Descargar - Nobel Biocare

om
a.c
tic
ba
-sa
ela
cu
PARA ESTA SEMANA: Santiago 1:2, 3; 1 Pedro 1:6, 7; Filipenses 3:12-15;
Santiago 1:19-21; Lucas 17:5, 6; 12:16-21.
TEXTO CLAVE: "Fijemos la mirada en Jesús, el iniciador y perfeccionador de
nuestra fe, quien por el gozo que le esperaba, soportó la cruz, menospreciando la vergüenza que ella significaba, y ahora está sentado a la derecha
del trono de Dios" (Marcos 10:45).
w.e
s
ww
02
La perfección de
nuestra fe
Para el 11 de octubre de 2014
¿A
PREVIEW
lguna vez te has preguntado por qué les suceden ciertas cosas
a los hijos de Dios? Hace un tiempo, nuestra familia atravesó
por una situación difícil, que hizo que nos lo planteáramos.
Nuestro único consuelo fue que el Señor no permite que nada de lo que suceda nos destruya. Ahora, cuando los incidentes comienzan a obnubilarme
con dudas, trato de correr hada Dios, acudiendo por su sabiduría. Y su respuesta siempre es: "Esto está sucediendo para perfeccionar tu fe". Incluso
Jesús, nuestro ejemplo máximo, soportó mucho más de lo que nosotros alguna vez deberemos hacerlo: una muerte físicamente tormentosa, y el terrible miedo de estar separado para siempre de su Padre.
Dios permite que pasemos por pruebas con la intención de perfeccionar
nuestra fe. Cuando comenzamos nuestro caminar con Jesús, generalmente
tenemos una fe similar a "ver para creer". Le pedimos señales a Dios.
Luego, él nos enseña una fe más fuerte, que demanda que creamos sin ver
(Hebreos 11:1). Podemos tener que sufrir varias pruebas hasta lograr este
tipo de fe. Debo admitir que, en ocasiones, todavía lucho por confiar en las
promesas de Dios cuando no vislumbro una solución posible. En esos
casos, me es difícil creer que él sanará cuando los médicos se han dado
por vencidos, creer que las puertas del cielo se abrirán cuando todas las
puertas de la tierra se han cerrado.
Hoy, sin importar lo difícil que sea, que este pensamiento te anime: ¡Dios
está perfeccionando tu fe! Él quiere que logres esa fe que afirma: "Creo en
Dios, sin importar lo que suceda". Sí, Dios perfeccionará nuestra fe y nos
dará gozo, gloria y vida eterna. Tomemos valor al poner nuestros ojos en
Jesús, ¡el Autor y Consumador de nuestra fe!
Lección para jóvenes | 12
04
SÁBADO
Octubre
05
DOMINGO
Octubre
LA TRAMPA DE LA DUDA
Muchas veces, escuchamos personas que dicen creer en esto o en
aquello. Pero ¿cuánto tiempo dedicamos a entender cómo surge la fe y
sus propiedades? Existen muchas teorías sobre cómo procesamos la información. Santiago 1:6 dice: "Pero que pida con fe, sin dudar, porque
quien duda es como las olas del mar, agitadas y llevadas de un lado a otro
por el viento". A veces, hacemos un pedido a Dios, pero nuestros corazones y mentes demuestran dudas en creer profundamente la promesa de
Dios de que escucha y responde a nuestras oraciones. Jesús enseñó que,
sin importar lo que pidamos en oración, debemos creer que ya lo hemos
recibido (Marcos 11:24). Así, la duda entorpece nuestro caminar con Dios.
En Santiago 1:6 al 8 aprendemos sobre las consecuencias de la duda.
"Quien es así no piense que va a recibir cosa alguna del Señor [...] es indeciso e inconstante en todo lo que hace". Es importante notar que sin fe
es imposible agradar a Dios. Cuando acudimos a Dios en oración debemos
creer en él, y que recompensará a quienes lo buscan diligentemente. La
duda imposibilita que recibamos las bendiciones que Dios tiene para nosotros y, a menudo, resulta en desánimo.
