sí en las alturas - Peruana

El Peruano
Año 106 // 3ª etapa // 454 // Viernes 15 de abril de 2016
DIARIO OFICIAL
FRANCO CA
CARRANZA
EL TOQUE MÁGICO
DE LA TROMPETA
La prolongada
prolongad trayectoria de un hombre
comprometido con la música. Pág. 2
comprometid
DIÁLOGOS
RETOS
GLOBALES
PARA LA
CULTURA
Pág. 6
TEATRO
T
D
DISCURSO
Y PRÁCTICA
DEL AMOR
D
Pág. 3
OSCAR FARJE
ROMANCE, FIESTA Y TRADICIÓN
SÍ EN LAS ALTURAS
UNA BODA AL ESTILO DEL MANTARO Págs. 4 y 5
2 TRAYECTORIAS
Viernes 15 de abril de 2016. El Peruano
Su abuelo José,
acostumbrado
a escuchar
buena música
en casa,
le sugirió
probar con
la trompeta.
Y así fue.
A
penas tenía catorce años cuando el director de
la banda de música del colegio
San Norberto tocaba la puerta de su salón para sacarlo de
clase. “Profesor –le decía al
maestro a cargo–, ¿le podría
dar permiso a Carranza para
el ensayo?”.
Al fondo de la clase, el inquieto Franco ya conocía esa
rutina. Le bastaba ver a don
Augusto Pasco, director de la
banda, en esa gestión para que
le empezaran a picar los pies.
Esperaba ansioso el bendito
permiso y a la señal de positivo, cogía sus cosas y volaba.
Cuando no funcionaba la
gestión, Franco simplemente
se escapaba de la clase. Y es
que sabía que la música era lo
suyo. En la banda de su colegio de la urbanización Santa
Catalina, en La Victoria, empezó tocando la tarola. Su
abuelo José, acostumbrado
a escuchar buena música en
casa, le sugirió probar con la
trompeta. Y así fue. En esa
misma banda del colegio,
Franco Carranza Cárdenas
cogió la trompeta, la probó,
se enamoró y la hizo suya
para siempre.
ESCUELA DE ROCK
Antes de ser maestro y primera trompeta de la Orquesta Sinfónica Nacional,
docente del Conservatorio
Nacional de Música y artista
exclusivo de la irma Yamaha, Franco Carranza fue profesor en el taller Arte para
Crecer y en el colegio Los
Reyes Rojos de Barranco.
Fue en estas idas y venidas
que se cruzó con el efervescente mundo del rock.
Así, jovenzuelo, se integró
como trompetista de bandas como La Pura Purita, La
Crisis, Los Nuevos Predicadores, y otras cuyos éxitos
hacían mover el esqueleto
a los jóvenes de esos años.
Integró también la banda
llamada Los Diablos Azules,
con la que grabó el videoclip
de una canción que ya pegaba en las radios. El día del rodaje se vistió de jean y aquel
Variedades
Maestro. Cultivada con ética y pasión, la música es un instrumento que puede ayudarnos a cambiar el mundo, opina Franco Carranza.
SEÑOR DE LA
TROMPETA
Solía escaparse de sus clases para correr a ensayar con la banda de música del colegio, porque sabía que el arte era lo suyo.
Integró históricos grupos de rock limeño y hoy es la primera
trompeta de la Orquesta Sinfónica Nacional.
TEXTO HUGO GRÁNDEZ
polo amarillo con la inscripción CCCP en el pecho, cogió
su trompeta y pasó horas de
horas grabando. ‘Porno music’ se titulaba aquel hit, en
que él interpretaba un excepcional solo de trompeta, y
pegó tan bien que incluso fue
utilizada en trailers de las
películas peruanas Mañana
te cuento y ¡Asu Mare!
Después de cada meta
cumplida en la vida de Franco, siempre ha habido una
nueva. Por eso, cuando tenía
ARTE DE TALLA
T
exturas es el nombre de la última producción
que Franco Carranza presentará en el Foyer
del Gran Teatro Nacional el 27 de abril. Incluye
nueve temas de música contemporánea compuestos por músicos peruanos de la talla de Antonio
Gervasoni, Saviel Cuentas y Abraham Padilla.
25 años postuló a una beca
de la Orquesta Juvenil de las
Américas (YAO). Y la ganó.
