1. Ciencia

CAMINO POR ANDAR
Fauzi Hamdan amad es socio de
Hamdan, MANZANERO Y ASOCIADOS
SC. TAMBIÉN ES RECTOR DE LA
ESCUELA LIBRE DE DERECHO.
PRESIDENTE MASARYK 101.
DESPACHO 501. COL. CHAPULTEPEC
MORALES. DELEGACIóN MIGUEL HIDALGO.
CP. 11570. MÉXICO, DF.
La credibilidad del aparato político a prueba...
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Todos contra
el enemigo común
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Foto: Enrique Gijón.
Necesitamos romper la perversidad que actualmente tiene nuestro
sistema, pues sólo favorece –y alimenta– a la corrupción.
H
Dirección Editorial: Luis Hernández Martínez.
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Por Fauzi hamdan amad
oy México está sacudido por las tragedias de
Ayotzinapa y de Tlatlaya. Estamos entrando
a un callejón largo y obscuro, que de manera
súbita provocó la reacción social de indignación
total que representa a los miles de víctimas y desaparecidos de los últimos años.
También es frecuente que este género de movilizaciones describan una parábola ascendente que luego
declina, si no se comete el error de reprimirlas, o bien,
que el Gobierno no reaccione con prontitud y celeridad
a encontrar a los desaparecidos. Cierto la PGR ha
reconocido que en los últimos años se han registrado
decenas de miles de desapariciones en el país.
Pero también ha dicho que los asuntos de Ayotzinapa
y de Tlatlaya ya se han encontrado y aprehendido a
muchos de los autores materiales,
y existen órdenes de aprehensión
contra los autores intelectuales.
Sin embargo, la crispación y
el ímpetu de protesta sigue su
curso de elevación, porque repito,
esos hechos sólo son representativos de las miles de víctimas
y desaparecidos de los últimos
años, y de la impunidad total de
los que masacraron y ejecutaron
a tantas personas.
Es decir, la inquietud no se reducirá con una solución
policial. En el fondo, la lesión y el agravio está en la
credibilidad del aparato político, que tendría que pasar
primero por una convocatoria de duelo nacional pidiendo perdón auténtico a los familiares de las víctimas
y desaparecidos y convocar igualmente a un Pacto
Nacional para poder restaurar la confianza en las instituciones, que llevará desde luego tiempo para ello. Ese
Pacto Nacional tendrá que ir acompañado, como lo
hice en mi anterior comentario, de la creación de la
Contraloría General de la Federación como ente
autónomo constitucional (en lugar de la Comisión
Anticorrupción); convirtiendo así a la Secretaría de
la Función Pública en lo que es, por su naturaleza,
una Contraloría General; los Contralores serían
nombrados por la Cámara de Diputados mediante
un procedimiento similar al que se hizo para los
Comisionados de la IFT, para buscar la excelencia
moral y profesional.
La Contraloría al iniciar un procedimiento de
responsabilidades sólo, en su caso, formularía un
pliego de responsabilidades que se sometería a
consideración del Tribunal Federal de Justicia
Fiscal y Administrativa (Tribunal
de Cuentas), para que dicho Tribunal
determine, si es responsable y, en su
caso, la sanción que le aplicaría.
Para ello, tiene que expedirse una
nueva Ley Federal de Responsabilidades Administrativas y de
Anticorrupción. En cuanto a esto
último, la Contraloría en su caso
le daría vista a la Fiscalía Anticorrupción para la investigación y, en
su caso, ejercicio de las acciones
penales correspondientes.
Adicionalmente habría que fortalecer a la Auditoría Superior de la Federación en un auténtico ente
autónomo constitucional. En este sistema de combate
a la corrupción, sus efectos no serían inmediatos
pero rompería la perversidad que actualmente tiene
el sistema y que favorece a la corrupción sistémica
que prevalece actualmente.
La inquietud social no se
reducirá con una solución
policial: la lesión y el agravio
están en la credibilidad
del aparato político.
NOVIEMBRE, 4, 2014 | www.HAMDAN-MANZANERO.COM