Lee las siguientes palabras:
charta pulchra
splendida gaza
sagittarii Parthi
4
Byzantium
nox perpetua
quisque
ephebus
Bithynia
brevis lux
Apéndice
A
1.5 La clasificación de los sonidos
Vocales
El latín clásico contaba con cinco grafías (a, e, i, o, u), que representaban diez sonidos, cinco vocales largas y cinco breves. No se distinguían gráficamente las vocales
largas de las breves (los signos diacríticos ˘ y ¯ para indicar si una vocal es breve o larga son de época moderna):
ı̆
ŭ
ı̄
ū
ĕ
ŏ
ē
ă
ō
ā
En época tardía, el latín vulgar neutralizó esa oposición entre largas y breves para
crear otra, entre abiertas y cerradas, distinción que ha perdurado en lenguas romances como el francés.
Diptongos
El latín contaba con pocos diptongos. Los más frecuentes eran ae, au y oe: paeninsula, audax, poena.
Consonantes
Podemos clasificar las consonantes del alfabeto romano en:
– Oclusivas:
bilabiales
dentales
guturales
sordas
p
t
c, k, q
sonoras
b
d
g
– Nasales: m (bilabial), n (dental).
– Líquidas: l (lateral), r (vibrante).
– Fricativas (silbantes): f (labiodental), s (alveolar).
1.6 La acentuación
La tilde como signo gráfico para indicar el acento era inexistente en latín. No obstante, pueden hacerse algunas observaciones:
– En general, no hay palabras agudas en latín. Las palabras monosilábicas son tónicas
salvo preposiciones, conjunciones y enclíticas: in_té; páx et_léx; máter patérque (-que);
máter patérve (-ve).
– Las palabras bisílabas llevan el acento siempre en la primera sílaba: páter, dómus,
sílva, lúpus.
– Las palabras de más de dos sílabas se acentúan en función de la cantidad de la
penúltima sílaba. Si la penúltima es larga, la palabra es llana; si es breve, la palabra es esdrújula: monē´ bat, vívĕre.
5
Determinar la cantidad de la penúltima sílaba en cada caso implica cierta complejidad, que irás venciendo poco a poco. No obstante, nos puede ayudar saber que:
– Los diptongos hacen sílaba larga.
– Una vocal seguida de consonante doble (x, z) o de dos o más consonantes (salvo
oclusiva + líquida) es larga: interdı̄ xi, inlūstris, etc.
– Una vocal delante de otra vocal es breve: mar ı̆a, habŭerit, etc.
ACTIVIDADES
3 Clasifica los sonidos consonánticos de estas palabras, di dónde llevan el acento
y por qué:
Apollo
hospitium
Vlixes
moenia
vox
illius
superbum
cornea
tristia
1.7 Las clases de palabras
Los gramáticos antiguos clasificaron las palabras en f lexivas o variables e inf lexivas o invariables.
Dentro de las primeras, encontramos en latín sustantivos, adjetivos, pronombres,
verbos, pero no artículos, puesto que en latín no hay ningún tipo de artículo.
En la traducción, el contexto nos indicará si recurrir al determinado, al indeterminado o, incluso, traducir sin artículo: arma podremos traducirlo según el contexto
por «las armas», «unas armas» o «armas».
Dentro de las segundas, están los adverbios, conjunciones, preposiciones e interjecciones.
Sustantivos, adjetivos y verbos, como sucede en la mayoría de las lenguas, son las palabras de mayor uso e importancia. Presentan algunas características específicas.
1.8 El sistema nominal
En latín hay tres géneros: masculino, femenino y neutro, y no dos como en castellano. Muchos de los seres inanimados son del género neutro. Existen en latín
dos números: singular y plural, aunque algunas palabras carecen del primero y
solo se emplean en plural (pluralia tantum). Ej.: divitiae -arum: «riquezas», moenia
-ium: «murallas», arma -orum: «armas».
Pero lo más llamativo para los hablantes de las lenguas románicas (no para los hablantes del vasco, griego, ruso, eslovaco, alemán) es la existencia de una categoría llamada caso.
El latín ha conservado seis casos:
Nominativo
6
Vocativo
Acusativo
Genitivo
Dativo
Ablativo
Apéndice
A
El caso sirve para indicar la función de la palabra en la oración. A cada caso suele corresponder una función básica:
Nominativo
Función sujeto (S) y atributo (Atr.)
Vocativo
Función apelativa (Voc.)