La beca consistía en dos
semanas de aprendizaje con
maestros del más alto nivel
en Islas Margaritas, Venezuela, y otras dos semanas de
gira. Pero lo más importante
fue su incorporación como
trompetista oicial de la orquesta. Fueron cinco años
de presentaciones en Brasil,
Argentina, Colombia, Uruguay, Chile, Ecuador, Perú y
Venezuela.
ENERGÍA INTERIOR
Franco Carranza empezó sus
estudios en el Conservatorio
Nacional de Música cuando
tenía dieciocho años. Desde
antes de ingresar, ya se
entregaba de lleno a este
arte. Tanto así que Francy,
su madre, recuerda que
la primera trompeta se la
compró él mismo con sus
ingresos. “Era un fanático
del skateboard. Lo dominaba
y conocía tan bien esa tablita
con ruedas que hasta hacía
reparaciones en el barrio.
Con eso juntó y se compró su
primera trompeta. Él solito”.
Cursaba el tercer año del
Conservatorio cuando se le
presentó una gran oportunidad. La Orquesta Sinfónica Nacional puso en concurso una
plaza de músico. Se presentó y,
por supuesto, se la ganó.
La orquesta es su trabajo, pero también ha sido un
espacio para crecer musicalmente, y para amar. Un
sentimiento especial que
toca a Sebastián, su hijo de
ocho años, su razón de vivir
y quien desde pequeño lo
acompaña a muchos ensayos
y presentaciones. “Un niño
de mucha disciplina que está
muy tranquilo mientras papá
está trabajando, pues sabe
que no lo debe interrumpir”,
cuenta Francy. Un espacio
donde también se selló el
amor con Paloma Chávez,
su esposa, lautista de la
Sinfónica.
Franco asegura que para
ser un buen músico es necesario practicar bastante, escuchar mucha música, pero
sobre todo fortalecer las ganas de hacer las cosas, esa
energía interna que mueve a
las personas y a los músicos,
en particular, para alcanzar
sus sueños. Porque, no cabe
duda –dice–, la música es
un instrumento que puede
cambiar el mundo.
Director fundador: Clemente Palma | Director (e): Félix Alberto Paz Quiroz | Editor: César Chaman Alarcón | Jefe de Edición Gráfica: Daniel Chang Llerena
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Variedades
Viernes 15 de abril de 2016. El Peruano
ESCENARIOS 3
CASTIGO
DE AMOR
En clave de humor, una obra de teatro explora los
mecanismos del amor y sus imprevisibles resultados para plantear que, más allá de advertencias
y señales de peligro, el sentimiento triunfa sobre
los discursos del pesimismo y el desasosiego.
TEXTO CÉSAR CHAMAN
B
ien al terno y a la
corbata verde esmeralda, el doctor
Ezequiel García
va a presentar su
nuevo libro, Como castigo por
mis pecados. Con la esperanza
de convertir su obra en best
seller, y según las reglas del
marketing moderno, ha decidido hacerlo con disertación
sobre los pasos fundamentales
para entender el amor.
Como se trata de una
conferencia, al ingresar en
la sala el público se topa
con dos impulsadores –Ana
y Juan– que entregan el programa de la jornada y repiten
a todo el mundo la misma
frase: “¡Hoy empieza el cambio!”. Ambos serán el apoyo
de García para desarrollar
un libreto que respalda cada
una de sus airmaciones.
“El teatro suele ocuparse
del amor de forma trágica o
usarlo como excusa para desplegar un argumento cuya
temática central está alejada
de él”, opina Tirso Causillas,
autor y actor de ‘Y Dios creo
el amor como castigo por mis
pecados’, obra que escarba, en
clave de humor, los misterios
del enamoramiento y los discursos articulados en torno al
romance.
DESDE LA IRONÍA
“Lo que más me atrae es la
posibilidad de pensar en el
amor desde la risa y la ironía,
pero también desde lo poético –acota la directora de la
“Me atrae la
posibilidad de
pensar en el
amor desde la
risa y la ironía,
pero también
desde lo
poético”.
obra, Nani Pease–. El texto
de Tirso combina poemas
hermosos y desgarradores,
o cargados de ingenuidad y
de ganas de creer, con escenas cómicas de un nivel de
distanciamiento e ironía del
amor insólitos”.
