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GIMNASIO FONTANA
PREMIO AL MAESTRO FONTANA
¿Cómo desarrollar un aula diferenciada, constructivista
y alineada con el modelo pedagógico del Gimnasio Fontana?
Presentado por
FERNANDO ANDRÉS SOLER SALAZAR
24 de Abril del 2015
CARTA DE NAVEGACIÓN
La estructura de este escrito tiene como base la idea de un recorrido en el tiempo.
De esta manera la primera parte busca fundar unos elementos con los cuales se
tomaron una serie de decisiones a lo largo del año escolar, con el fin dar
respuesta a la pregunta guía.
La pregunta nace del reto que acepté durante este año escolar 2014 – 2015 al ser
director de grupo de Kinder B y asumir la responsabilidad de llevar a un grupo de
24 estudiantes a su zona de aprendizaje próximo (Vygotski, 1988), teniendo en
cuenta la filosofía y el modelo pedagógico del colegio.
MAPA (PREGUNTA)
Este viaje en el tiempo tiene como guía la siguiente pregunta:
¿Cómo desarrollar un aula diferenciada, constructivista
y alineada con el modelo pedagógico del Gimnasio Fontana?
Este mapa no puede ser transitado sin antes fundar teóricamente elementos que
son el terreno para que la propuesta dé frutos y que estos estén enmarcados en la
filosofía y modelo pedagógico del colegio.
BRÚJULA
Cualquier camino no se puede tomar por obligación ni por consejo ni por
complacer a otros, debe existir una decisión, un convencimiento de que el camino
que se está tomando nos esta llevando a alguna parte, debe ser fuente de
inspiración y estar seguros que esto es lo que queremos hacer. Esta es la única
manera en la que el motor que nos impulsa sea realmente fuerte y exista la
energía necesaria para emprender ese esfuerzo extra inicial que significa cambiar
un paradigma y una forma confortable de hacer las cosas.
Teniendo en cuenta los referentes teóricos que hacen parte del modelo
pedagógico del colegio, ha sido importante apropiarme de cada uno de los
conceptos bajo los cuales se construye esta propuesta y que permite aterrizarlos a
la práctica cotidiana en el aula de clase:
Diferenciación - Concibo un aula diferenciada como un espacio seguro,
contenido, libre y atractivo para que cada uno de los seres humanos que esta en
formación, pueda potenciar sus habilidades y talentos, expresar sus
pensamientos, sentimientos y emociones y construir conocimiento desarrollando
competencias que le permitan moverse y crear en un mundo globalizado.
Constructivismo - Concibo un aula constructivista como un lugar donde se
evidencia cómo los estudiantes construyen el conocimiento y toman sus
experiencias para aprender de ellas, una línea de tiempo donde la metacognición,
indagación y predicción estén siempre presentes.
Modelo Pedagógico - Entiendo el modelo pedagógico del colegio como una
estructura que permite a los estudiantes a partir del pensamiento crítico, la
creatividad y la innovación construir su proyecto de vida en un mundo globalizado,
enmarcado en una ética y valores que buscan la conservación de nuestra especie,
nuestro entorno y las relaciones que allí se construyen.
EL VIAJE
Ya fundados cada uno de los conceptos que enmarcan esta propuesta, planteo la
respuesta a mi pregunta mediante diferentes acciones puestas en marcha durante
este año como director de curso de Kinder.
El primer paso para contestar la pregunta que abarca este escrito, fué empezar a
conocer a los estudiantes, su desarrollo psicomotor, sus necesidades e intereses,
la manera en la que aprenden y todo lo que niños de 5 y 6 años necesitan para su
aprendizaje. Para esto sirvió mi experiencia de seis años trabajando en
preescolar, diálogos con otros docentes, así como observación de sus clases.
Bibliografía que incluye a Howard Gardner (Inteligencias Múltiples), Lev Vigotzky
(Zona de Desarrollo Próximo), Jean Piaget (Desarrollo Cognitivo), Edgar Morin (La
ética del género humano) y el escrito hecho por el colegio del “El estudiante que
queremos formar” entre otros, de los cual interioricé elementos con los cuales
empecé a tomar acciones en mi práctica docente.
