AYUNTAMIENTO DE OROZKO (BIZKAIA

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EL MUNDO. LUNES 20 DE OCTUBRE DE 2014
CIENCIA
SALUD
sorción. «El intestino cuenta con
un gran número de tipos de células que tienen una función: de
transporte, de digestión, de producción de moco, etc, que son clave para su funcionamiento», explica Martínez Montiel.
«En este estudio se han hecho
experimentos importantes de permeabilidad [por ejemplo, se ha demostrado la absorción de péptidos,
que son más complejos que los
azúcares]», apunta Santos. Pero,
«antes de lanzar las campanas al
LOS AUTORES YA
ESTÁN TRABAJANDO
EN MODELOS PARA
PACIENTES CON
PROBLEMAS COMO
LA FIBROSIS QUÍSTICA
Corte al microscopio de un intestino humano desarrollado por los autores del estudio a partir de una célula adulta de un paciente. NATURE MEDICINE
MEDICINA REGENERATIVA REPROGRAMACIÓN CELULAR
UN INTESTINO DE DISEÑO
Científicos de EEUU ‘fabrican’ un modelo funcional de este órgano a partir de células madre que
servirá para estudiar enfermedades, probar fármacos y, en el futuro, como alternativa de trasplante
CRISTINA G. LUCIO MADRID
Los avances en ingeniería tisular
continúan dando frutos. El último
lo aporta un equipo estadounidense, que ha conseguido desarrollar
un modelo de intestino delgado
funcional en el laboratorio. Liderado por Michael Helmrath, del Cincinnati Children’s Hospital (Ohio,
EEUU), este grupo de investigadores ha logrado reproducir las características fisiológicas del órgano a partir de un modelo cultivado
con células madre iPS humanas
que posteriormente fue trasplantado en ratones.
El logro, subrayan sus creadores
en las páginas de Nature Medicine,
puede ser muy útil para potenciar
la investigación en este campo y conocer más a fondo el origen de muchas patologías digestivas.
«Abre la puerta a estudiar con detalle enfermedades cuya causa no
conocemos bien, desarrollar nuevos
tratamientos, probar las terapias
existentes y, a largo plazo, plantearse incluso la posibilidad de un trasplante de un órgano personalizado»,
coincide Javier Santos, especialista
en aparato digestivo y director del
Grupo de Neuroinmunogastroenterología del Instituto de Investigación
Vall d’Hebron de Barcelona.
«Hasta ahora era complicado es-
Un nuevo hito en medicina regenerativa
1
Se obtienen
células madre
humanas
(similares a las
embrionarias)
mediante la
reprogramación de
células de la piel
de una persona
adulta.
2
3
Estas células madre se
cultivan artificialmente en el
laboratorio para obtener
células intestinales humanas.
Las células intestinales
humanas se implantan en el
riñón de un ratón adulto vivo.
FUENTE: ‘Nature Medicine’.
tudiar el intestino, porque sólo podíamos hacerlo a partir de biopsias
o estudios en animales, que no
siempre servían», añade Pilar Martínez Montiel, jefa de la sección de
Gastroenterología del Hospital 12
de Octubre de Madrid. «Un modelo in vivo como éste va a permitir
observar funciones como la absorción o la secreción, que son claves», subraya.
Para desarrollar el organoide, como lo definen sus creadores, los investigadores usaron células madre
4
Las células intestinales se
desarrollan en el interior del
organismo del ratón hasta
formar tejido intestinal
humano.
Carmen Guitián / EL MUNDO
pluripotenciales (iPS) (también
probaron con éxito las embrionarias), que prepararon en el laboratorio para su diferenciación y organización hasta conseguir una estructura primigenia similar a la del
intestino. Con el modelo obtenido,
se realizó un implante en la cápsula del riñón de varios ratones, donde el órgano continuó creciendo
hasta alcanzar una estructura compleja que, según comprobaron los
científicos, también tenía una funcionalidad equiparable a la del in-
testino humano. Así, no sólo se había desarrollado la capa mesenquimal, que, entre otras funciones, sirve de estructura de soporte; o la capa epitelial, encargada de la
absorción de los nutrientes y donde
tiene lugar la permeabilidad selectiva característica del intestino. También estaban presentes características morfológicas del órgano –como
las criptas y vellosidades–, distintos
tipos de líneas celulares y se demostró la capacidad del tejido para realizar funciones digestivas y de ab-
vuelo con este modelo, hay que demostrar con más datos que cumple
completamente las funciones fisiológicas», advierte el experto.
Aunque reconoce que su labor es
un primer paso, Helmrath señala a
EL MUNDO que ya está trabajando
en modelos específicos para pacientes que «sufren problemas como la fibrosis quística, enteropatías
congénitas, o enfermedades infecciosas que no pueden investigarse
en modelos animales».
«Aunque llevamos décadas investigando el intestino, todavía hay muchas cosas que no conocemos. Y
esas lagunas suponen carencias a la
hora de entender qué provoca una
determinada enfermedad y dificultades para encontrar tratamientos
más efectivos. Nuestra investigación es una prueba de concepto de
que se puede crear un intestino a
partir de las células de un paciente
específico, y eso nos proporciona un
camino muy robusto para estudiar
las enfermedades propias de los humanos», añade.
Para Julià Panés, especialista del
servicio de Gastroenterología del
Hospital Clínic de Barcelona y coordinador del programa de enfermedades digestivas del CIBERehd,
el logro obtenido por Helmrath es
un paso importante, que puede llevar a conocer mejor cuáles son los
mecanismos que provocan determinadas enfermedades. Su equipo investiga una línea similar a la del estadounidense, aunque su interés se
centra en «estudiar las disfunciones» de las distintas células presentes en el intestino. «Nuestra aproximación es la de implantar organoides en un intestino enfermo para
ver si podemos repararlo. Y estamos centrados en la colitis ulcerosa
y en la enfermedad de Chron», señala Panés, quien subraya que hay
varios grupos en todo el mundo investigando en el desarrollo e implantación de estos organoides.
De cualquier forma, el especialista recuerda que, por el momento,
todos son modelos experimentales
y, por lo tanto, «hará falta mucho
tiempo y trabajo antes de poder
trasladarlos a la clínica y dar soluciones a los pacientes».
Impreso por Mª Ángeles Honrado Prieto. Prohibida su reproducción.
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