las áreas protegidas al servicio del desarrollo sostenible

Kenya, la reserva Ol Pejeta : la vista del Mont Kenya © Yves Terracol, AFD
Agence Française
de Développement
LAS ÁREAS PROTEGIDAS
AL SERVICIO
DEL DESARROLLO
SOSTENIBLE
AGENCE FRANÇAISE DE DÉVELOPPEMENT
LAS ÁREAS PROTEGIDAS AL SERVICIO DEL DESARROLLO SOSTENIBLE
Las áreas protegidas, una herramienta
de protección de la biodiversidad
y de desarrollo
China, humedales del Liaoning © G2S Creative Workshop
En todo el planeta, la conservación de los ecosistemas naturales
únicos es indispensable para la protección de sus múltiples servicios
vitales para el bienestar humano, reconocidos local y globalmente.
Esto es particularmente relevante en los países en desarrollo que
albergan una parte importante de la biodiversidad mundial y donde
las condiciones de vida dependen mucho de su capital natural.
Naturaleza y desarrollo
en algunas cifras
La pérdida global de biodiversidad estimada al 2050,
tiene un costo económico evaluado en 14 billones
de euros (TEEB 2010)
El 80% de la pérdida de biodiversidad afecta
directamente la vida de 2400 millones de personas
que viven con menos de 2 dólares al día.
Con las metas de Aichi, la comunidad internacional
se comprometió a conservar para el 2020: “al menos
17% de las zonas terrestres y aguas continentales
y 10% de las zonas marinas y costeras, especialmente
aquellas de particular importancia para la diversidad
biológica y los servicios de los ecosistemas, por medio
de sistemas de áreas protegidas administrados de
manera eficaz y equitativa, ecológicamente
representativos y bien conectados y otras medidas
de conservación eficaces basadas en áreas e integradas,
integradas en los paisajes terrestres y marinos más
amplios.”
El fortalecimiento y la creación de áreas protegidas para la preservación de los medios naturales con fuerte valor ecológico, así como
el mantenimiento y restauración de la conectividad ecológica entre
los ecosistemas protegidos, son soluciones que la AFD apoya para
enfrentar esos retos.
La AFD, a menudo en cooperación con el Fondo Francés para el
Medio Ambiente Mundial (FFEM), cofinancia programas que
promueven ese objetivo, que pueden llevar a cabo entidades
públicas o privadas, entidades territoriales u organizaciones de la
sociedad civil.
LA AFD INTERVIENE EN…
■■
El desarrollo de áreas protegidas cuyos efectos son determinantes para la conservación de hábitats críticos
■■
La consolidación de áreas protegidas existentes
■■
El fortalecimiento de las instituciones nacionales a cargo de
la gestión de las áreas protegidas
■■
El desarrollo de las poblaciones que viven en la periferia o dentro de las áreas protegidas
En el 2013, la AFD desarrolló una
estrategia sobre Biodiversidad que se
focaliza en la protección, la restauración y
el manejo de los ecosistemas en los países
donde la AFD interviene, enfatizando
en el acceso y reparto de los beneficios.
La AFD considera todas las categorías
de áreas protegidas seleccionadas
por la Unión Internacional para
la Conservación de la Naturaleza (UICN).
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Una protección adecuada de los medios
naturales
Kenia, reubicación de un rinoceronte en el parque nacional de Meru © Irene Alvarez, AFD
Fortalecer la red mundial de áreas
protegidas
Con el fin de asegurar la extensión de una red mundial de áreas
protegidas bien manejadas, la AFD apoya acciones de fortalecimiento de las áreas protegidas existentes y creación de nuevas
áreas, garantizando la representatividad ecológica de los medios
naturales vulnerables.
Mejorar la gestión de las áreas protegidas
■■
La AFD apoya la capacitación de los gestores y guarda-parques,
el suministro de equipamientos, la implementación de planes
de gestión y lucha contra la caza furtiva, el ordenamiento de
infraestructuras, el uso de tecnologías de vigilancia y seguimiento
científico.
Fortalecer la gobernanza de las áreas protegidas
■■
La AFD apoya mecanismos de gobernanza entre los gobiernos,
actores privados y ONG para una mejor gestión de los espacios
protegidos, considerando la diversidad y complementariedad de
las distintas áreas protegidas.
