No me “RETRATE”, que me roba el alma

Medellín, domingo 28
de febrero de 1993
T»
liempo en conservo ti dumo
- C olombi aimo 3
N a d ie p u e d e p e r m a n e c e r q u ie t o t o t a lm e n t e , c a d a p u ls a c ió n g e n e ra u n a s lig e ra s
v ib ra c io n e s ( . . . ) E l e s p ír itu se m u e s tr a f u e r t e , n o así la c a r n e , e s p e c ia lm e n te a q u e lla p a r te
d e su c u e r p o q u e m á s in te re s a e n la f o t o , la c a b e z a , y q u e es lo q u e m e n o s se m a n t ie n e
f ir m e . E l ú n ic o r e m e d io c o n s is te e n u t il iz a r e l in e v it a b le s u je ta c a b e z a s , t a n re c h a z a d o p o r
e l p ú b lic o c o m o in s is te n te m e n te e m p le a d o p o r e l f o t ó g r a f o . E s n e c e s a rio e n su u t iliz a c ió n
a p lic a r lo d e s p u é s d e h a b e r d is p u e s to t o d o p a ra la t o m a ( . . . ) , a ju s ta r e l s u je ta d o r al
m o d e lo , y n o é s te a a q u é l. P r e te n d e r in t r o d u c ir u n a p e rs o n a e n e l s u je ta c a b e z a s
p r e v ia m e n t e a ju s ta d o es u n t o r m e n t o , a d e m á s d e u n a fa lt a c o n t r a e l b u e n g u s to .
M a n u a l d e F o t o g r a f ía . H . V o g e l. A le m a n ia . 1 8 7 4 . D e l li b r o F o t o - A lb u m .
No me “RETRATE”, que
me roba el alma
Por Margaritainés Restrepo
Santa María
¡Qué nervios! (álate la falda. Esa
risita. No saque maleta. ¡Qué tiesu­
ra! Pilas con el copete. Pecho
embombado. ¡Péinate un poquito!
Párpados que vacilan. ¡Ojo! a esa
camisa por fuera. Esconda el pocilio
y los papeles. Derechura. La corbata
está torcida. ¡Abrácense, pues! Za­
patos brillantes... ¡Listoooos!
Esqueyonosoyfotogénico. ¿Cómo
me ves? Definitivamente, yo quedo
en todas las fotos horrible, como en
la cédula. ¿Me queda pinta la bufan­
da? Ese no es el lado bueno mío. Un
minutico me arreglo... Pa' eso que,
precisamente hoy, no estoy con el
color que me favorece. Es que yo
siento que a mi esa cámara me em­
biste.
El gordo quiere bajar de talla. El
bajito, que lo crezcan. El tuerto que
le compongan la vista. El veterano,
que le quiten años. El curtido, apare­
cer blanqueado. El feo que lo
empispen .. Ya lo han dicho algunos:
"quad natura non dat, photographia
non prestaet".
Y es que, someterse a una foto no
essencillo. Con frecuencia, toda una
parafernalia se genera, entre
"victimarios" y víctimas". Y a sus
"terribles" e irrebatibles verdades,
muchos se resisten.
TORTURA A LA VISTA
¡Ahora sí; pilas; ya voy a tomar la
foto, para que se alisten!
Foto va. Foto viene. Nacimiento,
grado, parranda. Paseo. Incendio.
Viaje. Desayuno de trabajo. Cédula.
Navidad. Pasaporte. Actooficial. Foto
va y toto viene. Cajón. Cartera. Al­
bum. Bolsillo Carro. Maleta. Pared.
Libro. Agenda. Bolsa de plástico.
Foto va. Foto viene. Y ese exceso
fotográfico no nos estimula a acer­
carnos a lo que fue la fotografía en
sus primeros años.
Hubo una vez... Que la fotografía
cupo en la clasificación "tortura".
Ese fue el chisme.
