Poemas Fabián Severo

poemas
fabián severo
Fabián Severo
(Artigas, 1981) Docente de
Literatura. Coordinador de Talleres de Escritura.
Asistente Académico en Letras del Proyecto ProArte
del CoDiCen de la ANEP.
Es autor de los libros "​
NOITE NU NORTE.
Poemas en Portuñol​
" (Ediciones del Rincón,
2010), "​
NOITE NU NORTE. NOCHE EN EL
NORTE. Poesía de Frontera​
" (Rumbo
Editorial, 2011), ​
VIENTO DE NADIE (Rumbo
Editorial, 2013) y ​
"NósOtros" (Rumbo Editorial,
2014). Parte de su obra ha sido publicada en Brasil,
Argentina y Estados Unidos.
Recibió el ​
Premio Morosoli de Bronce en la
categoría Poesía, (2010). Fundación Lolita Rubial.
Galardón que distingue a personalidades e
instituciones vinculadas a la difusión del arte y la
cultura. Fue uno de los ganadores del ​
Fondo de
Estímulo a la Creación Artística, con la beca
"Justino Zavala Muniz", otorgada por el Ministerio
de Educación y Cultura (2012). En los Premios
Anuales de Literatura del año 2012, entregados por
el Ministerio de Educación y Cultura, recibió una
mención por su libro édito "Noite nu Norte" y una
mención por su libro inédito "Camino de la
soledad".
Palabras tortas
Asvés
toi lembrando la tristeza
que había en mi tierra
y las palabra van saliendo
una arriba de otra
intreveradas.
Hay días
que intento inderesar ellas
mas no puedo
impesan a perder el olor
a quedar seim vida
puro oso sin carne
morrendo en mis cuaderno.
Mas otras vez
yo las dejo asím
tortas
y intonce
volto a tener diez año
y ando descalzo na calle
correndo con la Gabriela
ayudando la María arrancar laranya
y me sinto menos triste.
Misqueso que afuera
el mundo es de tardisiña
vuelvo a tener los sueño que tenía
cuando caminaba nu meio das pedra
sin saber que las palabra tenían dueño
y el mundo era todo mío.
Noite nu Norte
2010
1
Miña lingua le saca la lengua al diccionario
baila una cumbia incima dus mapa
y hace con la túnica y la moña una cometa
pra voar, libre y solta por el cielo.
Artiga tiene una lengua sin dueño.
2
El río Cuareim camiña nus fundo
asvés canta, asvés dorme.
Camiña pra abajo, y se vai,
se vai hasta noum sei onde.
Los peye son libre
y yo ayo que se van con el río
se van pra onde ele termiña
dis que es nu mar
un lugar aonde la agua no toca la tierra.
3
​
a Ernesto Díaz
Nos semo da frontera
como u sol qui nace alí tras us ucalito
alumeia todo u día incima du río
y vai durmí la despós da casa dus Rodríguez.
Da frontera como a lúa
que hace la noche casi día
deitando luar nas maryen del Cuareim.
Como el viento
que hace bailar las bandera
como a yuva
que lleva us ranyo deles yunto con los nuestro.
Todos nos semo da frontera
como eses pásaro avuando de la pra qui
cantando un idioma que todos intenden.
Viemo da frontera
vamo pra frontera
como us avó y nuestros hijo
cumendo el pan que u diabo amasó
sofrendo neste fin de mundo.
Nosotro semo la frontera
más que cualqué río
más, mucho más
que cualquier puente.
4
Artiga tevi um seu lleno distrela
um río yeio de peiye
um campo verde, asím de árbol
uma terra brillante de piedra
mas alguéin levó tudo pra otro povo
y nos fiquemo sein nada.
5
Artiga e uma estación abandonada
a isperansa detrás de um tren que no regresa
una ruta que se perde rumbo al sur.
6
Yo no voy pra donde van los ónibus
pois teño medo de no incontrar
las cosa que gosto.
En Artiga, por las mañá
veyo lamparitas asesas
nas puerta con cortina de nailon
y us cayorro deitado, viyilando.
Números pintado con cal
nas parede sin revocar
patios yeio de yuyo disparejo
as pileta arrecostada nus alambre
pra tender ropa
yanelas con maseta rompida
casas pur a metade
y siempre abertas.
7
Cuando viene la inyente los bicho entran nas casa.
Yo teño que matarlos, no fica otra.
Las cobra y as araña disparan, ayo que buscan vivir.
Mas yo teño que matarlas.
También teño medo
mas no digo nada,
si no los fío del José ríen de mim
y no me imprestan la pelota.
Lo que más incontro son sapo mas no los mato
la Mama dis que comen los inseto.
Cuando llega la inyente nos semo los que se vamo.
Deyamo tudo.
Yo, asvés levo mi almuada.
Todo los año es la mesma historia
impieza llover y llover
yo miro pra allá y veyo cómo se viene la agua
pero antes llegan los bicho y yo los mato.
