Programación - Salamanca.com

ÓPERA Y BALLET
TEMPORADA 1ª /2015
15 enero
29 enero
17 febrero
24 febrero
5 marzo
17 marzo
1 abril
16 abril
28 abril
5 mayo
18 mayo
28 mayo
10 junio
15 julio
El barbero de Sevilla | Rossini | Ópera Nacional de París
Andrea Chénier* | Giordano | Royal Opera House, Londres
Norma* | Bellini | Liceo de Barcelona
El holandés errante* | Wagner | Royal Opera House, Londres
El rapto en el serrallo | Mozart | Ópera Nacional de París
El lago de los cisnes* | Ballet | Petipa/Ivanov/Ashton/Chaikovski | Royal Opera House, Londres
Ascenso y caída de la ciudad de Mahagonny* | Kurt Weill | Royal Opera House, Londres
La forza del destino | Verdi | Ópera de Munich
Arabella | Strauss | Festival de Salzburgo
La fille mal gardée* | Ballet | Ashton/Hérold | Royal Opera House, Londres
L’Histoire de Manon* | Ballet | McMillan/Massenet | Ópera Nacional de París
El caballero de la rosa | Strauss | Festival de Salzburgo
La Bohème* | Puccini | Royal Opera House, Londres
Carmen* | Bizet | Teatro Antico, Taormina
* en directo
EL BARBERO dE
SEVILLA
ANdREA CHéNIER NORMA
de Gioachino Rossini
de Umberto Giordano
de Vincenzo Bellini
Grabada en directo, Ópera Nacional de París
En directo desde Royal Opera House, Londres
En directo desde el Teatro Liceo, Barcelona
Fecha
jueves, 15 de enero / 20.00 h
Duración
3 h 4 min, incluye descanso
Dir. musical Carlo Montanaro
Dir. escena Damiano Michieletto
René Barbera || Karine Deshayes
Reparto
|| Carlo Lepore || Dalibor Jenis || Orlin Anastassov
Fecha
jueves, 29 de enero / 20.15 h
Duración
2 h 30 min, más descanso
Dir. musical Antonio Pappano
Dir. escena David McVicar
Reparto
Jonas Kaufmann || Eva-Maria
Westbroek || Željko Lucic || Denyce Graves
Fecha
martes, 17 de febrero / 20.00 h
Duración
3 h 15 min, incluye descanso
Dir. musical Renato Palumbo
Dir. escena Kevin Newbury
Gregory Kunde || Raymond Aceto
Reparto
|| Sondra Radvanovsky || Ekaterina Gubanova
En los créditos de la película Help!, de los
Beatles, se oye una célebre melodía de violines
que cualquiera reconoce: ha aparecido en
anuncios, series de televisión (Seinfeld) o
dibujos animados (Bugs Bunny). Se trata de
la obertura de El barbero de Sevilla, probablemente la ópera bufa más representada de la
historia y la obra maestra de Rossini. Y eso
que apenas le llevó tres semanas a un
compositor que contaba solo 25 años.
Aunque el estreno en Roma (1816) resultó un
desastre por diversos accidentes (un cantante
se cayó de bruces, varias cuerdas de violines
se rompieron a la vez, incluso un gato se puso
pesado), a partir de la segunda función se
volvió una favorita del público. No solo por la
música, ligera pero poética, repleta de maravillosas arias y finales de conjunto memorables,
sino también por un texto muy divertido. Se
basa en la comedia de enredo de Beaumarchais
(1775), autor de Las bodas de Fígaro, sobre un
pícaro barbero que intermedia para que el
Conde Almaviva consiga a su amada Rosina
frente a los deseos del odioso doctor Bartolo.
Con esta producción, en la que destacan la
soprano francesa Karine Deshayes y el barítono
eslovaco Dalibor Jenis, debuta en la Bastilla el
prestigioso director escénico Damiano
Michieletto.
En la música pop, a los artistas que se recuerdan
por una sola canción se los llama “one-hit
wonder”. En la historia de la ópera no faltan
ejemplos, como Leoncavallo (Pagliacci),
Mascagni (Cavalleria rusticana) y Umberto
Giordano (Andrea Chénier); o sea, los tres
pilares del verismo, la tendencia más importante
en la música italiana del último tercio del XIX,
cuando proliferaron los dramas centrados en
las clases sociales más bajas y una intención
realista (vero = verdadero). La tragedia política
sobre el poeta André Marie Chenier, primero
comprometido con la revolución francesa y
después guillotinado por sus críticas a la
violencia jacobina, le sirvió a Giordano para
desarrollar una orquestación esplendorosa,
en la que incluye himnos de la época como la
Marsellesa. Supuso -cómo no- su único éxito.