Aspirante a gurú de las
emociones humanas, el psicólogo García intenta desentrañar en su ponencia los mecanismos del enamoramiento y
las etapas que lo caracterizan:
soledad, búsqueda, encuentro
y tragedia. Y en ese camino,
dando órdenes y contraórdenes a sus actores y a su músico
de apoyo, revela una importante dosis de descreimiento
respecto al potencial del amor.
Por todas partes, hay un uso
perverso de la psicología para
tratar de vendernos recetas
que no son reales, comenta
Pease.
“El amor es problemático
–admite Causillas–; es diícil,
como sentimiento está en
constante construcción, tiene
que ser repensado para mantenerse en el tiempo y está lleno
de conlictos”.
“Creo que si hay algo que la
obra dice, más bien, es que el
amor es inevitablemente necesario, pese a lo problemático”,
airma la directora.
Hay en la obra una lógica
que exige pensar en el pecado sobre el cual se desata la
supuesta maldición del amor.
Y pareciera que la falta más
Elenco. Ángel Valdés (Juan) y Fabiola Coloma (Ana) suman su talento a Tirso Causillas y ‘Loko’ Pérez.
EN EL MALI
L
a actual temporada en el Museo de Arte de
Lima (Mali) es la tercera reposición de Como
castigo por mis pecados. La obra se estrenó
hace un año en el teatro Mocha Graña y luego se
presentó, en tres fechas, en el centro cultural
Ricardo Palma de Miraflores con una muy buena
acogida del público. Hasta el 25 de abril , la obra
va de viernes a lunes en el Mali (Paseo Colón 125,
Lima): los viernes, sábados y lunes a las 19:00
horas. Los domingos va a las 20:00 horas.
grave es el enamoramiento
mismo entre los dos actores que apoyan al gurú y, a
la par, su independización
de las órdenes que él emite.
“Creo que la falta más grave
para el doctor García es lo que
él termina diciendo en la obra:
que el amor te fuerza tercamente a creer en él, más allá
incluso de tu propia voluntad.
Ese es el castigo. Por eso Ezequiel no logra irse al inal de la
obra, no logra abrir la puerta:
no hay salida”, detalla Nani
Pease.
BESO CÚSPIDE
“La rebelión de Ana y Juan
representa, en todo caso,
el triunfo del amor contra
Ezequiel, pero al mismo
tiempo es el triunfo de la
constatación de que solo
terminas siendo capaz de
amar si antes te has conectado contigo mismo”.
“La cúspide de esa rebelión
es un primer beso –interviene
Causillas–. Creo que el cuarto
movimiento de la obra intenta
decir eso, que antes del primer
paso hacia la aventura de amar
a otro hay como veinte barreras que saltar”.
¿Hay un Ezequiel García aguándonos la iesta del
amor en la vida de cada uno
de nosotros? “Por supuesto –
responde Nani Pease–; sobre
todo porque hay un montón de
evidencia para desconiar, para
dudar. La propia experiencia,
sobre todo”. Sin embargo, el
amor siempre triunfa sobre el
discurso, sentencia Causillas.
4 FIESTAS
Variedades
¡BODA EN
EL VALLE!
¿Qué sucede cuando una novia de los pueblos
del valle del Mantaro se casa con un afuerino?
¿La palpa y otras tradiciones quedan relegadas?
¿O se goza por igual?
TEXTO JOSÉ VADILLO / FOTOS OSCAR FARJE
A
la medianoche,
cuando la iesta
ya era solo jirones de música,
de compases de
folclor latinoamericano que
llegaban desde la plaza, de pasitos de tunantada, was, was,
de saludes que se abrigaban
con botellas de cerveza destapadas a fuerza de dientes,
anillos, choque de chapas,
ellos –Josy y Beto, que para
esas horas ya estaban unidos
por las leyes de Dios y los hombres– preirieron sacarse los
zapatos y dormir a pierna suelta antes que pensar en hacer
otras cosas para las que, total,
les quedan todas las noches de
su vida en común.
Dormir felices era lo justo,
el colorín colorado para una
iesta de matrimonio que
quedará inscrita en la historia de Huachac. No por menos
le habían dedicado año y medio a planiicarla, desde el día
en que Beto llegó con su cara
bonachona de siempre, pero
nervioso, hasta la casa de sus
futuros suegros y de sus tres
cuñados, para pedir la mano
de Josy.
