El complejo `de Edipo en la teoría kleiniana

El complejo 'de Edipo en la teoría kleiniana
Estudio comparativo con las ideas de Freud
Terencio B. Gioia *
. Enla,teoría.kleiniana,
el complejo de Edipo conserva el .papel fundamental y organizador que Freud le asignó para la estructuración de las
neurosis al ubicarlo en sus postulaciones como "el complejo nodular de
las neurosis" 8~
. '. Sin embargo, en muchos aspectos el concepto ha experimentado,
. en I:<leiny continuadores; substanciales modificaciones que, se refieren' a
- sus alcances en el contexto de la teoría, a su forma y momento de origen,
a los contenidos de fantasías que lo integran y a las relaciones que mantiene en sus vicisitudes con los conceptos que .sustentan la hipótesis .de
la ansiedad de castración y la teoría de, la formación, función ydestino
del Superyó.
>
En lo sucesivo, me ocuparé como objetivo principal de la descrlpclónde
las hipótesis kleinianas acerca del complejo de Edipo en los
diferentes aspectos, que abarcan el origen, la evolución y el destino del
. 'mismo, por lo que creo de utilidad dividir la exposición en' tres partes, y
desarrollar por separado cada uno de los mencionados tópicos de la
problemática edípica. Pero, en la medida que los conceptos de Klein y .su
escuela reconocen su origen en los freudianos -ya sea modificándolos'
o conñrmándolos-«, en muchos momentos será indispensable y útll hacer
referencias y establecer comparaciones entre ambos puntos de- vista con
, ,el fin de' obtener, en la medida de lo posible, la mejor ubicación y claridad
conceptual.
Oris;lendel complejo de Edipo
Ya de comienzo; al ocupamos de las etapas iniciales del complejo
de Edipo, nos encontramos con una divergenCia capital entre las concep, ciones freudiana y kleiniana. Serfa más adecuado decir que en realidad
se trata de una doble dlverqencla, puesto que arribos el}!'oques difieren no
,
*
Dirección: Barrlen·to81566, 79 B~ Buenos Aires, ·Argentlna.
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767
Terencio B. Gioia
-sólo en .19' que se refier~~8. la: época 'de lnlclación del, 'complejo. edíplco
sino que también -discrepan en cuanto alas vías de desarrcltcque
éste
'sigue en sus primeras etapas en ambos sexos .. ,
En sus primeros escritos sobre el tema, Freud no precisó con certezaen qué edad comenzaba el complejo de, Edipo. Fue sólo .después de
:1923, .lueqo de haber reconocido lndubltablernente una etapa genital o,
.rnejor dicho fálica, previa-a la latencia en el desarrollo de la libido 11~ que
'ublcó-en ese momento, entre los 3ylos 5 años de edad, la iniciación de la
:problemáticaedípica,en
ambos sexos*.
En cambió, una dé;'las hipótesis fundamentales detateorfaklelnlana
sobre el complejo de Edrpo es la que ubica el momento de -su comienzo
vaén loscprimeros 'meses,,'devida y, en una primera etapa, siguiendo cami'nos:siniili,ues en ~rTíboS;sexos. Esta ,temprana iniciación hace que' se
-desarroüe en condlclones determinadas y caracterizadas por una intensa
Inmadurez del Yo, en' circunstancias enque la vida psíquica está bajo el
lotál:dOminio de la Iantasía inconsciente y bajo el signo de una instintividad
:poli'mórfa y fluctuante 20. Es por, esto que las ansiedades y detensas.prlml:tivás gUardan estrecha relaclóncon el complejo de Edipo y tienen 'una influencla relevante en las 'primeras etapas de su evolución. En consecuenda M. Klein ysu escueiasostienen que las dificultades y alteraciones 'de
lafunclónqenltalenralzan
sus motivaciones en la lnsutlclente elaboración
7,68
Habiendo Freud comprobado en sI mismo, en el curso de su autoanélisls, "el amor por la madre y los
celos contra' el padre", dejó la primera constancia escrita de la relacIón que establecIó entre estos
sentimIentos y la tragedia Edipo '~ey en una carta a Fliess (1897), En la mIsma carta consIdera a estos
deseos "como un fenómeno gene'ral de la temprana infancia"'.
.
Sin embargo, en sus escritos científicos ,Freud emplea' por primera vez la expresión "complejo de
Edlpo" en 1910, presentándola en el siguiente contexto: "Comienza, pues [el adolescente púber], a desear
a la madre, en el nuevo sentido 'descubierto [de realizar el coito con ella], y a odiar de nuevo al padre
corno a un rival que estorba el cúmpttmlento de tal deseo, En nuestra terminologla decimos que el sujeto
.quada dominado por el complejo de Edipo"', Vemos que el texto transcripto -en el que los destacados
son mlo~no establece con precisión la edad de comienzo del complejo de. Edipo. De esta y otras
.' .' referencias al tema 8 parece desprenderse' que, si bien las tendencias edlpicas se esbozan en 'la Infancia,
" .' el complejo como tal sólo llega, a eclosionar en la pubertad, Freud, mantiene el concepto emItido en
1905 'de que ,la elección de objeto bajo -ta primacla genital no se verifica -en la niñez y se alcanza sólo
__" en,la,pubertad,
aun. cuando en, 19124s.,sostiene: "Puede afirmarse que el complejo de Edipo es el como "
piejo, nodular- de Iae -neurosls ,y -constltuye el· elemen/oesencial
del contenido de estas enfermedades".
, Es sólo a partir de 192311 que Freud, reconociendo una "organización genital infantil" en la evolución
de la Ifbido, aunque con caracterlsticas tállcas, ubica sin ambigüedad y en ese momento, entre los 3 y
5 años de edad, la iniciación del cornplelode EdJpq.,:, .., " .' ' "
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El eomplelo de Edipo en la teoría kleiniana
de las ansledadescorrespondlerites
a las 'etapas' previas al predornlnlo de
los impulsos y fantasías genitales.' '
"
Para .déclrlode 'otromodo, en '¡(Iein la.problémática dei complejo
de 'Edipo 'e'stá profundamente enraizada yentrelazada con Iaevlclsttudes
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de las primeras relaciones objetales, las que constituyen el "centro de la
v¡¡iaemodon~I;'27det'
niño '*.' ,
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y
Desde el comienzo ya, partir' de las vivencias de satlstacclón y
frustración se establece una doble relación: con el pecho bueno y querJdo
y con el pecho malo odiado. La frustración provocadapor el, pechc=--en
Ia medida en quees. vlvldacomo unataque=- estimula los Impulsos agresivos, y provoca la 'aparlclónde fantasías vengativas en 'las que él nlño
hace víctima al pecho de sus ataquessadlcos. Este, en consecuencia, ,!S,e
.convlerte.en Iatantaera ~el niño en un, objeto dañado y B"SU vez vengativo _
.qus loatacacon idéntico sadismo y crueldad. La necesidad de' defenderse
contra estas vivencias' aterradoras hace que el niño incremente su amor
hacia el pecho bueno' que se transforma en un Objeto ideal y perfecto,
capaz de 'colmar sus geseos de recibir amor y protección. Así; el pecho
malo y elpecho ideal perfecto constituyen el prototipo de todos los, objetos
persecutorios e idealizados. '
Partiendo de esta relación dual con el pecho el niño busca nuevos
objetos 'de' gratificaCión, y'; 'en' primer lugar;' el pene' -del padre. Esta búsqueda es impúlsada '''por
Inherente movÚniento .proqreslvo: de 'la'I,ibi~
'do" 24 y, se basa en: 'la .satlstacclóri experl mentada con él pecho, materno.
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La hl'pótesis' de M, ;(Ieln, que póstula la axlstencla de ~n'a ;el;¿ión objetatcon
la madre, ,actua'rite,deséls
la .Inlclaclón
de la -vlda .pcsnatal;: parecerta-contradectr
totalmente, el concepto de" Freud ,acerca de la
existencia de un estadio autoerótlco y otro 'narcisista previos a la relación objeta!. Sin embargo, esta
, 'contradlcclón'no
es tanabsoiuta; ya que los' anunciados de Freud acerca .de este tema, no son unlvocos,
. por lo que podrja sostenerse que no llegó a una definición decisiva al réspecto. Asr, por ejemplo, en
, '1922°; reafirmando conceptos' escritos en 1905', Freud explicita la opinión' de' que exlsts una relación
de apego libldinal con un objeto; el pecho materno, previa al autoerotismo y al narcisismo. No obstanté,
es conveniente notar que cuando Freud habla en los trabajos, 'citados de 'objeto' lo conceptuatlza en
-,
. forrra diferente a, Klein. Freud 'se, refiere 111objeto externo de: una ñnalldad Instin,tiva, mlentraa que
'.' .. Klem 'abarca' tanto la r relaclón .cbletat 'externa' 'como la 'Interna, Incluyendo las' fantaslas' Inconscientes
con 108 correspondientes Impulsos, emociones, ansiedades, y, aefensas ,del, bebé.;
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769
Terencio B. _Gioia
Pero también Ias frustraciones vividas en la relación con el pecho * constituyen un motivo más para-reforzar el deseo de ~n nuevo objeto.
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,_"Así,- motivados P9r las' gr?tific~ciones Y frustraciones e impulsados
ppria a.n,sie,dad,
persecutorla, tanto el varón como la mujer se dirigen hacia
un-nueve obleto capazde proporcionar satisfacción y protección. ,Este, el
pene pate-rno, integra junto con el pecho la pareja de objetos prlrnarlos
parciales
.destinatanos,
en ambos
sexos,
de los
deseos
primordialmente
- - .'. _ ,_;
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.
1orales, per9. a losquese suman, desdeun comienzo y cada vez en mayor
medida, pulslones anales, uretrales y genitales.
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,_Los .tactorés, tanto internos como externos; que, condicionan la
trustraclón del nlño' en su relación' con el pecho, actúan 'igualmente en su
relación -COI1 el pene, por lo que la doble relación conflictiva con el p-echo
~$ revJy'i~a_en huevo vínculo -objeta!. Pero" además: las trustraclones
sufridas' en la ,relación con ~I pecho intensifican las' demandas 'hacia el
'"nuevO'objetoalque el, niño exíqe.ahora que cumpla con el papel de objeto
'ide~Úyperfe-cto. Esto aumenta la intensidad de la decepción por las inevi'tables-frustráéi'o'nes- que ledepararáJa nueva relación. Estas frustraciones
f~eriá~ 'la r~gresiÓn' haclaelpecho: nuevas frustraciones con éste lrnpulrenovadarnente al niño hacia' el pene, con -lo cual se establece una
continua fluctuación entre los impulsos dirigidos' hacia Lino y otro=.
.: : ---Los impulsos polimorfos .dlrlqldos hacia el pecho y el pene se
acompañan defantaaías específicas de contenidos orales, anales, uretrales
'y. genitales, .tanto libidinosas como destructivas 20. Se establece ast otro
.ttpo: de .íluctuaclón permanente y doble:' entre -los diferentes impulsos y
fantasfas eróticas por un lado y entre los impulsos y fantasfas -eróticas
-y-destructivas por, el otro, dirigidas hacia el mismo Objeto, disociado en
~'biierió'-:-y 'malo'. S'ajO-el predominio de la libido el niño. imagina, en
tantaslas placenteras, la.satlsfacctón de susdeseos polimorfos. Pero estas
:gratificaciones
polimorfas "retornan
como miedos polimorfos" .20 no sólo
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770
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ParaM.
Klein ~ estas truatraclcnes- se -originan tanto en las vivencias
'Pero un' determinado
monto. dé frustración
real es siempre inevitable
108 deseos de gratiflcaClión:~lImltada_ del: niño. _-' _
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fantaseadas cuanto en las reales.
nunca -es posible cumplir
ya -que
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El complejo de Edipo en la. teoría kleiniana
por 'las inevitablesfrustracíones'
de las, que hemos .hecho .menclón, sino
porqueIoscomponentes
destructlvosde-las
fantasías polimorfas, experimentados como actos concretos, conducen en, la fantasía a la vivencia
'de. obletos dañados y destructivos. Esta 'fusión de impulsos crueles y
llbldlnales caracterlza la temprana genitalíd~dinfantil,Y
encuentra su expresión en las tantaslas de 'escenaprtrnarla sádica' y de 'madre fálica
castradora'.