Sin embargo, por causa de nuestra naturaleza pecaminosa, parece que
a menudo dudamos de Dios. Le pedimos que nos guíe en la decisión sobre
qué carrera estudiar, qué trabajo aceptar o, incluso, con quién deberíamos
casarnos; pero, luego, seguimos preocupados por cómo y cuándo responderá, o por si responderá o no.
¿Cómo podemos superar estas dudas? Antes que nada, estudia la Palabra de Dios, con el fin de aprender sobre sus promesas. El conocimiento
es esencial para evaluar de manera adecuada la información que se nos
presenta ante nuestra situación actual. La falta de conocimiento puede
hacer que dudemos. Así, el conocer y el creer en la Palabra de Dios, que
es toda la verdad, desarrolla nuestra fe y nos ayuda a deshacernos de
cualquier duda que podamos tener.
Biblia en mano
Lee Santiago 1:2 y 3; 1 Pedro 1:6 y 7; 4:12 y 13. ¿Qué actitud tienen en común
Santiago y Pedro ante las pruebas? ¿De qué modo debemos relacionarnos con
este increíble mandato bíblico?
Una cosa es que permanezcamos fieles a Dios durante las pruebas, es decir,
no perder la fe, sino aferrarnos al Señor aun en los peores momentos. Pero
otra cosa muy diferente es "alegrarnos" en nuestras pruebas. ¿No es pedir demasiado? Después de todo, a veces puede ser muy difícil mantenerse fieles en
las pruebas, pero... ¿"regocijarse” en ellas? ¿Cómo podemos aprender a alegrarnos, cuando el gozo es lo último que sentiríamos?
13 | Lección para jóvenes
FE: CARGANDO...
06
LUNES
Piensa en el proceso de refinamiento de un diamante. Cuando se lo
descubre en lo profundo de la tierra, un diamante tiene el aspecto de
una piedra verde oscuro. Se necesitan varios pasos para hacer que brille. Primero, se crea un diagrama para cortar el diamante. Luego, se
dibujan líneas en el diamante y se lo corta, según esas líneas, usando
un martillo y una cuchilla afilada, un láser o una sierra circular. El proceso de cortado del diamante es la parte más difícil e importante para
crear una gema hermosa.
La manera en que crecemos en Cristo es, en cierto modo, similar a la
forma en que un diamante en bruto se convierte en algo hermoso. Las
pruebas y las dificultades nos entierran bajo una carga pesada, que amenaza con aplastar nuestra fe, así como un bello diamante está "atrapado"
en una piedra sucia. Y así como el diamante debe pasar por un proceso
de refinamiento, los hijos de Dios tienen que soportar pruebas para que
su fe se fortalezca. En 1 Pedro 1:6 y 7 encontramos una descripción del
hermoso resultado de la prueba, por medio del fuego de Dios, para que
nuestra fe sea refinada. Debemos estar dispuestos a soportar las pruebas
y la disciplina de Dios, si queremos que el carácter divino sea perfeccionado en nosotros. "Muchas son las angustias del justo, pero el Señor lo
librará de todas ellas" (Salmo 34:19). Por ende, como dice Santiago, debemos gozarnos cuando pasamos por pruebas y dificultades.
Fe perfecta: un trabajo en progreso (Santiago 1:2-4, 12)
Agradecer por las pruebas nos ayuda a mirar más allá del aquí y el
ahora, a lo que Dios ha proyectado para nosotros. Así, nuestro agradecimiento está basado sobre la anticipación del cumplimiento de las
promesas de Dios. Cuando llegan las dificultades, el ser agradecido
nos ayuda a permanecer firmes, ya que sabemos que Dios permanecerá fiel a nosotros. "Dichoso el que resiste la tentación porque, al salir
aprobado, recibirá la corona de la vida que Dios ha prometido a quienes
lo aman" (Santiago 1:12). La fe, las pruebas y la paciencia siempre
deben formar parte de la experiencia del cristiano. Dios desea que crezcamos en la fe, y que estemos listos para el regreso de Cristo. Con este
fin, Santiago escribió su carta. No intentemos evitar las pruebas; en
lugar de eso, sometámonos a ellas con una paciente resistencia.