A Huachac, pueblo de la
margen derecha del valle del
Mantaro, lo conocen por el sobrenombre de ‘La sucursal del
cielo’. Y esa mañana del sábado 2 de abril amaneció con la
plaza del pueblo hermoseada
con toldos. A las 9:00 horas, fa-
miliares y amigos, empezaron
a llegar vestidos con sus mejores galas desde Lima, Tarma,
Huancayo, La Oroya. Las casas
de parientes y los dos hoteles
huachaquinos colapsaron por
el número de visitantes.
Josy Ollero, de 30 años de
edad, hacía realidad su sueño de casarse en el altar de la
iglesia de su pueblo. Lo había
soñado desde niña. La novia
estaba radiante: vestía una falda blanca de ‘talqueado’, que
El Perua
FIESTAS 5
ano. Viernes 15 de abril de 2016
Sobre cerrado. En el valle del Mantaro, la palpa es una manera particular de compartir esperanzas.
complican: la tradición puja
para que la tradición se respete al máximo. Beto y Josy siempre quisieron casarse bailando
con una banda típica y lo cumplieron. Claro, hubo discusión
en casa de los Ollero, porque
en Huachac los matrimonios
se hacen con orquesta típica
(las bandas típicas son para
iestas patronales). Al inal, los
novios se salieron con la suya
y los tacos de ella hacían chasquidos sobre el asfalto cuando
la banda lanzó sus primeros
compases. El amor estaba en el
aire y sabía de huainos, huaylas y tunantadas.
Para evitarse problemas
y ahorrarse billetes, muchos
ya preieren casarse en Lima,
pero Josy y Beto querían una
iesta tradicional: en la capital
de la República no hubieran
podido cerrar tan fácilmente
la plaza de ningún distrito y
gozar en un ambiente familiar
y con su música favorita.
las mujeres del centro utilizan
para bailar huaylas y santiago, y en la base la adornó con
un bordado que compró en el
Mercado Modelo de Huancayo.
Él, Beto Cóndor, también de 30,
llegó al altar vestido de terno
azul y corbata nacarada.
A PLAZA CERRADA
Se habían conocido tres años
y ocho meses antes, en una
iesta patronal en el distrito
de San Pedro de Cajas, Tarma,
de donde eran los abuelos de
ambos, pero uno venía de
Huachac y el otro de La Oroya.
Bailaron toda la noche. A Josy
le había sorprendido la caballerosidad de él, poco común
ya entre los chicos. Ahí se inició el romance. El soundtrack
del lechazo de amor fue una
banda típica.
Cuando una pareja quiere
casarse en un pueblo del valle
del Mantaro y uno de los novios es afuerino, las cosas se
do, causa y arroz a la jardinera
hablan de la gran convocatoria
de visitantes, resumida en las
fotos de los invitados. Como la
tribu de la familia Huertas, que
llegó en buses y autos desde
Lima y solo se volvieron tras
calmar su sed de baile y dejar vacías botellas de cebada
fermentada. Todo sea por desearles parabienes a los recién
casados.
Pero la iesta se hace para
todos los habitantes del pueblo y hasta los vendedores
ambulantes son invitados a
compartir el almuerzo. Es la
tradición huachaquina: no
negar un plato a nadie.
El orden de los factores
no altera la diversión: la boda
religiosa empezó a las 10 de
la mañana y 60 minutos más
tarde, la civil, en el mismo
paralelepípedo de la plaza en
ciernes, donde los dos jóvenes
se juraron amor eterno.
A las dos de la tarde, tras
el almuerzo, empezó la palpa
o saludo a los recién casados.
Si la cuestión era entre vecinos del valle del Mantaro, la
costumbre se hace una competencia para ver qué familias
dan más. Pero debido a que el
novio venía de los extramuros
del valle, la regla fue que nadie
estaba obligado y que quienes
querían regalar algo lo hicieran mejor en un sobre manila y
evitar así las confrontaciones.
Aun así, las tías lejanas
llegaron con lo típico para un
matrimonio huachaquino: frazadas y edredones para que
no falte calor en la cama de los
esposos en estreno, amén de
ollas arroceras, teteras, vasos,
sombreros, mantas, un refrigerador y un centro de entretenimiento (este último ayuda a
que los matrimonios en costa,
sierra y selva se prolonguen).