" Así se establece un vaivén permanente en la relación del hiño de
ambos sexos con estos dos' objetos, en la que uno y otro 'adquieren
atternatlvamente y aveces simultáneamente,
las características detbueno'
o idealizado y de 'malo' o persecutorio: Esta oscilación entre el pecho y
'el. pene es la: qué determina la .tnterretactón entre 'el complejo de ~Edip:o
positivo y' él invertido 'desde los primeros estadios evolutivos del varón! y
de la múler. , , .'
'
Estas~icisitLídesde la relación sujeto-objeto; determinadas por~los
sentimientos' de amor, odio ..¡ temor, integran 'la denominada porM, Kléln
posición ésqulzcparanclde"- 28; en la cual la' ansiedad dominante' es' el
temor por el 'daño que elSelf puede sutrlr al ser; en la fantasía, el destinatarló dé la agresión de sus objetos. De ésta se detlende 'como hernosvlstó
por medio de la dlsociaclón, a la que se suma la negación, la ldeallzaclón
'y laernnlpotenéla 'sádica.
',.
"Com,,: con toda' justeza lo ha señalado W. Baranqer, la public'acl6h
en 1946 de "Notas sobrealqunos mecanismos esqulzotdes"> "marcaun
momento eleenlaevotuclón
del pensamiento de M. Klein"'l, Este momento
per~ité . dlterehciar dos ..etapas en la proqreslón de :su 'teoría tanto .en
general como 'en relaclón particular 'con 'el tema que nos ocupa: (;11' orige:n
'del complejo 'de: Edipo. Hasta' .194524 ubica el' comienzo 'del mismo 'en
plena posición esqulzoparanolde, pero partir de '1.946* lo vlnculará cada
Vez.masestrechamentecon .la posición depresiva. Este último enfoque fue
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~. En, 194525 M: Kleíri dÚerericia del" concepto de 'Posic'ión depresiva',' lntroducldo
en 1934.3, el c~n~kpi6
',de ,'poslclóne paranolde', 'a la, que luego denominará 'posición esqulzoparanoide',
en la, versión .detlnltlva
~". 'del,dicho trabajo' publicada en 1952, asl como' en" otros de la misma época " •.•'. '
~'
771
Teréncio B: Gioia
tamblén'sostenldo y desarrollado p-or P. Helmann quien en esos momentos
era; aparté .de M. Klein misma; el más autorizado exponente de las Ideas
kleinianas. Esta reublcáclóndel
origen del complejo de Edlpo acompaña al
énfasis creciente que va adquiriendo en el pensamiento kleiniano la lmportancla de la posición depresiva, .la que pasa a desempeñar cada ve?
más un "papel vital en el desarrollo temprano del niño" 28.
--De acuerdo con este nuevo enfoque, el complejo de Edipo- comienza
co-nstituirse alrededor de la mitad del primer año de vida, cuando el niño
"reconoce a sus padres como' objetos totales, esto es; como personas",
que tienen vida propia y quenosoñ sólo objeto para sus deseos y necesf ..
dades. ,Esto .lmpllcaque la relación triangular del niño con ambos progenltores aparece, _desde su iniciación, bajo la influencia del conflicto de
ambivalencia. El niño no sólo ve a sus padres como objetos, totales con
el.-sentido·complementario de 'objetos parciales',sino también como objetos ~ñte.gra~os yamblvalorados: comienza a darse. cuenta de que es .la
mis_mapersona a laque ama, teme y agrede a la vez. Predomina por lo tanto
la ansiedad depresiva y el niño sufre por el daño que con sus impulsos
destructivos inflige al objeto, en sus fantasfas y por el temor de perder su
amor y. al objeto mismo.
--
a
772
Es en función de estas ansiedades depresivas que 'se agregan nuevas _y, poderosas motivaciones _al -ya mencionado -"inherente, movimiento
progrésivo' .<:le,
'Iá libido" ú' para la .búsquedaríe. nuevos obletos.. como
tendencia promotorade la iniciación del complejo de Edipo. Hay un tncremento .deIa necesidad de externalizar objetos' malos .y de. lnternallzar
objetos buenos que los contrarresten; al. mismo tiempo aumenta el. pasale
de las finalidades pregenitales. a las genitales vinculadas_ más. estrechamerité 'con 'Iosdeseosi'eparatorios,
Y libidinales. Según M. Klein2T está.
ev(51~ciónes favorecida por dlversos factores, como ser la .integración
éréclente del Yo, que resulta en un incremento de las habilidades ñslcas
Y_!1lel1~~I~s,
-'~_adaptación ,creciente al mundo externo y la dlterenclaclén
prog-resiva:entrefarita:sfa
cambios
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__ ~._ •...y~....'realidad.
~_. ,_ .... _Todos
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El complejo de Edipo en la teoría kleiniana
estrechamente vlnculados con la capacidad de formar símbolos, que facilita el traslado de' intereses, emociones y tantasías de un objeto a otro. "
'Desde el comienzo dé su vida posnatal operan en el bebé fantasras
orales y anales de penetrar en el cuerpo materno; primero el pecho y luego
el vientre, para apoderarse de sus contenidos valiosos y envidiados: leche,
bebés y heces idealizadas. Al confluir el predominio de la relación de objeto
total; los fines genitales y' la relación triangular con los padres, a' las
vivencias voraces y envidiosas se suman los celos que las encubren y
las modifican. Cuando el niño se siente frustrado y privado del objeto de
su deseo imagina al padre gozando del pecho de la madrey a ésta del pene
del padre en forma continua y les atribuye una constante gratificación
mutua oral, anal y genital.
, Estas fantasías reactivan los deseos de penetrar en el cuerpo de la
madre,' pero debido al incremento de los impulsos genitales, el objetivo
de ésta penetración pasa a ser fundamentalmente el pene del padre -equiparado a bebés y heces vauosas-« que el bebé supone se encuentra
dentro del vientre materno. Esta suposición
la base de las fantasías
de escena primaria temprana en la que la pareja parental es vivida como
combinada de diversas maneras. La' madre contiene el pene del padre o
a.éste .en su totalidad; el padre posee el pecho materno (equiparado al
pene) y ala madre en su totalidad;anib6s progenitores son concebidos en
una constante unión y gratiftcación sexual tanto genital como anal u oral.
" La fantasía "de mujer con pene también reconoce este origen y él
entremezclamiento de impulsos eróticos y crueles da cuenta del carácter
persecutorio tanto de la escena primaria sádica cuanto de la madre fálica
castradora. Vemos asf nuevamente cómo. "las gratificaciones polimorfas.
retornancorno miedos polimorfos" 20, ya que el bebé concibe la relación
entré sus padreaporproyecclón
sobre la misma de sus impulsos polimor ...
fas, libidinosos y destructivos, no sólo con caracterfsticas de amor sino
comojatqo peligroso y atemorizador.,
Además de provocar jos deseos de penetración en el cuerpo de
los' progenitores; '105 impulsos polimorfos del niño y de lahiñá, a medtda
es
773
TerEmcio' B. 'Gioia
'.
a
,
774
se
que' se establece paulatinamente la primacía genital,
dfrlqen tanto hacia
el .padre y su 'pene cuanto
la madre y sus genitales' (además de a sus
pechos)' en 'busca de gratificación sexual: Para M. Kleln, el niño yla niña
saben.inconsclentemente, desde el comienzo de su vida, de la existencia
gel pene paterno yla vagina materna, conocimiento que surge de las propias sensaciones qenttales 21, 22, 24. Enel varón; las sensaclonesemanadas
de' su pene lo llevan a la .convicclón de que el padre. posee un pene al que
deseayen la niña las sensaciones emanadas, de su vagina promueven el
deseo 'de recibir el pene paterno en su órgano genital. Así se completa
la cqnstelación de Impulsosy fantasías que sustenta el complejo de Edipo
ínvertldo en el varón y el positivo en la 'mujer.
En formá parecida se integra el complejo edípico positivo en el
varón-sus
impulsos genitales dirigidos hacia la madre le hacen .irnaqinar
en ella la existencia, de orificios por donde introducir su pene. En virtud
del. polimorfismo de impulsos y fantasías de tales primitivos estadios, éstos
pueden ser tanto la bocacorno el .ario y la v~giná.A medida que predomlnanlos-aspectos
genitales;' el interés del niño se centra en la vagina
materna.
"
Similarmente se estruetura el complejo de Edipo invertido en la
niña: ésta imagina al pene paterno como propio y lo utiliza en sus fantasías
poltmortas- para penetrar a. la madre y gozar sexualmente de ella.
Creo de interés insistir nuevamente en dos conceptos importantes
de lateorla kleiniana que difieren de los postulados por Freud con respecto
a ·Iaetapa genital de la organización de la Ilbido.
, " De uno .dé ellos ya· nos hemos ocupado parcialmente: para Freud
los .lrnpülsosqenltalesson
de aparición tardía, .entre los 3 y los 5 años de
. edad, y, por lo. tanto, antes de esa edad carecería' de sentido hablar
de complejo ,de' Edipo. EnKlein, por el contrario, los impulsos genitales
están activos desde eícornlenzo y' adquieren importancia relevante ál
alcanzarse la poslclón depresiva, al promediar el primer año dé vida. Así
sé sustenta la concepción deuñ complejo de Edlpo temprano y, por otra
parte" pierdé fuerza. la concepción Ireudlana dé una sucesión lineal y
'
El complejo de Edipo en la teoría kleinlana
biológicamente determinada de las diferentes tases libidinales. .Torna su
lugar la idea de un polimorfismo fluctuante en el que predominan sucesiva
o alternadamente los diferentes erotismos: oral, anal, uretral y genital *:.
~ , El otro, punto de discrepancia .se refiere a las caracterlstlcas de fa
fase genital misma.' En Freud la etapa genital infantil es sólo fálica n. Tanto
el varón como la mujer,' al llegar a esta etapa sólo han reconocido la existencia del genital masculino y esto aun imperfectamente, puesto que su
interés se centra en el pene -con total descuido del' fundamento masculino
dela reproducción: ,los testlculos.
,
La niña imagina a su clítoris como una suerte de precursor del
pene; en el que se convertirá al. crecer y aumentar de tamaño. Ambos, el
varón y la mujer, no han descubierto aún la existencia del genital femenino; cuya percepción es negada' sistemáticamente, aun en etapas posteriores, ya que su aceptación desencadenaría intensas ansiedades al ser
tomada como, la confirmación de la realidad de la amenaza de castración.
Insistiendo una vez más,' diremos que, en cambio, para M. Klein tanto el
varón como la niña conocen la existencia de los órganos' genitales de
ambos sexos y su función procreadora. La preocupación exclusivamente
fálica por el !;jenital masculino, si bien es aceptada, es considerada como
una defensa contra la ansiedad que despierta la posible aparición de hermanos rivales.
..
'Sobre estas bases es que; en el marco de la teoría klelnlana,
postula que el niño y I~ niña alcanzan a estructuraruna fase genital verdadera y completa antes de la latencia .
. Estas conceptuallzaclones acerca de las etapas iniciales' en la evo~
lución, del complejo de Edipo, han sido desarrolladas y modificadas .:por
. algunos destacados continuadores de la escuela klelnlana, Meltzer, e~
196329, afirma que el niño fantaseala existencia de una estructura comparable a un pene y existente dentro del pecho, al que otorga sus admiradas
cualidades de tuerza, creatividad y comprensión,
'
se
t'
*
•
.-
Lasteorlas
sexuales infantiles que Freüd describi6 ubicándolas entre los' 3 Y los 5 años' responden a
este' polimorfismo temprano, en el que rivalizan diferentes zonas 'erógenas Y. opuestoá fines destructivos
y 'erétlcoa
20.
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-
775
,Terencio B. Gioia
'La relación trlanqular del bebé con ésta pareja pecho-pezón constltulrlalaastructura
.edfplca más' temprana en la que e,l pecho, corno recipiente, 'poseería las' cualidadesde riqueza; generosidad y calor mientras
queel-pezón, comoelecutor, ostentaría las de fuerza; paciencia y juicio.
',- , Luego; 'en' 1967 só reañrma este concepto de un '.'objeto combinado
'primario" constituido por sr. pene-pezón, "presidiendo" la belleza y la
bondad de la parte, blanca del pecho.
La situación édfplca así constituida es previa y anterior al pasaje
del pecho al pene postulado por M. Klein. Este tendría ,lugar sólo después
que estaéstructura comparable a un pene y equiparadá al pezón es incorporada por el.bebéy luego proyectada' en el, pene del padre, con lo que
éste adquiere aquellas cualidades primariamente adjudicadas al pechopezón, 29.