Acusativo
Función complemento directo (CD)
Genitivo
Función adyacente complemento de nombre (Ady.-CN)
Dativo
Función complemento indirecto (CI)
Ablativo
Función complemento circunstancial (CC)
El sustantivo, el adjetivo o el pronombre mantienen su raíz o lexema, pero, al
igual que el verbo va cambiando de morfemas y desinencias para expresar diferentes tiempos, modos, números o personas, van modificando su desinencia para
expresar la función sintáctica que desempeñan en la oración. A las diversas formas que presenta un sustantivo, adjetivo o pronombre al cambiar su desinencia
(conjunto de formas casuales) se le denomina declinación. Así, una palabra
como consul: «cónsul», presenta la siguiente declinación:
Singular
Plural
Nominativo
consul
consules
Vocativo
consul
consules
Acusativo
consulem
consules
Genitivo
consulis
consulum
Dativo
consuli
consulibus
Ablativo
consule
consulibus
ACTIVIDADES
4 Según su función sintáctica, di el caso que corresponde a los sintagmas subra-
yados de estas oraciones:
– Crearon en Roma una nueva magistratura.
– El pueblo romano entrega el reino a Numa Pompilio.
– El segundo año, Tarquinio hizo la guerra a los romanos.
– En el primer año nombraron cónsules a Bruto y a Colatino.
– Numa Pompilio fue un gran gobernante para Roma.
– Tarquinio Colatino se había marchado de la ciudad a causa de su nombre.
– Tarquinio el Antiguo entró el primero en Roma con honores de triunfo.
– Tras veinte años, los romanos emprendieron la guerra.
– Un buen rey procura muchos beneficios a su reino.
7
1.9 Las declinaciones en latín
En latín existen cinco declinaciones. Los sustantivos latinos se reparten en estas cinco declinaciones según su tema:
Declinación
Tema
1.ª
2.ª
3.ª
4.ª
5.ª
a
o
i / cons.
u
e
De tal forma que luna- (tema en -a) pertenece a la primera declinación, populo(tema en -o) a la segunda, sol- (tema en consonante) a la tercera, mari- (tema en -i) a
la tercera, senatu- (tema en -u) a la cuarta y die- (tema en -e) a la quinta.
ACTIVIDADES
5 Indica la declinación a la que pertenecen los siguientes temas:
pueritiaexercituleon-
proelioovimulier-
pacfidefluvio-
A estos temas se añaden las desinencias de cada caso: terra-rum, virtut-is, deo-rum,
etc. Ocurrió, no obstante, que la unión de las vocales finales del tema con las vocales
de las desinencias produjo fusiones vocálicas que no siempre permiten separar el
tema de la desinencia. Esto nos va a dificultar a veces distinguir claramente la desinencia de un determinado caso, por lo que hablaremos de terminación de un caso.
Podemos conocer a qué declinación pertenece una palabra mediante su enunciado.
Un sustantivo se enuncia mediante el nominativo y el genitivo singular: terra ae, locus -i, etc.
La terminación del genitivo singular nos indicará a qué declinación pertenece el sustantivo:
1.ª
2.ª
3.ª
4.ª
5.ª
-ae
-i
-is
-us
-ei
De tal forma que: vita -ae (1.ª, tema en -a), servus -i (2.ª, tema en -o), rex regis (3.ª,
tema en consonante), metus -us (4.ª, tema en -u) y dies -ei (5.ª, tema en -e).
Las lenguas romances han perdido la categoría de caso.
ACTIVIDADES
6 Indica la declinación y el tema de los siguientes sustantivos:
amicitia -ae
factum -i
acies -ei
8
lex legis
annus -i
motus -us
exitus -us
villa -ae
ignis -is
Apéndice
A
1.10 El sistema verbal
La agrupación del verbo en conjugaciones en relación con la vocal distintiva del tema de
presente es muy semejante a la del verbo en las lenguas romances. Así, el verbo latino
tiene cuatro conjugaciones:
1.ª: ama-re
2.ª: habe-re
3.ª: leg-e-re
4.ª: audi-re
Igualmente, el sistema de modos, tiempos y aspectos resultará semejante en muchos
casos al de tu lengua materna y, por supuesto, al castellano. Tampoco notarás grandes novedades en lo referente a las voces –activa y pasiva–; número –singular y plural–, y persona (1.ª, 2.ª, 3.ª).
Existen tres modos personales: indicativo, subjuntivo, imperativo.
