LAS CINCO LEYES ESPIRITUALES

LAS CINCO LEYES
ESPIRITUALES
Juan 3:16.
¿Cómo define el Diccionario la Ley?
1 Regla o norma establecida por una autoridad superior para mandar,
prohibir o regular alguna cosa: hay una ley que prohíbe utilizar productos
tóxicos en algunos tipos de empresas.
• 2 Conjunto de las leyes o normas establecidas: todos los ciudadanos
deben respetar la ley.
• 3 Línea de conducta que regula cualquier actividad social y que no ha
sido impuesta por ningún legislador: en este pueblo la hospitalidad es ley.
• 4 Conjunto de reglas y normas propias de una religión: los judíos siguen
la ley de Moisés.
• 5 Religión, especialmente en lo referido a las reglas o normas morales y
a los principios de conducta: la ley islámica; la ley de Cristo está basada en
el mandamiento de amar a Dios y al prójimo como a uno mismo.
• 6 Línea de conducta basada en el interés individual, sin respetar el
interés ajeno: allá donde va intenta imponer su ley.
7 Regla o norma invariable, universal y necesaria, que rige las relaciones
entre los diversos fenómenos de la naturaleza: Newton descubrió la ley de la
gravedad; a causa de la ley de la oferta y la demanda, los productos escasos
son más caros.
Primero: DIOS LE AMA, COMO SI NO HUBIESE OTRO SER EN EL MUNDO, Y
TIENE UN PLAN MARAVILLOSO PARA SU VIDA
A. EL AMOR DE DIOS.
“Porque de tal manera amó Dios al
mundo, que ha dado a su Hijo
unigénito, para que todo aquel que
en Él cree, no se pierda, mas tenga
vida eterna.” (Juan 3:16)
B. EL PLAN DE DIOS.
Cristo afirma: “Yo he venido para que tengan vida, y para que la tengan en
abundancia". (Juan 10:10)
"Vida en abundancia" significa vida plena y con propósito. Por
qué, pues, la mayoría de las personas no están experimentando la
vida en abundancia?
Segundo: EL HOMBRE SE APARTÓ DE DIOS BUSCANDO SU
PROPIO DESTINO
“Por cuanto todos pecaron, están
destituidos de la gloria de Dios.”
(Romanos3:23)
• El hombre fue creado para tener
comunión con Dios. (Leer Génesis
1:26,pp) pero debido a su voluntad
obstinada y egoísta, escogió su propio
camino y su relación con Dios se
interrumpió. (Leer Génesis 3:8).
"Todos nosotros nos descarriamos como
ovejas, cada cual se apartó por su
camino..." (Isaías 53:6)
"Porque la paga del pecado es muerte”
(Separación espiritual de Dios). (Romanos 6:23)
Dios es Santo y el hombre es pecador; un gran abismo
los separa.
Continuamente el hombre ha
estado tratando de cruzar esta
brecha utilizando sus propios
recursos como la religión, la
filosofía, la moral, las buenas
obras, etc.
pero sin resultados.
¿Cuál podría ser la solución?
La tercera ley nos la presenta:
VerGén.4:3,5.
Luc.18:9-14.
Tercero: JESUCRISTO ES LA ÚNICA SOLUCIÓN AL PROBLEMA DE LA
SEPARACIÓN ENTRE EL HOMBRE Y DIOS.
"Porque hay un solo Dios,
y un solo mediador entre
Dios y los hombres,
Jesucristo hombre".
(1 Timoteo 2:5)
A. JESUCRISTO MURIÓ EN NUESTRO LUGAR.
"Mas Dios muestra su amor para con
nosotros, en que siendo aun pecadores,
Cristo murió por nosotros". (Romanos 5:8)
B. JESUCRISTO RESUCITÓ.
“Porque primeramente os he enseñado lo que
asimismo recibí: Que Cristo murió por nuestros
pecados, conforme a las Escrituras; y que fue
sepultado, y que resucitó al tercer día conforme a
las Escrituras; y que apareció a Cefas, y después a
los doce. Después apareció a más de quinientos
hermanos a la vez ...”
(1 Corintios: 15:3-6).
C. JESUCRISTO, EL ÚNICO CAMINO AL
PADRE.
