“Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera

“Impacto laboral potencial del acceso a
Pensión 65: una primera aproximación”
Documento preliminar. Por favor no citar
El documento final estará listo para octubre del 2015
Javier Torres
César Salinas
[email protected]
[email protected]
Centro de Investigación de la Universidad del Pacífico (CIUP)
Lima, 29 de agosto del 2015
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Contenido
Contenido ..................................................................................................................... 2
1.
Introducción ........................................................................................................... 3
2.
Revisión de literatura ............................................................................................. 5
3.
El Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65 ..................................... 8
3.1.
Historia ........................................................................................................... 8
3.2.
Elegibilidad del programa ............................................................................... 8
4.
Índice de Focalización de Hogares (IFH) ............................................................. 10
5.
Descripción de la pobreza en los Adultos Mayores del Perú ................................ 13
6.
Data ..................................................................................................................... 19
7.
Metodología ......................................................................................................... 23
8.
Resultados........................................................................................................... 27
9.
Conclusiones ....................................................................................................... 41
10.
Recomendaciones de política .......................................................................... 42
11.
Bibliografía ....................................................................................................... 43
12.
Anexos ............................................................................................................. 47
Anexo 01 ............................................................................................................. 47
Anexo 02 ............................................................................................................. 49
2
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
1. Introducción
En el año 2014, la población adulta de 65 años o más representó el 6.4% del toda la
población del Perú (en total, cerca de 31 millones de habitantes). Según el Instituto
Nacional de Estadística e Informática (INEI), el 21% de este grupo se encontraban
en situación de pobreza (Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI),
2014b).
En octubre del 2011, con la finalidad de otorgar protección a los adultos mayores de
65 años de edad que carezcan de las condiciones básicas para su subsistencia, se
creó el Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65 (Pensión65, en
adelante) como un esquema pensionario mínimo no contributivo (Ministerio de
Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS), 2015).
La presente investigación presenta una primera evaluación sobre el impacto
potencial del acceso a este programa sobre resultados en el mercado laboral;
específicamente sobre las horas trabajadas de la población adulta mayor (AM).
Consideramos que el cambio en el número de horas de trabajo mostraría una
reponderación de los niveles óptimos de ocio y trabajo, indicando un posible
aumento en el bienestar del beneficiario.
Distintas aproximaciones metodológicas dan cuenta de un efecto del tratamiento
sobre los tratados (ATT) pequeño que implica una reducción de la jornada laboral de
entre 1 y 3 horas a la semana para los adultos mayores beneficiarios del programa.
Asimismo, encontramos cierto grado de heterogeneidad en este efecto dependiendo
del sexo del beneficiario, su estatus de pobreza y si vive en una zona urbana o rural.
De esta forma, gran parte de esta reducción en horas trabajadas por parte de los
beneficiarios se encuentra concentrado en los adultos mayores que viven en zonas
urbanas y que son principalmente mujeres. Además, parece ser que tanto los
adultos mayores pobres como no pobres reducen su carga laboral a causa de ser
beneficiarios de Pensión 65, pero los no pobres lo hacen en mayor medida que los
pobres.
El presente documento se encuentra estructurado de la siguiente manera: La
segunda sección revisa literatura reciente sobre el impacto de transferencias
monetarias no condicionadas a población AM. La tercera sección explica la historia
de la creación del programa y los criterios de elegibilidad utilizados. El cuarto
apartado desarrolla la réplica del Índice de Focalización de Hogares (IFH). Una
descripción del nivel de pobreza de los adultos mayores es realizada en la quinta
3
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
sección. La revisión de la base de datos empleada se da en la sexta sección. La
séptima sección presenta la metodología, la octava los resultados, y la última
presentan las primeras conclusiones.
4
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
2. Revisión de literatura
La literatura reciente que analiza el impacto de programas de transferencia no
condicionada a los Adultos Mayores (AM) en el mercado laboral se centra no solo en
el Trade-off entre empleo (horas empleadas en el trabajo) y ocio, sino también en el
cambio en la oferta laboral de acuerdo a género y composición del hogar.
Es clara la presencia de comportamientos diferenciados en el mercado laboral de
acuerdo al género y a la composición del hogar. Esto se debe a las dificultades que
enfrenta la población AM femenina en los temas de inserción laboral y la dependencia
económica hacia sus parejas y familiares. (Durán Valverde, Mendoza De Souza, &
Picado Chacón, 2009). Lo cual indica que debido a las divisiones del trabajo en el
hogar, las mujeres participan más en las actividades domésticas y el cuidado de los
menores (Gondim Teixeira, 2009) o llevan a cabo trabajos no remunerados para sus
familias (Kabeer, 2010).
Existe evidencia para países en desarrollo de un incremento del número de adultos
mayores que permanecen en el mercado laboral incluso en una edad muy avanzada
tanto en zonas rurales como urbanas, siendo los hombres los que tienen mayor
participación laboral que las mujeres (Malhotra & Kabeer, 2002). 1
El Trade-off entre la asignación de horas para el trabajo y el ocio, es obvio. Ante la
subvención ofrecida por el programa, el total de horas empleadas en el mercado
laboral pierden valor en relación al tiempo no remunerado. Obteniéndose como
resultado una reducción en la oferta de horas laborales y un aumento en las horas
empleadas en ocio u otras actividades (Gondim Teixeira, 2009). Este sería el caso del
Perú, donde las condiciones de pobreza, la dependencia de los ingresos laborales y
limitaciones de acceso a una calidad de vida adecuada no permiten a los AM la
posibilidad de dejar de trabajar (Durán Valverde, Mendoza De Souza, & Picado
Chacón, 2009).
A nivel internacional, resaltan los informes de SEDESOL (2013) en el caso México y
Carvalho (2008) para una comparación internacional y Berniell (2014) para Argentina.
Los resultados en el informe de México demuestran que la participación laboral de los
AM se concentra en sectores informales. El principal sector de trabajo para esta
1
Sin embargo, Paz (2010) registró el comportamiento laboral de la población AM en varios
países de América Latina y el Caribe teniendo como resultado que el aumento de la tasa de
actividad laboral se ha dado, principalmente, en el género femenino en las zonas urbanas. El
aumento de esta tasa junto con políticas públicas adecuadas permitirá incentivar la tendencia a
la mayor participación económica y así dar una mejor solución a los problemas financieros que
afecta a esta población AM en el periodo post-retiro.
5
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
población en las zonas rurales es la agrícola, mientras que en las zonas urbanas los
principales sectores son el comercio y manufactura.
En México, el programa “70 y más” está dirigido a adultos mayores de 70 años que
viven en zonas rurales.2 Las evaluaciones muestran una caída en la cantidad de
adultos mayores laborando en trabajos remunerados pero que es compensada con un
aumento de los que trabajan en empresas familiares sin remuneración de forma
informal. De hecho, se probó que el programa generaba mayor bienestar social sin un
efecto negativo en la oferta laboral de dichas personas (Galiani, Gertler, & Bando,
2014).3
Carvalho (2008) evalúa la elasticidad de la oferta laboral de los AM para con el
programa social en las zonas rurales, teniendo como resultados que la respuesta de la
oferta laboral en los beneficiarios es mayor en los países desarrollados por un mayor
trade-off entre las actividades de mercado con las de no mercado.4 Para los países en
desarrollo, el impacto del programa en la oferta laboral es menor porque en condición
de pobreza el ocio es considerado inviable para su situación.5 Además, encuentra que
los trabajadores AM que cuentan con mayor educación poseen ventajas en el mejor
uso de la subvención de este programa social.
Un ejemplo similar se puede encontrar en Argentina, en un intento por ampliar la
cobertura de las pensiones, se creó la popular “reforma moratoria”.6 De acuerdo con el
estudio de Berniell (2014), la reforma tuvo un efecto positivo en el ingreso permanente
de las mujeres y su contribución al ingreso total del hogar. Gracias a este incremento,
los roles se hicieron más igualitarios dentro de sus hogares.
Por otro lado, Bosch y Guajardo (2012) indican que se produjo una reducción en la
participación en la fuerza laboral de los pensionistas.7 Muchos beneficiarios optaron
por dejar de trabajar, registrándose una mayor caída en la oferta laboral de aquellas
2
Los beneficiarios reciben 90 dólares cada dos meses, además de talleres y actividades.
El estudio encontró que la salud mental de los beneficiarios había mejorado debido a un
menor índice de estrés. Específicamente, hubo una reducción del 12% en la Escala de
Depresión Geriátrica de los beneficiarios del programa.
4
Siendo la tendencia de esta población de dedicarse al manejo de las propiedades familiares
tras la subvención.
5
De hecho, no tiene las mismas características de un bien normal, en donde los efectos
ingreso y sustitución apuntan en una misma dirección ante un beneficio monetario.
6
Esta reforma estipulaba que las personas que habían alcanzado la edad de retiro (60 años
para las mujeres y 65 para los varones) y que no habían cumplido con el requisito de 30 años
de contribución al seguro social, podían beneficiarse de una pensión que cubría al menos la
canasta básica de consumo.
7
Hubo una caída de 5.3 pp y 4.4 pp para el caso de los hombres entre 65-69 años y mujeres
entre los 60-64 años. Mientras que la cantidad de horas trabajadas por semana cae en 2.7 pp
para los hombres y en 1.5 para las mujeres.
3
6
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
personas autoempleadas para el caso de los varones, y las formalmente empleadas
en el caso de las mujeres. Asimismo, muchos de los beneficiarios que seguían
trabajando, continuaron haciéndolo pero en el sector informal.
En Sudáfrica, se ha analizado el efecto de las pensiones no contributivas sobre los
miembros del hogar entre 16 y 50 años, es decir entre aquellas personas en edad de
trabajar que residen en el hogar del beneficiario.8 Bertrand (2003) encontró una
respuesta negativa en la oferta laboral de dichos miembros, sobre todo en los hogares
donde era una mujer quien recibía el beneficio.9
Un estudio más reciente por parte de Sienaret (2008) indica que una transferencia de
dinero para adultos mayores está asociada con una caída en la participación de la
fuerza laboral, así como la probabilidad de ser empleados entre los individuos en edad
de trabajar que viven dentro del hogar del pensionista, principalmente cuando quien
recibe el beneficio es una mujer. Asimismo, dichas transferencias producen una menor
intensidad en cuanto a la búsqueda de empleo porque induce a un mayor deseo por
ocio (Sienaret, 2008). De hecho, la presencia de un pensionista residente está
asociado a una reducción de 3% en la probabilidad de que un miembro esté
empleado.
Finalmente, Barrientos y Lloyd-Sherlock (2003) (2002) confirman que la gran mayoría
de los beneficiarios en Latinoamérica (así como en Sudáfrica) viven en hogares multigeneracionales, usualmente compartiéndolos con sus familiares. De esta forma, las
políticas de pensiones no contributivas podrían ser consideradas una forma de reducir
la vulnerabilidad de los hogares. En concreto, este tipo de programas tiene una
contribución vital porque se logra reducir las condiciones precarias no solo de los
beneficiarios sino de quienes viven con ellos.
8
Las pensiones no contributivas en Sudáfrica estaban primero restringidas a los “blancos
pobres”. Sin embargo, ya en 1996 los beneficios de las pensiones para negros y blancos
alcanzó la igualdad. Este esquema absorbía cerca de 1.2% del PIB en Sudáfrica, el cual se
basaba en un pago de 120 dólares americanos al mes, lo que sumaba más del doble del
ingreso per cápita de la población negra en ese entonces.
9
Sin embargo, en el trabajo de Posel (2004), se menciona que las pensiones podrían también
tener un efecto positivo en la fuerza laboral si se considera el efecto de la “migración laboral” de
aquellas personas que viven en zonas rurales hacia zonas urbanas. Esto se debe a que
financian los costos de la migración y la búsqueda de trabajo con parte de la pensión del
beneficiario.
7
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
3. El Programa Nacional de Asistencia Solidaria Pensión 65
3.1.
