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Eduardo Torres -­‐ The Church at Brook Hills -­‐ Congregación Hispana Serie: “40 días de oración sobre nuestra ciudad” Octubre 04, 2015 La Ofrenda de la Gratitud
“Acción de Gracias en la Oración”
Salmo 100
Siempre ustedes me escuchan decir esta frase “todo lo que somos y todo lo que
tenemos, te pertenece Jesús” o “…le perteneces a Dios”. Esta idea debe formar parte
del carácter del cristiano, pues todo proviene de Dios. No es que yo lo obtuve y se lo
entregué a Dios, la realidad es que es de Dios, y él me lo ha facilitado, todo lo que y
todo lo que tengo es gracias a Dios. Lo tengo y lo soy por su bondad y nada más “¡Yo
estoy seguro, Señor, que he de ver tu bondad en esta tierra de los vivientes!” —Salmos
27:13
Por medio de la adoración reconocemos la grandeza y la santidad de Dios. A través de
la adoración reconocemos Su santidad. A través de la confesión reconocemos Su poder
perdonador. Y por medio de la Acción de Gracias, reconocemos su bondad y su poder.
¡Yo creo en la bondad de Dios!, ¡Yo creo en el poder de Dios!
Hoy me propongo a compartir con ustedes que debemos depender totalmente de Dios y
hoy me propongo a compartir que debemos vivir para darle todo el reconocimiento al
Señor por lo que ha hecho, por lo que hace y por lo que hará en cada una de sus vidas.
Hoy deseo enseñarle que ser agradecidos a Dios nos mantiene en humildad.
Una vez escuche esta frase de un pastor: “No es lo mismo ser el propietario de un
negocio que ser el mayordomo”. Nuestra actitud para con con Dios, es la de ser sus
mayordomos, administradores de lo que tenemos y somos. Cuando nos declaramos
dueños de y no mayordomos, somos desagradecidos, y ese es el carácter del hombre
en general, es el carácter de cristiano carnal, no así del espiritual.
¿Por qué ser agradecidos?
La acción de gracias como parte inseparable de la oración, es la voluntad de Dios
“Den gracias a Dios en todo, porque ésta es su voluntad para ustedes en Cristo Jesús”
(1Tesalonicenses 5:18). El nos insta a serle agradecidos en todo… Colosenses 3:15
dice: “Que en el corazón de ustedes gobierne la paz de Cristo, a la cual fueron llamados
en un solo cuerpo. Y sean agradecidos.” Y otro pasaje muy conocido dice: “18 No se
emborrachen con vino, lo cual lleva al desenfreno; más bien, llénense del Espíritu. 19
Hablen entre ustedes con salmos, himnos y cánticos espirituales; canten y alaben al
Señor con el corazón, 20 y den siempre gracias por todo al Dios y Padre, en el nombre
de nuestro Señor Jesucristo”.
A esto repito la pregunta ¿Por qué ser agradecidos?
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Seamos agradecidos porque Dios es bueno. No podemos ponerle precio a lo que
Dios ha hecho en nuestra vida. No hagamos nada sin darle gracias a Dios por ello.
Reconozcamos siempre que lo que somos y lo que tenemos viene de Él.
o Dios nos manda ser agradecidos en todo y por todo porque ésa es Su
voluntad. Hay cosas que algunas veces son difíciles y suceden de manera
inesperada, pero de todas maneras, Dios quiere que nosotros seamos
agradecidos. No es preciso que entendamos lo que está pasando; es necesario
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Eduardo Torres -­‐ The Church at Brook Hills -­‐ Congregación Hispana Serie: “40 días de oración sobre nuestra ciudad” Octubre 04, 2015 •
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ser agradecidos. Debemos rehusarnos a la queja; por el contrario, debemos dar
gracias porque la respuesta está en camino.