Biblia en mano
Lee Efesios 4:13 y Filipenses 3:12 al 15. ¿Qué actitud hacia lo "perfecto" deben
tener los cristianos?
Si murieras ahora mismo, ¿serías tan bueno como para ser salvo? 0 si hubieras
muerto dos semanas después de que aceptaste a Jesús, ¿habrías sido lo suficientemente bueno como para ser salvo? ¿Qué te dice tu respuesta acerca de
tu necesidad del manto perfecto de la justicia de Cristo, sin tomar en cuenta el
nivel de "perfección" que hayas alcanzado?
Lección para jóvenes | 14
Octubre
07
MARTES
Octubre
CULTIVAR LA GRACIA DE LA PACIENCIA
"Pueden sobrevenir pruebas y tentaciones; pero el hijo de Dios, ya sea
un ministro o un laico, sabe que Jesús es su ayudador. Aunque seamos débiles e indefensos, todas las fuerzas del Cielo están a las órdenes de creyente hijo de Dios, y las huestes del infierno no pueden separarlo del camino
correcto si se aferra a Dios con fe viva. La tentación no es pecado, el pecado es ceder a la tentación. 'Considérense muy dichosos' dice Santiago,
'cuando tengan que enfrentarse con diversas pruebas, pues ya saben que
la prueba de su fe produce constancia. Y la constancia debe llevar a feliz
término la obra, para que sean perfectos e íntegros, sin que les falte nada'.
Dios permite que pasemos por circunstancias que nos prueban para aumentar nuestro amor y perfeccionar nuestra confianza en él. A través de
negar el yo y de sufrir con Cristo, crecemos en gracia y en el conocimiento
de la verdad. Vendrán las pruebas, pero ellas son una evidencia de que
somos hijos de Dios. Pablo pasó por grandes pruebas, pero él no se desesperó como si su Padre celestial estuviese muerto. Se regocijó en las tribulaciones, pero deseaba, a través de la participación en los sufrimientos
de Cristo, asemejarse más a él. Que este héroe de la fe hable por sí mismo.
Él dice: 'Por eso me regocijo en debilidades, insultos, privaciones, persecuciones y dificultades que sufro por Cristo; porque cuando soy débil, entonces soy fuerte' (2 Corintios 12:10)" (Gospel Workers, [edición 1892], pp.
441, 442).
"Las tentaciones de Satanás son múltiples; pero aquellas a las cuales
se nos pide prestar atención [Santiago 1:3] son la incredulidad y la impaciencia [...]. Si no mantenemos la gracia de la paciencia nunca alcanzaremos un estado de perfección. Algunos de nosotros tenemos un
temperamento nervioso, y somos por naturaleza muy rápidos para pensar
y para actuar; pero que nadie piense que no puede aprender a ser paciente.
La paciencia es una planta que crecerá rápidamente si se la cultiva cuidadosamente.
Al llegar a conocernos bien a nosotros mismos, y combinando una firme
determinación de nuestra parte con la gracia de Dios, seremos victoriosos
y lograremos ser perfectos en todas las cosas, sin necesitar nada" (Historical Sketches of the Foreing Missions of the Seventh Day Adventists, p. 134).
Biblia en mano
Lee Santiago 1:5 y 6. ¿En qué se diferencia la sabiduría del conocimiento? ¿Qué
conexión hace Santiago entre la sabiduría y la fe?
Tendemos a pensar que la sabiduría es lo que sabemos. ¿De qué modo los siguientes textos nos muestran cuál es el otro aspecto de la verdadera sabiduría?
Santiago 1:19-21; 2:15,16; 3:13.
Lee Santiago 1:6 otra vez. Debemos pedir con fe, sin dudar. ¿No es esto difícil,
a veces? Cuando eso ocurre, es vital orar y comenzar a meditar en todas las razones que tenemos para confiar: la historia de Jesús, las profecías bíblicas y
nuestra propia experiencia personal. ¿De qué modo esto nos ayudaría a vencer
toda duda que pudiera surgir ocasionalmente?
15 | Lección para jóvenes
¡LA FE ES NUESTRA VICTORIA!