Historia
Como se mencionó, Pensión 65 se creó el 19 de octubre de 2011 bajo la
administración del Programa JUNTOS, otorgando una transferencia monetaria
mensual de ciento veinticinco nuevos soles (S/. 125.00) con carácter inembargable, no
heredable y no sujeta al pago de devengados a los beneficiarios.10 Los primeros
departamentos que fueron considerados en su implementación fueron: Apurímac,
Ayacucho, Huancavelica, Puno, Ica y Huánuco. El decreto de creación y sus
modificaciones consideraron los siguientes requisitos: (i) Personas de 65 años a más,
(ii) Residentes de departamentos con un umbral de pobreza mayor al 50% según el
mapa de pobreza del INEI (2009), (iii) No contar con pensión ni seguro de ESSALUD,
(iv) No pertenecer a otros programas sociales a excepción del Seguro Integral de
Salud (SIS) y el Programa Nacional de Movilización por la Alfabetización (PRONAMA),
(v) Contar con DNI y (vi) Una evaluación del Sistema de Focalización de Hogares
(SISFOH).
En enero de 2012 se reasignó la administración de Pensión 65 al MIDIS y se expandió
el umbral de pobreza de 50% a 40% lográndose así la inclusión de los departamentos
a cargo del Programa Piloto “Gratitud”11: Amazonas, Ancash, Cajamarca, Cusco,
Junín,
La Libertad, Lima,
Piura
y la Provincia
Constitucional del Callao.
Posteriormente, a mediados de año, se permitió la integración de los beneficiarios del
programa JUNTOS a Pensión 65 y se incrementó el presupuesto en S/. 50 millones
superándose así la meta inicial de beneficiarios donde se pasó de 167,892 a 247,673
al finalizar ese año.12 Estas últimas modificaciones permitieron que Pensión 65
alcance una cobertura total a nivel departamental en nuestro país (Véase anexo 1).
3.2.
Elegibilidad del programa
Actualmente, la selección de beneficiarios del programa considera tres etapas: (i)
Convocatoria en el departamento elegido, (ii) Recepción de inscripciones y (iii)
Evaluación y afiliación de beneficiarios.
10
La periodicidad de este pago es bimensual en algunos casos. El Banco de la Nación, que
cuenta con 551 agencias en todo el país (2012), exige un monto mínimo de dinero a repartir
que cubran los costos de transporte a los distritos más alejados. Para ello el MIDIS tiene como
función organizar a los beneficiarios de programas de transferencias monetarias como
JUNTOS y Pensión 65 para acudir a los lugares de pago en fechas establecidas.
11
Programa Piloto de Asistencia Solidaria con el adulto mayor: “Gratitud”, cuyo objeto es
transferir, de manera directa, subvenciones económicas a los adultos en condición de extrema
pobreza a partir de los setenta y cinco (75) años de edad.
12
Para el 2013 se trazó una meta de afiliación de 290,000 adultos mayores, siendo esta
superada al alcanzar la cifra de 306,298 según indicó Pensión 65 a Radio Programas del Perú
(RPP) en enero de 2014.
8
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
En la primera etapa, los departamentos y distritos son elegidos en base a dos criterios:
(i) Umbral de pobreza mayor a 40% de acuerdo al índice de pobreza de SISFOH y (ii)
Prioridades de afiliación dadas por el MIDIS. En la segunda etapa, el MIDIS instala
módulos de atención para la inscripción en los distritos seleccionados. Por último, se
realiza un ejercicio de validación de los registros que poseen el SISFOH, RENIEC,
Ministerios (MINSA, MINCU), Gobiernos Regionales y Locales con la finalidad de
minimizar errores de inclusión o exclusión, dándose así por concluida la lista de
beneficiarios.
Con el objetivo de tener mejores resultados en el manejo del programa, el MIDIS
clasificó sus actividades de la siguiente manera: (i) Identificación y registro de los
potenciales usuarios, (ii) Afiliación de usuarios, (iii) Entrega de subvención monetaria,
(iv) Verificación de supervivencia y (v) Articulación intersectorial para fortalecer los
servicios sociales (Véase anexo 2). Con el fin de mitigar las filtraciones en el acceso al
programa, el MIDIS ha realizado alianzas estratégicas, siendo las más importantes las
que tiene con los Gobiernos Regionales y Locales.
9
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
4. Índice de Focalización de Hogares (IFH)
El Sistema de Focalización de Hogares (SISFOH) implementó en el 2010 el Índice de
Focalización de Hogares (IFH) en respuesta a las altas tasas de filtración de personas
que no formaban parte de la población objetivo y las altas tasas de exclusión de
personas que, formando parte de la población objetivo, no accedían a los beneficios
otorgados por los programas sociales (SISFOH, 2010).
A su vez, este índice representó una mejora respecto a la tan cuestionada pobreza
monetaria que alude a la insuficiencia de los ingresos y guarda poca relación directa
con la privación multidimensional. En otros términos, se puede encontrar evidencia de
que una familia cuente con un ingreso por encima de la canasta básica y que al mismo
tiempo carezca de una vivienda adecuada o no pueda acceder a determinados
servicios básicos. Asimismo, existen hogares que son pobres monetariamente, pero
que viven en condiciones de vida no precarias.
Para seleccionar las variables asociadas al nivel de pobreza y que componen el IFH,
se usó la Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) 2009 y con la ayuda del test de
Sommers se determinó el grado de correlación de las variables evaluadas con una
medida de pobreza monetaria. Las variables que se seleccionaron son aquellas que
fueron estadísticamente significativas. Luego, para la construcción del IFH, se aplicó el
Análisis de Componentes Principales para variables discretas con el propósito de
reducir las dimensiones de las variables originales, dándoles mayor peso a aquellas
que explican en mayor grado la variabilidad de la data. Los pesos que son usados
para construir el índice corresponden a la contribución de cada variable al primer
componente principal.
Este análisis se realizó para tres áreas geográficas por separado: Lima Metropolitana,
otras áreas urbanas y la totalidad de áreas rurales. La Tabla 01 muestra las variables,
las respuestas de opción múltiple y sus respectivas ponderaciones.
Tabla 01: Pesos de las variables que componen el IFH
Variable
Tipo de combustible
Abastecimiento de agua
Respuesta
No cocinan
Otro
Leña
Carbón
Kerosene
Gas
Electricidad
Otro
10
Lima
Metropolitana
-0.49
-0.40
-0.37
-0.33
-0.29
0.02
0.43
-0.78
Urbano
(sin L.M.)
-0.67
-0.50
-0.33
-0.22
-0.19
0.12
0.69
-0.58
Rural
-0.76
-0.38
0.05
0.36
0.37
0.52
0.52
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Material de paredes
Abastecimiento de
desagüe
Número de afiliados al
seguro de salud
Bienes de riqueza
Tiene teléfono
Material de techos
Educación del jefe del
hogar
Material de pisos
Río
Pozo
Camión
Pilón
Fuera
Dentro
Otro material
Madera o estera
Piedra con barro
Quincha
Tapia
Adobe
Piedra o sillar con
cal o cemento
Ladrillo o bloque de
cemento
-0.65
-0.62
-0.51
-0.41
-0.35
0.10
-0.70
-0.48
-0.44
-0.41
-0.39
-0.37
-0.42
-0.37
-0.34
-0.32
-0.25
0.12
-0.80
-0.55
-0.46
-0.43
-0.38
-0.20
-0.33
-0.07
0.10
0.25
No tiene
Río
Pozo ciego
Pozo séptico
Fuera
Dentro
-0.89
-0.75
-0.59
-0.46
-0.39
0.10
-0.68
-0.49
-0.40
-0.30
-0.21
0.20
Ninguno
Uno
Dos
Tres
Más de tres
0
1
2
3
4
5
No tiene
Tiene
Otro
Paja
Estera
Plancha o caña
Tejas
Madera
Concreto
-0.26
-0.04
0.06
0.14
0.32
-0.47
-0.17
0.02
0.15
0.25
0.47
-0.32
0.20
-0.86
-0.74
-0.67
-0.38
-0.23
-0.21
0.17
-0.25
0.06
0.17
0.27
0.48
-0.35
0.05
0.25
0.40
0.52
0.75
Sin nivel
Inicial
Primaria
Secundaria
Sup. No Univ.
Sup. Univ.
Post-Grado
Otro
Tierra
Cemento
-0.51
-0.43
-0.28
-0.06
0.10
0.22
0.40
-0.97
-0.60
-0.16
-0.57
-0.25
0.01
0.19
0.33
0.55
0.55
-1.12
-0.47
-0.01
11
-0.10
0.50
0.59
0.66
0.86
-0.11
0.64
0.83
0.90
1.09
1.09
-0.90
-0.72
-0.62
-0.23
0.03
0.07
0.32
-0.59
-0.08
0.35
0.59
0.68
0.88
0.88
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Hacinamiento
Máximo nivel educativo
en el hogar
Tiene electricidad
Piso de tierra
Madera
Losetas
Láminas
Parquet
6 a más
Entre 4 y 6
Entre 2 y 4
Entre 1 y 2
Menos de 1
0.08
0.16
0.28
0.51
-0.68
-0.51
-0.31
-0.07
0.24
0.30
0.40
0.51
0.71
Sin nivel
Primaria
Secundaria
Superior no
universitario
Superior
universitario
No tiene
Tiene
Tiene
No tiene
-0.35
0.11
0.41
0.62
0.83
-0.29
0.22
-0.17
0.47
Fuente: extraído de SISFOH (2010).
Finalmente, para clasificar a los hogares de acuerdo a su estatus de pobreza, se
crearon umbrales por clusters de acuerdo al puntaje que obtuvieron en el IFH. Es
decir, los hogares con un índice por debajo de determinado umbral son potencialmente
elegibles para acceder a Pensión 65.13 Los 15 clusters (o áreas) que definen cada
umbral fueron identificados por su similitud respecto a la pobreza monetaria que
registraban en el 2009 (SISFOH, 2010). Los umbrales fueron elegidos de alguna
manera tal que los individuos que efectivamente eran pobres, sean elegidos.
13
Luego de esta primera etapa el personal del MIDIS puede verificar y evaluar las condiciones
en la que viven estos hogares para una selección más precisa.
12
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
5. Descripción de la pobreza en los Adultos Mayores del Perú
Usando la ENAHO para el periodo 2012-2014 y toda la información del acápite
anterior, recalculamos el IFH para los individuos y hogares con el fin de distinguir su
estatus de pobreza. De esta manera, del total de adultos mayores en nuestra muestra,
el 21% es pobre según la pobreza monetaria y el 33% es pobre según el IFH. Luego,
es fácil notar que la pobreza monetaria no logra clasificar como pobres a aquellas
personas que, bajo una perspectiva multidimensional, pueden ser consideradas como
pobres (ver Tabla 02).
Tabla 02a: Adultos Mayores Pobres y No Pobres en el Perú (2012-2014)
Pobreza monetaria
Pobre extremo
Pobre no extremo
No pobre
Total
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
3.04
7.59
10.45
27.73
86.50
64.67
100.00
100.00
Total
4.53
16.11
79.36
100.00
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza
MEF fue calculada a partir de SISFOH (2010).
Tabla 02b: Adultos Mayores Pobres y No Pobres en el Perú (2012-2014)
Pobreza monetaria
Pobre extremo
Pobre no extremo
No pobre
Total
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
45.18
54.82
43.66
56.34
73.33
26.67
67.28
32.72
Total
100.00
100.00
100.00
100.00
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza
MEF fue calculada a partir de SISFOH (2010).
Según su distribución geográfica, los adultos mayores pobres se encuentran
mayormente ubicados en la sierra central y la sierra sur, representando un 33.8% del
total de pobres en el Perú. Un número también considerable de pobres se encuentran
en la costa norte y la selva, representando un 29% del total de pobres. De esta
manera, sería lógico que la mayoría de beneficiarios de programas sociales, como los
de Pensión 65, esté enfocada en estas regiones con un mayor número de
beneficiarios.
