EL POSICIONAMIENTO DEL DÓLAR EN LAS

EL POSICIONAMIENTO DEL DÓLAR EN LAS RELACIONES ECONÓMICAS
INTERNACIONALES DURANTE EL PERÍODO POST SEGUNDA GUERRA MUNDIAL
(1944 – 1955): IMPACTO EMPRESARIAL
DE TRANSNACIONALIZACIÓN
ESTADOUNIDENSE EN EL EXTREMO ORIENTE
El objetivo de este ensayo es comprender el surgimiento del sistema monetario y
financiero internacional a raíz de la segunda gran conflagración mundial, interpretado de
acuerdo con los preceptos teóricos de política económica planteados por John Maynard
Keynes, así como de Harry Dexter White; asimismo, analizar el desarrollo de las
relaciones económicas internacionales a mediados del siglo XX con la firma de los
Acuerdos de Bretton Woods de 1944 en los que se estableció al dólar estadounidense
como el medio de pago internacional, la creación del Fondo Monetario Internacional y del
Banco Internacional de Reconstrucción y Fomento, actualmente denominado Banco
Mundial. Por otra parte, demostrar que en el período 1950-1955, el apoyo financiero del
Gobierno de Estados Unidos así como de sus empresas transnacionales en la
reactivación económica, comercial e industrial de Extremo Oriente, le permitieron
posicionar su divisa clave en las economías de Japón, Corea del Sur y Taiwán.
El posicionamiento del dólar como la divisa de pago internacional tiene su antecedente
desde el término de la Primera Guerra Mundial (IGM),
cuando Estados Unidos se
convirtió en un país acreedor de préstamos que otorgó a las naciones en conflicto tales
como Gran Bretaña y Francia. Posteriormente la divisa norteamericana también continuó
consolidándose tras la crisis de 1929 que significó el casi derrumbamiento del sistema
económico capitalista que puso en trance a las relaciones económicas internacionales y
por consecuencia el comercio internacional se hundió, el autarquismo se desarrolló y cada
país hizo la guerra por su cuenta, con las trágicas consecuencias de la no solución a la
crisis y del comienzo de la Segunda Guerra Mundial 1. La gran depresión de 1929 se
caracterizó por una sobreproducción de Estados Unidos y países europeos que habían
participado en la IGM; ésta generó una baja considerable en los precios básicos y
secundarios del mercado interno en el Estado norteamericano, así como del comercio
1
José Navarro and Teresa González, Historia universal (México: Pearson Educación,
1998), 361.
internacional ocasionando el subconsumo por concepto de falta de poder adquisitivo de
sus connacionales y de la población europea occidental. Otro de los efectos del crack del
29 fue la extensión del desempleo que provocó el aumento de solicitudes de préstamos
bancarios 2 que desencadenaron la falta del control de la deuda pública, así como el déficit
presupuestal derivado del desequilibrio entre la falta de liquidez del erario público, las
especulaciones en las corredurías del mercado accionario y el incremento de las tasas de
interés en la cartera de préstamos. Tal situación disminuyó los excedentes económicos
del producto interno bruto de Estados Unidos, que a su vez deterioró la capacidad de
pago y de sostenibilidad financiera de sus empresas e instituciones bancarias; como
consecuencia, el crack se extendió con los demás Estados que sostenían relaciones
económicas internacionales con Estados Unidos.
Cabe agregar que los efectos de este problema se extendieron globalmente a países de
América Latina y del mercado asiático reflejados en el detrimento del precio de sus
productos de exportación, es decir, la descapitalización económica de los Estados
afectados por el crack de 1929 les limitó el volumen de importación de productos, los
cuales debían ser depreciados por los mercados anteriormente mencionados a fin de
lograr su demanda, la cual era mínima.
De lo anterior derivan dos aspectos importantes: primero,
la sobreproducción y el
subconsumo de productos, en el período 1929-1933, provocó una baja de precios de los
productos agrícolas e industriales 3 que no podían ser demandados en su mercado
interno; asimismo, la depresión de la economía norteamericana paralizó a sus empresas
de bienes de capital ocasionando con ello recortes de trabajadores y por consecuencia los
salarios disminuyeron periódicamente (véase figura 1).
2
La generación de liquidez bancaria para el otorgamiento de préstamos partió de la venta
de acciones en el mercado de valores estadounidense, lo que provocó en mayor medida
el fenómeno de la especulación bursátil así como la descapitalización entre bancos
nacionales y extranjeros.
3
Anónimo, ed., La crisis económica de 1929: causas y desarrollo, (Albacete: Instituto
Bachiller Sabuco, 2015), http://bachiller.sabuco.com/historia/crisis29 (Consultado el 5-272015)
Figura 1. Efectos de la crisis estadounidense en precios de productos, empleo y salarios
en el período 1929 – 1933.
AÑOS
PRECIOS AL POR
MAYOR
EMPLEO SALARIOS
1929
95.3
97.5
100.5
1930
86.4
84.7
81.3
1931
73.0
72.2
61.5
1932
64.8
60.1
41.6
1933
65.9
64.6
44.0
Fuente: Instituto Bachiller Sabuco, Albacete, España.
En la figura 1 se muestra la caída en porcentajes de los precios de productos del mercado
norteamericano, de empleo y salarios a consecuencia del aumento de la sobreproducción
y del subconsumo durante su depresión económica de 1929 a 1933.
De igual manera, la caída considerable de la bolsa de valores en Wall Street de Nueva
York, entre 1929 y 1932, agravó la depresión económica de Estados Unidos, que afectó a
diversos Estados europeos, latinoamericanos y asiáticos que tenían también títulos de
crédito en el mercado accionario norteamericano que había crecido en grandes
proporciones debido a la desmesurada especulación bursátil que desajustó la compra –
venta de acciones, así como las operaciones de crédito, lo que ocasionó contracciones de
la industria de la construcción, quiebra de algunas empresas, retirada de varios capitales
invertidos en Europa, cuando el gobierno de Estados Unidos a su vez les restringía el
otorgamiento de empréstitos4 para proteger a su banca, instituciones financieras y
mercado de capitales (véase figura 2).
Figura 2. Efectos de la depresión económica en el mercado de valores de Estados Unidos
durante el período 1929-1932.
250
200
150
100
50
0
1924
1925
1926
1927
1928
1929
1930
1931
1932
1933
Fuente: Instituto Bachiller Sabuco, Albacete, España.
En la figura 2 se muestra el progresivo desplome de los índices de cotizaciones del
mercado de valores de Estados Unidos debido al aumento de especulación en la compraventa de títulos de crédito por parte de entidades bancarias norteamericanas y
extranjeras.