Creo que miña casa no agüenta otra inyente
las parede istán como cansada, puro ladrillo flojo.
La que no agüentó más fue la renga Elena
murió cuando la inyente
tenía llegado en lo del Carlito.
La Mama también istá cansada
mas yo quiero que ella agüente.
Cuando la inyente vai imbora
limpiamo el barro, sepillamo as parede
y intonce solo hallamo las marca dus mueble.
Acá tava la mesa, allí tava la foto de casamento.
La Mama baila con la escoba
yo me río y me olvido de llorar por mis juguete
hago cosa con la cara y ella también sorrí
y los dos isquesemo las nube incima da casa
y de que si sigue lloviendo
la semana que vein otra vez vai llegar la inyente
y la casa vai se inyer de biyo.
8
Sempre que pienso en la Chata,
me lembro de cómo ella me miraba aquella tarde.
Cuando yo ía en la escuela, ella iba hasta la esquina
y yo ​
fuera Chata, dale pa las casa
y ella voltava movendo la cola lo más campante.
Cuando yo voltava de la escuela
y doblaba la esquina de la padaría
ella ya istava isperando
y impesava ladrar correndo alrededor.
Yo no lloré cuando ella murió.
Yo lloré una vuelta que vinieron los de la perrera
y yo tava iscondido con la Chata
imbaiyo da cama de mis padre.
Ellos querían llevarla porque los vecino
denunciaron.
Era cierto que la Chata saía ladrando
atrás das bicicleta, das moto y dus auto.
Una vuelta
un viejo cayó da mordida que ella dio nel tobillo del.
Mas yo no quería que llevaran ella.
Mi madre dice que ​
na miña casa vasés nou entran
y ellos que había denuncia
y que la cayorra no tiene patente.
Mi madre feyó la puerta na cara dellos.
La Chata me miraba asustada
y yo ​
tranquila Chatita que nou vai pasá nada
y le tocaba el fusiño
y ella con los ojo lleno de lágrima.
Sempre que pienso en la Chata
me lembro cómo me miraba esa tarde.
Tenía el miedo que tengo ahora.
9
La vieja Mary murió pra nos dejar la vereda.
Toda las tarde, ella se sentaba pra tomar mate dulce
con el cusco viralata deitado nus pe
y una radio de pila pra iscutá los telegrama.
Ella rezongaba y amenazaba con el bastón
pra que no jugáramos la pelota,
mas ella tambéin
nos binsía de los cobrero y los mal de ojo.
Ahora ya podemo jugar tranquilo.
Mas la Mary era nosa vecina
y su casa istá feyada pra sempre
con el cusco deitado na puerta, isperando.
Ella morreu pra nos dejar la vereda
mas la vereda ainda es della.
10
a la memoria de mi madre
Mi madre falava mui bien, yo intendía.
Fabi andá faser los deber​
, yo fasía.
Fabi traseme meio litro de leite​
, yo trasía.
Decí pra doña Cora que amañá le pago​
, yo dicía.
Deya iso gurí ​
y yo deiyava.
Mas mi maestra no intendía.
Mandava cartas en mi caderno
todo con rojo (igualsito su cara) y firmaba imbaiyo.
Mas mi madre no intendía.
Le iso pra mim hijo ​
y yo leía.
Mas mi madre no intendía.
Qué fiseste meu fío, te dice que te portaras bien
y yo me portava.
A historia se repitió por muintos mes.
Mi maestra iscrevía mas mi madre no intendía.
Mi maestra iscrevía mas mi madre no intendía.
Intonces certo día mi madre intendió y dice:
Meu fío, tu terás que deiyá la iscuela
y yo deiyé.
11
El Fito sempre dicía, ​
quien madruga Dios lo ayuda
y Dios sempre le ayudaba.
Yo tentava me levantar antes quel
mas ele sempre gañaba y Deus ayudaba ele.
Cuando yo me despertaba
oiava pra la y lo veía sentado
magro y jorobado
tomando mate dose y cumendo el pan
que había sobrado de ayer.
Nas casa era asím
el que se levantaba primero, Deus le ayudaba.
Los que no madrugaban
tíñamos que isperar hasta u meiodía
pra poder cumé.
12
Yo odiaba el Tom.
Me lembro que ele iba nas casa
y oiava as cosa que pudía levá pra vendé.
Con mis hermano ficávamos isperando
pra ve u que ele ía levá.
Ele tiña um bolso preto.
Lo que más salía eran los adorno
los relós de paré
las joya y las ropa de mi madre.
Nos miraba ele se ir por la calle de tierra
rumbo a carretera por las maryen del río.
El iba pru quilombo
vender las cosa da mi madre para las puta.
Nos ficava na vereda, oiando pra la
isperando el Tom.
Cuando ele aparicía la nu horizonte
por u tamaño du bolso, nos ya sabía.
Si el bolso viña vacío
nos impesaba pulá y aplaudí
correndo alredor da casa.