13
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Tabla 03: Distribución geográfica de los Adultos Mayores (2012-2014)
Dominio
Costa norte
Costa centro
Costa sur
Sierra norte
Sierra centro
Sierra sur
Selva
Lima Metropolitana
Total
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
13.90
15.28
8.47
4.74
2.25
1.15
5.68
7.04
12.18
17.10
13.64
16.75
7.13
12.65
36.76
25.29
100.00
100.00
Total
14.35
7.25
1.89
6.12
13.79
14.66
8.93
33.00
100.00
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza
MEF fue calculada a partir de SISFOH (2010).
Por otro lado, las condiciones de vida de los adultos mayores pobres son menores en
comparación con sus pares no pobres en general (ver Tabla 04 y 05). Es así que el
material predominante en las paredes exteriores para los pobres es adobe, mientras
que para los no pobres es ladrillo o bloques de cemento. El material predominante en
los pisos es tierra para los pobres y cemento para los no pobres. El material
predominante en los techos es de calamina o fibra de cemento para los pobres y de
concreto armado para los no pobres. Finalmente, según el abastecimiento de servicios
básicos, no parece haber una diferencia notable en la distribución de adultos mayores
pobres y no pobres que tienen abastecimiento de agua potable, conexión de servicio
higiénico o alumbrado de red eléctrica.
Tabla 04: Materiales en la vivienda de los Adultos Mayores (2012-2014)
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
Material predominante en paredes
exteriores
Ladrillo o bloque de cemento
Piedra o sillar con cal o cemento
Adobe
Tapia
Quincha (caña con barro)
Piedra con barro
Madera
Estera
Otro material
Material predominante en pisos
Parquet o madera pulida
14
Total
66.36
0.74
22.37
5.80
0.88
0.60
2.46
0.08
0.69
27.15
0.82
42.05
10.04
3.20
2.02
9.30
0.63
4.79
53.53
0.77
28.81
7.19
1.64
1.07
4.70
0.26
2.03
10.16
0.11
6.87
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Láminas asfálticas, vinílicos o similares
Losetas, terrazos o similares
Madera (entablados)
Cemento
Tierra
Otro material
Material predominante en techos
Concreto armado
Madera
Tejas
Planchas de calamina, fibra de cemento
Caña o estera con torta barro
Estera
Paja, hojas de palmera
Otro material
5.60
18.58
4.57
41.87
18.86
0.36
0.13
1.88
5.05
39.05
53.25
0.54
3.81
13.12
4.73
40.95
30.11
0.42
57.86
1.32
8.98
24.83
3.95
0.26
2.59
0.21
11.83
3.64
13.64
54.95
6.22
1.83
6.66
1.24
42.80
2.08
10.51
34.68
4.69
0.77
3.92
0.55
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza MEF fue calculada a partir
de SISFOH (2010).
Tabla 05: Características de la vivienda en los Adultos Mayores (2012-2014)
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
Abastecimiento de agua
Red pública dentro de la vivienda
Red pública fuera de la vivienda pero
dentro del edificio
Pilón de uso público
Camión, cisterna u otro similar
Pozo
Río, acequia, manantial o similar
Otra
Conexión del servicio higiénico
Red pública dentro de la vivienda
Red pública fuera de la vivienda pero
dentro del edificio
Letrina
Pozo séptico
Pozo ciego o negro
Río, acequia o canal
Otra
No tiene
Alumbrado de red eléctrica
Tiene
No tiene
Total
87.54
66.39
80.62
2.03
7.29
3.75
0.52
0.37
1.78
6.56
1.21
2.22
2.44
3.53
11.34
6.78
1.07
1.05
2.35
8.12
3.03
76.03
46.31
66.30
1.61
6.90
3.34
4.44
7.34
4.46
0.61
0.08
5.43
6.32
11.15
9.44
2.21
0.99
16.68
5.05
8.58
6.09
1.14
0.38
9.11
95.34
4.66
83.23
16.77
91.38
8.62
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza MEF fue calculada a partir
de SISFOH (2010).
15
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
En el aspecto laboral, un porcentaje mayor de pobres (61%) se encuentra ocupado en
comparación con los ocupados no pobres (50%). Esta misma distribución se asemeja
a la composición de adultos mayores que son trabajadores independientes,
representando un 65% para los pobres y un 52% para los no pobres. Además, el
promedio de horas trabajadas en la ocupación principal es ligeramente mayor en los
adultos mayores no pobres (ver Tabla 06).
Tabla 06: Información laboral de los Adultos Mayores (2012-2014)
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
Estatus laboral
No PEA
Desocupado
Ocupado
Posición en el centro de trabajo
Empleador o patrono
Trabajador independiente
Empleado
Obrero
Trabajador familiar no remunerado
Trabajador del hogar
Otros
Promedio de horas trabajadas
Total
48.40
1.54
50.15
36.99
1.77
61.24
44.66
1.55
53.78
8.02
52.09
12.37
8.30
17.44
1.25
0.52
34.039
4.69
65.12
2.37
11.26
14.55
1.36
0.66
32.156
6.79
56.92
8.66
9.40
16.37
1.29
0.57
33.340
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza MEF fue calculada
a partir de SISFOH (2010).
Según actividad económica de la ocupación principal, los adultos mayores pobres
trabajan en sectores similares a los del nivel nacional. De esta forma, el sector
agricultura incorpora a casi la mitad de adultos mayores pobres y no pobres, seguido
por el sector comercio y manufactura, en menor proporción (ver Tabla 07).
Tabla 07: Actividad Económica de los Adultos Mayores (2012-2014)
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
Actividad Económica
Agricultura
Pesca
Minería
Manufactura
Construcción
Comercio
Transportes y Comunicaciones
42.13
0.26
0.43
7.45
3.29
20.43
3.80
16
53.72
0.37
0.14
8.25
3.98
16.70
3.71
Total
46.46
0.30
0.32
7.75
3.55
19.04
3.77
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Administración pública, Defensa,
Planes de Seg. Social
Hoteles y Restaurantes
Inmobiliarias y Alquileres
Enseñanza
Otros servicios
2.57
1.48
2.16
5.18
3.28
4.61
6.57
5.49
0.67
0.71
4.79
5.30
2.30
3.15
5.91
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza MEF fue
calculada a partir de SISFOH (2010). Otros servicios incluyen: suministro de
electricidad, gas y agua, intermediación financiera, actividades de servicios sociales
y de salud, otras actividades de servicios comunitarios, sociales y personales,
hogares privados con servicio doméstico y organizaciones y órganos
extraterritoriales.
Otro aspecto interesante a analizar de los adultos mayores pobres es el nivel
educativo que han alcanzado. Como es de esperarse, los adultos mayores no pobres
alcanzan un mayor nivel educativo en promedio (primaria y secundaria), mientras que
los no pobres tienen un menor nivel educativo que estos (sin educación y primaria).
Además, los adultos mayores pobres que llegan a alcanzar estudios superiores o de
post-grado representan una minoría en comparación con los no pobres (ver Tabla 08).
Esto último da cuenta de una escasa especialización de la mano de obra en personas
pobres que pudiera estar relacionada con condiciones laborales menos favorables y
que son de interés para el hacedor de políticas públicas.
Tabla 08: Nivel educativo de los Adultos Mayores (2012-2014)
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
Educación
Sin educación
Inicial
Primaria
Secundaria
Superior no universitario
Superior universitario
Post-grado
11.60
0.05
44.24
24.96
7.06
10.74
1.35
37.04
0.12
47.43
12.99
1.42
0.97
0.04
Total
19.93
0.08
45.28
21.04
5.21
7.54
0.92
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza MEF fue
calculada a partir de SISFOH (2010).
Por último, el número de miembros en el hogar y el número de perceptores de
ingresos en los hogares de los adultos mayores pobres es ligeramente menor que en
los no pobres. Esto se traduce, a su vez, en un ingreso y gasto anual que es más del
doble en hogares no pobres en comparación a los pobres. Asimismo, es importante
notar que solamente el 7% de adultos mayores pobres recibe algún tipo de pensión
por jubilación; mientras que en los no pobres este porcentaje es superior (25%). Estas
17
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
cifras, acompañadas con las condiciones poco favorables en las que viven los adultos
mayores pobres, son las que motivaron la creación del programa Pensión 65 en su
momento y que, aun ahora, representa una gran brecha en la población de adultos
mayores en el Perú.
Tabla 09: Otras características de los Adultos Mayores (2012-2014)
Pobreza IFH
No pobre
Pobre
3.875
3.076
Total de miembros en el hogar
Total de perceptores de ingresos
en el hogar
Ingreso neto total del hogar
(anual)
Gasto bruto total del hogar (anual)
Seguro de salud
Afiliados
No afiliados
Pensión de jubilación
Recibe
No recibe
Total
3.614
2.620
2.071
2.440
41,394
22,141
17,414
10,062
33,545
18,187
77.12
22.88
61.25
38.75
71.92
28.08
24.86
75.14
7.31
92.69
19.12
80.88
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. La pobreza MEF fue calculada
a partir de SISFOH (2010).
18
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
6. Data
La principal fuente de información que será utilizada en la presente investigación es la
Encuesta Nacional de Hogares (ENAHO) que es elaborada todos los años por el
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). Esta encuesta es representativa
a nivel departamental y contiene información sobre horas trabajadas, estatus laboral,
educación, pertenencia a programas sociales, materiales de vivienda, acceso a
servicios básicos, entre otras; que son necesarias para el recálculo del Índice de
Focalización de Hogares y/o son incorporadas en los distintos análisis de regresión
presentados.
Pensión 65 es un programa dirigido a adultos mayores de 65 años que viven en
condiciones de pobreza u pobreza extrema. Sin embargo, existen otros requisitos que
han ido variando con los años (ver Anexo 01) y que son fundamentales para que un
adulto mayor sea beneficiario de este programa (como por ejemplo, no recibir pensión
de jubilación o no recibir subvención económica de EsSalud). En ese sentido, y para
propósitos de las metodologías que se discutirán más adelante, nuestra muestra total
está constituida por todos los adultos mayores (de 60 o más años de edad) que
cumplen todos los requisitos para recibir Pensión 65 para el periodo 2012-2014, y que
además pueden ser pobres o no pobres según el IFH.
En la Tabla 10 se presentan los principales estadísticos descriptivos de las variables
recogidas en estas encuestas de hogares para nuestra muestra total. Disponemos de
información para 36,182 adultos mayores pobres y no pobres de 60 o más años de
edad. Según características de la vivienda, en el periodo 2012-2014, el 91.3% de las
personas vivía en una casa independiente, 35.8% tiene paredes exteriores de adobe,
43.6% tiene piso de tierra, 46.3% tiene techos de planchas de calamina o fibra de
cemento y cuentan con 4 habitaciones dentro de la vivienda, en promedio.
De acuerdo a la provisión de servicios básicos, el 73.8% y 50.3% cuenta con
abastecimiento de agua y desagüe conectado a red pública dentro de la vivienda,
respectivamente. Además que el 86% tiene alumbrado de red eléctrica.
Dentro de los hogares, existe una división balanceada entre mujeres y hombres. Las
mujeres representan el 55% de la muestra bajo análisis. La mayoría de las personas
cuenta con educación primaria (52%) seguido por una carencia de educación en todos
los niveles (25.7%). Esta característica también esta presente en la educación del jefe
del hogar de donde provienen estos adultos mayores, en donde el 54% cuenta con
educación primaria y el 15.5% carece de algún nivel educativo.
19
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Desde una perspectiva laboral, la mayoría de adultos mayores reportan trabajar en
alguna ocupación principal y, en menor medida, reportan trabajar en una ocupación
secundaria. El 70% de la muestra total trabaja 33 horas semanales en promedio en su
ocupación principal mientras que el 14% de la muestra reporta trabajar 17 horas
semanales en promedio en la ocupación secundaria.14 Asimismo, el 66% de la
muestra total está ocupada15 y un 33% no pertenece a la Población Económicamente
Activa (PEA).