■■
La AFD apoya una gestión participativa y contractual con las
comunidades locales que viven dentro y en la periferia de las
áreas protegidas.
Asegurar la continuidad del financiamiento
de las áreas protegidas
■■
Conservación
de la biodiversidad
y desarrollo de las comunidades
pastoriles en el norte de Kenia
En el norte árido de Kenia, el islote forestal
montañoso de Marsabit es un sitio natural
extraordinario y única fuente de agua permanente
de la región. Este ecosistema está fuertemente
amenazado: desde 1995, cada año desaparecen más
de 100 hectáreas de bosque.
Del 2013 al 2018, la AFD y el FFEM cofinancian este
proyecto por un monto de 8 millones de euros
y 1,5 millones de euros respectivamente, para
proteger el bosque de Marsabit, promover modos
de gestión sostenible de los recursos naturales
en la periferia del área protegida, involucrar
a las comunidades pastoriles y valorizar el turismo.
El proyecto asocia a los servicios kenianos
de protección de la fauna y la flora (KWS) y de las
aguas y bosques (KFS), a las autoridades locales,
ONG locales de desarrollo, comunidades pastoriles
y los representantes del Condado de Marsabit.
La AFD apoya herramientas innovadoras de financiamiento como
los pagos por servicios ambientales, impuestos y pago de derechos sobre las actividades económicas que se llevan a cabo
dentro de las áreas protegidas, los fondos fiduciarios y fundaciones de conservación, los mecanismos de compensación de
pérdidas de biodiversidad inevitables generadas por las actividades económicas así como la inclusión de los recursos recurrentes, necesarios y suficientes en los presupuestos de los Estados.
Sensibilizar, formar y explicar la Naturaleza
■■
La AFD apoya programas educativos y de sensibilización sobre
la importancia y el cuidado del medio ambiente de todos los
partícipes, visitantes, comunidades locales y decidores.
Kenia, ganaderos en la periferia del bosque de Marsabit © Julien Calas, FFEM
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Asegurar la conectividad ecológica
entre las áreas protegidas
Preservación de la biodiversidad
en México
La AFD respalda la integración de la red de áreas protegidas en
las políticas de ordenamiento territorial, debido al papel clave
que juegan los corredores ecológicos entre las áreas protegidas
para mantener la capacidad de los ecosistemas de proveer
bienes y servicios esenciales.
Fortalecer las capacidades de las instituciones
territoriales y nacionales
México, Quetzal resplandeciente © Julien Calas, FFEM México es el cuarto país “mega diverso” del mundo. Alberga
12% de la biodiversidad mundial. La Comisión Nacional de
Areas Naturales Protegidas (CONANP) administra las 176 áreas
protegidas que cubren aproximadamente el 13% del territorio
nacional. La cooperación entre la AFD, el FFEM y la CONANP,
inspirándose en el modelo de los Parques Naturales Regionales
(PNR) franceses, busca promover la adopción de nuevas
modalidades de conservación en México que tengan mayor
aceptación por parte de las poblaciones que viven dentro
o en la periferia de esos espacios protegidos, así como fortalecer
los beneficios de la conservación para las poblaciones locales,
mediante el desarrollo de marcas y denominaciones
de producción sostenible en las áreas protegidas.
En el marco de esta cooperación, la AFD otorgó a México
un préstamo presupuestario de libre destinación de 60 millones
de euros, acompañado de un programa de asistencia técnica
relacionado con las temáticas estratégicas prioritarias
a mediano plazo de la CONANP, y de un proyecto piloto
de gestión integrada del territorio del corredor biológico
Ameca-Manantlán en el Estado de Jalisco, financiado
por el FFEM (1,5 millones de euros).
■■
La AFD apoya a las instituciones a cargo de la conservación
de la biodiversidad, del ordenamiento territorial, de la lucha
contra la caza furtiva y prevención de los conflictos entre los
hombres y la fauna salvaje.
Apoyar la definición de políticas nacionales
y locales para una mejor inclusión
de la biodiversidad en el territorio
■■
La AFD apoya los procesos de múltiples actores que permitan construir una visión prospectiva del territorio y organizar
el espacio entre los usos productivos y de conservación,
garantizando al mismo tiempo la preservación de los corredores ecológicos.