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"Tamblén Bion,en ',19633postúlóla
hipótesis de que el "rnlto de
Edipo" forma parte de una' preconcepción innata 2 existente en la' mente
del bebé,'jaque setranstormaen
una concepción a través de su "realizaclón" ~. 'Ésta realización se -alcanza al saturarse la preconcepción por las
,experiencias: en el' contacto con la pareja parental real (o, sustituta). Se
constituye asíun "mito edíplco privado", integrado por elementos alfa y
cuya 'existencia .sería 'la precondlción para que el niño pueda comprender
y aceptar su, relación con la pareja parental y la de los integrantes de la
misma entre, sí. Cuando el :"mito edípico privado'" sufre, en la mente del
niñó; ataques motivados por envidia, voracidad
celos, sus elementos-se
dispersan y queda perturbado el conocimiento d~ la relación parental 'y
dlstorslonado el'víncule:, del lactante con la pareja y con cada uno' de sus
integ'rantes. Money 'kyrle,en 1967 ~1, desarroll'a y amplía estas' ideas de
Blon, postulando la existencia del -conoclmlento innato de una relaclón
oral precursora de la postériorestructuraciónedípica.
El bebé poseerla la
preconcepclón innata .de un pecho y un pezón buenos; así como desus
contrapartidas malas, definidas 'respectivamente como "lo que no frustra"
y "lo queno satisface", y que constltuyen las dos clases Innatas básicas
de-objetos, Estos':obJeto:s'se establecen en la mente del lacta~t~,atrayés
y
776
/'
El complejo de Edipo en la teoría klelnlana
de 'su reconocimiento 'en las experiencias vividas .con los objetos reales,'
cómo imágenes rrinérnléas del primer miembro reconocido como' ejemplo
'de. la clase innaia *, lo que constituye un concepto ..
sí e'l bebé recuerda 'con 'amor este primer objeto así como "la memoria d.e unabuenarelaclón
entre',el pezón la boca'" 32, esto facilita asu .
vez' que el niño reconozca la relación entre los progenitores como el ejemplode otra preconcepción innata: la del coito de los padres, reconocimlento 'que pone en marcha la conflictiva edípica.
y
Evolución del complejo de Edipo
.
La evolución del. complejo de Edipo a' partir' de sus etapas iniciales
se encuentra estrechamente vinculada con el progresivo desenvolvimiento
del niño de ambos sexos en la poslclón depresiva con sus peculiares
ansiedades, defensas y relaciones objetales y con 'Ia fiuctuación que se
establece en el curso del desarrolló entre éstas y las propias de la posición
esquizoparanoide. Como es sabido, en la posíclón depresiva la ansiedad
dominante está caracterizada por la: preocupación que experimenta el
niño por el daño que supone haber causado a sus objetos querldos, a los
que vivencia deteriorados y eventualmente perdidos, como consecuencla
.de los ataques fantaseados 'que, motivado por la frustración, la envidia y
.los celos, siente' haber efectuado contra ellos.
'Estos dolorosos' sentimientos que caracterizan a la ansiedad depresiva pueden. impulsar al niño a dos actitudes diferentes y opuestas. Si el
dolor-resulta intolerable para su débil' Yo, recurre nuevamente. a la disociación del objeto para huir del objeto dañado vuelto vengativo y terrorífico,'
Jmaginando destruirlo con su .omnipotencia Sádica, lo queíepermtte negar
•
ES1e reconocimiento guarda estrecha semejanza con lo que Blon
concepción con una realización .para formar una concepción.
2
describla
como unión
'
de una pre-
777
-'
,/
Terenelo B. Gioia
,
su' existencia: para asl poder 'refugiarse en la relación con: el objeto .ldeallzado, regresarido a la posición esqulzoparanolde, En cambio, 'en los
momentos, cada vez más frecuentes con la maduración del Yo en-el
procesoevolutlvo, en' que' es más capaz de tolerar la ansiedad depresiva,
aparece la necesidad y el deseo de inhibir las tendencias agresivas y
.reparar al, objeto sentido como dañado.
I
El sentimiento de omnipotencia sádica es reemplazado por el de
omnipotencia reparadora y éste; a su vez, a, medida que la maduración
del Yo lo posibilita, da lugar ,a los genuinos sentimientos amorosos y
reparatorios.
, ' ,Cuando esto ocurre, tanto el varón corno la:niña sienten que' el pene,
que en su fantasía ha dañado a la madre, adquiere propiedades reparatortas hacia la misma. Así el impulso a lá reparación confluye y refuerza al
de dar y reclblr gratificación libidinosa. Pero la culpa puede también inhiblrIos deseos eróticos, puesto que, cuando es excesiva y deriva de una
intensa agresividad, el niño puede llegar a-sentir que también sus impulsos
- ·libidinososson un peligro para el objeto amado y que debe, por lo tanto,
'rechazarlos .
T18
. Ya hemos mencionado anteriormente el carácter persecutorio que
tiene para cel'niño la figura combinada de los padres en sus dos variantes:
la 'escena primaria sádica y la madre fálica castradora. Pero a medida
que avanza el predominio de las ansiedades depresivas y su corolarlo, los
impulsos reparadores, esta fi~ura combinada va perdiendo sus caracterís-tlcas terrortñcas. Los padres pueden ser vlvenclados como individuos
.. independientes y el niño va desarrollando la capacidad degratificarse
simultáneamente e':l su relación con ambos progenitores. Según' M. Klein 28
esta 'capacidad del niño está en constante conñlcto con el deseo celoso
de "mantenerlos separados uno del otro o impedir el acto sexual" e implica
como precondición la aceptación de la idea de la relación entre ambos.
i.
'~
.'
.'
/r
..
El complejo de Edipo en la- teoría kleiniana
Evolución del complejo dé Edipo en. el varón
CómO'ya hemosseñalado.enelvarón
coexisten desde el comienzo
los impulsos, fantaslasy ansiedades correspondientes a sus deseos masculirios' hada la. madrecon ros relativos a sus deseos femeninos hacia el
padre *. Unosy otros forman labase de las llamadas por M; Klein posiciones
masculina y femenin:a,'en contllcto entre sl. Conviene subrayar nuevamente
que estos impulsos no son exclusivamente del tipo genital sino polimorfos,
en un comienzo bajo una' definida primacía oral. Según P. Heimann 20;
este polimorfismo se acentúa en el seguñdo semestre del primer año,
coincidiendo con un incremento de los impulsos genitales * ", En este
momento, los deseos de gratificación genital del niño incluyen tanto el de
dar un niño a la madre como el recibir uno del padre .:
Un concepto fundamental en la teoría kleiniana del complejo de
Edipoen el varón es la Importancia 'concedida a, la adecuada elaboración
de su posición femenina. Esta adecuada-elaboración, que puede ser lnterIerida yalterada por las- ansiedades surgidas en la relación con el pecho
y el .pene, es el prerrequisito indispensable para poder desarrollar los
deseos edíptcos positivos en la posición masculina 20.
La posición ¡femenina' enei varón se basa en subisexualidad blolóqica, . y su .desarrollo psicológico comienza
con el ya, descripto pasaje
'
.'
,.
/
Conviene destacar la diíerencla entre estos conceptos y los de Freud referentes a este aspecto del
complejo edlpico en el varón, 'Para' Freud éste ee inicia con un Impulso amoroso hacia la madre y su
correlativo hostil hacia el padre, Previamente a esta situación, antes de alcanzar la fase fálica, el niño
dirige una carga de, objeto originariamente hacia el seno materno y luego hacia la persona de la madre,
Paralelamente establece una relación con el padre, basada en la identificación y previa ¡t la carga de
• objeto '0, En la medida en que la carga de objeto hacia la madre no incluye componentes fálicos' y no
hay hostilidad hacia el 'padre, no corresponde hablar de complejo de Edipo. Esta situación de equilibrio
se' quiebra al aparecer los deseos sexuales de naturaleza fálica entretos 3.y s=añoe de edad ", lo que
convierte al padre en un obstáculo para que tales deseos hallen satisfacción, La ambivalencia, hasta
ese momento latente en la identificación con el padre, se' hace manlflesta, "tornando asl. la relación con
éste un aspecto hostil 'que se yuxtapone al cariñoso '0, Se constituye 'ast el complejo de Edipo Simple,
positivo o directo, que caracteriza al estadio inicial del mismo, ,[U8g0, "uña investigación más cuida,
dosa permite 'distinguir un distlnto impulso instintivo de sentido contrario: el amoroso pasivo hacia el
padre'''',
Este lleva al niño a :adopta.r hacia -el padre -una actitud '.femenina, <receptlva, que Incluye el
de~eo ,de ser amado por el padre y, recibir un niño de él, constituyéndose finalmente el complejo de
Edipo invertido que, sumado al POSitiVO,compone "el complejo de Edipo completo, "
doble, positivo
y negativo" lO.
_
.
.
.
Esta autora postula -Is exletancla de' una"'''etapa pOlimorfamente j,-erveis{o '. ·2Ó· 'iÍ'lterpola,da- entré las' fases
oral y anal de la organización' de la libido,
-.,
.
779
Terencio' B. Gioia
del pecho al pene. A esto se agrega que la pérdida del pecho externo, eón
el destete, intensifica la identificación con la madre favoreciendo el desarrollo del cómponente ,\femenino de la bisexualidad innata. En las tantaslas de la.poslclón femenina se encuentran las raíces de la homosexualidad
maecuunaret niño es el enemigo y rival de la madre por el afecto del padre
y envidia a la mujer por su capacidad de parir y alimentar hijos *.
Debido al polimorfismo de las fantasías que integran la posición'
temenlna.:er niño dirige sus impulsos al padre, deseando chupar su pene,
lncorporárlo oral ':i analmente, así como por su propio pene, vivido como
órganodeincorpoYaeión.En
laverslón activa de esta fantasía, el niño _
desea penetrar' con su pene ~I 'cuerpo del padre por la boca, el ano y los
genitales.: Si el niño puede desplazar de la madre al padre parte de sus
deseos tiernos y libidinosos yal mismo tiempo puede seguir considerando
a .la.rnadrecomo un objeto bueno, imaginará al pene del padre como un
órgano creador y reparador 'que le da placer y niños como los da a su
madre. ,'.
.
,
Sólo esta firme creencia en la bondad del genital masculino, primero en la del 'padre y luego por identificación lntroyectlva, en la del propio
pene, le germitirá al 'niño experimentar sin culpa deseos genitales hacia
la -madre, 'En cambio: si predomina la identificación con el pene malo del
padre', 'ésta reforzará sus propios impulsos agresivos y entonces el temor a
un coito dañino y cruel con la madre lo llevará a la inhibición de sus
deseos genitales y a la consecuente regresiÓn a impulsos y fantasías pregenitales: Estas, a su vez,' por la predominancia de sus contenidos tantaseadossádlcos ydestruetivos, reforzará en un círculo vicioso la inhibiéión
de los impulsos eróticos hacia la madre.
Además, esta creencia en, la bondad del pene es la 'base de la
confiariza en el padre bueno como figura total, que atenuará el temor al
padre castrador, permitiéndole al' niño enfrentar en mejores condiciones
su propio odio y rivalidad edípicos 24. Cuando, ya sea por factores internos
.
'
un
78,0-
,
• -,::'Como lo' subr8¡t8,!:",:Héimanh 20 lavlmportancla
sido subestimada en la teor!a clásica,
de estas Iantaalae
"
énvidiosas
del 'varón' hacia la mujer ha
"
'
'
El ~complejo de Edipo en la teoría kleiniana
(excesiva agresividad, .envldla y celos) o externos. (Inadecuaclón, en; la
experiencia del sujeto, de los objetos p,ªr.a contener y mitigar sus, ansledades), ,los temores paranoides de ser castrado ~por el padre y/o los
depresivos de dañar al padre y alInterlor .del cuerpo de la madre son
muy íntensoaestas vivencias constituyen la base de posteriores trastornos
de la potencia genitaL Estos pueden- manifestarse \precozm~nte, en inhibiciones de las actividades o intereses del niño-o, sólo más tardíamente, en
alteraciones en la función sexual adulta',
Enlá posición masculina las fantasías vinculadas con los" impulsos
Iíbldlnales del niño hacia la madre reconocen dos estructuraciones :fundamentales. La primera se organiza teniendo corno eplcentro los. deseos
de satisfacción instintiva oral por medio del objeto parcia! pecho que,
luego' de alcanzada la' 'etapa de objeto total, se dirigen hacia lá madre
como persona, manifestándose en fantasías de chupar, tragar e incorporar
a la madre por la boca *.La otra estructuración, organlzada en é:leiredor
de los deseos :genitales,i.se manifiesta en tantasías de penetrar con 'el pene
el cuerpo de la madre.