Por otra parte, en respuesta al problema de la falta de liquidez sumada al detrimento de la
producción nacional que deterioró significativamente el ciclo económico de las
transacciones bancario-comerciales de Estados Unidos, el Gobierno de Roosevelt inició,
4
Anónimo, ed., La crisis económica de 1929: causas y desarrollo, (Albacete: Instituto
Bachiller Sabuco, 2015), http://bachiller.sabuco.com/historia/crisis29 (Consultado el 5-272015)
el 9 de Marzo de 1933, la aplicación de la política del New Deal para hacer frente a esa
situación. La medida consistió a nivel local una mayor participación del Estado
conjuntamente con su población empresarial y laboral para reorganizar su estructura
comercial orientada en la ocupación, producción y exportación de productos; controlando
la importación de commodities sin la fijar barreras arancelarias y no arancelarias
arbitrarias, esto es, en su dimensión internacional la política del New Deal instrumentó la
estrategia de la “Buena Vecindad” que promovió una la colaboración económica, social,
financiera y comercial de Estados Unidos hacia otros Estados con los que mantenía
relaciones diplomáticas estables e implicó la reducción de las barreras aduaneras. En
1934 se aprobó el Acta de Acuerdo de Comercio Recíproco, que autorizaba la aprobación
de acuerdos bilaterales con distintos países y permitía reducciones de aranceles hasta del
50%. En la misma línea de estímulo para el comercio internacional se creó el Banco
Export/Import, también en 1934, que si bien inicialmente prestaba dinero a las empresas
norteamericanas que negociaban en el extranjero, después extendió su acción a las
repúblicas latinoamericanas con la condición de que los préstamos otorgados por ese
banco fueran empleados en la adquisición de importaciones estadounidenses. 5 De lo
anterior se tiene que el intervencionismo del Estado se caracteriza por una política
económica que tiene el objetivo de proteger y fomentar la ocupación, el ahorro, la
inversión y las exportaciones de sus productos potenciales, principio académico que fue
planteado por el economista inglés John Maynard Keynes en su obra “Teoría general de
la ocupación, el interés y el dinero” publicada en el año de 1936.
La depresión de 1929 y los estragos de la IGM influyeron en el replanteamiento teórico de
la política económica orientada a una búsqueda del Estado en términos académicos e
institucionales para la reactivación de su ciclo productivo perfilado en el comercio exterior,
que en este caso destacó el mercado de Estados Unidos. De lo anterior, Keynes planteó
que la corrección de la macroeconomía de un Estado estriba en el restablecimiento de su
balanza de pagos a partir del fomento al empleo y al ingreso; el primero produce
commodities para las exportaciones y de éstas el Estado percibe ingresos que destina a
su sector público para invertir en programas de ocupación, de infraestructura y demás
programas de asistencia social. De esta manera, a medida que aumenta el ingreso de una
5
Juan Pereira, Historia de las relaciones internacionales contemporáneas (Barcelona:
Ariel, 2001), 339.
comunidad, ésta destina una cantidad absoluta mayor al consumo, pero a una tasa
proporcionalmente menor respecto al incremento del ingreso. En consecuencia, ante
aumentos del ingreso el porcentaje destinado al ahorro será mayor, siempre y cuando el
aumento del volumen de ocupación eleve el ingreso real de la comunidad; sin embargo,
de no existir un volumen de inversión equivalente a los ahorros, bajarán la demanda
global y el volumen del empleo y, por tanto, los ingresos de los empresarios 6. En este
sentido, Keynes establece que el equilibrio del sistema económico del Estado se alcanza
cuando la ocupación es plena y genera el ingreso, es decir el ingreso ( Y ) es igual al
equilibrio de las siguientes variables: el empleo ( E ), el ahorro ( S ), la inversión ( I ) y el
consumo ( C ), de esta forma, el producto constituye la oferta global ( Z ) y el ingreso de la
demanda global ( D ); por consiguiente, Z y D constituyen el nivel de empleo, expresados
de la siguiente manera: Y = (E + S + I + C) donde Z + D = E.
En relación al aspecto anterior, la estrategia de Estados Unidos que llevó a cabo para
posicionarse comercial y monetariamente en las relaciones económicas internacionales
entre 1933 y a principios de la IIGM, consistió en la adopción una política estatista que
coordinara la reactivación económica de su escala productiva retomando como base
diplomática, los beneficios que se derivarían del New Deal en lo concerniente al
panamericanismo que emprendió el gobierno de Franklin Delano Roosevelt para
colaborar en materia de cooperación y protección
a las soberanías de los Estados
latinoamericanos ante las tendencias expansionistas de diversas fuerzas europeas que
pretendían invadir y / o intervenir en sus asuntos políticos, económicos y sociales. En este
sentido, se suscribió la Carta de la Habana de 1940 que establecía el apoyo del Estado
Norteamericano conjuntamente con los miembros del movimiento panamericanista en
salvaguardar la soberanía de un Estado latinoamericano ante el intervencionismo de un
Estado Europeo; no obstante, la postura de Estados Unidos pretendía un interés más
económico que de cooperación multilateral, en el sentido de aperturar su comercio
exterior hacia América Latina para que se constituyera en su principal proveedor de
insumos y materias primas a precios preferenciales 7, lo que significó la acumulación de
productos agrícolas como ganaderos para satisfacer las necesidades de consumo de la
6
Ricardo Torres, Teoría del comercio internacional (México: Siglo XXI, 1976), 148 – 151.
7
Los precios preferenciales se constituyen a partir de la disminución del valor económico
de bienes y servicios que se ofertan a la demanda en términos de crédito.
sociedad norteamericana y administrando por parte del Gobierno de Roosevelt una
proporción del volumen de esos productos importados para un óptimo abastecimiento de
perecederos
en
casos
de perturbaciones
económicas derivadas
de conflictos
interestatales, de desastres naturales o de los efectos bélicos de otros Estados-Nación
que pudieran afectar a su ciclo económico-productivo.
Así, Estados Unidos impulsó su política económica
de crecimiento hacia fuera, en
consideración de los principios keynesianos, con el objeto de introducir bienes de capital y
servicios financieros de apoyo intergubernamental hacia las economías latinoamericanas
en pleno movimiento del panamericanismo, ventaja que generó importantes excedentes
económicos que incrementaron su producto nacional bruto e ingresos destinados al
financiamiento de la ocupación.
Por otra parte, el inicio de la IIGM, provocada entre otras causas por los efectos de la
decadencia de la Sociedad de Naciones, del surgimiento de los totalitarismos europeos
marcados por el fascismo y nazismo, las tendencias expansionistas de Japón hacia las
islas de Pacífico -cuyo ataque a la base militar de Pearl Harbor el 7 de diciembre de 1941
originó la entrada de Estados Unidos en esta conflagración mundial-, significó también
una oportunidad geopolítica para incrementar aún más su capacidad productiva,
económica y comercial, en el sentido que ese país emprendió un programa de
remilitarización que sustentó la ampliación de su industria marcial complementada con el
apoyo económico y exportación de víveres, equipo bélico, materias primas y productos
farmacéuticos a los Aliados que experimentaban significativas bajas de efectivos como de
civiles en sus respectivos territorios ante los constantes ataques de las fuerzas del eje de
Berlín-Roma-Tokio.