¡A y !, m e e s tá
t a l la n d o
Para asegurar que el cliente no
moviera la cabeza, los fotógrafos
usaban unos terribles sujetadores. De
allá debieron sacar la idea los
dentistas para sus sillas. Yparece que
tomarse una loto era casi, los mismo
que ir a la dentlsteria. Del libro
Historia de la fotografía de Salvat.
LLORE, MIJO
¡Quieto en primera! Con el sol
encima -luz artificial noexiste . Vein­
te, quince, ocho minutos(conel tiem­
po disminuye a tres o cuatro).
Lagrimee, si es del caso. Le permito
parpadear -si cierra losojos, después
con retoque selosabrimos-. Quizá le
untamos con harina la cara, o pretie­
re broncearse, de paso. Pero, ahora
sí... No se mueva ni un milímetro.
No era tan mamey tomar fotos
hace 140 ó 150 años. Era mucho lo
que se gozaba v más lo que se sufría,
en los cada vez más solicitados estu­
dios. Salones con techo de cristal
azul -especies de invernaderos-, oja­
lá "calefactados" para escapar del
frío, en donde, afalta de luz artificial,
el sol asomara a su gusto.
Cinco, seis lotos por día. Experi­
mente por la mañana; y por la tarde. Busque efectos con espejos y corti­
nas claras y oscuras; frascos con lí­
quidos de colores. Y, para que el
cliente calibre el resultado, ahí esta
un muestrario con cartones.
Necesito un ayudante que mida el
tiempo -con la experiencia de un
profesional en huevos tibios-. Nece­
sitoun retocador y unayudante. ¿Foto
de niño? Por inquieto... cobro el do-
Fuentes de consulta
EntrevisUí: luán Luis Mejia Arango. Gabriel Carvajal. RobertoMonloya. Alberto
Aguirre. Darío Rui;. VVilliamArango. Eduardo Serrano.
Libfos ydocumento» Sobre Fotografía, de Susan Sontag. Historia de la Fotograba
en Colombia, de Eduardo Serrano. Foto Album -susartosdorados; 1858-1920 -. de
EllenMaas First P_hotographs, de Cail Buckland Historiade la fotograba, desdesus
orígenes hasta nuestros días, de Beaumont Newball. Historia de la Fotograba, de
Helmut y Alison Cernsheim Libro Guinness de los records - 1992. Historia de la
Fotografía, de Marie loup Sougez Eureka, de Edward de Bono. Historia de la
Fotografía, de lean A Keim
Life, 150 años de fotografía. Historia de la fotografía de lean Claude lemagny y
André Rouille. Testo de luán luis Mejía A, para la Enciclopedia de Colombia del
Círculodelectores. Historiadelafotografía. Salvat Editores. RevistaCamera. Historia
deAntioquia, dirigidapor|orgeOrlandoMeló. Tesisdegiado: Vigencladelafotograba
documental enlaprensaescrita;IraslashuellasdeHenri CartierBresson, enel contexto
deMelitónRodrigue/ deAdrianaMaríaGómez F yGloriaNivia RamírezG.: Facultad
deComunicaciónSocial, U.P B Reseñasdefotógrafosrealizadaspor )uanLuisMejfa,
Carlos(oséRestrepo. Santiagolondofto. Darío Rui/, DiegoHerrera yFelipeEscobar
Archivode Faes-FundaciónAntioquerta para losEstudiosSociales-.
Archivo de H COLOMBIANO
ble. ¿Fotos de noche? Ni por el
chucho. Y ¡récele a San Pedro, para
que el clima no nos juegue sucio!
CON SILBATO
¿Que ustedes muy chic yquiere su
retrato? Quédese quieto un rato. Po­
demosdisimular, después de la reve­
lada, el trípode de ese "sujetador"
que le debe coger la cabeza por
detrás, a la altura de la nuca (tipo
vieja silla de dentistería), para garan­
tizar, en el momento de la loma, la
M u y T o r o S e n ta d o
Alegó y alegó... que una foto era
“mala medicina"; que si se la tomaban
perdía parte de su espíritu. Cuentan
los gringos chismosos que Toro
Sentado, líder Sloux de la batalla que
Little Big Hom, que acabó con el
general Custer, al fin se quedó muy
sentado, cuando le ofrecieron 50
dólares. Del libro First Photograph, de
Gali Buckland.