COMO DIOS MANDA
EL DESPERTAR
“Es la primera vez que alguien
en Huachac se casa en la plaza”, cuenta orgullosa la novia,
después de recordar gestiones
para asegurar seguridad, limpieza y alumbrado nocturno
para un matrimonio como
Dios manda.
Aunque hubo cosas que les
regalaron –como decenas de
cajas de cerveza o la presencia
del grupo Sur Andino–, calculan que la inversión en el
matrimonio rodeó los 47,000
soles. Y los 870 platos de asa-
Era la medianoche y en la plaza
empezaban a encenderse las
fogatas, una nueva tradición
que ha llegado con la transculturización a Huachac. Los
ya esposos dormían el uno al
lado del otro, extenuados, pero
con el despertador puesto a
las 6:00 de la mañana para
alistar el desayuno con caldo
de carnero, cafecito y panqueques para los familiares.
Y así agradecer su presencia,
su largo viaje. Que vivan los
recién casados. ¡Salud!
A celebrar. El colorido de la fiesta se enriquece con pirotecnia.
6 CONTEXTOS
Viernes 15 de abril de 2016. El Peruano
Variedades
DIÁLOGO Y
CULTURA
La revolución digital, la aparición de nuevos centros políticos en el mundo, la consolidación de
voces emergentes y el proceso de globalización,
más allá de sus dimensiones económicas, obligan
a repensar los papeles del arte y la responsabilidad
de las agencias de intercambio cultural.
TEXTO CAROLA DÜRR (*) / FOTO MARTÍN LEÓN
E
n 1966 la comunicación solía funcionar de la siguiente
manera: uno escribía una carta, la
llevaba al correo, y cuatro a
seis semanas más tarde esta
llegaba a su destino. En casos
muy urgentes, con un teléfono
de disco giratorio se llamaba
a la compañía para intentar
establecer una conexión con
el número deseado, lo que con
frecuencia podía durar una
hora. Una llamada costaba
casi una fortuna.
¿Cómo hacer, entonces,
para informarse sobre la cultura de otras naciones? ¿Quién
estaría dispuesto a tomarse
tamaño esfuerzo? Hace cincuenta años, establecer vínculos culturales era una tarea
muy agotadora, pero, a la vez,
sumamente importante. En
especial para Alemania, que
había iniciado una transformación intensa, lo que incluía
procesar y asimilar las responsabilidades derivadas de
su pasado reciente. El país
necesitaba reconectarse con
el mundo en una dimensión
cultural y no solo mediante
su economía.
LABOR CULTURAL
La fundación del GoetheInstitut en Alemania sirvió
al inicio para la formación de
docentes foráneos en lengua
alemana. Luego, a mediados
TEMAS CARDINALES
E
ste año el Goethe-Institut celebra 50
años en el Perú. En estas cinco décadas
ha sido el principal espacio de formación
en lengua alemana en el país y, también, un
destacado centro de extensión cultural y del
arte. Para los siguientes años, desea aportar
en tres temas cardinales: ¿qué será del espacio
urbano, cómo nos movilizaremos las personas
en él?, ¿qué posibilidades de participación en
los procesos de transformación social tenemos,
o deberíamos tener?, y ¿qué pueden aportar el
arte y la cultura para dar forma al futuro?
de la década de 1960, Alemania irma con el Perú un
convenio de cooperación cultural y, poco después, en 1966
el Goethe-Institut inicia sus
actividades en Lima. Al inal
de esa década, el instituto,
además de su programa de
idioma, comienza a ofrecer
una programación cultural
que, inspirada por las protestas estudiantiles de 1968,
buscó concentrarse en temas
de relevancia sociopolítica y
en el arte de vanguardia.
Cada nación desarrolla sus
lineamientos de política exterior; y en el caso de Alemania,
a partir de 1970, el trabajo
cultural es el tercer pilar de
esta política. Por ello, un rol
esencial en el proceso de esta
reorientación fue asumido
por los hacedores de cultura
alemanes: ilósofos, pintores,
escritores y cineastas, entre
otros. A todos ellos, la confrontación intelectual y emocional
con la propia historia les llevó
a romper radicalmente con
las maneras de ver y hacer las
cosas. Sintieron que urgían
nuevos contenidos y nuevas
formas.
