Señor Diputado Gabriel Boris Font Cámara de Diputados Valparaíso Ref: Nuestro desafío: La Nueva Constitución soberanamente sancionada por el Pueblo Chileno. ¿Hasta cuándo se avergüenza internacionalmente al Pueblo Chileno? En nombre de nuestra Organización ADDHEE.ONG, le hago llegar nuestros agradecimientos por la información que nos hizo llegar, nosotros le corresponderemos enviándole nuestros documentos para su consideración y si lo estimara necesario, difundirlos. Amargados le enviamos la posición de nuestra Organización No Gubernamental, documentada, referente al “Proyecto de Ley” de Vamos Chile, que presentaran los diputados de la UDI G. Hasbún, I. Urrutia y J. Ulloa con el cual se pretende sancionar con “presidio menor en su grado mínimo y una multa de 5 UTM, a quienes enaltezcan a Allende”… En la semana que comienza el nuevo año, desde Europa, Canadá, Usa, Rusia, etc., nos piden informarles sobre el torpe, afrentoso e infamante Proyecto de Ley de la UDI más arriba señalado. Como si todo el bochorno fuera poco, Médicos sin Fronteras de Europa y Canadá nos consultan, ¿cómo es posible que el Juez Instructor en la causa por la muerte del Presidente Dr. Salvador Allende Gossens dicte una sentencia con un sobreseimiento total y definitivo, habiendo diligencias pendientes? Esta aberración jurídica fue confirmada por la Corte Suprema. Sobre esta preocupación internacional nos hizo llegar un nuevo documento científico/ forense, el destacado médico español Dr. Julián Aceitero Gómez, en el que palmariamente demuestra que el principal testigo de la causa judicial por parte del poder castrense, Dr. Patricio Guijón jamás pudo haber sido testigo del “suicidio” montaje de la dictadura cívico- militar de marras, aceptado por el poder judicial. Nuestra organización No Gubernamental, tiene una posición bien clara: Las marginaciones, la Justicia en la medida de lo posible, la media prescripción, la impunidad, el saqueo de los recursos del Estado, la indigencia educacional y cultural, etc. solo se terminarán con una Nueva Constitución elaborada y sancionada soberanamente por el Pueblo Chileno. Un académico alemán precisa sobre esta última materia: “La carta fundamental, la constitución constituye el más alto rango en el ordenamiento jurídico de una sociedad civilizada, destinada a regular los aspectos fundamentales de la vida política de los ciudadanos”. Nosotros, como colofón, puntualizamos que la carta fundamental, tiene que tener por base, los aportes de la experiencia de la clase trabajadora y la savia reformadora, regeneradora e instauradora de la juventud. Ambas organizaciones no soportan la coyunda de epígonos, testaferros y cipayos del capital buitre foráneo. Los ojos de los trabajadores y de los jóvenes pueden mirar hacia el amanecer, sin sosiego. Es privilegio de sus manos esparcir semillas fecundas en surcos vírgenes, como si la Historia –“la que hacen los Pueblos”-, comenzara en el preciso momento en que se forjan sus sueños en el marco de la lucha por sus ideales/ principios. La clase trabajadora y las organizaciones juveniles constituyen la levadura moral de los Pueblos. La energía juvenil crea la grandeza moral de los Pueblos. Concluye el académico alemán, educando la energía -“Entiende la educación como una acción liberadora, pública, laica, de calidad, gratuita bajo el control del Estado”-, enseñando a admirarla se plasman los nuevos destinos de los pueblos. Acentúo, que la juventud de nuestro Pueblo y de los Pueblos de nuestro Continente América Latina y el Caribe tienen muy claro, que ningún proyecto en el marco de sus sueños e ideales ha sido realizado por individuos obtusos, paralíticos, pragmáticos contemporizadores, porque los tullidos y los entes siempre dispuestos a transigir, a advenirse a los intereses de los dueños de la celestina universal, no pueden caminar lejos, ni contemplar un hermoso amanecer, no tiene presente ni futuro, su vidorria no tiene sentido. Como colofón, compartimos con Usted, de que “en Chile hay un simulacro de democracia donde las decisiones las toma una elite”. Permítame agregar que la democracia impuesta por la Constitución de 1980 de la dictadura cívico-militar, hasta nuestros días ha sido un espejismo como todas las abstracciones que pueblan las fantasías de los ingenuos, un aporte al capital de los mendaces. Con esperanza y memoria. Lic. Yirsela Peirano Cofré Asistente ADDHEE.ONG Certificó: Dr. Hugo Moreno Peralta. Secretario Ejecutivo ADDHEE.ONG