Ser agradecidos extiende el favor de Dios hacia nosotros. En la antigüedad “el
favor” es lo mismo que “gracia”. Ambas palabras significan acceso, trato especial y
privilegios especiales.
o Cuando tenemos el favor y la gracia de Dios estamos vestidos con algo que nos
hace irresistibles a otros.
o El favor puede hacer lo que el dinero no puede. Algunas puertas sólo se abrirán
debido al favor de Dios sobre nosotros. Cuando Dios nos da favor, podemos
experimentar que en un día de favor hay mucho más que un año de labor.
Pidamos el favor de Dios con actitud de gratitud, entendiendo que Dios nos
concederá la gracia antes de que la obtengamos por nosotros mismo.
Dejémosle el trabajo a Dios, nuestra cargas son más fáciles para Él que para
nosotros dice Jesús en Mateo 11:28-30 “28 Venid a mí todos los que estáis
trabajados y cargados, y yo os haré descansar. 29 Llevad mi yugo sobre
vosotros, y aprended de mí, que soy manso y humilde de corazón; y hallaréis
descanso para vuestras almas; 30 porque mi yugo es fácil, y ligera mi carga.”
Ser agradecidos hace que Dios nos confíe mucho más
o Cuando somos agradecidos por los cientos, Dios nos bendice con miles.
o Cuando somos confiables para orar por un dolor de cabeza, Dios confiará en
nosotros para orar por un cáncer. Cuando somos agradecidos por lo que
tenemos, en lugar de quejarnos por lo que no poseemos, Dios desatará lo que
no tenemos.
o Dar gracias a Dios es clave para que ocurra lo sobrenatural. En Juan 6:11
Jesús tomo cinco panes, y dio gracias al Padre de los cielo, Su Padre, los
repartió entre los discípulos, y los discípulos entre los que estaban recostados;
Jesús de la misma manera hizo con los dos peces, y le dio de comer a
muchísimo más de cinco mil personas — Él le mostró a la gente que ser
agradecidos trae multiplicación. Dios está esperando que pronunciemos esa
palabra de fe.
o Y Marta dijo a Jesús: “Señor, si hubieses estado aquí, mi hermano no habría
muerto.” —Juan 11:21 y luego en los versículo 41-43 Jesús dijo a Su Padre
levantando sus ojos al cielo “Padre, te doy gracias por haberme escuchado”.
Con Lázaro, Jesús agradeció a Dios de ante mano y por fe, Lázaro resucitó.
o Cuando agradezcamos a Dios, pronunciemos la palabra fe “Gracias Padre”
para obtener lo que no tenemos.
o Dar gracias es la forma más simple de hacer un acto de fe
o
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Todos de pié por favor… Ahora vamos a inclinar nuestro rostro, cerrar nuestro
ojos y cada uno por turno, uno da gracias a Dios por algo que espera de Él y no
ha recibido aun, al terminar otros continúa y pronuncia otra frase de
agradecimiento por algo que todavía no recibe, y calla, y que otro siga hasta que
yo cierre el tiempo de oración, esta será una oración con acción de Gracias en
boca de muchos y en oído de todos. Uno primero, el otro le sigue y así hasta
terminar. ----- [termino yo y continuo para finalizar diciendo]…
Ser agradecido sella la bendición de Dios para nuestra vida “Por nada estéis
afanosos, sino sean conocidas vuestras peticiones delante de Dios en toda oración
y ruego, con acción de gracias”. —Filipenses 4:6
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Ser agradecidos con Dios no es algo que sólo se hace con palabras; conlleva
una acción. Nuestra gratitud durante la oración es una ofrenda de
agradecimiento a Dios. Ser desagradecidos corrompe el corazón, y nos lleva a
pensar que lo que tenemos y somos proviene de nosotros y no de Dios. La
ingratitud es una puerta abierta para que el destructor entre a su vida y haga
exactamente lo que su nombre indica: destruir.
Llamado a la acción
¡Selle las bendiciones que están viniendo a usted! ¡Pronuncie con palabra de
autoridad su agradecimiento a Dios por lo que ya tiene
y por lo que pronto tendrá!
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