La caída del muro de
Berlín en 1989, el acelerado crecimiento del tráico
aéreo y la revolución digital
cambiaron profundamente
el orden mundial a partir
de los años 90. Han surgido
nuevos centros políticos. El
diálogo Sur-Sur ha ganado
peso. Muchos de los países
‘en vías de desarrollo’ han
dado considerables saltos
en su crecimiento económico. El intercambio internacional se ha dinamizado
en todo nivel, impulsando
a los actores culturales a
repensar lo que signiica,
Intercambio. Las ideas tradicionales sobre cultura se renuevan como resultado de la globalización.
La separación
tradicional
entre las áreas
del arte en
géneros, como
teatro, video,
artes plásticas,
etcétera,
ha perdido
claridad.
por ejemplo, ser una o un
‘artista’, más allá de la identidad nacional o de la propia
especialización profesional.
NUEVO ESCENARIO
Si hablamos del trabajo
cultural internacional en la
actualidad, este también se
transforma: ya no resalta la
bilateralidad y tampoco la urgencia de la representación.
Lo que hoy guía las decisiones de instituciones como el
Goethe-Institut es la idea de
potenciar la conectividad de
los hacedores de cultura, a
escala local, nacional, continental y mundial. Proveer
marcos, lugares, plataformas para el diálogo y para
que se puedan construir las
redes que el mundo necesita,
presenciales o digitales. Promocionar el aprendizaje de
los idiomas del mundo, como
entrada a las diversas culturas, resulta fundamental en
esta misión.
En paralelo a esta redeinición, la separación tradicional entre las áreas del
arte en géneros, como teatro,
video, cine, artes plásticas,
etcétera, ha perdido clari-
dad, ya que estas vienen
creando cada vez más intersecciones y concurrencias:
hace tiempo que el video y
el mapping han ingresado
al teatro; la fotograía se ha
abierto a las otras artes con
la tridimensionalidad; y ha
surgido una gran diversidad
de disciplinas combinadas
que conectan, por ejemplo,
el arte con internet.
Esta hibridación acelerada
requiere de nuevos formatos,
de un pensar y sentir fuera
de los parámetros acostumbrados. Se necesitarán más
agencias e instituciones que
apoyen la producción de impulsos y que ofrezcan espacios
para la relexión experimental compartida. El GoetheInstitut espera seguir siendo
una de ellas en los próximos
cincuenta años.
(*) Directora del Goethe-Institut Perú.
Variedades
Viernes 15 de abril de 2016. El Peruano
TESTIMONIO 7
“En siete años,
el grupo ha
proyectado
su acción en
la periferia de
Lima Norte,
jurisdicción de
la diócesis de
Carabayllo”.
AVENTURA DE FE
Del discurso de la solidaridad a su práctica cotidiana hay mucho más que un sermón de distancia. En la periferia de Lima, una misión cristiana formada por niños,
jóvenes y adultos hace de la inmersión un camino hacia la realización de la fe.
TEXTO RENZO CHÁVEZ
U
no de los mensajes más fuertes
de la prédica del
papa Francisco
e s l a ent r e g a
desinteresada por el prójimo, servir a Jesucristo en el
pobre. Esta idea ha generado críticas y algunos incluso
piensan que es descabellada; sin embargo, llevarla
a la práctica es una de las
acciones más satisfactorias
que pueden existir para un
cristiano. Así lo demuestran
los misioneros toribianos.
Forman un grupo de alrededor de quince personas,
de diferentes ocupaciones,
pero con un espacio que los
uniica: todos participan en
una comunidad parroquial,
en un espacio de catequesis
o liturgia, según se sientan
más a gusto.
Este hidalgo grupo tiene
siete años acudiendo a asentamientos humanos para instalarse por un mes, quedarse
a vivir con la comunidad y
realizar su labor de compartir el mensaje del Evangelio.
Todos aquellos que conocen y sienten lo que es ayudar
al prójimo ven con esperanza
a los misioneros toribianos.
Quizás fue por eso que me
uní y que, al igual que mis
hermanos, me dejé llevar por
ese sentimiento admirable de
la caridad.