Aunque el momento más conocido lo protagonice la soprano (La mamma morta, que
Tom Hanks escucha en su apartamento en
Philadelphia, en la desgarradora versión de
Maria Callas), es el tenor quien debe enfrentarse
al mayor reto vocal, ya que combina lirismo y
heroísmo. Quién mejor que el alemán Jonas
Kaufmann, ídolo de clase mundial, en una
nueva producción de Covent Garden con la
insuperable batuta de Antonio Pappano y
escenografía del cotizado David McVicar.
En 1847, el año en que se inauguró el Gran
Teatro del Liceo de Barcelona, Norma fue el
tercer título en representarse. Ahora la obra
maestra de Bellini nos llegará en directo desde
el teatro catalán, uno de los templos internacionales de la ópera, en una coproducción con
San Francisco, Canadá y Chicago. Norteamericanos son el director de escena -el emergente
Kevin Newbury- y las dos estrellas del reparto,
Gregory Kunde y Sondra Radvanovsky en el
papel titular, uno de sus favoritos. Norma está
concebida a mayor gloria de la soprano, y la
estadounidense viene de triunfar en el Metropolitan y en el festival de Peralada. En su voz
sonará Casta diva, una de las arias imprescindibles de todo el repertorio. Ni siquiera su
(ab)uso en publicidad hace que nos cansemos
de oírla.
La ópera, con libreto de Felice Romani (L’elisir
d’amore), es una especie de versión del mito
de Medea, sobre una sacerdotisa de la Galia
que viola su voto de castidad con un cónsul
romano -el ejército invasor- y concibe dos hijos
en secreto, pero después de ser despechada
busca venganza. Su música, cima del bel
canto, conmovió a Wagner, que la consideraba
una tragedia musical ejemplar: “No deberíamos
avergonzarnos de llorar de emoción”.
EL HOLANdéS
ERRANTE
EL RAPTO
EN EL SERRALLO
EL LAGO
dE LOS CISNES
de Richard Wagner
de Wolfgang Amadeus Mozart
de Petipa/Ivanov/Ashton/Chaikovski
En directo desde Royal Opera House, Londres
Grabada en directo, Ópera Nacional de París
En directo desde Royal Opera House, Londres
Fecha
martes, 24 de febrero / 20.15 h
Duración
2 h 20 min, más descanso
Dir. musical Andris Nelsons
Dir. escena Tim Albery
Reparto
Bryn Terfel || Adrianne Pieczonka
|| Michael König || Peter Rose || Ed Lyon
Fecha
jueves, 5 de marzo / 20.00 h
Duración
3 h, más descanso
Dir. musical Philippe Jordan
Dir. escena Zabou Breitman
Jürgen Maurer || Anna Prohaska ||
Reparto
Erin Morley || Bernard Richter || Paul Schweinester
Fecha
Duración
Dir. musical
Coreografía
“Es la obra perfecta para iniciarse en Wagner:
tempestuosa, arrolladora, oscura, animada por
un aliento ardiente, con los personajes al borde
del colapso nervioso. Hay fantasmas que cantan
desde los restos de un barco naufragado,
mujeres que se enamoran de viejos cuadros al
óleo, la naturaleza está desatada, y al final se
produce una gran apoteosis”. Así describe el
director alemán Christian Thielemann El holandés
errante, la ópera romántica por excelencia.
En su primera gran creación, Wagner redactó el
libreto a partir de una de sus queridas leyendas
del norte de Europa, acerca de un marinero que
por culpa de una maldición está condenado a
surcar los mares hasta que lo redima el amor
de una mujer. La escribió con 26 años, después
de un viaje en barco muy accidentado desde
Riga, de donde huía por las deudas contraídas.
Por suerte, la riqueza no tardaría en llegar: en
1843, El holandés conquistó Dresde y media
Europa. Su autor luego renegaría de sus obras
de juventud, pero su estilo, basado en los
leitmotiv, se empezaba a fraguar aquí. Esta
producción en directo desde Londres cuenta
con dos grandes bazas: la moderna escenografía de Tim Albery, que situó el Anillo en la
Inglaterra convulsa de Tony Blair; y el inmenso
(en todos los sentidos) barítono galés Bryn
Terfel como protagonista.