“Jesús le dijo: Yo soy el camino, y la
verdad, y la vida; nadie llega al Padre
sino por mí”. (Juan 14:6)
Como consecuencia de lo anterior
tenemos la cuarta ley:
Cuarto: EL HOMBRE INDIVIDUALMENTE DEBE ACEPTAR A JESUCRISTO COMO SU SEÑOR, PARA
SER SALVO Y ASÍ PODER EXPERIMENTAR EL AMOR Y EL PLAN DE DIOS PARA SU VIDA:
“Mas a todos los que
le recibieron, a los que creen en
su nombre, les dio potestad de
ser hechos hijos de Dios.”
(Juan 1:12)
Y como tal.
Tengo los
frutos del E.
Santo.
¿Existe alguna razón que le impida aceptar a Cristo como
Señor y Salvador ahora mismo?
Cristo te dice, hoy: "He aquí,
yo estoy a la puerta y llamo;
si alguno oye mi voz y abre
la puerta, entraré a él, y
cenaré con él, y él conmigo"
(Apocalipsis 3:20),
Ábrele la puerta de tu corazón: En el maletín trae lo que necesitas
para resolver todas tus necesidades: (1),oro refinado en fuego, para
que seas rico (2), vestiduras blancas para vestirte, y que no se
descubra la vergüenza de tu desnudez; y (3), colirio, para que veas.
Además no te lo cobra, es gratis.
¿Cómo recibimos a Cristo? Muy sencillo: Recibimos a
Cristo mediante invitación personal, a través de una
oración; orar es hablar con Dios, para Él, no son tan
importantes las palabras como la intención de su
corazón.
Le sugerimos hacer la siguiente oración:
Señor Jesús: Hoy he entendido que me amas, y sé que
te necesito. Me presento ante ti arrepentido de todos
mis pecados y te pido que me perdones. Hoy decido
abrir la puerta de mi corazón, te recibo como mi único
y suficiente Salvador y te invito a ocupar el trono de
mi vida porque quiero que tú seas mi SEÑOR. Haz de
mí la persona que tú quieres que yo sea. Te doy
gracias por escuchar mi oración, por perdonar mis
pecados, por entrar a mi vida y por trasladarme a tu
Reino constituyéndome así en hijo de Dios.
Es así de fácil:
(Lea Mat.6:6).
Al recibir a Cristo en nuestro corazón,
experimentamos un nuevo nacimiento.
(Lea Juan 3:1-8).
Veamos ahora lo que Dios hace en nosotros
cuando nos convertimos:
" Y os
daré corazón nuevo, y pondré
espíritu nuevo dentro de vosotros; y
quitaré de vuestra carne el corazón de
piedra, y os daré corazón de carne. 27 Y
pondré dentro de vosotros mi Espíritu, y
haré que andéis en mis mandamientos, y
guardéis mis derechos, y los pongáis por
obra. ". (Ezequiel 36:26-27)
En nuestra naturaleza caída no podemos obedecer a Dios,
pero cuando nos entregamos a Cristo, sucede el milagro.
«pero recibiréis poder, cuando haya venido sobre
vosotros el Espíritu Santo, y me
seréis testigos en Jerusalén, en toda Judea, en
Samaria, y hasta lo último de la tierra» (Hech.1:8).
Esto nos lleva a pensar en el quinto paso.
Quinto: FUIMOS REDIMIDOS PARA LLEVAR FRUTO
, CRECIENDO CADA DÍA
MÁS Y MÁS EN SANTIDAD.
Porque por gracia sois salvos por la fe; y esto no de vosotros, pues es don de
Dios; 9 no por obras, para que nadie se gloríe. 10 Porque somos hechura suya,
criados en Cristo Jesús para buenas obras, las cuales Dios preparó para que
anduviésemos en ellas. (Efe.2:8-10).
Id y rescatad mis
ovejas del poder de
Satanás.
Por eso, El Señor dice: "No me elegisteis vosotros a mí,
sino que yo os elegí a vosotros, y os he puesto para
que llevéis fruto, y vuestro fruto permanezca; para
que todo lo que pidiereis al Padre en mi nombre, él os
lo dé." (Juan 15:16)
“Yo soy la vid verdadera, y mi Padre es el labrador. Todo pámpano que en
mí no lleva fruto, lo quitará; y todo aquel que lleva fruto, lo limpiará, para
que lleve más fruto. Ya vosotros estáis limpios por la palabra que os he
hablado.
