Discurso del Dr. Marcos Espinal

Honorable Ministro de Salud, Dr. Bautista Rojas, Sra. Representante
de la OPS/OMS en República Dominicana, Dra. Lilian Reneau,
Honorables Ministros y Vice-Ministros presentes,
Representantes de
Agencias Cooperantes y de Organizaciones presentes, colegas.
La Organización Panamericana de la Salud felicita a las autoridades
y al gobierno dominicano por el liderazgo y apoyo a éste llamado a la
Acción para la eliminación del cólera en la isla Española, iniciativa que
servirá además para evitar la propagación de dicha enfermedad a otras
naciones. El cólera entro por Haití en Octubre del 2010 y un poco mas
tarde ingresa a República Dominicana.
America Latina fue duramente afectada por el cólera en la década de
los 90, llegando dicha enfermedad a diseminarse a más de 20 países en los
primeros dos años. Inversiones realizadas por los países afectados y la
comunidad internacional en infraestructura de agua, saneamiento e higiene,
dieron como resultado una mejoría en la calidad del agua potable, así como
un incremento en la cobertura poblacional de acceso a dicho líquido vital.
El aumento en la cobertura de agua, saneamiento e higiene, acompañado de
un fuerte compromiso político, recursos, desarrollo de sistemas de
vigilancia para detectar y monitorear la enfermedad, cuidado medico y
movilización social y comunitaria, ayudaron a eliminar el cólera en
America Latina lo cual tomó unos 10 años. La epidemia cobró más de 10
mil vidas y un millón de casos registrados.
El gobierno de República Dominicana merece ser felicitado
doblemente ya que gracias a sus acciones, y siempre acompañado de
muchos de los socios acá presentes, el cólera se ha podido controlar. Entre
dichas acciones caben destacar el trabajo intersectorial, la coordinación
cercana con los cooperantes, la vigilancia rápida y temprana de la
enfermedad, la marcada mejoría en el acceso al agua potable llevando la
cobertura de cloración de las fuentes de agua del 40% al 95%, la intensa
promoción de la higiene y manejo adecuado de alimentos, disposición de
excretas y deshechos sólidos, y la muy importante movilización social y
comunitaria. Al mismo tiempo, la solidaridad de la República Dominicana
para ayudar a contribuir con el control del cólera en Haití, país en el cual se
han reportado más de medio millón de casos y más de 7 mil muertes, es un
ejemplo de digno reconocimiento.
Todo lo anterior es motivo de regocijo pero al mismo tiempo una
llamada a la alerta para continuar los esfuerzos. A pesar de los logros,
todavía el cólera esta presente en el país y existen desafíos importantes,
como mejorar las coberturas de agua potable y alcantarillado en especial en
las poblaciones mas vulnerables.
Es por todo lo anterior que la OPS y socios importantes como los
Centros para la Prevención y Control de las Enfermedades de los Estados
Unidos, UNICEF y otros, hoy en día lanzan un llamado a la acción firme
por parte de la comunidad internacional para que se invierta agresivamente
en la isla española en intervenciones dirigidas a mejorar la cobertura de
agua y saneamiento. Si queremos disminuir considerablemente la estadía
del cólera en República Dominicana y Haití debemos actuar muy pronto.
Este llamado a la acción presenta acciones claves. En primer lugar,
la mejoría en la infraestructura de agua, saneamiento e higiene deberá
constituirse en la principal prioridad. La comunidad internacional ha
comprometido billones de dólares en asistencia a Haití de los cuales se
estima que una gran parte de los mismos no ha sido desembolsada. Una
buena parte de esos fondos a desembolsar pueden ser destinados a
inversiones en agua, saneamiento e higiene en Haití, pero también en áreas
de la República Dominicana que así lo ameriten.
La OPS, el CDC, UNICEF y otros socios proponen además la
creación de un grupo de trabajo bajo el liderazgo de los gobiernos de
ambos países compuestos por expertos locales e internacionales en agua,
saneamiento e higiene para discutir y desarrollar un plan al respecto para
ambas naciones. Dicho plan deberá basarse en un detallado análisis de la
infraestructura existente, identificación de áreas geográficas y sectoriales
prioritarias. Al mismo tiempo deberán continuarse las intervenciones
complementarias como son los esfuerzos de promoción de la salud,
movilización social y comunitaria, además del reforzamiento a largo plazo
de todas las medidas ya implantadas por ambos países.
Distinguida audiencia hoy acá reunida, el camino es largo todavía,
pero pensamos que muy promisorio si este llamado a la acción de la
comunidad internacional es escuchado y puesto en marcha.
Es una
oportunidad única para eliminar el cólera de Haití y Republica Dominicana.
No hay porque esperar diez años más como en la epidemia de la década de
los 90s.
Los dos países han demostrado que solo trabajando conjuntamente
podrán eliminar este flagelo. La OPS trabajara de la mano con Haití y
República Dominicana, como siempre lo ha hecho, junto a todos los socios
para la consecución de dichos objetivos.