Finalmente, el número promedio de miembros por hogar en esta muestra es 3. De
estos, solamente 2 son los miembros del hogar que reportan percibir algún tipo de
ingreso, en promedio. El ingreso neto de estos hogares es de 24,560 soles anuales y
se gasta aproximadamente el 78% de este monto anualmente.
Tabla 10: Estadísticos Descriptivos
Variable
Tipo de vivienda
Casa independiente
Departamento en edificio
Vivienda en quinta
Vivienda en casa de vecindad
Choza o cabaña
Vivienda improvisada
Local no destinado para habitación
humana
Material predominante en
paredes exteriores
Ladrillo o bloque de cemento
Piedra o sillar con cal o cemento
Adobe
Tapia
Quincha (caña con barro)
Estadísticos
Std. Dev.
Min.
N
Mean
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.913
0.020
0.008
0.031
0.024
0.001
0.282
0.141
0.089
0.173
0.153
0.036
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
0.000
0.012
0.000
1.000
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.367
0.006
0.358
0.113
0.024
0.482
0.079
0.479
0.317
0.152
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
14
Max.
Es importante señalar que en la distribución de horas trabajadas en ocupación principal el
valor mínimo es cero, mientras que en la distribución de horas trabajadas en ocupación
secundaria es uno. Además de ello, encontramos que existen casos en los que no se reportan
el número de horas trabajas (en mayor medida para las horas trabajadas en ocupación
secundaria). Es por ello que descartamos usar un número de horas agregado y consideramos
solamente las horas trabajadas en ocupación principal y no un número de horas agregado,
15
La falta de concordancia entre el 73% de la muestra que manifiesta trabajar algunas horas
en su ocupación principal y el 69% que está ocupado se debe a consideraciones en la
definición de población ocupada que establece el INEI. Por ejemplo, los trabajadores familiares
no remunerados, son considerados como ocupados si trabajan 15 horas o más a la semana.
De esta forma, podemos encontrar en la base de datos a personas que tienen valores positivos
en las horas trabajadas y no forman parte de la población ocupada. Ante esta situación, se optó
por prescindir de la población no ocupada en los análisis de regresión y de esta manera,
evaluar el efecto que tiene el programa sobre las horas trabajadas de los adultos mayores que
forman parte de la población ocupada.
20
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Piedra con barro
Madera
Estera
Otro material
Material predominante en pisos
Parquet o madera pulida
Laminas asfálticas, vinílicos o
similares
Losetas, terrazos o similares
Madera (entablados)
Cemento
Tierra
Otro material
Material predominante en techos
Concreto armado
Madera
Tejas
Planchas de calamina, fibra de
cemento
Caña o estera con torta de barro
Estera
Paja, hojas de palmera
Otro material
Habitaciones dentro de la
vivienda
El abastecimiento de agua en el
hogar procede de:
Red pública dentro de la vivienda
Red pública fuera de la vivienda
pero dentro del edificio
Pilón de uso publico
Camión, cisterna u otro similar
Pozo
Rio, acequia, manantial o similar
Otra
El servicio higiénico del hogar
está conectado a:
Red pública dentro de la vivienda
Red pública fuera de la vivienda
pero dentro del edificio
Letrina
Pozo séptico
Pozo ciego o negro
Rio, acequia o canal
Otra
No tiene
Alumbrado de red eléctrica
Mujeres
Educación
Sin educación
36,182
36,182
36,182
36,182
0.017
0.077
0.004
0.031
0.130
0.266
0.066
0.172
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
0.025
0.155
0.000
1.000
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.025
0.070
0.065
0.371
0.436
0.006
0.155
0.255
0.246
0.483
0.496
0.079
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
36,182
36,182
0.256
0.013
0.143
0.437
0.111
0.350
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.463
0.046
0.009
0.061
0.006
0.499
0.211
0.094
0.239
0.075
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,087
3.497
1.787
1.000
15.000
36,182
0.738
0.440
0.000
1.000
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.033
0.013
0.011
0.030
0.135
0.039
0.180
0.112
0.104
0.171
0.342
0.194
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
0.503
0.500
0.000
1.000
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.029
0.074
0.131
0.093
0.017
0.010
0.144
0.860
0.554
0.168
0.261
0.337
0.291
0.129
0.097
0.351
0.347
0.497
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
0.257
0.437
0.000
1.000
21
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Educación inicial
Educación primaria
Educación secundaria
Educación superior no universitaria
Educación superior universitaria
Post-grado
Educación del jefe del hogar
Sin educación
Educación inicial
Educación primaria
Educación secundaria
Educación superior no universitaria
Educación superior universitaria
Post-grado
Horas trabajadas en ocupación
principal (semanal)
Horas trabajadas en ocupación
secundaria (semanal)
Total de miembros en el hogar
Total de perceptores de ingresos
en el hogar
Indicador de la PEA
Ocupado
Desocupado abierto
Desocupado oculto
No PEA
Ingreso neto total del hogar
(anual)
Gasto bruto total del hogar
(anual)
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.001
0.520
0.157
0.024
0.036
0.005
0.028
0.500
0.364
0.153
0.187
0.069
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
36,182
0.155
0.001
0.536
0.198
0.043
0.057
0.009
0.362
0.026
0.499
0.399
0.204
0.232
0.096
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
1.000
25,224
32.812
20.164
0.000
98.000
5,100
36,182
16.637
3.408
13.104
2.083
1.000
1.000
98.000
23.000
36,182
2.258
1.241
0.000
12.000
36,182
36,182
36,182
36,182
0.655
0.004
0.010
0.330
0.475
0.066
0.099
0.470
0.000
0.000
0.000
0.000
1.000
1.000
1.000
1.000
36,182
24,560.234 30,229.315 120.000 1,120,000.000
36,182
19,181.655 18,005.387 179.000
217,000.000
Nota: datos extraídos de la ENAHO 2012, 2013 y 2014. Los adultos mayores considerados en esta muestra son aquellos
que son potencialmente beneficiarios de Pensión 65 (cumplen con los requisitos para acceder al programa) con excepción
de que tienen 60 o más años de edad y pueden ser pobres y no pobres.
22
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
7. Metodología
En la literatura de evaluación de impacto, existen diversos métodos cuantitativos que
abordan el problema de no aleatoriedad en los grupos de tratamiento y de control de
un programa social en particular (diseños de política no experimentales). Más aún,
estos métodos cobran relevancia en un contexto en el cual el propósito de la política
pública es incidir sobre un grupo focalizado de personas,16 como en nuestro caso, el
adulto mayor de 65 años. De esta manera podemos estimar el efecto tratamiento bajo
supuestos relativamente débiles (Angrist & Pischke, 2009).
La estrategia de identificación del siguiente estudio consta de tres partes. Por un lado,
se estimará el impacto de Pensión 65 sobre las horas trabajadas de adultos mayores
pobres y potencialmente beneficiarios17 bajo el enfoque de Regresión Discontinua.
Luego, se propone utilizar dos variaciones del método de diferencias en diferencias
clásico con la finalidad de definir de la mejor manera posible grupos de control
distintos al planteado por el método de regresiones discontinuas.
7.1.
Regresión discontinua
Las Regresiones Discontinuas (RD) presentan un potencial estimador de tratamiento
basándose en una lógica muy simple: “si los individuos a un lado de cierto umbral (z̅)
son muy parecidos a los individuos del otro lado del umbral, con excepción de que los
primeros no son tratados y los segundos sí, entonces podemos argumentar que el
primer grupo es un buen grupo de comparación del segundo grupo” (Angrist &
Pischke, 2009).
Para explotar un posible impacto de Pensión 65 y hacer uso de una regresión
discontinua nítida, se acotó la muestra de adultos mayores que cumplen con los
requisitos de acceder al programa.18 De esta forma, nuestra muestra la componen
adultos mayores pobres, con la única diferencia de que los que tienen 65 años o más
reciben el programa (son tratados) y los que son menores de 65 años no reciben el
16
La mayoría de políticas públicas se focaliza en una población con determinadas
características porque se piensa que esta, está en una condición más vulnerable que el resto
de la población en general.
17
Los adultos mayores que son potencialmente beneficiarios son aquellas que cumplen con los
requisitos para ser beneficiarios en el programa.
18
Existe otro tipo de regresión discontinua, que es la fuzzy o borrosa. En esta especificación
los individuos tratados no necesariamente son los que están a lado de cierto umbral. De hecho,
el umbral no garantiza con certeza que los individuos reciban el tratamiento a un lado, y no lo
reciban del otro lado.
23
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
programa (grupo de control). El gráfico 1 ilustra cómo cambia la probabilidad de
participación en el programa cuando el adulto mayor pobre es mayor o menor que el
umbral de 65 años de edad (se restringió la muestra de tal manera que la probabilidad
a ambos lados del umbral sea exacta).
Gráfico 1: Probabilidad de participación en Pensión 65 (Adultos Mayores Pobres)
La validez de usar esta Regresión Discontinua se centra en la comparación de
observaciones con distintos valores de 𝑍 en el vecindario de la discontinuidad (𝑍̅).
Asimismo, asumimos que estar marginalmente por encima o por debajo de 𝑍̅ es algo
que esta fuera de control del adulto mayor. De esta manera, la ecuación que da cuenta
del efecto de Pensión 65 sobre las horas trabajadas es:
𝑌𝑖 = 𝛼0 + 𝛼1 𝑃65𝑖 + 𝑋 ′ 𝛽 + 𝜀𝑖 ,
(1)
en donde 𝑌 es una variable de resultado (en nuestro caso, las horas trabajadas), 𝑃65
es una variable dicotómica que toma el valor de 1 si la persona recibe el programa y
cero si no lo recibe, 𝑋 es un conjunto de características observables que no dependen
directamente del tratamiento pero si afectan a la variable de resultado y 𝜀 es el término
de error.
7.2.
Diferencias en Diferencias
Una posible extensión al método de Regresión Discontinua planteado anteriormente,
es el método de Diferencias en Diferencias. Este nos permite incorporar cierto grado
de diferencias pre-existentes entre el grupo de tratamiento y el grupo de control,
controlando por características observables de estos últimos (Bernal & Peña, 2011).
24
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
De esta forma, se consideraron dos aproximaciones para estimar el impacto del
programa.
La primera aproximación considera la muestra de todos los adultos mayores pobres y
no pobres de 60 años o más. Sin embargo, se acotó la muestra de tal forma que todos
los adultos mayores de 65 años o más reciban Pensión 65, mientras que los menores
de 65 años no reciben el tratamiento. Es así que el grupo de tratamiento lo
representan los adultos mayores pobres y no pobres cuya edad supera los 65 años y
el grupo de control son los adultos mayores pobres y no pobres con menos de 65
años.
Pobre
No pobre
Control
Tratamiento
No recibe Pensión 65 Recibe Pensión 65
Pobre
Pobre
Menos de 65 años
65 años o más
No pobre
No pobre
Menos de 65 años
65 años o más
Como se puede apreciar, esta metodología es una extensión al modelo de regresión
discontinua planteada en el acápite 7.1, el cual, consideraba solamente a los adultos
mayores pobres en su muestra. Por esto, la ecuación a estimar es una variación lineal
simple de la ecuación (1) que tiene la siguiente forma:
𝑌𝑖 = 𝛾0 + 𝛾1 𝑃65𝑖 + 𝛾2 𝑃𝑜𝑏𝑖 + 𝛾3 𝑃65𝑖 ∗ 𝑃𝑜𝑏𝑖 + 𝑋 ′ 𝛽 + 𝜇𝑖 ,
(2)
en donde 𝑃65 es una variable dicotómica que toma el valor de 1 si la persona recibe
Pensión 65 (o tiene 65 años o más) y cero de otro modo, 𝑃𝑜𝑏 es otra variable
dicotómica que toma el valor de 1 si la persona es pobre y cero de otro modo, y 𝜇 es el
término de error. El coeficiente asociado a la interacción 𝑃65 y 𝑃𝑜𝑏 es el impacto
adicional del programa sobre los adultos mayores pobres respecto de los no pobres. El
supuesto de este modelo es que en ausencia del tratamiento, 𝑌 seguiría la misma
tendencia en el grupo de tratamiento y el grupo de control, lo que está capturado en
𝛾2 .