¡P s s s s s , p s s s s s í
Como el modelito se tenia que quedar
18 minutos estatua, Félix Tournachon
en 1860 y punta tuvo que tomar su
foto con una maniquí. Del libro First
Photograph, de 6ail Buckland.
inmovilidad necesaria. Y sujetador
también tenemos para pies y manos.
Gran ganga, para hoy: "10 personas
por el precio de una". Terror se le
tenía (por la multiplicación del movi­
miento) a las fotos en barra.
Para catacumbas y vistas subterrá­
neas, maniquíes, porque no hay hu­
mano que seaguante permanecer 18
minutos estatua. Para ver si seaquie­
tan los animales, intentemos con sil­
batos. A los niños, sentémoslos en
sillas con orificios en la parte del
espaldar, para que los sostenga,
camufladamente, un grande. A to­
dos, para no salir movidos, les reco­
mendamos apoyarse, en brazos de
sillas, mesas, escritorios, columnas,
reclinatorio, cajas.
LA ÑAPA
Un proceso de traca mandraca. Y,
por añadidura, en el estudio fotográ­
fico, lodo un escenario.
Rocasde cartón o lona. Perrito«, de
papel maché. Macetas con plantas
de tela. Alfombras. Mesitas de altura
autoajustable. Para chicos, bancas,
silla-canasta y caballitos. Para usos
varios, bicicletas y simulac ros de
barcos. Renacimiento medio
romanticón para losjóvenes. Anima­
les disecados, por si las moscas.
Medio rococó, recargadongo. para
adultos. Cojines. Una balaustradatipo
castillo. Una estratégica columna.
Pieles para tapar pies.
Y, en cuanto a ropa, mi señor, nada
de aparecerse a su amaño... Aquí
tengo vestidos, mantillas, sobreto­
dos. También entre clientes se
intercambia. Usted, mi general, para
que le quede al derecho, cambíese
cte lado esa insignia militar que luce
en el pecho. Usted, morena, traje
oscuro; casaca negra para el señor;
traje de rayas para el niño; y claro
para la rubia. Eso si: el blanco para
ninguna. ¿La ñapa? El producto final
se reloca, disimulamos detectkos especiede cirugía-; seilumina. ¡Ven­
ga! ¡Siga!
A la cárcel
por no dar
foto
*A la cárcel debe llevar la
policía a todo aquel que,
estando para casarse o se halle
recién casado no regale a su
novia o esposa con Tas fotogra­
fías que hacen Rodrigue; y
laramillo, sobre telas finas
como lino y seda. Y en verdad
que no puede concebirse un
obsequio de más novedad y
más bello que un ajuar de ropa
blanca marcado con el mismo
retrato de su dueño. Se advierte
que la belleza y acabado están
en proporción a la fineza del
tejido.'
Aviso publicado por El
Movimiento. Medellín, sep­
tiembre 4 de 1893.
Por más montañeros y
subdesarrollados que fuéramos,
en Colombia supimos de la
fotografía bastante rápido.
La noticia del nuevo invento,
apareció en El Observador
(Santafé de Bogotá), a los tres
meses de ser lanzado al mundo,
desde Francia. Ese mismo año
llegaba a estas tierras el Barón
lean Bautiste Louis Gros, cónsul
francés a quien se atribuye u
primera foto conocida del país:
La Calle del Observatorio en
Santafé de Bogotá (1842).
Cuentan que las primeras
fotos eran, por lo caras, veneno­
sas. Un daguerrotipo por 10
pesos; una casa por $450 y
hasta $1.500 (algunos iguala­
ban el precio de ambos).
El primer fotógrafo criollo
A MI NO
Luis García Hevia. En un
¡A mí no me tome fotos! Manos en seria
muy rural y pastoril
la cara. Carrera. Piedra. ¡Fuera con Medellín
con el primer estudio
sucámara! /Y con que me retribuye? aterrizó
abierto
un colombiano,
Un día fue tortura... Pero, para Fermín por
Isaza
(1848).
algunos, todavía, lo sigue siendo.