“Demasiadas notas, Herr Mozart”, osó decirle
el Emperador José II en el estreno de El rapto
en el serrallo, en 1782. No entendía nada: esta
partitura no solo sentaría las bases de la carrera
del genio de Salzburgo, sino también de toda
la ópera alemana. Lo más sorprendente es que
Mozart introdujo cambios fundamentales (el
formato de Singspiel con diálogos hablados
en alemán, una música que varía según las
condiciones sociales de los personajes) a la
vez que atendía más que nunca a los gustos
del público. Acababa de perder su trabajo para
el arzobispo de Salzburgo y necesitaba un
éxito; por eso apostó por un argumento
exótico, tan de moda entonces: el secuestro
por parte de piratas turcos de Konstanze, una
noble española, a la que rescatará su marido,
Belmonte.
Desde la Bastilla parisina, la realizadora de cine
israelí Zabou Breitman (Acordarse de las cosas
bellas) construye un lujoso decorado para esta
comedia bufa que, en el fondo, ensalza los
valores que siempre defendió Mozart: la
libertad, la fidelidad y la bondad. A los 26 años,
el austriaco había escrito ya una docena de
óperas, pero a partir de aquí llegarían las que
crearon escuela: Las bodas de Fígaro, Don
Giovanni…
Si Natalie Portman sufría lo indecible en Cisne
negro, no menos penurias pasó Chaikovski con
el primero de sus tres ballets. Entusiasmado por
la novedad, completó en menos de un año la
partitura, con libreto basado en el cuento alemán
de Musäus sobre la princesa a la que un brujo
transforma en un cisne blanco durante el día.
Pero pronto comenzaron las discusiones con el
coreógrafo, Julius Reisinger, que consideraba
muchas de las piezas poco aptas para ser bailadas.
Después llegaría el fatídico estreno en el Bolshói
de Moscú en 1877, con críticas no solo a la
pobreza de la producción, sino también a la
música: demasiado ruidosa, compleja, sinfónica.
Dos años después de la muerte de Chaikovski,
en 1895 el Mariinsky de San Petersburgo
encargaría a Marius Petipa y Lev Ivanov una
revisión que triunfó en el mundo entero. ¿La
clave? Determinaron que una misma bailarina
encarnase a Odette -el cisne blanco- y Odille
-el negro, su antagonista-. El papel cobraba una
dimensión simbólica que lo hace el más deseado
por las estrellas, a quienes exige toda su técnica
y capacidad actoral para transmitir esa lucha
interior. Nunca ha dejado de representarse, con
adaptaciones de grandes de la danza como
Diaghilev, Neumeier o, en los 50, Frederick
Ashton, a quien respeta esta versión en directo
desde el Royal Ballet.
Reparto
martes, 17 de marzo / 20.15 h
3 h, incluye 2 descansos
Boris Gruzin
Marius Petipa, Lev Ivanov,
Frederick Ashton, David Bintley
Natalia Osipova || Matthew Golding
ASCENSO y CAídA dE LA LA FORzA
CIudAd dE MAHAGONNy dEL dESTINO
de Kurt Weill
de Giuseppe Verdi
ARABELLA
de Richard Strauss
En directo desde Royal Opera House, Londres
Grabada en directo, Ópera de Munich
Grabada en directo, Festival de Salzburgo
Fecha
miércoles, 1 de abril / 20.15 h
Duración
3 h, incluye 2 descansos
Dir. musical Mark Wigglesworth
Dir. escena John Fulljames
Anne Sofie von Otter || Peter Hoare
Reparto
|| Willard W. White || Christine Rice || Kurt Streit
Fecha
jueves, 16 de abril / 20.00 h
Duración
3 h 30 min, más descanso
Dir. musical Asher Fisch
Dir. escena Martin Kušej
Jonas Kaufmann || Anja Harteros ||
Reparto
Ludovic Tézier || Vitalij Kowaljow || Nadia Krasteva
Fecha
martes, 28 de abril / 20.00 h
Duración
2 h 47 min, más descanso
Dir. musical Christian Thielemann
Dir. escena Florentine Klepper
Renée Fleming || Thomas Hampson
Reparto
|| Hanna-Elisabeth Müller || Daniel Behle
En el primer disco de The Doors, de 1967, justo
antes de que suene la conocidísima Light my
fire, Jim Morrison canta una especie de blues
cabaretero, Alabama Song, que también adaptaría David Bowie. Lo había escrito medio siglo
antes el compositor alemán Kurt Weill, a partir
de un poema de su amigo y camarada Bertolt
Brecht. Incluyó la canción en la ópera Ascenso
y caída de la ciudad de Mahagonny, de 1930,
una agria caricatura del consumismo capitalista.
