PATO DISCOS ACTIVOS

PATO DISCOS ACTIVOS
Los discos activos son una de las últimas apuestas de la marca PATO de
Johnson Wax. Esta gama tradicionalmente pensada para los baños y los “WC”
ha salido en el mercado con un producto de inocente apariencia pero que
busca sustituir a los cartuchos recambiables de geles higiénicos sostenidos por
poco higiénicos, en mi opinión…
La novedad: no necesitan un soporte físico (habitualmente de plástico), se
auto-sostienen. Qué llevan? Es segura su manipulación?
Ceteareth-30 (NºCAS: 68439-49-6? – cas genérico): también conocido
como cetil estearil alcohol con 30 polietoxilaciones. Es un tensoactivo no iónico
con funciones de emulsionante, es decir, mantiene disuelta la suciedad. Son
productos de baja toxicidad y que habitualmente no dañan la piel, por lo que
es profusamente utilizado en cosméticos. Los alcoholes polietoxilados
acostumbran a ser fuertes irritantes oculares.
Alcoholes, C16-22, etoxilados (NºCAS: 68439-49-6? – cas genérico):
también conocido como cetil estearil alcohol con 30 polietoxilaciones. Es un
tensoactivo no iónico con funciones de emulsionante. Es tan parecido al
producto anterior que comparten número CAS. Son productos de baja
toxicidad y que habitualmente no dañan la piel, por lo que es profusamente
utilizado en cosméticos. Los alcoholes polietoxilados acostumbran a ser fuertes
irritantes oculares. No, no es un error respecto el componente anterior: los
alcoholes polietoxilados tienen propiedades muy parecidas.
Sodium Coceth-30 Sulfate (NºCAS: 68891-38-3): es un alcohol
etoxisulfato, un tensoactivo aniónico utilizado en todo tipo de productos de
limpieza para eliminar suciedad. Son productos de relativa baja toxicidad, pero
esto no evita que sea un irritante gastrointestinal y un irritante ocular y de piel
si está concentrado. No es un producto sensibilizante.
Glicerina (NºCAS: 56-81-5): componente presente en las grasas y los
aceites, que tan bien conocemos por su buen “tacto” en jabones
dermatológicos. Es un polialcohol conocido desde la antigüedad y muy
apreciado. Si bien comporta un riesgo relativamente bajo, cuando está pura y
no se respetan las medidas de seguridad puede ocasionar una serie de
transtornos, ya que se considera un producto que irrita ojos, piel y tracto
respiratorio. Por inhalación causa tos, dificultad respiratoria, en la piel causa
resecamiento (todos sabemos que si nos lavamos las manos muy a menudo se
nos daña la piel. El personal sanitario conoce muy bien los efectos del uso
intensivo y continuado de los jabones dermatológicos, ya que su profesión les
obliga a tener la máxima higiene), a los ojos les causa enrojecimiento y por
ingestión provoca calambres abdominales, dolor, diarrea, vértigo, somnolencia,
dolor de cabeza y náuseas. Pero a pesar de lo espectacular de los efectos
potenciales, todos tenemos en casa este polialcohol para lavarnos las manos.
Probablemente su función sea dar un soporte a los principios activos y ayude a
su disolución en el medio orgánico final –solubilizante- (donde va el producto
no es imprescindible que tenga un tacto suave…).
PEG-10 (NºCAS: 5579-66-8): es el polímero del óxido de etilo, que hemos
visto en los tensoactivos no iónicos y en los alcoholes etoxisulfatos, pero sin
estar unido a ninguna “pre-molécula”. Por desgracia no he encontrado
documentación a su potencial peligrosidad, aunque me espero unas
características análogas a los tensoactivos no iónicos. Sus funciones pueden
ser varias: desde tensoactivo/emulsionante a un agente quelante.
Alcanos C11-15-ISO (NºCAS: 90622-58-5 o 292-460-6, falta
información para determinar el número exacto): estamos hablando de
alcanos, derivados del petróleo seguramente sólidos. Son productos que si se
ingieren son nocivos y, si al engullirlos va una parte al pulmón pueden causar
daños pulmonares, pneumonitis química. En caso de contacto con la piel,
provocan su resecamiento e incluso grietas, como muchos de los disolventes
orgánicos. Su función probablemente sea la de proporcionar un soporte físico a
los principios activos.
Aceite Mineral (NºCAS: 8012-95-1): aceite de origen petrolero, que puede
ser sólido a temperatura ambiente. Es un compendio de compuestos orgánicos
que son irritantes para el tracto respiratorio, y es muy importante no respirar
sus vapores, pues pueden causar pneumonitis química. En caso de ingestión
provocan una diarrea muy fuerte, náuseas y vómitos, a parte de mucho dolor
abdominal. En caso de contacto con la piel, es un irritante y provoca
dermatitis. También es un irritante ocular fuerte. Es poco probable que llegue a
causar vapores “notables” dentro de la formulación. No está clasificado como
carcinógeno. Su función seguramente es proporcionar un soporte para los
perfumes y los tensoactivos.
Ácido Cítrico (NºCAS: 77-92-9): es el ácido del limón y la naranja. Es un
ácido orgánico débil muy utilizado por su baja toxicidad y por sus capacidades
de secuestrar iones metálicos como los de la cal. Se presenta en cristales
incoloros, por lo que es peligroso inhalarlo: provoca sensación de quemazón,
tos y dificultad respiratoria. Si va a parar a la piel la enrojece y ocurre lo
mismo con los ojos, además de ser doloroso. En resumen, es irritante para los
ojos, la piel y el tracto respiratorio. Este componente tendrá una acción
secuestrante y proporcionará un pH ácido a la solución: el cristal se vería
atacado si se usase detergencia alcalina y se volvería opaco y desgastado.
Coumarin (NºCAS: 91-64-5): es un agente fijador y un potenciador de
perfumes y/o aromas, ampliamente usado en la industria alimentaria,
cosmética...
Limonene (NºCAS: 7705-14-8) y Linalool (CAS Nº 78-70-6), son
esencias que hemos visto repetidamente.
Geraniol (NºCAS: 9007-92-5): otro perfume. Se considera seguro y es muy
utilizado en cosmética.
Eugenol (NºCAS: 97-53-0): otro perfume. Se considera seguro y es muy
utilizado en cosmética.
En resumen, tenemos un producto que se adhiere en los servicios y ayuda a
perfumarlos al liberarse los perfumes que tiene “encerrados” en el sólido.
Es un producto seguro para las personas: en su aplicación no se debería tocar
y al ser sólido no hay riesgo de que salpique. Por lo tanto, la única protección
que debemos tener es la de no tocar el producto con la piel, y gracias a sus
aplicadores y un poco de cuidado no son necesarios ni guantes a la hora de
manipularlo.
Fdo. Joan Rius Bartra
Licenciado en Químicas, Técnico Superior en Prevención de Riesgos (3 especialidades).