.
.
..
.
.
.
l '.
-
.,
..~.,
•
.. .Se forman así dos 'imagos' maternos coexistentes: la 'madre oral'
y la 'madre genital", entre las cuales fluctúan los deseos. libidi~ales ,y
-aqreslvos del niño. Pero la 'madre genital' puede adquirir, en ocasiones,
las caractertstlcas del' objeto malo por motivaciones y fantasías estrecharnente relaclonadaacon
la ansiedad de castración, La rílsoclaclónque,
por razones defensivas, se había hecho anteriormente en los pares antitétlcos: pecho 'bueno'-pecho 'malo', pene 'bueno'epenei'malo', pene 'bueno'-pecho 'malo', pene 'malo'-pecho 'bueno', se concentra en este momento
en la 'figura materna t~tal que queda separada en la madre 'oral .busna' y
la madre 'genital mala', Asr, en la fantasía del niño coexisten dos' imágenes
.. '.
.
'.
opuestas
de la, madre y de 'su .intérlor: en una es ycontlene todo lo bueno
.
/
"
.
•
.
En rigor podrla hablarse de una tercera estructuración organizada en función. de la analidad. Por razones'
, . de'simpllcldadexpósitiva
'la dejamos deIadó haciendo la aalvadad.de. que muchas.de las-consideraciones
que en el texto se refieren a la 'madre oral' cabrlan igualmente respecto de la 'madre .anal'..
781
,
Terenclo B: Gioia
y" gratificador,
aterrorízante.
pero en la, otra es. un lugar" extremadame~!e dañadoy
.. - .' Al tornarse de este modo peligrosas las relaciones con la .rnadre
genital'"_el,niño imagina la relación oral madre-bebé como desprovista .de
toda~. las" frustraciones,' los ·celos y la envidia y trata de regresar a este
vínculo exclusivo e, idealizado en 'un intento de negar sus deseos edlplcos
y-las ansiedades paranoldes y depresivas por éstos provocadas..
Mediante este recursoa la idealización;' negación y regresión trata'
de-ponerse a salvo de su' propia agresión y rtvañdad-edfplca co mo también
"de. sus temores de ser objeto de ataques por parte de sus progenitores
aislados o en pareja *."
.:»
\
" . Con estas vivencias atemorfzantes relativas: al interior del ·cuerpo
de la 'madre; se relacionan los temores del niño por el estado del interior
de su propio' cuerpo. Este es vivido como atacado por persequldores
".
Internosrtas imagos introyectadas del padre, de la madre y de ambos
éombinados en pareja, 'en venganza por sus propias fantasías .sédlcas
previas. El carácter persecutorio de "estas imagos parentales introyectadas
surqede tres fantasías fundamentales. En primer lugar la madre es sentida
corno "dañada por el pene malo del padre y por los bebés malos de su
interior, fruto dél coito con ese pene malo, que es tal por contener; por
'prcyeóclón, los propios impulsos· agresivos del.niño. En segundo lugar,
tanto ía madre como ·el padre son sentidos dañados" y por lo tanto vengatlvos,.' por los ataques previos fantaseados del niño: En tercer IUgar~"la
'madre y el padre, tanto aisladamente como combinados" entre sl,' son
experlmentados como persecutorlos por contener proyectlvamente ·Ios
lrnpulsos destructivos del niño, tanto de carácter oral, "como genital "y anal.
"
Los ataques que el niño espera de estos objetos internalizados le
hácen temer no sólo por el interior de su cuerpo 'sino también que su
782
g
'i·.::Est~
re ies"i6n defensiva al vinculo oral defensivo
genitaLen .el varen '§,. "' "."".' ... ". .
con la madre es otro factor
" . ",..
importante de tnhlblclón
" .'" ., ".•..
",El complejo de Edipo en la téoría kleiniana
pené
pueda, ser devorado, envenenado o mutilado desde dentro *. A
diferencia de lo que, corno veremos, ocurre con la mujer, por tener un
'órgano genital externo el varón podrá, por comparación con el del padre,
tranquilizarse parcialmente respecto de estostemores..
'
A medida que van predominando, los mecanismos, ansiedades y
fantaslas propios de la posición depresiva, estos objetos persecutorlos.
externos e internos, van siendo paulatina y progresivamente contrabatanceados por la introyección de objetos buenos. La madre y el padre buenos,
" continuadores en el ni~el de objeto total de las primeras introyecciones
de [os objetos parciales pecho y' pene buenos, refuerzan las vivencias del
niño de ser 'protegido de, los objetos malos Y",de sus propios impulsos
destructivos. Con la -dlsminuclón depresiva de los celos y la envidia hacia
la pareja parental, la unión de la madre yel padre buenos' se hace más
sólida y fructífera en el/mundo interno del niño, en el que aumenta el amor
~ 'y disminuye el 'temor.' Correlativamente se unifican las imágenes buenas y malas de cada 1.1 no, de Jos progenitores, a los que el niño percibe 'cada
vez como menos' idealizados y menos persecutorios, tanto interna corno
externamente.
En' consecuencia, se incrementa la tolerancia, tanto del niño mismo
como la 'que espera de sus objetos internos y externos hacia sus deseos
edípicos activos y pasivos y se va preparandoel camino para la adecuada
'elaboración dejos mismos.
Evol~ción del' complejo' de Edlpo en la mujer
La evolución del complejo de Edipo en la runa es, en muchos
aspectos, similar a la del varón. Como ya hemos mencíonado en las consideraciones acerca de los estadios tempranos del. desarrollo edípico, también la niña oscila entre las posiciones femenina y masculina y entre
.'
.
. ..
'
....
1
Estas fantaslas, estén estrechamente relacionadas con la ansiedad de castración que, como veremos
'mé& 'adelante,-en 'oplnl6nde ,M.' Kleln el niño comienza a experimentar muy precozmente.
783
,
Terenéle B. Gioia
Impulsce.tibldinales y agresivos, y efectúa el, pasaje del pecho al pene
por Jdéntlcos -rnotlvos que el varón. La póslción femenina' de. la niña,
blolóplcamentecondlclonada,
se refuerza precozmente porla identificación
con la madre, consecutiva a la pérdida del pecho.
Estas' pOstulaciones kleinianas revelan desde ya una acentuada
diferencia con los-conceptos freudianos relativos al tema. Esta discrepan:'
'cla abarca no sólo a lo ya dicho acerca del comienzo tardío, según Freud,'
de' las vivencias .edíplcas y sus características excluslvamente.Tállcas,
asev~raciones válidas para ambos sexos, sino también a la ausencia en
'la' n¡~~ dé 'un vínculo llbldlnal fálico con el padre, que fuera slmulténeo
con sus, deseos fálicos precoces hacia la madre ".
"
En cambio. para Klein, y su escuela existe en la niña, como, eh el
varón, desde la más temprana .infancia,el conocimiento incensciente de
la genitalidad parental unido a-sensaciones y fantasías no sólo fálico-c litoridi~nas· sino' también gÉmitales y vaginales. Por su naturaleza receptiva,
éstas sustentan los deseos de incorporar el pene del padre, además, de
oral y anal mente, por sus genitales, como un objete bueno, dispensador
de placer-y afecte y dador de niños. La niña,además de .recibir el pene,
tambiE~ndesea poseerlo tanto en calidad de objeto interno bueno' cuanto'
e.gllipar~~o a. bebés. Lo~ sentimientos de am?r y watit,udP'or la buena
. En la ni~a, previamente al comienzo de sus tendenctaaedtplcas
hacia 'el padre,' Freud reconoce una
"fase de apegamiento exclusivo a la madre" 14, 16, 17, en la cual ésta es el objeto de los Impulsos genitales de la niña, que incluyen el deseo de hacerle un 'niño,a la madre 'o tenerlo de ella, El descubrimiento
por parte de la niña, durante la: fase fálica y por la visión del genital masculino, de que ella carece de
pene y de que su clítoris en realidad no esun pene, como suponla hasta entonces, centra el interés de
su relación con la madre en el deseo .de. reclblr. un pene de ella,. a quien' todavra considera ·provlsta. de
dicho atributo. La frustración de estos deseos hace que el amor sea substituido por hostilidad. Cuando
a esto se agrega el descubrimiento de que la "madre fálica", que constituye su objeto amoroso, en
realidad también .carece. de pene, esto la desvaloriza como objeto sexual y refuerza su alejamiento de
• , lá: misma. La niña se orienta sólo entonces hacia el padre, primero con el objeto de conseguir un pene
de él, deseo que luego es reemplazado por el de recibir del mismo un niño, quien sustituye ast el pene
deseado por ecuación simbólica, 'Asrentra
la niña en el complejo de Edlpo y el deseo amoroso hacia
el padre, coloca a la madre en al-pape¡ de una rival, motivo que se agrega a los que ya determinaron el
=Ó. , alejamiento de la madre, para intensificar .la .preexistente hostilidad, hacia ella. Por todo esto, según
Fr~ud, en la niñ¡¡ el complejo de Edipo serta mucho más univoco que en el varón y "va muy pocas
- -- -veces .más- allá de la sustituclón de la, madre ,y. de -la-actítud femenina con respecto-al, padre" 12., slnembargo, aunque en la mayorta de sus descripciones del complejo edlpico femenino, por otra parte mucho
menos detalladas que las del masculino, Freud no parece reconocer una actitud equiparable a la del
complejo de Edipoinvertido
del, varón, en algunas 1.,. refiriéndose a' la bisexualidad Innata, da" por .sentado que .~.n~am.J:Io.s:
sex?s."e!:~~rnpl~j.(): d~ ~9,iH0c.()mplE!'?,.:es.u.ri.CC?,l1)pl,~¡O,~?bl~.
PC?sit!vÜ'. :n!'ig.~,Uyo"9,
EI complejo de Edipo en la' ,teor¡akl~ini@l'Ia
relación con 'el pecho fortalecen la buena: relación con el pene corno fuente
de amor y placer.:
Desde' esta posición femenina la madre es precozmente considerada como una' rival :y, los celos refuerzan las motivaciones envidiosas
previas de los ataques fantaseados al cuerpo materno para despojarla y
apoderarse de sus contenidos valiosos, fundamentalmente niños y el pene
del 'Padre. Cuando predomina la envidia prevalecen los deseos destructivos
'hacia la madre ycuando preponderan los celos la flnalldad prlnelpales
adquirir las cualidadesvmaternas para asl poder ocupar su lugar 'en la
relaclón con el padre.
fistos impulsos de robar el interior de la' madre también encuentran
una 'fuente' en las dudas que la niña experimenta acerca de su propia
fertilidad,' dudas que coexisten con el conocimiento inconsciente de 'que
su cuerpo contiene potencialmente bebés.. Las 'ansiedades generadas por
estas dudásIntensltlcan
su necesidad de reasequrarse adquiriendo los
buenos contenidos que imagina dentro de la madre.
De uno u .otro :origen; estas fantasías provocan en la niña una
indeseada consecuehcia: el temor a ser 'atacada y robada a su' vez de
sus-propios: contenidos por una madre vengativa: Se incrementaasl su
anstedadpersecutorta
obligándola a' recurrir a renovadas tantaslas de
despojo de la madré 'como nueva medida 'defensiva, con lo cual se establece
unclrculo vicioso. Este ',temor a ser atacada y robada por una' madre
sádica, ycvengativa' constituye el conteo ido fantaseado fundamental d,e la
ansiedad paranoide en la niña 24.
, ' • A diferencia: de lo que ocurre en el. varón, esta situación no se
transforma enla niña, ya, que' no poseeun-órqano genital externoque le
permita tranquilizarse de sus temores de estar castrada y deteriorada :en '
su, Interior *. Este es 'uno de los factores que impulsa a la niña a desear
ser varón y poseer un pene" reforzando su posición masculina, originada
,
•
';:~~s~easegUramiento
concreto
sólo
I~'podrá
"
lograr en' la vida genital
adulta, sIendo madre de hIjos
785
'Téreilció B~.Gioia
primariamente' en su bisexualidad innata. Pero tarnblén actúan en la niña
otras motivaciones que incrementan todavía su deseo de poseer un pene .
.. ' La. niña desplaza parte del resentimiento que. experimenta en su
. relación. con la madre a la relación con el padre, intensificándose asf .el
odio provocado por .las inevitables frustraciones que -sufre en' sus aspiraciones> edtplcas .femeninas. Ambos factores la llevan a desvalorizar la
femineidad; intentar negar la existencia de su vagina y desear que le
crezca el .clltorls para tener asíun. pene. Oeeste modo la niña intenta
identificarse' con el' padre en la posición masculina, por medio. de la
. posesión Itusorlade un pene propio, 'reforzada por la fantasfa 'de apoderarse del órgano genital del. padre ..
