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 LAS PRIMICIAS, UNA FIESTA 11 al 17 de Enero Deuteronomio 26:1, 2. La fiesta de las primicias era la primera del año judío, llamada también de los primeros frutos. Esta, consistía en llevar al santuario de los primeros frutos (lo escogido y lo mejor) obtenidos al inicio de la cosecha, al igual que los primogénitos del pueblo de Dios, con el propósito de reconocer que todo lo que tenían no era en propiedad sino otorgados en mayordomía, en administración. Al honrar a Dios de este modo y obedeciéndole, se activaba un “pacto” mediante el cual Dios mismo santificaba a su pueblo, prometiendo amarles y bendecirles en abundancia, dándoles provisión, protección y salud, larga vida y victoria sobre los enemigos. Proverbios 3:9, 10. Deuteronomio 7:12-­‐15. Los primeros cristianos lo practicaban al igual que en la antigüedad, y permanece vigente, así como la promesa del Señor: Romanos 11:16; si las primicias son santas (presentándose a Dios para ser santificadas), lo es la masa restante; si la raíz es santa (lo primero y lo mejor) lo serán también las ramas. Dios quiere que pasemos de la maldición a la bendición, de la opresión a la libertad, a una consagración y santificación integral. ¿Qué aprendemos mediante este ejercicio de obediencia y gratitud? ü A reconocer la primacía y soberanía de Dios en la totalidad de nuestra vida. Mateo 6:33 ü A reconocer y confesar los derechos de propiedad de Dios sobre todo lo que ha puesto en nuestras manos. ü A realizar un verdadero acto de fe, adoración y honra, no solo de palabra, sino de hecho y en verdad. (no olvidando hacerlo con una motivación correcta). ü A que renunciemos a poner la mirada en las cosas de la tierra. Colosenses 3.2 Indiscutiblemente, presentar nuestras primicias, nos posiciona delante de Dios, porque si le reconocemos, y confiamos en él, no solo como nuestro salvador, sino como nuestro Rey, nuestro Señor y proveedor, y estamos dispuestos a sujetarnos a su gobierno y señorío, él cumplirá su palabra y propósito en nosotros para guiarnos, dar su cobertura y protección a nuestras familias y bienes, y a sellar nuestro año prosperándonos exponencialmente. “…serán llenos tus graneros con abundancia, y tus lagares rebosarán de mosto.” Iglesia El Shaddai: Preparémos nuestro corazón, nuestros Diezmos y ofrendas y en especial nuestras primicias para traerlas este domingo 17 de enero. Honremos a nuestro Dios dedicando con una firme determinación lo escogido y lo mejor.