EL BARCO (El aula)
Este viaje, no podía empezar sino era con un barco mágico, un aula propicia para
el aprendizaje, un lugar en donde los niños llegaran y quisieran dejar volar su
imaginación, su fantasía y su creatividad. Para esto organicé el salón de manera
que permitiera el trabajo colaborativo y el agrupamiento flexible, creando zonas
para la profundización del aprendizaje con diferentes tipo de actividades de
anclaje para la práctica de la lectoescritura, uso de material concreto para las
matemáticas y zona de lectura. Cada uno de estos espacios cobró vida al hacer la
constitución del aula (Classroom of Choice), la cual se basó en un parque de
diversiones que tenía la rueda de Chicago con los escudos que los estudiantes
podrían ganar por el cumplimiento de la constitución durante el año, una montaña
rusa de las letras que íbamos a practicar durante las clases, una zona de reflexión
y relajación (Relax Kids) y una serie de elementos que permitían el desarrollo de la
autonomía con el uso de los materiales, así como la constante presencia del arte
como medio de expresión.
El timón del viaje que apuntaba siempre hacia el desarrollo de la creatividad y la
indagación, fue el Mistery Box que cree, en el cual para cada una de las clases,
escondía un detonante que se convertía en el motor que impulsaba el barco y que
motivó en todo momento a cada uno de los que emprendimos este viaje.
A todo esto le sume los tres ejes (cuerpo, tierra y ciudad) que guían cada uno de
los trimestres, por lo que los muros del aula se convirtieron en una línea de tiempo
donde el conocimiento de los estudiantes se construía y permitía la metacognición
del camino recorrido.
Al principio del año en un trabajo de autoconocimiento cada uno se reflejo a sí
mismo y estos retratos corporales habitaron el entorno natural y citadino que se
ubicaba en los muros del salón, y que fue alimentándose de las relaciones que
generaban cultura a través de las producciones de cada uno de los niños y niñas.
Así al final del año, el barco que inició el viaje fue cambiando y transformándose al
recoger en cada puerto, experiencias maravillosas, celebraciones de otras culturas
y sueños y colores de cada uno de los tripulantes.
LAS RUTAS
Ya con el barco navegando, teníamos muy clara la meta: aquellos objetivos que
plasmados en el plan de unidad y teniendo en cuenta esas preguntas que guiaban
nuestro viaje, nos daban un norte muy definido, pero flexible. Siempre concientes
de que el oleaje, el viento en contra y los obstáculos del camino nos podían
señalar rutas alternas (diferenciación), que podíamos transitar.
Es aquí donde a partir de una evaluación formativa, rigurosa y coherente logré
identificar diferentes niveles en mis estudiantes y cree varias estrategias con el fin
de alcanzar nuestras metas y motivar a todos los tripulantes a través de una
instrucción diferenciada.
Primero diseñe clases en las cuales el contenido se diera de diferentes maneras
(visual, auditiva, kinestesica y tecnológicamente), para asegurar que todos los
estudiantes accedieran a este.
A través del cuaderno de Inglés realicé actividades escalonadas según el nivel de
preparación, siempre con una rúbrica que nos recordaba nuestro propósito.
Cree un traveler notebook el cual se convirtió en una herramienta para conocer los
intereses de los estudiantes, pues ellos me iban contando a través de una historia
lo que más les importaba, al mismo tiempo que practicaban su escritura y
desarrollaban habilidades de memoria, metacognición y estructuras temporo –
espaciales.
Por último diseñé una actividad la cual llamé My Challenge, en la que cada
estudiante hizo una reflexión frente a cuál es su reto durante kinder a nivel
personal y académico, y junto a un acompañamiento casa colegio fuimos
buscando que cada uno de esas metas se cumplieran y cada uno de los
estudiantes se hiciera cargo de su proceso de crecimiento y aprendizaje.
Todo este viaje estuvo acompañado de un seguimiento muy juicioso de evolución
de cada tripulante del barco de Kinder B, una comunicación continúa, motivante y
concreta con los padres de familia y un proceso de autorreflexión que acompaño
mi práctica docente con el fin de salir de mi zona de confort como docente, re pensándome, re – inventándome y generando acciones puntuales para completar
mi objetivo.
BITÁCORA
Como conclusión de este maravilloso viaje y para aquellos que también lo quieran
emprender, creo que para poder crear un aula diferenciada, constructivista y
alineada con el modelo pedagógico del Gimnasio Fontana es necesario un alma
sintonizada con la creatividad, un deseo de aprender y mejorar cada día, una
convicción de que nuestra labor y la calidad de esta es fundamental para el
desarrollo de otros seres humanos y un espíritu luchador que pueda navegar entre
los mares más profundos y oscuros teniendo en cuenta siempre claro el mapa, las
rutas y lo más importante: los estudiantes. A esto se suma, una preocupación y
evaluación constante del aprendizaje, una comunicación permanente con padres
de familia y una sistematización constante y reflexiva del proceso.
BUEN VIENTO Y BUENA MAR!