. Es;:¡.sí como, desde el punto de vista kleiniano, la envidia del pene
y .etdeseode poseerlo, a diferencia de lo postulado por Freud H, n, .son
secundarios a ta rruetreclóndeJoédeseos
edfpicospositivos
de. la niña
de ocupar el lugar. de la madre en la relación con el padre y de procrear
niños con él.
, Los deseos de castrar al padre, surgidos primariamente de la frustración edíplca positiva ysecundartamente de la envidia al pene, convierten
en la fantasía de la niña al pene paterno.en peligroso y. al padre total en
venqatlvo. Estas vivencias se intensifican cuando la niña siente que el padre
.y su pene contienen, por proyección, su propia agresión contra la madre.
las ,imágenes peligrosas y vengativas del padre y su pene se unen a la de
'madre vengativa~anteriormente
descripta, ala que refuerzan como
.fuente de temores persecutorios.
. -: El. complejo de Edipo invertido de la niña y su 'deseo de poseer un
pene. es alimentado además por la ansiedad depresiva y la culpa qué
experimenta a raíz de sus ataques fantaseados al interior de la madre; al
que también vivencia dañado por el pené malo del padre. Siente que
adqulrlendo el pene como un órgano' bueno y .productlvo] entrará en
posesión del medlo que le permitirá reparar el interior deteriorado de la
madredándole niños, amor y placer genital.
la
786
/
El complejo de Edipo en la teoría, kleiniana
El destino del complejo de Edipo
El destino del complejo .de Edipo no está, para M: Klein, ligado a
un final con características tan netas y definidas como las. que se deducen
de las descripcioñes de Freud. Al referirse 'al "final del, complelo xíe
Edipo", Freud utiliza repetidamente expresiones talescomo: "naufraga",
"queda destruido", "sucumbe" 10, 12, afirmando claramente que elproceso
normal "es más que una represión y equivale ... a una destrucción y una
desaparición, del, complejo" 12; Además reconoce un proceso patolóqlco
en el cual "si el Yo no ha alcanzado realmente más que una represión del
complejo, éste continuará subsistiendo, inconsciente, en el Ello, y manltsstará más tarde su acción patógena" *.
Si bien M. Klein distingue posibilidades de evolución normales y
patológicas del complejo de Edipo,: esta diferencia no se basa.enta extinción' o .perslstencla de las fantasías constitutivas del complejo sino que
está en función de los diferentes modos de elaboración de dichas, fantasías
yde la posible superación de las ansiedades vinculadas con las mismas.
-Esto implica que. las' fantasías, 'ansiedades y defensas correspondientes,
modificadas y elaboradas, continúan actuantes y eficaces, produciendo
efectos, patológicos o no, en las modalidades de relación obletal, internas
y externas, vinculadas con la problemática edípica.
'En las consideraciones acerca de los destinos del complejo de
Edipo, importa su correlación con tres conceptos, a nuestro entender,
fundamentales para este tema: la formación del Superyó, la ansiedad de
castración y las ansiedades depresivas y los correlativos impulsos re-parátorlos.
•
Sin embargo conviene tener presente que el mlsmo Freud relativizó esta manera de conceptual izar el
fin del complejo, de Edipo al afirmar en 193718,: "Cabe dudar, como sabemos; que ninguna formación
pslquica pueda llegar jamás a ser totalmente destruida"; Idea ésta que se corresponde con la afirmación
klelnlanade
la eficacia permanente. de la fantasla Inconsciente,
.
787
Terenelc '8. Gioia
Complejo de Edipo y Superyó
Una dlscrépancla 'capital entre las teorías klelnlana y freudiana
relativas al Superyó,es la. que se refiere al momento .de cornlenzode SU
desarrollo. Asf como Freud sostiene la iniciación tardla del complejo de
Edipo, también afirma un.tardlo establecimiento del Superyó, íntimamente
ligado a dicho complejo, *.
.
_
.
!,
.
-
En la teoría kleniana, en cambio, es de fundamental importancia la
postulaclón, repetidamente afirmada por M. Klein, según la cual la compleja
constelación de.relaclories objetales que estructuran los estadios tempranos del completoide Edipo, guarda una estrecha. interrelación con la
, también precoz iniciación del desarrollo del Superyó.
~ Desde el comienzo .de sus relaciones objetales, aun bajó el predominio de los impulsos orales, el niño introyecta sus objetos externos los
que, de este .rnodo, tienen su contrapartida en el mundo lntertor. Así,en
amboaáexoscomlenza
a tnteqrarsael Superyó muy tempranamentecon
la introyección
del primer objeto, 'el pecho materno, que constituye
su
núcleo y se inicia el-largo. proceso evolutivo de su formación.,
Segun' Freud. es sólo 'al declinar el complejo de Edipo, entre los 3 y 5 anos de edad. y en .sue cuatro
tendencias 'integrantes: hostil y amorosa hacia el padre y la madre, que nace una doble ,Identificación
con cada uno de 108 progenitores, determinando una modificación en el Yo, que se opondrá al resto del
mismo en calidad de Superyó 10: El predominio de la identificación con el padre o la madre dependerá
"deJa relativa energla de las dos disposiciones sexuales" 10 contenidas en la bisexualidad Innata. Lo
normal .en el varón, por ..lo ·tanto,- es que -predomine la identificación con el, padre, que conservará al
. objeto, materno del complejo positivo y suatltutrá al objeto .paterno del .complejo Invertido, Lo mismo
" ocurrirá 'con la identificación con. la madre, en este caso con menor Intensidad. En la niña, el mismo
proceso. culrnlnará en una preponderante identificación con la madra en razón de la mayor. lntensldad
del componente femenino. La posible variación en cada individuo de la relativa energla de las "disposí. ciones sexuales, puede ..alterar esta situación normal, hasta llegar a invertirla. 1:1 Superyó ast formado
: como, "el heredéro del complejo de 'Edlpo" 10 tiene su precursor en el Ideal del Yo, que. .cofnlenzá 'a
formarse "en la más temprana edad" 10 como resultado' de la identificación primaria con el, padre y la
madre la que, a diferencia de las posteriores, "no parece constituir el desenlace de una carga .de objeto,
pues es directa e inmediata y anterior a toda carga de objeto" 10. De este modo el Superyó, si bien
resulta de la represión del complejo de Edipo', a través de su precursor, participa en la génesis de dicha
represión. Pero el Superyó no sólo contiene los restos de las primeras elecciones de objeto sino que
también Incluye en su estructura una 'enérgica repulsa contra las mismas, presentando una dóble faz: por
. un lado, la identificación. con los, aspectos. amorosos y.protectores
de los padres y por. otro.. con los
prOhibidoresy, punitivos. Además Freud considera que hay una diferencia entre el.Supery6 masculino y
el femenino. En la mujer, la tnexlstencla , cialtemor
a la .caetraclón quita el, motive¡ prjn9ip.al para la
superación del cornple¡o de Edipo y' por lo tanto 'para la formación del Superyó. Asr padece la formación
del Supery6 en la niña, no alcanzando la fuerza que adquiere en el varón 17.
-
El complejo de Edipo en la teoría klelnlana
En el nivel de objeto parcial, pronto se. suma la lnternallzaclón del
pene a la previa del pecho y ambos, en sus aspectos 'buenos' y 'malos',
se, constituyen, en .los primeros objetos internos protectores y auxiliadores
por un lado y aqreslvos y vengativos por el otro. Estas primeras introyecclones se complementan en el curso, del proceso evolutivo con las suceslvas lnternallzaclorres de las diferentes figuras, de los padres totales y de
la figura combinada .de los mismos. El proceso introyectivo se entrelaza
con otro slmultáneamenteproyectlvo: el niño proyecta sus objetós lnternos
y partes de su Self en sus objetos externos que de este modo son percibidos y, en consecuencia, sucesivamente introyectados con características
teñidas por los elementos proyectados. Así se establece una interacción
y mutua modificación ,entre mundo externo e interno en la que lo introyectado modifica la' constelación de relaciones objetales interna y a su vez
la proyección determina' parte de las cualidades de lo introyectado.
,
La evolución del Superyó marcha paralela a la del Yo, formándose
ambos por una larga cadena de introyecciones, proyecciones y relntroyecciones, que van modificando paulatinamente sus caracterfstlcas, Estas
fluctuaciones entre .sltuaclones internas y externas son permanentes y es
en v'irtud de ellas que, desde un comienzo y a lo largo de todo el proceso;
existe 'una estrecha interdependencia entre el desarrollo del Yo, del complejo de Edipo y del Superyó. El niño internaliza asf progresivamente' a sus
padres como objetos internos que tienen desde el comienzo aspectos buenos en relación con Jos cuales experimenta bienestar, aspectos malos
que le provocan sensaciones persecutorias y aspectos-destruidas ante 'Ios
cuales .experimenta ansiedades depresivas y culpa por haberlos dañado *,'
" La 'actividad del Superyó sádico, resultante de la suma de los aspectos malos de los' objetos parclales, totales y combinados; és incluso. más
Se comprende que de acuerdo con esta taorla de la formacl6n del Superyó éste pierda, en cierta medida,
el carácter univoco y definitivo que, como estructura pstqulca, ostenta en la concepción treudtana. Por
el centrarlo, diferentes objetos internos, correspondientes a diversos momentos introyectlvo-proyectivos
'del proceso evolutivo individual; pueden,' en determinadas' circunstancias, adquirir caracterrsticas superyolcas, ya sea benignas o 'malévolas, Estas caracterrstlcas adquieren as! el status más de una función
que el de una estructura, "
.,»
-:
789
Terenclo B. Gioia
severa en las .prtmeras fases de su desarrollo *, en relación con la' relativa
mayor debilidad" del Yo, la más intensa repercuslonde las vivencias de
frustración y ~I predomlnto-de las fantasías agresivas. Esta severidad del
Superyó precoz es responsable de que el niño péqueño experimente
lntensasansledades 'paranoldes y depresivas de tinte pslcótlco".
'" ; También para M. Klein existen algunas diferencias entre el Superyó
femenino y el masculino, pero que no' derivan de un detrimento del desarrollo del Superyó en la niña, sino de una diversidad de cualidades. Como
ya 'I~ hemos señalado, la 'ausenci.a de un' órgano 'genitalexterno en la mujer no sólo refuerza su .poslclón masculina, sino que hace que las ansiedades relativas al estado del interior de su cuerpo adquieran rasgos de
mayor Intensidad y.persistencia que en el varón. ·En consecuencia, en su
, vida emocional, el. mundo interno tiene una importancia más relevante
que. para el nlño >.
,
Este' mundo interno aloja la imagen de una madre perseguidora,
emergente' ci~'las fantasías dé' ataque y despojo de sus contenidos 'vallosos, A éste objeto" materno, intensa ypersistentemente
persecutorio, se
unen rlas'imá:genes, primero de unpene 'y luego de Un padre dañado y
vengativo resultante de "os deseos de la niña de 'castrarlo que, como ya
Vi~O~:~~rg~~'n~ sólo y primariamente 'en 'Ia posición femenina, sino tarnbién y secundariamente en la masculina. Para poder amortiguar las intensisimas' ansledadés provocadas por estos objetos, la niña experimenta una
n:ecesid~d de incorporar objetos buenos, la que unida a la naturaleza
receptiva
de
,su órgano ge,nital, da
~ .~
-~.
~ razón de la relativa
. . intensidad de
-- sus
procesos introyectivos en comparación con los del varón. Esta característi9a ·es la q'U'eda cuenta, según M. Klein -: de alqunas partlcularldades en
el" procé~o'de form~ci¿~ del Superyófemenlno.
,,,'
."
iu:e~te·.
".
_.,
."