El contexto de este conflicto militar se caracterizó por la reorganización de Europa y el
Pacífico en cuanto a su producción industrial, acompañado por una inmensa destrucción
material en Reino Unido, Francia, Alemania y en el Japón a causa de los bombardeos
aéreos concentrados en todos los países ocupados, en la antigua Unión Soviética y en
Alemania por la invasión armada. El total de las pérdidas materiales de los Aliados
excedió 20, 000, 000 de toneladas 8 de infraestructura industrial y bélica.
8
David Thomson, Historia mundial de 1914 a 1968 (México: Fondo de Cultura Económica,
1992), 199-200.
A su vez, los crudos inviernos por los que atravesaron las fuerzas del eje entre 1941 y
1945 significaron el incremento del consumo de perecederos, de importación de materias
primas y de manufacturas para la industria bélica, propiciando crisis de producción que
dislocaron el ciclo económico de los Estados Europeos, siendo los más afectados fueron
Alemania e Italia. En ese contexto, la IIGM colapsó al orden económico de los países
europeos debido a la devastación de sus centros fabriles, asentamientos humanos,
sobreexplotación de recursos bélicos y de consumo primario, el aumento de su deuda
gubernamental derivada de la adquisición de un gran volumen de equipo castrense,
armas convencionales, transporte de combate aéreo, terrestre y marítimo, así como de
víveres importados de Estados Unidos, lo que le permitió constituirse en el principal
acreedor económico de la post-guerra. De esta manera, si con la guerra Europa se
debilitaba, Estados Unidos se fortalecía con el suministro de bienes de consumo primario,
perecederos, energéticos y manufacturas de parte de los Estados latinoamericanos que le
proveyeron en el marco de la cooperación técnica ante los efectos del conflicto armado,
propiciando con ello el aumento rápido de la producción norteamericana de equipos
industriales y satisfactores agrícolas para ser exportados hacia los países europeos en
plena distensión militar. Como resultado de este escenario caótico para los países
aliados, Estados Unidos, que ya era una potencia antes de la guerra, concentró mediante
préstamos otorgados la mitad de las reservas de oro mundiales con un potencial
económico internacional del 50 por ciento9 en inversiones hacia los sectores de la
industria de la transformación, de servicios bancarios y financieros, así como una política
prioritaria de exportación constante de diversos productos.
Al término del conflicto bélico, la economía internacional se reorganizó a través de una
política de apoyo financiero de parte de Estados Unidos para la reconstrucción de la
infraestructura de las naciones europeas afectadas y del propio Japón, teniendo como
respaldo la capacidad potencial del mercado norteamericano que maduró, durante la
segunda conflagración mundial, en la producción, ocupación y exportación de productos.
Con respecto a los problemas monetarios y financieros de los Estados – Nación de la
post-guerra, surgieron dos entidades institucionales que les facilitarían el otorgamiento de
créditos para la reactivación de sus ciclos económico-productivos: el Fondo Monetario
9
Navarro, Historia universal, 360.
Internacional, a cargo de Keynes y el establecimiento del Banco Mundial, planteado por
Dexter White. Tales instancias fueron establecidas en los Acuerdos de Bretton Woods,
ciudad localizada en el Estado de New Hampshire, Estados Unidos, y celebrado del
primero al veintidós de julio de 1944, en los que se definió al dólar en calidad de divisa de
pago internacional.
Con respecto al plan de creación del Fondo Monetario Internacional, cuya sede se
encuentra en la Ciudad de Washington D.C., tuvo su origen previamente en los
planteamientos
de
política
económica
de
Keynes
influidos
por
los
efectos
macroeconómicos de la crisis estadounidense de 1929 que experimentó simultáneamente
el mercado inglés. En este sentido, el economista y académico chileno Fernando Ossa
Scaglia de la Facultad de Ciencias Económicas y Administrativas de la Pontificia
Universidad Católica de Chile, establece que Inglaterra emergería en una grave situación
de desequilibrio externo a raíz de los estragos de la segunda distensión internacional. De
esta manera, el plan contemplaba la creación de una “Cámara de Compensación
Internacional” que actuaría como un Banco Central de los bancos centrales nacionales.
Cada país tendría una cuota en la Cámara, lo que le daría acceso a una línea de crédito
expresada en una unidad denominada Bancor, definido en términos de oro, pero no sería
convertible en ese metal. 10 Los saldos de Bancor de cada país constituirían sus reservas
internacionales y serían transferibles entre los miembros del acuerdo. Esta forma de
liquidez internacional, propuesta por Keynes, era del mismo tipo que los actuales
Derechos Especiales de Giro del Fondo Monetario Internacional. Una característica del
plan de Keynes era que proponía el cobro de interés no sólo a los saldos deudores en la
Cámara de Compensación Internacional, sino también a los saldos acreedores, esto
significaba reconocer que la responsabilidad con respecto al proceso de ajuste
internacional no debía recaer sólo en los países en déficit, sino también en aquellos en
superávit. Además, las cuotas de los miembros, que junto con la determinación de la línea
de crédito definían el poder de votación de cada país, habrían sido calculadas a base de
la importancia relativa de los flujos de comercio internacional de cada miembro en los tres
años anteriores a la guerra. Esto favorecería a Inglaterra, ya que su cuota habría sido de
US$ 5´500, 000,000.00, contra una de sólo US$ 4´000, 000,000.00 para Estados
Unidos 11. El plan de Keynes tenía un sesgo inflacionario, porque proponía un aumento
10
11
Fernando Ossa, Economía monetaria internacional (México: Alfaomega, 1999), 269.
Idem, 270.
automático de las cuotas de Bancor a medida que fuera aumentando el volumen del
comercio internacional. En el caso en que todos los países siguieran políticas
inflacionarias, el resultante aumento en el valor monetario del comercio internacional se
traduciría en un crecimiento automático de las reservas internacionales, representadas en
la Cámara de Compensación Internacional 12. El funcionamiento del plan de Keynes
consideraba, en consecuencia, que el otorgamiento de préstamos para los Estados
miembros sería determinado con base a sus capacidades de liquidez influidas por el
comportamiento de las relaciones económicas internacionales.
En lo que concierne a la propuesta de Dexter White relativa a la instauración del Banco
Mundial, tendía a posicionar favorablemente a Estados Unidos en las finanzas
internacionales 13.