Preservar y restablecer los corredores
ecológicos
■■
La AFD apoya en estos espacios la restauración ecológica
y la adopción de prácticas más amigables con el medio
ambiente por parte de los actores de estos territorios (desarrollo de redes verdes y azules, localización de las actividades
productivas, certificación ecológica de la agricultura) así
como el desarrollo adecuado de herramientas de gestión y
gobernanza de la tierra.
Corredores ecológicos y sociales
en el norte de Tanzania
Debido al fuerte crecimiento demográfico, los corredores naturales que unen
a los Parques Nacionales de Manyara y Tarangire en el norte de Tanzania, se ven
amenazados por la transformación de los ecosistemas en cultivos y pastos para
el ganado, provocando así el aislamiento ecológico progresivo de ambos parques.
Con el fin de evitar que estos parques se conviertan en islas de biodiversidad
degradada en un océano agrícola y pastoril, la AFD otorgó un subsidio
de 850.000 euros a la Fundación Internacional para la Gestión de la Fauna
(IGF), para promover el desarrollo por parte de las comunidades locales
de nuevas estrategias de protección de los ecosistemas y su biodiversidad.
Este proyecto de 3 años, desarrolla nuevos modelos comunitarios
de conservación e implementa planes de uso y ocupación de suelos a nivel
local, asegurando la continuidad de las actividades pastoriles y la disminución
de los conflictos hombre-fauna.
Burkina Faso, concertación para el ordenamiento
territorial © Christophe Du Castel, FFEM
Este enfoque debería garantizar el funcionamiento social y ecológico
de los últimos corredores existentes entre las áreas protegidas del valle del Rift
y la estepa Massaï.
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Economía local y gestión sostenible de los recursos
naturales en el norte de Mozambique
El Parque nacional de los Quirimbas, con una superficie de 7500 km² en zona marina
y terrestre, es apoyado por la AFD y el FFEM (7,5 millones de euros y 1,5 millones
de euros, respectivamente) desde su creación en el 2002.
En su parte marina, el Parque implementó mecanismos de cogestión y control,
contribuyendo a una reducción drástica de la explotación ilegal de los recursos
pesqueros. El Parque creó santuarios que permiten la renovación del recurso
y un incremento significativo de las capturas por parte de los pescadores locales.
Mozambique, regreso de la pesca
en el Parque nacional de los
Quirimbass © S. Nazerali, WWF
Estos reproducen este sistema que contribuye a la preservación de los recursos
naturales, al mejoramiento de los ingresos de las poblaciones y a la lucha contra
la inseguridad alimentaria en una de las regiones más pobres de Mozambique.
Establecer las áreas protegidas
como polos de desarrollo
La AFD considera importante las repercusiones económicas de las
áreas protegidas para las comunidades directamente implicadas y para
los países.
Conocer, reconocer y proteger los derechos
de uso y saberes tradicionales de las poblaciones
locales y autóctonas.
Alianzas para la gestión sostenible
de las áreas protegidas en el hotspot
Indo birmano
La AFD y el FFEM aportan un financiamiento de cerca
de 2 millones de euros al proyecto de cogestión sostenible
de cinco áreas protegidas en Camboya, Laos y Myanmar,
lo que representa una superficie de 2 millones de hectáreas.
Implementado por la ONG Wildlife Conservation Society
(WCS), el proyecto apoya a las comunidades locales para
■■
La AFD apoya el ecoturismo, en alianza con operadores privados
o comunidades locales. Asimismo apoya la agricultura, la actividad
agroforestal, la pesca sostenible y la cosecha sostenible para la
farmacopea, especialmente a través de sectores productivos certificados
Conocer, reconocer y proteger los derechos
de uso y saberes tradicionales de las poblaciones
locales y autóctonas.
■■
La AFD financia proyectos que velan especialmente por la integración de la noción de repartición justa y equitativa de los beneficios
ligados al acceso y utilización de los recursos naturales con fines
investigativos o comerciales, en los modelos económicos de las áreas
protegidas.
el reconocimiento de sus derechos de acceso y uso
sostenible de los recursos naturales.
Implementa enfoques participativos de gestión sostenible
de las áreas protegidas y apoya a la agricultura de conservación
y el ecoturismo comunitario.
Se apoya el establecimiento de alianzas con empresas
(turismo, hidroelectricidad, petróleo, gas y minerales) a favor
de las poblaciones locales.