La atracción y el deseo se unen, produciendo una invitación a la satisfacción inmediata. Desafortunadamente, este engaño ofrece una ganancia a corto plazo, que no vale la pena. Estás experimentando una
tentación. Pero ¡regocíjate! Lo que importa es cómo reaccionas ante la
tentación. Si cedes, has fallado; pero "si alguno peca, tenemos ante el
Padre a un intercesor, a Jesucristo, el Justo" (1 Juan 2:1). Podemos
permitir que Cristo cubra nuestros pecados con su sangre; recibiendo,
así, perdón. Si tenemos fe en que Cristo es capaz de ayudarnos a evitar
caer en tentación, venceremos las tentaciones. Esta lucha constante
puede cansarnos, pero debemos ser pacientes, y creer en que podemos
vencer las tentaciones de este mundo.
Si permanecemos fieles, un día nuestra paciencia será completa. Se
completará aquello que hemos estado esperando pacientemente, el día
del regreso de Cristo. Si permanecemos fieles, cuando él vuelva seremos semejantes a él. Nuestra fe y nuestro deseo de verlo es lo que nos
ayuda a ser fieles y pacientes. Cuando el trabajo de nuestra paciencia
esté completo en nosotros, seremos semejantes a él: perfectos (1 Juan
3:2, 3). Por esto, recuerda lo siguiente:
¡Tu fe es importante! La fe no es un término vago que mencionamos
los cristianos. Es nuestra creencia en que Dios hará lo que dice que
hará. Nuestra relación con Dios debería comenzar con la fe y terminar
con la perfección. ¡Que este trabajo comience ahora!
¡Dios es paciente! Piensa en el hecho de que Dios creó a los seres
humanos y a este mundo hace miles de años atrás. Él ha estado esperando pacientemente durante miles de años para erradicar el pecado y
que nosotros seamos semejantes a él (Santiago 5:7). Sabiendo esto,
deberíamos ser aún más pacientes. Dios está haciendo todo lo que
puede para ayudarnos a lograr la perfección que desea ver en nosotros.
¿Estás afligido? ¡Ora! Al enfrentar las tentaciones, debemos estar
en constante comunión con Dios. Mantén tus ojos y tu mente en él, para
poder vencer (Santiago 5:13).
Biblia en mano
Lee Santiago 1:6 al 8. ¿Qué nos está diciendo aquí?
Lee Lucas 17:5 y 6. ¿Qué nos está diciendo Jesús aquí acerca de la fe?
¿Cuáles son todas las razones que tienes para confiar en Dios y en sus promesas, y vivir por fe? Piensa en esto, medita en ello, y tu fe solo aumentará.
Lección para jóvenes | 16
08
´MIÉRCOLES
Octubre
09
JUEVES
Octubre
LA “PRUEBA DE FUEGO” PARA EL CRISTIANO
El término "prueba de fuego" se refiere a una serie de pruebas que se
desarrollaron durante finales del siglo XVIII. Estas pruebas se basaban sobre
la propiedad del ácido nítrico para disolver otros metales más rápidamente
que al oro. Los buscadores de oro y los comerciantes podían utilizar este
método para distinguir entre el oro genuino y otros metales. Para confirmar
que un metal era oro, se llevaba a cabo la "prueba de fuego". La muestra se
usaba como criterio, y el grado hasta el cual se disolvía cuando se agregaba
el ácido determinaba si se trataba, o no, de oro.
Las pruebas y las tentaciones que los cristianos experimentan en la tierra
son como la "prueba de fuego". El oro es la recompensa invaluable de un
carácter cristiano y un enriquecimiento de nuestra fe en Dios. Recuerda:
Dios está más interesado por cambiar nuestro carácter que por cambiar
nuestras circunstancias. Qué irónico que las circunstancias que nos hacen
cuestionar y luchar con el Señor son las mismas que nos acercan a él. Esto
no parece tener lógica. ¿Cómo es posible que el dolor, la decepción, el enojo
y el desánimo nos lleven a una relación más profunda con Jesús? ¿Cómo
podemos asemejarnos más a Job, y admitir, con calma: "Él, en cambio, conoce mis caminos; cuando me pusiera a prueba, saldría yo puro como el
oro" (Job 23:10)?