La sociedad internacional de la postguerra tenía presente que las hipertrofias económicas
y distensiones globales desestabilizan el aparato productivo nacional, así como el ciclo de
sus transacciones comerciales y monetarias internacionales, tal preocupación motivó al
pensamiento académico y empresarial de diversas celebridades del mundo de las
finanzas y de negocios, entre las que destacó el economista Dexter White quien propuso
la reorganización del sistema financiero y monetario internacional a través de una
institución que liderara a Estados Unidos en la reactivación económica de las naciones
diezmadas a consecuencia de la IIGM, el proyecto consistía en una entidad bancaria
orientada a la reconstrucción y el desarrollo, en el otorgamiento de programas de crédito y
asesoramiento financiero para los Estados miembros cuyo imperativo fundamental era el
aumento de su producto interno bruto reflejado en el crecimiento de su ingreso y por
consiguiente una balanza comercial superavitaria.
El plan de White propuesto en 1942 que daba origen al Banco Mundial, tuvo el objetivo de
posicionar a Estados Unidos como el líder bancario de las naciones; en este sentido, el
12
Ídem.
13
Sin embargo se debe tener presente que Keynes representó al equipo de trabajo para
el establecimiento del FMI White lideró las negociaciones para la creación del Banco
Mundial.
banco tendría un capital social de US$ 10´000, 000,000.00 la mitad de cuya suma sería
pagada de inmediato por los Estados miembros en oro y monedas locales. Estaba
destinado principalmente a aportar el volumen enorme de capital que necesitarían las
Naciones Unidas y Asociadas para fines de la reconstrucción, la ayuda y la recuperación
económica. También estaba destinado a eliminar las fluctuaciones mundiales de origen
financiero y a reducir la probabilidad, intensidad y duración de las depresiones mundiales;
a estabilizar los precios de las materias primas esenciales, y, en términos más generales,
a elevar la productividad y los niveles de vida de sus miembros. 14 Los objetivos del
Tratado de Bretton Woods de 1944
que dieron origen al Banco Mundial, son los
siguientes: apoyar la tarea de la reconstrucción de los territorios de los Estados miembros
a través de facilidades de inversión de capital; fomentar la inversión extranjera directa de
inversionistas privados; coadyuvar el crecimiento del comercio internacional propiciando el
equilibrio de las balanzas de pagos de los miembros signatarios: coordinar los empréstitos
canalizados a proyectos de inversión necesarios y, finalmente en el período de la post
IIGM, lograr una transición de una economía de guerra hacia una economía de paz sin
contratiempos 15.
Monetariamente el plan preveía la creación de un crédito internacional de US$
5´000,000,000.00 disponibles en su fondo de estabilización más US$10´000,000,000.00
de capital social del banco y, especialmente, de las facultades de éste para crear crédito,
emitir préstamos a un múltiplo de su capital básico, y vender documentos de deuda en los
mercados de capital nacionales. Teóricamente, lo anterior alcanzaría proporciones
elevadísimas que, en sí mismas, generaban la sólida oposición de los banqueros
internacionales ante dos efectos no deseados: el primero, las previsibles consecuencias
inflacionarias de la expansión de la liquidez internacional; y segundo, delegar sus más
14
Federico Novelo, ed., Bretton Woods, (México: Edición electrónica gratuita, 2010),
http://www.eumed.net/libros-gratis/2010a/649/bretton%woods.htm (Consultado el 1-282015)
15
Anónimo, ed., Convenio Constitutivo del Banco Internacional de Reconstrucción y
Fomento, (México: Edición electrónica gratuita, 2015), http://www.ehu.eus/ceinik/tratados/
(Consultado el 5-26-2015)
importantes funciones financieras a una agencia internacional 16, de ese tipo. Sin embargo,
el proyecto de White se sustentó en el libre comercio y en el apoyo bancario y financiero a
los Estados signatarios.
Paralelamente a la adopción de las nuevas formas de reordenamiento de la economía
internacional de la postguerra, los países europeos y asiáticos que tuvieron afectaciones a
su infraestructura industrial, comercial y militar se vieron en dificultades para amortizar los
préstamos de Estados Unidos debido a las considerables adquisiciones de armamento y
víveres a lo largo del conflicto. En cambio, algunas de las naciones que pudieron resistir
los efectos de la IIGM, como Islandia, Noruega, Suecia y Finlandia, llevaron a cabo
directrices de cooperación industrial, comercial y financiera que les permitían afrontar los
embates de la distensión. Por otra parte, Estados Unidos tuvo la capacidad de producir
alimentos, mercancías y barcos para transportarlos, combinada con su voluntad de hacer
todo lo que estuviera en su poder para enderezar la economía mundial. Mediante el
mecanismo de préstamos otorgados durante la guerra y el lanzamiento posterior de la
“ayuda Marshall”, Europa y amplias zonas del Oriente recibieron los apoyos económicos
para reactivar sus ciclos de producción, de estos empréstitos sobresale la Foreing
Assitance Act aprobada por el Congreso de Estados Unidos en abril de 1948, la cual
decretó una suma de US$ 5´300, 000, 000.00 para el primer año del “Programa de
Recuperación Europea”, US$ 465, 000, 000.00 para China y un crédito de US$ 275, 000,
000.00 a Turquía y Grecia respectivamente17. El “Plan Marshall” fue dado a conocer el 5
de junio de 1947 por George Catlett Marshall en una conferencia que dictó en la
Universidad de Harvard, Massachusetts, siendo Secretario de Estado de los Estados
Unidos con el Presidente Harry S. Truman, quien cubrió su gestión de gobierno de 1945 a
1953. Como dato importante, en los primeros cuatro años de vida de este Plan de ayuda
16
Federico Novelo, ed., Bretton Woods, (México: Edición electrónica gratuita, 2010),
http://www.eumed.net/libros-gratis/2010a/649/bretton%woods.htm (Consultado el 1-282015)
17
Thomson, Historia mundial de 1914 a 1968, 204.
se invirtieron US$ 12´ 000, 000, 000.00 para reconstruir a los Estados europeos en el
período 1948 -195118 .
Los países deudores del Plan Marshall no podían liquidar
contraídos,
de
esta
manera
Estados
Unidos
totalmente sus créditos
emprendió
la
estrategia
de
transnacionalización económica para expandir su mercado a Europa Occidental y a su
vez, evitar el avance del nacionalismo capitalista en los Estados del viejo continente con
el objetivo de aperturarlo a los productos norteamericanos, mientras que en la entonces
Unión Soviética la política socialista mantenía cerrada su economía. Tal situación motivó
a Estados Unidos plantear no sólo el rescate financiero europeo, sino también amortizar la
asistencia crediticia a través de la inversión extranjera directa que impulsara de forma
estratégica sus empresas transnacionales en las economías europeas. Por lo que en este
caso, previamente a la firma del Plan Marshall, en 1945 Gran Bretaña negoció un
préstamo con Estados Unidos por US$ 3´ 750, 000,000.00 para ser pagado en cincuenta
años al dos por ciento de interés, que simbolizó la dependencia financiera británica de la
economía norteamericana 19. En consecuencia, el Reino Unido y demás economías
europeas se encontraban en desventaja debido a la limitación de sus exportaciones en
comparación al aumento de las operaciones de comercio exterior de las firmas
estadounidenses, respaldadas transaccionalmente en la divisa de pago internacional
convertible en oro a razón de treinta y cinco dólares la onza y oficializada desde los
Acuerdos de Bretton Woods de 1944. 20
La facilidad que tenían las empresas transnacionales estadounidenses para realizar sus
operaciones comerciales en dólares, les permitía que hicieran además inversiones en
mercado internacional sin estar sujetas en comparación a la limitante que tenían las
18
J. Salgado y Salgado, “Reseña de la guía de estudio de cooperación internacional”, en
Derecho de los Tratados. (Huatulco: Universidad del Mar, 2004), 6.