Igualmente, el proyecto prevé contribuir en la definición
de las políticas públicas de conservación a escala nacional
y regional.
Camboya, paisaje agroforestal © Eric Beugnot, AFD
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Camerún, provincia del Este, Ruta de Abong Mbang © Didier Simon, FFEM
Establecer alianzas internacionales para
las áreas protegidas
El Acuerdo Marco Francia-Unión Internacional
para la Conservación de la Naturaleza (UICN)
Desde el 2009, la AFD contribuye al Acuerdo Marco Francia-UICN,
junto con los Ministerios de Relaciones Exteriores, de Ecología y de
las regiones de Ultramar.
Esta alianza permitió la adopción de una hoja de ruta para el fortalecimiento de la red de áreas protegidas en África, además de que
participó en la elaboración de la Lista verde de la UICN, un nuevo
sistema de certificación de la calidad de la gestión y gobernanza de
las áreas protegidas. Asimismo, contribuyó al desarrollo de la estrategia europea a favor de la biodiversidad y a la estructuración de
una herramienta de financiamiento para los territorios ultramarinos
(BEST). La AFD contribuye con 5,2 millones de euros en el programa 2013-2016 de este Acuerdo Marco.
El “Critical Ecosystem Partnership Fund”,
una iniciativa internacional
Creado en el año 2000, el “Critical Ecosystem Partnership Fund”
(CEPF) es un fondo dedicado a la protección de los ecosistemas
amenazados en los “hotspots mundiales de la biodiversidad”, por
actores de la sociedad civil. Estos 34 hotspots son las zonas más
ricas pero también las más amenazadas del planeta. Territorios
franceses en el Mediterráneo, Océano Índico, Nueva Caledonia, el
Caribe, Polinesia, son algunos de estos hotspots.
El CEPF financia ONG que actúan a favor de la conservación o
gestión sostenible de la biodiversidad. Las donaciones varían de
3000 a 400.000 dólares, con un promedio de 150.000 dólares.
Hasta el día de hoy, más de 1650 ONG han sido financiadas en
19 de los 34 hotspots.
Desde el 2007 y con una contribución de 19,5 millones de euros,
la AFD es socia del CEPF junto con Conservation International,
el Fondo para el Medio Ambiente Mundial, el gobierno japonés,
la fundación John D. y Catherine T. Mac Arthur, el Banco Mundial
y más recientemente la Unión Europea.
Producir conocimientos e implementar
herramientas de evaluación y
seguimiento
En todos los países, los diferentes actores (gobiernos, poblaciones,
actores económicos, sociedad civil y sus socios internacionales)
necesitan conocimientos de carácter científico, económico, institucional y social.
La AFD, en cooperación con distintos actores, apoya la producción
de estos conocimientos así como el desarrollo de herramientas de
vigilancia y gestión de las áreas protegidas, tales como los sistemas
de información geográfica e imagen satelital de alta resolución.
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Financiamientos diversificados y adaptados
Las cifras claves
Del 2003 al 2013 son en total:
Millones de euros
Compromisos de la AFD y el FFEM* a favor
de las áreas protegidas del 2003 al 2013
39 millones
de hectáreas
90
80
70
60
50
40
30
20
10
0
de áreas protegidas financiadas
233 millones
de euros
invertidos en los proyectos de áreas
protegidas
2003
2004
Subsidio
2005
2006
2007
2008
Préstamo
2009
2010
2011
2012
2013
Año
*Proyectos FFEM llevados a cabo por la AFD
27 millones
de euros
invertidos en los fondos fiduciarios
de conservación
Repartición
geográfica de los
proyectos de áreas
protegidas entre
el 2003 y el 2013
36%
África
América Latina y el Caribe
Asia y el Pacífico Sur
Ultramar
Multi países
3%
6 millones
de euros
Madagascar, Parque nacional de Masoala
© Guillaume Chiron, AFD
83 millones
de euros
26%
61 millones
de euros
34%
80 millones
de euros
1%
3 millones
de euros
Fundación para las áreas protegidas
y la biodiversidad de Madagascar
Madagascar es uno de los hotspots de biodiversidad mundial, con una fauna
y flora únicas en el mundo, pero actualmente amenazadas por las presiones
antrópicas y el cambio climático.