Normal que las canciones de Weill atrajeran a
artistas del pop: frente a la complejidad armónica de contemporáneos como Schönberg o
Bartok, él trató de sonar inteligible y se acercó
al público con recursos directos y tonadas
populares. En Mahagonny mezcla jazz, tangos,
marchas y valses, siempre con una gran
inspiración melódica, fuerza rítmica y olfato
teatral. Perseguido por el nazismo (las SA se
manifestaron contra él en el estreno), Weill
escapó a EEUU, donde firmaría musicales para
Broadway. Se lo considera verdadero precursor
de la música popular europea y americana.
Esta producción en directo de la Royal Opera
House cuenta con los decorados de Es Devlin,
artista multidisciplinar que aparte de inaugurar
las Olimpiadas de Londres o colaborar con
Miley Cyrus ha creado trabajos clásicos como
el brillante Don Giovanni que vimos en 2014.
En los últimos años se recuerdan pocas
ovaciones mayores que los quince minutos al
final de La forza del destino en la Bayerische
Staatsoper de Munich. No era para menos: en
escena, la soprano Anja Harteros y el alemán
Jonas Kaufmann. El tenor más solicitado del
momento volvía a su ciudad para estrenarse
como el protagonista de la tragedia de Verdi
basada en Don Álvaro o la fuerza del sino, del
Duque de Rivas, sobre un mestizo inca que
asesina accidentalmente al padre de su amada
(una noble española) y trata de refugiarse en un
monasterio… donde se topa con el vengativo
hermano de ésta. Tanto Kaufmann como
Harteros y el tercero en discordia, el barítono
Ludovic Tézier, destacan no solo por su timbre y
su mezcla de fuerza y delicadeza, sino también
por su teatralidad y su pasión. La escenografía
contemporánea de Martin Kusej critica la
manipulación de las instituciones religiosas.
A pesar del argumento rocambolesco, Verdi
logró una música impresionante. Ya en pleno
dominio de su arte en 1862, hizo que un motivo
musical que alude al destino aparezca en todos
los momentos clave, empezando por una
memorable obertura. Rompió muchas de las
normas clásicas, y por eso el director del Real,
Joan Matabosch, la considera “un manifiesto
del romanticismo contra todo lo que se había
hecho antes”.
La estadounidense Renée Fleming ostenta un
estatus de prima donna de otra época: línea
de perfume propia, Obama en su agenda y el
Metropolitan de Nueva York casi como su
segunda casa. La soprano despierta recelos
cuando aborda títulos del bel canto, pero se ha
ganado una reputación merecida en el repertorio de Strauss gracias a su voz bella, su técnica
perfecta y su elegancia de fraseo. No en vano
el reputado Christian Thielemann, responsable
musical del Festival de Salzburgo y verdadero
sucesor de Karajan (en el 25 aniversario de la
muerte del director), escogió a Fleming como
protagonista de Arabella junto a su compatriota
Thomas Hampson, barítono en plena madurez.
Esta comedia de 1933 es el último de los seis
libretos que escribió para el compositor de
Elektra el talentoso poeta Hugo von
Hofmannsthal, que moriría poco después.
Sorprende que tan avanzado el siglo, en una
Europa malherida que impregnaba de malestar
obras como Wozzeck, de Alban Berg, el antes
revolucionario Strauss retrocediese a la Viena
del XIX para situar un argumento de opereta:
una joven debe casarse por conveniencia para
evitar la ruina de su padre, un derrochador
conde. Hay enredo y hasta travestismo (su
hermana se hace pasar por un chico), pero
por encima de todo brilla una música lírica y
deliciosa.