PRÁCTICA SOLIDARIA
En siete años, el grupo ha
proyectado su acción en la
periferia de Lima Norte, jurisdicción de la diócesis de
Carabayllo, a la que pertenecemos. Provenimos de la
Vicaría II, porque la misión es
LA TOLERANCIA
“
Como misioneros toribianos, hacemos más
que una simple labor social: no solo llevamos
ayuda, sino que también enseñamos a la
gente, colaboramos en la formación de nuestros
hermanos en diversos aspectos. Promovemos
la convivencia en paz, la tolerancia y el respeto
mutuo, incluso con –o empezando por– los
seguidores de otras religiones”.
una extensión de la Escuela
de Evangelización y Catequesis de ese espacio. La escuela nos da la parte teórica; la
práctica es lo más hermoso.
En enero vamos a la escuela y en febrero dejamos
todo –casa, familia y hasta
trabajo– por ir al encuentro
de Jesucristo en el pobre, en
tantas personas de los barrios en los que nos internamos, en las procesiones de
la Virgen María, en cada viacrucis esceniicado y en los
niños que participan en las
vacaciones útiles gratuitas.
Sus sonrisas, su fe y devoción
nos motivan a perseverar en
la misión.
El asesor espiritual es
el presbítero Raúl Cornejo,
director de nuestra escuela de catequesis y delegado
nacional del Óbolo de San
Pedro, institución que ayuda
a hacer la caridad del papa.
Por eso nos promueve, porque hacemos lo que enseña
Francisco.
Participar es una aventura, dejar todo por un mes.
Nuestro coordinador laico,
Lucho Tejada, vive todo el año
pensando en la misión, sin conocer exactamente a dónde
iremos, solo que llegaremos
a instalarnos por un mes en
un asentamiento humano
–viviendo de la providencia– para apreciar el gesto
más crudo de la pobreza. Su
emoción nos contagia.
OBJETIVO COMÚN
La Misión Toribiana es un
grupo de diferentes personas, carismas y edades, pero
con un solo objetivo. Nuestro
integrante más reciente, el
joven Joel, ha demostra-
do que es uno como todos:
por empujar la misión con
todas sus energías, no dudó
en celebrar sus 17 años con
nosotros, lejos de su familia.
Él, sin embargo, no es el
menor de todos. La pequeña
Alezzandra asistía a la misión con solo cuatro meses de
edad, en brazos de su madre,
Claudia. Ahora que ya tiene
dos años, ella brinda una pequeña pero valiosa ayuda:
motiva a los pequeños que
juegan con ella.
El hermano Gustavo anima con su música y sus dinámicas; Graciela Toribio, quien
viene siempre con su nieto
Ryan, de 8 años, hace proezas
en la cocina al lado de Paula.
Y Graciela Maguiña fortalece la misión con su atento
sentido de la organización
administrativa. Crisálida,
por su carisma en la oración,
transmite paz; Anita, con sus
prédicas potentes, es ministra encargada de la eucaristía. La cuota de juventud la
ponemos Mario, Toño y yo; y
ahora, con Joel, hacemos las
labores que demandan mayor esfuerzo ísico. Además
del trabajo pesado, ponemos
el toque de humor con una
que otra ocurrencia.
Más que una comunidad,
somos una familia. Y siempre
recibimos a nuevas personas. Hemos ido a las zonas
altas de Carabayllo más de
una vez, dos veces al cerro
Candela y siempre nos llegan
propuestas, pues la periferia
de una ciudad enorme vive
siempre urgida de fe y solidaridad. En siete años hubo seis
misiones y otras tantas labores caritativas por Navidad:
en la de 2015 nos llevaron a
la Selva. Y nuestro espíritu
está siempre dispuesto a
volar más allá de cualquier
frontera.
8
El desencanto
de una banda
de rock sacude
tu pasividad”,
canta José Arbulú en ‘Luces
de neón’, tema con el que
empieza Tiempo, el más reciente disco de Cementerio
Club. Con 19 años sobre los
escenarios, el grupo tiene
autoridad moral y artística
para hablar de desencantos,
pero también de ánimos renovados. Estos últimos se
sustentan no solo en las ganas de continuar haciendo
música, sino en resultados
concretos como los de esta
nueva producción.
“Siempre hemos querido hacer buenas canciones
y que los ensayos y conciertos continúen siendo divertidos”, dice Pedro Solano,
quien junto a Arbulú compone y canta la mayor parte de
temas de la agrupación. “Que
esto siga ocurriendo es casi
un milagro porque tenemos
ya cerca de 20 años juntos,
somos los mismos”, apunta.
