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UAN: ¿autonomía o emirato?
Rector Juan López: ¿traicionado
o entregado a intereses externos?
“Lo que subyace a una buena parte de los modos de actuar
que finalmente calificamos como corruptos es una cultura
en la que los detentadores de los bienes, servicios y personas
asignados en razón del cargo público (y desde luego privado,
que por ahora no trato), consideran que pueden disponer de
ellos de diversas maneras como parte del cargo mismo”
J. R. Cossío Díaz
ERNESTO ACERO C.
La Universidad podría volver a ser botín partidista. Hasta
hace algunos años se decía que el PRI era el partido que tenía a
la UAN como botín e incluso como campo de batalla. Ahora las
sospechas se dirigen en otra dirección, pero ya no al PRI.
Hay quienes señalan en direcciones específicas como las
sedes de la representación de esos intereses internos-externos.
Internos externos porque quienes le mueven el tapete al rector se
mueven en el exterior pero también tienen presencia en la
misma Universidad.
Por lo pronto, habrá que hacer acto de fe. Habrá que
confiar en la buena fe del rector de la Universidad Autónoma
de Nayarit, Juan López Salazar. No obstante, existen indicios
de que la Universidad empieza a gestar zonas de intolerancia.
De ahí parten los mecanismos de exclusión que parecen
promovidos desde “fuera”, aunque en realidad los peores
enemigos de la Universidad y del rector están dentro de la
misma casa de estudios.
En el quinto (y sexto) informe del rector Juan López el
rector exigió al gobierno que no metiera las manos al proceso
de sucesión rectoral. No obstante, se quedó corta la manifestación de agradecimiento por haber salvado
a la UAN de la catástrofe en la que se encuentra con todo y autonomía. Otros se sumaron a esa
manifestación antinómica: que el gobierno no meta mano en la designación del nuevo rector, pero que sí
entregue más dinero para la Universidad.
La Universidad es Patrimonio de Todos los Nayaritas. La UAN es el patrimonio más importante
de la sociedad nayarita. A ver, ¿cómo está eso? La Universidad es Patrimonio de todos para
financiarla, pero no para todo lo demás: ¿así es? Pues de ser así, como diría el gobernador pasado, ¡ira
que a gusto!
Seguramente que nadie puede tronar contra la autonomía. El problema es que la autonomía ya no
parece ser tal cosa. Ante lo que estamos es un emirato presentado con el ropaje de la autonomía. El lobo-emir
vestido de autonomía-oveja. Parece que la ley orgánica se aplica más en los términos de una ley islámica.
Todo eso parece estarse dando a espaldas del rector. Parece que las manifestaciones de
intolerancia en la Universidad no son conocidas por el rector Juan López. Convendría saber de quién es la
mano que mece esa cuna. Ya hay indicios de donde vienen las intervenciones en algunos emiratos
universitarios.
NUESTROS
“ENEMIGOS”
¿Quiénes son nuestros enemigos? La respuesta existe y es sencilla y directa: tus “enemigos” son aquellos
que te hacen daño. Tus enemigos son quienes pretenden verte la cara de pendejo, son aquellos a los que
les regalas tu mejor cara de pendejo para su entera satisfacción. Nuestros enemigos son todos aquellos
que pretenden utilizarnos por medio del odio. El engaño es la principal herramienta. El lenguaje simplista es
uno de los instrumentos que sirven de manera eficiente para ese fin.
Ese lenguaje de odio es utilizado con fines electorales. Cuando se carece de propuestas, cuando se
carece de argumentos para
defender tesis propias y no hay tesis
propias, entonces se opta por
salidas simples. Una de esas salidas
es la siembra de odios.
No
es
novedad.
Lo
habíamos visto hace décadas en
procesos electorales de Estados
Unidos.
Declaraciones
sensacionalistas,
promesas
irresponsables, llamados a la
confrontación, todo eso ya lo
habíamos visto.
No extraña que ahora
veamos en el escenario electoral de
los Estados Unidos a personajes estrambóticos que desatan la lengua contra migrantes, y en especial, contra
los de origen latino y más específicamente contra mexicanos.
Los trabajadores migrantes, en especial mexicanos, poseen importancia crucial para la economía
estadounidense. El enorme poder de ese país se ha originado precisamente en la naturaleza cosmopolita
de su población.
No obstante, los que llaman al odio, los que desentierran el hacha mortal del racismo, parecen
prosperar en algunos sectores de la población. Aunque usted no lo crea, hay mexicanos que se auto flagelan
con esas tesis antimexicanas.
Los problemas del país y del mundo son verdaderos. No deben ocultarse, pero tampoco deben ser
utilizados para sembrar odio y confrontación. Los problemas deben mover fuerzas y sumar voluntades
para resolverlos.
A eso se ha referido el presidente Enrique Peña Nieto en la septuagésima Asamblea General de las
Naciones Unidas. De manera contundente ha reconocido la persistencia de una “crisis económica mundial
que no cede”.
Frente a esos problemas, manifestaciones populistas de izquierdas y derechas intentan hacer su agosto.
No hay populismos menos peligrosos o menos dañinos. Los populistas promueven soluciones aparentemente
sencillas, pero comprometen el futuro de las naciones. Esas salidas sacrifican la democracia y evolucionan a
la categoría de totalitarismos.
Cuando el Presidente Peña
Nieto alude a lo que el mundo
vivió en el siglo XX, se refiere
a extremos como Stalin o
Hitler, como Pinochet o Pol
Pot.
Los falsos redentores
están a la vista. Se hacen
pasar
como
mártires,
hipócritas que pretenden
engañar con falsas posturas.
El llamado es oportuno.
Esos ejemplares también los
podemos ver en las cercanías.
El llamado del presidente en
Naciones Unidas debe llevarse
a cada rincón del país. Los
aspirantes a dictador están en
todos lados y no saben ocultar
sus intenciones de fondo.
Debemos estar atentos a lo que acontece en el mundo. ¡Que no nos engañen!; no dejemos que nos
vendan espejitos, soluciones fáciles pero altamente comprometedoras del futuro.
Es verdad: “Las sociedades deben estar alertas frente a quienes se aprovechan de sus miedos y
preocupaciones, ante los que siembran odio y rencor, con el único fin de cumplir agendas políticas y
satisfacer ambiciones personales”.
LITORAL
Es impecable cada uno de los versos de uno de los mejores poetas de lengua inglesa: se trata de Wystan
Hugh Auden. Una muestra: “No habrá tregua./ Plántales cara, pues, con todo tu coraje/ y todas las
argucias de que seas capaz,/ con la conciencia clara a este respecto:/ su causa, si es que causa tienen, la
han olvidado;/ ellos odian tan solo por el placer de odiar”. ¿Quiénes son aquellos que se han convertido en
lo peor de aquello que criticaron en otro tiempo? Lo sabemos.