La Fundación malgache se creó en el 2005 gracias al apoyo de las ONG
Conservation International y WWF y de Francia a través de financiamientos
de la AFD (2 millones de euros) y del FFEM (1 millón de euros). En la actualidad,
Francia es el principal contribuyente con 16,3 millones de euros, o sea
45% del capital de este fondo fiduciario.
Más de una veintena de áreas protegidas terrestres y marinas de Madagascar
se benefician con financiamiento de la Fundación, para acciones de protección
de la biodiversidad y actividades socioeconómicas a favor de las comunidades
locales dentro y en la periferia de las áreas protegidas (agricultura de conservación,
ecoturismo, educación ambiental, inversiones sociales).
AGENCE FRANÇAISE
DE DÉVELOPPEMENT
LAS ÁREAS PROTEGIDAS AL SERVICIO DEL DESARROLLO SOSTENIBLE
La Agence Française de Développement (AFD) es una institución financiera pública que, desde hace 70 años, interviene en
acciones de lucha contra la pobreza y a favor del desarrollo en los países del sur y en Francia de Ultramar. Tiene como mandato
implementar la política definida por el gobierno francés.
Presente en cuatro continentes con una red de 71 agencias y oficinas de representación, de las cuales 9 en Francia de Ultramar
y 1 en Bruselas, la AFD provee financiamiento y asistencia técnica para proyectos destinados a mejorar las condiciones de vida
de las poblaciones, de fomento al crecimiento económico y de protección al planeta.
FFEM
Proparco es una filial de la AFD que tiene por
misión apoyar la inversión privada a favor del
crecimiento, el desarrollo sostenible y los
Objetivos de Desarrollo del Milenio en los
países emergentes y en desarrollo. Propone
financiamientos que corresponden a las
necesidades específicas de los inversionistas
en los sectores productivos, los sistemas
financieros, las infraestructuras y el capital
riesgo.
www.proparco.fr
Agence Française de Développement
https://www.facebook.com/AFDOfficiel
AGENCE FRANÇAISE DE DÉVELOPPEMENT
5 rue Roland Barthes
75598 Paris Cedex 12 – France
Tél. +33 1 53 44 31 31
Fax +33 1 44 87 99 39
www.afd.fr
El Fondo Francés para el Medio Ambiente en el Mundo (FFEM) es un instrumento
financiero de la política francesa de cooperación y desarrollo. Desde hace 20 años
tiene como mandato cofinanciar proyectos con fuerte contenido ambiental en los
países en desarrollo. Interviene en seis ámbitos del medio ambiente mundial:
la biodiversidad, el cambio climático, las aguas internacionales, la degradación de las
tierras, los contaminantes orgánicos persistentes, la capa de ozono estratosférica.
Su manejo está a cargo de cinco ministerios (economía y finanzas, relaciones
exteriores, desarrollo sostenible, investigación agricultura) y la Agence Française de
Développement (AFD). Su secretariado y su gestión financiera están a cargo de la
AFD. Desde 1994, se han financiado 258 proyectos por un monto de 299 millones de
euros de los cuales 68% se realizaron en África y en la Cuenca del Mediterráneo.
www.ffem.fr
@AFD_France
https://twitter.com/AFD_France
Agence Française de Développement
https://www.youtube.com/user/GroupeAFD
DEPARTAMENTO DE DESARROLLO
SOSTENIBLE
AGRICULTURA, DESARROLLO RURAL
Y BIODIVERSIDAD
Ejecución: Planet 7 – Enero 2015
Mozambique, Parque nacional de los Quirimbas © F. Sheppers, WWF
La presente publicación fue impresa según el respeto del medio ambiente con tintas vegetales y papel PEFC (gestión forestal sostenible).
En 2013, la AFD consagró 7 800 millones de euros para financiar proyectos en los países en desarrollo y en Francia de
Ultramar. Son proyectos que contribuyen a escolarizar a los niños, a mejorar la salud materna, a promover la igualdad de
género, a dar apoyo a los agricultores y a las pequeñas empresas, a incrementar el acceso al agua, a la energía y a los
transportes. Los nuevos proyectos financiados también contribuirán a luchar contra el cambio climático lo que permitirá, en
particular, un ahorro anual de 3.3 millones de toneladas equivalentes de CO2 .