Hablamos de cerca de
dos décadas de actividad,
cinco discos de largo aliento (ocho si contabilizamos
sus registros en vivo) y un
premio otorgado por la MTV
por el videoclip de una de
sus canciones más sublimes
(‘Inmortales’): el saldo no es
exiguo para una banda que
subsiste en un medio muchas
veces hostil con el rock. Por
el contrario, nuevas generaciones saludan su propuesta
mediante festivales masivos.
“Nos piden tomarnos fotos
chicas de 12 o 13 años, que
de repente cuando sonaban
nuestros primeros discos estaban lactando o no habían
nacido”, reiere Lucho Callirgos, baterista del grupo.
Este reconocimiento
también tiene un sustento
adicional en la atemporalidad estética del repertorio
de Cementerio Club; una singularidad alimentada por la
insaciable melomanía de sus
cuatro integrantes y por la
obsesión de Solano y Arbulú
por la música de The Beatles
(la portada del nuevo álbum
habla a gritos sobre ello), a la
que se añade una sensibilidad
que tiende hacia la ternura.
“Cuando en 2000 en Lima
todos hacían grunge, nosotros hacíamos canciones
Viernes 15 de abril de 2016
El Peruano
Con 19 años
sobre los
escenarios, el
grupo tiene
autoridad
moral para
hablar de
desencantos,
pero también
de ánimos.
De las nueve composiciones incluidas, ‘Viaje interminable’, de Arbulú, es tal
vez la que mejor ilustre el
momento actual de la banda,
deiniendo rasgos propios
de su sonido; combinando lo
apacible con lo enérgico, con
una interpretación emotiva e
intensa a cargo de los dos vocalistas. Lo mismo puede decirse del tema que da título
al disco, pero desde un punto
de vista muy autorreferencial (ecos del hit ‘Inmortales’
resuenan en él), pues supone
volver a recorrer, con nuevos
bríos, terrenos musicales ya
visitados.
VIGENCIA
RENOVADA
Cementerio Club surgió en medio del auge que el rock peruano
experimentó hace cerca de 20 años y aún mantiene sus puertas
musicales abiertas, afiliando a nuevos adeptos sin dejarse ganar
por el facilismo de la nostalgia. Su nuevo disco así lo demuestra.
TEXTO FIDEL GUTIÉRREZ M.
como ‘Sometimes bonita’;
melódicas y con arreglos de
cuerda”, recuerda el baterista, resaltando ese espíritu
alejado de modas y tendencias bastante presente también en el más reciente esfuerzo creativo de la banda.
LA MISMA ESQUINA
Tiempo, el disco, muestra
al Club en su mejor forma;
bastante cómodo ejercitando un sonido que, por más
reconocibles que puedan ser
sus inluencias, ya puede reclamarse como propio. Pero
llega nueve años después de
la producción discográica
que lo precedió (Bailando en
el muladar).
“El proyecto era hacer un
compendio de esas canciones
que, sin una ambición especíica, fuimos armando en todo
ese tiempo”, dice Solano. “Lo
bacán es que cuando se escucha el disco, todo parece
haber sido hecho ahora, pese
a que entre la primera canción que se grabó y la última
hay ocho años de diferencia”,
complementa Callirgos.
CERRAR UN CICLO
Siempre ecléctico, el grupo
también lleva a su terreno
musical un áspero clásico del
rock subterráneo limeño de
los años 80: ‘La esquina es la
misma’, de la banda Zcuela
Cerrada. Pero lo más atípico
llega sobre el inal del disco,
con la emotividad minimalista de ‘Simplemente pasa-El
amor’, en la que voz y guitarra
acústica es lo único que escuchamos. Tras este momento
casi pastoral, la melancolía
tiene la última palabra, manifestándose a través de ‘Navidad’, tema breve compuesto y cantado por Solano que
atenúa la luminosidad de la
mayoría de temas de Tiempo.
“Sentimos que este disco
cierra un ciclo, y ahora estamos empezando con la chamba de difundirlo y tocarlo en
vivo”, anota Callirgos. Solano,
a su vez, se muestra ante el
futuro tan entusiasta como
cuando aborda esos temas
ambientalistas en los que está
imbuido: “Ya queremos sacar
otro disco y seguro el próximo
mes empezaremos con eso”.