LA FILLE
MAL GARdéE
L’HISTOIRE
dE MANON
EL CABALLERO
dE LA ROSA
Ballet de Ashton/Hérold
Ballet de Massenet/MacMillan
de Richard Strauss
En directo desde Royal Opera House, Londres
En directo desde la Ópera Nacional de París
Grabada en directo, Festival de Salzburgo
Fecha
martes, 5 de mayo / 20.15 h
Duración
2 h 15 min, incluye descanso
Dir. musical Barry Wordsworth
Coreografía Frederick Ashton
Reparto
Natalia Osipova || Steven McRae
|| Cuerpo de baile del Royal Ballet de Londres
Fecha
lunes, 18 de mayo / 19.30 h
Duración
2 h 35 min, incluye 2 descansos
Dir. musical Martin Yates
Coreografía Kenneth Macmillan
Reparto
1os bailarines || Cuerpo de Baile
de la Ópera de París
Fecha
jueves, 28 de mayo / 20.00 h
Duración
3 h 34 min, más descanso
Dir. musical Franz Welser-Möst
Dir. escena Harry Kupfer
Reparto
Krassimira Stoyanova || Sophie
Koch || Mojca Erdmann || Silvana Dussmann
Quizá no nos suene La fille mal gardée, pero se
trata de uno de los ballets más relevantes de la
Historia. Para empezar, es el más antiguo que
se conserva sobre los escenarios: se estrenó en
1789 en Burdeos, dos semanas antes de la
Revolución Francesa. Estableció las bases
narrativas de lo que vendría, desde el uso de
un libreto con un argumento completo hasta el
protagonismo de dos campesinos, en vez de
reyes o dioses. Además, y esto resulta poco
habitual en el repertorio clásico, es una comedia:
un enredo amoroso en el que caben pretendientes disparatados, mimos y hasta un grupo
de polluelos danzantes.
En 1960, el decano de los coreógrafos ingleses,
Frederick Ashton, decidió darle un lavado de
cara a “la hija díscola” (así se traduce el título).
Le inyectó virtuosismo técnico, su particular
sentido del humor y más danzas folclóricas. Del
original de Jean Dauberval solo permanecen el
título y la trama, porque la música también se
renovó: John Lanchberry orquestó y completó
la partitura que Ferdinand Hérold había creado
para la versión de París en 1828, repleta de
préstamos de Rossini. Se convirtió en un
clásico instantáneo del Royal Ballet londinense
(“el primer gran clásico inglés” según la mítica
bailarina Marie Rambert). La Bastilla lo incorporó
a su repertorio en 2007.
A Kenneth MacMillan, junto a Frederick Ashton
el mayor coreógrafo británico del siglo XX,
siempre le fascinaron las tragedias; cuanto más
románticas, mejor: Anastasia, Romeo y Julieta,
El lago de los cisnes… Normal que durante años
tuviera en mente adaptar la novela del abate
Prévost (1731) acerca del destructivo romance
entre el estudiante Des Grieux y la joven Manon,
tan pasional como frívola, que termina condenada por su propia ambición. Sin embargo, en
el ballet que creó en 1973 para Covent Garden
la música no proviene de la ópera de Jules
Massenet (1842-1912), una de las más queridas
del repertorio francés, sino de un conjunto de
piezas menores del mismo compositor:
oberturas, oratorios, óperas olvidadas, de
Cendrillon a Don Quijote o El Cid. En cualquier
caso, se aprecian su talento para las melodías
sentimentales, su inspiradísima orquestación y
su sensualidad y gracia mediterráneas; en fin,
todo lo que hizo que el público lo adorase a
finales del XIX.
En esta producción en directo desde París, los
decorados y vestuarios de Nicholas Georgiadis
acentúan el contraste entre la pobreza y la
opulencia que vive la protagonista en su ascenso
y caída. Un papel de lucimiento muy atractivo
para la ballerina, aquí la estelar Laëtitia Pujol.
Si 2013 fue el año de Verdi, en 2014 se celebró
el 150 aniversario del nacimiento del último
tótem de la ópera alemana, Richard Strauss.
Incluso más que su patria, Múnich, había un
lugar que debía rendirle honores: Salzburgo,
cuyo Festival de Verano fundó en 1917 junto a
su fiel libretista Hugo von Hofmannsthal. Pocos
años antes, en 1910, habían escrito El caballero
de la rosa, una exquisita comedia de romanticismo desbordante. Después de las arriesgadas
Salomé y Elektra, que experimentaban con la
música atonal, el compositor buscó deliberadamente una ópera ligera y anacrónica que incluía
valses del siglo anterior y se ambientaba en la
sociedad del siglo XVIII, en homenaje a Mozart
y Las bodas de Fígaro.
Atención a la impresionante escenografía del
octogenario regista Harry Kupfer. Debutaba en
el gigantesco escenario de Salzburgo, y trasladó
la trama a la Viena modernista de los años 20.