19
Thomson, Historia mundial de 1914 a 1968, 216.
20
Sin embargo, como dato adicional en 1971 con el Plan Nixon, el dólar dejó de tener su
paridad cambiaria en oro y desde entonces la divisa se respalda en el propio comercio
exterior de Estados Unidos.
empresas europeas con respecto a su hipertrofia económica, dando origen al discurso
que pronunció el General Charles De Gaulle, el día 4 de febrero de 1965, en el Palacio del
Elíseo, sede de la Presidencia de la República Francesa, quien advirtió las desventajas
del empleo del dólar convertible en oro, entre las cuales sobresalía la desnacionalización
de la economía europea debido que la IIGM arruinó las monedas de Europa al
desencadenar en ella la inflación. Como antecedente, casi la totalidad de las reservas
mundiales de oro entre 1945 y 1958 se encontraban en poder de Estados Unidos, país
que, en su calidad de proveedor de la sociedad internacional, había conseguido mantener
el valor de su propia moneda, podía parecer natural que otros Estados mantuvieran
indistintamente en dólares o en oro sus reservas de cambio, y que los balances de los
pagos exteriores se salden por medio de transferencias de crédito o signos monetarios
norteamericanos del mismo modo que con el metal precioso, de igual modo Estados
Unidos no tenía la menor dificultad en liquidar mediante el patrón dólar-oro sus deudas
con otros países e instituciones bancarias, por esa razón el “gold exchange standard”
quedó por consiguiente admitido en el funcionamiento del sistema monetario internacional
desde entonces 21; lo anterior se respaldó con la gran expansión de la inversión extranjera
directa de las empresas transnacionales estadounidenses de 1940 a 1952, cuya
participación fue notoria en los sectores de industria bélica, bienes de capital, servicios
financieros, exportación de insumos y perecederos, tal inversión se cotizaba a su vez en
el patrón dólar convertible en oro. Lo anterior fue posible también debido que durante el
período citado, el total de inversiones y créditos en el exterior de Estados Unidos ascendió
a US$190, 000, 000,000.00 la mayor parte correspondió a deudas gubernamentales de
países extranjeros, directamente a través de operaciones bilaterales o mediante la
intervención de los organismos internacionales 22.
21
Olga Illanes, Apuntes de derecho económico internacional (México: ENEP –Acatlán,
1994), 1-4.
22
Hudson,
M.
norteamericano”.
subimperialismo,
“Superimperialismo.
En
Mauro
(México:
Marini,
La
estrategia
ed.,
Ediciones
económica del
Acumulación
Era,
capitalista
1977),
imperialismo
mundial
y
http://www.marini-
escritos.unam.mx/052_acumulacion_subimperialismo.html (Consultado el 5-28-2015)
Ante la competencia de las empresas transnacionales estadounidenses, las compañías
europeas reaccionaron de igual modo en el fomento de innovaciones tecnológicas, al
empleo y de inversiones en otros países, que tenían una gran desventaja debido a su
operación regional sólo en Europa del Este, mientras que simultáneamente Estados
Unidos ampliaba sus procesos de expansión comercial hacía Medio Oriente con Israel, en
Extremo Oriente con Japón, Corea del Sur y Taiwán, para el caso de Oceanía las
empresas estadounidenses impulsaron la inversión turística y comercial en Guam, Islas
Samoa, Jarvis, Palmira, entre otras islas del Pacífico Sur en las que sobresalen Cook y
Tahití. En
América Latina las firmas norteamericanas de importación agrícola y de
hidrocarburos se extendieron a México, países centroamericanos, Panamá, Colombia,
Venezuela, Chile y Argentina.
Entre las estrategias de la economía estadounidense de la posguerra para ampliar su
comercio exterior y fortalecer al dólar como la divisa clave, definida así por Michel Aglietta
en su obra “El fin de las divisas clave,” aprovechó la coyuntura de su victoria militar sobre
Japón en agosto de 1945, lo que representó el inicio de su poderío geoestratégico en
Extremo Oriente ante el expansionismo soviético. Al finalizar la IIGM, Estados Unidos y la
antigua URSS tuvieron el objetivo de liderar su hegemonía geopolítica y económica en
Extremo Oriente considerando que las sociedades asiáticas recién independizadas,
también enfrentaban las contracciones económicas similares a las del continente europeo.
En su campaña de contención hacia el avance de la política socialista y para evitar que
los gobiernos orientales abrazaran el comunismo, Estados Unidos les proveyó de ayuda
económica y tecnológica23 primordialmente en la reconstrucción de Japón, de igual modo
programas de financiamiento, asistencia empresarial, de inversión extranjera, estrategias
de ocupación a través del comercio de bienes y servicios, así como líneas de
reindustrialización en Corea del Sur y Taiwán.
La reconstrucción del Japón partió de la hegemonía militar de Estados Unidos en las islas
y archipiélagos del Pacífico, constituyéndose así en un frente de contención anticomunista
que se traduciría en la instauración de un modelo occidental de crecimiento económico
sustentado en la administración de un gobierno capitalista, precedido por el emperador
23
Natalia Rivera, Asia y Pacífico (México: Papime, 2003), 45.
Hirohito y acordado con el General estadounidense MacArthur, quienes fomentaron
inicialmente los planes de modernización del sector industrial y de servicios
conjuntamente con los programas sociales del control de la natalidad a favor del
mejoramiento de la calidad de vida nipona. En relación a lo anterior, la negociación del
Tratado de Paz entre Japón y Estados Unidos en 1951, a través de su artículo 14
establecía que la nación nipona iniciara las negociaciones con los países del sudeste
asiático, para arreglar el pago de las indemnizaciones derivadas de la post IIGM 24, la
reconstrucción de infraestructura y de reactivación económica planteadas en el marco del
tratado paz, lo que posibilitó a Japón contar con las inversiones necesarias para crear
nuevas empresas que produjeran satisfactores mediante la transformación dinámica de
recursos naturales y materias primas en productos básicos de consumo.