Uno de los regalos que Dios extiende a la raza humana es el de la sabiduría. Se nos anima a que si nos falta sabiduría se la pidamos a Dios, y él
nos la dará libremente. La sabiduría expande nuestra mente a un nivel de
razonamiento al que no podríamos llegar de otra manera. Y sobre este pináculo podemos decir, como Job, que "aunque él me matare, en él esperaré"
(Job 13:15, RVR60). La sabiduría nos ayuda a observar las pruebas y las
dificultades a través de los ojos de Dios. Cuando fallamos en entender el ministerio del sufrimiento en relación con la formación de nuestro carácter, no
nos beneficiamos de lo que nos prepara para el cielo. Dios "sabe que el camino al cielo es tanto un camino a una conciencia celestial como a un lugar,
y que se trata más de un proceso que de un lugar, más una experiencia que
un fin". 1 El Cielo recompensa a aquellos que soportan pacientemente; así
que, al pasar por las "pruebas de fuego" de la vida, recordemos que aunque
nos quemen no nos disolveremos, sino que saldremos como el oro.
Biblia en mano
Compara Santiago 1:9 al 11 con Lucas 8:14; Santiago 1:27 con Mateo 25:37 al
40; Santiago 2:15 y 16 con Lucas 10:29 al 37; y Santiago 5:1 al 4 con Lucas
12:16 al 21. ¿Cuál es el mensaje común allí, para nosotros? ¿Qué advertencias
y amonestaciones podemos obtener de lo que aquí está claramente expresado?
¿Qué sucede contigo? Si eres rico o pobre, no importa; lo que interesa es cómo
te relacionas con el dinero. ¿Qué tiene el dinero, que lo hace tan potencialmente
peligroso para nuestras almas?
_______________________
1
David Asscherick, God in Pain (Berrien Springs, Mich.: Pan de Vida Productions,
2009), p. 27
17 | Lección para jóvenes
RECUERDA
Fe. Duda. Pruebas. Confianza. Estas ideas parecen inherentemente
opuestas, pero están unidas de manera intrincada. Reconocer nuestra
duda nos ayuda a ver dónde necesitamos que Dios trabaje. Las pruebas
nos empujan a confiar en Dios, a apoyarnos en él cuando todo lo demás
se cae; la clave es permanecer conectados a él. Los primeros cristianos,
enamorados de Jesús y concentrados en Aquel que había sufrido lo peor
que este mundo puede ofrecer, pudieron enfrentar las crisis con valor.
Confiaron en que Dios los sostendría y en que las pruebas refinarían su
carácter, y supieron que por el poder de Dios ellos también "vencerían al
mundo".
10
VIERNES
Octubre
CONSIDERA
» Medita y escribe sobre ocasiones en tu vida en las que los desafíos y
el dolor eran abrumadores, y cómo podías confiar en Dios para salir
adelante.
» Lee el libro Un milagro tras otro (Greg Budd, ACES, 2014). Se trata de
la lucha de Pavel Goia por permanecer del lado de Dios mientras crecía
en la Rumania comunista.
» Escribe tu propia paráfrasis de Hebreos 11, sustituyendo los nombres
con los de personas que admiras, que han demostrado fe verdadera.
Ora por los problemas más grandes que estés enfrentando, pidiendo a
Dios paciencia y perseverancia.
» Debate con un amigo sobre el significado y la naturaleza de la fe.
» Medita sobre hacia dónde ves que Dios te está guiando.
AMPLÍA
Elena de White, Los hechos de los apóstoles, p. 413.
Colaboraron esta semana: Janet Henry, Brooklyn, Nueva York, EE.UU,; Shanee John, Kingstown,
St. Vincent y las Grenadines; Laurel Beckles, Maracas Valley, Trinidad y Tobago; Tina Aquino, Rapidan, Virginia, EE.UU.; Nicole Rochester, Rosedale, Nueva York, EE.UU.; Monique Brown, Detroit,
Michigan, EE.UU.; Tompaul Wheeler, Nashville, Tennesse, EE.UU.
Lección para jóvenes | 18