La segunda aproximación considera en la muestra a todos los adultos mayores pobres
y no pobres que reciben y no reciben Pensión 65, pero que tienen 65 años o más. Es
decir, hemos prescindido de los adultos mayores que tienen entre 60 y 64 años de
edad. De esta manera, el grupo de tratamiento son los adultos mayores pobres y no
pobres que reciben Pensión 65, mientras que el grupo de control está conformado por
los adultos mayores pobres y no pobres que no reciben Pensión 65.
25
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Pobre
No pobre
Control
No recibe Pensión 65
Pobre
65 años o más
No pobre
65 años o más
Tratamiento
Recibe Pensión 65
Pobre
65 años o más
No pobre
65 años o más
Esta aproximación ya no es una clara extensión de (1) y (2), pero sigue la misma
lógica de un modelo de Diferencia en Diferencias al controlar por la condición de
pobreza del adulto mayor con y sin tratamiento. La ecuación a estimar tiene la
siguiente forma:
𝑌𝑖 = 𝛿0 + 𝛿1 𝑃65𝑖 + 𝛿2 𝑃𝑜𝑏𝑖 + 𝛿3 𝑃65𝑖 ∗ 𝑃𝑜𝑏𝑖 + 𝑋 ′ 𝛽 + 𝜔𝑖 ,
(3)
en donde 𝑃𝑜𝑏 es una variable dicotómica que toma el valor de 1 si la persona es pobre
y cero si es no pobre, 𝑃65 es una variable dicotómica que toma el valor de 1 si la
persona recibe el programa (es tratado) y cero si no lo recibe, y 𝜔 es el término de
error. El coeficiente asociado a la interacción 𝑃65 y 𝑃𝑜𝑏 es el impacto del programa
sobre los adultos mayores pobres de 65 años o más. De la misma forma que en (2), el
supuesto de este modelo es que en ausencia del tratamiento, 𝑌 seguriría la misma
tendencia en el grupo de tratamiento y el grupo de control, que está capturado en el
coeficiente 𝛿2 .
26
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
8. Resultados
8.1.
Regresión discontinua
En la Tabla 11 se presentan los resultados del modelo bajo la metodología de
Regresión Discontinua (RD). El efecto de Pensión 65 sobre las horas trabajadas
semanalmente en la ocupación principal es negativo, aunque no significativo. De esta
forma, el acceso al programa no se traduce necesariamente en una reducción en las
horas trabajadas para las personas pobres mayores de 65 años. Ser mujer, por su
parte, si implica una menor cantidad de horas trabajadas en la ocupación principal
(columnas 1 y 2). Sin embargo, esto no necesariamente implica que las mujeres
trabajen menos, sino que las mujeres pueden dedicar más tiempo a labores
domésticas y cuidados de los menores de edad en el hogar (Gondim Teixeira, 2009) o
llevar a cabo trabajos no remunerados para sus familias (Kabeer, 2010).
Lo mismo ocurre con la edad, que resulta negativa y significativa en todos los casos.
Dos años más de edad implican una hora menos de trabajo a la semana en la
ocupación principal. Asimismo, las recaídas de enfermedades crónicas parecen tener
evidencia estadística de reducir la jornada laboral. Por otro lado, los adultos mayores
que viven en zonas urbanas trabajan en promedio más horas que en las zonas rurales.
De hecho, los adultos mayores que viven en zonas urbanas trabajan en promedio 3
horas semanales más en su ocupación principal que los adultos mayores que viven en
zonas rurales. Un efecto similar se presenta si el máximo nivel educativo alcanzado
por el adulto mayor es secundaria.
Finalmente, los adultos mayores que son independientes en su ocupación principal
dejan de laborar menos horas que los que se encuentran empleados. Esto último,
podría estar relacionado con el hecho de que el trabajo independiente permite ciertas
flexibilidades laborales en comparación con ser empleado; como por ejemplo,
flexibilidad en el horario de entrada y salida, jornada laboral menos extensa, etc.
Tabla 11: Regresión Discontinua
(1)
(2)
27
(3)
(4)
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Horas
-1.484
(1.113)
Horas
-1.025
(1.141)
Horas
-1.463
(1.574)
Horas
-0.637
(1.811)
Edad
-0.539***
(0.0607)
-0.507***
(0.0604)
-0.458***
(0.0834)
-0.565***
(0.0990)
Mujer
-6.556***
(0.717)
-6.662***
(0.794)
Zona
Urbana
3.450***
(0.732)
2.999***
(0.806)
3.196***
(0.968)
2.828**
(1.259)
Enfermedad
Crónica
-2.644***
(0.828)
-2.599**
(1.053)
-2.622**
(1.130)
Primaria
0.601
(0.746)
0.148
(1.039)
1.500
(1.141)
Secundaria
2.710**
(1.185)
2.031
(2.359)
3.583**
(1.558)
Superior
3.278
(3.143)
-0.390
(4.912)
5.500
(4.067)
Independiente
-4.197***
(1.310)
-7.307***
(2.093)
-1.696
(1.800)
Empleado
-8.592***
(2.312)
-13.92***
(3.879)
-4.771
(2.929)
Obrero
-2.317
(1.600)
-7.416***
(2.661)
0.591
(2.037)
Trabajo Fam.
No Remun.
0.313
(1.465)
-2.583
(2.166)
1.902
(2.382)
Trabajo del
Hogar
4.560
(4.236)
2.560
(4.533)
-24.10***
(2.019)
72.93***
(4.030)
66.30***
(5.472)
Si
2272
0.0965
73.65***
(6.673)
No
2098
0.100
Recibe
Pensión 65
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
71.84***
(3.892)
4370
0.114
4370
0.127
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
Para evaluar posibles heterogeneidades en los resultados descritos anteriormente, se
analizaron los resultados para mujeres y hombres por separado. Esto con el propósito
de indagar en algún tipo de comportamiento diferenciado de acuerdo al género. Los
28
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
resultados para las mujeres y hombres se encuentran en la columna 3 y 4 de la Tabla
11, respectivamente.
Se puede observar que existe una notoria diferencia en cuanto al efecto de contar con
educación secundaria. Para los adultos mayores hombres, el hecho de tener estudios
secundarios implica un mayor número de horas en la ocupación principal; mientras
que para las mujeres no parece ser un determinante importante. Por otro lado, las
mujeres reducen su jornada laboral en el caso de que sean independientes,
empleadas u obreras; mientras que si los hombres son trabajadores del hogar, dejan
de trabajar aproximadamente 24 horas a la semana en su ocupación principal.
Otra posible forma de evaluar un posible efecto heterogéneo en los adultos mayores,
es clasificarlos de acuerdo al grado de urbanidad en donde viven estas personas. En
efecto, un adulto mayor que vive y labora en una zona rural podría presentar
características distintas a un adulto mayor que vive y labora en una zona urbana (de
Brauw, Gilligan, Hoddinott, & Roy, 2015).
La tabla 12, muestra los resultados obtenidos para las zonas rurales. No se puede
encontrar un efecto significativo de recibir Pensión 65 sobre las horas trabajadas de
los adultos mayores hombres y mujeres. Las mujeres reducen su jornada laboral a
mayor edad, cuando presentan recaídas de enfermedades crónicas, cuando cuentan
con estudios superiores y cuando son independientes o empleadas. Por otro lado, los
hombres reducen su carga laboral cuando tienen más edad, cuando son empleados o
son trabajadores del hogar. El número de horas trabajadas en los adultos mayores en
zonas rurales es mayor cuando estos presentan nivel educativo primario.
Tabla 12: Regresión Discontinua para zonas rurales
(1)
Horas
1.630
(1.148)
(2)
Horas
2.115*
(1.122)
(3)
Horas
1.521
(1.646)
(4)
Horas
2.718
(1.889)
Edad
-0.602***
(0.0641)
-0.571***
(0.0645)
-0.537***
(0.0882)
-0.620***
(0.110)
Mujer
-5.556***
(0.816)
-6.505***
(0.907)
Recibe
Pensión 65
Enfermedad
Crónica
-3.470***
(0.968)
-4.010***
(0.947)
-2.329
(1.674)
Primaria
0.899
(0.864)
-1.167
(1.147)
2.653**
(1.267)
29
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Secundaria
9.254
(5.925)
3.371
(4.783)
12.97
(8.257)
Superior
-5.287***
(0.980)
-6.222***
(1.145)
0
(.)
Independiente
-4.322***
(1.539)
-6.089***
(1.897)
-1.271
(2.633)
Empleado
-18.14***
(6.656)
-15.62**
(7.364)
-26.80***
(2.826)
Obrero
-4.668
(2.857)
-5.887
(3.976)
-2.425
(4.070)
Trabajo Fam.
No Remun.
1.922
(1.720)
0.719
(2.038)
3.028
(3.781)
Trabajo del
Hogar
-24.91***
(1.876)
0
(.)
-22.80***
(2.826)
73.87***
(4.208)
75.40***
(4.394)
2116
0.0924
2116
0.121
68.87***
(5.910)
Si
1220
0.126
74.60***
(7.950)
No
896
0.0709
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
La Tabla 13, muestra los resultados obtenidos para las zonas urbanas. Un hallazgo
notoriamente distinto al de las zonas rurales es que el hecho de recibir Pensión 65 si
reduce la jornada laboral a la semana en estas zonas. De hecho, este efecto es mayor
para el caso de las mujeres. Para los hombres no parece haber una reducción
significativa en el número de horas trabajadas. Este resultado guarda concordancia
con el hecho de que las tasas de participación en el mercado laboral son más altas en
zonas rurales que en zonas urbanas para los adultos mayores (de Brauw, Gilligan,
Hoddinott, & Roy, 2015).
Tabla 13: Regresión Discontinua para zonas urbanas
(1)
Horas
-6.007***
(2.152)
(2)
Horas
-5.765***
(2.174)
(3)
Horas
-7.024**
(2.909)
(4)
Horas
-4.757
(2.998)
Edad
-0.429***
(0.129)
-0.396***
(0.131)
-0.241
(0.187)
-0.515***
(0.176)
Mujer
-7.482***
-7.201***
Recibe
Pensión 65
30
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
(1.088)
(1.271)
Enfermedad
Crónica
-1.696
(1.180)
-0.938
(1.703)
-2.813*
(1.491)
Primaria
0.110
(1.238)
0.806
(1.535)
-0.758
(1.995)
Secundaria
1.256
(1.508)
1.608
(2.571)
0.614
(2.106)
Superior
1.853
(3.411)
-0.839
(5.376)
2.422
(4.568)
Independiente
-4.149**
(2.077)
-11.44**
(4.575)
-1.881
(2.220)
Empleado
-8.284***
(2.625)
-17.91***
(5.575)
-4.570
(3.053)
Obrero
-2.001
(2.215)
-11.77**
(5.054)
0.934
(2.390)
Trabajo Fam.
No Remun.
-1.873
(2.155)
-9.482**
(4.594)
1.321
(3.237)
Trabajo del
Hogar
4.977
(4.865)
-2.367
(6.329)
0
(.)
70.58***
(8.809)
60.51***
(12.25)
Si
1052
0.0572
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
69.60***
(8.037)
2254
0.0795
2254
0.0887
76.45***
(11.64)
No
1202
0.0712
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
La edad ya no parece ser un factor determinante del número de horas trabajadas para
las mujeres. Sin embargo, ser trabajadora independiente, empleada, obrera
o
trabajadora familiar no remunerada reducen la jornada laboral semanal de esta
población. Para los hombres la edad y las recaídas en enfermedades crónicas son
determinantes para reducir el número de horas trabajadas a la semana.
8.2.