De 1946 a 1955, el crecimiento económico japonés se caracterizó por una correlación con
las industrias pesadas en la producción de bienes de capital; lo anterior fue posible
después de la transición de una economía controlada a una economía abierta, sin
embargo la apertura del mercado japonés implicó en abril de 1949 el establecimiento de
un tipo de cambio único equivalente a 360 yenes por dólar 25, lo que dio cabida al
despegue de la inversión extranjera directa de Estados Unidos en los sectores fabriles de
manufacturas, maquinaria pesada y maquilación, que fortalecieron la industria japonesa
orientada en la exportación de sus productos metalmecánicos de ingeniería y equipo
eléctrico hacia los principales mercados de Norteamérica y Europa.
La apertura del
mercado japonés se apoyó de la cooperación técnica e inversión del gobierno de Estados
Unidos, con el objeto de incrementar la productividad del Estado nipón en sectores
estratégicos de agricultura, de las industrias pesadas y químicas26, así como de
24
Omar Martínez, Japón y la regionalización de Asia Pacífico, 79-80
25
Tetsuji Okazaki, “La Relación entre gobierno y empresa en la recuperación económica
japonesa de la posguerra”, en El papel del gobierno en el desarrollo económico del Asia
Oriental, ed. Masahiko Aoki (México: Fondo de cultura económica, 2000), 109.
26
Juro Teranishi, “Análisis comparado de la transferencia sectorial de recursos, el
conflicto y la estabilidad macroeconómica en el desarrollo económico”, en El papel del
manufacturas cuyos productos de exportación se cotizaban en precio de dólares
estadounidenses hacia los demás mercados asiáticos y europeos.
Los ingresos derivados de la venta de esos satisfactores en Occidente se canalizaron en
el ahorro planteado por el gobierno japonés, esto con el objetivo de incrementar la
inversión que sufragara los costos de producción de nuevos y más equipos industriales
para fortalecer las exportaciones de otros sectores tales como de autopartes y ensambles
automotrices.
La estrategia de crecimiento de Japón se trazó en la vinculación entre su gobierno con el
sector privado, para ello se creó en 1948 la Sociedad de Investigación Empresarial (Kigyo
Kenkyukai), integrada por gerentes corporativos, administradores e investigadores
orientados al estudio de los problemas de mantenimiento y desarrollo de industrias
importantes, entre las cuales sobresalen la Federación Japonesa de Industrias (FJI, Nihon
Sangyo Kyogikai), la Nippon Kokan Co., la Nippon Steel Co., y la Hitachi Manufacturing
Co. 27, entre otras unidades económicas privadas especializadas en el sector de la minería
del carbón, del hierro, de aleaciones de acero, maquinaria pesada, equipo de extracción,
de arrastre y construcción, y la industria automotriz. Los resultados de la vinculación del
aparato productivo con el gobierno japonés se reflejaron en el fortalecimiento del pleno
empleo, perfeccionamiento de la industria de la transformación e incremento del comercio
de perecederos, productos textiles y automotores. Posteriormente, el Estado nipón
impulsó la logística y comercialización de productos exportables mediante el
establecimiento de asesoría financiera, asistencia técnica,
y patrocinio de filiales
estadounidenses en las que destacan Citibank, General Motors Company, General
Electric y la empresa fabricante de aeronaves Boeing. Lo anterior posibilitó el soporte y
desarrollo de las firmas japonesas más significativas del sector automotor para la
exportación tales como Mitsubishi, Mazda, Toyota y Nissan Motor Company. Lo anterior
gobierno en el desarrollo económico del Asia Oriental, editado por Masahiko Aoki (México:
Fondo de cultura económica, 2000), 362.
27
Okazaki,
La Relación entre gobierno y empresa en la recuperación económica
japonesa de la posguerra, 111-120.
demuestra que el desarrollo empresarial de la economía japonesa depende de su relación
con el mundo28, es decir, la reactivación del comercio del Estado nipón, posterior a la
segunda distensión internacional, se sostuvo en la relación entre el gobierno y la empresa
local apoyados con la inversión extranjera directa de Estados Unidos que les permitió
financiar e impulsar estratégicamente sus sectores productivos.
En el caso del desarrollo económico de la postguerra, en Corea del Sur se encuentra su
antecedente en el agotamiento del modelo gubernamental de administración financiera
durante el período de ocupación japonesa de 1910 a 1945 29, caracterizado en el control
de la producción agrícola, textil y de manufacturas subsidiado por empréstitos japoneses
destinados al incremento del funcionamiento del sector fabril, bancario y de servicios en el
Estado Coreano, lo que generó considerables excedentes monetarios que el gobierno
percibía mediante la fijación de rentas económicas aplicadas a los propietarios privados
de los medios de producción. Posteriormente en el culmino de la IIGM, el Estado Coreano
se independizó de Japón, pero a raíz del nuevo equilibrio del poder liderado por Estados
Unidos y la antigua Unión Soviética, llevaron su división geopolítica en el paralelo 38º tras
el acuerdo de los presidentes Harry Truman y Lósif Stalin. Asimismo, esto se concretizó
con el ascenso al poder, el día 9 de septiembre de 1948, del líder comunista Kim Il Sung
quien simpatizó políticamente con la influencia socialista iniciando su mandato como jefe
de Estado de la República Popular de Corea del Norte; a la par, surgió la República de
Corea con orientación capitalista. Después de los embates ideológicos entre los
partidarios del socialismo ante la presencia del liderazgo norteamericano en el Extremo
Oriente, propiciaron el 25 de junio de 1950 la invasión norcoreana sobre Corea del Sur, lo
que ocasionó diferencias políticas y diplomáticas entre Estados Unidos, China y la
entonces URSS, por lo que el gobierno estadounidense decidió llevar a cabo acciones
militares presididas por el general Mac Arthur en la defensa de la soberanía surcoreana.
28
Masahiro Okuno, “La relación gobierno-empresa en Japón: Una perspectiva histórica”,
en
El papel del gobierno en el desarrollo económico del Asia Oriental, editado por
Masahiko Aoki (México: Fondo de cultura económica, 2000), 513.
29
Yoon Je Cho, “Intervención gubernamental, distribución de la renta y desarrollo
económico en Corea”, en El papel del gobierno en el desarrollo económico del Asia
Oriental, editado por Masahiko Aoki (México: Fondo de cultura económica, 2000), 275.
Paralelamente, en las sesiones de la Organización de Naciones Unidas del 25 y 27 de
junio de ese año se aprobaron dos resoluciones por las que se calificaba de agresión al
ataque de Corea del Norte y en las que instaban a los Estados miembros de esa
organización a apoyar al Estado Surcoreano, creándose una fuerza multinacional cuyo
contingente mayoritario sería el norteamericano30.
Tras el agotamiento de activos militares y de armamento en las distensiones entre Corea
del Norte y del Sur que habían involucrado a Estados Unidos, China y la antigua Unión
Soviética, que ocasionó considerables daños a la infraestructura industrial, mercantil y de
servicios públicos de las partes pugnantes, se suscribió el acuerdo de armisticio de
Panmunjom el 27 de julio de 1953, que estableció el límite fronterizo acotado en una zona
desmilitarizada de cuatro kilómetros en el paralelo 38 de los territorios norte y
surcoreanos.