790
y
• " Según P.' Heimann 19 el reconocimiento de que el Superyó se encuentra presente
activo desde el comienzo del desarrolle permite resolver la aparente contradicción entre las afirmaciones de Freud'o, de
que el Superyó es el heredero del complejo de Edipo y, al mismo tiempo, intervi'ene en su' decllnaclón,
Ocurrlrta "que; con la elaboración de la" conflictivá edlplca, el Superyó alcanza una nueva y, más' deflnlttva-orqantzaclén,
cuya base ha sido echada p~r las, introyecciones y proyecciones. anteriores:
'El complejo de Edipo en la teoría kleiniana
La niña, como el varón; lnternatlza 'una madrebuena y protectora
quien, además de mitigar las ansiedades provocadas por la madre vengativa; favorece por identificación coneuasue relaciones tiernas y_ libidinosas 'con el padre bueno: Esto incrementa el anhelo 'de la niña de. incorporar
el pene' paterno por sus deseos sexuales de' placer y .fertilidad. :p:ero
. también en la poslción masculina la niña desea incorporar el pene del
'padre y a éste -corno' figura total por el anhelo de adquirir sus. caractertsticás positivas y capactdades masculinas creativas y reparatorlas.. para
poderreparara
la madre dañada y vengativa. Esta combinación de ldentlñcaclones con el padre bueno en ambas 'posiciones sería prectsamente
la' quada una. cualldad particular al' superyó témenlno, al establecerse
una muy Intensa relación de: dependencia Y.adrnlraclón hacia este objeto
interno.
Como se desprende de estas' conslderaclones, el .Supery6 femenino
no es, en Klein y. continuadores, más débil que el del varón. Por el C911trarlo, se caracteriza' por su' fuerza e intensidad tanto enlos aspectos
sádicos y terrorfficos cuanto en los protectores y amantes ...
Tanto 'en ~I' caso del varón como .en el de la mujer, el Superyó
. intervjene 'precozmente en Iarepreslón e inhibición de las pulsloneeedípicas amenazando. internamente con- castlqos. .Pero estas amenazas no
se dirigen tanto a los deseos libidinosos, como lo sostuviera Freud *, sin?
a los impulsos agresivos que acompañan a los mismos y están .orlentados
hacia el otro componente de la pareja o hacia un hermano que en ese
momento tercia como rival; asl como también hacia el progenitor objeto
del deseo edípico y frustrador del mIsmo.
//
.•
.
.
Sin embargo en 193015 Freud privlJegla los Impulsos agresivos como motivadores y destinatarios de las
amenazas euperyctcae. .En ese mismo texto también apoya. la conceptualizacl6n
klelnlana de. que la
severidad del' Supery6 está más en 'relaclén con las fantaslas agresivas del euleto que con el ·trato real
dé que éste fuera objeto por parte de los padres reales.
.
.'
. ..'
791
Terencio' B: 'Gioia'
Complejo, d~, Edipoy ansiedad ,de castraci.ón ... ,
t
.••••
~
•.
.
t··
, También 'enJo. que. se refiere al origen, las .cáracterlstlcaay .los
etectoade la ahstedad de' castración, en relación con la .problemátlca
edíplca, existen 'i.mporta~te$ diferencias entre las concepciones. freudlana
y kleiniana .
. Freud consideraba que el temor a la castración es sólo eficaz en
el varón * y en él constituye el único factor determinante decisivo en la
. renun'Cia a los deseos edíplcos; tanto activos como pasivos. Las satlstaccionesactivas,
masculinas, llevan a .la pérdida del pene como castigo,
.mlentras que las pasivas, femeninas, imponen el sacrlflclo del pene como
condición previa 12. 'Además, 'ta ansiedad de castración actúa tardíamente,
ya Instalado el complejo de Edipo, puesto que antes de que el niño alcance
la .etapa fálica de la organización libidinosa, no tendría sentido hablar de
temor' a la castración. '
De acuerdo con la conceptualización kleiniana, la angustia de castración, sin ser la única motivación, es eficaz ya precozmente en la deterrnlnaclón de la 'renuncia edípica en ambos sexos, iniciándose su actuación
'cuando el niño está aún bajo el predominio de la libldo oral. Tiene como
contenldo fantaseado primario y fundamental el temor al vaciamiento y la
destrucclón del interior del' propio cuerpo del bebé. Tanto' el varón como
792
En 'general Freud parece' sostener la 'tesi's de que la ansiedad 'de castración se origina en amenaz,as
reales en la historia vital del sujeto. Sin embargo, en algunos párrafos 8, 10 insinúa que la 'amenaza de
castración .lnteqra un grupo de, fantaslas cuyo contenido "tiene una amplia independencia de las experiencias individuales"
y a laS .que habrta que reconocer un origen filogenético.
De todos modos el niño
se convence de la posibilidad de la castración observando el genital femenino. Este temor de ser privado
de una' parte de su cuerpo se sustenta además en experiencias de pérdidas y separaciones anteríores:
el nacimiento, el destete y la evacuación excrementicia 12. En .la niña, 'en cambio, el temor a la castración
causa el abandono de los deseos ed Ipicos. Por el contrario la suposición 'de que' ha perdido el pene
por castración inicia el complejo de Edipo, alelándola de la madre y orientándola hacia el padre en
busca del pene perdido. Pero con la desaparición del temor a la castraclón se desvanece el motivo
principal de superación del complejo de Edipo: "La niña permanece 'en él lndeflnldamente y' sólo más
tarde e incompletamente lo supera"?". La niña es llevada ala
represión de' sus deseos edlpicos por
otros factores que,si
bien actúan, .también en el varón, sólo tienen en él 'una importancia secundaria,
AsI, las decepciones dolorosas por la Intrínseca lmposlbltldad. de, aatisfacclón de sus. deseos.. y la
obligada recesión del complejo de .Edlpo al llegar a determinado momento de su evolución, marcado
filogenéticamente
y transmitido
heredltarlamente 12. También actuaria en este sentido en la nlña lo
que Freud considera su ansiedad fundamental: el temor a la pérdida de amor de la madre y a la muerte
de ésta.
'
,
El complejo de Edipo en .la teoría klelnlana
'la mujer, motivados. por Jaenvldla, favoracldady
lbs .cetos hacen: objeto al
'interior del cuerpo 'materno de ataques :s'ádicosfantaseados y, encense-cuencraesperantoénttcó
tratopor parte dé aquélla. As! la génesis~de la
'álisiedádd'é: castráclóndepende
menos ,qúé"eh ei enfoqué freudiano 'de
lascondlclónés y experiencias' vltalesreáles "y sé fuñdamentarnás 'én- el
juego ,de la fantasía:
embargo, [as 'inevitables frustraciones vlo los
maltratesactlvos sutrldos en la relación con 'la 'madre" se convlerten para
el niño en la prueba de la realidad de estas actividades vengativas por
'parte dé -Ia misma:' .
"
.
,"
sir,
, E'n la mujer estos contenidos. fantaseados primarios de: la ansiedad
de castración permanecen ínvarlados y.se Intensiñcan en razón: de
impulsos a atacar el lnterlor de la madre provenientes de otras , fuentes
:,agreg~das: la ,r'ivafidad'edíp'ica y,la V? menclonada necesidad d~,re<:ls~,gy.ramlentopor la adquisición de los valiosos .contenldos rnaternos.A estos
temores, a ~na riJtidre castradcrase u~e~ lbs emergentes
li re'laCiÓn
con un padre con si(ni·laJ~~.c'Ualidád.e~ y cuyo pene es vlvldo como' 'U:n
Órganp destructor".
, "
En el varón, en cambio, las, fantasías que primariamente, informan
la ansiedad eje castración ,sufren unproceeo ..de transtorrnaclón.. Sin que
:~e,st9implique: la totáldesaparlclón
de .!asprill)itiy~ª tantaslas, ..a. medida
que,,(an,predominando los.impulsos y las sensacionesqenltalés, la ª,ngustia
se: vª centrando enIa pO,sJb¡lid.ac;lqepergereI __
órg~DQ ,genit~I,. ansiedad
que se incrementa al descubrir la capacidad 'eréctll' del pene: ' .: ...
Jos
"d.e
_.., ' ... Los lrnpulsos ....Qrªlsªdic ..o~..transterldos ..de] .Pecho -:al, pene. en las
~etap~s'prec9ces.~on .reforzados.por la .rlvalldady elodio.edíp[cos
yse
expresan .en el, deseo, de morder.iarrancar ydestrulr
pené der padre .
.Esto ,g~nera .ektemor ..auna.actltud .slrnllar y de sentido Inverso por. p~Ite
el
daaquél..
•
.' .._ ..... .:: _ _ . '"
..... : '""
-.".,.
..,~.,._
Como hemos señalado anteriormente esta Imagen del padre está relacionada con .los . deseoscastratorlos dé 'Iá niña hacia ·el'rnfsmo." Porotra
parte, estaadjudlcacloñ,
'en Ias' ·fañtas[as 'de' 'ambci.s·sexos, de
cualidades 'pellgro'sas a Ia.funclón
gen1tal masculina es íacllltada por 'su' caractertstlca' penetrante, que
la instituye en un medio proplclo para el' deeplazamlentoy
la ',derivación
'Ioslinpulsos'
oralaádlccs.
ae
·~i9:3
\.
TerencioB.
Gioia
, " Porotraparte-el'deseode
tener un coito con la madre excluyendo
.al padre.provoca-Inrnedlatamente el temor a la castración, puesto que el
.nlño slenteque el padre experimenta idénticos ímpulscsaqreslvos y ven,gati\(osalos que él dirige hacia su proqenltor, deseando excluirlo' y 'castrarlo -al -tantasear o presenciar el coltoparental,
Por esta razón; no es
;indisRensable· que en la' génesis de la angustia de castración medien
,~menazas'externas reales, las que, cuando existen, naturalmente refuerzan
.tos 'temores del niño:
.
I
"
.
Otra fuente importante de la angustia de castración en el varón
," '<actúa .desde su posición femenina. En ésta, no solamente ,la pérdida del
",. ",," ,!}ene es -sentlda como la precondlclón para la realización de los deseos
, :;----'~?écHpicospasivos. Además, las ya descriptas fantasías de ataques envidiosos
. ,-~':al interior del cuerpo materno ahora son reforzadas por los celos edíplcos
invertidos que motivan al varón para apoderarse .de sus contenidos y
capacldadescreatlvae
y poder así reemplazarla en, su relación con' el
padre •.Esto Incrementa la vlvencla del interior materno comopeligrpso y
'destructor para su pene, temores que son el fundamentode las posteriores
tantaslas de 'vag,ina dentada' (ataques orales) y de 'la "teoría cloacas' (ata:qu~s .~.nale!?)20*.'
'"
"
,,
También en la posición masculina el interior de la madre adquiere
cÜE!!idadespeligrosas para él pene del niño, qulen siente el viéntre 'materno
.llenc ,de,obie.!os daftados y vengativos: bebés.rlvates y el pene del padre"
hostll y castrador en razón de los ataques celosos fantaseados contra
el mismo. '
'
,
"
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•
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'..
-
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•.
'7
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•
Los' celos edíplcos aún intervienen de otra forma en la intensificaclón de la ansiedad decastraclón, 'al impedir que el niño de ambos sexos
pueda tolerarla, vivencia del coito parental corno algo bueno y creador.
Este toma en su fantasI~ las características de un coito sádico'en'el que
el cuerpo de la madre es deteriorado por un pene malo y, a su vez, el pene
:>
794
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. cuando estas íantaalaa 80n dominantes, 80n un factor ,Importante en la .Inhtblclón
de.Ja heterOsexualidad
en ernboasexce.
El varón teme et genital femenino pellqrcso ,y la' mujer, ,Identificando 'su.'gen.ltalcon
el
de ,la ,madre" 1.0siente peligroso 'y, se '!Ibstiene de utilizarlo con el hombre que ama.
,',
El complejo de Edipo en la teoría kleiniana
es atacado y dañado por el genttal::ITH:~temo,,Por otra parteesta interpretación de' la relación parental potencia la ',imflgen mala de la madre, quien
es vivida en estrecha, unlón con eí. padre malo, ambos, dirigiendo su malevolencla hacíael hiño:,'
"
"
..
.'
"
,
.
Pero la angustia de castración, como lo ha puntualizado P. Hel2
,mann °,'además de estar vinculada con temores persecutorios, está inte'grada po'r centenfdosdepreslvos. Ei niño de ambos sexos teme no sólo ser
despojado délÓrg9n6 'y el poder para el placer sexual sino también perder
.el medio para expresar amonreparaclón e impulsos creadores. Más específicamente, 'Ias ansiedades de la niña por los ataques de la madre' terrorífica responden .at temor dé que éstos destruyan no sólo al 'Self; sirio
también a sus objetos amados, los bebés internos '26. ' .