Sistema de presente (Infectum)
Indicativo
Subjuntivo
presente
presente
pretérito imperfecto
pretérito imperfecto
futuro imperfecto
–––––––
El sistema de tiempos y aspectos te resultará igualmente familiar; es el siguiente:
Sistema de perfecto (Perfectum)
Indicativo
Subjuntivo
pretérito perfecto
pretérito perfecto
pretérito pluscuamperfecto
pretérito pluscuamperfecto
futuro perfecto
–––––––
Para entender el funcionamiento del verbo latino, será necesario asimilar, además, el
concepto de tema verbal. Si observas un verbo inglés, ej.: to drink, drank, drunk, notarás que hay tres raíces diferentes: una para el presente, otra para el pasado y otra
para el participio. En latín se da un fenómeno semejante. Se distinguen tres temas de
los que derivan los distintos tiempos:
Tema de presente. De él derivan el presente de indicativo, de subjuntivo, de infinitivo y de participio. También, el imperfecto de indicativo y de subjuntivo y el
futuro imperfecto.
Tema de perfecto. De él derivan el perfecto de indicativo, de subjuntivo, de infinitivo. También, el pluscuamperfecto de indicativo y de subjuntivo, y el futuro
perfecto.
Tema de supino. De él se derivan el infinitivo de futuro, el participio de futuro y
el participio de perfecto.
9
Enunciar un verbo consiste, pues, en señalar ordenadamente los temas de presente,
perfecto y supino. Partiendo de esos temas, se configuran las distintas formas verbales mediante la adición de morfemas temporales-modales y de desinencias personales, que marcan además la voz.
De forma progresiva, ordenada y sistemática irás viendo los aspectos más importantes de la flexión nominal y de la flexión verbal.
ACTIVIDADES A PARTIR DE UN TEXTO
Son estas las primeras palabras del primer discurso que pronunció Cicerón contra
Catilina (Lucio Sergio Catilina), quien preparaba una conspiración para hacerse
con el poder. Son palabras plenas de vehemencia y belleza.
Quo usque tandem abutere, Catilina, patientia nostra? quam diu etiam furor iste
tuus nos eludet? quem ad finem sese effrenata iactabit audacia? Nihilne te nocturnum
praesidium Palati, nihil urbis vigiliae, nihil timor populi, nihil concursus bonorum
omnium, nihil hic munitissimus habendi senatus locus, nihil horum ora voltusque
moverunt? Patere tua consilia non sentis, constrictam iam horum omnium scientia teneri coniurationem tuam non vides? Quid proxima, quid superiore nocte egeris, ubi
fueris, quos convocaveris, quid consili ceperis quem nostrum ignorare arbitraris? O
tempora, o mores! Senatus haec intellegit, consul videt; hic tamen vivit. Vivit? immo
vero etiam in senatum venit, fit publici consili particeps, notat et designat oculis ad
caedem unum quemque nostrum.
Cicerón, Contra Catilina I, 1-2
1. Lee el texto en clase, siguiendo las indicaciones del profesor.
2. Señala las palabras que creas conocer por su parecido con tu lengua y di su posible
significado.
3. Clasifica los sonidos de la primera oración.
4. Localiza las palabras de más de dos sílabas, intenta identificar su cantidad y, por tan-
to, su acentuación.
10
Apéndice
A
2 Evolución fonética del latín
2.1 Selección de las 25 principales reglas
Las lenguas romances provienen de la evolución del latín vulgar, pero el latín culto no dejó de
influir en ellas tras su creación. De este modo, el léxico de origen latino de las lenguas romances se
conforma por dos vías principalmente: las palabras patrimoniales y los cultismos.
Las palabras patrimoniales son aquellas que derivan directamente del latín y han experimentado
todos los cambios fonéticos propios de cada lengua romance, cambiando, en general, profundamente de forma respecto del original latino; así oculum > cast. ojo, cat. ull, gal. ollo.
Los cultismos son aquellos términos que, por no existir en las lenguas romances ya formadas, se toman
o se forman directamente del latín clásico, por lo que están muy poco evolucionadas y mantienen una
gran semejanza con la palabra latina original; cast. oculista, cat. oculista, gal. oculista.
Hay también algunas palabras que no han completado su evolución, sino que la han visto interrumpida, en general por influjos cultos (vocabulario eclesiástico, etc.), son los llamados semicultismos, así en castellano encontramos procedente de seaculum > cast. siglo (en vez de un inexistente ‘sejo’ que hubiéramos encontrado de haberse completado la evolución).
A menudo, de un mismo término latino han derivado una palabra patrimonial y un cultismo, son
los llamados dobletes, así de plenum encontramos en castellano “pleno” y “lleno”.
1
Pérdida de -m latina en final de palabra
historiam > cast.: historia, cat.: història, gall.: historia.
– iram
– fabricam
2
– diatribam
– gloriam
– disciplinam
– victoriam
– materiam
– fortunam
Apócope: la -e final átona latina en ciertos contextos ha desaparecido
rivalem > cast.: rival, cat.: rival, gall.: rival.