Muchos daguerrotipistas
Una foto es agresión para ciertas viajaron
por toda la nación.
culturas árabes. Hay regiones de Comentan
que. al comenzar
Oceania y Africa, que t onservan la este siglo, más
de cien estudios
idea de que el hombre dibujaba, en
en esla patria. Los
las cavernas, a los animales que, teníamos
fotógrafos dieron testimonio de
después, se comía o cazaba.
Me toma foto, pero me paga, dirán las guerras y, también, de las
indios cunas de San Blaso, en Nuevo grandes transformaciones
México, los pueblos Taos. Persecu­ nacionales.
ción te puede costar, una cámara en
funcionamiento, en la Guajira. Más
de un campesino nuestro la rechaza
“■Fotografía González. Este
y, como por agüero ni del tema te establecimiento
entre el
hablan. "Ese no soy yo" te alegarán Parque ríe Berriosituado
la
unas tribus: esa, mi fachada, que Gobernación calley de
Bolívar,
aparece en la foto es distorsionada.
local 81, y frente a la "viña del
Sí. Todavía hoy, una "retratada" es chucho",
continúa sus trabajos
considerada "saqueo" interior,
con bastante regularidad. Es
intromisión, agresión, olimpic o robo condición
en mi establecimien­
to no entregar trabajo sino a
entera satisfación del cliente.
COMPLICE
trabajo haya de
¡Qué nervios! Jálate la falda. Esa Aunque el repetidas
veces, no
risita. Pecho embombado. ¡Péinate ejecutarse
le cobrará sino un negativo y
un poquito! Párpados que vacilan. se
no
se
le
llamará
necio por usar
¡Ojo! La corbata está torcida. ¡Abrá­ de su derecho. Esto
con
el fin
cense! ¡Listoooos!
satisfacer el gusto más
Una loto. Se guarda. Se mira. Se de
refinado. Trabajo a domicilio a
busca. Se insulta. Setoca. Se rompe.
precio sin competencia y al
Sebesa. Hay quien la reza -"tráigame alcance
del arte. Sergio
una intic o v le ha« emosel trabajito
S.*
. Hay quien -motivo prácticas del González
Medellín, mayo
vudú y de la magia negra- la chuza. 23EldeCascabel.
1899.
Y alguna chica triste de vida alegre,
para castigar al ingrato la programa.
Una foto. No es fác il renunciar a
ella. No es fácil, a veces, aceptarla.
Y a juzgar per los avisos...
Alguito más, cualquier día, en su anunciar,
para nuestros fotógra­
"envés", se esculca. Pero en la mo­
fue algo importante.
derna invasión fotográfica susentido fos,Ofrecían
tarjetas de visita,
íntimo muchas veces se diluye.
vistas
estereoscópicas
y últimos
¡Qué nervios! Pilas con el copete. adelantos. Botero y Gregory,
¡Ojo! a esa camisa por fuera... copras
de la mujer-hombre de
¡Listoooo!
Jericó a $ 1.60 el par, en los dos
trajes. Francisco Moreno, en
Rionegro, fotografías de la
comunión general de
ejercitantes.
En la segunda mitad del siglo
pasado... VVills y Restrepo
aseguraban, en la prensa, que
tenían retratos sobre vidrio a 8
reales, que sus fotos no cogían
ese feo color amarillento y que
el nuevo edificio, en construc­
ción sería digno de su clientela;
además, hablaban de un buen
surtido de fotografías de próceres, para los álbumes.
En la segunda mitad del siglo
pasado. F. R. Moreno prometía
enseñar fotografía, el arte que
más amateurs tenía en el
mundo civilizado. Escobar,
fotos "con un perfecto pareci­
do*. Y Antonio M. Z. de la
Cuadra P., retratos de "duración
ilimitada" y, a quien pusiera en
duda su oferta les ponía, como
prueba, algunos hechos en
Cartagena, Santa Marta y
Barranquilla tres años antes.