MAGDALENA LASALA

MAGDALENA LASALA PÉREZ (Zaragoza, 21 de mayo de 1958).
De temprana vocación literaria, abandonó la carrera de Derecho, para cursar
Ciencias de la Información en la Universidad de Bellaterra, que simultaneó con
los de Arte Dramático y Dirección escénica (en la Escuela de Arte Dramático de
José Jiménez Aznar de Zaragoza), de Canto y Solfeo en el Conservatorio de
Música de Zaragoza y con la soprano Pilar Andrés. Diplomada en Gestión
Cultural de Instituciones (Barcelona, 1989), ocupó el cargo de Coordinadora de
Actividades Culturales desde 1990 en la Obra Social y Cultural de Ibercaja; y
desde 2010 el de Responsable del Programa de Educación y Cultura de la
Obra Social. Dedicación profesional que ha compatibilizado con su creación
artística.
Cuenta con una muy extensa producción literaria que abarca todos los géneros
y ha sido avalada con el reconocimiento de los lectores y la crítica. Es uno de
los valores más firmes en el panorama español de Narrativa Histórica,
consolidando una carrera literaria de calidad con sólida repercusión
internacional, sin abandonar su producción lírica, que la refrenda igualmente
como una voz relevante de la poesía española contemporánea.
Como narradora, sus novelas sobre al-Andalus, le han procurado un lugar
preferente como novelista de género, convirtiéndose en referencia obligada al
respecto con obras como La Estirpe de la Mariposa (1999 y 2010), Abderramán
III, El gran califa de al-Andalus (2000), El Círculo de los muchachos de blanco
(2001), Almanzor (2002), Walläda La Omeya, La última princesa del esplendor
andalusí (2003) -de amplia repercusión en América Latina y traducciones en
Alemania, Suiza e Italia- y Boabdil. Tragedia del último rey de Granada (2004),
novela traducida al portugués. En 2005 publicó Maquiavelo: El Complot; y en
2006 Doña Jimena. La gran desconocida en la Historia del Cid, un fresco
literario soberbio sobre el siglo XI, etapa crucial del Medioevo español. En 2007
fueron editadas: Zaida, la pasión del rey -en torno a la amante de Alfonso VI y
las luchas dinásticas de su corte- y La Cortesana de Taifas, una descripción
vívida sobre las taifas sureñas, de la mano de un grupo de mujeres ambulantes
que utilizan la mentira como recurso para sobrevivir. En 2009 publicó La
Conspiración Piscis, ambientada en la Alejandría del siglo V d.C.
En 2013 publicó la novela La Casa de los Dioses de Alabastro, historia de
intriga ambientada en la Zaragoza renacentista, con Sabina de Santángel, la
inspiradora del Patio de Venus y la Casa Zaporta, como protagonista.
Como poeta, ha mantenido una solvente, continuada y cultivada voz propia,
reflejada entre otras obras en: Frágil sangrante frambuesa (1990), Seré leve y
parecerá que no te amo (1993), Sinfonía de una Transmutación (1995), La
Estación de la Sombra (1996), Cantos de un dios seducido (1998), Todas las
copas me conducen a tu boca (2000), Los nombres de los cipreses que
custodiaron mi ruta (2004), Y ahora tú pasas la mano osadamente (2007), Vivir
la vida que no es mía (2010), Arderé en el exilio de tu cuerpo (2011), Aquel
sabor de lo invisible (2013), con Cartas en un semáforo rojo actualmente en
prensa.
Sus textos poéticos han sido traducidos al francés, inglés, italiano, checo,
búlgaro y alemán, incluidos en Antologías de Poesía Española y utilizados para
obras musicales, escénicas y de danza, colaborando con artistas
internacionales, como Mariano Ferrández (Sinfonía de una transmutación para
voz y piano, Bruselas, 1999). Tres Acuarelas de Aragón, para coro de voces
blancas, con música del maestro Antón García Abril (Madrid, 2000) o
Magdalena y el amor y Magdalena junto a la cuna, compuestas con Luis
Morales Giacoman, (Madrid, 1997-1999) y estrenadas y grabadas en Alemania
(The Clay Dreams Are Made Of, Audiophile Live-Germany, 2002). En 2000,
Jorge Sarraute musicó para orquesta de cámara la obra Mudéjar, incluida en el
disco Catorce paisajes aragoneses. Gaspar Sanz y viceversa. En 2001 estrenó
en Madrid la ópera Scherezade, compuesta por Mariano Ferrández. Durante
siete años formó pareja artística con el prestigioso maestro Jorge Fresno,
vihuelista y laudista, especialista en Gaspar Sanz.