"
..¡
,En .virtud de las intensas ansiedades persecutorias
depresivas que
estas pollfacéticas fantasías de castración despiertan 'en el niño', es que
cobraespecta¡ relevancla para su desarrollo el poder llegar a 'experim'9'i1tar
,Iasensa,ción' de que el progenitor de! sexoopuesto lo acepta y le permite
'ocupar el lugar del;padre"Eúl el caso,del varón, yde la madre, ene,l caso
de. la .muler. ;1 sentir que,' en alianza y cooperaclón con el progenitor del
sexóopuesto, puedecolocarse en el lugar 'del otro del mismo sexo, sin que
estoJrnpllque nécesarlamentael
daño' o la muerte del mismo, estimula
s:úsJantasías, amorosas yreparatorles y' permite la internalizacióndé
UI1;:t
madre y un padre buenos y' tolerantes, amortiguando la vivencia de la pareja parent~lmfala, atladasecreta y hostilmente contra él ..
•
•
'
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J
I
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••
__
Com.plejo.de
Edipo
depresiva
-.
~. .,
~ y ansiedad
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-
'..
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"
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..
;
'.
-
De acuerdo conIaconcepclón freudiana, carecería de 'sentido sostener que los sentimientos de culpa intervienen en los destinos del complejo
,cieEdipoya que: 'según esta. concepolón, la instauración delSuperyó, 'corno
ccnsecuencía del' final, de dicho complejo; sería -taconotcfón
lnelúdlble
'para::la' aparicióndel:sentimiento
deculpabllldad, 'resultante de 'la tensión
795'
,
Terencio B. Gioia
'éntre loS mandatos délsuperyó ·por-una parte
sentfrnlentos del Yo; per ·Iaotra * :lQ.
. '.
y lesJmpulsos del, Ello y los
..
.,
-
En cambto; el 'enfoque kleiniano otorga un papelrelevante
a los
sentimientos de culpa depresiva en la determinación de los destinos del
'có'mp,iejó' de Edipo..'
,
'l'
. Ya hemos señalado los contenldos depresivos que, además de los
persecutorios, .también integran la ansiedad de castración. Pero además
iñtervi~n~en lainhlbtclón de tosdeseos edípicos la ansiedad depresiva y
'la :culpa .P9Y las tantaslas aqrestvas d,irigidas haclaetproqenttor
del mismo
sexo en 1.8 situación edíplca positiva y hacia ~I del opuesto en la invertida'.
En la medida en que el presenciar o imaginar a los padres unidos
en coito es la causa de la máxima frustración experimentada ~po~,él niño
de ambos sexos
provoca intensos deseos destructivos dirigidós hacia
la:pareja. Estos' deseos motivan estados :de ansiedad depresiva 'severa,
'Ii~gado~al,terrior de destruir al objetó deseado al' mismo tiempoque él" rlval.
~o;
. :Enel.\.iarón y.en el complejo de Edipó~directo, las .tantaslas ~ádi9,as
entran.en conflicto con.Ios sentimientos cariñosos hacía el pagre,los>que
hacennacer en el, niño lanecesldad dé reparatlóy renunciar a~usªsp'ir~~
clones hacia la madre. También a éstaelniño laimaginaen
peHgro,',si,n:"
tléndola amenazada por su rivalidad con el padre. Renuncia. a triunfar
sobreé! por cuaritoconsidera'que':la concreción, d~:S~Sfantasra~, sádlcaa,
con' la 'consiguiente castración, desaparlclórr o muerte del padre,col1s,Htuiría una pérdida irreparable para la madre querida. Iguales motlvaclones
de signo inverso lo llevan a la inhibición de sus impulsos agresivos hacia
la madre en la situación edípica neqatlva,
Por otra parte, como hemos visto, las fantasías sádicas del'nlño le
hacen
sentir
su pene como un órgano peligroso, lleno de orina mala, cuya
.
"'
•
796
.'
.
...
'Es Innegabíe que esté 'origen 'del sentimiento' de culpabilidad
le oiorga una cualidad' ernlnenternerite
"persecutoria,
No obstante:. e(i 'ªIgunps' escrltos. Freud '.h~C'e·afirmaciones que .tndlcartan su 'acepiilt:TÓn"da
.. I"! extstencla ,d~ un sentimiento de culpa 'de ,caracterlsticas
máe depresiva~. ("re.mordi,mhihto") previo a
:. la: ~rej::é:i6n"del .Supery.o·'y íundado' .en: etcontucto
de amblvalencla que 'surge de 'la"etern'Q' tucha ' entre
Eros y el lnstlnto de destrucción o de. muerte" 15, Más aún, en ciertos pasajes Freud sugiere que la lns, 'taLira,c'lón,'del 'SupérYÓes'uM'conseéuencilf
de'dicho' sentimiento 'de culpa, 'afirmando ,"la participación
"del amor en la génesis'de la conciencia (Superyó)" ",
'
\
El complejo de Edipo en la teoría kleínlana
[ritroducclón
err larnadre
tanto, debe abstenerse.
sería destructiva
'Si además,
.para ésta y de la cual, por lo
por .ldentlflcaclón,
siente que contiene
el perremalodel
padre;' se intensifica [a peligrosidad del propio y su.necesldad de abstención,' ya que 'no puede considerar a SU .pene y aIaqenlta. lidad como un medio de hacer feliz a lal madre y repararla
que cree haber destruido en su interior.
A esta creencia
en la maldad
por los bebés
de su pene se une lá convlcclónde
que los niños que le podría dar a la madre también serían malos y la
dañarran~' Esta fantasía surge principalmente
de tres fuentesr-déIa
equlpar~ció~.' de 19S rii~os .con su propio pene malo, de la .proyecelón de-su
pr9Pi~ ágr~~iv!dadenaquéIlo!)
y de la creencia de .queun pene malo sólo
puede dar prigen anlñosmalos:
'.
•
o"
'Es
~
porestó
qué el nlño
desea proteqersu
pene de los perseguidores
internos' y' externos, no sólo para evitar un daño El su Vo, sino para.preservario como un medlo de dar amor y realizar reparaciones: Lo mismo ocurre
con los·bebés que desea recibir dé su padre .en el complejo edíplco Invertido y los que 'desea dara su madre en el complejoedípico
tlca necesidad de preservación experimenta, en relación
.bLiénósobjetos'-internalizados
qué siente amenazados
.persecutcrlos .Intreyectados,
especialmente
la pareja
cuanto porsus propias tendencias agresivas.'
posltlvo.Tdéncon Su YoyIos
tanto por los objetos
combinada
sádica,
...
"
,.....',
" '" v. ~imilar~sc(>nsideraciones
son válidas en. relaclón.con
las. motivaclones que inducen a la· niña a reprimir los componentes sádicos de sus
tendencias edípicas. .Los sentimientos
cariñosos yel desode reparar a la
. ma4requeridacorÍduc.en·
a la niña a la inhibicíÓn de sus impulsos aqreslvos
hacia ella y de sus deseos 'de despojarla del amor del padre. Pero también
.el.amor al padre interviene favoreciendo
el abandono, de estos deseos.
vlvencladela niña de tener .su interior dañado por la madre vengativa
"J-de que, por-lo tanto, es peligroso para el buen 'pene patemores
otra
.razén.que la induce a abstenerse-de
realizar' el deseo de recibirlo en- su
,interior.·
~.
. ,
.
"
La.
.\
797
TerencioB.
Gioia'
: Idénticos factores concurren para la represión de los deseos-y las
tantaslas agresivas del complejo de Edipo invertido. Por el amor: al padre
querido, renuncia a sus 'deseos de despojarlo .aqreslvamente de su pene
envídladóy a competir y .rlvallzar.con.él.en el amor de la madre.. _ ~,
.
~.
.
~
En- un intento de señalar algunos puntos esenciales que pueden
desprenderse de 'los conceptos que, ríeacuerdo con el-enfoque klelnlano.
'hemos', venido, desarrollando acerca del' destino del .complejo' de~dipo.
insistiremos nuevamenteen que' su superacíónno.Impllcala
,desaparición
.delas fantasías que lo integran. En esta superación desempeña un papel
caplfal la lnteracclónentrelos
dlterentes aspectos' persecutorios y protec'tóras'del$uperyó,
en interrelación dinámica con las ansiedades persecu'toriás de 'castración y con las ansiedades depresivas y las tendencias
-raparatorias. Poreso, constituye una hipótesis fundamental en la 'teoría
'kleini~h¡ldel' complejo de Edipo:, '[a aflrrnaclón de qu'e I~ 'evplución del
:'irlisrnó depende de la elaboración de las ansiedades persecutorlas ydepre'si~a~que,promovidas
'e intensificadas por la envidia,' los celos y las
'frústracfo'nes,: impiden que-elnlño reconozca la relaclón 'creativa de' Íos
padres en el coito.
'
.',
,
'
.
/'
/"
.
. "::"ÉI'~niñ6intenta
negar éste' reconoclmlentodebldo-a
los dolorosos
csenfimientos"depresivos que despierta; recurrlendo a todos 'los' procesos
def€ú;sivos' aeu alcance.ventre los: que se destaca la utllízaclón-de la
::iderítificación' proyéctlva-comomedlo
dé desconocer la realldad- interna y
~xte'rria 'Y 'el dolor psíquico concomftantex 25, 30, 31, 32.
',"
Ya
hemos señalado la importancia que para Bion adquiere lo que él
"llama é'!' "mito edípico privado" para que' el niño 'pueda' contactar con
:Ia'':'p¿reja'parental real; Peré -ádernás- este, ''-precursor':de~ Is:'s'ituácion
;'edípicá: .. . corresponde al Yo',como- parta de su' aparate' para éfl contacto
con 'la realidad" 3. Este enfoque vincula estrechamente el aborda)e:cfe'ia
1, ,
El complejo de Edipo en la, teoría kleiniana'
problemática edlplca con el crecimiento mental, fundado en la posibilidad
deaqquirir conocimientos y capacidad ,de pensamiento .
.;', , "En este. sentido Bion reformula el mito edípico otorgando a sus
componentes una significación relativa al proceso de adquisición de conoclmlentos: el enigma de la Esfinge expresa la curiosidad del hombre, tundamentalrnentehaclasl mismo; Tiresias representa el temor ante el conocírnlentoy el deseo de desconocer; Edipo, la voluntad de saber y el desafío al
peligro, representado por el castigo en forma de ceguera y destierro.
Si el niño no puede tolerar el impacto de la verdad -el conoclmlento de
I~ relación entre los padres- pierde el aparato que posibilita el, pensamlento, constituido por los elementos alfa vinculados a lapreéoncepción
edípica. Estos elementos son fragmentados y dispersados, .quedandoet
niño incapacitado para lograr una concepción de la relación parental-y, por
lo tanto, para' poder encarar' la resolución de los problemas' edlplcos ya
que "nunca: los aborda" ,3. Esto lleva atdetertóro de todo el' proceso de
aprendlzale por la experiencia y a la distorsión del desarrollo mental.
,
Money-Kyrle, fundándose en estas Ideas de .Bion, considera que
:cuandopredomina en el niño el deseo de"evadir' el complejo de Edipo" sl,
es decir de no reconocer la relación parentateete propósito distorsiona el
concepto del coito parental, convirtiéndolo en un "producto colateral de
la fantasía. de identificación prcyectlva't=, lo que constituye la base para
"el desarrollo de todas las -torrnas de perversión e lnsarila" 32. Esto Implica
que la preconcepción de' una pareja parental productiva no se 'realiza,
, siendo reemplazada por. la c;:oncepción de una pareja espuria, constituida
.en: l€l mente sobre el modelo de las funciones corporales del niño. Esta
eería la base de las concepciones orales, anales y urinarias del coito y el
fundamento- para todo un conjunto de "malentendidos y concepciones llu.ecrías inconscientes", vinculadas a los conceptos de Bion acerca de las
causas de la distorsión del aprendizaje y del crecimiento mental en general.
, ' ' ::' Estos conceptos están estrechamente correlacionados con 'la des:cripción, que hace Meltzer 80 de la dificultad que experimenta el niño para
reconocer' lascualldades-poeltivas
de la pareja parental. Aun iniciado el -
799
Tereneto . B e . Gioia .
reconoclmlento; éste 'es"pqulatino:él niño, puede .aceptar primero' las.cualidades reparatorias del coito, -lueqo, más difícilmente, las creativas y sólo
en, último término las, placenteras. S,on este reconoclrnlento y esta aceptaclón.los.que permiten J~ lnstalaclón .en el mundo interno de .objetos parentales, equipados, no 'sólo de .Ias cualidades de bondad, fuerza ybelJe,za,
sino .de contenidos. tales como conocimiento, habllldad ,y,sabidur[a, ..P.or
identificación con estos contenidos del "equipo" .de.los objetos iptemos,
es que sedesarrqlla lo',que Meltzerconceptualiza
como "la partea~ul.t~
del :5elf", . dotada' 'de la' capacidad .de guiar las estructuras' lntantlles y
rnoderar.su 'omnipotencia destructlva, ,
Es así 'que. resulta de 'suma importancia para el desarrollo mental
dal.Indlvlduo, etteconocimiento .delcolto. parental "corno .eupremc acto de
creación" J2, basadoseqún. Bion y Money-Kyrle: en la, exlstencla de una
preconcepclén innata del rnlsmo.. reconocimiento que permite la elaboradónde la, contllctlvaedtplca
y conduce a: la lnternallzaclón y Él.! establecimiento en .la menté Jn'tantir del "concepto del coito parental bueno',' 32:.