La reconstrucción de instalaciones de producción textil y de manufacturas, de viviendas,
unidades de salud, instancias de gobierno, entidades de asistencia social aunadas a la
reactivación del comercio y de la oferta de empleo partieron del apoyo financiero y militar
de Estados Unidos durante el período de 1953 a 1955 en el que se sentaron las bases del
crecimiento económico de la República de Corea. La política económica del gobierno
estaba muy influida por la injerencia estadounidense en el Asia Meridional y Extremo
Oriente por lo que decidió crear el Banco Central siguiendo el modelo de la Junta de la
Reserva Federal norteamericana, lo que se tradujo en el fomento a la creación de bancos
privados, mediante un marco desregulatorio establecido por el Estado a través de su
Banco Central, con el objeto de otorgar préstamos a las pequeñas y medianas empresas
surcoreanas que inicialmente incursionaran en el ámbito del mercado interno.
La República de Corea no tenía ninguna exportación significativa en esa época y la
fuente principal de las divisas era la ayuda extrajera y los gastos locales de las fuerzas
terrestres de Estados Unidos, para maximizar los ingresos de divisas provenientes de
este tipo de gastos, el gobierno sobrevaluó su divisa con respecto al dólar. La asignación
de cuotas de importación con las grandes restricciones que acompañaban a la asignación
30
Juan Pereira, Historia de las relaciones internacionales contemporáneas, 435.
de divisas implicaba una renta considerable, donde sobresalían los importadores
surcoreanos denominados chaebol 31 que recibían ingresos por concepto de renta fijados
al tipo de cambio en dólares estadounidenses. 32 Los chaebol constituyeron grandes
consorcios mercantiles ubicados en los conglomerados de la región surcoreana
y
abastecidos por proveedores no solamente nacionales, sino también a través del
suministro de materias primas y productos de consumo primario importados por
comercializadoras de Estados Unidos. Según el Banco de Corea el monto de la renta que
acompañó a la asignación de divisas registró durante el período de 1953 a 1955 un
incremento significativo de 6´ 873,000.5 wones a 15’ 841, 000.00 respectivamente, de
igual modo su producto interno bruto creció del 10% al 15 33, es decir, un aumento del
130% de la renta que percibió el Estado Surcoreano derivado del apoyo de empréstitos,
de inversión y del asentamiento de firmas comerciales norteamericanas.
Es importante mencionar que el desarrollo económico de Corea del Sur entre 1950 y
1955, se derivó de la intervención del Estado para crear empresas fabricantes de
productos industriales, de manufacturas y de maquilación con el apoyo de la inversión
extranjera directa de Estados Unidos. El capital extranjero subsidió el desarrollo
económico surcoreano, así como del resto de la economía de Asia Oriental 34. De esta
manera, los empréstitos de la banca norteamericana fueron determinantes en la
31
32
Los chaebol son un conjunto de empresas surcoreanas de carácter estatal.
Yoon Je Cho, “Intervención gubernamental, distribución de la renta y desarrollo
económico en Corea”, en El papel del gobierno en el desarrollo económico del Asia
Oriental, editado por Masahiko Aoki (México: Fondo de cultura económica, 2000), 275276.
33
Je Cho, Intervención gubernamental, distribución de la renta y desarrollo económico en
Corea, 276-277.
34
Francisco García, ed., Crecimiento en Corea del Sur (1962-2000). Aspectos internos y
factores internacionales, (Madrid: Síntesis, 2002), http:// pendientedemigracion.ucm.es
(Consultado el 2-20-2015)
reconstrucción productiva y comercial de Extremo Oriente, por lo que la participación de la
inversión extranjera directa favoreció a su vez el financiamiento y expansión de las
empresas surcoreanas y japonesas en el Asia Meridional y en la Cuenca del Pacífico.
En lo concerniente al inicio del crecimiento económico en Taiwán posterior a la segunda
gran conflagración internacional del siglo XX, se sostuvo en dos estrategias emergentes:
la primera, en la intervención del Estado para el fomento a la producción de artículos de
consumo primario y al sector agrícola en los que se diseñaron planes de ocupación fabril
a favor de la población del territorio de la isla de la antigua Formosa; y la segunda, en el
aprovechamiento óptimo de los subsidios otorgados por Estados Unidos, no sólo
canalizados en las medidas de reconstrucción del territorio taiwanés derivadas de los
destrozos ocasionados por el conflicto bélico, sino también invertidos en su reactivación
comercial y de especialización productiva que finalmente fueron promovidos hacia el
mercado externo, lo que propiciarían la entrada de divisas significativas para la
potencialización de su estructura industrial 35. Sin embargo, lo anterior se posibilitó con el
antecedente de la desocupación japonesa de la isla de Taiwán a favor de la soberanía de
China como parte de las medidas acordadas en las Conferencias del Cairo de 1943 y de
Potsdam en 194536.
Por su parte, la revolución comunista de Mao Tse Tung en contra de los partidarios del
nacionalismo originaron una fuerte guerra civil provocando el derrocamiento del dirigente
nacionalista Chiang Kai –Shek, quien se refugió en la Isla de Formosa para establecer en
su territorio un nuevo Estado bajo el antiguo régimen político de la República de China
que había sido impuesto por el Kuomintag y el Partido Comunista, que tras la victoria de
35
Ernesto
Turner, “El Estado, agente promotor del desarrollo de Taiwán”, en
Cooperación y conflicto en la Cuenca del Pacífico, ed. José León (México: Miguel Ángel
Porrúa, 2005), 363
36
Anónimo, ed., Conferencias y repartos en la política internacional. De Teherán a
Potsdam,
(México:
Edición
electrónica
gratuita,
2011),
https://politicainternacionalcontemporanea.files.wordpress.com/2011/08/conferencias-yrepartos-en-la-polc3adtica-internacional.pdf (Consultado el 5-29-2015)
la revolución liderada por Mao en 1949, dio origen a la República Popular de China que
adicionalmente reconociera a Taiwán como parte de su soberanía patrimonial.
El gobierno de Taiwán entre 1950 y 1955 emprendió una política de Estado a favor del
crecimiento económico mediante la modernización del sistema agrícola, el saneamiento
de sus finanzas públicas, una reforma fiscal y monetaria, la especialización productiva de
su sector industrial de manufacturas orientado al comercio exterior, así también diversos
programas de financiamiento para la instauración de empresas y de oferta ocupacional,
tales medidas fueron originalmente apoyadas con el otorgamiento de créditos
internacionales de parte del gobierno de Estados Unidos.
