ÁBREME CON CUIDADO DOSSIER COMERCIAL

ÁBREME CON CUIDADO
DOSSIER COMERCIAL
ÁBREME CON CUIDADO
Nueve autoras españolas firman nueve relatos inéditos inspirados en grandes figuras
de la literatura escrita por mujeres.
ÁBREME CON CUIDADO
Varias Autoras
Prólogo: Gloria Fortún
Diseño de portada: Raúl Lázaro
ISBN: 978-84-943559-8- 1
Número de páginas: 244
Formato: 14 x 21 cm.
Encuadernación: Rústica con solapas
Precio con IVA: 18.95 euros
Fecha de publicación: 14 de diciembre de 2015
QUÉ ES ÁBREME CONCUIDADO
Ábreme con cuidado es el fruto de un desafío planteado a nueve magníficas autoras españolas:
convertir las figuras de Natalie Clifford Barney, Patricia Highsmith, Virginia Woolf, Marguerite
Yourcenar, Aphra Behn, Carson McCullers, Elizabeth Bishop, Emily Dickinson y Gloria
Fuertes en protagonistas de un relato de ficción.
Isabel Franc, Clara Asunción García, Pilar Bellver, Carmen Samit, Gloria Fortún, Lola Robles,
Carmen Nestares, Carmen Cuenca y Gloria Bosch Maza ofrecen una excelente muestra de su
talento en estos cuentos inéditos que conectan el pasado y el presente de la literatura escrita por
mujeres; nueve historias donde conviven pasiones y silencios, amores contrariados y relaciones forjadas frente a cualquier convención social.
DEL PRÓLOGO DE GLORIA FORTÚN
«La aparición de una antología como Ábreme con cuidado es motivo de celebración porque al
visibilizar a estas escritoras subvierte el canon, las da a conocer a nuevas lectoras (¡y lectores! ),
reconoce la obra de estas figuras literarias y las coloca donde antes había un páramo. Por otra parte,
aquí hay nueva ficción. Las que ahora vivimos y escribimos tendemos las manos a nuestros referentes, construyendo así un puente entre el pasado y el presente, una nueva historia literaria sin
mentiras, secretos ni silencios».
LOS RELATOS DE ÁBREME CON CUIDADO SEGÚN SUS AUTORAS
«Recrea en tono de parodia una de aquellas tardes de los viernes en el número 20 de la rue Jacob
donde se servían los famosos sándwiches de pepino que preparaba Berthe Cleyrergue, cocinera,
asistenta y ama de llaves de Natalie Clifford Barney. Quienes conozcan a las protagonistas captarán las sutilezas de sus respectivas personalidades y, espero, se deleiten con ellas; a quienes no las
conozcan, ojalá las anime a entrar en ese momento histórico».
ISABEL FRANC (de la introducción a Incidente en el salón)
«Mi elección, mi inspiración para el relato, no solo ha sido producto de lo que supuso para mí la
lectura de Carol de Patricia Highsmith en su momento; no solo fue ese esperanzador descubrimiento de que la vida estaba más allá del miedo o la imposición social, sino también, lamentablemente, lo han sido la tristeza y la rabia de comprobar que una novela escrita en los años cincuenta
no solo tuviera la capacidad de tocar de ese modo el alma de una nueva Therese cuarenta años después (mi yo del 91), sino que lo siga haciendo a día de hoy».
CLARA ASUNCIÓN GARCÍA (de la introducción a #Marimaryeva)
«La mía es una historia de amor y de gratitud hacia Virginia Woolf y Vita Sackville-West (...)
Con más miedo del que os podríais creer y con más incertidumbres que ideas, acepté escribir sobre
ellas. En realidad, ya las había elegido desde hacía mucho tiempo: a Virginia desde los 17 años,
desde que leí Una habitación propia como la feminista que ya era y poco después Orlando como la
escritora que sería. Y a Vita desde que leí Retrato de un matrimonio, a los 19 años».
PILAR BELLVER (de la introducción de A Virginia le gustaba Vita)
«Nos gusta creer que elegimos, sin embargo, reflexionando sobre cómo llegamos a sentirnos
fascinadas por algo o por alguien, parece que fuerzas extrañas confluyen para dirigirnos hacia donde
ellas quieren. Yo sé que a Marguerite Yourcenar no la elegí. Me atrapó. No podía elegir otra para la
antología».
CARMEN SAMIT (de la introducción a La vida oscura)
«Virginia Woolf dijo: "Todas las mujeres deberían llevar flores a la tumba de Aphra Behn, pues fue
quien consiguió para ellas el derecho a expresarse libremente". Como escritora en ciernes —cosa
que quiero ser siempre, para no dejar de experimentar ni de desafiarme— y como cazadora de la
historia de las mujeres que el patriarcado nos ha robado, siento a Aphra Behn como una de mis
madres literarias y celebro haber podido hacerle este pequeño homenaje».
GLORIA FORTÚN (de la introducción a Palimpsesto)
«Elegí a Carson McCullers para escribir sobre ella porque desde hace mucho tiempo me apasiona
su obra y su vida. Según volvía a leer la biografía de Carson, luego la de Annemarie
Schwarzenbach, y conocía más la personalidad de esta última y la relación entre ambas, me fui sintiendo fascinada por esa historia».
LOLA ROBLES (de la introducción a El sueño de la nieve)
«La obra de Elizabeth Bishop me parecía aséptica y reticente, aunque su refinamiento y elegancia
me sobrecogía. Poco conocía de su vida y tras un estudio preliminar de su biografía llamó mi atención el contraste que ejercía una vida tan traumática contrapuesta a la concienzuda distancia que
está presente en casi todos sus poemas. Escogí a esta autora porque me despertaba muchas
incógnitas».
CARMEN NESTARES (de la introducción a Las flores de Lota)
«Me encontré con Emily Dickinson. De ella había leído su poesía, pero sabía poco de los intrincados caminos de su pensamiento. Ha sido apasionante descubrirlos. La historia me llegó fácil: el
amor de Emily por Susan, también la voz que se oiría en mi relato. Sin embargo, un texto sobre
Dickinson requería de una melodía especial para que estuviese vivo. Pronto descubrí que esa música
se encontraba en el alma de mi autora, dibujada con todos los matices en su extensa obra literaria».
CARMEN CUENCA (de la introducción a El éxtasis de la palabra)
«Gloria Fuertes ha sido y sigue siendo para mí un referente importante no solo en poesía sino en
su forma de estar en el mundo. Inconformista, transgresora, vivió en una época en que llevar corbata, pantalones, decir tacos e ir en bicicleta no eran rasgos demasiado bien vistos en una mujer. Su
peculiar personalidad se reflejó también en su poesía».
GLORIA BOSCH MAZA (de la introducción a Tu nombre me lo callo)
«Ábreme con cuidado» es la frase que escribió Emily Dickinson en el sobre de una
de las cartas dirigidas a Susan Huntington