“El problema de las agresiones contra dentistas”

Dr. Bernardo Perea Pérez
Vocal de la Junta de Gobierno del Ilustre Colegio Oficial de
Odontólogos y Estomatólogos de la I Región.
Presidente de la Comisión Deontológica.
“El problema de las
agresiones contra
dentistas”
Con mucha frecuencia leemos en la prensa noticias sobre agresiones contra
profesionales sanitarios. Suelen referirse a médicos de centros de salud u hospitales o a personal de enfermería. Muy raramente encontramos noticias relacionadas con agresiones a los dentistas.
¿Qué entendemos por agresiones contra dentistas?. Cualquier comportamiento que suponga una agresión física, verbal o situación de acoso que sufra
un dentista en el ejercicio de su profesión.
¿Estamos los dentistas exentos de este problema?. Evidentemente no. Con
cierta frecuencia llegan a nuestra Comisión Deontológica noticias acerca de actitudes violentas de pacientes que habitualmente no son denunciadas. Y también
con frecuencia, y esto nos preocupó mucho, colegiadas jóvenes nos han comunicado (de forma más o menos clara) situaciones próximas al acoso por parte
de pacientes o dueños de clínicas, y esto no es admisible bajo ninguna circunstancia.
¿Por qué, a diferencia de otros profesionales sanitarios, no tenemos información clara y rápida acerca de estos hechos?. Existen en nuestro criterio varios
motivos. El primero es el ámbito en el que se produce la agresión. Una agresión
en un medio hospitalario o en un centro de salud es rápidamente conocida por
todo el personal de dicho centro, las representaciones sindicales, los gerentes,
etc. La noticia rápidamente se amplifica y se hace pública. En cambio, una agresión producida en el reducido ámbito de la consulta dental, habitualmente no
trasciende. Se denuncie o no, normalmente la sociedad no se entera de los hechos. El segundo motivo de la falta de información pública sobre las agresiones
a dentistas es la repercusión judicial que tienen. Una agresión contra un profesional sanitario que trabaje en la sanidad pública suele ser considerado por los
tribunales como un delito de atentado contra la autoridad, y las penas suelen
ser importantes. Consecuentemente, los medios de comunicación se hacen eco
de estas sentencias. La trascendencia jurídica de una agresión contra un profe-
sional sanitario que trabaje en el ámbito privado (como le ocurre a la gran mayoría de los dentistas) es mucho menor. Y eso no es noticia.
¿Qué está haciendo el Colegio ante este problema?. Desde el Colegio pensamos que, en primer lugar, debemos conocer la situación real para poder actuar
adecuadamente. Para ello hemos diseñado una serie de acciones. La primera
fue la realización de una encuesta a toda la colegiación. Se enviaron el pasado
año, lo recordaréis, 5.000 encuestas a toda la colegiación de las que hemos recibido aproximadamente 1.100 contestadas, esto es, algo más del 20%. En este
momento se está finalizando el estudio de los cuestionarios, y si los resultados
indican una relativa frecuencia de agresiones (y así lo parece) tendremos que
tomar medidas que garanticen nuestros derechos. La idea que esta Junta de Gobierno tiene es crear un “Observatorio de violencia contra los colegiados” que
reciba las quejas de aquellos de nuestros compañeros que se sientan agredidos,
y asesorarlos. Incluso en casos de especial relevancia el Colegio podrá ejercer la
acusación particular contra los agresores.
Esperamos con estas medidas controlar esta nueva lacra que ha surgido en
los últimos tiempos y que no es más que otra cara del problema principal: la
disminución del respeto que la sociedad siente por todos sus profesionales sanitarios.