La modernización del sector primario de Taiwán partió de una profunda reforma de la
tierra, encaminada al aprovechamiento óptimo de la agricultura reasignando la propiedad
de la tierra a un gran número de pequeños agricultores, tanto para la obtención de
servicios de extensión, de capacitación, de crédito y de comercialización, como para
lograr una mayor racionalización y elevar su productividad 37, la cual estaría canalizada en
primer instancia a la satisfacción del consumo primario interno y su distribución en el
mercado asiático.
En los primeros cinco años de la postguerra, los objetivos principales de las finanzas
públicas de Taiwán fueron reducir la inflación y estabilizar la economía a través de una
reforma monetaria que decretó una nueva moneda, el nuevo dólar de Taiwán, respaldado
en la inversión extranjera directa de Estados Unidos, que adoptó el 15 de junio de 1949, lo
que le permitió tener una economía independiente, con ello el Estado logró romper con la
inflación que en 1949, en China, alcanzó 3,000 por ciento, reduciéndola, sólo a un tercio,
en 1950, y haciéndola bajar aún más entre 1951 y 1952 a un 8.8 por ciento. Por otra
parte, el proceso de industrialización se inició con el impulso que el Estado decidió dar a
tres industrias clave: la energía eléctrica, los fertilizantes químicos y los textiles. La
energía eléctrica porque era la fuente de suministro básica de todas las industrias, los
fertilizantes porque eran un insumo fundamental para el impulso del desarrollo agrícola y
los textiles debido a que la industria del vestido constituía el principal producto importado
en esa época. Las dos primeras industrias fueron desarrolladas por el sector público y los
textiles por el sector privado, logrando con ello que el subsector manufacturero y de
37
Ernesto Turner, El Estado, agente promotor del desarrollo de Taiwán, 364.
confección de ropa creciera de un 35.9 % en 1937 a un 94.4% en 1954 y durante ese
mismo período los productos derivados del petróleo crecieron de un 52% a un 87%
respectivamente 38. En materia de comercio exterior, Taiwán no sólo mantuvo la
sobrevaluación del nuevo dólar sino que además estableció un sistema múltiple de
cambios para regular tanto las importaciones como las exportaciones. De manera que
sólo la mitad de las divisas eran intercambiadas por moneda local y pagadas en efectivo,
a razón de cinco nuevos dólares de Taiwán por un dólar americano; la otra mitad de las
divisas eran pagadas en Certificados de Ajuste del Intercambio (ESC), los cuales podían
negociarse libremente en el mercado o venderse, a la tasa oficial en el Banco de
Taiwán39, la dolarización del sector productivo, industrial y de comercio en la antigua
Formosa, contribuyó a que Estados Unidos impusiera un tipo de cambio flexible que
permitiera que el valor de la moneda taiwanesa40 fluctuara respecto al valor del dólar, lo
cual contribuía que en el inicio de las operaciones bancarias y comerciales, posteriores a
la IIGM, en la entonces Isla Formosa hubiera confianza en el respaldo monetario de las
inversiones del gobierno local con empresarios norteamericanos; lo anterior posibilitó a la
nación estadounidense evitar la proliferación de capitalismos nacionales en la región de
Extremo Oriente.
La ocupación en el sector fabril de manufacturas creció proporcionalmente de acuerdo a
los programas de financiamiento en la apertura de empresas locales impulsada por el
gobierno de Taiwán, esto permitió el mejoramiento de la remuneración de las fuerzas
productivas, lo que posibilitó el aumento de la demanda efectiva de productos en un
contexto inicial de competitividad de mercado que generaría considerables excedentes
económicos distribuidos al erario público para financiar programas de asistencia social.
De esta forma, la región de Extremo Oriente, durante el período posterior a la IIGM, inició
su proceso de reactivación económica a través de la inversión extranjera directa aunada
con empréstitos otorgados por el Gobierno de Estados Unidos. Cabe mencionar que
Japón, Corea del sur y Taiwán en conjunto de las demás economías de la región Asia
Pacífico llevaron a cabo paralelamente políticas económicas, entre las que se encuentran
38
Turner, El Estado, agente promotor del desarrollo de Taiwán, 368-371.
39
Ídem, 367-373.
40
Actualmente la divisa de Taiwán se denomina el nuevo dólar, lo que ha provocado una
interdependencia monetaria con respecto al sistema bancario de Estados Unidos.
la reforma agrícola, el fomento al comercio exterior, impulso al desarrollo de recursos
humanos y de inversión. El conjunto de estas políticas contribuyó a que esa región
presentara tasas de crecimiento anual, posterior a la IIGM, entre el 6 y 10 por ciento,
mientras que para Iberoamérica fueron menores al 7 por ciento en el mismo lapso41.
41
Natalia Rivera, Asia y Pacífico, 55.
Consideraciones finales:
La oficialización del dólar como el medio internacional de pago en las conferencias de
Bretton Woods de 1944, fue posible gracias a la reorientación de la política económica
estadounidense sustentada en
el
proteccionismo de Estado que fomentó
la
potencialización de su aparato productivo nacional destinado hacia la exportación durante
la IIGM, lo que permitió a Estados Unidos, con apego a la política del New Deal, generar
excedentes económicos destinados en el fortalecimiento de su inversión para obras de
infraestructura interna, tales como la ampliación de sus vías de comunicación,
construcción de complejos industriales y el perfeccionamiento de su tecnología bélica,
apoyos al crecimiento de sus empresas transnacionales y perfilarse como el principal
acreedor mundial con respecto al otorgamiento de préstamos a los Estados europeos y
asiáticos durante el conflicto. Asimismo, la reconstrucción europea de la post-guerra y la
reactivación de las economías orientales se perfilaron en oportunidades de inversión para
el Estado norteamericano en los sectores agrícola-exportador, de bienes de capital y de
servicios los cuales consolidaron nuevamente al dólar como la divisa clave respaldada no
sólo en la confianza de su convertibilidad en oro, sino también en el fortalecimiento del
propio comercio exterior que a corto plazo aumentó la economía del bienestar de la
población estadounidense reflejada en el registro de superávits en balanza comercial,
continuidad del crecimiento del producto interno bruto y la ampliación de la cobertura
norteamericana de servicios de banca y finanzas canalizados a los programas de
industrialización de países desarrollados y en vías de desarrollo.
El período posterior a la IIGM se caracterizó por el dinámico crecimiento en la región de
Extremo Oriente determinado a partir de la política económica de Estados Unidos en
materia de reconstrucción, de otorgamiento de empréstitos internacionales, de
cooperación técnica, de asentamientos de sus empresas transnacionales en Japón,
Corea del Sur y Taiwán. Sin embargo, estos Estados también instrumentaron reformas
internas orientadas en el fomento al empleo y en la modernización gradual de sus
sectores agrícolas, de maquilación, manufacturación, de ensambladoras automotrices así
como de nuevas tecnologías.
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referencia en la nota 1 del presente ensayo, está referida en forma diferente. Se sugiere
unificar.
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