Como dramaturga, Magdalena Lasala cuenta con una trayectoria iniciada en
los años ochenta, con más de diez piezas dramáticas estrenadas, como La
Rebelión de los Dioses (1978) y Otra Fedra (1980) y varias obras de teatro
infantil como El descubrimiento de Ana (1979), entre otras. Ya en 1980 fue
incluida como autora teatral en la Enciclopedia Aragonesa editada en Zaragoza
por la Diputación General de Aragón, y dirigió el grupo teatral Talía hasta su
disolución en 1985. Ha colaborado con el Instituto Internacional de Teatro del
Mediterráneo, con la pieza El Príncipe Emigrante (2000), representado en
España y en varios países del Mediterráneo oriental. En 2006 fue publicada
Las Aguadoras, incluida en el homenaje a Pablo Gargallo por el Centro
Dramático de Aragón; en 2008 su libreto Doña Jimena, tragedia en cinco actos
y un epílogo; y en 2009 su obra El padre. Es autora del espectáculo El
Trovador -versión en recital dramático sobre el libreto original y la obra para
ópera de A. García Gutiérrez- y de los textos de los espectáculos Tierra de
Dragón y Mudéjar, para el bailarín Miguel Ángel Berna, que -aunando
diferentes expresiones artísticas en torno a la cultura esencial aragonesa- han
recorrido varios países de Europa, América y Oriente –desde 208 a 2012- con
gran éxito de público.
Sus espectáculos en el formato de Recital Dramático, que sintetizan los
aspectos lírico y teatral, han recorrido España e Italia con gran éxito, con títulos
como: El collar de la paloma, Poemas de amor y vino o Poesía femenina
andalusí, entre otros, siendo muy valorada su aportación al conocimiento de la
poesía española de diferentes épocas.
En el género del relato, su nómina de más de cien títulos publicados le ha
procurado un lugar relevante en diversos estudios antológicos nacionales.
Moras y Cristianas (en coautoría con Ángeles de Irisarri), con catorce ediciones
desde 1998; Don Juan de los miércoles a las cuatro, en el libro Don Juan, de
2008; El Proyecto, incluido en Al final del pasillo, 2008; Salomé, El sacrificio,
dentro del libro La Biblia: el Libro, Edición especial Semana Negra Gijón, 2009,
o La verdad de Salambó, inserto en el volumen Tributos, 2011. Destaca su
producción en Literatura Fabulística y Filosófica, donde recupera la esencia
didáctica de la mejor tradición clásica griega y oriental. En este género ha
publicado las obras: Cuentos, historias y mitologías Violetas, (1990-94 en 10
volúmenes; Histoires de s ‘épanouir (1993), publicado en francés; Lo que el
corazón me dijo (1999), exquisito libro formado por 108 aforismos, ilustrados
por Violeta Barrao, con varias ediciones, además de la reedición de Lo que el
corazón me dijo, veinte años después (2009), y Fábulas de Ahora (2000), con
ilustraciones de Akiko Kudo, declarado de interés educativo.
En 2009, como versión de las fábulas y consejas del filósofo medieval Pedro
Alfonso de Huesca, publicó El libro de las Enseñanzas de la Disciplina
Clericalis, con ilustraciones de David Guirao; y, en 2012, la trilogía Las historias
del Dragón Danzante con ilustraciones del citado artista gráfico, que incluye los
volúmenes Cuentos de Fábula, Cuentos de Alquimia y Cuentos de Amantes.
Con permanente presencia en la vida cultural zaragozana, actualmente es
columnista de Heraldo de Aragón, conferenciante y colaboradora en diversos
medios periodísticos y literarios. Dirigió la revista literaria Criaturas Saturnianas
en sus nueve números editados. En la actualidad ocupa el cargo de
Responsable del Programa de Educación y Cultura en Ibercaja, dedicándose a
dicha gestión desde el año 1989.
Ha recibido diversos premios a su trayectoria artística y literaria entre los que
cabe mencionar el Premio “Búho” concedido por la Asociación de Amigos del
Libro en 2003 y el Premio “Sabina de Plata” otorgado por el Club de Opinión La
Sabina en 2006, como reconocimiento a su compromiso con la literatura y la
sociedad de su tiempo.
A ellos se añade el Premio de las Letras Aragonesas 2014, otorgado por
unanimidad por el jurado constituido al efecto, que destacó que “en toda su
obra la condición humana resulta exaltada en su dignidad plena y universal,
proponiendo a la literatura como ejercicio de humanidad, a la par que de
entretenimiento y formación. Su actitud de permanente y efectiva presencia en
la vida cultural aragonesa, desde los más diversos ámbitos de la creación,
certifican su inquebrantable compromiso con la literatura y la sociedad de
nuestra Comunidad”