Diferencias en diferencias
Los resultados para la primera aproximación del modelo de diferencias en diferencias
(ecuación 2) se pueden apreciar en la Tabla 14. El efecto de Pensión 65 sobre las
horas trabajadas a la semana para los adultos mayores (que es equivalente a ser
adulto mayor de 65 años en esta especificación) es negativo y parcialmente
31
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
significativo. Este efecto parece ser más importante para los hombres que para las
mujeres (comparar columna 3 y 4).
Por otro lado, el efecto de ser adulto mayor pobre respecto de ser adulto mayor no
pobre implica un menor número de horas trabajadas, sobre todo para las mujeres. Los
hombres no parecen tener diferencias respecto de su condición de pobreza en su
oferta laboral. Cabe recordar que esta muestra no considera a todo el universo de
adultos mayores pobres y no pobres ya que se han eliminado las observaciones de
adultos mayores de 65 años o más que no reciben Pensión 65 en la muestra.
Asimismo, el efecto de ser pobre, condicional a recibir Pensión 65 (coeficiente
estimado de 𝑃𝑜𝑏𝑟𝑒 ∗ 𝑅𝑒𝑐𝑖𝑏𝑒 𝑃𝑒𝑛𝑠𝑖ó𝑛 65) no es significativo en ninguno de los casos.
Lo cual implica que los adultos mayores pobres y no pobres no cambian la decisión
óptima de su jornada laboral cuando estos reciben el programa en cuestión.
Al igual que en la aproximación de Regresión Discontinua, las mujeres trabajan, en
promedio, entre 5 y 6 horas a la semana menos que los hombres en la ocupación
principal. La edad sigue teniendo un efecto negativo y significativo sobre el número de
horas trabajadas.
Tabla 14: Primera aproximación de diferencias en diferencias
(1)
Horas
-1.404*
(0.783)
(2)
Horas
-1.756**
(0.802)
(3)
Horas
-0.958
(1.143)
(4)
Horas
-2.182**
(1.086)
Pobre
-0.698
(0.483)
-1.118**
(0.537)
-1.568*
(0.817)
-0.560
(0.718)
Pobre*Recibe
Pensión 65
-0.171
(0.781)
0.689
(0.813)
-0.246
(1.116)
1.065
(1.129)
Edad
-0.459***
(0.0413)
-0.430***
(0.0409)
-0.407***
(0.0712)
-0.446***
(0.0614)
Mujer
-5.435***
(0.551)
-5.903***
(0.599)
Zona
Urbana
5.925***
(0.570)
6.530***
(0.667)
6.195***
(0.798)
6.581***
(0.961)
Enfermedad
Crónica
-2.144***
(0.514)
-1.988***
(0.619)
-2.274***
(0.750)
Primaria
0.153
(0.554)
0.0797
(0.715)
0.939
(0.947)
Recibe
Pensión 65
32
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Secundaria
1.665*
(0.959)
1.372
(1.490)
2.398**
(1.204)
Superior
-0.857
(1.292)
-2.043
(1.894)
0.364
(1.565)
Independiente
-2.662***
(0.764)
-4.532***
(1.503)
-1.755**
(0.823)
Empleado
-5.240***
(1.037)
-7.346***
(1.887)
-4.125***
(1.205)
Obrero
-0.477
(1.007)
-5.985***
(1.867)
1.157
(1.112)
Trabajo Fam.
No Remun.
1.304
(0.882)
-0.940
(1.608)
1.492
(1.402)
Trabajo del
Hogar
0.216
(2.410)
-1.028
(2.513)
-9.606
(11.08)
65.38***
(2.659)
65.57***
(2.769)
12420
0.0968
12420
0.108
60.63***
(4.658)
Si
5532
0.0744
64.84***
(4.026)
No
6888
0.104
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
Nuevamente, las zonas urbanas tienen en promedio una jornada laboral con mayor
número de horas trabajadas a la semana que en las zonas rurales (6 horas semanales
más en promedio). Las recaídas de enfermedades crónicas, ser independiente,
empleada u obrera siguen teniendo evidencia de reducir el número de horas
trabajadas a la semana al igual que en el caso de la regresión discontinua vista
anteriormente. En el caso de los hombres, algunas características parecen diferir
como el hecho de ser trabajador independiente u empleado que ahora sí parecen
reducir su oferta laboral.
De la misma forma que en el caso anterior, se buscó algún tipo de efecto diferenciado
para los adultos mayores que residen en áreas urbanas y aquellos que residen en
áreas rurales. En las zonas rurales recibir Pensión 65 no tiene efecto alguno sobre la
oferta laboral de los adultos mayores sean estos hombres o mujeres (ver Tabla 15). Si
el adulto mayor es pobre, pareciera que este trabaja más en zonas rurales, aunque
este efecto no es muy significativo. Por último, el hecho de recibir Pensión 65 no
parece ser distinto para los adultos mayores pobres y los no pobres.
33
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Tabla 15: Primera aproximación de diferencias en diferencias para zonas rurales
(1)
Horas
0.297
(0.835)
(2)
Horas
0.496
(0.826)
(3)
Horas
1.822
(1.109)
(4)
Horas
-0.481
(1.091)
Pobre
0.104
(0.692)
1.261*
(0.734)
1.146
(0.896)
1.827
(1.257)
Pobre*Recibe
Pensión 65
0.322
(0.916)
0.660
(0.911)
-0.886
(1.154)
1.633
(1.454)
Edad
-0.527***
(0.0432)
-0.492***
(0.0432)
-0.492***
(0.0698)
-0.474***
(0.0615)
Mujer
-4.394***
(0.501)
-5.392***
(0.612)
Recibe
Pensión 65
Enfermedad
Crónica
-2.163***
(0.648)
-1.647**
(0.679)
-2.634***
(0.953)
Primaria
1.330**
(0.637)
0.652
(0.724)
2.487**
(1.073)
Secundaria
3.963***
(1.213)
3.887*
(2.227)
4.784***
(1.628)
Superior
6.878***
(2.164)
10.82**
(5.078)
6.560**
(2.645)
Independiente
-1.724**
(0.855)
-0.965
(1.564)
-2.081**
(0.939)
Empleado
-7.329***
(2.383)
-7.373*
(3.783)
-6.916**
(2.942)
Obrero
1.429
(1.221)
-1.430
(2.285)
2.275
(1.408)
Trabajo Fam.
No Remun.
3.277***
(1.015)
4.041**
(1.643)
-0.0496
(1.653)
Trabajo del
Hogar
-7.558
(8.217)
0.265
(8.509)
-25.43***
(1.883)
65.82***
(2.841)
59.78***
(4.648)
Si
3109
0.0754
64.19***
(4.006)
No
3766
0.0627
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
68.43***
(2.812)
6875
0.0635
6875
0.0805
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
34
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Asimismo, la Tabla 16 presenta los resultados para los adultos mayores en zonas
urbanas. Aquí se puede ver claramente que Pensión 65 si parece tener un efecto de
reducir el número de horas a la semana en la ocupación principal. Tanto hombres
como mujeres parecieran reducir en 8 horas su jornada laboral, aunque en el caso de
las mujeres este efecto es más importante que en el caso de los hombres.
Por su parte, ser adulto mayor pobre reduce entre 2 y 3 horas la jornada laboral
semanal de los adultos mayores en zonas urbanas, pero este efecto no es
diferenciado de aquellos que reciben Pensión 65. Esto quiere decir que aquellos que
son beneficiarios de Pensión 65 reducen el número de horas que trabajan a la semana
en la misma magnitud, independientemente de que sean pobres o no pobres.
Las demás variables de control son comparables con el resultado del modelo de
regresión discontinua, en donde las mujeres reducen sus horas laborales si tienen
recaída de enfermedad crónica, si tiene educación superior, si es trabajadora
independiente, empleada, obrera o es trabajadora familiar no remunerada. Los
hombres que viven en zonas urbanas disminuyen su oferta laboral conforme tienen
más edad y si se encuentran empleados.
Tabla 16: Primera aproximación de diferencias en diferencias para zonas
urbanas
(1)
Horas
-6.239**
(2.594)
(2)
Horas
-8.422***
(2.609)
(3)
Horas
-9.067**
(4.325)
(4)
Horas
-8.759*
(4.480)
Pobre
-1.466**
(0.624)
-3.345***
(0.732)
-3.957***
(1.322)
-2.616***
(0.877)
Pobre*Recibe
Pensión 65
-1.850
(2.735)
0.292
(2.730)
0.317
(3.924)
1.337
(4.469)
Edad
-0.261**
(0.108)
-0.272***
(0.104)
-0.153
(0.198)
-0.382***
(0.144)
Mujer
-6.849***
(0.882)
-7.073***
(0.929)
Recibe
Pensión 65
Enfermedad
Crónica
-1.726**
(0.699)
-1.894**
(0.954)
-1.531
(1.063)
Primaria
-0.155
(1.070)
-0.0821
(1.364)
0.304
(1.975)
Secundaria
-0.452
(1.413)
-0.837
(2.037)
0.158
(2.010)
35
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Superior
-4.015**
(1.643)
-5.554**
(2.641)
-2.728
(2.159)
Independiente
-3.151**
(1.314)
-9.221***
(2.578)
-0.953
(1.387)
Empleado
-6.025***
(1.305)
-11.41***
(2.707)
-3.920***
(1.333)
Obrero
-2.015
(1.506)
-10.98***
(2.976)
0.792
(1.565)
Trabajo Fam.
No Remun.
-1.280
(1.310)
-8.259***
(2.696)
3.096
(2.122)
Trabajo del
Hogar
0.0503
(2.686)
-5.984*
(3.428)
4.092
(15.51)
66.40***
(6.708)
58.47***
(12.23)
Si
2423
0.0485
70.12***
(9.301)
No
3122
0.0487
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
60.38***
(6.705)
5545
0.0562
5545
0.0714
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
Los resultados para la segunda aproximación del modelo de diferencias en diferencias
(ecuación 3) se pueden apreciar en la Tabla 17. El efecto de Pensión 65 sobre las
horas trabajadas a la semana para los adultos mayores es negativo y significativo en
todos los casos. De esta forma, ser beneficiario del programa hace que los adultos
mayores de 65 años o más reduzcan su jornada laboral entre 2 y 3 horas a la semana.
El efecto de ser pobre también reduce las horas trabajadas a la semana para los
adultos mayores de 65 años. Cuando condicionamos este efecto a recibir Pensión 65
vemos que hay un aumento en el número de horas trabajadas en los adultos mayores
pobres hombres. En otros términos, recibir Pensión 65 reduce el número de horas
trabajadas a la semana para las mujeres y este efecto es el mismo para las pobres y
no pobres. Sin embargo, recibir Pensión 65 reduce el número de horas trabajadas a la
semana para los hombres, pero este efecto es diferenciado, ya que los adultos
mayores no pobres reducen más sus horas laborales en comparación con los adultos
mayores pobres, que también reducen su jornada laboral, pero lo hacen en menor
grado.
El efecto negativo para las variables de edad y mujer se mantiene significativo y con la
misma magnitud que en las anteriores especificaciones. Las
36
recaídas en
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
enfermedades crónicas disminuyen las horas trabajadas. Las zonas urbanas siguen
presentando un mayor número de horas trabajadas a la semana. Al igual que en
anteriores especificaciones, el tener un nivel educativo secundario implica un mayor
número de horas laborales tanto para hombres como para mujeres. Ser independiente
o empleado reduce el número de horas trabajadas a la semana para los hombres; y
las mujeres que tienen trabajo familiar no remunerado trabajan más horas a la semana
que aquellas que tienen otros tipos de empleo.