– amorem
– vilem
3
– tutorem
– exclamare
– augurem
– vigorem
– errare
– tribunalem
La -u final átona latina pasa a -o. El catalán pierde frecuentemente la -o.
cruentum > cast.: cruento, cat.: cruent, gall.: cruento.
– animum
– odium
– murum
– futurum
– solum
– publicum
– exitum
– gremium
11
4
La s- inicial latina seguida de otra consonante desarrolló una vocal e- protética
studium > cast.: estudio, cat.: estudi, gall.: estudio.
– specialem
– structuram
– statutum
– stare
5
– stadium
– studium
– sperare
– scribam
El diptongo ae pasó a e
aedificium > cast.: edificio, cat.: edifici, gall.: edificio.
– praemium
– aestivalem
6
– praesidium
– praesentem
– praeparare
– taeniam
– taedium
– aeternum
Las siguientes grafías griegas evolucionaron:
gr. u > lat. y > i. lyram > cast.: lira, cat.: lira, gall.: lira.
gr. f > lat. ph > f. sphaeram > cast.: esfera, cat.: esfera, gall.: esfera.
gr. q > lat. th > t. theatrum > cast.: teatro, cat.: teatre, gall.: teatro.
gr. c > lat. ch > c/qu. chartam > cast.: carta, cat.: carta, gall.: carta.
– mysterium
– chorum
7
– elephantem
– typicum
– pyramidem
– phantasiam
– theologiam
– themam
Las oclusivas sordas latinas intervocálicas (o entre vocal y l o r) sonorizaron
(-p- > -b-, -t- > -d-, -c- > -g-)
mutare > cast.: mudar, cat.: mudar, gall.: mudar.
En catalán no variaron en posición final: aetatem > cast.: edad, cat.: edat, gall.: idade.
– apricare
– vitam
8
– secare
– catenam
– sapere
– vestitum
– capram
– lacrimam
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
-n- intervocálica
latín
lunam
sirenam
tenere
terrenum
vanitatem
12
>
>
>
>
>
>
castellano
luna
sirena
tener
terreno
vanidad
catalán
lluna
sirena
tenir
terreny
vanitat
gallego
lúa
serea
ter
terreo
vaidade
Apéndice
A
-l- intervocálica
latín
aquilam
dolorem
filum
solam
telam
>
>
>
>
>
>
castellano
águila
dolor
hilo
sola
tela
catalán
àguila
dolor
fil
sola
tela
gallego
aguia
dor
fío
soa
tea
catalán
lluita
llibertat
llengua
llana
llei
gallego
loita
libertade
lingua
lá
lei
l- inicial
latín
luctam
libertatem
linguam
lanam
legem
9
>
>
>
>
>
>
castellano
lucha
libertad
lengua
lana
ley
Las consonantes geminadas latinas se simplificaron
lat. attentum > cast. atento, cat.: atent, gall.: atento.
Se mantuvo -rr- narrare > cast. narrar, cat.: narrar, gall.: narrar.
– aggregare
– grammaticam
10
– horrorem
– turrem
– flaccum
– cappam
– apportare
– occasum
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Grupo -lllatín
bellam
capillum
decollare
querellam
vallem
>
>
>
>
>
>
castellano
bella
cabello
degollar
querella
valle
catalán
bella
cabell
degollar
querella
vall
gallego
bela
cabelo
degolar
querela
val
catalán
any
cabanya
canya
pany
gallego
ano
cabana
cana
pano
Grupo -nnlatín
annum
capannam
cannam
pannum
>
>
>
>
>
castellano
año
cabaña
caña
paño
13
11
Las oclusivas sonoras (b, d, g) intervocálicas (o entre vocal y l o r) suelen desaparecer
lat. traditorem > cast. traidor, cat.: traïdor, gall.: traidor.
– legalem
– nudum
12
– habebam
– vaginam
– sapidum
– crudelem
– alligatum
– rancidum
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Grupo -ndlatín
mandare
rotundam
secundam
undam
>
>
>
>
>
castellano
mandar
redonda
segunda
onda
catalán
manar
rodona
segona
ona
gallego
mandar
redonda
segunda
onda
catalán
costar
mes
mostrar
esposa
gallego
costar
mes
mostrar
esposa
catalán
llenya
prenyada
puny
gallego
leña
preñada
puño
Grupo -nslatín
constare
mensem
monstrare
sponsam
>
>
>
>
>
castellano
costar
mes
mostrar
esposa
Grupo -gnlatín
ligna
praegnatam
pugnum
13
>
>
>
>
castellano
leña
preñada
puño
Las vocales átonas postónicas generalmente se pierden
En gallego a veces se conservan por su tendencia a mantener las esdrújulas
lat. miserabilem > cast. miserable, cat.: miserable, gall.: miserable.