Este 'serta elprerrequlslto. para poder ,efectuar el, duelo por la renuncia al
de'seo'de .reallzar Ia fantasía -adípica yIa precondición parael loqro Q~
la propia capacldadparaJa actívldad ,geoitaly creativa en la 'lic:ta,agulla.
I~s
Ré~u,men cemparatlvc ':.de'
coin~idenciasy, dís~¡'epanci~s:',e¡'trel,á~ ::
concepcióñes'
freudianay
kleinlana
del .complejo
de Ed'ipo'
"
. . . '
-..
.
'....
..
.'.
,',., Conceptos, freudianos ,
1) Los d,eSeos'genitales'surgenen
la fa~
: se tállca: entre los 3 y.los S,'años,
.:
,
-;
_.
.
800
.'-'
2) S610 cuenta el órqahomascuüno, pero
ngse trata de deseos 'ge,nital~!>,si~9' ,
- , . fálicos,
. .. _ .. ~~.
~._-- activos
_ .. y ,pasivos
".
~
-
','
".
-
...
..
Conceptos kleinianos
1) Los deseos, tas-sensactonesy las fantaslas 'genitalesestá'n presentes .desde
, el comienzo deJéi' vJda~po~nat,~!: • _':
2), Las fantasías son genitales
y
serefle.
ren a los órganos y las .!un~i~!:,es:rna~cullnos y femeninos, cuyo conoclrnlen'io' lnconsclente se:da: en arñoqs, ~~xo~.
.. 'Las tantaslasscn-atmultáneamente
-ae, 'tivas y pasivas. '.'::
El complejo de Edipo en la: ti~or¡a klelnlana
3)' Los deseos táltcos' resultan def la evo- . , 3) Los deseos genitales. coexisten en un
, lución de las etapas previas' de la llbl- .
comienzo, 'bajo la primacla oral, con
..do, .en tormasucéslva. '
' faritaslas <anales 'y u retrales. Se alcanzaIa .prtmacla genital en la segunda
. _.,
,~.,;.
mitad del primer año .
4) En la nika existe u:na fase"ímledlpica,
.
,-
",
..
-,
,",
,,\
...
-
,\..
en 'la queactúfl',el"apeg~miento
clusivo a la madre".'
"
ex-
5) En la fase fáiica la niña cree que la
. 'maciÍ'e posee i:i'o'peney"desea recibirlo
de ella como posesi6n., ..
"
I
5) ..En
la nllía;: aunquesuponedesde
muy
temprano que la madre posee un pene
como atributo masculino, esta creencia no, tiene tanta influencia en su
. '... ',.. desarroüe- comosug:iéreFréud~
Cono'cee la exlstencla-del genital femenino
YSU preocupáciÓñ· está centrada en
apoderarse de los penes y bebés buenos que cree que la madre contiene
en su interior.
6)ElcHloris 'representa. unpenepara
la
niña, expresa sus deseoá.fáltcos
de
.ser, un varón, por medio de lamastur-,
, bacloncütcrtdlana,' 'desconociendo su .
propta vagina hasta ·Iapubertad.
6) La niña conoce la existencia de su
vagina y desea recibir en ella, al pene
, -."del padre, dador de placer y !1i~os.
la niña' descubre' que la ma~ dr~ nO't¡ene,~n
p~h~e'
aparta de
,é"~ .con ,despreCio y con rssentlmlen,to y ódlo al perder la esperanza de
réc.i.brrlo~ de", el~a;
7) La runa experin1&iita:r~sentirriiento
y
odio hacla la madre en forma'de envidia y celos por rivalidad edlpica y
porque desea poseer sus cualidades
femeninas para sustituirla en la relación con el. padre.
, " 7) . Cuarido
•
,,4) En' lilení¡\~, lo mismo que en el varón,
. :se'puede hablar de "fase preedlplca"
sólo mientras no se ha efectuado el
'.
pasaje: del, pecho al pene.
,se
8)' En la fase fálica reconocesu castra- ,<ª)~! Edipo f~Ülenino comtenzamuy pre'clón, (noposeslénde:
un peM) y esto" ',.', .co:zmente,Qon el-pasaje del pecho al
:':- Jnlcla- su ' complejo de Edlpo.:
pene:'.'La:ansieclad decastrac;ión,
al
.:!'
. ",' .,' ,
igual que en el varón, es un factor
para la renuncia edlplca •
', .. ~
... ~
-,'
.
'~'.
80j
Terencio. B~Gioia.
9) Se vuelve.al .padre para recibir un
.9) Primariamente desea el coito con el
.·pene'
de él como atrlbuto masculino. ' ::
. padre; como dispensador de placer
Sólo- secundariamentel!ustituye
este
y bebés. 5610 secundariamente" ante
.deseo por el de .un, nlño.
la frustraci6n edlplca, desea poseer el
pene como atributo masculino.
,10), El temor a, la castraclén
, . }iVO
es sólo efecep, elv~r,ón y en la fase fálica.
11) La amenaza de' castración
encuentra
su origen en los deseos IIbidinales
"tá)icos del ni1\0'hacia 'Ia madre.
11) Los temores de castración
del temor a la castración
.es II! amenaza de. que el pene del
niño será cortadq~
12) El contenido
12) .~lconteD'do
•
. 10) .EI temor a la castracIón es eficaz en
a:mbo'ssexo~ y'a~~de el comienzo de
. la" vida po~ri,atil. .'
.
se vinculan con los impulsos agresivos de los
. nlfíos de ambos sexos contra la madre
's6Id;:luego' ocurre lo mismo con el
padre.'
.
....
.
"'1
fantaseado de-la amenaza de castración es, en ambos sexos, el de ser vaciado del contenIdo
del interior del cuerpo por una madre
vengativa. Este temor se mantiene sin
mcdltlcaclón en la niña. En el varón,
al aparecer la primacia genital, se
_ ,.agreg.a,
paulatinamente el. terner-a la
pérdida del pene.,
'13)'Lostemores'arité:'IS
á'me'riaza de cas-'''13)
La: ansiedad de c~sfración no tiene
traclón, centrados en el posible daño"
·,.solain;enteeleméñto~parán,oiéles,
conal sujeto, son de rndole persecutoria
'cernientes al' posible daño' 'al Self .
., .•.. .excíuslvamsnte.
. Está integrada también por contenidos
.,' " .. "':'
.. ciep~f3Sivos,honsis,te~tes ~éñ Eii miedo
3 <: r:
':a'pei'dei' el'niedio de' expresar amor,
:rép~i'ación e:irilpulsos 'creadores. En
la rnuler, se agt~ga el. temor a que
.
~, : ,
sean destruidos sus' objetos amados,
los bebés internos.
'rl
,_ .~ t..
._
'';:'
,14) Además de 'las fantaslas de castración
'14:)"La"repÍ'ésI6n'. del complejo dáEdlpo
tállca y de.vaólamlento,: sonetectlvos
"-reconoce como factor- fundamental la"
para: la,represión'edrpica
los senti'. ,;" amenaza de'castración fálica.
mientos de culpa depresiva hacia ambos progenitores.
::
802
r-Ó:»
El cC?mp!ejode, Edipo en la;Jteoría' kleiniana
15) La ansiedad
se .tocallza
fundamental
ele.Ja ' niña,
'en .torno ,al temor
~el amor' de 'la-madre
ya
a perder
; ,15) La situación
,:'
su 'muerte.
Jundamental
,cJe, la 'n!ña,~seqentra
',';
-Ioa utaques
'vengativos
'.queamenaza
,', , plos
16) El Superyó se constituye.
el complejo
los
5
años, en la etapa
17) El Superyó
se :terma
.clén de la autoridad
portancla
madre
de
no
al. .decllnar
dé, Edipo"entre
ha
fálica.
'por interrializa-17j
.La
paterna .. La: im-'
.xos,
bien
buenos;
del
la prlrnacla
sus
comienza
desde
la prime-
con
definida.
la'
del
base
'tructur'ác.i.ón
, ~(
ambos
Súpe:ryó,'eri
es. ,él pecho tntroyectado.
.sUperyqlcase
paulatinamente
.completa
por Ia lntrcyecclén
..
masculino
entre:
y el femenino,
es más débil,
'en funció~
,renci¡;¡ eje la amenaza
e,L Superyó~,18j
Si biéri
Este
gunas. diferencias,
último
de Ia inope-
,
masculino,
de castración.
,'fuer~¡;¡:
,
del
páter-
estructurales
no
éstas,
Al : no, estar
, pedltada
a.Ja
.
íemenlno tiene
el Superyó
1Il1pi¡'can menos
castración
fálica
19) Con
el supérye
de' castración,
en superar
el complejo
maneciel}do~n,.$1
lo más tardee
salir
de
débil
esta
y sin
la niña tiene
amenaza
de Edipo,
indefil)id~rnEmte.
incompletamente
y" protectores,
fuerza
en el varón.
cas positivas
per-
l?67,
terroríficos
19) La niña reprime
dificultad
similares
' '
logra
paternos
tiene
sus tendencias
y negativas
'~e'
ni na y-aentlmlentos
vtemenl-
de culpa.
situación;
].' ..
..' ......•.
..J ,i'
¡)'.
';~
'" .,'-'.
t
:I}¡:;~ ..'~~
,,-,
'"
..
'
.;
) :'.'
1
edlpl-
ansiedades
castraclón
1
Igual
,pbrcáilsas
a las del varón:
, persecutqrias
sue tnl-
.por , introyee-
objeto.s: m,aterqos,y
que
el-
con el
su formación
~.CI~rse ',témpra~amente
"ctónde
se-
La es-
pene y luego de objetos totales
nos-y .1l1a:ternos., '
, __'
, 18) Hay una dif~rerida
pro-
,'
Superyó
oral,
a
la' madre,
ra infancia.
la identificación
sido
bajo
de
despojarlad~.
contenídos
16) La formaci6n
los 3 y
de ansiedad
en, el temor
~.,!.'
>4
I
.: ~ .;·~l J)~~,:·~-'<r';
~
Terencio B•. Giola·
'20) los sentlmlehtoa M culpabilidad de- '20) Los sentlmientos de culpabilidad apa. recen tempranamente. en relación, en
¡'ivlln del ccnñlctc entre Yo' y. Superyó.
ambos sexos; con los deseos oralPor consiguiente, sólose justifica consádicos de atacar al pecho, y luego
s·id"~rarla: existencia de .culpa después
de establecido el·Superyó al finalizar
se reprcducen con los demás objeel complejo de Edipo.
tos. Los. sentlmlentos de culpa. moldeanet-curso
del complejo de Edlpo
.. y 'afectan su -resultadoflnal.
:
21) Los sentimientos de culpa asr enten21) Los. sentlmlentos de culpa. son ente n- .
. dldos tienen un matuprlmordlatmen-":':
. didos como de caracterfstlcas depre- te· persecutorio: 'Ios castigos con que'
.: sivas: preocupación por el daño a los
:·.ame~aza el·SuperyÓ:al yo;
,'.
objetos y ~I Yo por-la propia agresivi. dad del suje!o> .
.
22) El final del complejo de Edipo es de
caracterrsticas netas. y definidas. Que. da destruido y desaparece. Su subslstencla.: inconsclente.: en el Ello, es:
.". considerada anormal y produce efectospato.lógicos;
Sin embargo; en al'gunosescritos:
Freud.·relativlzó esta
. manera °de conceptualizar e.1 fin del
c?mplejo de Edlpo.
22) Las Iantaslas, ansiedades y defensas
vinculadas al complejo de Edlpo, continúan actuantes y eficaces en el inco~scie~te,· d~rahté toda la. vida del
sujeto. La patoloqla o la . normalidad
noestánenfúnclón
de la persistencia
o no del complejo en lo inconsciente,
sino de los diferentes modos de elaboración de dichas tantastas .
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