Tabla 17: Segunda aproximación de diferencias en diferencias
(1)
Horas
-3.098***
(0.565)
(2)
Horas
-3.176***
(0.548)
(3)
Horas
-2.144***
(0.693)
(4)
Horas
-3.825***
(0.763)
Pobre
-2.004***
(0.430)
-1.610***
(0.452)
-1.669**
(0.733)
-1.125**
(0.541)
Pobre*Recibe
Pensión 65
1.080
(0.703)
1.653**
(0.690)
0.508
(0.977)
2.509***
(0.952)
Edad
-0.440***
(0.0336)
-0.410***
(0.0329)
-0.374***
(0.0432)
-0.427***
(0.0453)
Mujer
-4.735***
(0.464)
-5.135***
(0.549)
Zona
Urbana
5.544***
(0.684)
5.475***
(0.750)
6.880***
(0.890)
4.172***
(0.905)
Enfermedad
Crónica
-2.618***
(0.560)
-2.409***
(0.642)
-2.678***
(0.773)
Primaria
0.871
(0.528)
0.605
(0.671)
1.442*
(0.847)
Secundaria
3.140***
(0.771)
2.547*
(1.307)
4.047***
(1.018)
Superior
-1.926
(1.599)
-3.370
(2.503)
-0.683
(1.822)
Independiente
-1.361*
(0.813)
1.716
(1.369)
-2.951***
(0.921)
Empleado
-2.461*
(1.251)
-1.766
(1.696)
-2.721*
(1.552)
Obrero
0.998
(1.018)
1.340
(1.905)
0.405
(1.197)
Recibe
Pensión 65
37
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Trabajo Fam.
No Remun.
3.330***
(0.997)
6.945***
(1.467)
-0.693
(1.360)
Trabajo del
Hogar
2.457
(2.165)
2.616
(3.046)
11.97***
(2.941)
65.42***
(2.547)
63.46***
(2.683)
14644
0.0712
14644
0.0839
52.30***
(3.867)
Si
6625
0.0743
65.88***
(3.494)
No
8019
0.0693
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
Analizando la muestra de adultos mayores que viven en zonas rurales (ver Tabla 18)
se puede observar que lo anteriormente descrito en la Tabla 17 se cumple para los
adultos mayores hombres, quienes al recibir Pensión 65 laboran menos horas a la
semana, pero de estos, los pobres no reducen su jornada laboral en la magnitud en la
que lo hacen los no pobres.19 En el caso de las mujeres, parece no existir algún efecto
significativo del programa sobre su oferta laboral.
Tabla 18: Segunda aproximación de diferencias en diferencias para zonas
rurales
(1)
Horas
-2.388***
(0.631)
(2)
Horas
-2.286***
(0.610)
(3)
Horas
-0.719
(0.748)
(4)
Horas
-3.252***
(0.815)
Pobre
-1.471***
(0.543)
-0.315
(0.579)
-0.0805
(0.790)
-0.131
(0.791)
Pobre*Recibe
Pensión 65
1.989***
(0.757)
2.368***
(0.757)
0.690
(1.056)
3.560***
(1.102)
Edad
-0.510***
(0.0311)
-0.472***
(0.0312)
-0.431***
(0.0441)
-0.488***
(0.0446)
Mujer
-4.910***
(0.464)
-6.242***
(0.579)
-2.566***
(0.682)
-1.840***
(0.696)
-3.142***
(0.903)
1.049*
0.100
2.363**
Recibe
Pensión 65
Enfermedad
Crónica
Primaria
19
De hecho, el coeficiente que acompaña a la variable de Pobre*Recibe Pensión 65 cancela al
coeficiente que acompaña a Recibe Pensión 65, con lo cual los adultos mayores pobres que
reciben Pensión 65 no reducen el número de horas trabajadas en la ocupación principal a la
semana.
38
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
(0.579)
(0.686)
(0.909)
Secundaria
3.818***
(1.401)
7.461**
(3.424)
4.102***
(1.513)
Superior
0.641
(2.582)
-6.810
(4.656)
2.549
(2.769)
Independiente
-1.886*
(0.963)
1.319
(1.358)
-3.329***
(1.126)
Empleado
-2.630
(3.301)
1.553
(4.239)
-4.361
(4.167)
Obrero
0.779
(1.276)
2.177
(2.232)
-0.167
(1.502)
Trabajo Fam.
No Remun.
4.342***
(1.100)
8.042***
(1.451)
-0.880
(1.556)
Trabajo del
Hogar
17.04***
(6.302)
12.34
(8.121)
26.92***
(6.693)
67.59***
(2.556)
55.00***
(3.844)
Si
4077
0.0869
69.39***
(3.576)
No
4950
0.0541
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
70.05***
(2.326)
9027
0.0615
9027
0.0832
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
Por último, para la muestra de adultos mayores que viven en zonas urbanas, ser
beneficiario de Pensión 65 reduce las horas laborales de los adultos mayores, en
específico de las mujeres. Este efecto no es diferenciado de acuerdo al estatus de
pobreza, es decir, tanto las mujeres pobres como las mujeres no pobres reducen en
igual medida sus horas de trabajo a la semana en la ocupación principal cuando
reciben Pensión 65. Los adultos mayores pobres trabajan en 3 horas menos a la
semana que los adultos mayores no pobres.
Tabla 19: Segunda aproximación de diferencias en diferencias para zonas
urbanas
Recibe
Pensión 65
Pobre
(1)
Horas
-6.146***
(2.209)
(2)
Horas
-6.569***
(2.263)
(3)
Horas
-7.075**
(3.268)
(4)
Horas
-5.668
(4.152)
-2.841***
(0.736)
-3.070***
(0.735)
-3.537***
(1.267)
-2.377***
(0.829)
39
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Pobre*Recibe
Pensión 65
-0.130
(2.528)
0.705
(2.564)
0.468
(3.857)
0.581
(4.144)
Edad
-0.304***
(0.0693)
-0.289***
(0.0683)
-0.263***
(0.0917)
-0.310***
(0.0877)
Mujer
-4.711***
(0.826)
-4.243***
(0.939)
Enfermedad
Crónica
-2.474***
(0.891)
-2.948**
(1.247)
-1.732
(1.143)
Primaria
1.263
(0.855)
1.924*
(1.100)
0.491
(1.861)
Secundaria
2.922***
(1.055)
1.735
(1.487)
3.359*
(1.818)
Superior
-2.560
(1.903)
-3.334
(2.980)
-2.366
(2.396)
Independiente
-0.487
(1.368)
2.640
(2.676)
-2.335*
(1.303)
Empleado
-1.853
(1.637)
-1.776
(2.369)
-2.159
(1.861)
Obrero
1.841
(1.642)
1.520
(2.970)
1.170
(1.724)
Trabajo Fam.
No Remun.
1.897
(1.759)
4.950*
(2.839)
-0.279
(2.055)
Trabajo del
Hogar
1.442
(2.475)
2.309
(4.069)
9.523***
(2.695)
60.36***
(4.820)
51.93***
(7.455)
Si
2548
0.0339
62.88***
(6.016)
No
3069
0.0389
Constante
Mujer
Observaciones
R-cuadrado
62.09***
(4.706)
5617
0.0358
5617
0.0450
Errores estándar clusterizados a nivel provincial entre paréntesis
*
**
***
p < 0.10, p < 0.05, p < 0.01
Es importante señalar que hasta el momento, los métodos de estimación por
Regresión Discontinua y Diferencias en Diferencias dan cuenta de un efecto pequeño
del programa Pensión 65 sobre el número de horas trabajadas de los adultos mayores
hombres en las zonas rurales. Mientras que en las zonas urbanas, el efecto es
significativamente mayor para las mujeres adultas mayores.
40
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
9. Conclusiones
Evaluar el impacto del Programa Pensión 65 sobre las horas trabajadas en la
ocupación principal de adultos mayores genera grandes retos en la estimación del
efecto tratamiento, sobre todo, en un contexto en el cual la selección de los adultos
mayores beneficiarios del programa no fue aleatoria. De esta forma, los grupos de
control que aquí se presentan, son un intento por aproximarnos a un adecuado
contrafactual para los adultos mayores que reciben Pensión 65.
A partir de los resultados presentados bajo la metodología de Regresión Discontinua,
parece haber algún efecto negativo de recibir el programa sobre las horas trabajadas a
la semana. Sin embargo, no podemos garantizar de manera robusta que el estimador
encontrado sea el mismo para todos los beneficiarios del programa. De hecho, en las
zonas rurales no parece haber ningún potencial efecto sobre las horas trabajadas de
los adultos mayores hombres y mujeres que se encuentran ocupados. Por el contrario,
en las zonas urbanas parece haber algún efecto importante sobre todo para las
mujeres beneficiarias del programa.
Estos resultados se mantienen en cierto grado considerando aproximaciones de
diferencias en diferencias que presentan a grupos más amplios de comparación (de
control) para el grupo de tratamiento. Estos resultados muestran que sí existe una
relación negativa entre las horas trabajadas y ser beneficiario de Pensión 65.
Asimismo, este efecto es mayor en zonas urbanas que en zonas rurales, siendo las
mujeres las más propensas a reducir su jornada laboral en la ocupación principal que
los hombres.
Un resultado interesante de este análisis es que al parecer ser, tanto pobres como no
pobres reducen su horas de trabajo a la semana en la ocupación principal, pero son a
los adultos mayores no pobres a quienes se les atribuye un mayor efecto que a los
41
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
pobres. Esto también daría cabida a un efecto heterogéneo del programa dependiendo
del estatus de pobreza de los adultos mayores.
Por último, y dado que nuestra base de datos nos permite identificar variables
observables que son claves para que un adulto mayor pueda ser considerado un
potencial
beneficiario
de
pensión
65,
implementamos
una
metodología
de
emparejamiento para encontrar al mejor contrafactual de un adulto mayor beneficiario
del programa. De esta forma, podemos corroborar que el efecto de tratamiento (ATT)
es pequeño para toda la muestra en general, pero presenta ciertas heterogeneidades.
Nuevamente el mayor efecto está concentrado en las zonas urbanas, siendo las
mujeres las que reducen en mayor proporción sus horas trabajadas a la semana en su
ocupación principal.
10.
Recomendaciones de política
Dado que la población adulta mayor aún trabaja un considerable número de horas
(aproximadamente 54% en nuestra muestra) y que la transferencia del programa
Pensión 65 muestra un impacto positivo moderado sobre las horas de ocio que un
adulto mayor puede disfrutar. Se recomienda continuar con el programa y hacerlo
extensivo a toda la posible población beneficiaria.
En las zonas urbanas el programa parece tener mayor impacto; posiblemente debido a
una mayor oferta de trabajos disponibles que permitirían una reducción en el número
de horas laborales. Sin embargo, para las zonas rurales el programa no encuentra un
efecto significativo. La situación económica o de composición del hogar podría ser
determinante en este comportamiento. En estas zonas, se sugiere evaluar la
aplicación de varios programas. Tal vez, sea necesaria la aplicación conjunta de estos
para una lograr un aumento en el tiempo de descanso de la población adulta mayor.
Finalmente, es necesario reconocer las limitaciones de la Encuesta Nacional de
Hogares. La encuesta no posee información de las personas antes del inicio del
programa, por lo que nuestras inferencias se basan en datos de corte transversal. La
ENAHO, además, posee información auto-reportada, y no se puede cotejar si la
persona se encuentra (o no) en el padrón de beneficiarios de Pensión65. Hacia inicios
del próximo año estará disponible un panel de datos de beneficiarios del programa
sobre el cual se podrán cotejar estos primeros resultados.
42
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
11.
Bibliografía
Aguila, E., Mejía, N., Pérez-Arce, F., & Rivera, A. (2013). Programas de Pensiones No
Contributivas y su Viabilidad Financiera: El Caso de México. RAND Population
Research Center.
Angrist, J., & Pischke, J.-S. (2009). En J. Angrist , & J.-S. Pischke, Mostly Harmless
Econometrics. Princeton University Press.
Ardington, C., Case, A., & Hosegood, V. (2009). Labor supply responses to large social
transfers: longitudinal evidence from South Africa. American Economic Journal:
Applied Economics, 1(1):22-48.
Barrientos, A. (2003). What is the impact of non-contributory pensions on poverty?
Estimates from Brazil and South Africa. Institute for Development Policy and
Management, University of Manchester.
Barrientos, A., & Lloyd-Sherlock, P. (2002). Non-contributory pensions and social
protection. Paper for the series "Issues in Social Protection", published by the
Social Protection Sector, International Labour Organization.