Ele daba el diñeiro pra mi madre
y ella dicía pral Fito.
Vai mijo nu Brasilero y tras un litro de leite suelta
meio quilo de gayeta, dusentos gramo de
mortadela
tresentos gramo de arroz y meia dusia de ovo.
Cuando el bolso viña lleno
ele deyava as coisa y se iba.
Intonce mi madre voltava botá as cosa nu lugar.
Colgaba u relós na parede
botava un billete viejo na tromba du elefante
y deiyava insima da mesa.
Se iba triste pra enfrente del espejo
y se prindía as caravana, se colgaba el crucifijo
se ponía los anillo de color
y el resto das joya deyava na caya de zapato
que guardaba imbaiyo da cama.
13
Cuando yo me fui das casa
mi madre me deu uma caya de zapato
llena de rollo de foto.
Algún día Fabi, tu vai podé revelá esas foto
de cuando tu y teus irmaum era piqueno.
Cuando pudíamos festeyá algún cumpliano
yo consiguía la máquina con doña Selia.
Solo se pudía sacar doce foto
sempre del cumplañero
atrás del bolo con los invitado.
Nunca pudemo revelá. Nou había plata.
Ainda tengo la caya guardada nel ropero.
Teño las palabra, faltan las imagen.
Viento de nadie
2013
1
Quien no conoce la frontera
no sabe lo ques la soledá.
2
Este pueblo es una siesta nu meio das pedra.
Las mismas cara en las mesmas calles.
Cada cinco año
vienen y prometen pan
mas mañana es lejos
y la gente se jubila.
Nada cambió pur aquí.
Desde que sinventó el hombre
las calle siguen intrando nas casa.
Allá cada tanto,
alguien dis que viene el futuro
mas el polvo tapa las palabra.
La esperanza es una oración para los domingo
pero los lunes nunca llegan.
3
Nestas tierra
la gente vive isperando el bitumen
para que la polvareda
no enllene los ojo de tristeza.
Los vecino se arrodillan
atrás de Dios
mas él no ispera a nadies.
Los día que no saben qué hora es
sestean nel rayo du sol
y las chicharra se parten el pecho
queriendo despertar los vecino
que duermen fronteramente.
4
La soledá es cuando la noche impurra el día
y los vecino ainda no prendieron las luz.
Intonce eu me sinto una casa apagada
con la oscuridá
se deitando en mis rincón.
Ditardisiña um sinte
que toda la tristeza du mundo
anda atrás de nos.
5
En las noche que no puedo dormir
porque los recuerdo no paran de ladrar
pido pra Iemanyá
que también cuide nuestro río.
Él no tendrá la sal
que se precisa pra mover los barco
mas para nosotro
la agua del es todo.
Sin río,
se resecan los labio de la vida
y no tenemo nada para cantar.
6
Me gustaría tener nombre de agua.
Mas mi madre quiso
que mi nombre fose de tierra.
Palabra seca que se parte
en letras de balastro.
Mi madre tal vez quiso me salvar das agua
que transforman julio num inferno
y soñó mi nombre de piedra.
Nombre de agua sería lindo
mas en la frontera
uno no elige quien quiere ser.
7
Nas noite de tormenta
mi madre ponía olla aquí y alí
y apertava a porta dus fundo con uma sía
pra que no intrase a ventolera.
Trasía tijera y sal pra cortar aquellos inferno.
Sempre pasaba lo mismo.
Yo me durmía
prometendo que no ía dormirme
y ella me protegía.
Mi madre desarmaba las tormenta con los ojo.
8
En casa
nosotro tenía un limonero.
Ángel verde nu meio del patio abandonado.
Pastizal pra sempre,
selva chiquita
onde sobraba ispacio pra crecer
mas no había como.
Allí, entre el yuyal
una perna y uns brazo
lleno de ojo
perfumando la mañana
con el canto dus gorrión
que eran más libre que uno.
Yo estraño el limonero.
Ahora mis pie son pasto duro,
terra sin flor
onde uno escarba
y no aparece niuna lombriz.
Tanto campo suelto en el mundo
y vine a dar neste gris
lejos de los gorrión
que hacían cantar mi limonero.
9
En la frontera
ranyos de basura
y niños de tierra
perdieron la palabra.
En el invierno de la gente
asvés alguien se enamora.
De vez incuando,
nace una flor entre us fierro
ensuciando la primavera.
intonce
como un resto de pan
la gente sindurece.
10
Yo conozco el infierno
porque mi abuela vive ahí.
Cuando u sol se mete atrás du cuartel,
el Diablo despierta
y prende las máquina
que empachan la alma de polvo fedorento.
Los galpón de la arrocera
se adueñan del aire.
La noche se enllena de niños tosiendo
y no alcanza con rezar.
11
Tu tierra vai cuntigo
por más que cruces el puente
buscando otra sombra.
Allá van tar te lembrando
con saudade de raíz.