Allí acontece el escandaloso affaire entre el
arribista Octavian y una mujer casada de la
realeza que podría ser su madre, la mariscala
María Teresa, siempre temerosa de que la
abandone. Con un diálogo fluido, lo que parecería una simple comedieta contiene profundas
reflexiones sobre el paso del tiempo, la codicia
y la soledad. Sobresalientes Sophie Koch y
Krassimira Stoyanova como protagonistas.
ÓPERA Y BALLET
TEMPORADA 1ª/2015
CARMEN
de Giacomo Puccini
de Georges Bizet
En directo desde Royal Opera House, Londres
En directo desde el Teatro Antico de Taormina
Fecha
miércoles, 10 de junio / 20.15 h
Duración
2 h 5 min (aprox), más descanso
Dir. musical Dan Ettinger
Dir. escena
John Copley
Reparto
Anna Netrebko || Joseph Calleja ||
Lucas Meachem || Jennifer Rowley
Fecha
miércoles, 15 de julio / 21.30 h
Duración
2 h 30 min (aprox), más descanso
Dir. musical Stefano Montanari
Dir. escena Enrico Castiglione
Reparto
Jose Maria Lo Monaco ||
Giancarlo Monsalve
Anna Netrebko está escribiendo en mayúsculas
su nombre en la Historia de la ópera. La soprano
rusa, lejos de ser una cara bonita o una cantante
de moda, no ha hecho más que crecer como
intérprete. Tras su maternidad, la voz le permite
nuevos registros dramáticos, pero ella tampoco
descuida algunos de sus personajes insignia:
entre ellos, la dulce costurera de La Bohème.
Hoy no hay una Mimì mejor, tanto por el
timbre como por su naturalidad como actriz y
su entrega emocional. La disfrutaremos en
directo desde Londres junto al tenor maltés
Joseph Calleja como su amado poeta Rodolfo.
El teatro ha anunciado que retirará tras esta
temporada la clásica y elegante escenografía de
John Copley, que no falla desde su estreno en
1974 (más de 600 funciones).
“Empiezo a llorar en el tercer acto y ya no paro”,
decía a principios del siglo XX la legendaria
soprano Rosa Raisa. La música de Puccini tiene
ese don para emocionar a cualquiera. En especial en La bohème, una partitura bellísima que
pinta mediante la orquesta el París del XIX. El
primer gran éxito del genio de Lucca, de 1896,
fascina al público tanto por sus arias y dúos
imborrables como por su humanidad: los personajes no son aristócratas, sino unos humildes
bohemios cargados de sueños, aunque la realidad les obligue incluso a empeñar su abrigo.
Para despedir la temporada de ópera antes
del verano siempre regresamos al anfiteatro
romano de Taormina, un escenario espectacular con vistas al Etna. El veterano Festival de
verano en la localidad siciliana suele apostar
por títulos que no solo atraigan al público, sino
que resulten aptos para representarse al aire
libre. En este sentido, Carmen es una garantía:
la adaptación de la novela de Prosper Mérimée
sobre la cigarrera gitana que vuelve loco al
militar conservador Don José contiene grandes
coros (el del preámbulo a la corrida de toros),
danzas contagiosas (la Seguidilla) y más
melodías populares que ninguna otra ópera
jamás escrita. ¿Quién no podría tararear la
Habanera o Toréador?
Sorprende que en su estreno en 1874 la obra
maestra de Georges Bizet fracasara con estrépito. El pobre Bizet nunca conoció la gloria, ya
que murió pocos meses después. Diez años
más tarde era ya la ópera más popular del
mundo -como pronosticó Chaikovski- gracias
a su sentido del ritmo, al aroma andaluz de la
orquesta y las melodías (y eso que el autor ni
siquiera había pisado España), a su equilibrio
entre ligereza y tragedia y, por encima de todo,
al carisma y la sensualidad de una heroína
fogosa, provocadora y leal a sus principios
hasta la muerte.
• subtituladas en castellano
• butacas numeradas
Entrada: 11€ / 17€ *
Venta anticipada: 10€ / 15,60€ *
Estudiantes: 7€ / 10€ *
Entradas abonos: 9€ / 15€ *
Abono 1: hasta el 1 de abril (mín. 5 títulos)
Abono 2: del 16 de abril al 15 de julio
(mín. 5 títulos) a la venta en marzo
* en directo
Torres villarroel, 40. 37005 Salamanca
Tel.: 923243538 • [email protected]
Textos: Javier Heras - Diseño: de maglia y alonso, Salamanca, enero 2015
LA BOHèME