Becker, G. S. (1976). The Economic Approach to Human Behaviour. University of
Chicago Press.
Bernal, R., & Peña, X. (2011). Método de Regresión Discontinua. En R. Bernal, & X.
Peña, Guía Práctica para la Evaluación de Impacto (págs. 189-242). Bogotá,
Colombia: UNIANDES.
Berniell, I. (2014). The Impact of a Permanent Income Shock on the Situation of
Women in the Household: the case of a pension reform in Argentina. Argentina:
CEMFI.
Bertrand, M., Miller, D., & Mullainathan, S. (2000). Public Policy and Extended
Families: Evdence from South Africa. Cambridge: NBER Working Paper No.
7594.
43
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Bertrand, M., Mullainathan, S., & Miller, D. (2003). Public policy and extended families:
evidence from pensions in South Africa. The World Bank Economic Review.
Bosch, M., & Guajardo, J. (2012). Labor Market Impacts of Non-Contributory Pensions:
The Case of Argentina's Moratorium. Inter-American Development Bank, Labor
Markets and Social Security Unit.
Carvalho, F. (2008). Old Age Benefits and Retirement Decisions of Rural Elderly in
Brazil. Massachusetts.
Case, A., & Deaton, A. (1998). Large Cash Transfers to the Elderly in South Africa. The
Economic Journal 1330-1361.
de Brauw, A., Gilligan, D., Hoddinott, J., & Roy, S. (2015). Bolsa Familia and
Household Labor Supply (Vol. 63). Economic Development and Cultural
Change.
Durán Valverde, F., Mendoza De Souza, W., & Picado Chacón, G. (2009).
Proyecciones demográficas y financieras para el análisis de la viabilidad de las
pensiones no contributivas en el Perú. En UNFPA, OIT, Cáritas del Perú, &
HelpAge International, Envejecimiento con Dignidad: Pensiones No
Contributivas para Reducir la Pobreza en el Perú (págs. 37-87). Lima.
Federación Internacional de Administradoras de Fondos de Pensiones (FIAP). (2011).
Programas de Pensiones No Contributivas en Países FIAP. Santiago.
Galiani, S., Gertler, P., & Bando, R. (2014). Non-Contributory Pensions. University of
Maryland and Inter-American Development Bank University of California,
Berkeley Inter-American Development Bank (IDB Wornking Paper Series; 517).
Gondim Teixeira, C. (2009). ¿Cuál es el Impacto de las Transferencias Monetarias
Sobre la Oferta de Mano de Obra? Brasil: International Policy Centre for
Inclusive Growth.
Imbens, G., & Kalyanaraman, K. (2009). Optimal Bandwith Choice for the Regression
Discontinuity Estimator. Cambridge: National Bureau of Economic Research.
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). (2012). Estado de la Población
Peruana. Lima.
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). (2013). Estado de la Población
Peruana. Lima.
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). (2013). Evolución de la Pobreza
Monetaria 2007-2012. Lima.
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). (2014a). Estado de la Población
Peruana 2014. Lima.
Instituto Nacional de Estadística e Informática (INEI). (2014b). Evolución de la pobreza
monetaria 2009 - 2013. Lima.
44
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
Kabeer, N. (2010). Pesions and Transfers: Social Protection in Old Age. En N. Kabeer,
Gender and Social Protection Strategies in the Informal Economy (págs. 235260). Routledge India.
Lúcia Kassouf, A., & Rodrigues de Oliveira, P. (2012). Impact evaluation of the
brazilian non-contributory pension program Benefício de Prestacao Continuada
(BPC) on family welfare. Sao Paulo.
Malhotra, R., & Kabeer, N. (2002). Demographic Transition, Inter-generational
Contracts and Old Age Security: An Emerging Challenge for Social Policy in
Developing Countries. Brighton: Institute of Development Studies.
MIMP. (2013). Plan Nacional para las Personas Adultas Mayores 2013-2017. Lima:
Ministerio de la Mujer y Poblaciones Vulnerables (MIMP).
Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social (MIDIS). (2015). Pensión 65. Obtenido de
http://www.pension65.gob.pe
Ministerio de Desarrollo e Inclusión Social. (2014). Pensión 65. Recuperado el Agosto
de 2014, de www.pension65.gob.pe
Paz, J. A. (2010). Envejecimiento y Empleo en América Latina y el Caribe (Vol.
Documento de Trabajo No. 56). Geneva: Organización Internacional del
Trabajo.
Pensión 65, MIDIS. (2012). Plan Operativo Institucional 2012. Lima.
Pensión 65, MIDIS. (2013). Plan Operativo Institucional 2013. Lima.
Posel, D., Fairburn, J., & Lund, F. (2004). Labour migration and households: A
reconsideration of the effects of the social pension on labour supply in South
Africa. Ninth Annual Conference on Econometric Modelling for Africa, School of
Economics, University of Cape Town.
Sienaret. (2008). The labour supply effects of the South African Sate Old Age Pension:
Theory, Evidence and Implications. Sothern Africa Labour and Development
Research Unit. Working Paper Number 20. Cape Town: SALDRU, University of
Cape Town.
SISFOH. (2010). Metodología de Cálculo del Índice de Focalización de Hogares. Lima,
Perú: Ministerio de Economía y Finanzas. Dirección General de Asuntos
Económicos y Sociales.
UDAPE. (2013). El Impacto de la Renta Dignidad: Polìtica de Redistribución del
Ingreso, Consumo y Reducción de la Pobreza en Hogares con Personas
Adultas Mayores. Bolivia.
Willmore, L. (2006). Universal Pensions for Developing Countries. Laxenburg, Austria:
International Institute for Applied Systems Analysis (IIASA).
45
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
46
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
______________________________________________________________________________________________________________________________
12.
Anexos
Anexo 01
Cuadro 1: Marco Descriptivo - Línea de Tiempo
Fecha
Documento
Condiciones
- Requisito: Personas mayores a 75 años (12.5% pobreza extrema – Enaho 2009)
setiembre 2010
- Programa asignado a: Ministerio de la Mujer y Desarrollo y JUNTOS
Decreto de Urgencia Nº 059‐2010
- Departamentos: Huancavelica, Apurímac, Ayacucho, Lima Metropolitana (Extrema Pobreza –
“Gratitud”)
- Subvención de 100 soles por persona (No heredable, no devengado, no embargable)
- JUNTOS recibe administración de Pensión65
- Asignación de pensión a distritos con pobreza mayor al 50% según mapa de pobreza 2009 INEI
- Departamentos: Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, Puno, Ica y Huánuco.
DS 081-2011-PCM
19/10/2011
- Requisitos:
1. Mayor o igual a 65 años extrema pobreza, según SISFOH
2. No tener pensión ni subvención de ESSALUD
3. No ser beneficiario de programas sociales a excepción del SIS y PRONAMA
4. Tener DNI + Evaluación de elegibilidad del SISFOH
Decreto Urgencia 056-2011
- Se dicta monto de subvención económica: 125 soles por persona
- Se da por concluido el programa de GRATITUD
- Creación del MIDIS (Organización y funciones)
- Asignación de competencias:
20/10/2011
LEY N° 29792
1. Desarrollo Social
2. Superación de pobreza
3. Promoción de inclusión y equidad social
4. Protección social de población en situación de riesgo y abandono
47
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
______________________________________________________________________________________________________________________________
DS 001-2012-MIDIS
01/01/2012
- Se establece el formato de Afiliación al programa de Pensión 65
- El MIDIS recibe administración de Pensión 65
DS 006-2012-midis
- Se da por concluido el encargo de proceso de administración y ejecución de Pensión a JUNTOS
- Departamentos: Apurímac, Ayacucho, Huancavelica, Puno, Ica, Huánuco y los del Programa Piloto
“Gratitud” (Extrema pobreza) Amazonas, Ancash, Cajamarca, Cusco, Junín, La Libertad, Lima, Piura,
Callao.
- Cambio en umbral de pobreza de más de 50% a 40% (Según SISFOH la población potencial está
entre 40% y 50%)
09/05/2012
Resolución Ministerial 065-2012-MIDIS
- Formalización de Pensión y su adjudicación formal al MIDIS. JUNTOS realiza las acciones necesarias
para su cumplimiento.
25/06/2012
Decreto de Urgencia N° 016-2012
- Se amplía la cobertura de Pensión 65, así como se brinda un incremento en el presupuesto de INEI
para acelerar el empadronamiento complementario de hogares (Incremento de hasta S/. 8 500 000,00)
02/07/2012
Resolución Ministerial N° 107
- Se incrementa el presupuesto del programa en S/. 50’000,000. Lo cual permite mejorar la meta de
beneficiarios del 2012
- Incorporación de distritos: Arequipa, Tacna, Lambayeque, Loreto, Madre de Dios, Moquegua, Pasco,
06/07/2012
DS 009-2012-MIDIS
San Martín, Tumbes, Ucayali.
- Se permite que los beneficiaros del programa reciban Asistencia Alimentaria
- Se permite que los beneficiarios de JUNTOS se integren también a Pensión 65
- Se establece que el MIDIS debe presentar su evaluación del programa en el 2014
14/12/2012
DS 015-2012-MIDIS
- Se establece que los que viven en el calle y no se encuentren en el padrón de SISFOH recibirán una
clasificación temporal de pobres extremos por 6 meses
- Se reconfirma que el presupuesto del MIDIS proviene del Pliego 040 y no del Tesoro Público
10/05/2013
Resolución Directoral N° 024-2013–MIDIS/P65- - Se reemplazan los formularios de afiliación y desafiliación presentados en los anexos de los Decretos
001DE
y 002-2012-MIDIS
por los formularios de afiliación N° 1000 y desafiliación N° 1001
Fuente: Manual de Operaciones 2012-2013 de Pensión2012-MIDIS
65. Elaboración
propia.
respectivamente.
48
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
______________________________________________________________________________________________________________________________
Anexo 02
Cuadro 2: Procesos de Actividades – Plan Operativo 2013 MIDIS
Actividades
1.
2.
Identificación y registro de
Sistema de identificación y registro de
potenciales usuarios del
potenciales
Programa.
implementado y operando.
Afiliación de usuarios.
Número de personas de 65+ afiliadas
usuarios
del
Programa
como usuarias del programa.
3.
4.
Presupuesto 2013
Sistema de información del
Oportuna gestión de la SBS, AFP, ONP en la
Programa
validación de la condición de pensionistas
Reportes del padrón de usuarios
Se cuenta con la disponibilidad oportuna de
los recursos
Entrega de la subvención
Número
monetaria a los usuarios.
transferidas.
Verificación de la
Número de usuarios de Pensión 65 a los
Se cuenta con el apoyo de los gobiernos
supervivencia de los
que se les ha realizado la verificación de
locales y gobiernos regionales para realizar el
usuarios.
su estado de supervivencia.
subvención
monetaria
S/. 5,000,000
S/. 10,445,416
Atención oportuna del Banco de la Nación en
Sistema de información del
los puntos de pago cerca del domicilio de los
Programa
S/. 407,940,000
usuarios
proceso de verificación de su estado de
Sistema de información del
supervivencia
Programa
S/. 10,000,000
Se cuenta con la disponibilidad oportuna de
los recursos
Oportuna gestión de la RENIEC
5.
Articulación intersectorial y
Número
con los Gobiernos
comunidades que han recibido propuestas
Regionales y Locales para
para implementar y fortalecer servicios
implementar y fortalecer
sociales para el Adulto Mayor.
de
gobiernos
locales
y
Cooperación de las entidades del gobierno
local, de líderes y autoridades de la
Sistema de información del
comunidad. Usuarios del Programa están
programa
servicios sociales.
comunitarias
Gestión Administrativa
Fuente:
Plan
S/. 11,339,500
interesados en participar en las dinámicas
Operativo
2013
MIDIS
(Pensión
49
S/. 8,731,284
65,
MIDIS,
2013).
Elaboración
propia.
Impacto laboral potencial del acceso a Pensión 65: una primera aproximación
____________________________________________________________________________
50