Permaneced en mí, y yo en vosotros. Como el pámpano no puede llevar
fruto por sí mismo, si no permanece en la vid, así tampoco vosotros, si no
permanecéis en mí. Yo soy la vid, vosotros los pámpanos; el que
permanece en mí, y yo en él, éste lleva mucho fruto; porque separados de
mí nada podéis hacer.
El que en mí no permanece, será echado fuera como pámpano, y se
secará; y los recogen, y los echan en el fuego, y arden. Si permanecéis en
mí, y mis palabras permanecen en vosotros, pedid todo lo que queréis, y
os será hecho. En esto es glorificado mi Padre, en que llevéis mucho
fruto, y seáis así mis discípulos”.
(Juan 15:1-8)
Es importante conocer qué tipo de fruto espera
Dios que llevemos:
A. FRUTO DE ARREPENTIMIENTO.
“Haced pues frutos dignos de
arrepentimiento” (Mateo 3:8)
El fruto de arrepentimiento es la evidencia de
nuestra Salvación.
B. FRUTO DE CARÁCTER.
"Mas el fruto del Espíritu es amor, gozo, paz, paciencia,
benignidad, bondad, fe, mansedumbre, templanza,
contra tales cosas no hay ley". (Gálatas 5:22-23)
El verdadero discípulo, presenta este fruto de carácter lo
que demuestra que ha aceptado el Señorío de Cristo en
su vida. Tiene un carácter siempre alegre
C. FRUTO EN LA RELACIÓN FAMILIAR.
La relación familiar se va a ver enriquecida
puesto que la familia es el centro del
pacto con Dios, por eso, la bendición de
Dios sobre el hombre que le teme se
extiende a su familia. (ver Job.1:4,5).
"Estableceré mi pacto contigo y con tu descendencia, como pacto perpetuo
por todas las generaciones. Yo seré tu Dios y el Dios de tus descendientes.
(Génesis 17:7).
"Dichosos todos los que temen al Señor, los que van por sus caminos. Lo que
ganas con tus manos, eso comerás; gozarás de dicha y prosperidad. En el
seno de tu hogar, tu esposa será como vid llena de uvas; alrededor de tu
mesa, tus hijos serán como vástagos de olivo. Tales son las bendiciones de
los que temen al Señor.
(Salmo 128:1-4).
D. FRUTO DE BUENAS OBRAS.
Dios nos hizo con propósito: El cristiano no realiza
buenas obras para hacer méritos de salvación, las
hace espontáneamente porque ha sido salvo.
“Porque somos hechura de Dios, creados en Cristo
Jesús para buenas obras, las cuales Dios dispuso de
antemano a fin de que las pongamos en práctica”.
(Efesios 2:10; Mat.25:31-46).
E. FRUTO DE LABIOS.
Dios quiere que nosotros seamos y vivamos para su alabanza.
“Así que, ofrezcamos siempre a Dios, por medio de él, sacrificio
de alabanza, es decir, fruto de labios que confiesan su nombre.”
(Hebreos 13:15).
«¿Quién es sabio y avisado entre vosotros? Muestre por [la]
buena conversación sus obras en mansedumbre de sabiduría»
(Sant.3:13). Que siempre expresen amor.
F. FRUTO DE MULTIPLICACIÓN.
"Toda potestad me es dada en el cielo y en la tierra. Por
tanto, id, y haced discípulos a todas las naciones,
bautizándoles en el nombre del Padre, y del Hijo, y del
Espíritu Santo; enseñándoles que guarden todas las cosas
que os he mandado; y he aquí yo estoy con vosotros todos
los días, hasta el fin del mundo. Amén«
(Mateo 28:18-20).
La orden de Dios para todos sus hijos, para todos sus redimidos,
incluido(a) usted es proclamar el Evangelio de salvación, es ir a hacer
discípulos...
¡He ahí la importancia de conocer las 5 leyes espirituales!
Conclusión: Si quieres que tu fruto permanezca, cuida celosamente de
todos beneficios recibidos en el momento que te rendiste a los pies de
Cristo, viviendo cada día más en santidad, y esto se logra únicamente
manteniendo su vista fija en Cristo (ver Mat.11:28; Heb.12:2), no baya y
sea que otro tome tu corona. (VER APOC.3:11).