– calidum
– solubilem
14
– terribilem
– operam
– nobilem
– possibilem
– sensibilem
– ineffabilem
Apéndice
A
14
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Diptongo oe
latín
amoenum
poenam
comoediam
tragoediam
foenum
>
>
>
>
>
>
castellano
ameno
pena
comedia
tragedia
heno
catalán
amè
pena
comèdia
tragèdia
fe
gallego
ameno
pena
comedia
traxedia
feno
catalán
or
cosa
lloar
poc
toro
gallego
ouro
cousa
louvar
pouco
touro
Diptongo au
latín
aurum
causam
laudare
paucum
taurum
>
>
>
>
>
>
15
castellano
oro
cosa
loar
poco
toro
ov± (o breve tónica latina) > cast. ue, cat. o, gall.: o
lat. fortem > cast. fuerte, cat.: fort, gall.: forte.
– rotam
– hortum
16
– bonum
– socerum
– pontem
– molam
– grassum
– scholam
´v± (e breve tónica latina) > cast. ie, cat. e, gall.: e
lat. bene > cast. bien, cat.: bé, gall.: ben.
– centum
– mel
17
– desertum
– sextam
– petram
– membrum
– feram
– ventum
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Grupos iniciales cl-, fl-, pllatín
clavem
flammam
plenum
plorare
pluviam
>
>
>
>
>
>
castellano
llave
llama
lleno
llorar
lluvia
catalán
clau
flama
ple
plorar
pluja
gallego
chave
chama
cheo
chorar
chuvia
15
18
La f- inicial latina ante vocal pasa a h- en castellano y se mantiene en catalán y gallego.
En castellano se conserva a veces ante -ue- / -ielat. formicam > cast. hormiga, cat.: formiga, gall.: formiga.
– fabam
– falconem
19
– ferrum
– formam
– ficum
– febrem
– ferire
– filum
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Evolución de i breve átona
latín
brevitatem
integrum
minorem
originem
plicare
>
>
>
>
>
>
castellano
brevedad
entero
menor
origen
plegar
catalán
brevetat
enter
menor
origen
plegar
gallego
brevedade
enteiro
menor
orixe
pregar
Evolución de u breve átona
latín
cuminum
duplicare
gubernare
recuperare
urticam
>
>
>
>
>
>
20
castellano
comino
doblegar
gobernar
recobrar
ortiga
catalán
comí
doblegar
governar
recobrar
ortiga
gallego
comiño
dobregar
gobernar
recobrar
ortiga
El grupo latino -ct- pasó a -it-.
En castellano palataliza la -t-: -it- > -ch-. En catalán y gallego no palataliza la -tlat. tructam > cast. trucha, cat.: truita, gall.: troita.
– lactem
– luctam
21
– lectum
– factum
– despectum
– strictum
– noctem
– octo
El grupo latino -cul- en posición postónica sufre síncopa y pasa al grupo
romance -c’l-, que evoluciona:
lat. -cul- > -c’l- > cast. -j-, cat.: -ll-, gall.: -ll-.
Ej. lat. acuculam > cast.: aguja; cat.: agulla; gall.: agulla.
– claviculam
– lenticulam
16
– graculum
– apiculam
– auriculam
– speculum
– oculum
– oviculam
Apéndice
A
22
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Grupos -ti/te- y -ci/celatín
calceare
iustitiam
lanceare
Martium
plateam
23
>
>
>
>
>
>
castellano
calzar
justicia
lanzar
marzo
plaza
catalán
calçar
justícia
llançar
març
plaça
gallego
calzar
xusticia
lanzar
marzo
praza
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Grupo -lilatín
alium
concilium
folia
mulierem
24
>
>
>
>
>
castellano
ajo
concejo
hoja
mujer
catalán
all
consell
fulla
muller
gallego
allo
concello
folla
muller
El grupo -arium pasa por metátesis a -airo y de aquí a: cast.: -ero; cat.: -er; gall.: -eiro
lat. ferrarium > cast. herrero, cat.: ferrer, gall.: ferreiro.
– calidarium
– primarium
25
– operarium
– salarium
– solitarium
– februarium
Deduce la evolución de los siguientes fonemas latinos:
Grupo -i- ante vocales a y o, u.
latín
iacere
iam
iocum
iuventutem
>
>
>
>
>
castellano
yacer
ya
juego
juventud
catalán
jaure
ja
joc
joventut
gallego
xacer
xa
xogo
xuventude
17